You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
Manu<strong>el</strong> Alfonseca<br />
-¡Pero si nos dijiste que ibas a mostrarnos un paso para cruzar las montañas y salir <strong>de</strong>l<br />
valle! -protestó <strong>Tivo</strong>.<br />
-Eso es, exactamente, lo que he hecho -contestó Kial-. Ro<strong>de</strong>ad esta roca junto a la que<br />
os habéis cobijado esta noche y encontraréis <strong>el</strong> camino que prometí mostraros.<br />
Así lo hicieron. Al otro lado <strong>de</strong> la roca se <strong>el</strong>evaba un contrafuerte <strong>de</strong> la cordillera, en la<br />
base <strong>de</strong>l cuál se abría la boca, negra como la tinta, <strong>de</strong> un tún<strong>el</strong> o caverna.<br />
-Este tún<strong>el</strong> atraviesa las montañas y os llevará a su vertiente noroeste -explicó Kial-. No<br />
podéis per<strong>de</strong>ros. No tiene bifurcaciones.<br />
-¿No quieres acompañarnos un poco más? -preguntó <strong>El</strong>av<strong>el</strong>-. Nos sentiremos menos<br />
seguros sin tu ayuda.<br />
-No me es posible -respondió <strong>el</strong> hombre-murciélago-. Tengo otros asuntos que resolver.<br />
A<strong>de</strong>más, vosotros no correréis p<strong>el</strong>igro durante los próximos días. Después... será<br />
diferente. Pero puedo anticiparos algo: En vuestra aventura llegará un momento en que<br />
os encontraréis en una situación tan <strong>de</strong>sesperada que todo os parecerá perdido. Cuando<br />
esto suceda, tened esperanza. Yo acudiré en vuestra ayuda.<br />
"Antes <strong>de</strong> <strong>de</strong>spedirnos quiero recordaros que tenéis una misión que cumplir: una misión<br />
aun más importante que vuestra propia vida. Salvar ésta a costa <strong>de</strong>l éxito <strong>de</strong> la empresa<br />
significaría <strong>el</strong> fracaso <strong>de</strong> muchas cosas, más <strong>de</strong> las que podéis imaginar.<br />
-¿Qué camino <strong>de</strong>bemos seguir cuando lleguemos al otro lado <strong>de</strong>l tún<strong>el</strong>? -preguntó <strong>Tivo</strong>.<br />
-Eso tendréis que <strong>de</strong>cidirlo vosotros mismos. Pero os aconsejo que no perdáis tiempo y<br />
energías preocupándoos por lo que os pueda <strong>de</strong>parar esta aventura y por los pasos que<br />
tendréis que dar para coronarla con éxito. Ocupaos, más bien, en resolver <strong>el</strong> problema<br />
inmediato. Recordad que no conocéis todos los <strong>de</strong>talles <strong>de</strong> la misión y las exigencias<br />
concretas que os <strong>de</strong>mandará. Todo eso tendréis que ir <strong>de</strong>scubriéndolo poco a poco, a<br />
medida que avancéis en <strong>el</strong> camino que habéis emprendido.<br />
"Y ahora, adiós. Pero no temáis. Tened confianza. Os repito que soy yo quien os ha<br />
enviado a esta misión y que os ayudaré a cumplirla.<br />
Después <strong>de</strong> darles estos consejos, Kial abrazó a los tres <strong>viaje</strong>ros, <strong>de</strong>splegó las alas y se<br />
alejó volando hacia <strong>el</strong> sur. Pronto se perdió <strong>de</strong> vista.<br />
-¿Te convences ahora <strong>de</strong> que Kial es amigo nuestro? -preguntó la joven a <strong>Tivo</strong>.<br />
-No estoy seguro aún -respondió éste-. No sabemos lo que nos espera <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> ese<br />
tún<strong>el</strong>.<br />
-Pero <strong>de</strong>bemos intentar cruzarlo -repuso Larsín-, pues no tenemos alternativa. Aunque,<br />
por mi parte, no dudo <strong>de</strong> que Kial intenta realmente ayudarnos.<br />
<strong>Tivo</strong> y <strong>El</strong>av<strong>el</strong> procedieron entonces a recoger gran cantidad <strong>de</strong> ramas secas que<br />
pudieran hacer <strong>el</strong> pap<strong>el</strong> <strong>de</strong> antorchas para iluminar su marcha a través <strong>de</strong>l tún<strong>el</strong>. Por fin<br />
28