Análisis cuantitativo de los suministros militares - Historia Antigua

Al respecto sabemos que en 169 el cónsul Quinto Marcio envió una carta al Senado
informando de su llegada a Macedonia, precisamente cuando el invierno se aproximaba. Allí se
aprovisionó a través de un intercambio con las regiones vecinas.
En la oportunidad Q. Marcio especifica que se hizo llevar desde la región del Epiro
20.000 moyos de grano y 10.000 de cebada 472 . El caso es que este grano debería ser pagado en
Roma a una delegación epirota, cuyas condiciones no son informadas.
Q. Marcio recurrió al intercambio pensando en la alimentación invernal de sus hombres y
de sus animales. Aparentemente no presionó por hacerse transportar el grano desde las
provincias, como tampoco impuso una requisición a los aliados de los territorios griegos;
posiblemente le pareció más sensato establecer una compra-venta que confiscar el grano en
nombre de su autoridad sobre un aliado.
El criterio de Q. Marcio responde a un conocimiento profundo de los mecanismos de
abastecimiento; el grano lo recibió en Macedonia, desde el Epiro, y lo hizo pagar en Roma. Por
otro lado sabemos que también tuvo necesidad de vestuario invernal, esto lo resolvió informando
a Roma, a través de sus cartas; el Senado emitió un senadoconsulto que convocaba a una
licitación pública que asegurara las togas y las túnicas al ejército en Macedonia.
Creemos importante notar que en este último caso coexisten dos canales de
abastecimiento que podríamos calificar de tradicionales: el mercado de los aliados y las
compañías de publicanos. Esto confirma que el Estado recurrió a las modalidades de intercambio
tradicional para satisfacer las demandas del ejército cuando el erario fiscal lo permitía mientras
las tropas estaban detenidas.
En síntesis, el mercado de los aliados constituyó una alternativa de abastecimiento
funcional a una política defensiva que pretendía, ante todo, garantizar las provisiones. Con esta
finalidad se optaba por adquirir directamente los productos entrando en la dinámica comercial a
través de la compra-venta. Esta modalidad se utilizó directamente con los aliados o en los
mercados locales.
Como solución pudo ser muy válida, pero no bastaba por sí sola, la transacción hecha con
aliados o con publicanos conformó sólo un canal más para el abastecimiento. Pensemos que para
poder utilizar este canal se debía, ante todo, disponer de dinero constante y sabemos bien que las
condiciones del Estado no siempre pudieron respaldar estas compras.
472 Livio 44,16,2.
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