08.05.2013 Views

Los disidentes del universo - Biblioteca Mexiquense del Bicentenario

Los disidentes del universo - Biblioteca Mexiquense del Bicentenario

Los disidentes del universo - Biblioteca Mexiquense del Bicentenario

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

una estación <strong>del</strong> metro, por ejemplo, y su dispersión a lo largo<br />

<strong>del</strong> andén, sigue los mismos patrones estadísticos que un saco<br />

de maíz al ser vaciado a través de un embudo en un recipiente<br />

rectangular —una pecera, digamos—; e incluso aquel sujeto avispado<br />

que busca el lugar de menor densidad en el andén y se<br />

dirige con paso decidido hacia un extremo, tendría suficientes<br />

motivos de reflexión sobre el tema ya apolillado <strong>del</strong> libre albedrío,<br />

si observara que en un experimento de esa naturaleza no falta<br />

el grano de maíz que rueda, ciega pero inexorablemente, hacia<br />

alguno de los extremos, terminando, sin asomo de satisfacción,<br />

muy lejos de la apretujada masa.<br />

La cola, o lo que con un eufemismo insoportable otros denominan<br />

“la fila” (como si cualquier alusión al apéndice animal se<br />

acercara a la grosería, o nos remitiera, por quién sabe qué retorcidas<br />

asociaciones, a la forma sinuosa de la serpiente y por lo<br />

tanto al pecado y a la perdición), es ya un esfuerzo consciente,<br />

un principio, no importa qué tan elemental de estructura, que<br />

nos aleja <strong>del</strong> movimiento de los granos de maíz así sea para colocarnos<br />

en el mismo terreno que las hormigas, seres industriosos<br />

y simpáticos que han hecho de la fila india el principio supremo<br />

de sociabilidad. Frente al problema <strong>del</strong> choque de voluntades<br />

persiguiendo un mismo propósito —casi siempre cruzar una<br />

puerta— la cola es ya un indicio de lógica en el seno de lo contingente,<br />

que resuelve la aglomeración y el atropello con la<br />

justicia incontestable <strong>del</strong> que llegó primero.<br />

Por su lentitud connatural, próxima a lo viscoso, y acaso también<br />

por su retorcimiento, la cola está menos emparentada con la serpiente<br />

y la hormiga que con el anélido, con la lombriz de tierra,<br />

1 5

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!