09.05.2013 Views

Ciudadanía e higienismo social en El Salvador, 1880-1932

Ciudadanía e higienismo social en El Salvador, 1880-1932

Ciudadanía e higienismo social en El Salvador, 1880-1932

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

1. Los “No Ciudadanos” <strong>en</strong> el Proyecto Liberal-Positivista.<br />

La Revolución Industrial, desde finales del siglo XVIII, configuró el<br />

desarrollo del capitalismo mundial, el cual logró insertarse <strong>en</strong> <strong>El</strong> <strong>Salvador</strong> ya <strong>en</strong> la<br />

segunda mitad del siglo XIX. Esto determinó una influ<strong>en</strong>cia decisiva, que ya para<br />

1853, cuando Gerardo Barrios visitó Europa, quedó plasmada <strong>en</strong> los cambios que<br />

impulsó <strong>en</strong> las políticas liberales durante su mandato presid<strong>en</strong>cial (1858-1863).<br />

Aunque se rescataron elem<strong>en</strong>tos que favorecieron el desarrollo de un proyecto de<br />

modernización, los estratos no solo gobernantes sino intelectuales, parecieran<br />

haberse limitado a la asimilación del positivismo y darwinismo <strong>social</strong>. 278 Fueron<br />

refractarias a la incorporación de las experi<strong>en</strong>cias políticas y <strong>social</strong>es derivadas de la<br />

coyuntura europea, <strong>en</strong> el marco de las revoluciones de 1848. Más aun, se<br />

pot<strong>en</strong>ciaron las características de una sociedad que se fundam<strong>en</strong>tó <strong>en</strong> el carácter<br />

organicista y corporativo, cuyo grupo repres<strong>en</strong>tativo se decantó principalm<strong>en</strong>te <strong>en</strong><br />

sectores cuyas raíces podrían ser rastreadas <strong>en</strong> estructuras de poder de antiguo<br />

régim<strong>en</strong>. 279<br />

278 Héctor Lindo Fu<strong>en</strong>tes, <strong>en</strong> La economía de <strong>El</strong> <strong>Salvador</strong> <strong>en</strong> el siglo XIX, afirma que para mediados del<br />

siglo XIX, solam<strong>en</strong>te un reducido grupo de la élite salvadoreña tuvo acceso a los viajes al<br />

extranjero. Pero la influ<strong>en</strong>cia de los mismos sirvió para reforzar sus intereses de grupos. Así,<br />

abrazaron las ideas del positivismo y desecharon las <strong>en</strong>señanzas de las revoluciones europeas de<br />

1848, p. 146. Ver también: Leslie Bethel, qui<strong>en</strong> explica cómo impactó el positivismo <strong>en</strong> el ambi<strong>en</strong>te<br />

ci<strong>en</strong>tífico latinoamericano durante el siglo XIX. Específicam<strong>en</strong>te, modificó la percepción de la<br />

sociedad, ya no como un conglomerado de individuos, sino como un organismo formado por<br />

partes, <strong>en</strong>tre las cuales se establecía una dep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia y una jerarquía de tipo biológico.<br />

Precisam<strong>en</strong>te, la implem<strong>en</strong>tación de esta visualización de la sociedad como una <strong>en</strong>tidad orgánica fue<br />

una de las principales misiones de los médicos de la época. Leslie Bethel, ED., Historia De América<br />

Latina 8. América Latina: cultura y sociedad. 1830-1930, pp. 14-15. Ver: Gary G. Kuhn, <strong>El</strong> Positivismo de<br />

Gerardo Barrios, Revista del p<strong>en</strong>sami<strong>en</strong>to c<strong>en</strong>troamericano #172-173. Managua, Nicaragua, Julio-<br />

Diciembre, 1981, pp. 88-89.<br />

279 Durante el siglo XIX <strong>en</strong> América Latina, y d<strong>en</strong>tro del contexto dinámico del auge capitalista, se<br />

definió un ambi<strong>en</strong>te político específico, d<strong>en</strong>tro del cual se buscó ajustar todos los parámetros del<br />

desarrollo <strong>social</strong> al impulso de un grupo hegemónico; este emergió del ámbito propio de una<br />

sociedad marcada por fuertes raíces coloniales. ―La colonia fue la formación y consolidación de una<br />

estructura <strong>social</strong> que no ha sido revolucionada todavía, y a la que pert<strong>en</strong>ecemos <strong>en</strong> muy<br />

considerable medida… La realidad colonial es nuestra realidad más honda.‖ Ver: Severo Martínez<br />

Peláez, La Patria del Criollo, 13ª edición, Ediciones <strong>en</strong> Marcha, México, D.F., 1994, pp. 574-575.<br />

154

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!