Rivera, Andrés – Cuentos escogidos [pdf] - Lengua, Literatura y ...
Rivera, Andrés – Cuentos escogidos [pdf] - Lengua, Literatura y ...
Rivera, Andrés – Cuentos escogidos [pdf] - Lengua, Literatura y ...
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
trasera y abierta, y miró cómo Otto obedecía el llamado de su hermana, y José y<br />
yo, parados junto al paragolpes delantero del Ford negro y cuadrado, vimos<br />
cómo Otto, las piernas atrapadas por el pantalón y el calzoncillo, se estiraba<br />
sobre el cuerpo de la muchacha.<br />
El muchacho guapo y cortés encendió los faros del auto, y blanqueó la<br />
pared azul, y José pasó frente a los faros encendidos, desnudo de la cintura para<br />
abajo, y la muchacha, casi enseguida, le gritó al hermano que le sacara de<br />
encima a José, que al idiota este, gritó la hermana, le vino un ataque de<br />
epilepsia, y se mueve como un perro rabioso, y, por Dios, que se lo sacara de<br />
encima. El hermano de la muchacha bajó del Ford, y guapo y cortés, y en<br />
silencio, llevó a José, que temblaba, hasta la pared azul, blanqueada por los<br />
faros encendidos del coche, y lo puso de cara a la pared.<br />
Sé que subí a la colchoneta, y que me miré entre las piernas, y que algo,<br />
delgado y amarillo, fosforecía entre mis piernas, y que la muchacha me enlazó<br />
por la cintura, con sus brazos, y que, al rato, sentí como si de un aro de hierro,<br />
sujeto a lo que fosforecía entre mis piernas, tiraran hacia abajo. Y lo que sentí<br />
era indecible. Pero la muchacha dijo andate.<br />
Retrocedí hasta la cortina del garage, y Otto y José no estaban en el garage,<br />
y el muchacho guapo y cortés ayudó a su hermana a subir al asiento trasero del<br />
Ford negro y cuadrado. Me deslicé debajo del paragolpes trasero del Ford negro<br />
y cuadrado, y me quedé quieto, la cabeza apoyada en un brazo, mi cabeza y mi<br />
brazo debajo del paragolpes trasero del auto, debajo del roce rápido y ansioso<br />
de dos cuerpos en el asiento trasero del auto, debajo de los gemidos y las risitas<br />
y la respiración de dos cuerpos que se movían, muy juntos, en el asiento trasero<br />
del auto.<br />
Me dormí, la cabeza sobre el brazo, debajo del paragolpes trasero del Ford<br />
negro y oscuro, con un sueño ligero, como un perro que cuida el hogar.<br />
97