41004 - Sevilla UmmoCat Catálogo - Ufología Heterodoxa. El ...

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tarde a Méjico , donde es agasajada por el Presidente Obregón. Estancias en Nueva York , Washington y
Boston. Escribe en revistas, da conferencias y organiza exposiciones en galerías de arte, con lo que ganó mucho
dinero. Seis a os duró su permanencia en Ultramar hacia la década de los veinte. Durante su ausencia de Espa a
su abuela materna se hizo cargo de la custodia y educación de los cuatro viznietos. Breve residencia en la Península
para instalarse seguidamente en París , donde se desplaza en un Renault de 4O HP conducido por un chauffeur de
atlética presencia. Tras cinco a os en Francia regresa definitivamente a la patria. Sus hijos deben tratarla en
público como "Marquesa" y besarle la mano. Al sobrevenir la II República su amigo Miguel Maura , ministro
de la Gobernación , influye para que se le otorgurn algunos cargos de tipo benéfico. El Movimiento Nacional la
sorprende en zona roja , y tanto ella como sus hijos son perseguidos. En l.937 nace un gran amor entre Do a
Margarita y José María Bassols Iglesias , prestigioso abogado barcelonés y padre de cuatro hijos , quien consigue
el divorcio aprovechando la flamante legislación republicana. Bassols se vio obligado a renunciar a su bufete de alto
standing debido al ostracismo que sufrió la pareja por no estar casados por la Iglesia.
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En el "a o del hambre" , l.94l , do a Margarita toma triunfalmente posesión de la casa solariega familiar sita en la
calle Mayor N 58 de Albacete , arrebatada a su hermana Soledad mediante un litigio llevado por Bassols.
Como la capital manchega era muy aburrida la baronesa compró un piso en la calle Princesa N 72 de Madrid. Do
a Margarita niega haber profanado el cadáver de su hija , y acusa de la mutilación a su hijo menor Luis. Desde que
Margot sufrió el primer ictus apoplético su madre permaneció durante varios meses cuidándola sin desnudarse y casi
sin dormir. Instantes antes de morir , Do a Margarita besó en la boca a Margot con tal fuerza que los asistentes la
apartaron pues impedía la penosa respiración de la agonizante. Fallecida Margot estuvo besándola también en
varias ocasiones , incluso a las siete de la ma ana del dia 2l , cuando hubieron de cerrar el ataud debido al intenso olor
de putrefacción. Su amor a los perros era tal que cuando moría alguno retrasaba el momento de su entierro hasta que
el hedor se tornaba insoportable. Por igual motivo solía conservar sus vísceras en cualquier recipiente durante
semanas y meses. Sus hijos aseguraron que se entregaba a transportes de cari o con los perros y que gozaba con la
contemplación de sus apareamientos sexuales. Margot residió en sus últimos tiempos fuera de la casa materna.
La madre siempre se opuso a su noviazgo con José Panadero, aduciendo que , aunque licenciado en Derecho,su
prometido no podía subvenir a las necesidades de un hogar, y en este sentido se negó a sufragarle una dote. Su
explicación del corte del vello en el pubis del cadáver de Margot. Do a Margarita no padece psicosis ni auténtica
enfermedad mental y posee un brillante intelecto , sin perjuicio de que manifieste una tendencia a conservar reliquias ,
a la zoofilia y a cierto fetichismo necrofílico. La encartada es persona audaz , decidida y con una cierta dureza para
enfrentar la vida , cualidades más masculinas que femeninas desde un punto de vista psicológico , y de ahí su sentido
lógico , afán de trabajo intelectual y actitud luchadora , lo que no quiere decir que sea una invertida sexual. El delito
que se le imputa , triple mutilación de los restos mortales de Margot Shelly , concuerda perfectamente con la
psicología de la informada , aunque los tests psicológicos que se le han aplicado no demuestran su participación en los
macabros hechos que se le imputan.
Explícito informe pericial firmado el 8 de mayo de l.954 por
dos médicos forenses y un psiquíatra , certificando el estado mental y psicológico de do a Margarita Ruiz de Lihory ,
procesada en el "Caso de la Mano Cortada". Contiene abundante información biográfica , aunque de dudoso valor
por provenir en su mayor parte de las declaraciones de la propia acusada. 24 páginas. Archivo J.J. Montejo.
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