Relatos y pensamientos - cristobal holzapfel

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había adquirido su padre. Allí conoció a quien lo inspiró en lo relativo a su carrera política: el senador liberal Fernando Lazcano. Posteriormente Alessandri se trasladó a Santiago y estudió en los Padres Franceses de la Alameda. Más adelante siguió la carrera de Derecho en la Universidad de Chile. En 1892 casó con Rosario Ester Rodríguez con quien tuvo 8 hijos. En 1897 fue elegido diputado por Curicó y Vichuquén, con el apoyo de su antiguo conocido y amigo, Fernando Lazcano. Posteriormente sería senador por Tarapacá, y debido a una campaña incendiaria que realizara enfrentando al acaudalado empresario del salitre, Arturo del Río, pasó a ser conocido como el “León de Tarapacá”. En aquellos años la elección de Presidente de la República era indirecta y se elegían primero “electores de Presidente”. De convenciones de uno y otro bando político resultaron dos candidatos: Luis Barros Borgoño y Arturo Alessandri. Y dejemos que lo que sigue sea relatado por el historiador Gonzalo Vial: “Barros Borgoño y Alessandri prácticamente empataron. Mas el primero dominaba las cámaras. Podían éstas quitarle electores, ‘imparcialmente’, a ambos candidatos. Con lo cual, conforme a la constitución, no reuniéndose mayoría absoluta de aquellos para ninguno de los postulantes, decidiría el Congreso Pleno...y Luis Barros sería Presidente”. Los alessandristas, previendo esta situación, propusieron que se constituyera un tribunal de honor que decidiera qué postulante tenía moralmente mejor derecho a la presidencia. Vial reconoce que nunca ha quedado claro por qué los unionistas, partidarios de Borgoño, aceptaron la constitución de ese tribunal. Uno de sus miembros era Lazcano que, tal vez por las ideas sociales demasiado avanzadas de Alessandri, ya no lo apoyaba. Pero, dejemos nuevamente que siga Vial: “El tribunal de honor se reunió en el Congreso el 30 de agosto de 1920. Uno de sus miembros era el economista Guillermo Subercaseaux; otro Fernando Lazcano. Ingresaron ambos, discutiendo, al edificio parlamentario, rumbo a la sala donde sesionarían. Tras ellos, muy cerca, iban Arturo y Fernando Alessandri Rodríguez, que como abogados alegarían la causa de su padre. Los jóvenes letrados escuchaban la apasionada argumentación pro- Barros y anti Alessandri que le hacía Lazcano a Subercaseaux; éste callaba. Entrando a la sala Lazcano se dio vuelta casualmente /.../ y se encontró a boca de jarro con los hijos del ‘León’. Turbado, extendió sin embargo la mano para saludarlos, y allí mismo cayó muerto de un fulminante ataque cardíaco. Lo extendieron y velaron sobre la mesa de sesiones del tribunal y ante el cadáver lloró a lágrima viva su antiguo discípulo y ahora aborrecido ‘bolchevique’, Arturo Alessandri Palma”. (Fredes). 24.¿Es bruja alguien por ser muy liviana? A fines del siglo XVIII en Alemania, que en todo caso en aquella época era un conjunto de divisiones y subdivisiones de reinos, principados, marcas, ducados, condados, y demás, tienen lugar los últimos procesos y ejecuciones de brujas. Por de pronto, lo que llama la atención es como ello ha tenido que ver con el machismo tradicional, ya que normalmente se identificaba a mujeres como brujas, muchísimo más que a hombres, y como veremos, ello solía suceder por

azones, por decir lo menos, arbitrarias. Así sucede que en 1793 en Pomerania dos mujeres son condenadas a la hoguera fundamentalmente debido a que tendrían ojos rojos inflamados y supuestamente el ganado de los vecinos se habría enfermado reiteradamente a causa de ellas. En siglos anteriores, especialmente en el XVI y XVII las persecuciones de brujas alcanzaron niveles asombrosos, y es recién el nuevo modo de pensar y de percepción racional de la realidad, introducido por la Ilustración, lo que habrá de cambiar las cosas. Ello motivará también un cambio en la legislación, de acuerdo al cual la magia ya no será más penalizada. En general sucedía que toda conducta que se apartara de las costumbres, de los códigos que rigen en la comunidad que fuera el caso, era motivo de sospecha de brujería: por ejemplo, un cambio brusco en el modo de ser de una persona. Ocasionalmente esto afectaba a las parteras, en razón de que ellas eran poseedoras de un saber médico que para el resto no tenía explicación. Incluso locos y retrasados mentales no se libraban de la sospecha, ya que se les atribuía algunos encuentros con el Maligno. Antes de proceder a la ejecución, solía practicarse la tortura, a fin de obtener alguna confesión de la acusada. Al mismo tiempo, se practicaban algunas pruebas que debían esclarecer si la acusada era culpable o no, en otras palabras, si era bruja o no, siendo una de ellas el peso, ya que se estimaba que las brujas eran sorprendentemente muy livianas. (Chronik). 25.Zorros con colas ardientes. Así describieron los poetas Friedrich Schiller y Johann Wolfgang von Goethe, que fueron íntimos amigos, lo que suscitaban con la publicación de sus “Xenias”, siendo este nombre tomado del poeta romano Marcial. La idea provenía de Goethe. En sus Xenias, iniciadas en 1797, incluso al modo de “Guerra de Xenias” los eximios poetas alemanes las emprenden con sátiras sobre escritores y filósofos de la época. En expresión de ellos es como si lanzaran “zorros con colas ardientes” al mundo cultural de la época. Por ejemplo, sin nombrar al filósofo Johann Gottfried Herder, en uno de los epigramas de las “Xenias” leemos: “No mucho te falta ser llamado un maestro de acuerdo a mis convicciones, sólo teniendo que omitir el hecho de que fantaseas como un loco”. Goethe y Schiller se habían conocido unos años antes, en 1788. Goethe, que era mayor, y ya reconocido y prestigiado, ayudó a su amigo a salir de una situación penosa en que se encontraba. Hacía un par de años atrás, a raíz de la publicación de “Los ladrones”, en que en cierto modo, se trata de una glorificación y tácita justificación de una banda de ladrones, en vistas de las injusticias propias de la estructura de la sociedad, el Príncipe Eugen, que era su benefactor, no sólo le retiró su apoyo, sino que le impuso arresto y prohibición de escribir. Schiller entonces pudo escapar a Bauerbach, donde pudo contar con una nueva protección de otro mecenas, aunque pasajera – ésta vez, una Señora. En la hacienda de esta mecenas pudo escribir una de sus grandes obras – “Cábala y amor” – a la cual le seguiría otro portento – el drama “Don Carlos”. Mas, estas producciones no lograban cambiar nada en su estrechez económica. En esta situación vino Goethe en su auxilio, y por su

había adquirido su padre. Allí conoció a quien lo inspiró en lo relativo a su<br />

carrera política: el senador liberal Fernando Lazcano.<br />

Posteriormente Alessandri se trasladó a Santiago y estudió en los<br />

Padres Franceses de la Alameda. Más adelante siguió la carrera de Derecho<br />

en la Universidad de Chile. En 1892 casó con Rosario Ester Rodríguez con<br />

quien tuvo 8 hijos. En 1897 fue elegido diputado por Curicó y Vichuquén, con el<br />

apoyo de su antiguo conocido y amigo, Fernando Lazcano. Posteriormente<br />

sería senador por Tarapacá, y debido a una campaña incendiaria que realizara<br />

enfrentando al acaudalado empresario del salitre, Arturo del Río, pasó a ser<br />

conocido como el “León de Tarapacá”.<br />

En aquellos años la elección de Presidente de la República era indirecta<br />

y se elegían primero “electores de Presidente”. De convenciones de uno y otro<br />

bando político resultaron dos candidatos: Luis Barros Borgoño y Arturo<br />

Alessandri. Y dejemos que lo que sigue sea relatado por el historiador Gonzalo<br />

Vial:<br />

“Barros Borgoño y Alessandri prácticamente empataron. Mas el primero<br />

dominaba las cámaras. Podían éstas quitarle electores, ‘imparcialmente’, a<br />

ambos candidatos. Con lo cual, conforme a la constitución, no reuniéndose<br />

mayoría absoluta de aquellos para ninguno de los postulantes, decidiría el<br />

Congreso Pleno...y Luis Barros sería Presidente”.<br />

Los alessandristas, previendo esta situación, propusieron que se<br />

constituyera un tribunal de honor que decidiera qué postulante tenía<br />

moralmente mejor derecho a la presidencia. Vial reconoce que nunca ha<br />

quedado claro por qué los unionistas, partidarios de Borgoño, aceptaron la<br />

constitución de ese tribunal. Uno de sus miembros era Lazcano que, tal vez por<br />

las ideas sociales demasiado avanzadas de Alessandri, ya no lo apoyaba.<br />

Pero, dejemos nuevamente que siga Vial:<br />

“El tribunal de honor se reunió en el Congreso el 30 de agosto de 1920.<br />

Uno de sus miembros era el economista Guillermo Subercaseaux; otro<br />

Fernando Lazcano. Ingresaron ambos, discutiendo, al edificio parlamentario,<br />

rumbo a la sala donde sesionarían. Tras ellos, muy cerca, iban Arturo y<br />

Fernando Alessandri Rodríguez, que como abogados alegarían la causa de su<br />

padre. Los jóvenes letrados escuchaban la apasionada argumentación pro-<br />

Barros y anti Alessandri que le hacía Lazcano a Subercaseaux; éste callaba.<br />

Entrando a la sala Lazcano se dio vuelta casualmente /.../ y se encontró a boca<br />

de jarro con los hijos del ‘León’. Turbado, extendió sin embargo la mano para<br />

saludarlos, y allí mismo cayó muerto de un fulminante ataque cardíaco. Lo<br />

extendieron y velaron sobre la mesa de sesiones del tribunal y ante el cadáver<br />

lloró a lágrima viva su antiguo discípulo y ahora aborrecido ‘bolchevique’, Arturo<br />

Alessandri Palma”.<br />

(Fredes).<br />

24.¿Es bruja alguien por ser muy liviana?<br />

A fines del siglo XVIII en Alemania, que en todo caso en aquella época era un<br />

conjunto de divisiones y subdivisiones de reinos, principados, marcas, ducados,<br />

condados, y demás, tienen lugar los últimos procesos y ejecuciones de brujas.<br />

Por de pronto, lo que llama la atención es como ello ha tenido que ver con el<br />

machismo tradicional, ya que normalmente se identificaba a mujeres como<br />

brujas, muchísimo más que a hombres, y como veremos, ello solía suceder por

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