Análisis cuantitativo de los suministros militares - Historia Antigua

Acilio recibe una enorme cantidad de aprovisionamiento de grano de parte de los alidos. Entre
estas donaciones Cartago se hizo presente con una oferta particular: una flota naval nueva cuyos
costos serían totalmente cubiertos por ellos. La respuesta de Acilio aparentemente desconcierta:
exigió sólo las naves que los púnicos debían dar según el tratado establecido 266 , desconocemos la
cantidad.
Durante ese mismo año el comandante de la flota romana Gaio Livio preparaba la
expedición a Grecia. En su trayecto incorporó naves y aprovisionamiento itálico, pero además
agregó 6 naves púnicas de refuerzo 267 y encontró a Eumenes, en Egina, que lo acompañó con
otras 3 naves 268 . Más tarde el mismo rey Eumenes contribuyó con otras 20 naves mientras Roma,
por su parte, prepara su flota para las próximas maniobras de esta etapa inicial.
Durante los preparativos hacia los próximos enfrentamientos la flota romano-aliada crecía
y se aprovisionaba en territorios griegos. Tito Livio describe con qué propiedad Gaio Livio se
movía entre sus aliados, la respuesta era siempre de acogida entre ellos. En 191, mientras se
alistaba para pasar al Egeo, es probable que los habitantes de Fócida le hayan entregado
aproximadamente 100 naves (de tipo cubiertas y descubiertas), mientras Eumenes colaboró con
otras 50 naves 269 del mismo tipo.
Siempre durante el año 191 se mantuvo la preocupación por controlar las costas de Asia.
Con esta iniciativa Lucio Emilio recibió 20 naves de guerra 270 (no se especifica qué aliados las
entregaron) y los hombres, ya aprovisionados, que habían combatido antes bajo las órdenes de
Marco Iunio; además él mismo debía enrolar nuevas fuerzas entre los aliados. Con este
contingente naval y humano se haría cargo de la flota de Gaio Livio.
Los cambios introducidos a nivel de comandantes en la flota mantuvieron una dinámica
permanente en la actividad naval durante el segundo año de guerra. Un año que además comenzó
a pesar entre los aliados de Fócida que se sentían sobrepasados con las exigencias de la guerra y
se debatían en conflictos internos por romper la alianza con Roma y pasar al bando de Antíoco 271 .
266
Livio 36,4,9. Este caso se revisa con más detalle mientras se analiza el aprovisionamiento hecho mediante los
acuerdos de paz establecidos entre Roma y los pueblos derrotados en guerra, ver pp. 164-165.
267
Livio 36,42,2.
268
Livio 36,42,6.
269
Livio 36,43,13.
270
Livio 32,2,10.
271
Livio 37,9,1-4. La revuelta interna reconocía como causa de ésta el agotamiento económico del pueblo. Se
comenta que la Fócida había recibido la orden de entregar a Roma 500 túnicas y 500 togas, además de importantes
cantidades de grano que los habían reducido a la escasez.
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