09.05.2013 Views

Lejos del nido

Lejos del nido

Lejos del nido

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

*<br />

<strong>Lejos</strong> <strong>del</strong> <strong>nido</strong><br />

de lleno y a cara descubierta en la lucha, pues no le temo a nada ni a nadie,<br />

cuando creo ejecutar una buena obra.<br />

—Pierda usted cuidado, dijo el empleado, cada vez más admirado de las<br />

prendas de aquella privilegiada hija de los campos, esto lo trataremos reservadamente,<br />

procurando que su nombre, que tan simpático me es ya, no figure o<br />

figure lo menos posible en el procedimiento que se adopte para la consecución<br />

de la niña, y castigo de los culpables...<br />

—¡Perico! llamó el Alcalde, asomándose al balcón.<br />

Pronto se oyeron pasos atropellados en la escalera, entrando luégo al despacho<br />

un agente de policía.<br />

—Hombre, le dijo el Alcalde, usted sabe de esa Compañía de maromeros<br />

que hace pocos días estuvo aquí?<br />

—si, señor, que se fueron.<br />

—Bien se comprende, lo que se necesita saber es para donde siguieron y<br />

donde pueden hallarse.<br />

—Tomaron la vía <strong>del</strong> Norte, y hasta que los vieron pasar por santodomingo,<br />

doy razón.<br />

—¿Con esos maromeros no estuvo algún sirviente o peón vecino y conocido?<br />

—Con ellos vivió aquí de cocinera una tal Maria Antonia García , de “ Las<br />

Cuchillas”.<br />

—Pues volando a traerla.<br />

el comisario salió a cumplir la orden, y el Alcalde volviéndose a Luisa,<br />

le dijo:<br />

—Puede retirarse, y estar de vuelta cuando note que haya ve<strong>nido</strong> la García.<br />

Luisa se despidió con una ligera inclinación de cabeza.<br />

La vuelta de la García no se hizo esperar, entrando el comisario con ella a<br />

poco rato, y luégo luisa, en su seguimiento.<br />

el Alcalde, viendo que el asunto era grave, le dió carácter reservado y volviéndose<br />

a la citada, sin más preámbulo, le interrogó:<br />

su nombre?<br />

—Me llamo María Antonia García.<br />

—Jura usted por Dios nuestro señor y esta señal de la cruz, decir la verdad<br />

en lo que supiere y le fuere preguntado?<br />

—sí, señor, sí juro.<br />

*<br />

88

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!