09.05.2013 Views

El viaje de El viaje de Tivo el Arriesgado

El viaje de El viaje de Tivo el Arriesgado

El viaje de El viaje de Tivo el Arriesgado

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

<strong>El</strong> <strong>viaje</strong> <strong>de</strong> <strong>Tivo</strong> <strong>el</strong> <strong>Arriesgado</strong><br />

en su favor. <strong>El</strong> intento <strong>de</strong> Valaz no tuvo para él peores consecuencias, por <strong>el</strong> momento,<br />

que las <strong>de</strong> verse obligado a pasar <strong>el</strong> resto <strong>de</strong> la noche atado, pues ninguno <strong>de</strong> los<br />

presentes sentía ya la más mínima confianza en él. Toral, que había <strong>de</strong>spertado con <strong>el</strong><br />

ruido <strong>de</strong> la disputa, no se extrañó nada <strong>de</strong> lo sucedido y <strong>de</strong>claró que no era otra cosa que<br />

lo que él habría esperado <strong>de</strong> Valaz.<br />

-Ya te avisé que es peor que una víbora -dijo a <strong>Tivo</strong>.<br />

Al día siguiente tardaron poco en llegar al escondite. Una vez allí, Toral recuperó una<br />

pequeña colección <strong>de</strong> piedras preciosas <strong>de</strong> bastante valor, resultado <strong>de</strong> sus activida<strong>de</strong>s<br />

comerciales durante ese año, que separó en dos partes iguales. Cuando hubo terminado,<br />

extrajo <strong>de</strong> su cinturón un cuchillo <strong>de</strong> afilada hoja y se dirigió hacia Valaz, que aun<br />

continuaba atado. <strong>El</strong> miserable, creyendo que se proponía matarlo, empezó a pedir<br />

ayuda a voces a <strong>El</strong>av<strong>el</strong> y <strong>Tivo</strong>. Toral, sin embargo, sólo <strong>de</strong>seaba cortar sus ligaduras y<br />

<strong>de</strong>jarlo libre. Después <strong>de</strong> hacerlo, le dijo estas palabras:<br />

-Toma la parte que te correspon<strong>de</strong> <strong>de</strong>l producto <strong>de</strong> nuestros <strong>viaje</strong>s y márchate<br />

inmediatamente. Nunca más volveré a hacer tratos contigo.<br />

-En cuanto a mí -añadió <strong>Tivo</strong>-, si vu<strong>el</strong>vo a verte ante mi presencia no tendré compasión<br />

<strong>de</strong> ti. Es mejor que te vayas ahora, antes <strong>de</strong> que cambiemos <strong>de</strong> opinión y te hagamos<br />

pagar lo que mereces.<br />

Valaz se apresuró a apo<strong>de</strong>rarse <strong>de</strong> las piedras preciosas que le pertenecían, dirigió a<br />

<strong>El</strong>av<strong>el</strong> una mirada <strong>de</strong> odio, montó su caballo y se alejó presurosamente <strong>de</strong>l lugar en<br />

dirección noroeste. Pronto se perdió <strong>de</strong> vista.<br />

-Espero que sea la última vez que le veo -comentó <strong>Tivo</strong>, mientras los tres <strong>viaje</strong>ros se<br />

disponían a seguir, con más lentitud, <strong>el</strong> camino que había tomado Valaz.<br />

No ocurrió ningún otro inci<strong>de</strong>nte digno <strong>de</strong> mención durante esta etapa <strong>de</strong>l <strong>viaje</strong>. Al<br />

principio, <strong>el</strong> camino bor<strong>de</strong>ó <strong>el</strong> curso <strong>de</strong> otro río bastante caudaloso. Cuatro días <strong>de</strong>spués<br />

<strong>de</strong> lo r<strong>el</strong>atado, <strong>Tivo</strong> y <strong>El</strong>av<strong>el</strong> percibieron que <strong>el</strong> aspecto <strong>de</strong>l paisaje sufría un cambio. <strong>El</strong><br />

su<strong>el</strong>o llano <strong>de</strong> la meseta cedía <strong>el</strong> paso a un terreno muy plegado, que formaba largas<br />

ca<strong>de</strong>nas <strong>de</strong> colinas bajas entre las que sobresalía, a lo lejos, algún picacho no muy alto.<br />

Al mismo tiempo era posible ver que la <strong>el</strong>evación <strong>de</strong>l su<strong>el</strong>o <strong>de</strong>scendía gradualmente a<br />

través <strong>de</strong> la región <strong>de</strong> las colinas, aunque la extensión ocupada por éstas era tan amplia<br />

que no se habría visto su fin aunque hubieran podido ascen<strong>de</strong>r a un punto <strong>de</strong> vista más<br />

ventajoso. Al llegar al pie <strong>de</strong> la primera línea <strong>de</strong> lomas, Toral <strong>de</strong>tuvo su caballo, se<br />

volvió hacia sus amigos y dijo:<br />

-Aquí comienza la última etapa <strong>de</strong> nuestro <strong>viaje</strong>. Éste es <strong>el</strong> país <strong>de</strong> Klír.<br />

61

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!