09.05.2013 Views

El viaje de El viaje de Tivo el Arriesgado

El viaje de El viaje de Tivo el Arriesgado

El viaje de El viaje de Tivo el Arriesgado

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Manu<strong>el</strong> Alfonseca<br />

-Avancemos un poco. Tal vez <strong>el</strong> ascenso se facilite más a<strong>de</strong>lante.<br />

Durante varias horas <strong>de</strong> marcha, <strong>el</strong> <strong>de</strong>sfila<strong>de</strong>ro serpenteó entre las dos la<strong>de</strong>ras<br />

montañosas, cada vez más escarpadas, que se aproximaban entre sí, <strong>de</strong> modo que <strong>el</strong><br />

camino que seguían se estaba convirtiendo en una grieta estrecha que amenazaba<br />

cerrarse completamente y cortarles <strong>el</strong> paso.<br />

Más tar<strong>de</strong>, <strong>Tivo</strong> se dio cuenta <strong>de</strong> que hacía rato que escuchaba un sordo rumor, que<br />

hasta aqu<strong>el</strong> momento no había rebasado <strong>el</strong> umbral <strong>de</strong> sus sensaciones conscientes.<br />

Estaba a punto <strong>de</strong> llamar la atención <strong>de</strong> sus compañeros hacia él cuando, <strong>de</strong> repente,<br />

<strong>El</strong>av<strong>el</strong> exclamó:<br />

-¡Mirad! ¿Qué es aqu<strong>el</strong>lo? -y al mismo tiempo la muchacha señalaba hacia la estrecha<br />

cinta <strong>de</strong> ci<strong>el</strong>o que las montañas <strong>de</strong>jaban ver sobre sus cabezas.<br />

<strong>Tivo</strong> se <strong>de</strong>tuvo, miró hacia don<strong>de</strong> indicaba <strong>El</strong>av<strong>el</strong> y vio, a gran altura, un punto oscuro,<br />

a modo <strong>de</strong> pájaro enorme, que durante unos instantes permaneció estacionario. En<br />

seguida, como si se hubiera dado cuenta <strong>de</strong> que había sido <strong>de</strong>scubierto por los <strong>viaje</strong>ros,<br />

emprendió v<strong>el</strong>oz vu<strong>el</strong>o hacia <strong>el</strong> norte, siguiendo un curso más o menos paral<strong>el</strong>o al <strong>de</strong>l<br />

<strong>de</strong>sfila<strong>de</strong>ro.<br />

-¿Qué era? -preguntó <strong>El</strong>av<strong>el</strong>.<br />

-Lo ignoro -respondió <strong>Tivo</strong>-. Me pareció <strong>de</strong>masiado gran<strong>de</strong> para ser un águila. No sé <strong>de</strong><br />

qué se trata y tampoco tengo <strong>de</strong>masiada curiosidad por verlo más <strong>de</strong> cerca. Pue<strong>de</strong> ser<br />

p<strong>el</strong>igroso.<br />

Larsín no dijo nada, pero permaneció pensativo durante un buen rato.<br />

Antes <strong>de</strong> continuar la marcha, <strong>Tivo</strong> hizo notar a sus compañeros <strong>el</strong> ruido que había<br />

atraído su atención poco antes <strong>de</strong>l inci<strong>de</strong>nte y que aun podía percibirse, sordo y lejano, a<br />

su alre<strong>de</strong>dor.<br />

-Diríase que proce<strong>de</strong> <strong>de</strong>l su<strong>el</strong>o, bajo nuestros pies -exclamó <strong>El</strong>av<strong>el</strong>, estremeciéndose-.<br />

Este sitio comienza a ponerme nerviosa. ¿Qué nuevo p<strong>el</strong>igro nos acecha?<br />

<strong>El</strong> rey se inclinó hasta <strong>el</strong> su<strong>el</strong>o y pegó <strong>el</strong> oído a tierra.<br />

-Efectivamente, <strong>el</strong> rumor es mucho más intenso aquí. A<strong>de</strong>más, creo que ya sé <strong>de</strong> qué se<br />

trata. Es agua que fluye. Debe <strong>de</strong> haber una fuente <strong>de</strong> aguas subterráneas por aquí cerca.<br />

-Sigamos a<strong>de</strong>lante hasta que la encontremos -repuso Larsín-. Nos vendrá bien para<br />

reponer la provisión <strong>de</strong> agua.<br />

Así lo hicieron. Durante más <strong>de</strong> una hora avanzaron, esperando encontrar la fuente <strong>de</strong><br />

un momento a otro, pero sin dar con <strong>el</strong>la. Entretanto, <strong>el</strong> sordo rumor se incrementó hasta<br />

convertirse en un rugido ensor<strong>de</strong>cedor, por lo que se vieron obligados a alzar la voz para<br />

comunicarse entre sí.<br />

20

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!