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Halcones de Malvinas - Escuela de Aviación Militar Argentina

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ACLARACIÓN<br />

ACLARACIÓN<br />

Todo lo ocurrido en éste libro ha sucedido en la realidad y los relatos se ajustan estrictamente a hechos<br />

verídicos.<br />

Es narrado por mi cuando se refiere a una misión cumplida por la escuadrilla a mi mando, o por sus<br />

protagonistas cuando ha sido cumplida por otros camaradas.<br />

No es un relato total <strong>de</strong> las acciones aéreas que se llevaron a cabo en el conflicto que mantuvimos con Gran<br />

Bretaña, sino que se trata <strong>de</strong> aquellos que más nos impresionaron, ya que sería necesario un libro muchísimo<br />

mas extenso que éste, para <strong>de</strong>tallar las 505 salidas previstas, las 445 salidas cumplidas y las 272 que llegaron al<br />

blanco.<br />

Tiene la virtud <strong>de</strong> recopilar experiencias recogidas durante o apenas finalizada la guerra, con la sangre aún<br />

caliente y los recuerdos recientes.<br />

No tiene pretensiones literarias, pues, como escritor sólo soy un piloto.<br />

Los <strong>de</strong>rechos <strong>de</strong> autor <strong>de</strong> este libro y <strong>de</strong> "Dios y los <strong>Halcones</strong>", que me correspon<strong>de</strong>n, fueron donados a las<br />

esposas, o en el caso <strong>de</strong> ser éstos solteros, a las madres <strong>de</strong> los caídos en nuestras Islas <strong>Malvinas</strong>; Soldados,<br />

Suboficiales y Oficiales <strong>de</strong> la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong>.<br />

Si hubiese alguna diferencia entre "DIOS Y LOS HALCONES" y "HALCONES SOBRE MALVINAS " lo correcto es lo<br />

<strong>de</strong>l segundo libro.<br />

EL AUTOR


PROEMIO<br />

ESTE LIBRO ES UN HOMENAJE:<br />

A nuestra venerable Madre, la Virgen María, bajo cuya protección luchamos.<br />

A nuestra Patria.<br />

A nuestros heroicos muertos, que hoy son ban<strong>de</strong>ras a seguir y mojones <strong>de</strong> soberanía en las Islas <strong>Malvinas</strong>.<br />

A los que estuvieron con nosotros antes, durante y <strong>de</strong>spués.<br />

A Latinoamérica, que antepuso a su conveniencia un i<strong>de</strong>al.<br />

A Perú, Panamá y Venezuela.<br />

A los pueblos <strong>de</strong> diferentes naciones que comprendieron nuestra lucha y se i<strong>de</strong>ntificaron con nuestra causa.<br />

Al BIM 5, a la Compañía "C" <strong>de</strong>l Regimiento 25, a la Artillería Antiaérea <strong>de</strong>l Ejército Argentino, y a los miembros <strong>de</strong><br />

las tres FF.AA. que supieron integrar esfuerzos y combatir eficientemente en forma conjunta.<br />

A mis camaradas <strong>de</strong> la Fuerza Aérea que volvieron a reunirse con sus familias, satisfechos <strong>de</strong> lo hecho y seguros<br />

<strong>de</strong> lo por hacer.<br />

Al Teniente Néstor Norberto Estévez, <strong>de</strong>l Ejército Argentino, muerto en combate, como un valiente.<br />

A los muchos heridos, que sintieron penetrar en su carne el proyectil enemigo, o fueron mutilados por el frío y que<br />

llevarán toda la vida el testimonio <strong>de</strong> fi<strong>de</strong>lidad al juramento hecho a la Patria.<br />

A nuestras heroicas viudas, padres e hijos, dignos <strong>de</strong> sus <strong>Halcones</strong> caídos; que con estoicismo tratan <strong>de</strong><br />

sobrellevar el dolor <strong>de</strong> la pérdida <strong>de</strong>l ser querido, y al mismo tiempo tratar <strong>de</strong> vivir;<br />

¡Cómo él hubiera querido! —y <strong>de</strong> esa forma agra<strong>de</strong>cer a Dios la gracia <strong>de</strong> haber sido elegido entre tantos<br />

millones, para compartir una parte <strong>de</strong> su vida terrenal.<br />

A mi madre que me dio su amor y a mi padre que me dio su ejemplo.<br />

Y por último, a todos los Argentinos, civiles y militares, que viven "Con Dios en el alma y un Halcón en el Corazón".


PROLOGO<br />

PROLOGO<br />

Dijo SUN TZU (Filósofo chino <strong>de</strong>l siglo V A.C.): -Cuando quieras saber como te fue en la guerra, pregúntale a<br />

tu enemigo.<br />

Pienso que las siguientes afirmaciones, <strong>de</strong> amigos y enemigos, son el mejor prólogo para los relatos <strong>de</strong><br />

este libro.<br />

Octubre Octubre <strong>de</strong> <strong>de</strong> 1982 1982 1982 - Fierre Fierre Fierre Closterman Closterman (as (as d<strong>de</strong><br />

d e la aviación Francesa durante lla<br />

l a segunda guerra mundial): -Rindo<br />

homenaje a los Pilotos Argentinos, porque la gente <strong>de</strong> coraje merece siempre todos los homenajes.<br />

Profesionalmente, sus pilotos fueron los más exactos, no sólo <strong>de</strong> la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong>, sino <strong>de</strong> la aviación<br />

integral. No sólo <strong>de</strong>mostraron que eran buenos, sino que mejores que los mejores. Para mí que soy latino, fue un<br />

orgullo.<br />

"LA FUERZA AEREA ARGENTINA, GANO SU BATALLA AERONAVAL CONTRA LA FLOTA INGLESA"<br />

Mayo <strong>de</strong> 1982 - Telex N" 025/82 GHO 260582 <strong>de</strong> Lima – Perú. Firmado por General (Fuerza Aérea Peruana)<br />

D.Benavi<strong>de</strong>z CONROY:<br />

"Los Héroes <strong>de</strong> la <strong>Aviación</strong> <strong>Argentina</strong> asombran al mundo, su pericia y falta <strong>de</strong> apego a la vida, los pone en la<br />

gloria. ¡Viva <strong>Argentina</strong>!<br />

"John Nott (Ministro <strong>de</strong> Defensa Inglés)": Los pilotos Argentinos están mostrando un gran coraje, ninguno pue<strong>de</strong><br />

negarlo".<br />

General General Jeremy Jeremy MOORE MOORE (jefe (jefe <strong>de</strong> <strong>de</strong> las las tropas tropas Inglesas Inglesas): Inglesas ): "El cuerpo <strong>de</strong> Oficiales y muchos <strong>de</strong> sus técnicos fueron<br />

sumamente capaces y esto fue particularmente notorio, en el caso <strong>de</strong> la valerosa Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong>.<br />

Michael Michael NICHOLSON NICHOLSON (De (De (De ITNA ITNA TV, TV, INGLATERRA): INGLATERRA): "Los Marinos Británicos no pue<strong>de</strong>n ocultar su admiración por el<br />

valor <strong>de</strong> los pilotos argentinos".<br />

The The Observer: Observer: (Inglaterra); "nunca creí que iba a <strong>de</strong>cir esto, pero <strong>de</strong>seo sacarme el sombrero ante los pilotos<br />

Argentinos; han sido increíblemente bravos," manifestó un Coronel <strong>de</strong> la Real Infantería <strong>de</strong> la Marina Inglesa.<br />

DPA DPA— DPA Londres: "Los pilotos Argentinos atacan asumiendo en pleno el riesgo <strong>de</strong> ser abatidos y <strong>de</strong> correr el <strong>de</strong>stino<br />

<strong>de</strong> tantos compañeros ya muertos en combate. La amenaza y peligro <strong>de</strong> la aviación, adquirió tal dimensión, que<br />

los barcos <strong>de</strong> guerra Británicos están siempre dotados <strong>de</strong> nuevas armas aéreas".<br />

RADIO RADIO DIEGO DIEGO PORTALES PORTALES (Chile): Los aviadores Argentinos se han ganado el reconocimiento mundial, hasta <strong>de</strong> los<br />

propios Británicos, por su valentía. Se observó como se lanzaban ante una verda<strong>de</strong>ra muralla <strong>de</strong> misiles, obuses y<br />

ametralladoras antiaéreas, infligiendo bajas al enemigo.


BBC BBC Londres: Londres: "Los aviadores Argentinos realmente estaban en todas partes, aunque sólo eran tres máquinas;<br />

saltaban como <strong>de</strong>monios <strong>de</strong> un lado a otro, disparando cohetes contra nuestra flota y así como parecían<br />

sorpresivamente, <strong>de</strong> igual manera se fueron, sin que nada pudiéramos hacer para <strong>de</strong>tenerlos".<br />

ABC ABC (Diario (Diario Español): Español): "Es común <strong>de</strong>cir que la <strong>Argentina</strong> ha sido ben<strong>de</strong>cida por todos los dones <strong>de</strong>l cielo y <strong>de</strong> la<br />

tierra. Pero por sobre todo, ahora lo vemos por sus hijos que se hicieron aviadores".<br />

REVISTA REVISTA "AIR "AIR PROGRESS" PROGRESS" (Estados (Estados Unidos): Unidos): "El heroísmo <strong>de</strong> los pilotos Argentinos logró equilibrar un poco la<br />

enorme diferencia <strong>de</strong> fuerzas".


CAPITULO CAPITULO I<br />

I<br />

"LA "LA BATALLA BATALLA DE DE LAS LAS MALVINAS"<br />

MALVINAS"<br />

En cada capítulo haré una introducción muy breve, para tratar <strong>de</strong> llevar un relato or<strong>de</strong>nado, a fin <strong>de</strong> que el<br />

lector pueda ubicar los hechos con claridad. Aquí trataré <strong>de</strong> que analicemos el porqué <strong>de</strong> los resultados <strong>de</strong><br />

la F.A.A. contra los ingleses.<br />

RELATA: RELATA: El autor (piloto <strong>de</strong> A-4B SKYHAWK).<br />

Un campo <strong>de</strong> batalla mo<strong>de</strong>rno es un enorme centro <strong>de</strong> experimentación <strong>de</strong> armamento y tácticas nuevas.<br />

La batalla en que la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong> participó <strong>de</strong>fendiendo la Patria, o sea aquello que nos pertenece,<br />

amamos y somos capaces <strong>de</strong> dar la vida por su causa, no fue una excepción.<br />

En ese pedazo <strong>de</strong> tierra <strong>Argentina</strong>, se evaluó el avión HARRIER, que dio óptimos resultados ( 1 ) cuando se lo<br />

utilizó para lo que fue concebido, o sea como interceptor y fracasó como caza bombar<strong>de</strong>ro.<br />

Allí también se comprobó la eficacia <strong>de</strong>l sistema <strong>de</strong> armas Super Etendard "Exocet" y la importancia <strong>de</strong> la<br />

inteligencia y las comunicaciones en la guerra mo<strong>de</strong>rna. Hasta ahí todos parámetros y experiencias esperadas,<br />

pero no sólo esto nos <strong>de</strong>jó esta batalla, <strong>de</strong>trás <strong>de</strong> los números, las estadísticas y evaluaciones surgió algo, algo<br />

distinto y ya olvidado que asombró al mundo y tuvo la oportunidad <strong>de</strong> vivir <strong>de</strong>s<strong>de</strong> a<strong>de</strong>ntro. Esto fue el maravilloso<br />

<strong>de</strong>scubrimiento <strong>de</strong>l triunfo <strong>de</strong>l hombre sobre la máquina, <strong>de</strong> que el romanticismo, la hidalguía y los i<strong>de</strong>ales aún<br />

existen, irguiéndose por sobre los dólares, el oro y el materialismo.<br />

Superando el <strong>de</strong>spliegue técnico surgió el empuje tremendo <strong>de</strong> un grupo <strong>de</strong> hombres; el personal <strong>de</strong> la Fuerza<br />

Aérea <strong>Argentina</strong>, que amparado sólo en la fe en Cristo, un rosario y el convencimiento <strong>de</strong> que la causa por la cual<br />

luchaban era superior aún a su propia vida, fueron al combate sobre aviones leales pero antiguos, contra la<br />

tercera flota <strong>de</strong>l mundo y lo más avanzado <strong>de</strong> la técnica, en lo que se refiere a armamento naval, logrando una<br />

victoria reconocida por el mundo e incluso por sus propios enemigos.<br />

Esto me llevó a hacerme una pregunta ¿Por qué?<br />

Todo nace <strong>de</strong> una formación <strong>de</strong> Base que surge <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la creación <strong>de</strong> la <strong>Escuela</strong> <strong>de</strong> <strong>Aviación</strong> <strong>Militar</strong> y sigue con<br />

quienes instruyeron a las sucesivas promociones, incluyendo una <strong>de</strong>dicación especial al perfeccionamiento<br />

profesional, sabiendo que la misión <strong>de</strong> nuestra Fuerza es la <strong>de</strong>fensa <strong>de</strong> la soberanía nacional.<br />

En el momento en que uno inicia su ataque a una sofisticada fragata mo<strong>de</strong>rna la in<strong>de</strong>cisión o el error se<br />

pagan con la muerte; primero saldrán aisladas columnas <strong>de</strong> agua producto <strong>de</strong> los cañones <strong>de</strong> largo alcance <strong>de</strong><br />

los buques, luego salen los misiles que buscan el avión y por último queda una barrera <strong>de</strong> bombas <strong>de</strong><br />

fragmentación que forman una franja <strong>de</strong> aguas que danzan.<br />

1 Factor fundamental <strong>de</strong>l éxito <strong>de</strong>l Harrier como interceptor, fue el misil norteamericano SIDEWINDER AIM. 9L_ con que fue<br />

dotado.


El piloto sabe que si vuela excesivamente bajo se <strong>de</strong>sintegrará contra el agua y si sube un metro más será<br />

captado por el radar que dirige los letales cañones y por consiguiente será <strong>de</strong>rribado; va por un estrechísimo<br />

corredor hacia el blanco, sobre el que lanzará su bomba prácticamente segundos antes <strong>de</strong> chocarlo, pasando<br />

luego entre sus antenas y llegando a doblarlas chocando contra ellas, como le ocurrió a un oficia piloto <strong>de</strong> A-4B<br />

en su ataque y posterior <strong>de</strong>strucción <strong>de</strong> la "ARGONAUT".<br />

El mecanismo en la Escuadrilla <strong>de</strong>be ser el <strong>de</strong> un perfecto reloj que no pue<strong>de</strong> fallar.<br />

Siempre pensé, inclusive cuando estuve <strong>de</strong>stinado en una Base <strong>de</strong>l Sur como integrante <strong>de</strong> la <strong>Escuela</strong> <strong>de</strong><br />

Caza durante el año 1978, por el conflicto con Chile, <strong>de</strong>bido a sus pretensiones sobre nuestras islas Picton, Lenox<br />

y Nueva; que el secreto <strong>de</strong>l éxito <strong>de</strong> una misión residía en ese perfecto entendimiento; pero en esta guerra que<br />

tantas veces <strong>de</strong>seé vivir, aprendí que eso no es todo; ese entendimiento <strong>de</strong>be exten<strong>de</strong>rse a los mecánicos, a los<br />

armeros, a los radaristas, a los meteorólogos, a las tripulaciones <strong>de</strong> los reabastecedores; el profesionalismo, la<br />

unión y la seriedad <strong>de</strong> tomar todas las activida<strong>de</strong>s con mentalidad combativa, constituyen las bases <strong>de</strong> ese éxito.<br />

Lograr esto sólo se consigue <strong>de</strong> una manera, formando al hombre interiormente, pero no maquinizándolo,<br />

haciéndole lavados <strong>de</strong> cerebro y logrando que todos piensen igual, sino enriqueciéndolo, enseñándole que todo<br />

viene <strong>de</strong> alguien muy superior a nosotros y a todo lo terrenal, Dios Nuestro Señor, que la vida militar <strong>de</strong>be ser un<br />

apostolado como pue<strong>de</strong> ser el sacerdocio y la medicina, teniendo como fin principal el espíritu <strong>de</strong> servicio, pues<br />

ésa es nuestra misión, servir, servir, ya que quien tiene verda<strong>de</strong>ra vocación militar <strong>de</strong>be seguir aquello que dijo Dios;<br />

cuando le preguntaron cual era el mandamiento más importante: "Amarás a Dios por sobre todas las cosas y a tu<br />

prójimo como a tí' mismo"; y no hay mayor prueba <strong>de</strong> amor que la ofrenda <strong>de</strong> la propia vida.<br />

Nosotros <strong>de</strong>jamos a nuestras espaldas esposas e hijos a quienes no dudamos en <strong>de</strong>jar viudas y huérfanos ya<br />

que <strong>de</strong>fendíamos el futuro <strong>de</strong> muchas familias como las nuestras, el honor <strong>de</strong> LA PATRIA, y <strong>de</strong> toda la América<br />

Hispana.<br />

Debimos apren<strong>de</strong>r sobre la marcha en <strong>Malvinas</strong> y gracias a Dios y a nuestro entrenamiento, lo hicimos rápido<br />

y bien, lo que no quita que pese a nuestro éxito aero-naval, si hubiésemos estado preparados, el doble <strong>de</strong> las<br />

fragatas inglesas que hundimos estarían ahora en el fondo <strong>de</strong>l mar.<br />

"SIR TRISTAN", "SIR GALLAHAD", "COVENTRY", "GLASGOW", "ANTELOPE", "PLYMOUTH", "ANTRIM", "ARDENT",<br />

"BRILLANT", "INVINCIBLE" y tantas fragatas hundidas y averiadas son el mejor testimonio <strong>de</strong>l triunfo <strong>de</strong>l espíritu y<br />

el i<strong>de</strong>alismo <strong>de</strong>l personal <strong>de</strong> la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong> por sobre el tecnicismo.<br />

Antes <strong>de</strong> iniciar su travesía hacia nuestro mar, los ingleses contabilizaron nuestros medios, pero se olvidaron<br />

<strong>de</strong>l factor humano, lo que les costó muy caro.<br />

Cada vez que iniciamos una misión sabíamos que quizás ese sería el último día que estaríamos sobre la tierra<br />

y muchas veces volvíamos en ese largo regreso, con la misión cumplida, pensando en quién dos horas antes<br />

estuvo preparando la navegación con nosotros y no volverá jamás.<br />

La responsabilidad <strong>de</strong> evaluar y or<strong>de</strong>nar el cumplimiento <strong>de</strong> esas misiones recaía en unos pocos conductores<br />

que sabían que muchos <strong>de</strong> nosotros quedaríamos en el campo <strong>de</strong> batalla, lo que es aún más penoso para ellos,<br />

dado que conocían personalmente a casi todos los pilotos que las llevaban a cabo; sin embargo ellos supieron<br />

cumplir acertadamente con la difícil misión <strong>de</strong> comandar nuestra Fuerza Aérea en combate.


Se habló <strong>de</strong> "kamikazes", o <strong>de</strong> que nos daban estimulantes, cuando el único secreto era la fe en Dios y la<br />

convicción; <strong>de</strong>bíamos llegar pese al mal tiempo, pese al frío, pese a lo limitado <strong>de</strong> los medios, <strong>de</strong>bíamos batir al<br />

blanco y <strong>de</strong>bíamos volver, volver a toda costa pues no podíamos <strong>de</strong>sperdiciar ni una sola bomba.<br />

Detrás <strong>de</strong> todo esto estaba el apoyo incondicional <strong>de</strong>l pueblo <strong>de</strong> nuestra patria que nos hacía sentir su cariño<br />

en cada ataque.<br />

También sentíamos el apoyo <strong>de</strong> nuestras familias que no nos pedían que nos cui<strong>de</strong>mos, sino que sepamos<br />

cumplir con nuestro <strong>de</strong>ber, aún sabiendo que quizás al hacerlo nos perdieran para siempre.<br />

Un hecho <strong>de</strong>stacable fue la actitud <strong>de</strong> muchos oficiales que pudiendo eludir por su edad y grado el entrar en<br />

combate, exigieron ir al frente <strong>de</strong> sus hombres siguiendo el lema <strong>de</strong> que una vida es más importante por su<br />

calidad que por su longitud. También se vio la necesidad <strong>de</strong> que el piloto viva cómodo, <strong>de</strong>scanse y coma bien, ya<br />

que <strong>de</strong>pen<strong>de</strong> <strong>de</strong> sus reflejos y así logrará un rendimiento óptimo pensando la mejor actitud a tomar en unos<br />

segundos, mientras a su alre<strong>de</strong>dor explotan las bombas y su avión vuela a mil kilómetros por hora.<br />

Pero no sólo es importante el alimento <strong>de</strong>l cuerpo, sino también <strong>de</strong>l espíritu, en nuestras bases sureñas<br />

contamos con sacerdotes <strong>de</strong> oro, que nos ayudaron a ir al combate con la paz <strong>de</strong>l Señor en nuestros corazones.<br />

¡Esa fue nuestra arma secreta! ¡esa fe fue la que nos impedía iniciar la maniobra evasiva cuando entrábamos al<br />

blanco!.<br />

Me contaba un oficial que se eyectó en la Gran Malvina, luego <strong>de</strong> que atacamos juntos en Bahía San Carlos,<br />

que durante esos dos días y dos noches que caminó sin cesar para evitar morir congelado, <strong>de</strong>scubrió la fuerza<br />

espiritual que da la fe, permitiendo a un ser humano llegar mucho mas allá <strong>de</strong> lo físicamente posible. Mientras la<br />

muerte lo rondaba, él guardaba un caramelo <strong>de</strong>l equipo <strong>de</strong> supervivencia para dárselo a su hijita, pues no se<br />

rendiría ni al enemigo, ni a la muerte.<br />

Debemos compren<strong>de</strong>r que es aún más importante la formación <strong>de</strong>l hombre que la formación <strong>de</strong>l piloto y que<br />

no <strong>de</strong>be finalizar la misma con su egreso, sino que se <strong>de</strong>be continuar en las Brigadas.<br />

En nuestras islas quedaron muchos <strong>de</strong> nosotros, mi respetuoso homenaje a aquellos que supieron cumplir su<br />

juramento <strong>de</strong> "Seguir constantemente su ban<strong>de</strong>ra y <strong>de</strong>fen<strong>de</strong>rla hasta per<strong>de</strong>r la vida"<br />

Cierto día, cuando aterricé luego <strong>de</strong> cumplir una misión <strong>de</strong> combate, se acercó uno <strong>de</strong> los muchachos que<br />

cargan combustible en los aviones y me apretó afectuosamente un brazo; en ese gesto vi lo que sentían todos los<br />

Argentinos, por lo que sólo les puedo <strong>de</strong>cir un muchas gracias.<br />

Dios tiene dispuesta una misión para cada uno <strong>de</strong> sus hijos en esta tierra, siendo todas importantes por igual;<br />

nosotros sólo cumplimos con nuestro <strong>de</strong>ber.<br />

Dijo el Ten MAYOR durante una conferencia: ". . . Antes <strong>de</strong> la guerra pensé que a un piloto <strong>de</strong> combate se le<br />

<strong>de</strong>bía enseñar a formar, a tirar, a hacer navegaciones tácticas; luego comprendí que lo más importante era<br />

enseñarle a llegar a su objetivo, a llegar pese al miedo, a la pérdida <strong>de</strong> la propia vida, a llegar pese a todo. .. ".


CAPITULO CAPITULO II<br />

II<br />

A A LAS LAS GEORGIAS<br />

GEORGIAS<br />

Aunque no se pudo llegar al blanco por meteorología, el riesgo tremendo <strong>de</strong> esta misión y el valor <strong>de</strong><br />

quienes, pese al miedo, salieron sin dudar a cumplirla, merecen que sean conocidos.<br />

RELATA: RELATA: 1er. Ten. Ricardo SPROVIERO<br />

El miércoles 21 <strong>de</strong> abril el <strong>de</strong>structor "ANTRIM" se acercó pru<strong>de</strong>ntemente a las Georgias <strong>de</strong>l Sur, a través <strong>de</strong><br />

un mar embravecido y borrascas <strong>de</strong> nieve. Alre<strong>de</strong>dor <strong>de</strong> las 7 <strong>de</strong> la mañana, dos helicópteros Wessex 5, con tres<br />

patrullas <strong>de</strong>l SAS (Escuadrón Especial <strong>de</strong> Ataque), <strong>de</strong>spegaron iniciando el ataque inglés que culminaría el 25 <strong>de</strong><br />

abril con el esfuerzo conjunto <strong>de</strong> la Fragata "PIymouth", el <strong>de</strong>structor "Brilliant" y el buque rompehielos , patrulla y<br />

transporte <strong>de</strong> tropas "Endurance".<br />

En Trelew, a muchos kilómetros <strong>de</strong> distancia, los entonces mayores VIVAS y ESCUDERO comenzaron a darle<br />

forma a una misión que al día siguiente intentaría realizar el Grupo 2 <strong>de</strong> Bombar<strong>de</strong>o, con sus aviones Canberra<br />

(Bombar<strong>de</strong>ro <strong>de</strong> origen Inglés). La misión sería llevada a cabo por dos aviones y un tercero iría <strong>de</strong> reserva; la<br />

tripulación <strong>de</strong>l N o 1 serian el Mayor VIVAS y el Mayor ESCUDERO, <strong>de</strong>l nro. 2, 1er. Ten BAEZA y 1er. Ten CARDO y el<br />

N o 3, 1er Ten SPROVIEROy 1er Ten MORENO<br />

Uno <strong>de</strong> los principales problemas que presentaba la misión era la distancia a la cual se encontraba el blanco<br />

por lo cual se <strong>de</strong>cidió trasladar los aviones al aeródromo continental que se encontraba más cerca <strong>de</strong>l objetivo;<br />

este lugar era la Base Naval <strong>de</strong> Río Gran<strong>de</strong> y <strong>de</strong>s<strong>de</strong> ese punto <strong>de</strong>beríamos recorrer 2.000 Km. hacia el Este.<br />

Por esta misma razón el compartimiento que se halla en la parte inferior <strong>de</strong>l avión Canberra y don<strong>de</strong> lleva<br />

normalmente <strong>de</strong> 4 a 6 bombas <strong>de</strong> 500 Kg. iría ocupado totalmente por un tanque auxiliar <strong>de</strong> combustible <strong>de</strong><br />

3.300 litros para totalizar 13.000 litros <strong>de</strong> combustible. Quedaba lugar solamente en los pilones (pieza <strong>de</strong> metal<br />

ubicada <strong>de</strong>bajo <strong>de</strong>l plano que sirve para sujetar bombas o contenedores <strong>de</strong> bombas) para llevar dos bombas<br />

inglesas <strong>de</strong> 500 Kg.<br />

El objetivo era atacar una formación <strong>de</strong> tres buques compuesta por un transporte <strong>de</strong> tropas (El Endurance),<br />

una fragata (PIymouth) y un petrolero (Ti<strong>de</strong>sprig). Más a<strong>de</strong>lante nos enteramos que este último se encontraba a<br />

400 Km. <strong>de</strong> distancia y en realidad el tercer barco era la fragata "Brilliant" y que a<strong>de</strong>más había un cuarto que era<br />

el <strong>de</strong>structor "Antrim".<br />

Ascen<strong>de</strong>ríamos hasta 35.000 pies para consumir el combustible <strong>de</strong> los tanques ubicados en la puntera <strong>de</strong><br />

ambos planos, una vez usado este combustible eyectaríamos los tanques <strong>de</strong> puntera ya que la resistencia al<br />

avance <strong>de</strong> estos implica un mayor consumo <strong>de</strong> combustible y si los mismos permanecían colocados no podríamos<br />

llegar al continente.<br />

Luego ascen<strong>de</strong>ríamos a la máxima cota posible y realizaríamos toda la navegación a esa altura.<br />

Descen<strong>de</strong>ríamos antes <strong>de</strong>l blanco para volar rasante las últimas millas, lo que nos llevaría a proximida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> la<br />

Bahía <strong>de</strong> Cumberland, don<strong>de</strong> se encuentra instalado el puerto <strong>de</strong> Grytviken. No disponíamos <strong>de</strong> ninguna foto <strong>de</strong>


la zona don<strong>de</strong> estaban los blancos y las cartas geográficas no nos daban una información clara sobre como era el<br />

terreno. Solamente <strong>de</strong>ducíamos que la Bahía era bastante estrecha y que había elevaciones bastante<br />

importantes a ambos lados <strong>de</strong> la misma, lo que haría difícil maniobrar para entrar y tirar si los blancos estaban en<br />

puerto.<br />

El domingo 25 los dos Mayores fueron al comando <strong>de</strong> la Fuerza Aérea Sur, don<strong>de</strong> explicaron los <strong>de</strong>talles <strong>de</strong><br />

como se realizaría la misión y obtuvieron el permiso correspondiente, aclaramos que era solamente una<br />

comprobación <strong>de</strong> un perfil <strong>de</strong>l vuelo, puesto que las condiciones <strong>de</strong> realización eran bastante marginales: volar<br />

con 380 Kts. (700 km/h) <strong>de</strong> navegación como mínimo y no tener fuertes vientos contrarios porque en ese caso el<br />

combustible no alcanzaría para llegar a nuestra primer base <strong>de</strong> recuperación que era la pista <strong>de</strong> Puerto Argentino<br />

(Islas <strong>Malvinas</strong>). Allí <strong>de</strong>beríamos aterrizar en una pista corta para este tipo <strong>de</strong> avión ya que no tiene ningún<br />

sistema auxiliar <strong>de</strong> frenado.<br />

Cargaríamos allí solamente el combustible necesario para llegar al continente y usaríamos en la carrera <strong>de</strong><br />

<strong>de</strong>spegue toda la pista que tenía 1.200 metros aproximadamente.<br />

Ese domingo en Trelew era todo nervios y mucho café y cigarrillos. Era la transición <strong>de</strong> la paz a la guerra, todos<br />

estábamos preparados para entrar en combate; pero ese tiempo <strong>de</strong> espera para la primer misión era eterno. Por<br />

nuestras mentes cruzaban las imágenes <strong>de</strong> todos nuestros seres queridos y el lunes por la mañana no llegaba<br />

nunca.<br />

El capitán CASADO (que posteriormente fuera <strong>de</strong>rribado la noche <strong>de</strong>l 13 <strong>de</strong> junio, último día <strong>de</strong> la guerra,<br />

muriendo en esa ocasión), le entregó al navegador <strong>de</strong>l avión N o 3 una tabla para vuelo con 1 motor y otra para<br />

vuelo sin motor, don<strong>de</strong> sabríamos según una u otra condición que distancia podríamos recorrer <strong>de</strong>s<strong>de</strong> 12.500<br />

metros hasta llegar a nivel <strong>de</strong>l mar; <strong>de</strong> allí calculamos que con ese nivel y ambos motores <strong>de</strong>tenidos por falta <strong>de</strong><br />

combustible manteniendo 300 km/h podríamos recorrer 160 millas náuticas; ningún dato era <strong>de</strong>sechable en ese<br />

momento.<br />

El lunes 26 <strong>de</strong> abril antes que saliera el sol ya estábamos tomando el <strong>de</strong>licioso café que nos había preparado<br />

"Carlitos" SEPPEY, quien era el encargado <strong>de</strong> cuidar nuestros equipos personales y <strong>de</strong> supervivencia, que aparte<br />

compartía duramente nuestras horas <strong>de</strong> alerta y se esforzaba por mantenernos alegres y bien alimentados (a<br />

modo <strong>de</strong> <strong>de</strong>spedida).<br />

El vuelo hasta Río Gran<strong>de</strong> se realizó sin contratiempos, al arribar fuimos recibidos por varios superiores<br />

nuestros quienes nos trasladaron al Casino <strong>de</strong> Oficiales Superiores <strong>de</strong> la Armada y nos brindaron múltiples<br />

atenciones. Allí vimos la situación Meteorológica <strong>de</strong>l objetivo (que no era buena) y nos reunimos con la tripulación<br />

<strong>de</strong>l BOEING 707 que volaría <strong>de</strong>lante nuestro hasta el punto <strong>de</strong> <strong>de</strong>scenso con un equipo <strong>de</strong> navegación más<br />

mo<strong>de</strong>rno que el <strong>de</strong> los viejos "CANBERRAS".<br />

A las 12:00 Hs. nos subimos a los aviones y nos <strong>de</strong>spidieron los pilotos <strong>de</strong> FAA que estaban allí, junto con el<br />

Jefe <strong>de</strong> la base Comodoro CORINO.<br />

Pusimos en marcha, rodamos hasta cabecera y en la posición para <strong>de</strong>spegue un camión cisterna <strong>de</strong> YPF nos<br />

completó al máximo los tanques <strong>de</strong> combustible reponiendo lo que habíamos gastado en el rodaje. Estos últimos<br />

litros eran valiosos y podían significar la llegada o no a la pista <strong>de</strong> Puerto Argentino que estaba a pocos metros <strong>de</strong>l<br />

mar.


Despegamos con 10 segundos <strong>de</strong> separación con rumbo al oeste y nos reunimos mientras poníamos rumbo<br />

este, directo al extremo occi<strong>de</strong>ntal <strong>de</strong> la Isla San Pedro (se <strong>de</strong>spega en contra <strong>de</strong>l viento).<br />

Mientras ascendíamos, vimos como quedaba atrás el continente y por último la Isla <strong>de</strong> los Estados a nuestra<br />

<strong>de</strong>recha.<br />

Manteníamos silencio <strong>de</strong> radio, pero la conversación navegador piloto, piloto-navegador no se <strong>de</strong>tenía nunca;<br />

era la forma <strong>de</strong> hacer más corta la navegación mientras tanto hacíamos esfuerzos para mantenernos formados<br />

sin mover los aceleradores, porque sabíamos que los aumentos y disminuciones <strong>de</strong> potencia significaban mayor<br />

consumo <strong>de</strong> combustible.<br />

Cuando estuvimos próximos al lateral <strong>de</strong> las Islas <strong>Malvinas</strong> terminamos <strong>de</strong> consumir los tanques <strong>de</strong> puntera<br />

lanzables y el guía or<strong>de</strong>nó la eyección <strong>de</strong> los mismos, el 2 y 3 eyectaron sin novedad pero al guía le quedó un<br />

tanque colocado por lo cual no podía (por consumo <strong>de</strong> combustible) completar la misión. La tripulación <strong>de</strong>l avión<br />

reserva N o 3 tomó conocimiento <strong>de</strong> la situación y pasó a ser el avión guía.<br />

Quedamos en la ruta el Boeing 707 (que iba señalando el camino con sus cuatro estelas blancas), los<br />

Canberra apodados "Penélope" y "Picasesos". Debajo nuestro había un manto nuboso, pero aún así sabíamos que<br />

tapaba solamente al mar.<br />

Los navegadores hacían esfuerzos por mantener actualizada nuestra posición pero <strong>de</strong>bido a un pequeño error<br />

en los datos que se fijaron antes <strong>de</strong>l vuelo el punto "Charlie" <strong>de</strong>l Boeing 707 no coincidió con el nuestro, y a partir<br />

<strong>de</strong> allí tuvieron que hacer uso <strong>de</strong> todos los métodos <strong>de</strong> navegación conocidos para confirmar nuestras sucesivas<br />

posiciones, ya que no podíamos interrogar por radio al navegador <strong>de</strong> B-707.<br />

Llegó por fin el momento <strong>de</strong> la separación, iniciamos el <strong>de</strong>scenso y el B-707 se alejó con sus cuatro estelas<br />

bancas, rumbo al continente.<br />

Allí abajo nos esperaba una mini-flota y nuestro temor no era tanto a los misiles (ya que uno acabaría<br />

rápidamente con el avión y su tripulación) sino algún disparo <strong>de</strong> los muchos que habría y que podría agujerear<br />

nuestro tanque auxiliar imposibilitando nuestro regreso al continente. Mientras estábamos pensando en esto y en<br />

muchas otras cosas se interrumpió el silencio <strong>de</strong> radio y escuchamos al comandante <strong>de</strong>l KC-130 que estaba<br />

sobre las Islas Georgias quien nos dijo que su Radar ubicaba a los barcos todos juntos y <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la Bahía frente<br />

al puerto <strong>de</strong> Grytviken. Continuamos <strong>de</strong>scendiendo hasta que nos llegó la or<strong>de</strong>n <strong>de</strong> regresar, la meteorología era<br />

marginal y los blancos estaban refugiados en un lugar que (por ser costa con altos acantilados) no permitían el<br />

ingreso y salida <strong>de</strong> nuestros aviones.<br />

Próximos al extremo occi<strong>de</strong>ntal <strong>de</strong> la Isla San Pedro comenzamos el retorno y el ascenso con rumbo a las Islas<br />

<strong>Malvinas</strong>. A partir <strong>de</strong> ese momento el navegador <strong>de</strong>l Boeing 707 nos iba dando su posición cada tres minutos,<br />

comparamos esa posición con la estima nuestra para tratar <strong>de</strong> ubicarlo, hasta que lo tuvimos a la vista y le<br />

formamos nuevamente. Unos 150 Km antes <strong>de</strong> llegar a las Islas <strong>Malvinas</strong> hicimos un nuevo cálculo <strong>de</strong><br />

combustible y vimos que alcanzaba para llegar directamente a Río Gran<strong>de</strong> (ya que no hicimos el tramo rasante<br />

que es el <strong>de</strong> mayor consumo). Aterrizamos en Río Gran<strong>de</strong> a las 19:00 Hs. luego <strong>de</strong> haber volado 05:30 Hs. y<br />

recorrido 2.200 millas marinas (4.000 Km).<br />

La noche <strong>de</strong>l 26 <strong>de</strong> abril personal <strong>de</strong>l Grupo Técnico 2 trabajó hasta altas horas <strong>de</strong> la noche para colocar<br />

nuevamente tanques <strong>de</strong> puntera lanzables en los extremos <strong>de</strong> ala.


A las 12:00 Hs. <strong>de</strong>l martes 27 estábamos en cabecera los tres aviones listos a <strong>de</strong>spegar (con mejores<br />

condiciones meteorológicas, con un planeamiento minucioso y con información <strong>de</strong> la ubicación <strong>de</strong> los blancos)<br />

pero por razones hasta ahora ignoradas por nosotros se nos or<strong>de</strong>nó regresar a plataforma y suspen<strong>de</strong>r la misión. 2<br />

De esta forma vimos frustrado nuestro <strong>de</strong>seo <strong>de</strong> ser los primeros en atacar a la flota Inglesa aunque fuimos<br />

recibidos en Trelew como si efectivamente lo hubiésemos hecho.<br />

2 Se suspendió la misión porque la Guarnición se había rendido.


CAPITULO CAPITULO IIII<br />

I II<br />

JOSÉ JOSÉ "PEPE" "PEPE" "PEPE" ARDILES<br />

ARDILES<br />

Cuando llegué <strong>de</strong> pase a la V Brigada Aérea, me alegró encontrar a un Oficial a quien había conocido<br />

como ca<strong>de</strong>te, cuando era instructor <strong>de</strong>l Centro <strong>de</strong> Formación <strong>de</strong> los Oficiales <strong>de</strong> nuestra fuerza. No había<br />

cambiado nada; aunque ya era un hombre, seguía competente, humil<strong>de</strong> y respetuoso como cuando<br />

ingresó.<br />

RELATA: RELATA: Capitán DIMEGLI0 (Piloto <strong>de</strong> M-V "DAGGER")<br />

La noche <strong>de</strong>l 30 <strong>de</strong> abril hubo festejos por los cumpleaños <strong>de</strong> los integrantes <strong>de</strong>l Escuadrón.<br />

En lo mejor <strong>de</strong> la fiesta, llegaron a<strong>de</strong>lantos <strong>de</strong> posibles misiones <strong>de</strong> combate; cobertura sobre !as Islas y<br />

ataque a objetivos navales, con los agregados <strong>de</strong> las tediosas alertas, sentados <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l avión, revistas <strong>de</strong><br />

historietas <strong>de</strong> por medio; preparados para <strong>de</strong>spegar <strong>de</strong> inmediato, previo tirar lejos la revista y esperar que algún<br />

mecánico voluntarioso se ocupase <strong>de</strong> ella.<br />

Durante el mes <strong>de</strong> abril habíamos juntado muchas horas <strong>de</strong> "amansadora", en las que quedamos<br />

acalambrados <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la punta <strong>de</strong>l pié hasta el último pelo.<br />

Del revuelo <strong>de</strong> la fiesta pasamos a otro distinto, <strong>de</strong> nerviosismo e interrogantes. Aunque todos teníamos la<br />

certeza <strong>de</strong> que ellos venían a atacar y por lo tanto nos preparábamos para lo que se venía; interiormente nos<br />

<strong>de</strong>cíamos que no podía ser, que no podíamos estar nosotros a las puertas <strong>de</strong> una guerra. Era una situación<br />

parecida a la <strong>de</strong> aquellos que leen sobre un acci<strong>de</strong>nte fatal en automóvil, pero ni se les cruza por la cabeza que<br />

les pueda ocurrir a ellos.<br />

Las guerras ocurrían en Medio Oriente, en Vietnam, en Corea, pero en <strong>Argentina</strong>..., habían pasado tantos años<br />

<strong>de</strong>s<strong>de</strong> la última vez, que nos habíamos olvidado.<br />

Los soldados <strong>de</strong> San Martín, ¡qué soldados! y eran tan criollos como nosotros; si ellos pudieron con la misma<br />

sangre ¿por qué no nosotros?<br />

Los aviones estaban cargados con tres tanques <strong>de</strong> combustible, 2 misiles y munición completa para sus<br />

cañones (ametralladoras pesadas).<br />

El 1° <strong>de</strong> mayo, <strong>de</strong> noche todavía, cubierto el cielo por una compacta capa <strong>de</strong> nubes a sólo 90 metros <strong>de</strong> altura<br />

y una niebla que envolvía a los edificios dándoles un aspecto fantasmal; primero <strong>de</strong>spegaron el "Talo" y el "Volpi"<br />

(Cap. Moreno y Ten. Volponi). Con el peso que tenían en su avión para el <strong>de</strong>spegue los metros <strong>de</strong> la pista<br />

resultaron justos, <strong>de</strong>jándola doscientos metros antes <strong>de</strong>l final y perdiéndose en la lechosa capa.<br />

Ya sobre <strong>Malvinas</strong>, el radar los guió hacia los ecos <strong>de</strong> los aviones enemigos, entrando en combate. El Teniente<br />

Volponi vio pasar un misil entre ambos aviones, el que seguramente in<strong>de</strong>ciso por la proximidad <strong>de</strong> los dos, no se<br />

<strong>de</strong>cidió por ninguno.


Con mínimo combustible regresaron a su Base <strong>de</strong> asiento, haciendo un procedimiento por instrumentos, en el<br />

cual cometieron un error <strong>de</strong>bido a los nervios por lo recién vivido, lo que fue subsanado gracias al operador <strong>de</strong><br />

radar, que lo advirtió y corrigió.<br />

La segunda Sección "Dardo y Pollo", <strong>de</strong>spegó con una meteorología mas benigna ("Pollo era el Teniente<br />

Bernhardt, quien caería en combate el 24 <strong>de</strong> mayo).<br />

Nuevamente guiados por el radar <strong>Malvinas</strong> <strong>de</strong> la F.A.A., se enfrentaron a dos Harriers, los que hicieron su<br />

clásica espiral <strong>de</strong>scen<strong>de</strong>nte, incitando a los "DAGGER" para que los siguieran y luego colocando toberas en ángulo<br />

negativo, logrando el sobrepasaje <strong>de</strong> éstos transformándose el cazador en cazado. . . Advertida la maniobra, la<br />

Sección amagó seguirlos, pero volvió arriba, prefiriendo los aviones ingleses abandonar el lugar, antes <strong>de</strong><br />

entablar combate en terreno <strong>de</strong>sfavorable (El combate en altas cotas no es el fuerte <strong>de</strong>l SEA HARRIER).<br />

La tercera Sección estaba compuesta por el Primer Teniente Luna y el Mayor Martínez, los que, bajo control <strong>de</strong><br />

radar hicieron tres cruces. Los Harriers, más abajo, ya no querían subir y los Dagger arriba, porque con los misiles<br />

nuestros contra los <strong>de</strong> ellos no se podía preten<strong>de</strong>r mucho. (Esto me hizo pensar que tal vez ellos no contaban con<br />

el Si<strong>de</strong>win<strong>de</strong>r AIM-9L, provisto por los Estados Unidos <strong>de</strong>s<strong>de</strong> un principio; ya que no solo eludían el combate, sino<br />

que inclusive erraron un misil).<br />

La última Sección que <strong>de</strong>spegaba ese día era la formada por el Capitán Rho<strong>de</strong> y el Primer Teniente Ardiles.<br />

Cuando se or<strong>de</strong>nó el <strong>de</strong>spegue, surgió una novedad en el avión el guía, y al no haber un avión <strong>de</strong> reserva<br />

<strong>de</strong>bió quedarse en tierra.<br />

El chorro anaranjado <strong>de</strong> la tobera <strong>de</strong> "Pepe" Ardiles <strong>de</strong>jó la pista y penetró en las nubes... solo.<br />

Nos miramos... y callamos, sabiendo lo que significaba volar sobre el mar casi 700 kilómetros en los que,<br />

quien se eyectase por una simple falla <strong>de</strong>l avión no tenía salvación; entrar en combate y luego regresar, quizás<br />

averiados; todo solo.<br />

Hizo contacto con el radar <strong>de</strong> <strong>Malvinas</strong>, quién lo guió hacia un eco, confirmó —"A la vista"—; en ese instante el<br />

eco sé <strong>de</strong>sdobló en dos (o sea que venían volando muy juntos para presentar una sola superficie <strong>de</strong> reflección en<br />

pantalla y en realidad eran dos Harriers). Luego ... el silencio.<br />

Lo llamaron en todas las frecuencias <strong>de</strong> ese día y nada, ninguna respuesta.<br />

Informaciones <strong>de</strong> personal <strong>de</strong> tierra y fuentes inglesas, indicaron que entró en combate con dos Harriers,<br />

siendo <strong>de</strong>rribado por uno <strong>de</strong> ellos.<br />

Los restos <strong>de</strong>l avión cayeron en la isla <strong>de</strong> Bougainville, lugar al que varias veces fueron nuestros helicópteros<br />

<strong>de</strong> <strong>Malvinas</strong>, sin encontrar señales <strong>de</strong> nuestro "Pepe"; también fue observado un helicóptero Inglés poco <strong>de</strong>spués<br />

<strong>de</strong>l <strong>de</strong>rribo en la zona; pero evi<strong>de</strong>ntemente, al igual que nosotros no encontraron nada.<br />

El Primer Teniente José Leónidas ARDILES, Primer Piloto <strong>de</strong> Mirage V "Dagger" que regó con su sangre<br />

nuestras Islas, fue un señor Oficial <strong>de</strong> la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong>, y como tal murió, el día 1° <strong>de</strong> Mayo <strong>de</strong> 1982.


CAPITULO CAPITULO IV<br />

IV<br />

CANBERRAS CANBERRAS DETECTADOS DETECTADOS DETECTADOS POR POR LA LA FLOTA<br />

FLOTA<br />

Al Teniente Comandante Mike Brodwater, para confirmarle que su<br />

misil no dio en el blanco.<br />

RELATAN: RELATAN: Capitán EDUARDO GARCÍA PUEBLA (piloto)<br />

1er. Teniente JORGE SEGAT (Navegador)<br />

El 2 <strong>de</strong> Abril fue inmensa nuestra sorpresa y alegría. Apenas recuperados <strong>de</strong>l evento comenzamos<br />

entusiasmados nuestras elucubraciones <strong>de</strong> combate.<br />

Con el 1er. Teniente Marcelo Adolfo SIRI (Navegador) nos "fabricamos" el vuelo <strong>de</strong> Canberra hacia la zona <strong>de</strong><br />

operaciones con el objeto <strong>de</strong> comprobar distancias y resultados <strong>de</strong> bombas y espoletas en el agua. Esto trajo<br />

aparejadas "cargadas" por parte <strong>de</strong> varios oficiales; era obvio nuestro interés por estar a la brevedad en la zona<br />

recientemente recuperada. Realmente era como el irresistible canto <strong>de</strong>la sirena.<br />

Así lo hicimos, aterrizamos en la Base Aeronaval Trelew y fuimos recibidos con patriótica algarabía.<br />

Efectuamos varios vuelos en el mar siguiendo distintos patrones <strong>de</strong> bombar<strong>de</strong>o y otras prácticas para ganar<br />

experiencia que no teníamos. Como siempre SIRI dio muestras <strong>de</strong> sus excelentes aptitu<strong>de</strong>s como navegador y<br />

bombar<strong>de</strong>ro, aunque comencé a notar que le aquejaban terribles dolores. Pese a sus esfuerzos por ocultarlos, en<br />

ocasiones se le escapaban conmovedores quejidos. (Tenía una enfermedad incurable).<br />

Así esperábamos la hora <strong>de</strong>l combate, pero la flota fue más lenta que su enfermedad. Iniciadas las<br />

operaciones y ocultando gran<strong>de</strong>s sufrimientos, me pidió que lo llevara <strong>de</strong> cualquier manera hasta el avión y lo<br />

ayudara a atarse para po<strong>de</strong>r ir al combate. A lo que no accedí ya que su aptitud física estaba marcadamente<br />

disminuida, el margen <strong>de</strong> supervivencia era nulo, en caso <strong>de</strong> <strong>de</strong>rribo y en el mejor <strong>de</strong> los casos su estado se<br />

agravaría. Lloró conmigo <strong>de</strong> impotencia, como el buen soldado que no pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>fen<strong>de</strong>r lo suyo. Pocos meses<br />

<strong>de</strong>spués <strong>de</strong> finalizada la contienda, ya en conocimiento pleno <strong>de</strong> su enfermedad libró su última batalla con la<br />

misma voluntad <strong>de</strong> aquellos días. Es imperiosa la mención <strong>de</strong> estos antece<strong>de</strong>ntes para valorizar la personalidad<br />

<strong>de</strong> este luchador. Vaya este pequeño homenaje para la "Lombriz" SIRI y sus hijos, para que siempre sepan <strong>de</strong> su<br />

valor.<br />

Ante la inminente llegada <strong>de</strong> la flota, constituímos las tripulaciones estables compatibilizando criterios <strong>de</strong><br />

eficiencia, experiencia y afinidad. Durante el conflicto el 1er. Teniente Jorge SEGAT fue mi inseparable navegador.<br />

Por momentos nos sentíamos eufóricos y luego <strong>de</strong> investigar las capacida<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l enemigo, evadíamos los<br />

análisis entregándonos aun campeonato <strong>de</strong> dardos, en el que el centro mosca era la imagen <strong>de</strong> la señora<br />

Thatcher. (Nada que ver con el vudú, solamente era una buena terapia).<br />

La espera era dura, me recordaba la imagen <strong>de</strong>l padre frente a la sala <strong>de</strong> partos. La tensión creciente y el<br />

incremento <strong>de</strong> secreciones glandulares consecuentes produjo fenómenos extraños: el más fantástico fue que el


"Gordo" CARDO (la mascota <strong>de</strong>l grupo) a<strong>de</strong>lgazara; otros que en sueños realizaban maniobras evasivas se<br />

rompieron la cabeza contra el suelo; algunos no dormían; se les caía el cabello y así variadas alteraciones fuera<br />

<strong>de</strong> lo común.<br />

El olfato nos dijo que esto se iba alargando, por lo que con SEGAT, SPROVIERO y otros fanáticos nos<br />

<strong>de</strong>dicamos, metódicamente, <strong>de</strong> noche y fuera <strong>de</strong> alerta a hacer gimnasia. Hoy sé que fue importantísimo su<br />

efecto en nuestros posteriores vuelos nocturnos a "casi ciegas", don<strong>de</strong> pudimos ver cosas adivinando. Según los<br />

expertos esto fue probable solo por poseer condiciones psicofísicas muy buenas. .Como sello i<strong>de</strong>ntificatorio y por<br />

mi afición a las pesas me quedó el apelativo: "Musculito".<br />

El 26 <strong>de</strong> Abril se llevó a cabo la difícil e infructuosa misión <strong>de</strong> 3 Canberras a las Georgias. Agregando el<br />

paulatino avance <strong>de</strong> la flota, se multiplicaban en nosotros las ansias <strong>de</strong> "la lucha justa" y también el miedo, por<br />

supuesto. No el miedo instintivo, ingobernable, sino el temor lógico al futuro <strong>de</strong> los hijos sin padre, a per<strong>de</strong>r el<br />

numeral que confía ciegamente en nuestra pericia, o ser combativamente inferior al enemigo, o equivocarse en<br />

las <strong>de</strong>cisiones, o no llegar al blanco, o bombar<strong>de</strong>ar propias tropas, etc. Y por que no, <strong>de</strong>jar este cuerpo material<br />

que malo o bueno es nuestro y nos acompañó unos cuantos años. Fue posible vencer el obstáculo porque<br />

paulatinamente se nos fueron cayendo "los velos" y nos <strong>de</strong>scubrimos a nosotros mismos. Supimos que<br />

amábamos la tierra <strong>de</strong> nuestros padres e hijos y que necesitábamos esencialmente <strong>de</strong>l Principio y Fin <strong>de</strong> todas<br />

las cosas: Dios. No soy original en los conceptos, pero me <strong>de</strong>spreocupa el serlo, la historia <strong>de</strong>l hombre es una viva<br />

reiteración. Lo que sí me importa es rescatar algún valor que nos han prodigado estos jóvenes, fieles exponentes<br />

<strong>de</strong> la sociedad argentina que con sus pocos años y experiencias son educadores ejemplares <strong>de</strong> las cosas<br />

trascen<strong>de</strong>ntales. Ellos nos recuerdan que <strong>de</strong>bemos ser el estandarte <strong>de</strong> la cultura Greco-Romana pura y no el<br />

apéndice putrefacto <strong>de</strong> la cultura <strong>de</strong>l "Dios oro". Los cómodos y <strong>de</strong>screídos enjuiciarán esas abstracciones como<br />

"quijotadas". "Tonterías", "utopías", "i<strong>de</strong>ales perimidos",o como quieran llamarles, pero jamás podrán con ellos.<br />

Cuatro horas <strong>de</strong>l día 1 ° <strong>de</strong> Mayo. El Mayor VIVAS, jefe <strong>de</strong>l Escuadrón, golpeando las puertas <strong>de</strong> los<br />

alojamientos gritó:<br />

— i Atacan Puerto Argentino !<br />

— i Arriba todo el mundo !<br />

No quiero asegurarlo pero creo haber escuchado que alguno salió con una bota <strong>de</strong> vuelo 2 números más chica<br />

y viceversa.<br />

Las dos escuadrillas <strong>de</strong> alerta se subieron a los aviones quedando encerrados y atados. A fuerza <strong>de</strong> ser claro<br />

<strong>de</strong>bo <strong>de</strong>cir que la imposibilidad <strong>de</strong> mínimos movimientos produce diversas molestias, en piernas, espalda, cuello,<br />

etc., que con el correr <strong>de</strong> las horas se hace dolorosa. A propósito <strong>de</strong> estos datos que he ilustrado fue que<br />

improvisamos una escuadrilla para relevar a los que llevaban largas horas en esa condición. Total era por un<br />

ratito. — ¡ error ! a breves minutos <strong>de</strong> reemplazarlos, llegó la primera or<strong>de</strong>n fragmentaria que consistía en 2<br />

salidas <strong>de</strong> 3 aviones con 30 minutos <strong>de</strong> intervalo.<br />

Salió la primera escuadrilla: "Ruta". Integrada por el Capitán NOGUEIRA como jefe, Capitán SÁNCHEZ,<br />

Navegador, Teniente COOKE - Capitán LOZANO <strong>de</strong> N o 2 y Capitán RODINO - 1er. Teniente DUBROCA <strong>de</strong> N° 3.<br />

Nuestro blanco eran lanchas y tropas <strong>de</strong> <strong>de</strong>sembarco al norte <strong>de</strong> la isla Soledad. Cumplido el lapso<br />

preestablecido <strong>de</strong>colamos como guía el Capitán Alberto BAIGORRI con el Mavor RODEIRO, <strong>de</strong> numeral 2 el


Teniente DE IBAÑEZ con el primer Teniente Mario GONZÁLEZ y como numeral 3 quienes relatan. La estructuración<br />

<strong>de</strong> la Escuadrilla no fue azarosa sino que el guía <strong>de</strong>be ser el más experimentado, sucediéndole en aptitu<strong>de</strong>s y<br />

comando el N o 3, que a su vez brinda protección <strong>de</strong>fensivo-evasiva a todo el grupo (en este caso el N o 1 y 3<br />

eramos jefe <strong>de</strong> escuadrilla titulares) y el numeral 2 que va colocado en el medio es el piloto más "nuevo", que<br />

como tal <strong>de</strong>be ser cuidado.<br />

Ascendimos alre<strong>de</strong>dor <strong>de</strong> 10.000 metros, para ahorrar combustible, iniciando el <strong>de</strong>scenso próximos a la zona<br />

<strong>de</strong> captación radárica <strong>de</strong>l enemigo, para no ser <strong>de</strong>tectados. Un dato <strong>de</strong> interés es que el avión Canberra; produce<br />

en radar un eco exactamente 3 veces más gran<strong>de</strong> que un avión tipo Mirage y se percibe <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el doble <strong>de</strong><br />

distancia en ¡guales condiciones. Volábamos casi tocando el agua, el N o 1 <strong>de</strong>jaba un torbellino <strong>de</strong> espuma en el<br />

aire.<br />

Bruscamente, por el alcance <strong>de</strong> las ondas <strong>de</strong> VHF (Radio) comenzamos a escuchar gritos entrecortados y<br />

luego más claros:<br />

— ¡ Bien pibe, lo pusiste <strong>de</strong> traste, lo tumbaste !<br />

Otro <strong>de</strong>cía: — ¡ Me eyecto !<br />

Otro: - ¡Me dieron. No puedo tenerlo. Me voy a la isla!<br />

Este último parecía ser el Capitán NOGUEIRA (Ruta). Efectivamente lo era, por la poca visibilidad reinante no<br />

vieron hasta estar <strong>de</strong>masiado cerca, que el <strong>de</strong>sembarco había sido rechazado y la flota había aproximado a la<br />

costa para proteger el repliegue. Así se encontraron con una pared <strong>de</strong>fensiva entre ellos y el objetivo. Segundos<br />

más tar<strong>de</strong> vieron notables <strong>de</strong>stellos que iluminaron 2 fragatas y luego como tomando forma <strong>de</strong> la nada, varios<br />

misiles <strong>de</strong> gran porte y color blanco que se orientaban hacia ellos. Milagrosamente, por haberlos visto salir,<br />

pudieron esquivarlos. Pasando 2 <strong>de</strong> ellos entre 2 aviones. Se produjo entonces la ruptura (<strong>de</strong>sprendimiento <strong>de</strong> los<br />

aviones) <strong>de</strong>fensiva. Evi<strong>de</strong>ntemente varias andanadas <strong>de</strong> misiles salieron a su búsqueda, <strong>de</strong> los cuales uno<br />

<strong>de</strong>tonó cerca <strong>de</strong> la puntera <strong>de</strong>l ala izquierda <strong>de</strong>l guía, volándola como si fuese <strong>de</strong> papel <strong>de</strong> cigarrillo. La<br />

proximidad al agua evitó el impacto directo pero la pérdida <strong>de</strong>l control producida por la explosión convirtió al<br />

agua, en un virtual enemigo, evitando por centímetros la fatal colisión. Recuperado el control, vio salir a su<br />

encuentro una sección <strong>de</strong> Harrier (P.A.C.) <strong>de</strong>l portaaviones cosa que provi<strong>de</strong>ncialmente lo hizo <strong>de</strong>sistir <strong>de</strong> aterrizar<br />

en Puerto Argentino y le evitó correr la misma suerte que el Capitán GARCÍA CUERVA (M-III).<br />

El navegador Capitán SÁNCHEZ al sentir el impacto dijo:<br />

— ¡ Me eyecto !<br />

— ¡ No ! ¡ No ! ¡Para, quédate!<br />

Ante la propia limitación por avería <strong>de</strong>l "Palito" NOGUEIRA, para acelerar a<strong>de</strong>cuadamente y evadir los<br />

interceptores or<strong>de</strong>nó a sus numerales regresar a la base, quedándose él como señuelo.<br />

El "Pájaro" BAIGORRI y yo lo llamábamos para saber <strong>de</strong> su suerte. De ese enlace y otros que se oían <strong>de</strong>dujimos<br />

que la sombrilla aérea <strong>de</strong> M-III regresaba al continente por combustible, <strong>de</strong>jándonos sin protección. Y que el<br />

<strong>de</strong>sembarco inglés se había suspendido.<br />

— ¿ Escuchaste Pájaro ?<br />

— ¡Sí, le voy a preguntar al "Palito" !<br />

— RUTA-RIFLE (llamado <strong>de</strong> escuadrillas)


Sin recibir respuesta perforábamos lloviznas y nubes <strong>de</strong>sgarradas.<br />

Ya ni nos acordábamos <strong>de</strong>l temblor <strong>de</strong> las piernas; <strong>de</strong>l baño turco, ni <strong>de</strong> las incomodida<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l asiento.<br />

Observamos con Jorge, que <strong>de</strong>s<strong>de</strong> su cubil era "todo ojos", que el número 2, DE IBAÑEZ, se <strong>de</strong>splazaba<br />

algunos metros hacia arriba, seguramente para aliviar la tensión extrema que provoca el volar tan bajo.<br />

Lo llamé:<br />

— ¡ Rifle 2; baje!<br />

Momentáneamente <strong>de</strong>scendió, aunque con ten<strong>de</strong>ncia a subir. Como los 2 aviones <strong>de</strong> a<strong>de</strong>lante, tenían<br />

espoletas que harían estallar sus bombas muy cerca mío fui tomando la conveniente distancia para evitar sus<br />

esquirlas. Nos encontrábamos a 300 kmts. <strong>de</strong>l objetivo.<br />

En ese momento algo in<strong>de</strong>scriptible me impulsó a mirar hacia la <strong>de</strong>recha, forzando la natural posición <strong>de</strong>l<br />

asiento. No sé que mecanismo o sentido me alertó, pero lo hice. Del vientre <strong>de</strong> una nube apareció un pequeño<br />

filete blanquecino con pasmosa velocidad. Se dirigía paralelo a mi rumbo, hacia el N o 1. Cuando esa imagen se<br />

graba en mi retina ya estaba gritando con todas las fuerzas:<br />

— ¡ Pájaro, abrite, un misil !<br />

— ¡ RUPTURA !<br />

Simultáneamente accioné violentamente los aceleradores a su tope máximo, todo el volante y pedal a la<br />

izquierda y atrás.<br />

— ¡ Jorge, lanza bengalas y chaff, cada 15 segundos !<br />

Pasé rozando el agua con mi ala izquierda, que se extien<strong>de</strong> a 10 metros <strong>de</strong> la cabina; pero sin sacar la vista<br />

<strong>de</strong>l misil.<br />

El N o 1 giraba rápidamente hacia la <strong>de</strong>recha, lo que quizás provocó que el Si<strong>de</strong>win<strong>de</strong>r calórico, enganchara la<br />

estela caliente <strong>de</strong>l numeral 2, sumado a que éste iba más alto y que su trayectoria era aún lineal. Con<br />

<strong>de</strong>sesperación grité:<br />

— ¡ Guarda el 2 ! ¡ ¡ GUARDA GUARDA EL EL 2 2 !<br />

— Vire carajo.<br />

— ¡ DIOS !. Ya era tar<strong>de</strong>, no tuvo tiempo <strong>de</strong> evadirlo. Vi el misil entrar en su motor <strong>de</strong>recho lo que no provocó<br />

ninguna explosión violenta, ni <strong>de</strong>strucción progresiva <strong>de</strong>l motor.<br />

En este instante perdíamos <strong>de</strong> vista la acción por el brusco cambio <strong>de</strong> rumbo. Pero el Capitán BAIGORRI por<br />

estar virando hacia ese lado pudo ver la eyección y los dos hongos <strong>de</strong> los paracaídas, como así la caída <strong>de</strong>l avión<br />

al agua con fuego en el motor <strong>de</strong>recho.<br />

Nuestro pecho se conmovió instintivamente, si es que eso era posible dadas las circunstancias que corrían, al<br />

pensar que nuestros amigos no tenían salvación en la inmensidad <strong>de</strong>l mar abierto.<br />

Realizando la mencionada maniobra el número 1 alcanzó a divisar la silueta oscura <strong>de</strong> un Sea Harrier, que<br />

seguramente nos perdió en el radar y se lanzó a nuestra caza en forma visual. Por acci<strong>de</strong>nte la diferencia<br />

tecnológica momentáneamente se había achicado. Entraban en juego otros factores, habilidad, experiencia y por<br />

qué no provi<strong>de</strong>ncia. En eso Jorge me dijo:<br />

— ¡Eyectá los tanques <strong>de</strong> puntera loco!


Efectivamente con tanques nuestras posibilida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> evasión eran mínimas, ya que no podríamos superar los<br />

700 Kmts. por riesgo <strong>de</strong> <strong>de</strong>spren<strong>de</strong>rse uno <strong>de</strong> ellos, provocando un impacto inevitable <strong>de</strong> la aeronave contra el<br />

agua. Estiré la mano hacia el panel <strong>de</strong>recho, para eyectarlos; pero la violencia <strong>de</strong> la maniobra incrementó el peso<br />

<strong>de</strong> mi brazo al punto <strong>de</strong> escaparle dos veces al botón 3. En el tercer intento, y por el exceso <strong>de</strong> velocidad vimos<br />

salir catapultados hacia atrás sendos "tips". El avión crujió y se aceleró en forma brusca como si lo hubiesen<br />

soltado <strong>de</strong> golpe. En ese instante, coinci<strong>de</strong>nte con el lanzamiento <strong>de</strong> bengalas, sentí otro golpe o estremecimiento<br />

en la cola.<br />

Afiebradamente comprobé los comandos y le dije a Jorge:<br />

— Pensé que nos habían dado pero anda todo bien.<br />

— ¿ Pájaro ? —lo llamé— ¿ qué hacemos ? — (Debía consultarlo ya que era el jefe <strong>de</strong> esa unidad <strong>de</strong> combate, la<br />

escuadrilla RIFLE).<br />

— "Volvemos individual". (Cada uno por su cuenta).<br />

— "Ojo que nos andan buscando".<br />

— "Eyectamos bombas <strong>de</strong> planos".<br />

Realmente no tenía sentido seguir hacia el objetivo, <strong>de</strong>tectados por los radares <strong>de</strong> la flota, con dos Harrier<br />

arriba y 300 Kmts. Que aún nos separaban <strong>de</strong> la isla.<br />

Con gran congoja, por ser nuestro elemento ofensivo, lanzamos las bombas exteriores para po<strong>de</strong>r acelerar<br />

aún más.<br />

Mis ojos escudriñaban cada nube y cada chubasco y giraban <strong>de</strong> un lado a otro como el haz <strong>de</strong>l radar. Sentía<br />

como la velocidad aumentaba y aparecían fuertes vibraciones en los comandos.<br />

Lógicamente el resto <strong>de</strong> atención que me quedaba estaba afectado a no embestir la cresta <strong>de</strong> las olas. Pero<br />

SEGAT que no veía tanto hacia afuera, colaboraba con los instrumentos.<br />

— ¡ Viejo ! ¡ Guarda la velocidad, que nos <strong>de</strong>sarmamos !<br />

Teníamos más <strong>de</strong> 950 km. por hora siendo la máxima, por límites estructurales 850 kmts. por hora. Reduje<br />

aceleradores y me pegué más a la superficie <strong>de</strong>l agua.<br />

A continuación <strong>de</strong> algunas maniobras colocamos rumbo general 330° a Trelew, mientras sacábamos cálculos<br />

<strong>de</strong> consumo, por no saber si llegábamos con el alto gasto que ocasionaban la poca altura y velocidad <strong>de</strong> nuestro<br />

vuelo.<br />

Era difícil <strong>de</strong> enten<strong>de</strong>r pero estábamos enfrentados inteligencia contra inteligencia, los segundos corrían y el<br />

golpe no llegaba.<br />

— Che, parece que nos perdió. ¿ Cómo le irá al "Pájaro" ?<br />

— Pájaro - Cobra (Mi indicativo normal) ¿ Cómo andas ?<br />

— “¡ Bien loco ! No me enganchó”<br />

— ¡ A mí tampoco Pichón !<br />

En la penumbra <strong>de</strong>l avanzado atar<strong>de</strong>cer, me pareció ver buques con reflectores grisáceos. -¡Estábamos<br />

ro<strong>de</strong>ados por la flota !. Se me apretó el corazón.<br />

3 Aumento <strong>de</strong> peso provocado por la aceleración <strong>de</strong> la gravedad, recibe nombre <strong>de</strong> "G".


— ¡ Estamos ro<strong>de</strong>ados, veo fragatas por todos lados, no tengo por don<strong>de</strong> pasar !<br />

Aunque no había forma <strong>de</strong> distinguirlos estaban <strong>de</strong>masiado cerca <strong>de</strong>l continente por lo que <strong>de</strong>dujimos eran <strong>de</strong><br />

la Armada <strong>Argentina</strong>. Dada la forma <strong>de</strong> nuestra aparición eso no era ninguna garantía <strong>de</strong> supervivencia si no<br />

alcanzábamos a avisarles, pues con toda seguridad en sus pantallas veían acercarse a un agresor.<br />

— ¡Jorge, URGENTE, con la clave, llama en la frecuencia <strong>de</strong> los "Navis", que son nuestros. Yo por las dudas<br />

miro afuera para tratar <strong>de</strong> esquivar si nos tiran algo.<br />

—Todo ocurría tan vertiginosamente que los sentidos parecían lentos y torpes.<br />

— ¡ LOBO - MATIENZO ! (Llamada en clave).<br />

Prontamente arreciaron las llamadas <strong>de</strong> distintos buques pidiendo autenticación. (Confirmación por medio <strong>de</strong><br />

códigos especiales). Lo que quería <strong>de</strong>cir que estaban a punto <strong>de</strong> tirarnos con todo.<br />

Con un poco <strong>de</strong> alivio hicimos enlace con la fragata "Pon<strong>de</strong>rosa" o "Maravilla", no recuerdo bien, que nos<br />

recibió el informe a<strong>de</strong>lantado y pedido <strong>de</strong> auxilio:<br />

— ESCUADRILLA RIFLE, 3 CANBERRAS, FUIMOS INTERCEPTADOS POR AVIONES HARRIER A 150 MILLAS<br />

NÁUTICAS POR EL RADIAL 330 DE MALVINAS. UN CANBERRA DERRIBADO POR MISIL AIRE-AIRE, DOS<br />

TRIPULANTES EYECTADOS.<br />

— RECIBIDO, ENVIAMOS EL INFORME Y PARA EL RESCATE INFORMAMOS AL AVISO "ALFÉREZ SOBRAL" (Que en<br />

esta empresa fuera atacado).<br />

Regresamos <strong>de</strong> noche junto con el "Palito" NOGUEIRA, que por avería o falla <strong>de</strong> sus equipos <strong>de</strong> navegación,<br />

sumada a la falta <strong>de</strong> su puntera izquierda, venía casi sin combustible al aterrizaje.<br />

Toda la gente, Oficiales, Suboficiales y Civiles nos esperaba al bajar. Nos abrazaron y sufrieron<br />

silenciosamente por la caída <strong>de</strong> nuestros camaradas el primer Teniente "Coquena" Mario GONZÁLEZ y el Teniente<br />

"Pituso" DE IBAÑEZ.<br />

De ahí me fui a la capilla <strong>de</strong> la Base. Entré, estaba a oscuras. Recé por los camaradas caídos. Y a medida que<br />

me acostumbraba a la penumbra me encontré con muchas siluetas que me acompañaban. Estábamos todos allí.<br />

Asumimos nuestra pérdida, "Levantamos el guante" y comenzamos la espera con la "vela <strong>de</strong> las armas" para<br />

asestar nuestro "golpe <strong>de</strong> maza" (símbolo <strong>de</strong> nuestro escudo <strong>de</strong> combate).<br />

Luego <strong>de</strong> este traspié la F.A.S. 4 nos <strong>de</strong>jó varios días inactivos por consi<strong>de</strong>rar que nuestra lentitud con tanque<br />

<strong>de</strong> puntera colocados y la falta <strong>de</strong> repuestos para eyectarnos en todas las misiones, agregadas a las condiciones<br />

momentáneas <strong>de</strong> la batalla hacían excesivamente riesgosa nuestra operación.<br />

Estábamos "tascando el freno", cada camarada que caía era una espina clavada en el alma y un multiplicador<br />

<strong>de</strong> nuestra impotencia.<br />

Llegó el <strong>de</strong>sembarco <strong>de</strong> San Carlos. Mientras se realizaban los primeros ataques <strong>de</strong> escuadrillas argentinas a<br />

la flota en la Bahía, organizábamos una salida <strong>de</strong> ocho Canberras con ocho bombas <strong>de</strong> 1.000 Ibs. cada uno, con<br />

una escolta <strong>de</strong> Mirage III, previamente coordinada.<br />

El Mayor CHEVALLIER, a cargo <strong>de</strong>l Escuadrón en ese momento, expuso la misión a la F.A.S. El bombar<strong>de</strong>o sería<br />

<strong>de</strong> zona <strong>de</strong>s<strong>de</strong> 15.000 mts. <strong>de</strong> altura, cubriendo un paño <strong>de</strong> terreno <strong>de</strong> 2.000 Mts. por 2.000 mts., con 64.000<br />

Ibs. <strong>de</strong> bombas (32.000 Kgs.) para <strong>de</strong>struir o <strong>de</strong>smembrar la cabeza <strong>de</strong> playa. El sistema <strong>de</strong> puntería sería visual


y/o con el apoyo <strong>de</strong>l "amado radar <strong>de</strong> Puerto Argentino". Este sistema se utilizó en varias ocasiones logrando batir<br />

objetivos, consistiendo básicamente en calcular interpolando los vientos existentes <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el terreno hasta la<br />

altura <strong>de</strong> lanzamiento, compatibilizados con la trayectoria balística <strong>de</strong> la bomba y <strong>de</strong> esta forma obtener un punto<br />

<strong>de</strong> lanzamiento y a ór<strong>de</strong>nes <strong>de</strong>l radar todos <strong>de</strong>scargar sus bombas.<br />

Las posibilida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> retorno eran estimadas en el 40%. pero la importancia <strong>de</strong>l blanco hizo que la mayoría nos<br />

ofreciéramos como voluntarios. La iniciativa fue bien recibida por la F.A.S.<br />

La or<strong>de</strong>n llegó. Alcanzaron a <strong>de</strong>spegar 3 aviones y nos or<strong>de</strong>naron regresar al aterrizaje. Quizás por haberse<br />

<strong>de</strong>sperdigado la cabeza <strong>de</strong> playa, o por la alta posibilidad <strong>de</strong> <strong>de</strong>rribo o por otras razones <strong>de</strong> comando que no<br />

llegaron a nuestro conocimiento. Lástima, era una misión a nuestra justa medida.<br />

Si bien no pudimos llevarla a cabo a partir <strong>de</strong> allí comenzamos a operar en las famosas (entre las tropas<br />

enemigas) misiones nocturnas que nos ganó el apodo <strong>de</strong> "Murciélagos". En sus dos variantes: las rasantes, don<strong>de</strong><br />

luchábamos contra la poca visibilidad, la meteorología, la tortuosa navegación, la temida proximidad al agua y<br />

obstáculos y la dificultad <strong>de</strong> encontrar el blanco. Naturalmente también contra las <strong>de</strong>fensas <strong>de</strong>l enemigo. Con la<br />

ventaja <strong>de</strong> ser sorpresiva y evitar los sistemas <strong>de</strong>fensivos <strong>de</strong> gran alcance.<br />

Y las nocturnas <strong>de</strong> altura que nos facilitaba mucho la navegación pero estábamos más expuestos a los misiles<br />

<strong>de</strong> fragatas.<br />

Así realizamos:<br />

BTR Nocturno San Carlos 8 salidas BTR= Bombar<strong>de</strong>o rasante.<br />

BTR Nocturno Darwin 2 salidas<br />

BTR Nocturno Monte Kent 3 salidas BOH= Bombar<strong>de</strong>o a gran altura.<br />

BOH Nocturno Monte Kent 9 salidas<br />

BTR/BOH Nocturno Oeste – Pto<br />

Argentino 12 salidas<br />

BTR Diurno Este – Pto. Argentino 6 salidas<br />

BTR Diurno Georgias 2 salidas<br />

Interdicción a buques 4 salidas Un hundimiento<br />

Exploración y Reconocimiento 5 salidas<br />

Fotoreconocimiento N. Is. Soledad 3 salidas<br />

Horas voladas: 395 Hs.<br />

Bombas lanzadas: 85.000 Lbs.<br />

Así regresamos, penetramos las <strong>de</strong>fensas <strong>de</strong>l enemigo, a veces a velocida<strong>de</strong>s irrisorias para cuidar el<br />

combustible y los tanques y los golpeamos muy duro.<br />

4 Fuerza Aérea Sur


Vale el testimonio <strong>de</strong>l Teniente LUCERO, que todos vimos en la filmación <strong>de</strong> la Fuerza Aérea al ser rescatado<br />

<strong>de</strong>l agua por los ingleses. Por aquellos días se hallaba internado en un hospital <strong>de</strong> campaña en San Carlos,<br />

cuando a la media noche uno <strong>de</strong> nuestros ataques hizo temblar con sus bombas toda la zona lo que ocasionó su<br />

evacuación inmediata para recibir, según le manifestaban Médicos Ingleses, gran cantidad <strong>de</strong> heridos y muertos<br />

(Quizá más <strong>de</strong> los que reconocieron en toda la guerra)<br />

Otro testimonio es el recogido por corresponsales extranjeros que indican que los bombar<strong>de</strong>os al Monte Kent<br />

(algunos relatados anteriormente) produjeron la <strong>de</strong>strucción <strong>de</strong> un vivac con tropas y gran cantidad <strong>de</strong> pertrechos<br />

bélicos, acopiados para la irrupción final a Puerto Argentino. La que aparentemente <strong>de</strong>bió postergarse y <strong>de</strong>rivó en<br />

el <strong>de</strong>sembarco <strong>de</strong> Bahía Agradable, que como sabemos fue muy "<strong>de</strong>sagradable" para ellos. Coinci<strong>de</strong>ntemente el<br />

Capitán PASTRAN, piloto <strong>de</strong>rribado <strong>de</strong> Canberra, fue interrogado insistentemente por la inteligencia enemiga<br />

sobre el sistema que utilizamos para apuntar con precisión y sin visibilidad, ya que en dos ocasiones batimos el<br />

puesto <strong>de</strong> comando.<br />

De las <strong>de</strong>claraciones recogidas informalmente <strong>de</strong> ex-prisioneros se corroboró el temor permanente <strong>de</strong> las<br />

tropas invasoras a los bombar<strong>de</strong>os nocturnos.<br />

Pasado el tiempo llegó a mis manos una revista Air-Pictorial, don<strong>de</strong> se publica un artículo <strong>de</strong> George BALDWIN,<br />

titulado: (Operaciones <strong>de</strong> SEA HARRIER en las Falklands", don<strong>de</strong> entre otras cosas enuncia: (lo encerrado entre<br />

paréntesis es <strong>de</strong> mi pluma con fines esclarecedores) "Al atar<strong>de</strong>cer (1° <strong>de</strong> mayo) 3 Canberras argentinos fueron<br />

avistados cerca <strong>de</strong> la flota (escuadrilla <strong>de</strong>l Capitán NOGUEIRA) con los radares <strong>de</strong> abordo y luego perdidos, pero el<br />

rumbo <strong>de</strong>l alejamiento fue tomado por un piquete (helicóptero con radar asociado al <strong>de</strong> una fragata) y pasado a<br />

una PAC (patrulla aérea <strong>de</strong> combate 2 Harrier vistos por la escuadrilla RUTA). Prontamente salieron en su busca<br />

los Harrier, que poco <strong>de</strong>spués hicieron contacto con los Canberras argentinos con sus radares Blue Fox<br />

(persiguiendo a la escuadrilla RUTA). (Casualmente dieron con nosotros que veníamos en trayectoria opuesta).<br />

Los Canberras volaban a 50 pies (error <strong>de</strong> apreciación ya que volábamos a mucho menor altura) y eyectaron<br />

sus bombas (incorrecto ya que eyectamos solamente los tanques <strong>de</strong> puntera y luego <strong>de</strong>l <strong>de</strong>rribo). El Teniente AL<br />

CURTÍS, que <strong>de</strong>spués murió disparó su Si<strong>de</strong>win<strong>de</strong>r y vio su blanco explotar (esto ocurrió antes <strong>de</strong> lo relatado en el<br />

párrafo anterior y el blanco no explotó); presto buscó el último Canberra dañado por otro Si<strong>de</strong>win<strong>de</strong>r disparado<br />

por el Teniente Comandante MIKE BRODWATER. (No nos <strong>de</strong>rribó porque volábamos a 2 metros <strong>de</strong>l agua, por la<br />

ruptura oportuna y por el lanzamiento <strong>de</strong> bengalas; aunque evi<strong>de</strong>ntemente <strong>de</strong>tonó bajo la panza <strong>de</strong> nuestro<br />

avión).<br />

Este avión escapó lo mismo que el otro Canberra . Pero se calcula que fue dañado e improbable que haya<br />

regresado a la base (en carta dirigida a los nombrados <strong>de</strong>stinatarios con todas las consi<strong>de</strong>raciones antes escritas<br />

agrego que doy fe <strong>de</strong> que ¡ sí regresamos a nuestra base y que lanzamos con posterioridad varias toneladas <strong>de</strong><br />

bombas sobre sus tropas !<br />

"AVIADORES, NAVEGANTES DÍA Y NOCHE CON RAZÓN BOMBARDEROS VOLAREMOS<br />

ESTELANDO HACIA EL SOL !


CAPITULO CAPITULO V<br />

V<br />

"CARTAS "CARTAS DE DE USTEDES"<br />

USTEDES"<br />

Día a día, con cada avión, nos llegaban toneladas <strong>de</strong> reservas morales en las cartas <strong>de</strong> uste<strong>de</strong>s; y <strong>de</strong>spués,<br />

cuando terminó la batalla, siguieron llegando. Aquí transcribo algunas <strong>de</strong> ellas, porque <strong>de</strong> alguna forma,<br />

participan <strong>de</strong> "su" libro, porque es <strong>de</strong> uste<strong>de</strong>s, como la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong>.<br />

RELATAN: RELATAN: Ciudadanos <strong>de</strong> mi Nación y hermanos Latinoamericanos y justos <strong>de</strong> corazón.<br />

Miguel MOTEZANTI: "hun<strong>de</strong> tu pie, Cruz Santa, en la turba sagrada <strong>de</strong> este suelo, para entibiar tu savia con la<br />

sangre, que late y que palpita en el silencio".<br />

Carlos María RODRÍGUEZ: ". . . Tanto los que quedaron velando nuestra soberanía en los territorios<br />

criminalmente usurpados por la piratería anglosajona, como por aquellos como uste<strong>de</strong>s, que están nuevamente<br />

entre nosotros y dispuestos a volver a aquel pedazo tan nuestro como el mismísimo gaucho."<br />

Teniente Primero (Fuerza Aérea Uruguaya) Alci<strong>de</strong>s Eduardo LUZURIAGA: "Quiero felicitar por su intermedio a<br />

todos sus queridos camaradas, quienes nos dieron un ejemplo claro a todos los aviadores <strong>de</strong> como <strong>de</strong>be ser<br />

nuestra vida y nuestra muerte, si la patria así lo requiere".<br />

Fulgencio LEZCANO: "Su libro es puro . . . como un avión, ("refiriéndose a DIOS Y LOS HALCONES")<br />

Eduardo Augusto CUROTTO: ". . . La miniatura que le envío es un homenaje para cumplir con sus camaradas<br />

<strong>de</strong>l arma; los <strong>Halcones</strong>, los Pilotos <strong>de</strong> Mirage, Pucará y como los nombro yo, los chanchitos, la tripulación <strong>de</strong> los<br />

Hércules, la chancha".<br />

Juan Carlos Benito BAIGORRIA: ".. . Pensando en Dios, la Patria y en nuestro hogar, hasta pronto".<br />

Carlos Arturo ARIAS: ".. . Estoy seguro <strong>de</strong> que fueron al combate felices <strong>de</strong> po<strong>de</strong>r ofrecer lo más preciado <strong>de</strong>l<br />

ser humano, la vida, por una causa justa".<br />

José Francisco ROBLES GORRITI (h): ".. . Hace dos semanas estuve en un retiro espiritual llamado "Jornada <strong>de</strong><br />

Vida Cristiana", en él he rezado y he prometido rezar más por las almas <strong>de</strong> nuestros hermanos Argentinos<br />

muertos en la gesta <strong>de</strong> Las <strong>Malvinas</strong>".<br />

Guillermo CRIADO COUCE (Madrid - ESPAÑA): ". . . Sólo pretendo transmitirle el sentimiento <strong>de</strong>l pueblo<br />

español, que siempre estuvo y estará incondicionalmente con el pueblo Argentino".<br />

Carlos CACCIA: ". . . Saludos, como dice Ignacio, a los amigos <strong>de</strong> la V Brigada Aérea y un abrazo que hoy, más<br />

que nunca, nos tiene que hermanar en momentos tan difíciles".<br />

Nélida B. G. <strong>de</strong> CRISTOFANO: ".. . (Discúlpeme querida señora que lo haga saber, pero le pue<strong>de</strong> servir a otra<br />

madre en igual situación). — "Soy una madre, a quien uste<strong>de</strong>s le han brindado la mejor lección que nunca había<br />

recibido en su vida; la <strong>de</strong> asumir con patriótica entereza, EL ORGULLO DE HABER OFRENDADO UN HIJO A LA<br />

PATRIA, (su hijo murió por nuestras Islas <strong>Malvinas</strong> en el Belgrano)."


Norberto Alfredo CURTÍ: (Jefe <strong>de</strong> la Agrupación SCOUT <strong>de</strong> Bariloche) ". . . Te adjunto una cartilla oficial <strong>de</strong> las<br />

oraciones <strong>de</strong>l presente año SCOUT. Con mi afectuoso saludo SCOUT. Siempre listó para servir".<br />

Eduardo Esteban BARENGO: ". . . Ser piloto, eso si que es cosa seria, a mi me hubiera gustado serlo, estudiar,<br />

recibirme, volar por primera vez solo". ... Por todos los Argentinos les doy las gracias.<br />

Juan José ALARCON (10 años): "Esta guerra ha sido una parte <strong>de</strong> la batalla, pero volveremos, volveremos para<br />

que que<strong>de</strong> habitada por los Argentinos; Argentinos en serio".<br />

Héctor Osvaldo GRANIERA: ".. .Espero que DELLEPIANE no se moleste, pero para mí es el "Piano" aquel que<br />

cuando atacaron la "Brilliant" y la "Broadsword", <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> salir <strong>de</strong>l ataque simplemente las insultó; Así nomás<br />

<strong>de</strong> sencillo ¡Ah! y la próxima ojo con los <strong>de</strong>pósitos auxiliares, que no se los <strong>de</strong>jé porque por ahí no anda cerca la<br />

Chancha y.. ."<br />

César LARRONDO: " Los i<strong>de</strong>ales son como las estrellas nunca las alcanzamos, pero sirven para guiarnos".<br />

Queridos <strong>Halcones</strong> <strong>de</strong>l Aire, "GRACIAS".<br />

Gendarme Jorge GARCÍA:"... En el día <strong>de</strong> la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong>, un abrazo y <strong>de</strong>seos <strong>de</strong> prosperidad y que<br />

por su intermedio llegue a todos sus camaradas <strong>de</strong>l arma".<br />

Mayor <strong>de</strong> la Fuerza Aérea Peruana Carlos PORTILLO VÁZQUEZ ".. . Hermoso ejemplo <strong>de</strong> abnegación y<br />

patriotismo que figura ya, en los anales <strong>de</strong> la historia <strong>de</strong> nuestra Patria como uno <strong>de</strong> los hechos gloriosos que<br />

perennizan el <strong>de</strong>safiante y consciente gesto <strong>de</strong> los jóvenes aviadores que, ante la alternativa; <strong>de</strong>spreciaron todo,<br />

aún sus propias vidas, lanzándose al espacio en aras <strong>de</strong> sus sagrados <strong>de</strong>seos".<br />

2do Sargento Néstor ANTUNES DE MAGALHAES (Arma <strong>de</strong> Infantería - Ejército Brasileño): "... Meu espirito e<br />

meu coracao estiveram ar<strong>de</strong>ntemente no lado <strong>de</strong> voces, naqueles dias trágicos <strong>de</strong> guerra no Atlántico Soul".<br />

Pierre CLOSTERMANN (Boulogne - Francia 18 <strong>de</strong> mayo <strong>de</strong> 1983): ". . . Merci encoré, et rediles a tous vos<br />

camaradas pilotos argentins que, petit a petit dans le mon<strong>de</strong> <strong>de</strong>s aviations militares, la verite commence a se<br />

faire jour et l'on red hommage a l'heroisme et a l'efficacite <strong>de</strong>s pilotos argentines".<br />

Marta Laura LUBIAN (una niña <strong>Argentina</strong>- 9 años): ". . . Le agra<strong>de</strong>zco por haber <strong>de</strong>fendido la Patria, nuestra<br />

Patria, con hambre y frío, día y noche, con ganas <strong>de</strong> vencer, pero también le agra<strong>de</strong>zco por brindarle momentos<br />

<strong>de</strong> felicidad a mi papá.<br />

Juan José ALARCON: P.D.: Hoy la profesora <strong>de</strong> Inglés; ¡ RENUNCIO !. Los muertos en combate están en los<br />

corazones <strong>de</strong> los Argentinos ¡Chau! Viva la Patria".<br />

Edhit CORVALAN <strong>de</strong> ROCHETTI: ". . . Quiero manifestarle nuestro agra<strong>de</strong>cimiento y orgullo a todos los héroes<br />

que regresaron y a todos los que no lo harán jamás".<br />

Elisa M. ASTURI: "... Los gráficos ayudarían mucho a meterse en el problema, a visualizar el riesgo, a admirar<br />

las tremendas GANAS que tenéis".<br />

Manuel Francisco PORCEL: ". . . Porque es fácil gritar Viva la Patria en la victoria, lo difícil es ser justo en la<br />

<strong>de</strong>rrota y como uste<strong>de</strong>s dicen, fue solo una batalla. Nuestra gloriosa Fuerza Aérea no pue<strong>de</strong> hablar <strong>de</strong> <strong>de</strong>rrota.<br />

Francisco Marcos CARBALLO: ". . . No puedo mezclar a quienes se quedaron en casita mirando combate, con<br />

un vaso <strong>de</strong>l mejor whisky en las manos, mientras hombres tenían en sus manos un FAL, el timón <strong>de</strong> un arriesgado


avión, poniendo en juego la vida, nada más ni nada menos. . . como habitante <strong>de</strong> este suelo estoy en <strong>de</strong>uda con<br />

todos aquellos que empuñaron una arma, no así con aquellos (creo que no todos) que nos hicieron <strong>de</strong> aquello un<br />

mundo <strong>de</strong> fantasía".<br />

Ing. Alberto A. PERTUSI: ". . . Nada se hace en la vida <strong>de</strong> casualidad y a las mejores acciones las producen<br />

siempre los mejores hombres, los más formados y los más cohesionados. En este sentido pensamos, ahora más<br />

que antes, que la actuación <strong>de</strong> nuestra querida Fuerza Aérea es y ha sido, la mejor <strong>de</strong>mostración <strong>de</strong> todo un<br />

estilo <strong>de</strong> vida Argentino, aquel mismo estilo que nos ha hecho <strong>de</strong>stacar en tantos campos <strong>de</strong> la vida <strong>de</strong>l hombre,<br />

no hace falta recordar a nuestros músicos, pintores, bailarines, científicos, maestros que cada día trascien<strong>de</strong>n<br />

nuestras fronteras".<br />

Claudio Aníbal José NIZZOTTI MÉNDEZ: ".. . Halcón, por todo lo que perdiste y ganaste en esta guerra, te pido<br />

que cuando estés "Colgando <strong>de</strong> las Nubes" (Volando), no te olvi<strong>de</strong>s que en tierra quedan muchos Argentinos que<br />

como yo están muy orgullosos <strong>de</strong> uste<strong>de</strong>s, los que están allí y los que nunca volvieron, pero que están en el<br />

corazón <strong>de</strong> todos nosotros. Ellos están en estos momentos <strong>de</strong> copilotos <strong>de</strong> uste<strong>de</strong>s. Halcón una batalla no es la<br />

guerra".<br />

Mirtha <strong>de</strong> LÓPEZ: (Esposa <strong>de</strong>l Teniente LÓPEZ, que murió en su A-4C, heroicamente en combate) ". . . Viudas<br />

que lloramos hijos sin padres, por una Patria mejor".<br />

Enrique R.G. MONIGLIANO: ". . . Si pretendió con 55 capítulos que no olvi<strong>de</strong>mos a los 55 caídos <strong>de</strong> la Fuerza<br />

Aérea, no le quepan dudas que lo ha logrado".<br />

Padre Carlos BUELA (Parroquia Nuestra Señora <strong>de</strong>l Rosario):<br />

". . . He comprendido el porque esa epopeya ha marcado como un sacramento a nuestra Patria, imprimiéndole<br />

un carácter imborrable". "Actuaron como quienes creen en la Resurrección !.. . y ciertamente que quien muere por<br />

la Patria muere Mártir <strong>de</strong> Dios, porque muere por el bien común, así como los que atentan contra él son mártires<br />

también, pero <strong>de</strong>l <strong>de</strong>monio".<br />

Presbítero Alberto Luis PEZZETTA (Parroquia Nuestra Señora <strong>de</strong>l Pilar): ". . . Gente que entrega su vida por<br />

algo, porque sabe para que la tiene, sabe que no es el valor supremo, sabe cual es el fin u objetivo final <strong>de</strong>l<br />

hombre sobre la tierra, llegar a Dios y le da lo mismo, objetivamente hablando, entrar <strong>de</strong> golpe en la otra vida o<br />

tener el tiempo suficiente para colocarla en el hueco <strong>de</strong> su mano y entregarla serenamente a Dios, porque está<br />

preparado tanto para lo uno, como para lo otro".<br />

Hermanos Argentinos, un abrazo <strong>de</strong> nosotros a uste<strong>de</strong>s en Cristo y María.


CAPITULO CAPITULO VI VI<br />

VI<br />

"VIVENCIAS "VIVENCIAS DE DE UN UN ARTILLERO"<br />

ARTILLERO"<br />

Mientras los aviones <strong>de</strong> la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong>, se enfrentaban en <strong>de</strong>sigual duelo a la tecnología<br />

colonialista; en la tierra, junto a su cañón, o su "fierro", como le llaman ellos, los artilleros <strong>de</strong> la Fuerza<br />

Aérea <strong>Argentina</strong>, unidos estrechamente a sus heroicos camaradas <strong>de</strong> la especialidad, <strong>de</strong>l Ejército<br />

Argentino; producían estragos en los Harriers ingleses, quienes tanto les temían y que no pudieron<br />

<strong>de</strong>struir la pista <strong>de</strong> Puerto Argentino, <strong>de</strong> más <strong>de</strong> 1.250 metros <strong>de</strong> longitud; mientras nuestros Caza-<br />

Bombar<strong>de</strong>ros se cansaban <strong>de</strong> impactar en las Fragatas <strong>de</strong> solo 120 metros.<br />

RELATA: RELATA: Cabo Primero RUIZ (Artillero <strong>de</strong> la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong>).<br />

El día 1° <strong>de</strong> mayo abrimos fuego ¡Por fin!, con nuestros cañones tras una larga espera.<br />

Era aproximadamente las 08:30 horas <strong>de</strong> la mañana cuando, gracias a la posición privilegiada que tenía<br />

nuestra Pieza (cañón), vimos que los Harriers iniciaban un ataque contra las instalaciones y la pista <strong>de</strong> Puerto<br />

Argentino.<br />

Al principio estaban lejos <strong>de</strong> la distancia en que es efectiva nuestra munición, pero en mi <strong>de</strong>sesperación por<br />

repeler el ataque, les tiraba igual. De pronto uno <strong>de</strong> ellos en su escape, ingresó en la zona <strong>de</strong> alcance <strong>de</strong> mi arma,<br />

pasando al costado <strong>de</strong> mi posición. Cuando comenzó a volar sobre el mar, abandonó el vuelo bajo y ascendió,<br />

apareciendo <strong>de</strong>s<strong>de</strong> atrás <strong>de</strong> una duna. En ese momento comenzó un viraje hacia nosotros, quedando en planta<br />

con la parte superior <strong>de</strong>l avión, o sea la cabina, hacia mi, lo puse en el centro <strong>de</strong> la mira, estaba tan cerca que<br />

ocupaba gran parte <strong>de</strong> ella. Le hice una ráfaga corta y vi que casi todos los proyectiles daban en el blanco;<br />

mientras tanto el Soldado PORCEL, <strong>de</strong> pie junto al cañón, le disparaba con su fusil FAL. Los trazantes hirieron el<br />

metal, arrojando <strong>de</strong>lgadas columnas <strong>de</strong> humo por los orificios <strong>de</strong> salida.<br />

Los Soldados comenzaron a gritar: ¡ ¡ ¡se cae, Cabo Primero!!! -mientras vetamos que el avión impactaba<br />

contra el agua y producía una especie <strong>de</strong> ebullición, semejante a la que se observa cuando sumergimos un hierro<br />

caliente en el agua. No vimos nada más.<br />

Siguieron sus ataques, cada vez más alejados y con mayor altura. Comenzaron a tirarnos "por sobre el<br />

hombro", como <strong>de</strong>cíamos nosotros, ya que lanzaban la bomba con altura, mientras iniciaban un ascenso, y luego<br />

se iban.<br />

Estábamos en la segunda quincena <strong>de</strong> mayo, era la mediatar<strong>de</strong>. Los Harriers continuaban bombar<strong>de</strong>ando sólo<br />

en altura, pues en vuelo bajo habían sufrido muchas bajas.


Vimos pasar a dos <strong>de</strong> ellos volando muy alto, <strong>de</strong>jando una estela tras <strong>de</strong> si, fuera <strong>de</strong> nuestro alcance. De<br />

pronto uno <strong>de</strong>jó <strong>de</strong> estelar, lo que significaba que había ascendido o <strong>de</strong>scendido. Súbitamente un Soldado gritó ¡ ¡<br />

¡Se está <strong>de</strong>scolgando <strong>de</strong>s<strong>de</strong> atrás <strong>de</strong> esa nube!!!<br />

- Lo vi y le apunté, tiré una ráfaga, quedó corta (explotó antes <strong>de</strong>l blanco), era <strong>de</strong>masiado pronto.<br />

La segunda vez que disparé hice una ráfaga más larga y me di cuenta <strong>de</strong> que le estaba pegando, por lo que<br />

seguí tirando; <strong>de</strong> pronto inició el ascenso apuntando con su nariz al cielo, mientras arrojaba sus bombas, las que<br />

cayeron muy cerca <strong>de</strong> mi posición; dos explotaron y una no. Cuando parecía que iba a caerse hacia atrás por falta<br />

<strong>de</strong> sustentación (sustentación: significa que el avión pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>slizarse en el aire, volar, sin caerse, sostenido por<br />

el empuje <strong>de</strong>l motor, la forma <strong>de</strong> la superficie <strong>de</strong> las alas y su propia velocidad) explotó en una llamarada roja con<br />

mucho humo y se <strong>de</strong>sintegró. Restos calcinados comenzaron a caer perezosamente, mientras una burbuja <strong>de</strong> aire<br />

caliente quedaba en el lugar don<strong>de</strong> antes había un avión.<br />

Mientras me recuperaba <strong>de</strong> la turbación provocada por el momento vivido, escuchaba, lejana la voz <strong>de</strong> un<br />

camarada <strong>de</strong> otro cañón que informaba a los gritos ¡ ¡ ¡ Jefe, Jefe, GATO 2 llama; el fierito 6 ha hecho un nuevo<br />

<strong>de</strong>rribo !!! (fierros se les llama a los cañones).<br />

Otro día, un Harrier eligió un mal lugar para hacer un paseo.<br />

Lo vimos pasar lateral a Puerto Argentino, a unos 3 o 4 kilómetros y 1.000 metros <strong>de</strong> altura.<br />

Una pieza <strong>de</strong> artillería <strong>de</strong>l Ejército Argentino le tiró e hizo impacto en su fuselaje.<br />

El piloto hizo todo al revés, en lugar <strong>de</strong> buscar vuelo rasante, ganó altura, con lo que ofreció más blanco y<br />

disminuyó su velocidad.<br />

Le siguieron pegando, vimos como "chorritos" <strong>de</strong> fuego que entraban en el aluminio.<br />

Se perdió en las nubes y pensamos que había escapado, pero pronto lo vimos aparecer cayendo en tirabuzón,<br />

con la tobera (lugar por don<strong>de</strong> salen los gases <strong>de</strong> escape) al rojo vivo; y poco <strong>de</strong>spués apareció el piloto, colgado<br />

<strong>de</strong> su paracaídas color naranja.<br />

El avión entró como una tromba en el agua, hubo un burbujeo y nada más.<br />

Uno <strong>de</strong> nuestros helicópteros <strong>de</strong>spegó para rescatar al piloto, el que aparentemente venía muerto, pues no se<br />

movía, pero <strong>de</strong>bió regresar por alerta roja. Una vez pasado el peligro, fueron el helicóptero y un Pucará a buscarlo,<br />

pero ya no estaba en superficie.<br />

Pero el día que quedó marcado a fuego en mi vida y revivo constantemente, fue el 1° <strong>de</strong> mayo, cuando<br />

comenzaron las hostilida<strong>de</strong>s y entré súbitamente en una guerra. Recuerdo que el Capitán DALVES, quien junto<br />

con el Capitán SAVOIA, recorrían continuamente las posiciones viendo que necesitábamos, se acercó al cañón <strong>de</strong>l<br />

Cabo Principal BARTIS, cuando un Harrier hizo un pasaje tirando con sus dos ametralladoras; inmediatamente el<br />

Soldado CLAUDIO VIANO, ascendido a Dragoneante por su comportamiento, tomó su fusil FAL y con mucho<br />

entusiasmo comenzó a tirarle al avión, mientras gritaba ¡¡¡Le veo los ojitos rojos al inglés!!!<br />

No eran los ojitos, eran las balas trazantes, que venían picando en el suelo y formando dos caminos <strong>de</strong><br />

muerte, los que milagrosamente pasaron a ambos lados <strong>de</strong>l soldado, y se perdieron <strong>de</strong>trás <strong>de</strong> él, sin hacerle el<br />

menor daño.<br />

Evi<strong>de</strong>ntemente, nació <strong>de</strong> nuevo.


A la tar<strong>de</strong>, y como fin <strong>de</strong> un día inolvidable, presencié en primera fila el ataque <strong>de</strong> los MIRAGE V "DAGGER" a<br />

tres fragatas que nos estaban cañoneando.<br />

A dos <strong>de</strong> ellas le pegaron, (a una la hirieron muy gravemente; no entiendo porqué nunca se habló <strong>de</strong> esa<br />

Fragata, ni se la dio como averiada o hundida, cuando yo la vi explotar y quedar totalmente cubierta <strong>de</strong> humo).<br />

Tres <strong>de</strong> nuestros halcones aparecieron sorpresivamente <strong>de</strong>s<strong>de</strong> atrás <strong>de</strong>l Faro, tan sorpresivamente que, <strong>de</strong><br />

acuerdo al relato <strong>de</strong>l Mayor "PICHO" FERNANDEZ, al Capitán BATIONI que no los vio venir, lo sorprendió el ruido <strong>de</strong><br />

los aviones que le pasaron medio metro arriba <strong>de</strong> la cabeza.<br />

Cuando entraron al mar, me parecía que en cualquier momento iban a comenzar a levantar agua por lo bajito<br />

que iban.<br />

Por muy poco no chocaron con dos helicópteros gringos que estaban corrigiendo el tiro <strong>de</strong> los buques.<br />

Luego vi como los proyectiles <strong>de</strong> sus cañones impactaban en las fragatas y como sus bombas entraban<br />

limpiamente en dos <strong>de</strong> ellas, a la tercera le erró el piloto.<br />

En la más cercana a la costa comenzó a salir humo y la otra explotó pero no se hundió.<br />

Posteriormente se comenzaron a alejar lentamente, con su soberbia y el reuma a cuesta, pues una iba<br />

visiblemente inclinada hacia un costado; (escorada) la que le pegó el "DAGGER" que iba a<strong>de</strong>lante.<br />

Quizás cuando se digan las verda<strong>de</strong>s sobre esta guerra, me llegue a enterar <strong>de</strong> su nombre.


CAPITULO CAPITULO VII<br />

VII<br />

24 24 HORAS. HORAS. SIN SIN SIN PARECER PARECER PARECER UN UN SIGLO<br />

SIGLO<br />

En la guerra <strong>de</strong>scubrimos que los resultados se obtienen con el trabajo <strong>de</strong> un equipo y no <strong>de</strong> los<br />

individualismos. En este relato recuerdo a todos los queridos y competentes Suboficiales <strong>de</strong> la Fuerza<br />

Aérea <strong>Argentina</strong>.<br />

RELATA: Suboficial Principal LUJAN (Tripulante <strong>de</strong> C-130 Hércules)<br />

Hoy es día 16 <strong>de</strong> Mayo <strong>de</strong> 1982, son las 16:00 horas, me encuentro en el dormitorio, la radio encendida<br />

escuchando música con el volumen bajo. El ronquido <strong>de</strong> mi compañero que duerme y los recuerdos que pasan<br />

por mi mente no me <strong>de</strong>jan dormir. Preparo dos tarjetas postales con el paisaje <strong>de</strong> <strong>Malvinas</strong>, para hacérsela llegar<br />

a gente amiga y me pongo a escribir. Observo el teléfono y recuerdo que hace aproximadamente 24 horas sonó<br />

su campanilla y en ese tiempo pasaron tantas cosas, vivimos tantas emociones que parece haber transcurrido<br />

mucho más. Ayer escuché la voz <strong>de</strong>l Cabo Principal RAMÍREZ que nos informó que en unos minutos pasarían a<br />

buscar nuestra tripulación <strong>de</strong>l Hércules. Su voz no era la misma que cuando nos veíamos en el comedor y<br />

recordábamos hechos y personajes <strong>de</strong>l <strong>de</strong>stino que compartíamos en el Edificio Cóndor, ya que él conocía<br />

realmente cual era el motivo <strong>de</strong> ese llamado.<br />

En esos momentos estaba recordando a mi hogar, a mi esposa, a mis pequeños hijos y a mi madre, ya que el<br />

día anterior nuestra tripulación tuvo <strong>de</strong>scanso y nos trasladaron por unas horas a Buenos Aires, don<strong>de</strong> el contacto<br />

con nuestros seres queridos nos dio más fuerzas para seguir a<strong>de</strong>lante, ya que ellos serán los here<strong>de</strong>ros <strong>de</strong><br />

nuestros objetivos.<br />

Al llegar al Aeropuerto nos comunican que nuestra misión era la <strong>de</strong> transportar a Puerto Argentino en un avión<br />

Hércules C-130 un cañón <strong>de</strong> 155 mm <strong>de</strong> calibre, <strong>de</strong> más <strong>de</strong> 12 metros <strong>de</strong> largo y aproximadamente 9.000<br />

kilogramos <strong>de</strong> peso, munición, pólvora, sacos <strong>de</strong> correspon<strong>de</strong>ncia, medicamentos, sangre, diarios y revistas,<br />

cargas varias que habían sido solicitadas con urgencia. Esto estaba cargado en el Hércules, <strong>de</strong>bido a que la<br />

noche anterior este avión trató <strong>de</strong> llegar a Puerto Argentino, pero por el accionar <strong>de</strong>l enemigo tuvo que regresar.<br />

A<strong>de</strong>más llevamos a personal <strong>de</strong> artilleros <strong>de</strong> ese cañón, con un perrito mascota.<br />

Sabíamos <strong>de</strong>l riesgo <strong>de</strong> la misión, pero también sabíamos que en las Islas nos esperaban y hacía falta este<br />

apoyo logístico; el cañón porque era imprescindible contar con una artillería en tierra <strong>de</strong> gran alcance, para no<br />

permitir que la armada enemiga continúe hostigando tan <strong>de</strong> cerca. Sabíamos que todo era importante, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la<br />

sangre y medicamentos que salvan vidas, hasta la humil<strong>de</strong> carta que fortalece las esperanzas.<br />

Así como el tono <strong>de</strong> voz <strong>de</strong> RAMÍREZ, era la <strong>de</strong>l conductor <strong>de</strong> la camioneta y la <strong>de</strong> aquellos que tenían contacto<br />

con nosotros en la partida llena <strong>de</strong> angustia, <strong>de</strong>l temor a lo que en poco tiempo podría pasar, que gracias a Dios<br />

no ocurrió.


Salimos con la tripulación fija, que veníamos volando <strong>de</strong>s<strong>de</strong> abril.<br />

Volábamos <strong>de</strong> noche a pocos metros <strong>de</strong>l agua, el Mayor BRUNO y el Vicecomodoro MORO al comando <strong>de</strong> la<br />

aeronave, el Mayor MALDONADO, navegador, haciendo cálculos <strong>de</strong> navegación y escape, que <strong>de</strong> acuerdo a la<br />

incursión <strong>de</strong>l enemigo daba los cambios <strong>de</strong> rumbos; el Cabo Principal FIGUEROA en su asiento <strong>de</strong> mecánico <strong>de</strong><br />

abordo, atento también al frente y controlando los distintos instrumentos; el Cabo Principal FRETES, Mecánico <strong>de</strong><br />

abordo, a modo <strong>de</strong> observador miraba hacia atrás arriba <strong>de</strong>l avión, utilizando el sectante a modo <strong>de</strong> periscopio, y<br />

los Suboficiales Principales DAVERIO y LUJAN quienes éramos los Operadores en ambos lados <strong>de</strong>l avión en las<br />

puertas <strong>de</strong> paracaidistas.<br />

Un artillero que llevábamos a bordo tenía mucho miedo, o mejor dicho tenía el mismo miedo que todos, pero<br />

se le notaba más; y nos manifestó que su <strong>de</strong>seo era llegar lo antes posible a <strong>de</strong>stino. Ya que así no estaría<br />

encerrado en el “toscano” <strong>de</strong> un avión, sin po<strong>de</strong>r <strong>de</strong>fen<strong>de</strong>rse ni atacar.<br />

Después <strong>de</strong> horas <strong>de</strong> tensión, con la ayuda y guía <strong>de</strong>l radar, esquivando los distintos obstáculos llegamos a<br />

Puerto Argentino, en la pista completamente oscura, con ínfimas señales que nos marcaban rumbo y dimensión.<br />

El aterrizaje fue bastante arriesgado, ya que a<strong>de</strong>más la pista estaba mimetizada.<br />

Parecía que no había nadie y <strong>de</strong> a poco comenzaron a aparecer por <strong>de</strong>trás <strong>de</strong>l avión.<br />

Los motores quedaron en marcha, girando sus hélices y así efectuamos la <strong>de</strong>scarga; Primero <strong>de</strong>spejamos la<br />

parte inferior <strong>de</strong>l cañón ya que todo lugar sobre el piso estaba cubierto <strong>de</strong> carga <strong>de</strong> todo tipo. Para bajar los<br />

proyectiles <strong>de</strong> 100 libras <strong>de</strong> este cañón sin la ayuda mecánica, la sacábamos <strong>de</strong> su embalaje y la tirábamos<br />

rodando por la rampa <strong>de</strong>l avión en forma acelerada, ya que corríamos el riesgo <strong>de</strong> ser atacados; en el apuro una<br />

<strong>de</strong> las bombas cayó pesadamente sobre el pié <strong>de</strong>recho <strong>de</strong> uno <strong>de</strong> nuestros tripulantes, reventando el borceguí y<br />

salvando sus huesos por la protección <strong>de</strong> acero que tienen en la puntera <strong>de</strong> los mismos, que quedó a la vista.<br />

Una vez <strong>de</strong>spejado el cañón y al querer bajarlo tuvimos un problema técnico con el guinche que se utiliza para<br />

este fin. Había que tomar una <strong>de</strong>cisión inmediata ya que no teníamos margen <strong>de</strong> tiempo para recurrir a otros<br />

elementos o ayuda.<br />

Uno <strong>de</strong> los tripulantes vio entre las sombras a un vehículo tipo Unimog, que en realidad era una ambulancia.<br />

Hicimos retroce<strong>de</strong>r el vehículo entrando por la rampa <strong>de</strong>l Hércules. Mientras realizábamos estas maniobras entre<br />

el ruido <strong>de</strong> las hélices, el combustible quemado que dificultaba la respiración e irritaba los ojos, sumado al temor<br />

lógico <strong>de</strong> la situación, este momento se tornaba infernal. Al tratar <strong>de</strong> enganchar el cañón en el acople trasero <strong>de</strong>l<br />

vehículo, surgió el inconveniente <strong>de</strong> que este último estaba más arriba y teníamos que levantarlo para trabarlo.<br />

Éramos varias personas que hacíamos fuerza y no lo lográbamos. Fue entonces cuando unos <strong>de</strong> nuestros<br />

tripulantes vio que abajo y al costado izquierdo <strong>de</strong> la rampa <strong>de</strong>l avión, había personas que miraban esta<br />

maniobra, unos sentados y otros apoyados entre sí sin colaborar, lo que lo alteró, gritándoles a voz en el cuello<br />

que vinieran a ayudarnos.<br />

Fue gran<strong>de</strong> la sorpresa cuando estos quisieron subir al avión, pues se trataba <strong>de</strong> heridos que <strong>de</strong>bíamos<br />

trasladar, que los <strong>de</strong>jaban junto a la entrada <strong>de</strong>l avión para que en caso <strong>de</strong> emergencia subieran sin per<strong>de</strong>r<br />

tiempo. Al ver este cuadro, quien les dijo que suban, con tono paternal, les pidió que se que<strong>de</strong>n en el lugar y que<br />

disculpen el error.<br />

Continuamos haciendo fuerza y lo pudimos enganchar.


Teníamos que sacarlo con mucho cuidado, porque <strong>de</strong> quedar cruzado en la rampa <strong>de</strong>l avión, o <strong>de</strong> golpear<br />

algún elemento <strong>de</strong>l mismo, corríamos el riesgo <strong>de</strong> quedarnos en la pista a merced <strong>de</strong> un ataque, perdiendo un<br />

avión y <strong>de</strong>jando inoperable la misma para otras misiones.<br />

Uno <strong>de</strong> los tripulantes, subido al estribo <strong>de</strong>l conductor, le <strong>de</strong>cía al mismo las maniobras a realizar,<br />

tranquilizándolo; ya que el joven soldado que manejaba jamás había hecho algo parecido.<br />

Este tripulante al recibir por largo tiempo el chorro <strong>de</strong>l motor <strong>de</strong>l avión, corrió vomitando hacia a<strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l<br />

Hércules, colocándose la máscara <strong>de</strong> oxígeno y llenando sus pulmones con el mismo.<br />

Sufríamos al ver salir semejante mole <strong>de</strong> acero <strong>de</strong> casi 12 metros <strong>de</strong> largo, que parecía un parto; con el<br />

consiguiente alivio al verlo rodar sobre la pista tirado por la ambulancia.<br />

De inmediato subió el personal herido, por sus medios quienes podían y ayudados quienes no, cerramos la<br />

puerta y rampa <strong>de</strong> carga <strong>de</strong>l avión.<br />

No había tiempo para armar asientos y acondicionar las camillas y aquellos que no las necesitaban se<br />

sentaron provisoriamente en el piso, siendo atados en la emergencia con una cinta <strong>de</strong> amarre a las argollas que<br />

están en la pared <strong>de</strong>l avión.<br />

Inmediatamente estábamos en el aire, volando con bruscas maniobras y rozando el agua, tensos hasta tener<br />

la seguridad que estábamos alejados <strong>de</strong> la zona <strong>de</strong> peligro.<br />

Al llegar al Continente sentimos gran alivio, alegría y emoción; aquellos que al partir nos miraban y trataban en<br />

forma rara, cambiaban su actitud.<br />

Des<strong>de</strong> que iniciamos nuestra carrera nos hablaban <strong>de</strong> Dios, Patria y Hogar, y en estos momentos límites es<br />

cuando salen a relucir <strong>de</strong> a<strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> uno estos principios, no solo pensando en uno mismo, sino en aquellos que<br />

hace unas horas recibieron lo que transportamos y continuaban allá, a los que trajimos que salieron <strong>de</strong> la<br />

pesadilla y a todo un país que está pendiente <strong>de</strong> nuestra responsabilidad.<br />

Dios en todo momento nos está acompañando, nuestra Patria también, porque por ella hacemos esto y Hogar,<br />

porqué las imágenes <strong>de</strong> nuestros seres queridos están siempre presente en nuestros recuerdos.<br />

Ya son las 17:20 y el teléfono aún no sonó, hasta que llamen voy a tratar <strong>de</strong> <strong>de</strong>scansar y soñar con la paz.


CAPITULO CAPITULO VIII<br />

VIII<br />

"LANZAMIENTO "LANZAMIENTO "LANZAMIENTO AEREO"<br />

AEREO"<br />

Hace un tiempo, podíamos ver en el cine o en la televisión, una película <strong>de</strong> propaganda, en la que se<br />

hacía lanzamiento <strong>de</strong> una camioneta <strong>de</strong> carga, arrastrada por un paracaídas, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el interior <strong>de</strong> un Avión<br />

Hércules C-130 <strong>de</strong> la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong>. Este es un lanzamiento semejante, pero <strong>de</strong> armas y<br />

pertrechos en la Base Aérea <strong>Militar</strong> "CÓNDOR", <strong>Malvinas</strong>.<br />

RELATA: RELATA: Vicecomodoro TRIBIANI (Navegador <strong>de</strong> Hércules), que realizó junto al entonces Comodoro<br />

OLEZZA el Primer Vuelo Transpolar en C-47 A-05, durante el año 1965). (Una versión <strong>de</strong>l DC-3)<br />

Hace 48 días que estoy operando en la zona <strong>de</strong> conflicto. Habiendo cumplimentado a la fecha diversos tipos<br />

<strong>de</strong> misiones entre las cuales se incluye traslado <strong>de</strong> personal y carga en general, armamento, munición, víveres,<br />

vehículos, evacuación <strong>de</strong> heridos, exploración lejana, reabastecimiento en vuelo, entre otros, no obstante el<br />

<strong>de</strong>stino nos tenía reservada una misión que en mi fuero más íntimo la reconocía por el alto grado <strong>de</strong> riesgo que<br />

entrañaba.<br />

La hoja <strong>de</strong> misión que nos entregó el jefe <strong>de</strong>l Grupo, reflejaba una tarea potencialmente realizable, cuya<br />

trascen<strong>de</strong>ncia e importancia <strong>de</strong>scontamos, ya que <strong>de</strong> concretarse, posibilitaría mantener la operación <strong>de</strong> una<br />

Base Aérea asediada por aire y mar durante casi tres semanas.<br />

HOJA HOJA DE DE MISIÓN:<br />

MISIÓN:<br />

Tarea: Tarea: Lanzamiento aéreo <strong>de</strong> carga.<br />

Zona Zona <strong>de</strong> <strong>de</strong> Lanzamiento: Lanzamiento: Darwin y Goose Green (Isla Soledad).<br />

Tripulación: Tripulación: Comandante: Mayor PALAZZI, Primer Piloto: Vicecomodoro SANCHOTENA: Navegador: Vicecomodoro<br />

TRIBIANI; Mecánicos: Suboficial Auxiliar ROMERO, Cabo Principal TORRES; Auxiliares <strong>de</strong> Carga: Suboficial Principal<br />

AREVALO, Suboficial Principal SÁNCHEZ.<br />

Fecha: Fecha: Fecha: 19 <strong>de</strong> mayo <strong>de</strong> 1982.<br />

Unidad Unidad Operativa: Operativa: Operativa: I Escuadrón <strong>de</strong>l Grupo I <strong>de</strong> Transporte.<br />

Las cosas estaban así planeadas. Debíamos <strong>de</strong> planificar los lanzamientos <strong>de</strong> manera <strong>de</strong> aprovechar las<br />

pocas ventajas en nuestro favor, la sorpresa entre ellas.<br />

En base a ello nos pusimos a planificar, ruta <strong>de</strong> acercamiento, altura <strong>de</strong> vuelo, procedimiento <strong>de</strong> escape, <strong>de</strong><br />

emergencia, etc.


Consi<strong>de</strong>rando que Puerto Darwin fue hasta ese momento el punto más castigado <strong>de</strong> la zona, con bombar<strong>de</strong>os<br />

continuos, punto probable <strong>de</strong> <strong>de</strong>sembarco, nudo <strong>de</strong> comunicaciones, base <strong>de</strong> la Fuerza Aérea (enemigo N o 1 <strong>de</strong><br />

los Británicos que bastante preocupados los tenía), era indudable que <strong>de</strong>bían tener, por lo menos bien<br />

controlados los movimientos, tanto aéreos como terrestres.<br />

Debíamos respetar la hora <strong>de</strong> lanzamiento, por estar coordinada con nuestras propias <strong>de</strong>fensas antiaéreas,<br />

los márgenes <strong>de</strong> sorpren<strong>de</strong>r o evitar ser <strong>de</strong>scubiertos por la inteligencia Británica, se estrechaban.<br />

Debíamos respetar la altura <strong>de</strong> lanzamiento (600 pies, ya que la técnica así lo exige), por lo que el<br />

ocultamiento a esa altura, volando casi cinco minutos por terreno llano, a 130 nudos <strong>de</strong> velocidad nos hacía<br />

vulnerables a la vista y al fuego enemigo.<br />

Estos eran parámetros inamovibles, que no podíamos modificar, ya que <strong>de</strong>bían ser respetados en un todo.<br />

Nos quedaba el análisis <strong>de</strong> la ruta <strong>de</strong> acercamiento, divididas en dos fases: la <strong>de</strong> navegación sobre el agua o<br />

<strong>de</strong> aproximación: y la navegación sobre las islas o <strong>de</strong> acercamiento y fase final.<br />

Para la primera en base a experiencia en vuelos anteriores <strong>de</strong>bíamos hacerlo en vuelo rasante a 50 pies 5 <strong>de</strong>l<br />

agua, con los inconvenientes lógicos <strong>de</strong> este tipo <strong>de</strong> vuelo, principalmente el empañamiento <strong>de</strong> los parabrisas por<br />

la humedad salina <strong>de</strong>l mar, que impedía toda visión pero con la gran ventaja <strong>de</strong> no ser captada por los radares<br />

enemigos.<br />

Para la segunda se eligieron dos rutas probables, <strong>de</strong>pendiendo <strong>de</strong> la meteorología <strong>de</strong> la zona a sobrevolar.<br />

Una directa, por la bahía Navidad, i<strong>de</strong>al pues era la más corta, existían elevaciones que nos ocultaban <strong>de</strong> la<br />

vista, terreno escarpado y cruzábamos <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> sobrevolar elevaciones <strong>de</strong> 1.800 pies, casi a 90° el canal que<br />

separa las dos islas, y llegábamos <strong>de</strong> inmediato al punto inicial <strong>de</strong> lanzamiento situado al sur <strong>de</strong> puerto Darwin.<br />

En el caso que la visibilidad y techo nos impidiera esta ruta, planificamos una más al sur, por la bahía <strong>de</strong> la<br />

Reina Carlotta, volar a lo largo <strong>de</strong>l canal, <strong>de</strong>jando puerto FOX a nuestra izquierda para llegar al punto inicial <strong>de</strong><br />

lanzamiento.<br />

Esta última ruta tenía el inconveniente que se volaba terreno llano a la entrada sur <strong>de</strong>l canal, normalmente<br />

patrullada por fuerzas navales y aéreas enemigas y resultaba seis minutos más larga que la anterior.<br />

Para las dos rutas, la altura <strong>de</strong> vuelo era <strong>de</strong> 50 pies, como máximo nuestra única arma <strong>de</strong> <strong>de</strong>fensa.<br />

La cruda realidad <strong>de</strong> la guerra me hizo compren<strong>de</strong>r que esta era la primera misión <strong>de</strong> lanzamiento <strong>de</strong> carga en<br />

combate y nosotros éramos los elegidos.<br />

Los innumerables entrenamientos efectuados en estos años, <strong>de</strong>bíamos ponerlos en práctica, ante un enemigo<br />

que indudablemente iba a impedirlo.<br />

Creo que sería oportuno en este relato, más o menos esquemático y <strong>de</strong>jando <strong>de</strong> lado todo lo que pue<strong>de</strong><br />

llamarse tecnicismo o profesionalismo, tratar con simpleza y sencillez, con palabras comunes, sin observar las<br />

normas <strong>de</strong> narración, pues no soy escritor, incógnitas, dilemas, dudas, temores, incertidumbres y por no <strong>de</strong>cir,<br />

azar y suerte a que está sometido un ser humano normal, que <strong>de</strong>be cumplir una misión <strong>de</strong> esta naturaleza.<br />

Debíamos cumplir la tarea, llegar al objetivo, efectuar el lanzamiento y regresar a casa.<br />

5 Dividida por tres y le dará la altura aproximada en metros.


Un simple juego <strong>de</strong>l gato y el ratón, con la única <strong>de</strong>sventaja que nosotros éramos el ratón, y a la luz <strong>de</strong>l día,<br />

con buena visibilidad, techo i<strong>de</strong>al para caer en la trampa y no con mucha velocidad frente a los medios aéreos<br />

enemigos.<br />

Planteadas así las cosas, <strong>de</strong>terminamos la hora <strong>de</strong> <strong>de</strong>spegue que fue fijada .. . antes <strong>de</strong> la hora <strong>de</strong><br />

lanzamiento.<br />

Se efectuó la reunión previa al vuelo, nuestros mecánicos HOMERO y TORRES, chequearon bien nuestro<br />

Hércules cargando el combustible necesario para X horas <strong>de</strong> vuelo, nuestros auxiliares <strong>de</strong> carga AREVALO y<br />

SÁNCHEZ alistaron la carga y chequearon todo el sistema <strong>de</strong> lanzamiento, se echó el último vistazo a las rutas <strong>de</strong><br />

aproximación y fundamentalmente a la <strong>de</strong> acercamiento, rogando que la nubosidad remanente en las Islas nos<br />

permitiera volar la primera alternativa y nos fuimos al avión.<br />

Faltan treinta minutos para el <strong>de</strong>spegue, a sus puestos, chequeamos nuestros chalecos salvavidas, rol <strong>de</strong><br />

emergencia, amerizaje, abandono <strong>de</strong>l avión en tierra o en mar y ...<br />

Pero hay un <strong>de</strong>talle que nos resultó extraño; no existió el tradicional apretón <strong>de</strong> manos con <strong>de</strong>seos <strong>de</strong> buena<br />

suerte <strong>de</strong>l Jefe <strong>de</strong>l Grupo, con que <strong>de</strong>spedía siempre a todas las tripulaciones antes <strong>de</strong> cada vuelo, y en esos<br />

pensamientos estábamos cuando el auxiliar <strong>de</strong> tierra dice:<br />

— ¡ Libre el tres !...<br />

Y a partir <strong>de</strong> ese momento nos <strong>de</strong>dicamos exclusivamente a la tarea específica <strong>de</strong> cada tripulante,<br />

aislándonos <strong>de</strong> los que nos ro<strong>de</strong>aban.<br />

— ¡ Girando el tres! (contesta el piloto) luego el 4, el 2 y 1. Cuatro motores en marcha, régimen normal, sin<br />

novedad.<br />

— ¡ Puertas cerradas !<br />

— ¡ Carreteo ! — posición <strong>de</strong> cabecera.<br />

— ¡ Faltan dos minutos para el <strong>de</strong>spegue ! — advierto — <strong>de</strong>spegue.<br />

La "Chancha" se eleva pesadamente prendida <strong>de</strong> sus motores con sus 155.000 Lbs. a cuestas y en sus<br />

entrañas 16 toneladas <strong>de</strong> esperanzas para esos Argentinos que están resistiendo hace diecinueve días el asedio<br />

enemigo.<br />

Eran las X horas.<br />

Atrás quedó la pista y en ella todas las incógnitas, dudas y temores.<br />

De aquí en más, un solo objetivo: llegar a la zona <strong>de</strong> lanzamiento; una sola i<strong>de</strong>a: efectuar el lanzamiento, un<br />

sólo <strong>de</strong>seo: volver con la misión cumplida, listos para la próxima.<br />

Allí al frente el mar, más allá las Islas y envolviendo todo nuestra tarea propiamente dicha, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> seguir<br />

rutas <strong>de</strong> diversión nos internamos <strong>de</strong>cididamente rumbo al objetivo a volar sobre el mar a 50 pies (15 mts.).<br />

— Navegador a Piloto: rumbo 076 grados, velocidad 230 nudos, <strong>de</strong>scienda y mantenga 50 pies <strong>de</strong> altura.<br />

En ese momento dirigí la vista al puesto <strong>de</strong>l mecánico y vi la cara <strong>de</strong> satisfacción <strong>de</strong>l "Cucú", (no le gustaba<br />

volar a más <strong>de</strong> 100 pies <strong>de</strong> altura y noté un gesto <strong>de</strong> aprobación).<br />

Volábamos en rumbo <strong>de</strong> aproximación, eran las X hs, estábamos a 10 minutos <strong>de</strong>l punto <strong>de</strong> chequeo <strong>de</strong><br />

navegación, y a 30 <strong>de</strong> la hora <strong>de</strong> lanzamiento don<strong>de</strong> iniciáramos rutas <strong>de</strong> diversión para evitar que por nuestro<br />

rumbo <strong>de</strong>terminaran nuestro <strong>de</strong>stino.


Parabrisas empañados, bruma sobre la superficie <strong>de</strong>l mar, silencio <strong>de</strong> radios, silencio <strong>de</strong> voces, silencio <strong>de</strong><br />

todo, los únicos que hablaban eran los motores y nuestros pensamientos ... ¡ ¡ ¡ Qué pensamientos !!!<br />

De repente una voz, la mía que instintivamente dice: — Chequeo <strong>de</strong> 20 minutos afuera — (significa efectuar<br />

una serie <strong>de</strong> tareas pues nos encontrábamos a 20 minutos <strong>de</strong>l lanzamiento), los pensamientos <strong>de</strong>saparecen,<br />

todos se acomodan en sus asientos, los auxiliares preparan la carga, los mecánicos miran todo el panel <strong>de</strong><br />

instrumentos que ajustan aún más los cinturones <strong>de</strong> seguridad, la modorra se va; chequear los últimos datos <strong>de</strong><br />

lanzamiento, trato <strong>de</strong> i<strong>de</strong>ntificar las Islas que se comienzan a vislumbrar en el horizonte, estamos muy abajo,<br />

estoy atrasado o a<strong>de</strong>lantado, <strong>de</strong>splazado a la izquierda o a la <strong>de</strong>recha <strong>de</strong> la ruta, (confieso que me asaltan ciertas<br />

dudas).<br />

A ver, a ver, allí está la Isla con forma <strong>de</strong> gancho, ¡ estoy en ruta!, lo compruebo por radar, estoy en tiempo,<br />

pero ¡qué alta es! no la imaginaba así, la hacía más plana, <strong>de</strong>bo ro<strong>de</strong>arla, por la izquierda, por la <strong>de</strong>recha, no, por<br />

la izquierda, no, no, que veo, algunos caseríos, ya es tar<strong>de</strong>, le había dado el nuevo rumbo al piloto y allí íbamos,<br />

otro viraje a la <strong>de</strong>recha ... no, no tan escarpado que estamos muy bajos, ¡ Qué costas altas y cortadas a pico !,<br />

pues nos alegramos porque era una <strong>de</strong>fensa con la vista. Quedé sorprendido porque era la primera vez que veía<br />

las Islas <strong>de</strong> día, pues siempre lo hice <strong>de</strong> noche.<br />

Nuevamente la ruta, pero el caserío que pasamos, ¿no nos habrán <strong>de</strong>tectado?, viraje a la izquierda, aún<br />

volamos sobre el agua, buscamos <strong>de</strong>sesperadamente la entrada <strong>de</strong>l canal Navidad, bor<strong>de</strong>amos la la<strong>de</strong>ra <strong>de</strong> 600<br />

pies <strong>de</strong> altura, estamos aún lejos para <strong>de</strong>finirlos y estar seguros, una capa <strong>de</strong> nubes cubre la parte superior <strong>de</strong><br />

elevaciones, abajo, buena visibilidad.<br />

Nos acercamos más, distinguimos mejor la costa, allí el estrecho al frente, parece que está con techo alto,<br />

podremos pasar... ¡Ojo! — le digo al piloto, una vez a<strong>de</strong>ntro, el terreno sube pues <strong>de</strong>jamos el mar y sin visibilidad<br />

<strong>de</strong>bemos subir y quedar expuestos a ser <strong>de</strong>scubiertos, por las dudas rumbo <strong>de</strong> escape 210° a la <strong>de</strong>recha, para<br />

tomar la ruta <strong>de</strong> alternativa.<br />

Estamos a 5 millas y se ven perfectamente las la<strong>de</strong>ras, techo suficiente, visibilidad horizontal buena,<br />

seguimos a<strong>de</strong>lante, se va aclarando el panorama, el primer inconveniente superado.<br />

Volvemos pegados al terreno, subiendo y bajando colinas, dibujando el terreno, ovejas que corren, cruzamos<br />

caseríos, casas, establos, campesinos con azadas al hombro, extrañados por la inmensa mole tan cerca <strong>de</strong> sus<br />

cabezas, sembradíos, chequeo <strong>de</strong> 10 afuera, se siguen completando las tareas. Piloto — Navegador, cambio <strong>de</strong><br />

rumbo, llegaremos a una zona <strong>de</strong> altas la<strong>de</strong>ras (1.800 pies <strong>de</strong> altura), <strong>de</strong>l otro lado está el canal, tiene que<br />

largarse abajo lo más rápido que se pueda.<br />

Llegamos, son las X hs. Al frente, un cordón <strong>de</strong> afiladas puntas <strong>de</strong> rocas <strong>de</strong>snudas y que corre <strong>de</strong> sur a norte y<br />

forman la pared oeste <strong>de</strong>l canal. Impresionan, parecen que quieren raspar la panza <strong>de</strong> la "Chancha" y <strong>de</strong> repente<br />

todo flota en el aire, me siento liviano, es que Palazzi, lo hizo como todos queríamos, aunque nos sentimos<br />

incómodos por las maniobras.. . lanzó la Chancha hacia abajo con todo, buscando la proyección <strong>de</strong> los 30 pies <strong>de</strong><br />

altura sobre el agua <strong>de</strong>l canal, todo sereno, mar sereno, avión sereno, susurro <strong>de</strong> motores, ninguna alerta <strong>de</strong><br />

radio, todo normal y controlado, pero una visión nos hizo volver a la cruda realidad: a nuestra <strong>de</strong>recha los<br />

<strong>de</strong>spojos cadavéricos e incendiados <strong>de</strong>l "Carcarañá" nos estrujó el corazón, no podíamos <strong>de</strong>dicarle más que un<br />

pensamiento, estábamos a 7 minutos <strong>de</strong> la zona <strong>de</strong> lanzamiento y a 2 minutos <strong>de</strong>l punto inicial.


Pero . . . cómo andábamos con respecto a la hora <strong>de</strong> lanzamiento??, miro mi reloj y el muy canalla me dice:<br />

"Faltan 13 minutos para la hora y estamos a 7 <strong>de</strong> la zona vamos a<strong>de</strong>lantados 6 minutos: ¿por qué?.<br />

Muy sencillo, mis cálculos <strong>de</strong> tiempo <strong>de</strong> vuelo estaban previstos para la ruta más larga y hemos recorrido la<br />

más corta; <strong>de</strong>bía per<strong>de</strong>r esos 6 minutos, estábamos muy cerca <strong>de</strong>l punto final, allí nos dimos recién cuenta, que a<br />

bordo iba otra persona que por ser compañero <strong>de</strong> promoción estoy inhibido <strong>de</strong> hablar, que nos dice en voz<br />

incomprensible: "La hora <strong>de</strong> lanzamiento se cumple exactamente, sin diferencia <strong>de</strong> segundos".<br />

Nuestro Jefe <strong>de</strong> Grupo I <strong>de</strong> Transporte había hablado.<br />

El señor Comodoro Jorge MARTÍNEZ, que silenciosa y profesionalmente había estado observando<br />

<strong>de</strong>talladamente toda la operación, y que con su oportunismo y parquedad intervino en el momento justo y<br />

a<strong>de</strong>cuado, or<strong>de</strong>nando lo necesario <strong>de</strong> acuerdo a las circunstancias. Allí comprendimos porqué no nos había<br />

<strong>de</strong>spedido, ¡EL VENIA A BORDO!.<br />

Piloto - Navegador, giro <strong>de</strong> 360° por la <strong>de</strong>recha, ¡¡ YA !!<br />

Iniciamos el giro en el lugar más crítico <strong>de</strong> la navegación, a sólo 22 km <strong>de</strong> la zona <strong>de</strong> lanzamiento; el giro que<br />

tardó más tiempo en todo el vuelo, 6 minutos interminables, eternos. . .<br />

Chequeo 1 minuto afuera, zona <strong>de</strong> lanzamiento recorrida, "Luz Ver<strong>de</strong>" carga afuera, salida normal, paracaídas<br />

abiertos.... mantenga el rumbo y velocidad, carga en tierra sin novedad . . ., mantenga rumbo y velocidad 140,<br />

rumbo a las la<strong>de</strong>ras altas al frente, rampa cerrada, abajo, abajo 50 pies, por la izquierda rumbo 310°, más abajo,<br />

más abajo, más a la izquierda, velocidad 230 kilómetros, <strong>de</strong>le canela, no se preocupe, al frente hay agua, <strong>de</strong>le<br />

canela, más abajo es el canal, ya estamos, la visibilidad se reduce, ahora rumbo 010° por la <strong>de</strong>recha, si ve la<br />

costa izquierda péguese a la costa, volamos pegados al agua, son altas las montañas <strong>de</strong> la izquierda, y nos<br />

protegen <strong>de</strong> las vistas enemigas, a nuestra <strong>de</strong>recha el Puerto <strong>de</strong> San Carlos, vamos en busca <strong>de</strong> la salida norte<br />

<strong>de</strong>l canal, como quien ascien<strong>de</strong> <strong>de</strong>l fondo <strong>de</strong>l mar a la superficie en busca <strong>de</strong> aire.<br />

Péguese más a la costa, ojo que el estrecho se cierra y es <strong>de</strong> 5 kilómetros <strong>de</strong> ancho, tiene elevaciones a<br />

ambos costados.<br />

Las pue<strong>de</strong> ver, allí están, un poco a la <strong>de</strong>recha, rumbo 030°, así está bien, ya estamos pasando, ojo a la<br />

altura, vamos muy abajo, mire el radio-altímetro, indica 20 pies, ¡ ojo ! al frente hay riscos <strong>de</strong> 130 pies <strong>de</strong> altura.<br />

Todo bien, estamos en la bahía, vaya girando lentamente hacia rumbo 330° por izquierda, la inclinación <strong>de</strong><br />

los planos, acuér<strong>de</strong>se <strong>de</strong> las prácticas en el Golfo San Jorge, y <strong>de</strong>le "Marmita" (motor) ya estamos en mar abierto<br />

rumbo a casa.<br />

Todo es silencio, todavía faltan 30 minutos para <strong>de</strong>jar atrás todas las estribaciones <strong>de</strong> la Isla Soledad, que<br />

inicialmente cruzamos por el sur y bor<strong>de</strong>amos por el norte, una que otra sonrisa se va dibujando en los rostros,<br />

empezamos a relajarnos, a cambiar <strong>de</strong> posición a aflojarnos un poco los arneses <strong>de</strong> asiento, se encien<strong>de</strong>n varios<br />

cigarrillos, hay palmadas y un grito al unísono...<br />

"LO CONSEGUIMOS, EL PRIMER LANZAMIENTO DE CARGA REAL EN ZONA DE COMBATE"<br />

Quedaban atrás 13 años y 8 meses <strong>de</strong> la primera vez que había dicho "Green Light", si, así en idioma sajón, en<br />

una Base <strong>de</strong> entrenamiento, con la diferencia que hoy digo: "Luz Ver<strong>de</strong>" en <strong>de</strong>fensa <strong>de</strong> mi Patria.<br />

Lo <strong>de</strong>más fue rutina, aterrizaje a las X hs., <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> X horas <strong>de</strong> vuelo, comentarios, críticas, algunas fotos,<br />

felicitaciones, a <strong>de</strong>scansar y estar listos para la próxima, el día <strong>de</strong> mañana.


CAPITULO CAPITULO IX<br />

IX<br />

EL EL "TORNO" "TORNO" EN EN ACCIÓN<br />

ACCIÓN<br />

El 21 <strong>de</strong> Mayo, numerosos buques ingleses fueron alcanzados por la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong>. Allí se<br />

llenaron <strong>de</strong> gloria los pilotos <strong>de</strong> MIRAGE V "DAGGER", que registraron para la historia a las fragatas en sus<br />

filmadoras.<br />

RELATA: RELATA: Capitán DIMEGLIO (Piloto <strong>de</strong> Mirage V "DAGGER").<br />

21 <strong>de</strong> Mayo <strong>de</strong> 1982.<br />

Se inició la alerta (estar listos para salir en misión <strong>de</strong> combate) muy temprano esa mañana. El Escuadrón se<br />

reunió en la Sala <strong>de</strong> Pilotos, recibiendo la información meteorológica, las últimas recomendaciones y masticando<br />

nerviosismo. El estado <strong>de</strong> ánimo era bueno, pero la inactividad a que nos tenía obligado el mal tiempo en esos<br />

últimos días y el alejamiento <strong>de</strong> la flota <strong>de</strong> nuestro alcance, hacía que todos buscasen algo que hacer, para no<br />

pensar <strong>de</strong>masiado.<br />

Llegó el buen tiempo y la primera misión <strong>de</strong> ese larguísimo y glorioso día, en que algunos <strong>de</strong> nosotros<br />

quedaron, pero ellos nos conocieron, ¡ y muy bien !.<br />

Debíamos salir seis aviones, separados <strong>de</strong> a tres, para atacar cuatro buques ingleses que se encontraban en<br />

el Estrecho San Carlos, a la altura <strong>de</strong>l puerto <strong>de</strong>l mismo nombre.<br />

La mañana era <strong>de</strong> mucho sol y poco viento en nuestra base <strong>de</strong> asiento, cosa no muy común en la Patagonia.<br />

Trazamos la navegación, previendo llegar al rasante (vuelo cerca <strong>de</strong>l agua), próximos a la "Isla Salvaje" y <strong>de</strong>s<strong>de</strong><br />

allí iniciamos en línea recta hacia las fragatas.<br />

Nuestros aviones esperaban en la plataforma, con los cañones (ametralladoras pesadas) repletos <strong>de</strong> munición<br />

y pendiendo como racimos, los tanques <strong>de</strong> combustible y las bombas.<br />

Los pilotos que no volaban, colaboraron con nosotros para ayudarnos a colocarnos el equipo, lo que es todo<br />

un ritual y lleva su tiempo; primero el "osito" <strong>de</strong> abrigo, luego el traje antiexposición, <strong>de</strong>spués el anti "G" (traje que<br />

se infla automáticamente y ayuda a soportar las tremendas aceleraciones que se aplican en el combate) a<br />

continuación los arneses y por último el chaleco salvavidas con el equipo <strong>de</strong> supervivencia, lo que en conjunto<br />

tiene consi<strong>de</strong>rable peso.<br />

Tomamos la cartera <strong>de</strong> navegación, y ¡a no olvidarse el casco <strong>de</strong> vuelo y la máscara <strong>de</strong> oxígeno!<br />

Un último abrazo a los que nos <strong>de</strong>spi<strong>de</strong>n y nos introducimos en la estrecha cabina, similar a la <strong>de</strong> un coche<br />

fórmula 1.<br />

Poco antes <strong>de</strong> la 10:00 horas, en que <strong>de</strong>bíamos <strong>de</strong>spegar, pusimos en marcha. El motor <strong>de</strong>l Primer Teniente<br />

SENN no arrancó por lo que quedó <strong>de</strong> alerta para las misiones <strong>de</strong> la tar<strong>de</strong> y, cosas <strong>de</strong>l <strong>de</strong>stino, fue interceptado y<br />

<strong>de</strong>rribado por un Harrier, salvando su vida, gracias a Dios.


Como numeral dos volaba el Teniente D. Carlos Julio CASTILLO, quién había sido mi alumno <strong>de</strong> vuelo y tenía<br />

muy poca experiencia en Mirage V, la que suplía con sus condiciones innatas, su valor y espíritu <strong>de</strong> combate.<br />

Volábamos a la par, distanciados lo que la visibilidad lateral nos permitía ir buscando por todo el cielo a<br />

probables enemigos. Cruzamos ese interminable tramo <strong>de</strong> mar hostil y solitario; llegamos a las Islas y ajustamos<br />

nuestro rasante a la menor altura que podíamos. Ahora íbamos a tan sólo 30 metros entre avión y avión, a una<br />

velocidad cercana a la <strong>de</strong>l sonido. Transcurridos unos minutos, llegamos a las ca<strong>de</strong>nas <strong>de</strong> montes que limitan al<br />

oeste el estrecho San Carlos. Luego <strong>de</strong> cruzarlo, perdimos la protección <strong>de</strong>l acantilado, al caer abruptamente este<br />

hacia las aguas <strong>de</strong>l estrecho.<br />

En ese momento se presentó ante nuestros ojos un espectáculo imborrable: En las aguas había no menos <strong>de</strong><br />

8 buques ingleses.<br />

Dios puso su mano, pues <strong>de</strong>lante nuestro y a no mucha distancia se encontraba uno <strong>de</strong> ellos, que estaba <strong>de</strong><br />

tres cuartos <strong>de</strong> popa (o sea <strong>de</strong>s<strong>de</strong> un costado trasero). Esto significaba que por la distancia no tendrían tiempo <strong>de</strong><br />

usar sus misiles y tampoco el cañón que llevaba en la proa,<br />

Recién entonces rompimos el silencio <strong>de</strong> radio y con fuertes gritos nos dimos ánimo para el ataque con<br />

palabras muy poco elegantes hacia los atacados.<br />

Sin dudarlo, nos pegamos al agua y buscando velocidad, lográndose una sorpresa total.<br />

Al estar a distancia <strong>de</strong> cañones (ametralladoras <strong>de</strong> baja ca<strong>de</strong>ncia y gran po<strong>de</strong>r) hicimos fuego apuntando a la<br />

super estructura (parte superior) y antenas <strong>de</strong> radares que giraban perezosamente.<br />

Se veía una estela <strong>de</strong> estrellas amarillas y rojas que pegaban en el blanco, y cuando llegaban a este se<br />

cruzaban formando una telaraña luminosa.<br />

El tiempo que tardamos en llegar a la distancia <strong>de</strong>l lanzamiento <strong>de</strong> las bombas me pareció interminable pero<br />

llegó, las lanzamos con su espoleta retardada, pasamos sobre las antenas y <strong>de</strong> inmediato, haciendo uso <strong>de</strong> toda<br />

la potencia <strong>de</strong> nuestros aviones, realizamos un viraje cerrado por nuestra <strong>de</strong>recha, buscando la Gran Malvina.<br />

En ese momento mi avión comenzó a tener una pequeña vibración y al mirar el velocímetro me di cuenta que<br />

estaba volando al bor<strong>de</strong> <strong>de</strong> la barrera <strong>de</strong>l sonido.<br />

Llamé ansiosamente por la radio y escuché con alegría que habíamos salido los dos sin problemas.<br />

Cuando volvimos rasantes nos cruzamos con los otros tres, los "Perros", que volaban hacia el mismo blanco y<br />

le anticipamos lo que le esperaba, citándonos para festejar a su regreso.<br />

Según la filmación que obtuvimos, se pudo <strong>de</strong>terminar que el objetivo era un crucero <strong>de</strong>l tipo "County", el cual<br />

recibió una gran cantidad <strong>de</strong> impactos <strong>de</strong> cañones y muy probablemente las bombas, cuya explosión no pudimos<br />

ver por las espoletas <strong>de</strong> retardo. (Estas espoletas permitían pasar a los aviones antes <strong>de</strong> que estallen las<br />

bombas, para que no sean <strong>de</strong>struidos por la onda expansiva <strong>de</strong> las mismas).<br />

En tierra nos confundimos en un emocionado abrazo con el personal <strong>de</strong> mecánicos, técnicos, pilotos y <strong>de</strong>más<br />

integrantes <strong>de</strong> la base.<br />

Luego, fuimos a colaborar con aquellos que salían en las misiones <strong>de</strong> la tar<strong>de</strong>, <strong>de</strong> ese 21 <strong>de</strong> Mayo.<br />

El Teniente D. Carlos Julio CASTILLO, caería en una misión similar el día 24 <strong>de</strong> Mayo <strong>de</strong> 1982, al ser<br />

interceptada su escuadrilla por aviones Harriers, quienes con sus misiles <strong>de</strong> origen norteamericano, lo <strong>de</strong>rribaron<br />

en las proximida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> la Isla Borbón.


Tenía 25 años <strong>de</strong> edad, era casado y su esposa esperaba un bebé que nació el 25 <strong>de</strong> Julio <strong>de</strong> 1982 y recibió<br />

el nombre <strong>de</strong> Claudio.<br />

Dios lo tenga junto a él y los Argentinos no olvi<strong>de</strong>n a éste, como tantos otros ejemplos <strong>de</strong> heroísmo.


CAPITULO CAPITULO X<br />

X<br />

"GRUPO "GRUPO DE DE OPERACIONES OPERACIONES ESPECIALES"<br />

ESPECIALES"<br />

Son los Comandos <strong>de</strong> la Fuerza Aérea, especialistas en paracaidismo, buceo táctico, tiro, resistencia<br />

física, entrenados para realizar difíciles misiones en las líneas enemigas, con pequeños grupos <strong>de</strong><br />

hombres. Para nosotros son simplemente "los come vidrio" por sus costumbres <strong>de</strong> disfrutar <strong>de</strong>l peligro, las<br />

privaciones y todo lo que sea sufrimiento físico.<br />

RELATA: RELATA: Primer Teniente SPADANO (Miembro <strong>de</strong>l G.O.E.)<br />

La actividad inusitada en nuestra Base nos indicaba que algo no era normal, que pronto viviríamos algo<br />

"gordo" y nuestro instinto no falló.<br />

En una sala había una mesa <strong>de</strong> arena, con la maqueta <strong>de</strong> una pista en una península, ro<strong>de</strong>ada <strong>de</strong> costas<br />

agrestes y agua. El "Taño", por las dudas, consiguió una ban<strong>de</strong>rita <strong>Argentina</strong> y se la colocó, quedaba muy bien.<br />

El 29 <strong>de</strong> Marzo nos reunieron y nuestro Jefe dijo simplemente. Esto no es un ejercicio, <strong>de</strong>beremos participar<br />

<strong>de</strong>l Operativo ...<br />

Acuartelamiento, un viajecito mental hacia la familia y a preparar el equipo.<br />

Suspendieron el 24 la misión, pero a las 21:00 hs. <strong>de</strong>l día 30 estábamos embarcados, bajo la triste mirada <strong>de</strong><br />

quienes no habían sido elegidos para participar.<br />

De entre las sombras escuché el grito <strong>de</strong> ¡ FUERZA GOE, CON TODO !<br />

Llegamos a nuestra Base <strong>de</strong> re<strong>de</strong>spliegue y enseguida me alcanzaron el primer mate . . . ¿por qué el mate?,<br />

seguramente por los nervios.<br />

A las 05,00 horas <strong>de</strong> la mañana <strong>de</strong>spegamos en un Hércules C-130 al mando <strong>de</strong>l Comodoro BELTRAMONE<br />

hacia <strong>Malvinas</strong>, el viaje se hizo en un pesado silencio, luego vueltas y más vueltas, cerca <strong>de</strong> Puerto Argentino.<br />

Escuchamos por el parlante <strong>de</strong>l avión — ¡ No po<strong>de</strong>mos aterrizar, se está combatiendo en el Aeropuerto, no han<br />

encendido las balizas (como estaba previsto); hay una ametralladora 12,70 <strong>de</strong> ellos en la cabecera <strong>de</strong> pista !<br />

Luego — ¡Atentos que ahí vamos; tomar los dispositivos <strong>de</strong> combate, Suboficial BARROS, cubra puerta<br />

<strong>de</strong>recha, Suboficial MARTÍNEZ la izquierda!<br />

— "ABRIR puertas y plataforma, atentos con la ametralladora <strong>de</strong> la cabecera, preparado el GOE para el asalto,<br />

se está combatiendo duro.<br />

Yo era el noveno en la fila que se aprestaba a <strong>de</strong>scen<strong>de</strong>r, al frente se encontraba nuestro jefe, masticando el<br />

freno, nervioso, al igual que todos nosotros, con la boca seca, quizás tanto como el día <strong>de</strong> nuestro primer salto en<br />

paracaídas; los mismos empujones, las mismas caras y los mismos gestos.<br />

Tocó tierra el gigante mimetizado como nuestras ropas, ¡ A TIERRA G.O.E. ! gritó nuestro jefe y <strong>de</strong>scendimos<br />

entre el ruido <strong>de</strong> las explosiones <strong>de</strong> los morteros a lo lejos, y las ráfagas <strong>de</strong> ametralladoras. Al rato cesó todo,<br />

revisamos bien por si había trampas cazabobos y nos instalamos en un hangar <strong>de</strong>trás <strong>de</strong> la usina.


El día 3 <strong>de</strong> abril, <strong>de</strong>bíamos regresar al continente, habiendo finalizado nuestra misión, pero llegó la<br />

contraor<strong>de</strong>n y nos quedamos en la Base Aérea <strong>Militar</strong> <strong>Malvinas</strong>, dando instrucciones a las tropas <strong>de</strong> la Fuerza<br />

Aérea <strong>Argentina</strong>, acantonados en las playas <strong>de</strong>l aeropuerto, colaborando en la preparación <strong>de</strong> las <strong>de</strong>fensas,<br />

fabricando trampas explosivas.<br />

Construímos refugios, balizamos la pista, reparamos la hélice <strong>de</strong>l buque "Cincel <strong>de</strong>l mar" al que se le había<br />

enredado allí la ca<strong>de</strong>na <strong>de</strong> un buque pesquero polaco. Dos buzos tácticos <strong>de</strong>l GOE, "Penélope" y el "Whisky",<br />

utilizando equipos <strong>de</strong>l cuartel <strong>de</strong> los Royal Marines, sin tanques <strong>de</strong> oxígeno, levantaron la ca<strong>de</strong>na fuera <strong>de</strong>l agua<br />

que estaba próxima a los 0 grados, cortaron un eslabón y lo liberaron.<br />

Aún recuerdo cuando trabajábamos mañana y tar<strong>de</strong> fabricando nuestros refugios y posiciones en la cantera y<br />

al pasar frente al aeropuerto con palas, picos y herramientas varias, nos <strong>de</strong>cían sobradoramente — "Ahí va el<br />

Escuadrón Vialidad".<br />

Cuando cayó la primera bomba se nos hizo chico el lugar para dar asilo a los graciosos. Después los ayudamos<br />

a construir los suyos.<br />

El 29 <strong>de</strong> Abril a las 04:00 hs. <strong>de</strong> la mañana, había terminado su turno <strong>de</strong> guardia el "Perro" y se encontraban<br />

apostados "Cachincho" y "Riqui", cuando una ráfaga <strong>de</strong> ametralladora dibujó una recta en las chapas <strong>de</strong>l hangar.<br />

Todo el mundo alerta y al ro<strong>de</strong>ar unos tambores, encontramos a un soldadito en cuclillas. ..<br />

Había sido un error <strong>de</strong> un centinela que casi le costó la vida al "Perro" que se salvó porque se tiró al suelo un<br />

segundo antes que los disparos pasen por el lugar en don<strong>de</strong> antes estaba su cabeza.<br />

Vino el Bautismo <strong>de</strong> Fuego en la madrugada <strong>de</strong>l 1° <strong>de</strong> Mayo, una bomba cayó exactamente <strong>de</strong>trás <strong>de</strong>l hangar<br />

en el quedaban "Pinchi" y "Yougurt" y otra al lado <strong>de</strong>l vivac <strong>de</strong> la IX Brigada Aérea, causando muertos y heridos.<br />

07:30 horas, ¡¡ ALERTA ROJA POR EL NORTE !! y los Harriers le dieron a un hangar cerca <strong>de</strong> la planta <strong>de</strong><br />

combustible. La artillería le pegó a uno y el otro se fue humeando.<br />

Nosotros teníamos dos aprendices <strong>de</strong> Drácula que dormían en cajones, pues <strong>de</strong>cían que eran más secos y<br />

confortables que nuestras cuevas (con bolsas <strong>de</strong> dormir). En medio <strong>de</strong>l bombar<strong>de</strong>o se <strong>de</strong>spertó el "Gaita" y vimos<br />

atónitos cómo se habría la tapa <strong>de</strong>l cajón, como en las películas <strong>de</strong> terror y asomaba la cabeza con cara <strong>de</strong> no<br />

enten<strong>de</strong>r nada.<br />

— PEPE: PEPE: Gaita, estamos en pleno bombar<strong>de</strong>o.<br />

— GAITA: Déjate <strong>de</strong> bromas.<br />

—PEPE: PEPE: Son Harriers.<br />

— GAITA: Deciles que me levanto más tar<strong>de</strong>.<br />

... Y allí se dio cuenta que era real.<br />

(Luego nos diría que creyó que era una práctica <strong>de</strong> tiro <strong>de</strong> los PUCARÁ).<br />

Inteligencia nos avisó que estimaba bombar<strong>de</strong>o naval inglés a las 16:00 horas, lo que aparentemente era<br />

cierto, pues tres fragatas se instalaron frente a Puerto Argentino.<br />

El "Gaita" y el "Perro", junto con el Mayor ZEOLI, salieron en un jeep con una rueda totalmente en llanta hacia<br />

la pista, mientras el "Whisky" miraba con unos largavistas.<br />

— ¡ Me canto en la puntualidad inglesa !


— BOOOMMM y el primer bombazo pegó 50 ó 60 metros <strong>de</strong>lante <strong>de</strong>l Land Rover, que en un segundo quedó<br />

sólo y abandonado. Entraron a uno <strong>de</strong> los refugios.<br />

— GAITA: Buenas, po<strong>de</strong>mos pasar.<br />

— UN OFICIAL: A<strong>de</strong>lante m'hijo.<br />

— UN SOLDADO: SOLDADO: Cabo Principal, tengo miedo.<br />

— GAITA: GAITA: Quédate tranquilo...yo también, o te crees que porque use boina no...toma, fúmate uno.. Mientras<br />

tanto en la cantera, pegaditos a una elevación<br />

— Primer Teniente ALZAMORA: ¡Cuernos!, están reglando (apuntando) hacia aquí.<br />

— GATO: GATO: Gallo, vayamos a las letrinas.<br />

— GALLO: GALLO: No espera ...Tres bombazos más.<br />

— GATO: GATO: Vamos Gallo...<br />

Ya se había ido.<br />

Algunas pepas (bombas) más y todo terminó, porque la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong> atacó, <strong>de</strong>jando dos <strong>de</strong> las tres<br />

en llamas, la algarabía fue total.<br />

Una noche:<br />

-GATO: GATO: Se viene un tormentón.<br />

-TAÑO TAÑO TAÑO ¿Vos estás mal?<br />

- GATO No ves los relámpagos (se veían luces a lo lejos).<br />

-TAÑO TAÑO TAÑO No ves las estrellas?<br />

-GATO GATO Sí.<br />

FIUUUU - BOOOMMM<br />

- GATO GATO ¡ Se pudrió todo !<br />

Toda esa noche música con las fragatas, al amanecer los Harriers.<br />

Y todos los días lo mismo.<br />

Pero nuestros C-130 llegaban igual ¡ ¡ QUE GRANDE !!<br />

El 22 <strong>de</strong> mayo nos or<strong>de</strong>naron salir para analizar el potencial enemigo, cerca <strong>de</strong> Colorado Pond.<br />

El 23 fuimos hacia Moody Brook y nos embarcamos en dos helicópteros.<br />

30 minutos más tar<strong>de</strong> <strong>de</strong>sembarcábamos cerca <strong>de</strong>l lago Colorado Pond, establecimos un refugio a las últimas<br />

luces <strong>de</strong>l atar<strong>de</strong>cer.<br />

Pusimos un bombero (vigía) en las alturas e iniciamos la marcha, en un momento dado, tres horas <strong>de</strong> caminar,<br />

escuchamos el ruido <strong>de</strong> las palas <strong>de</strong> un helicóptero.<br />

El caminar era muy difícil, por la oscuridad, las rocas, el musgo y los pantanos, estábamos mojados y hacía<br />

mucho frío.<br />

Nos ocultamos el 24 y la noche <strong>de</strong>l 25 continuamos la marcha, un helicóptero inglés ya nos buscaba y <strong>de</strong>l otro<br />

lado <strong>de</strong> las elevaciones cada tanto se encendía una bengala.<br />

Efectuamos observación durante el día.<br />

Apenas oscureció iniciamos nuevamente la marcha hasta la madrugada <strong>de</strong>l 26. Allí <strong>de</strong>jamos 9 hombres y<br />

seguimos 5 hasta el punto final or<strong>de</strong>nado, éramos "Gallo", "Penélope", "Perro", "Amancay" y "Taño".


Caminamos todo el 26 y parte <strong>de</strong>l 27, llegamos a Monte Osborne y efectuamos vigilancia. Sólo escuchábamos<br />

sus helicópteros, pues había una niebla que no se veía ni a diez metros.<br />

En la madrugada <strong>de</strong>l 28 iniciamos el regreso.<br />

Embarcamos todos en helicóptero, menos "La Vieja", el "Gato" y " Penélope" que se quedó con la radio.<br />

El 29 <strong>de</strong>bíamos salir a cortar el avance <strong>de</strong>l enemigo; tendríamos que <strong>de</strong>jarnos sobrepasar por ellos en las<br />

alturas <strong>de</strong> Two Sisters y luego atacarlos por la retaguardia. Para ello saldríamos <strong>de</strong> Moody Brook a las 09:00<br />

horas en helicópteros, el primer embarque era para el Ejército, el segundo para nosotros y el tercero para<br />

gendarmería.<br />

Salió el primero, y el segundo, por una contraor<strong>de</strong>n, fue el <strong>de</strong> Gendarmería.<br />

Estábamos esperando para embarcar, cuando llegaron corriendo dos gendarmes informándonos que su<br />

helicóptero había sido <strong>de</strong>rribado y que habían sido emboscados los comandos <strong>de</strong> Ejército, pues el enemigo se<br />

encontraba ya en las alturas <strong>de</strong> Two Sisters.<br />

Se suspendió nuestro embarque, enterándonos que había muertos y heridos.<br />

El 29 a las 23:50 horas, comenzó un cañoneo naval y tuvimos un muerto y dos heridos en el GOE, el Cabo<br />

Primero Walter ABAL herido por esquirlas en la pierna <strong>de</strong>recha, el Cabo Primero Juan CHIANTORE, herido por<br />

esquirlas en el brazo <strong>de</strong>recho y el Primer Teniente Luis CASTAGNARI, muerto en combate mientras buscaba y traía<br />

a lugar seguro a un grupo <strong>de</strong> su gente que había quedado aislada por el bombar<strong>de</strong>o.<br />

El supo el i<strong>de</strong>al porque moría y nosotros sabemos porque luchar.


CAPITULO CAPITULO XI<br />

XI<br />

"LUCIANO "LUCIANO Y Y LA LA AANTELOPE"<br />

A ANTELOPE"<br />

NTELOPE"<br />

Dijo ANTONIO PORCHIA - " A VECES PIENSO EN GANAR ALTURA, PERO NO ESCALANDO HOMBRES".<br />

RELATA: RELATA: El autor (Piloto <strong>de</strong> A4-B).<br />

No es mi intención quitar méritos a ningún valiente, sino que surja la verdad histórica.<br />

A continuación leerán lo escrito por Michael Nicholson (El Kazansew inglés), corresponsal <strong>de</strong> la empresa<br />

inglesa "In<strong>de</strong>pen<strong>de</strong>nt televisión News", <strong>de</strong> Londres, quien vivió la guerra <strong>de</strong> las <strong>Malvinas</strong> como un soldado más,<br />

recogió testimonios valiosísimos y presenció <strong>de</strong>s<strong>de</strong> cubierta <strong>de</strong> otro buque, el ataque a la fragata "ANTELOPE".<br />

Debajo <strong>de</strong> cada frase <strong>de</strong> este periodista verán lo que escribí en mi libro "DIOS Y LOS HALCONES", Capítulo 19,<br />

titulado "No se pue<strong>de</strong> vivir en paz"; y parte <strong>de</strong>l relato <strong>de</strong>l libro "La otra cara <strong>de</strong> la moneda", que salió a la venta<br />

hace poco en el País.<br />

Comparando los relatos verán que no sólo guardan similitud, sino que son prácticamente iguales,<br />

simplemente porque EL VIO LO QUE NOSOTROS VIVIMOS.<br />

A lo narrado por Michael Nicholson, le pondré sus iniciales (M.N.), a lo extractado <strong>de</strong> mi libro "Dios y los<br />

<strong>Halcones</strong>" (D.H.) y a lo correspondiente a "La otra cara <strong>de</strong> la moneda" (L.O.C.M.).<br />

— M.N.: " A la distancia, aguas afuera en el Falkland Sound (Estrecho <strong>de</strong> San Carlos) podíamos oir el retumbar<br />

<strong>de</strong> los cañones y los proyectiles y luego el sonido <strong>de</strong> los aviones en sus pasadas <strong>de</strong> ametrallamiento hacia<br />

nosotros".<br />

— D.H.: D.H.: "Apenas ingresé en la Bahía Ruiz <strong>de</strong> Puente (está al sur y pegada a la Bahía San Carlos, sobre el<br />

estrecho <strong>de</strong>l mismo nombre); observé aun helicóptero Sea Lynx . . . or<strong>de</strong>né armar los cañones y me dirigí hacia él<br />

para abatirlo ... El "DIABLO" pedía a gritos que me corriera e hizo una ráfaga corta . .. (evi<strong>de</strong>ntemente los disparos<br />

que escuchó fuera <strong>de</strong> la Bahía eran éstos)".<br />

— L.O.C.M.: L.O.C.M.: L.O.C.M.: "Los dos primeros Skyhawk (nosotros atacamos dos primeros).<br />

— L.O.C.M.: L.O.C.M.: "Volaron por encima <strong>de</strong>l estrecho, al norte <strong>de</strong> los barcos y luego giraron a la <strong>de</strong>recha (o sea <strong>de</strong><br />

este a oeste), sobrevolando tan bajo como los pilotos se atrevían".<br />

— D.H.: Proseguí hacia el norte por el medio <strong>de</strong>l estrecho, al pasar por la boca <strong>de</strong> la Bahía San Carlos, <strong>de</strong>scubrí<br />

a dos fragatas. .. para luego continuar al frente haciendo un viraje sobre la margen <strong>de</strong>recha (o sea al norte). . .<br />

para lanzarme al ataque <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el brazo norte <strong>de</strong> la bahía y con rumbo oeste (o sea <strong>de</strong> este a oeste)".<br />

— M.N.: "Saltando encima <strong>de</strong> los cerros al final <strong>de</strong> la BAHÍA y luego <strong>de</strong>scendiendo a ras <strong>de</strong> la pendiente a unos<br />

15 metros <strong>de</strong>l agua . . .(<strong>de</strong> este a oeste)".<br />

— D.H.: Me oculté tras una pequeña sierra. . . "


— L.O.C.M.: "Y el segundo soltó las bombas <strong>de</strong>masiado pronto".<br />

— L.O.C.M.: "Un misil Rapier lanzado <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la costa se cobró el primer avión".<br />

— D.H.: Sentí una fuerte explosión y me pareció que mi avión se partía en dos ... Di un golpe <strong>de</strong> palanca y volví<br />

hacia Campo Ver<strong>de</strong>, mientras simultáneamente comunicaba mi <strong>de</strong>cisión <strong>de</strong> eyectarme".<br />

— M.N.: "Me arrojé a cubierta, una bomba <strong>de</strong> mil libras (453 kilos) cayó aun largo <strong>de</strong> buque <strong>de</strong> nosotros".<br />

— L.O.C.M.: Pero luego llegó el grueso <strong>de</strong>l ataque".<br />

— D.H.: "La otra sección que ya se había ubicado en ese instante a la voz <strong>de</strong> LUCIANO <strong>de</strong> ¡¡AHÍ LO TENEMOS!!<br />

¡AL ATAQUE 4!, se lanzaban sobre otro buque..."<br />

— D.H.: (Del epígrafe <strong>de</strong> la fotografía)... A la <strong>de</strong>recha, el Primer Teniente GUADAGNINI, quien luego <strong>de</strong> alcanzar<br />

el 23 <strong>de</strong> Mayo con una bomba a la Fragata "ANTELOPE", fue alcanzado por un misil, y pereció".<br />

— M.N.: ". . . Apenas un milisegundo <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> soltar su bomba, proyectiles disparados por el HMS<br />

"ANTELOPE" dieron con un avión atacante que se <strong>de</strong>sintegró en una bola <strong>de</strong> fuego anaranjada".<br />

CONCLUSIÓN:<br />

CONCLUSIÓN:<br />

Tanto Michael Nicholson, como los autores <strong>de</strong> La otra cara <strong>de</strong> la Moneda, no <strong>de</strong>jan lugar a dudas <strong>de</strong> que este<br />

primer ataque se realiza contra la "ANTELOPE".<br />

Es muy importante sobre todo el relato <strong>de</strong> Nicholson, porque él estaba mirando cuando ocurrió el ataque, y<br />

como dije antes <strong>de</strong>scribe exactamente lo que vivimos; incluso la muerte <strong>de</strong>l Primer Teniente LUCIANO<br />

GUADAGNINI, quien fue el único que murió <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la Bahía como luego se verá.<br />

En el libro "EXOCET", <strong>de</strong> esta misma Editorial, cuyo autores el señor Emilio Villarino, dice entre otras cosas: "La<br />

Escuadrilla <strong>de</strong> CARBALLO no tuvo inconvenientes en el KC-130; cargó sus tanques y continuó con su vuelo para<br />

atacar "momentos antes" que lo hicieran los aviones <strong>de</strong> la Armada.<br />

El Comandante <strong>de</strong> la "ANTELOPE", Capitán Mick J. Tobin <strong>de</strong>claró, tiempo <strong>de</strong>spués, que los buques británicos<br />

que se encontraban en el lugar rechazaron ataques <strong>de</strong> aviones argentinos, empleando misiles y cañones pero<br />

que "en el último <strong>de</strong> los ataques", dos bombas penetraron en la nave sin explotar, aunque provocando daños<br />

consi<strong>de</strong>rables.<br />

POR EVALUACIÓN POSTERIOR DEL COMANDO DE LA AVIACIÓN NAVAL, SURGE QUE LOS CUATRO AVIONES A-4B<br />

DE LA FUERZA AEREA ARGENTINA ATACARON UNA FRAGATA DENTRO DEL ESTRECHO SAN CARLOS, PERO NO<br />

LLEGARON A PUERTO. . .<br />

No No No estoy estoy <strong>de</strong> <strong>de</strong> acuerdo.<br />

acuerdo.<br />

Deseo antes que nada, expresar que mi único propósito es aclarar un ataque en especial, sin que por ello<br />

ponga en tela <strong>de</strong> juicio a los pilotos <strong>de</strong> la <strong>Aviación</strong> Naval; pues creo que quien tuvo el valor <strong>de</strong> "entrarle" a una<br />

mo<strong>de</strong>rna Fragata <strong>de</strong> sofisticadísimo armamento, lo que era para apaciguar al más pintado; aquel que siguió al<br />

frente pese a las explosiones, las columnas <strong>de</strong> agua y el miedo, están para mí mucho más allá <strong>de</strong> cualquier<br />

crítica y merecen todo mi respeto.


Lo único que <strong>de</strong>seo es que la historia sea historia, pero que pegaron, pegaron, pues aparte <strong>de</strong> la "ANTELOPE"<br />

sufrió severos daños otra fragata, <strong>de</strong> acuerdo a un informe inglés, pero lo mantuvieron en las sombras,<br />

amparados por la difusión <strong>de</strong>l ataque a la primera.<br />

NO NO ESTOY ESTOY DE DE ACUERDO, ACUERDO, porque:<br />

1°) El libro dice que mi Escuadrilla atacó "momentos" antes que lo hicieran los aviones <strong>de</strong> la Armada.<br />

Atacamos 25 minutos antes que la escuadrilla naval.<br />

2°) El Capitán <strong>de</strong>claró que "en el último <strong>de</strong> los ataques". Pese a que he leído mucho sobre el tema no pu<strong>de</strong><br />

encontrar esta afirmación, aunque no por eso digo que no sea verdad.<br />

3°) En cuanto a que mi Escuadrilla habría atacado una fragata en el estrecho San Carlos y no en el puerto, <strong>de</strong><br />

acuerdo a una evaluación posterior <strong>de</strong>l Comando <strong>de</strong> <strong>Aviación</strong> Naval.<br />

Digo:<br />

a) ¿De dón<strong>de</strong> sacaron esa información?<br />

b) Afirmo, sí atacamos <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la Bahía, y no sólo eso, sino que la Escuadrilla <strong>de</strong> la Armada que atacó<br />

posteriormente (heroicamente y a lo cual no juzgo), llegó al blanco con los datos e información que pasó<br />

nuestra Escuadrilla. Esto pue<strong>de</strong> comprobarse perfectamente en la grabación correspondiente a ese<br />

vuelo, en la que estoy seguro el Capitán CASTRO FOX, Jefe <strong>de</strong> esa escuadrilla, reconocerá perfectamente<br />

su propia voz, la que no <strong>de</strong>ja el menor lugar a dudas. A continuación transcribo parcialmente parte <strong>de</strong><br />

esa grabación:<br />

- RAYO1: Nos vamos a per<strong>de</strong>r la gran<strong>de</strong>.<br />

- ¿Y dón<strong>de</strong> querés estar ?<br />

- Y... en el aire.<br />

- Y dón<strong>de</strong> vas a estar.<br />

- Cuando ataque a estos vamos a estar volviendo (<strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la cabina <strong>de</strong>l avión hablan sus tripulantes).<br />

ACLARACIÓ ACLARACIÓN:<br />

ACLARACIÓ N: PARÍS es el reabastecedor (Hércules C-130), TÁBANO es la Escuadrilla <strong>de</strong> Marina (A-4Q) y NENE<br />

(A4B) es mi escuadrilla; RAYO es el RAYO.<br />

- NENE: — PARÍS — NENE (Primero se nombra al que se <strong>de</strong>sea llamar y luego quien es el que llama).<br />

-PARÍS: -A<strong>de</strong>lante.<br />

- NENE: — Sobre las piedras ¿entiendo cerca <strong>de</strong> las islas?<br />

-PARÍS:-Afirmativo.<br />

- NENE: - Yo voy para allá.<br />

- PARÍS: - Venga para acá, venga para acá, nosotros estamos sobre las primeras piedras.<br />

-NENE:-NENE va para allá.<br />

- PARÍS - ROMA - PARÍS guarda mangueras.<br />

- ROMA - Negativo, NENE va a interceptar.-..<br />

- PARÍS - NENE, ¿cual es su distancia Tango ? (Base <strong>de</strong> origen)


- NENE: — No poseo equipo <strong>de</strong> navegación.<br />

-PARÍS: -NO, estimada.<br />

- NENE: - Cerca <strong>de</strong> las islas.<br />

- PARÍS: —Nosotros estamos entre dos capitas <strong>de</strong> nubes.<br />

- NENE: — Entiendo que nos <strong>de</strong>bemos estar cruzando ya.<br />

-PARÍS:- ¡A ver, atento!<br />

-NENE:- ¡A-la vista!- ¡Son dos!<br />

ACLARACIÓN: ACLARACIÓN: Se produce el reabastecimiento y luego la escuadrilla sigue hacia el blanco.<br />

- NENE: — "Los NENES armamento conectado"<br />

- RAYO: - 13:30 horas, pasaron NENES punto 1 a las 13:13 horas. No hubo noveda<strong>de</strong>s.3<br />

- RAYO: actualizo PAC (Patrulla Aérea <strong>de</strong> Harriers) 310/48 R° 240 (esto quiere <strong>de</strong>cir que se encuentra a 80<br />

kilómetros <strong>de</strong> Puerto Argentino, zona noroeste y volando hacia el suroeste).<br />

- TÁBANO: - RAYO - TÁBANO (El TÁBANO llama al RAYO)<br />

- RAYO: - A<strong>de</strong>lante TÁBANO<br />

- TÁBANO: - Estoy a unos ... 25 <strong>de</strong>l objetivo, 25 minutos ¿me pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>cir que actividad hay?<br />

- RAYO: - OK, atento, ya vamos a obtener información <strong>de</strong> los NENES saliendo. Extremo norte <strong>de</strong>l canal es la<br />

última posición <strong>de</strong>l O.M. (Blanco). La MET (Meteorología) es buena en el área, cambio.<br />

- TÁBANO: — TÁBANO (quiere <strong>de</strong>cir que recibió).<br />

- PURO: - RAYO - PURO (PURO llama al RAYO)<br />

- RAYO: - A<strong>de</strong>lante.<br />

- PURO: - Actualizo PAC 305/75 NM <strong>de</strong>saparecida (quiere <strong>de</strong>cir que está a unos 140 km al noroeste <strong>de</strong> Puerto<br />

Argentino y ha iniciado vuelo rasante una patrulla <strong>de</strong> Harriers.<br />

- RAYO: - RAYO 1 - RAYO (El RAYO llama al RAYO 1)<br />

- RAYO 1: - A<strong>de</strong>lante RAYO<br />

- RAYO: - Tengo NENE con 4 (aviones) y TÁBANO con 3, en OM, los NENES <strong>de</strong>ben estar próximos a salir y los<br />

TÁBANOS a 25 minutos, OK ? (Los NENES saliendo <strong>de</strong>l ataque)<br />

- RAYO 1: -OK, recibido.<br />

- TORO: - RAYO - TORO, le confirmo una PAC vertical Howard (<strong>de</strong>l autor: ¡ Y van tres !)<br />

- TORO: RAYO - TORO, le confirmo una sección <strong>de</strong> Harriers pasó con rumbo norte y nivel 60, cambio. 6<br />

- RAYO: - NENE - RAYO<br />

- NENE 4 (o sea el numeral 4): - RAYO - NENE 4 (Teniente RINKE)<br />

- RAYO:- A<strong>de</strong>lante con información NENE 4<br />

- NENE 4: - OK, ahí en d Estrecho San Carlos había unos 6 o 7 barcos, estimo que estaba el CANBERRA, porque<br />

era un barco tipo transatlántico. . . Yo le tiré a un porta helicópteros, tenía un Sea Linx atrás, era una . . .<br />

(interferencia), (sigue hablando el Ten. RINKE, primero en salir <strong>de</strong>l ataque)<br />

- RAYO: -¿ Interceptó TÁBANO ?


- TÁBANO: - NEGATIVO<br />

- RAYO: - OK, en el Canal San Carlos, extremo norte, hay 6 ó 7 barcos, aparte pue<strong>de</strong> estar el CANBERRA, hay dos<br />

o tres barcos significativos. ..<br />

- TÁBANO: - OK (da el comprendido, quiere <strong>de</strong>cir que entendió)<br />

- TÁBANO: - OK ¿más o menos distancia, es este el mismo brazo San Carlos ?<br />

- NENE 4: - Extremo norte, extremo norte <strong>de</strong>l San Carlos.<br />

- RAYO: - OK, a<strong>de</strong>lante ¡Bravo NENE 4!, los barcos más significativos ¿estaban muy . . . casi llegando fuera <strong>de</strong>l<br />

canal, al extremo? ¿extremo norte?<br />

- NENE 4: - ¡NO! ¡NO! ¡estaban todos ahí a<strong>de</strong>ntro! ¿eh? todos ahí a<strong>de</strong>ntro.<br />

- TORO - RAYO - TORO, le actualizo PAC, la primera que le había pasado, ya se fue al portaaviones, la segunda,<br />

hace un minuto y medio, estaba en 310/45 nivel 70, R° 240, se nos ha perdido <strong>de</strong> <strong>de</strong>tección, cambio.<br />

- PURO: - RAYO - PURO, tengo una nueva PAC aproximando, está lejos todavía, radial 063/84 120 R° 280,<br />

aproximado, cambio.<br />

- RAYO: -Gracias.<br />

- RAYO: - A cuántas millas más o menos <strong>de</strong> la salida <strong>de</strong>l canal usted lo está estimando al Canberra, si es que<br />

fuera el Canberra.<br />

- NENE 4: - (que está volviendo al continente por <strong>de</strong>bajo <strong>de</strong> las PAC) Al norte <strong>de</strong>l canal, en la costa este, en una<br />

bahía muy cerrada que hay ahí (dice claramente que en una bahía cerrada, no dice <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l estrecho, y en<br />

ese lugar sólo hay dos bahías hacia el este, Ruiz <strong>de</strong> Puente que es abierta y San Carlos que es cerrada).<br />

- NENE 4: - (Le habla al NENE 1) ¿cómo anda? ¿no les tiró usted?<br />

- NENE 1: (soy yo, que recién llego a la frecuencia, luego <strong>de</strong> lo vivido y relatado en el capítulo N o 15 "No se<br />

pue<strong>de</strong> vivir en paz", <strong>de</strong>l libro "Dios y los <strong>Halcones</strong>")<br />

- En tierra me recantaron a misilazos.<br />

- NENE 1: - ¿Pegó "RINCHE"?<br />

- NENE 4: - Y, uno cree que si, ¿vio?<br />

- NENE 1: - ¿La tiró un poquito corta? (<strong>de</strong> acuerdo a lo convenido en la reunión previa).<br />

- NENE 4: - No, la tiré justo porque estaba justo pasada la loma y no me dio mucho tiempo para apuntar.<br />

- RAYO: - ¿Están escuchando los TÁBANOS? ¿interceptó el TÁBANO la información, no?<br />

- TÁBANO: - Entiendo que los blancos están en la parte norte; el brazo San Carlos que está al este <strong>de</strong> la isla.<br />

- RAYO: - Si correcto, en el estrecho San Carlos, en la parte norte, búsquelas en la costa que da hacia el este, el<br />

NENE 4 me está pasando que están en una bahía, probablemente en la Bahía <strong>de</strong> Ruiz <strong>de</strong> Puente, <strong>de</strong> no ser<br />

en esa, pue<strong>de</strong> ser la que sigue hacia el norte, que es el Brazo San Carlos, no me lo confirma exactamente al<br />

NENE, atento TÁBANO, presumiblemente está un buque gran<strong>de</strong>, que pudiera ser el Canberra, OK?<br />

- NENE 4: - Atento TÁBANO, a ver si le pue<strong>de</strong> dar a ese.<br />

- RAYO: - OK, si me pue<strong>de</strong> confirmar si es en la Bahía <strong>de</strong> Puente o Brazo San Carlos, a ver si me pue<strong>de</strong><br />

confirmar eso.<br />

- TÁBANO:-OK.<br />

6 NOTA: Como ven no era muy entretenido entrar en esas condiciones.


- NENE 1: - En brazo San Carlos estima el NENE 1 (está <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la Bahía San Carlos al sur y no en el<br />

estrecho).<br />

- RAYO; - OK, TÁBANO, TÁBANO, este es el RAYO, trate <strong>de</strong> buscarlo en Brazo San Carlos, probablemente esté el<br />

Canberra, lo tiene que ver perfectamente, aproxime bajo, OK.<br />

- NENE 1: - Atento que al este <strong>de</strong> don<strong>de</strong> está tiran con misil, a mi me tiraron dos misilazos.<br />

- RAYO: - ¿Al este <strong>de</strong>l Brazo San Carlos?<br />

- NENE 1: — Así es, y a unos 10 km.<br />

- RAYO: -OK,OK,NENE.<br />

Pienso que estas comunicaciones no <strong>de</strong>jan lugar a dudas que mi Escuadrilla atacó <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la Bahía y la<br />

afirmación en contrario no tiene asi<strong>de</strong>ro, a<strong>de</strong>más la escuadrilla <strong>de</strong> <strong>Aviación</strong> Naval sabía con certeza que<br />

atacamos allí y 25 minutos antes.<br />

Si tenemos en cuenta que la casi totalidad <strong>de</strong> los pilotos <strong>de</strong> la <strong>Aviación</strong> Naval, entró en combate una sola vez<br />

en todo el conflicto, porque tenían muchos menos aviones que nosotros y ninguno <strong>de</strong> ellos, por ninguna causa,<br />

quería quedarse sin su oportunidad <strong>de</strong> "entrarle" a la flota inglesa; mientras que nuestros pilotos, la gran mayoría,<br />

llegó al combate varias veces, cumpliendo el 90°/o <strong>de</strong> las misiones <strong>de</strong> la aviación en general, que llegaron al<br />

blanco en toda la guerra, y por la misma causa el 93°/o <strong>de</strong> los caídos en un avión bajo el fuego enemigo,<br />

pertenecían a la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong>, pienso que el cálculo <strong>de</strong> probabilida<strong>de</strong>s nos da una mayor chance <strong>de</strong><br />

haber sido nosotros quienes hundimos la HMS "ANTELOPE", aparte <strong>de</strong> todos los datos anteriormente aportados.<br />

Como dice el libro "Exocet", la duda podrá permanecer a lo largo <strong>de</strong>l tiempo, pero esa fragata a LUCIANO, le<br />

costó la vida.<br />

NOTA NOTA DEL DEL AUTOR: AUTOR: Mi reconocimiento al Capitán CASTRO FOX que <strong>de</strong> acuerdo al relato <strong>de</strong> sus camaradas,<br />

solicito combatir pese a encontrarse en inferioridad física <strong>de</strong>bido a un acci<strong>de</strong>nte aéreo anterior, <strong>de</strong>mostrando con<br />

ello que cuando hay <strong>de</strong>cisión <strong>de</strong> llegar al combate se llega.'<br />

La prueba que no <strong>de</strong>ja lugar a dudas, está sacada <strong>de</strong> las voces grabadas <strong>de</strong> los pilotos cuando saltan <strong>de</strong>l<br />

ataque (Extraído <strong>de</strong>l libro "Exocet").<br />

Ten.BENITEZ (A-4Q): Sí, tiré . . .<br />

(Explicación <strong>de</strong>l mismo libro: . . ."Aquí cabe una reflexión; cuando el Ten. BENITEZ atacó una fragata y no logró<br />

escuchar sus bombas, es posible que hayan sido esas bombas las que penetraron en la "ANTELOPE", sin<br />

estallar").<br />

Ten. ZUBIZARRETA (Del libro "Exocet"): Crucé la fragata en un ángulo i<strong>de</strong>al y no me salieron las bombas.<br />

CASTRO FOX eligió el <strong>de</strong>structor.<br />

(De la grabación <strong>de</strong> sus propias voces en esa misión).<br />

Ten. ZUBIZARRETA: ... yo tiré sobre una fragata que estaba muy en la boca <strong>de</strong> entrada, primer buque que me<br />

topé, pero no me salió el armamento ...<br />

El TÁBANO 2 (Ten. BENITEZ) tiró al buque más hacia el sur <strong>de</strong>l canal, estimo que una 42...<br />

(Hablando <strong>de</strong> TÁBANO 1): . . . ahí me dijo que seguían tirando cuando salía, <strong>de</strong>spués no tuvo más contacto.


CONCLUSIÓN: El 1 atacó un <strong>de</strong>structor, el 2 un CL 42, al 3 no le salieron las bombas, (la "ANTELOPE" era una<br />

CL 21).<br />

Relato <strong>de</strong> la muerte <strong>de</strong>l 1er. Ten. Luciano Guadagnini, <strong>de</strong>l libro "La Batalla <strong>de</strong> las <strong>Malvinas</strong>", <strong>de</strong> M. Hastings y<br />

S. Jenkins . . . "El segundo avión se encontró con la barrera <strong>de</strong> la "ANTELOPE" alcanzado en un ala por el fuego <strong>de</strong><br />

un OERLIKON <strong>de</strong> 20 mm. casi se hundió en el agua a un lado <strong>de</strong>l barco, pero retomó altura rápidamente y se<br />

estrelló contra el mástil <strong>de</strong> popa a una velocidad <strong>de</strong> seiscientos kilómetros por hora. La gente <strong>de</strong> la cubierta<br />

escuchó un ruido seco. El Skyhawk se <strong>de</strong>sintegró y sus restos cayeron al mar por babor. Simultáneamente el<br />

barco se bamboleó por el impacto <strong>de</strong> una bomba que penetró cerca <strong>de</strong> popa por estribor (<strong>de</strong> GUADAGNINI). Pocos<br />

momentos más tar<strong>de</strong>, todavía otro SHYHAWK se acercó por babor e hizo impacto en la "ANTELOPE" por <strong>de</strong>bajo <strong>de</strong>l<br />

puente con otra bomba <strong>de</strong> quinientos kilos (1.000 libras) que tampoco estalló pero penetró hasta la sala <strong>de</strong><br />

suboficiales...".<br />

Del libro "Exocet": las bombas eran <strong>de</strong> 500 libras (250 kilos) y fueron lanzadas por los A4Q navales.


CAPITULO CAPITULO XII<br />

XII<br />

"VOLUNTAD "VOLUNTAD DE DE DE VIVIR"<br />

VIVIR"<br />

Dijo el Capitán VELASCO, quien caminó tres días y dos noches en <strong>Malvinas</strong>, sin <strong>de</strong>tenerse entre la<br />

nieve y el viento, para no morir congelado; que el hombre es capaz <strong>de</strong> hacer cosas muy superiores a las<br />

que se cree capaz, pero para ello hace falta la ayuda <strong>de</strong> Dios.<br />

RELATA: RELATA: Mayor PUGA (piloto MIRAGE V DAGGER)<br />

DÍA: DÍA: 24 <strong>de</strong> Mayo <strong>de</strong> 1982.<br />

La Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong> en su bautismo <strong>de</strong> fuego, operó sobre la Fuerza <strong>de</strong> Tareas Británica, que tenía<br />

como objetivo la reocupación colonial <strong>de</strong> nuestras Islas <strong>Malvinas</strong>; fue entonces, saliendo <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el continente<br />

cuando se producen las primeras acciones bélicas.<br />

Fue en una <strong>de</strong> estas misiones, a bordo <strong>de</strong> un avión MIRAGE V DAGGER; conjuntamente con el Capitán DÍAZ y<br />

el Teniente CASTILLO, quien cayó para siempre en las aguas malvinenses en cumplimiento <strong>de</strong> su juramento;<br />

cuando próximos al estrecho <strong>de</strong> San Carlos fuimos interceptados por aviones Harriers.<br />

La superioridad numérica, la sorpresa, el misil SIDEWINDER y nuestra escasez <strong>de</strong> combustible para presentar<br />

combate, cuatro factores que pesaban sobre nosotros en esos días; hicieron que el enfrentamiento fuese<br />

totalmente favorable al enemigo<br />

Volábamos rasante sobre las olas; en ese momento, vi explotar el avión <strong>de</strong> CASTILLO y simultáneamente sentí<br />

el impacto <strong>de</strong>l misil; traté <strong>de</strong> ganar altura, cuando al tirar la palanca hacia atrás, vi que mi avión comenzaba a<br />

invertirse.<br />

Luego <strong>de</strong> incendiarse perdió un ala, por lo que <strong>de</strong>cidí eyectarme en forma inmediata, cuando tenía una<br />

inclinación <strong>de</strong> 90° y la trayectoria <strong>de</strong> salida se hizo paralela a las olas.<br />

En ningún momento perdí el conocimiento.<br />

Recuerdo que posterior al tirón <strong>de</strong> apertura <strong>de</strong>l paracaídas sentí el toque con el agua. La primera sorpresa fue<br />

encontrarme con vida, por lo que agra<strong>de</strong>cí a Dios. El segundo paracaídas, el personal, comenzaba a abrirse sin<br />

lograr exten<strong>de</strong>rse totalmente, cuando empecé a per<strong>de</strong>r velocidad. Cayó sobre mí, lo que me puso en una<br />

situación difícil.<br />

Las olas eran muy gran<strong>de</strong>s, pero al ver que no rompían sobre mí y que me mantenía a flote, recuperé la calma.<br />

Luché por <strong>de</strong>shacerme <strong>de</strong> los arneses y cuerdas, antes que el paracaídas y su velamen al empaparse se<br />

hundieran, arrastrándome al fondo <strong>de</strong>l mar.


Dios me ayudó, pues si se hubiese <strong>de</strong>sprendido el asiento que amortiguó el impacto, al tocar el agua me<br />

hubiese <strong>de</strong>strozado contra la superficie, por efecto <strong>de</strong> la velocidad.<br />

No pu<strong>de</strong> utilizar el <strong>de</strong>sconector rápido para liberarme, por haberse enredado algunas cuerdas y vi la necesidad<br />

<strong>de</strong> <strong>de</strong>spren<strong>de</strong>r el bote <strong>de</strong>l chaleco <strong>de</strong> supervivencia para sacar algunas cuerdas que estaban entre mi cabeza y el<br />

bote.<br />

En ese momento comencé a hundirme, pues el velamen <strong>de</strong>l paracaídas se había empapado, por lo que enrollé<br />

las cuerdas en mi brazo izquierdo para lograr que el bote se mantuviera a flote, <strong>de</strong>sprendiéndose solas y<br />

pudiendo liberarme <strong>de</strong> los arneses.<br />

Igualmente me volvía a sumergir pues algunas <strong>de</strong> las cuerdas continuaban enredadas en el bote <strong>de</strong> modo que<br />

lo solté, quedando únicamente con mi traje anti-exposición que me resultaba muy útil ya que el frío era<br />

insoportable.<br />

Luego <strong>de</strong> quitarme la máscara <strong>de</strong> oxígeno y el casco, inflé el chaleco salvavidas notando que una <strong>de</strong> sus<br />

partes se había <strong>de</strong>strozado por efecto <strong>de</strong> la eyección, por lo que se infló parcialmente, aunque me daba<br />

flotabilidad.<br />

Decidí quitarme el anti "G" aligerando peso para po<strong>de</strong>r nadar y también las botas, esto último me resultó<br />

imposible.<br />

Cuando las olas me elevaban pu<strong>de</strong> ver un cerro en la Isla <strong>de</strong> Borbón y comencé a nadar hacia allí. Observé el<br />

reloj, había quedado <strong>de</strong>tenido para siempre a las 11:08, hora <strong>de</strong> mi eyección.<br />

Sin po<strong>de</strong>r precisar el tiempo transcurrido, mientras nadaba sin meter la cabeza bajo el agua recuerdo que vi<br />

pasar sobre mí varios aviones DAGGER y HARRIER.<br />

Hacia media tar<strong>de</strong> vi que el cerro hacia don<strong>de</strong> me dirigía comenzaba a <strong>de</strong>slizarse hacia la <strong>de</strong>recha por lo que<br />

<strong>de</strong>duje que una corriente me estaba arrastrando hacia el este. Esto me preocupó, por lo que traté <strong>de</strong> aumentar<br />

mi velocidad nadando estilo "crowl", al meter la cabeza bajo el agua me <strong>de</strong>svanecí a causa <strong>de</strong>l intenso frío. Me<br />

puse en manos <strong>de</strong> Dios, encomendándole mi espíritu y le pedía que protegiera a mi esposa y a mis hijos;<br />

creyendo que había llegado mi hora...<br />

No sé cuanto tiempo <strong>de</strong>spués, recuperé el conocimiento y mientras miraba hacia la costa el mundo<br />

comenzaba a aquietarse <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> todos los toneles (maniobras <strong>de</strong> acrobacia) que había hecho mentalmente,<br />

<strong>de</strong>cidí no meter la cabeza bajo el agua.<br />

Hacia la tar<strong>de</strong> divisé un puerto, era Bahía Elefante o Cal<strong>de</strong>rón. Había perdido <strong>de</strong> vista el cerro hacia el cual iba.<br />

Entre uno y otro lugar había sido arrastrado a una consi<strong>de</strong>rable distancia.<br />

Me di cuenta que había cambiado la corriente y volví a <strong>de</strong>splazarme hacia la <strong>de</strong>recha para tener a la vista el<br />

cerro nuevamente. Estimé que ya eran las 17:15 horas, ya que en las Islas <strong>Malvinas</strong> comenzaba el crepúsculo a<br />

esa hora y anochecía media hora <strong>de</strong>spués. Ya llevaba más <strong>de</strong> seis horas nadando y tenía la costa mucho más<br />

cerca, por lo que agra<strong>de</strong>cí a Dios.<br />

Comencé entonces a planificar mi salida <strong>de</strong>l mar, <strong>de</strong>rivando hacia una playa. Más tar<strong>de</strong> me enteraría que allí<br />

<strong>de</strong>sembarcaron comandos ingleses que atacaron la Base Elefante, <strong>de</strong>struyendo aviones Turbo Mentor y Pucará.<br />

Me resultó imposible salir por mis escasas fuerzas y porque también <strong>de</strong>pendía <strong>de</strong> los caprichos <strong>de</strong> las corrientes<br />

marinas.


Intranquilo por el ruido <strong>de</strong> las olas al romper contra las rocas comencé a nadar <strong>de</strong> espaldas, para ver cuando<br />

venían las olas; tomando con ambos brazos mi cabeza para tratar <strong>de</strong> darle protección, evitando un golpe<br />

infortunado. Así pasé un rato, tragando bastante agua <strong>de</strong>bido a que próximos a la playa flotaban los tradicionales<br />

"kelpers" (algas marinas <strong>de</strong> las que reciben su nombre los habitantes <strong>de</strong> <strong>Malvinas</strong>), que me enredaban. Los zafé<br />

tirándome sobre ellos y haciéndolos <strong>de</strong>slizar bajo mi cuerpo.<br />

Ahora el cielo estaba cubierto <strong>de</strong> estrellas, no puedo precisar la hora, traté <strong>de</strong> asirme a una piedra pero no<br />

pu<strong>de</strong> hacerlo ya que carecía <strong>de</strong> fuerza en los brazos. Dejé entonces que las olas me arrojaran <strong>de</strong>l otro lado,<br />

quedando trabado evitaba que la bajante me volviese al mar.<br />

Quedé sentado, con medio cuerpo fuera <strong>de</strong>l agua y la certeza <strong>de</strong> que sobreviviría al ahogo.<br />

Arrastrándome llegué por fin a tierra firme, me recosté miré las estrellas y dándome vuelta besé la tierra <strong>de</strong><br />

nuestras <strong>Malvinas</strong>, mientras que sólo un milagro me había permitido llegar.<br />

Tracé un plan <strong>de</strong> supervivencia recordando las cinco famosas palabras aprendidas años atrás que dice: ". . .<br />

Ante una emergencia PARAS y piensas:. . .¿qué me recordaba cada letra <strong>de</strong> ese PARAS?. 1° Primeros Auxilios, 2°<br />

Agua, 3° Refugio, 4° Alimentos y 5° Señalización.<br />

Tenía un fuerte golpe en la columna, otro en la rodilla, en el brazo y en la muñeca, los que estimé no eran <strong>de</strong><br />

gravedad.<br />

Mis dos problemas principales esa noche eran no morir congelado o <strong>de</strong>shidratado. Tenía que caminar como<br />

única fuente <strong>de</strong> energía propia y tomar agua dulce para sanear el agua <strong>de</strong> mar ingerida.<br />

Me dirigí hacia el puerto que había visto <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el agua, haciéndolo en forma paralela a la costa. Logré llegar<br />

hasta la entrada <strong>de</strong> Bahía Elefante sin visualizar nada, por lo cual volví hacia el lugar don<strong>de</strong> me había eyectado,<br />

por supuesto sobre la costa, pensando que lo que había visto era una alucinación.<br />

Al amanecer, caminé hacia la parte alta <strong>de</strong> la meseta. A lo lejos, vi humo por lo que pensé que se trataría <strong>de</strong><br />

algún caserío, pero lamentablemente eran los restos <strong>de</strong> un avión DAGGER <strong>de</strong> una Escuadrilla que había partido el<br />

día anterior. Continué caminando y poco <strong>de</strong>spués vi un vehículo, el que dudé fuese real ya que había visto cosas<br />

inexistentes, no obstante fui hacia él. Dicho vehículo estaba siendo remolcado por un tractor porque se había<br />

quedado empantanado.<br />

Uno <strong>de</strong> ellos me vio <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> llamarlo con mi silbato y me gritó ¡¡MIRAGE!! —Contesté a gritos— ¡¡Sí!! —y me<br />

contesta— "Teniente <strong>de</strong> Navio CASTRO, íbamos a rescatar a otro piloto eyectado".<br />

Cuando llegó junto a mí me abandonaron las fuerzas y caí al suelo, vinieron en mi auxilio y una hora más tar<strong>de</strong><br />

me trasladaron en un Land Rover kelper, hasta el caserío <strong>de</strong> Bahía Elefante en don<strong>de</strong> me dieron los primeros<br />

auxilios y tomé contacto con el continente.<br />

Allí encontré a uno <strong>de</strong> mis compañeros <strong>de</strong> Escuadrilla, el Capitán DÍAZ, quien tenía una probable fractura <strong>de</strong><br />

columna y un golpe en el codo, tendido en una camilla. Con él compartí cinco días hasta que llegó una<br />

extraordinaria misión <strong>de</strong> rescate para nosotros organizada por la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong> comandada a bordo <strong>de</strong><br />

un TWIN OTTER T-82 por el Capitán URIONA.<br />

Dios me había dado la oportunidad <strong>de</strong> seguir viviendo y recordar siempre a quienes quedaron por todos los<br />

argentinos en nuestras húmedas y heladas <strong>Malvinas</strong> como testimonio <strong>de</strong> nuestro seguro y <strong>de</strong>finitivo retorno.


CAPITULO CAPITULO Xlll Xlll<br />

Xlll<br />

•RATONES •RATONES Y Y LAUCHAS"<br />

LAUCHAS"<br />

Estas dos escuadrillas dieron que hablar, pese a que el indicativo no era muy guerrero que digamos.<br />

RELATA: RELATA: Primer Teniente ROMÁN (Piloto <strong>de</strong> Mirage V "Dagger"),<br />

21 <strong>de</strong> mayo <strong>de</strong> 1982.<br />

Mi escuadrilla tenía como indicativo "LAUCHA" y estaba integrada por el Primer Teniente CALLEJO, el Mayor<br />

PUGA y yo.<br />

Debíamos atacar a buques <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l estrecho San Carlos, (El "corredor <strong>de</strong> las bombas", como le <strong>de</strong>cían los<br />

"gringos").<br />

Como <strong>de</strong> costumbre, comenzamos los preparativos ro<strong>de</strong>ados por el resto <strong>de</strong>l personal, que nos miraba con<br />

mezcla <strong>de</strong> envidia y lástima. Unos ayudaban a preparar la navegación, otros nos acercaban los equipos, para la<br />

ceremonia <strong>de</strong> cambiarnos, entre risas, bromas y sobre todo, mucho miedo.<br />

Llegó la hora <strong>de</strong> ir a los aviones; palmadas, palabras <strong>de</strong> aliento, alguna frase intrascen<strong>de</strong>nte o un chiste, como<br />

tratando <strong>de</strong> quitarle solemnidad a la <strong>de</strong>spedida, que quizás fuese para siempre.<br />

Cinco minutos antes que nosotros, <strong>de</strong>bía <strong>de</strong>spegar la gloriosa escuadrilla "RATÓN" que a veces trajo confusión<br />

por la semejanza <strong>de</strong> los indicativos, integrada por el Capitán DONADILLE, Primer Teniente SENN y el Mayor<br />

PIUMA.<br />

Como pusimos en marcha primero, porque ellos se <strong>de</strong>moraron, me dijo el guía <strong>de</strong> ellos que <strong>de</strong>spegáramos<br />

antes, para cumplir el horario sobre el objetivo, (las dos veces que se produjo un cambio <strong>de</strong> este tipo, fue funesto<br />

para los que <strong>de</strong>spegaron en último término).<br />

Nos fuimos.<br />

El tramo en altura se cumplió sin inconvenientes, mientras controlábamos nuestro panel <strong>de</strong> armamento y a<br />

medida que el continente quedaba más y más atrás, nuestro control <strong>de</strong>l espacio que nos ro<strong>de</strong>aba comenzó a<br />

agudizarse.<br />

Ya en vuelo rasante, nos fuimos <strong>de</strong>sviando a la izquierda <strong>de</strong> la ruta or<strong>de</strong>nada por haber gran cantidad <strong>de</strong><br />

nubes bajas.<br />

En un momento dado or<strong>de</strong>né - ¡Aceleremos ya!, pero <strong>de</strong> inmediato modifiqué lo dicho, porque leí mal las<br />

agujas <strong>de</strong>l reloj.<br />

Interiormente me insulté por cometer un error <strong>de</strong> novato <strong>de</strong>bido al nerviosismo que da el saber la proximidad<br />

<strong>de</strong>l enemigo.<br />

Llegamos a las últimas elevaciones <strong>de</strong> la Isla Gran Malvina, aceleramos ¡ahora sí! a pleno y les advertí que en<br />

instantes aparecería ante nosotros el estrecho.


Así ocurrió; <strong>de</strong> repente, como si se corriera el telón <strong>de</strong> un teatro, vimos ante nosotros un acantilado, el agua<br />

azul y enfurecida, las bahías en frente y las fragatas; como flores en un prado.<br />

Más allá, una <strong>de</strong> ellas estaba próxima a la orilla opuesta, levemente a la izquierda <strong>de</strong> nuestro rumbo, otra a<br />

nuestra <strong>de</strong>recha, próxima a la margen que acabamos <strong>de</strong> saltar.<br />

Por supuesto elegí la que estaba casi en la dirección <strong>de</strong> nuestra aproximación.<br />

Nos "pegamos a las aguas <strong>de</strong>l estrecho"; el 1 y el 3 atacamos al previsto y el dos se <strong>de</strong>svió hacia otra que<br />

estaba a la izquierda.<br />

Nos recibieron con ráfagas, aparentemente <strong>de</strong> cañones, que levantaban <strong>de</strong>lante nuestro una barrera <strong>de</strong> agua,<br />

dificultando la visibilidad. La pared <strong>de</strong> acero <strong>de</strong>l casco se nos vino encima, lanzamos las bombas e<br />

inmediatamente pulsé el cronómetro <strong>de</strong>l avión.<br />

Como el numeral dos no nos vio luego <strong>de</strong>l ataque y para tranquilizarle le dije luego <strong>de</strong>l ataque - "Van 20" — (o<br />

sea 20 segundos, ya que al minuto <strong>de</strong>bíamos cambiar el rumbo).<br />

Luego <strong>de</strong>l arribo esto fue motivo <strong>de</strong> bromas, ya que <strong>de</strong>cían que yo tenía nervios <strong>de</strong> acero, al hacer los<br />

controles tan minuciosos en pleno combate.<br />

El Mayor PUGA me informó que había sentido un fuerte golpe en la nariz <strong>de</strong>l avión, como un martillazo. Le<br />

formé con mi "Dagger", pasando a uno y otro lado, sin ver nada anormal.<br />

Ya en tierra comprobamos que un proyectil había impactado contra el cristal antibala <strong>de</strong>lantero, a la altura <strong>de</strong><br />

su cabeza, produciéndole una rajadura.<br />

La escuadrilla "RATÓN", luego <strong>de</strong>l ataque, había sido interceptada por aviones Harriers, los que con sus<br />

mortíferos misiles (Si<strong>de</strong>win<strong>de</strong>r AIM-9L) <strong>de</strong>rribaron a los tres.<br />

Gracias a Dios, dos días <strong>de</strong>spués aparecieron con vida, tras pasar cada uno su propia aventura.<br />

Pese a todo, hicimos resucitar el indicativo "RATÓN", en misiones posteriores, pues <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la <strong>de</strong>sgracia <strong>de</strong><br />

per<strong>de</strong>r aviones que tanto necesitábamos para seguir luchando había sido <strong>de</strong> buena suerte para sus integrantes.


CAPITULO CAPITULO XIV<br />

XIV<br />

"MATICES"<br />

"MATICES"<br />

Difícil es combatir contra medios tremendamente superiores, como lo es también encontrarse lejos <strong>de</strong><br />

todos, semicongelados, con frío. . . y solo.<br />

RELATA: RELATA: Capitán DONADILLE (Piloto <strong>de</strong> Mirage V "DAGGER")<br />

21 21 21 <strong>de</strong> <strong>de</strong> Mayo Mayo Mayo <strong>de</strong> <strong>de</strong> 1982<br />

1982<br />

Ayer recibí una encomienda <strong>de</strong> casa, con cartas, una bufanda y chocolates; las cartas, especialmente las <strong>de</strong><br />

mis hijos, me emocionan cada vez más (Es muy gran<strong>de</strong> la ternura y el apoyo a su padre que <strong>de</strong> ellas se<br />

<strong>de</strong>spren<strong>de</strong>. Mi hija mayor me recomienda que les "acomo<strong>de</strong>" lo mejor posible las bombas a los ingleses).<br />

Me <strong>de</strong>jo que el resto <strong>de</strong> mis camaradas se dé cuenta <strong>de</strong>l efecto que me hacía la correspon<strong>de</strong>ncia,<br />

generalmente las leo a solas y una sola vez.<br />

Con respecto a los chocolates, el <strong>de</strong>stino quiso que lo pruebe muchos días <strong>de</strong>spués y en el lugar <strong>de</strong> don<strong>de</strong><br />

salieron, mi hogar.<br />

Hoy (21 <strong>de</strong> Mayo) en nuestra Base <strong>de</strong> Operaciones amaneció con el cielo limpio y un sol brillante.<br />

Yo <strong>de</strong>bía mantenerme en alerta para una probable cobertura aérea (cubrir a otros aviones que ataquen) como<br />

Jefe <strong>de</strong> Sección (2 aviones).<br />

Apenas ingresados a la Sala <strong>de</strong> Pilotos, recibimos la noticia <strong>de</strong> que los ingleses estaban <strong>de</strong>sembarcando en la<br />

Isla Soledad <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la Bahía San Carlos, que da al estrecho <strong>de</strong>l mismo nombre.<br />

Debimos cargar inmediatamente todos los aviones con bombas a fin <strong>de</strong> atacar a los navíos "piratas".<br />

Hubo una gran confusión inicial, corridas, herramientas que no se encuentran, ór<strong>de</strong>nes, nervios, etc. . . una<br />

nube <strong>de</strong> mecánicos y armeros pululaba entre los aviones.<br />

Dos escuadrillas <strong>de</strong> tres aviones cada una iniciaron sus preparativos para el <strong>de</strong>spegue, <strong>de</strong> acuerdo a una<br />

"or<strong>de</strong>n fragmentaria" emanada <strong>de</strong> la F.A.S. (Fuerza Aérea Sur), responsable <strong>de</strong> la planificación <strong>de</strong> las misiones<br />

operativas.<br />

Yo <strong>de</strong>bía salir en la segunda "oleada", por lo que colaboré con los <strong>de</strong> la primera.<br />

Despegaron, un nudo en el estómago y la espera <strong>de</strong> los que salieron y mi hora.<br />

Tiempo <strong>de</strong>spués los tuvimos en la pantalla <strong>de</strong>l radar, volvían todos.<br />

Aterrizaron, comentaban sus experiencias a los gritos, con los nervios todavía tensos como una cuerda <strong>de</strong><br />

guitarra: —"El fuego antiaéreo era infernal", "San Carlos está saturado <strong>de</strong> buques", etc, etc.<br />

Indudablemente estábamos ante un <strong>de</strong>sembarco con todas las reglas, pues habían visto más <strong>de</strong> diez navíos.


Mientras repasaban los aviones, (dos estaban bastante agujereados), me preparé junto con el Mayor PIUMA y<br />

el 1er. Ten. SENN para salir (Este último fue alumno mío y yo le enseñé a volar).<br />

Absorbíamos toda la información tratando <strong>de</strong> no olvidarnos nada, pues un piloto en misión <strong>de</strong> combate no<br />

<strong>de</strong>be llevar nada que en caso <strong>de</strong> eyección sirva como información al enemigo, frecuencias, tipos <strong>de</strong> formación,<br />

armamento, meteorología en ruta, zonas <strong>de</strong> eyección, todo confiada a nuestra memoria.<br />

Nos colocamos nuestros pesados equipos (ropa interior <strong>de</strong> lana, pullover, antiexposición para sobrevivir en el<br />

agua, botas <strong>de</strong> vuelo, anti-G para soportar las tremendas aceleraciones, chaleco salvavidas, equipo <strong>de</strong><br />

supervivencia, arneses, campera <strong>de</strong> vuelo, casco, el toque personal en mi caso <strong>de</strong> una gruesa bufanda con los<br />

colores <strong>de</strong>l Grupo Aéreo.<br />

Cierro mi cúpula, quedo aislado <strong>de</strong>l mundo exterior y <strong>de</strong>l viento helado, inmerso solamente en mi universo <strong>de</strong><br />

indicadores, comandos, palanca, instrumentos e interruptores, que comienzan a cobrar vida a través <strong>de</strong> mis<br />

manos.<br />

Por los auriculares <strong>de</strong> mi casco llega la voz nasal, <strong>de</strong>formada por la máscara <strong>de</strong> oxígeno <strong>de</strong>l N o 3 <strong>de</strong> mi<br />

escuadrilla "Ratón 3" listo para la puesta en marcha".<br />

No escucho al 2, el tiempo apremia, recuerdo respetar los horarios. . .¡Al diablo! si no está listo, se queda y doy<br />

la or<strong>de</strong>n <strong>de</strong> poner en marcha <strong>de</strong> inmediato.<br />

Entre el silbido <strong>de</strong> las turbinas escucho al 2 remolón que me pi<strong>de</strong> que los espere. (Evi<strong>de</strong>ntemente no quiere<br />

per<strong>de</strong>rse la misión por nada <strong>de</strong>l mundo).<br />

Como la otra escuadrilla ya está lista le digo que salga primero para cumplir el horario <strong>de</strong> entrada al blanco.<br />

Una vez que tomamos suficiente velocidad <strong>de</strong> sustentación, tras haber <strong>de</strong>spegado angustiosamente en los<br />

últimos metros <strong>de</strong> pista, <strong>de</strong>jamos atrás la costa con sus gaviotas y nos a<strong>de</strong>ntramos en el mar.<br />

La voz impersonal <strong>de</strong>l radar me confirma que estoy en el rumbo correcto.<br />

El buen tiempo también queda atrás, al frente observo gruesos nubarrones.<br />

Descen<strong>de</strong>mos, con nuestros aviones a diez metros <strong>de</strong> altura sobre el agua y a ochocientos kilómetros por<br />

hora, las olas perladas <strong>de</strong> espuma y <strong>de</strong> un color azul plomizo tienen un aspecto amenazante.<br />

¡Atento a la izquierda, ahí están los cascotes! (primeros islotes), me avisa el 3.<br />

Efectivamente, entre una capa <strong>de</strong> stratus (nubes bajas) y <strong>de</strong>formadas por una tenue llovizna aparecen las<br />

pequeñas islas que nos sirven <strong>de</strong> referencia, estamos a<strong>de</strong>lantados veinte segundos y algo <strong>de</strong>sviados.<br />

Minutos <strong>de</strong>spués estamos sobre la Gran Malvina; el tiempo empeora, la llovizna ya es lluvia y la visibilidad en<br />

algunos tramos disminuye en forma alarmante, lo que me hace temer por la zona montañosa y nuestro vuelo<br />

bajo.<br />

Con un vistazo a ambos lados veo a los numerales balanceándose a mi misma altura.<br />

— A tres minutos <strong>de</strong>l blanco, le aviso<br />

— ¡Acelerando, ya! y coloco mi acelerador hacia a<strong>de</strong>lante sin conectar la post combustión (potencia adicional).<br />

Nos <strong>de</strong>slizamos cada vez más rápido, sobre un terreno ondulado y amarillento, enmarcado <strong>de</strong> cerros y bajo<br />

una luminosidad gris oscura, proveniente <strong>de</strong> un cielo sombrío y encapotado.


— A un minuto y medio — mis músculos se contraen mientras instintivamente me inclino hacia a<strong>de</strong>lante en mi<br />

pequeña cabina, concentrándome en la mira <strong>de</strong> tiro, que a través <strong>de</strong> sus signos luminosos me muestra el suelo<br />

peligrosamente cercano.<br />

Si salgo bien no necesitaré hacer virajes y daremos una ventaja menos.<br />

¡¡¡Atento, avión a la <strong>de</strong>recha!!!", me sobresalta la voz alterada <strong>de</strong>l 3.<br />

A un costado, con el mismo rumbo, pero 300 metros más alto veo la silueta <strong>de</strong> un Sea Harrier.<br />

Presiento a otro <strong>de</strong>trás nuestro (En realidad estimo que fueron más <strong>de</strong> cuatro los que nos interceptaron).<br />

Casi al mismo tiempo el Inglés nos vio y viró picando hacia nosotros.<br />

¡Eyectar cargas y virar por <strong>de</strong>recha! or<strong>de</strong>né enfrentándolo.<br />

Uno <strong>de</strong> mis hombres duda, repito la or<strong>de</strong>n, ahora sí caen sus cargas externas (bombas y tanques), mientras su<br />

avión aliviado salta hacia a<strong>de</strong>lante, cruzándose en mi línea <strong>de</strong> tiro, luego sale <strong>de</strong> ella.<br />

El Británico mantiene un rumbo convergente al mío y una suave picada.<br />

Tanto peor. . ., comienzo a disparar <strong>de</strong>s<strong>de</strong> unos setecientos metros <strong>de</strong> distancia, pienso que las llamaradas <strong>de</strong><br />

mis cañones lo asustan pues bruscamente pica hacia el terreno; mis disparos le pasan por arriba, perdiéndose en<br />

el vacío.<br />

Inclino las alas y con una picada al timón, trato <strong>de</strong> bajar la nariz <strong>de</strong> mi avión para evitar que mi blanco se<br />

escurra por <strong>de</strong>bajo.<br />

Comienzo a tirar <strong>de</strong> nuevo esperando que el Harrier se "coma" algunos <strong>de</strong> mis proyectiles.<br />

¡Atento al suelo que se acerca rápidamente!.<br />

Veo pasar bajo mi vientre un largo fuselaje azul marino, enmarcado por dos gruesas tomas <strong>de</strong> aire <strong>de</strong> don<strong>de</strong><br />

nacen dos cortas y anchas alas en flecha.<br />

Palanca al estómago ¡Ojo con la patinada! mientras siento que la aceleración me aplasta contra el asiento, y el<br />

traje me oprime el vientre y las piernas.<br />

Veo por mi izquierda pasar a uno <strong>de</strong> mis numerales como una exhalación en un viraje muy cerrado y a nivel.<br />

Invierto el avión, quedando cabeza abajo y lo veo alejarse con las toberas al rojo vivo por la post combustión.<br />

Un ruido seco y no muy fuerte (Como quien rompe una bolsa <strong>de</strong> papel inflada) e instantáneamente mi avión se<br />

enloquece apuntando al cielo, luego se inicia un tremendo movimiento oscilatorio <strong>de</strong> nariz, hacia arriba y hacia<br />

abajo, que por momentos me aplasta contra el asiento o me <strong>de</strong>ja flotando entre la basura que se levanta <strong>de</strong>l piso.<br />

De pronto, inicia un rapidísimo tonel en vuelo paralelo al piso (Increíblemente vienen a mi mente las épocas<br />

en que pertenecía a la Escuadrilla <strong>de</strong> Acrobacia <strong>de</strong> la <strong>Escuela</strong> <strong>de</strong> <strong>Aviación</strong> <strong>Militar</strong>).<br />

La palanca <strong>de</strong> comandos está floja, sin vida.<br />

Ante la cercanía <strong>de</strong>l suelo, la situación y velocidad, pensé que había llegado el fin <strong>de</strong> mis días en la tierra y me<br />

invadió un gran cansancio, pero inmediatamente sobrevino una rebelión interior y accioné la palanca <strong>de</strong> eyección<br />

inferior.<br />

Una vez más el buen Dios me protegió y salí en momentos en que mi avión no apuntaba hacia abajo.<br />

Se abrió el paracaídas y en segundos estaba tocando en forma no muy elegante la Gran Malvina.


Agra<strong>de</strong>cí al Señor, pues salvo la visión que por la velocidad con que había saltado estaba muy afectada,<br />

escondí el paracaídas y me alejé <strong>de</strong>l lugar, mientras escuchaba a los cañones <strong>de</strong> mi avión, caído a unos<br />

trescientos metros, que se disparaban solos.<br />

Esperando a un Harrier que me buscaba, caminé medio congelado durante una hora y cuarto siguiendo una<br />

línea <strong>de</strong> postes telegráficos, mientras rezaba a la Virgen María y a su hijo, agra<strong>de</strong>ciendo el estar aún con vida.<br />

Encontré un viejo arado, rompí un portón, saqué dos tablas largas y armé un pequeño refugio para aislarme <strong>de</strong><br />

la humedad pues ya anochecía.<br />

Llené una bolsa <strong>de</strong> arpillera que estaba junto al arado con pasto y me preparé a pasar la noche más larga <strong>de</strong><br />

mi vida. Y verda<strong>de</strong>ramente lo fue. . ., sería mucho escribir el relatar todo lo que pasó por mi mente esa noche,<br />

pensé en mis hijos y mi señora, a quién faltaban diez días para entrar en la fecha <strong>de</strong> nacimiento <strong>de</strong> nuestro sexto<br />

hijo (Ana Paula nació el 17 <strong>de</strong> Junio), sobre el <strong>de</strong>stino <strong>de</strong> mis compañeros <strong>de</strong> Escuadrilla y los que quedaron en la<br />

Base, la cual parecía tremendamente lejana ahora y en el frío. . . un frío tremendo que me parecía venía a<br />

oleadas, el cual me impidió dormir en esas interminables horas y a la vez brindar un sonoro concierto <strong>de</strong><br />

entrechocar <strong>de</strong> dientes en ese solitario paraje.<br />

Pero estaba lúcido y bastante entero, sabía en don<strong>de</strong> me encontraba, y el terreno que pisaba; tenía una gran<br />

confianza en Dios y en mí (¡algo tenía que poner yo también!). A<strong>de</strong>más a pesar <strong>de</strong> que mi situación no era muy<br />

envidiable, me reconfortaba el reflejo <strong>de</strong> incendios que intermitentemente observaba en la panza <strong>de</strong> los stratos<br />

bajos (nubes), <strong>de</strong>l otro lado <strong>de</strong> la montaña que marcan el inicio <strong>de</strong>l estrecho San Carlos, pues sabía que ahí<br />

únicamente había barcos ingleses; Dios me perdone pero sin tener nada en contra <strong>de</strong> los ingleses como<br />

personas, estaba contento porque esos reflejos que cambiaban <strong>de</strong> intensidad me indicaban que gracias a mi<br />

Fuerza Aérea, la reina tenía menos súbditos y material <strong>de</strong> guerra.<br />

Junto con la claridad se disiparon mis dudas sobre si me podría levantar o no por algún problema en la<br />

espalda o cintura pues no tuve mayores inconvenientes en pararme.<br />

En aras <strong>de</strong> la brevedad, ese día caminé unos veinticinco kilómetros a brújula y guiándome por mi memoria y<br />

conocimiento <strong>de</strong> la geografía <strong>de</strong> la isla llegando por fin alre<strong>de</strong>dor <strong>de</strong> las tres <strong>de</strong> la tar<strong>de</strong> a Puerto Howard, .en<br />

don<strong>de</strong> había un regimiento <strong>de</strong> nuestro Ejército. Más muerto que vivo por el cansancio y con principio <strong>de</strong><br />

<strong>de</strong>shidratación, pero bastante entero en el resto, me animaba el hecho que podría enterar a mi familia y<br />

camaradas, <strong>de</strong> que todavía no había pasado a ser solamente un recuerdo en esta tierra.<br />

Sentí una gran emoción en la formación <strong>de</strong>l 25 <strong>de</strong> mayo en Puerto Howard, y gran orgullo también pues en el<br />

momento que se celebraba ésta, pasaron dos Dagger "más bajo que las piedras" y a máxima velocidad; orgullo<br />

repito pues le señalé a mis camaradas presentes: "Esos son <strong>de</strong> los míos".<br />

Luego <strong>de</strong> varias peripecias más, que conjuntamente con otros argentinos metidos en el tema tuvimos que<br />

sortear, algunas <strong>de</strong> ellas por <strong>de</strong>más interesantes, conseguí cruzar a Puerto Argentino cinco días <strong>de</strong>spués.


Casi a fin <strong>de</strong> mayo, pu<strong>de</strong> volver al continente, lleno <strong>de</strong> orgullo por mi Fuerza, pues verda<strong>de</strong>ramente presencié<br />

lo que estaba haciendo y había hecho durante el conflicto, no sólo por parte <strong>de</strong> los aviadores, sino también por<br />

todo el resto <strong>de</strong>l personal <strong>de</strong> Oficiales, Suboficiales y Soldados, que dieron más que algo por la Patria. 7<br />

7 NOTA: Al llegar a Puerto Argentino, el Vicecomodoro ARANDA que luego <strong>de</strong> una "alerta roja" (la incursión<br />

mañanera <strong>de</strong> los británicos) me fue a buscar al Puesto <strong>de</strong> Comando <strong>de</strong> la BAM MLV para trasladarme al CIC, me<br />

informa luego <strong>de</strong> escuchar en forma breve mi relato, que <strong>de</strong>s<strong>de</strong> tierra personal <strong>de</strong> la ROA observó el Combate Aéreo en<br />

el cual intervine antes <strong>de</strong> ser <strong>de</strong>rribado, y estos vieron alejarse humeando a un Sea Harrier luego <strong>de</strong>l cruce casi <strong>de</strong> frente<br />

con un Dagger.


No siempre el que combate únicamente es héroe.<br />

CAPITULO CAPITULO XV XV<br />

XV<br />

'EL 'EL GATO" GATO"<br />

GATO"<br />

RELATA: RELATA: Teniente BREA, "GATO" (Piloto <strong>de</strong> Helicópteros).<br />

Durante las operaciones en <strong>Malvinas</strong>, con mi tripulación hicimos treinta salidas.<br />

Recuerdo que el 5 <strong>de</strong> mayo <strong>de</strong> 1982, al regreso <strong>de</strong> una misión <strong>de</strong> reconocimiento, se me informó que<br />

<strong>de</strong>bíamos llevar a una base situada en la Bahía <strong>de</strong> los Elefantes, (en la isla <strong>de</strong> Borbón), unos vi<strong>de</strong>ocasettes sobre<br />

lo ocurrido en las Islas, que se utilizarían en la gestión ante las Naciones Unidas, los que <strong>de</strong> allí serían enviados al<br />

Continente. También vendrían a bordo varios periodistas, los que posteriormente regresarían a Puerto Argentino.<br />

Mientras cargábamos combustible a nuestro helicóptero en "Ganso Ver<strong>de</strong>", observamos a cierta distancia<br />

cómo se estaba dando sepultura a un piloto inglés <strong>de</strong>rribado en el último ataque aéreo.<br />

Despegamos aproximadamente a las 17:00 hs.<br />

El Teniente LONGAR conducía el aparato, sobre la costa oeste <strong>de</strong> la Isla Soledad, volando en sandwich entre el<br />

agua <strong>de</strong>l estrecho San Carlos y las nubes que estaban separados por tan sólo 20 metros.<br />

Muy próximo al punto, <strong>de</strong>bimos reducir la velocidad, pues aumentó la <strong>de</strong>nsidad <strong>de</strong> la niebla.<br />

Pronto fue imposible continuar y <strong>de</strong>bimos pernoctar hasta el día siguiente.<br />

"Tenemos chocolate en los bolsillos" —en clave— y nuestro Jefe pudo dormir tranquilo sabiendo que<br />

estábamos bien.<br />

Esa noche dormimos en el helicóptero y el frío se hizo sentir mucho, más que nada porque no llevábamos ropa<br />

<strong>de</strong> abrigo. Antes <strong>de</strong> dormir repartimos entre todos el poco comestible que teníamos a bordo.<br />

Con el amanecer <strong>de</strong>l día 6, continuamos el vuelo y llegamos a <strong>de</strong>stino.<br />

Continuamos con nuestros temas <strong>de</strong> reconocimiento y rescate.<br />

El 21 <strong>de</strong> mayo uno <strong>de</strong> nuestros Pucará no volvió <strong>de</strong> una misión y se nos or<strong>de</strong>nó salir a buscarlo. Era el Capitán<br />

TOMBA.<br />

Lo único que sabíamos era que había entrado en combate contra un Harrier.<br />

Sobre la mesa <strong>de</strong> operaciones, nuestro Jefe nos indicaba la posición <strong>de</strong> nuestras tropas y la probable <strong>de</strong>l<br />

enemigo. El estrecho <strong>de</strong> San Carlos parecía un lobo pronto a atacar, y si la misión no incluía su cruce todos<br />

respirábamos mejor.<br />

Mientras caminábamos hacia el helicóptero, entre las casitas <strong>de</strong> "Campo Ver<strong>de</strong>", repetíamos mentalmente las<br />

últimas indicaciones <strong>de</strong> nuestro jefe <strong>de</strong> Escuadrón: '"Recuer<strong>de</strong>n, estaremos aguardando en la frecuencia xxx;<br />

atentos a la Bahía Ruiz <strong>de</strong> Puente que por allí han visto helicópteros ingleses y por último ¡Tráiganlos vivos!<br />

El Comandante me preguntó.<br />

— GATO, ¿trae la carta <strong>de</strong> navegación?<br />

Asentí, mientras llegábamos al BELL, que estaba oculto entre las casas <strong>de</strong>l pueblo.


Despegamos aproximadamente a las 17:15 horas, cuando comenzaba a anochecer, <strong>de</strong>bido a la estación <strong>de</strong>l<br />

año y la latitud <strong>de</strong> nuestras islas.<br />

Luego <strong>de</strong> un corto vuelo rasante, llegamos al punto, ubicado al este <strong>de</strong> la Bahía "Puerto Nuevo", que se<br />

encuentra al sur oeste <strong>de</strong> DARWIN.<br />

Permanecíamos atentos a la radio, pues un chasquido intermitente nos indicaría que un radar enemigo nos<br />

tenía en pantalla; este era nuestro criollo "RADAR WARNING".<br />

No veíamos nada, mientras se ponía cada vez más oscuro, lo que se agravó por una bruma que reducía la<br />

visibilidad.<br />

A unos 300 metros a mi izquierda vi algo irregular, eran los restos <strong>de</strong>l Pucará que se había partido en dos, a la<br />

altura <strong>de</strong> la raíz <strong>de</strong>l ala.<br />

No tenía signos <strong>de</strong> que se hubiera incendiado, pero nos pareció ver el asiento <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la cabina, lo que<br />

indicaría que el piloto no había tenido tiempo <strong>de</strong> eyectarse. Se me hizo un nudo en el estómago, pues hacía muy<br />

poco había recogido los restos <strong>de</strong> otro piloto argentino <strong>de</strong>rribado.<br />

El Cabo Primero QUIÑONES se bajó a inspeccionar los restos, con su habitual chaleco parabalas, un fusil y un<br />

aplomo admirable.<br />

Para nuestra alegría, encontró el asiento y <strong>de</strong>bajo <strong>de</strong>l mismo, prolijamente doblado el paracaídas.<br />

Era obra <strong>de</strong> él sin ninguna duda, para evitar que <strong>de</strong>late su posición.<br />

Comenzamos a buscarlo, sobrevolamos una casa <strong>de</strong>struida pero no estaba.<br />

En nuestra radio escuchamos la voz <strong>de</strong>l Mayor POSE que nos <strong>de</strong>cía:<br />

— VERDE — AZUL, suspenda misión que se hace <strong>de</strong> noche. Hicimos silencio en la frecuencia.<br />

— Hay noveda<strong>de</strong>s?<br />

El Teniente LONGAR le contestó: — Estamos cerca.<br />

— Bueno, cuando consi<strong>de</strong>ren conveniente, peguen la vuelta.<br />

De pronto una bengala redonda y roja estalló en la noche. Podría ser el piloto, o bien una trampa, como había<br />

ocurrido días antes en que <strong>de</strong>rribaron otro helicóptero alertado por una bengala.<br />

Recordé el cabello pelirrojo <strong>de</strong> su hijo Ramiro y seguimos.<br />

Llegamos a una pendiente con los restos <strong>de</strong> una construcción, cuando una luz roja cruzó cerca <strong>de</strong> la casa.<br />

Mi imaginación captó como el disparo <strong>de</strong> una munición "trazante" ( que indica con un surco <strong>de</strong> luz su<br />

recorrido).<br />

El Teniente LONGAR dijo que le pareció una bengala.<br />

No muy convencido nos acercamos. El valiente QUIÑONES bajó a buscar al piloto, lo vimos per<strong>de</strong>rse en las<br />

sombras, empujado por el fuerte viento helado.<br />

Mientras tanto, levantamos vuelo nuevamente y en "estacionario" recorrimos las inmediaciones con nuestro<br />

faro <strong>de</strong> búsqueda.<br />

No había nada.<br />

Recogimos a QUIÑONES, pensando que una bengala en la noche es muy difícil <strong>de</strong>terminar su posición y<br />

distancia.<br />

— Rumbo a poner para retorno.


— CERO-SEIS-CINCO.<br />

Iniciamos el ascenso y ¡¡¡ OTRA BENGALA !!!<br />

El Comandante puso rumbo hacia ella, y la luz que le quedaba antes <strong>de</strong> extinguirse cuando llegó a tierra,<br />

<strong>de</strong>jaba ver una construcción <strong>de</strong> piedra abandonada.<br />

Cuando estábamos aterrizando, otra bengala más, <strong>de</strong>scribió una parábola <strong>de</strong>lante nuestro.<br />

Ojalá que todos los ingleses estén durmiendo; pensaba yo.<br />

Nuevamente bajó QUIÑONES, para recibir al Capitán TOMBA que apareció corriendo hacia nosotros.<br />

Despegamos.<br />

— Rumbo a casa - CERO - SEIS - CINCO ... ESPERO<br />

Mi duda era que me había <strong>de</strong>subicado un poco con los continuos cambios <strong>de</strong> rumbo.<br />

Por la radio escuchamos - VERDE - AZUL<br />

— Prosiga<br />

— Noveda<strong>de</strong>s?<br />

— Positivas!!!<br />

— El Mayor POSE solo mantuvo apretado el pulsador (botón que se aprieta para hablar por radio), a fin <strong>de</strong> que<br />

escucháramos la infernal gritería <strong>de</strong> los que estaban al otro lado <strong>de</strong> la línea.<br />

En la negrura <strong>de</strong> la noche, vimos <strong>de</strong>lante nuestro un círculo <strong>de</strong> luces, eran las linternas <strong>de</strong> los pilotos <strong>de</strong><br />

Pucará y Helicópteros, que nos <strong>de</strong>cían // ESTAMOS EN CASA //.<br />

Mientras festejábamos, le escuché <strong>de</strong>cir al Capitán TOMBA que se dio cuenta que éramos nosotros y no los<br />

ingleses por el ruido <strong>de</strong> las palas <strong>de</strong>l BELL, lo que me atrajo a la mente las estrofas que transcribo:<br />

"Antes <strong>de</strong> verme llegar<br />

me anunciaré con golpes secos y constantes<br />

contra el aire y el viento"...


CAPITULO CAPITULO XVI<br />

XVI<br />

"EL "EL HIJO HIJO PRODIGO"<br />

PRODIGO"<br />

Los hombres a veces eligen otros caminos, y la vida cada vez los aleja más; pero muchos, cuando en<br />

esa casa que <strong>de</strong>jaron por su propia voluntad los necesitan, vuelven y a veces son mejores aún que algunos<br />

que siempre vivieron allí.<br />

RELATA; RELATA; Primer Teniente CALLEJO. (Piloto <strong>de</strong> MIRAGE V "DAGGER")<br />

DÍA: DÍA: 24 <strong>de</strong> mayo <strong>de</strong> 1982.<br />

Llegaron dos ór<strong>de</strong>nes fragmentarias, las que serían cumplidas por la Escuadrilla "RATÓN", compuesta por el<br />

Capitán DÍAZ, el Mayor PUGA y el Teniente CASTILLO; y la "LAUCHA", con el Capitán DELLEPIANE, el Primer<br />

Teniente MUSSO y yo.<br />

Destaco muy especialmente al Primer Teniente D. Carlos MUSSO, quien pidió la baja <strong>de</strong> la Fuerza Aérea<br />

<strong>Argentina</strong> en el año 1980, ingresando a Aerolíneas <strong>Argentina</strong>s. Apenas iniciada la guerra, fue convocado y<br />

rehabilitado para luego participar <strong>de</strong> varias misiones con entusiasmo y valor. Fue el único piloto "civil" que<br />

intervino en misiones <strong>de</strong> guerra con aviones <strong>de</strong> combate.<br />

Preparamos nuestra misión. Debíamos trazar nuestra navegación, tratando <strong>de</strong> eludir el probable lóbulo (parte<br />

<strong>de</strong>l espacio aéreo en la que un radar capta un cuerpo que se <strong>de</strong>splaza) <strong>de</strong>l radar <strong>de</strong> las Fragatas; vuelo rasante<br />

sobre las Islas, cruzar el estrecho <strong>de</strong> San Carlos y luego hacia la .Bahía, para bombar<strong>de</strong>ar buques y cabeza <strong>de</strong><br />

playa.<br />

Nuestra escuadrilla, los "LAUCHAS", íbamos al segundo objetivo.<br />

Básicamente, tanto los "RATONES", como los "LAUCHAS", <strong>de</strong>bíamos realizar la misma navegación llegando al<br />

mismo punto, pero atacando objetivos distintos, con una diferencia <strong>de</strong> pocos minutos entre ellas.<br />

Nosotros atacaríamos sobre tierra.<br />

Realizamos la reunión previa, nos cambiamos, el último apretón <strong>de</strong> manos, la frase acostumbrada <strong>de</strong> ¡¡BUENA<br />

CAZA!! y a los aviones.<br />

Trepamos a nuestra <strong>de</strong>svencijada camioneta rural, propiedad <strong>de</strong> YPF, piloteada por un simpático chofer a<br />

quien llamábamos cariñosamente "PUPI" (aludiendo a un conocido corredor), porque hubo casos en los que nos<br />

hacía gastar más adrenalina en el recorrido hasta los aviones, que en una misión <strong>de</strong> combate.<br />

Ya en nuestras cabinas, un último pensamiento a Dios y nuestros familiares, luego a medida que aumentaban<br />

las revoluciones <strong>de</strong> nuestras turbinas, pusimos toda la fuerza y el corazón en cumplir nuestra misión.<br />

Los "LAUCHAS" <strong>de</strong>bíamos <strong>de</strong>spegar en segundo lugar, 3 o 4 minutos <strong>de</strong>trás <strong>de</strong> los "RATONES", pero en ese<br />

momento, giró la rueda <strong>de</strong>l <strong>de</strong>stino, un numeral <strong>de</strong> la primera escuadrilla no podía poner en marcha.<br />

Guardamos un nervioso silencio <strong>de</strong> radio, hasta que el Jefe tomó la <strong>de</strong>cisión -Salgan los "LAUCHAS" primero<br />

que nosotros vamos <strong>de</strong>trás.


Mientras <strong>de</strong>spegábamos oímos por nuestros auriculares —"RATÓN 3 en marcha".<br />

— Bueno, por lo menos saldremos todos. Pensé yo. . . Si, salimos todos, "pero en diferente or<strong>de</strong>n..."<br />

Motor a pleno sobre frenos, con el peso máximo <strong>de</strong> <strong>de</strong>spegue; soltó freno el 1, veo el soplete gigantesco <strong>de</strong>l<br />

encendido <strong>de</strong> las post-combustión.<br />

El avión aún pesado tiene buena aceleración. Despega el 2 <strong>de</strong>lante mío y luego me llega el turno.<br />

- ¡ROJA! ¡ÁMBAR! ¡PENDULEO DE TAQUIMETRO!, repito con voz alta el procedimiento <strong>de</strong> control <strong>de</strong> encendido<br />

<strong>de</strong> post-combustión. Por unos momentos me quedo extasiado <strong>de</strong> esa diminuta luz amarilla en el tablero <strong>de</strong><br />

instrumentos, que me ayudaría a tener un <strong>de</strong>spegue exitoso, palanca atrás — ¡Y ... en el aire!.<br />

Nuestros aviones estaban configurados con tres gran<strong>de</strong>s tanques externos <strong>de</strong> combustible y dos bombas, ya<br />

que volábamos al límite <strong>de</strong> nuestro alcance efectivo.<br />

La navegación se realizó sin novedad, con momentos <strong>de</strong> verda<strong>de</strong>ra placi<strong>de</strong>z, sin pensar siquiera en el seguro<br />

infierno que nos esperaba un poco más a<strong>de</strong>lante.<br />

Iniciamos el <strong>de</strong>scenso en estricto silencio <strong>de</strong> radio. Pronto visualizamos las primeras estribaciones <strong>de</strong> las<br />

<strong>Malvinas</strong>, llamadas Islas Salvajes; enormes peñascos que se levantan entre las olas hacia el cielo.<br />

Llegando a la parte insular <strong>de</strong> navegación se tornó más difícil, ya que <strong>de</strong>bíamos formarle al guía, volar lo más<br />

bajo posible, evitar chocar contra un cerro y al mismo tiempo escrutar el cielo buscando posible enemigos.<br />

Punto <strong>de</strong> aceleración, faltan dos minutos para llegar al blanco, los "RATONES" ya están allí, entre fragatas.<br />

Escucho por mi VHF a una escuadrilla <strong>de</strong> A-4B que está atacando y utiliza nuestra misma frecuencia <strong>de</strong> radio (Era<br />

la escuadrilla <strong>de</strong>l Vicecomodoro MARIEL).<br />

De pronto, entre ór<strong>de</strong>nes y gritos, surge nítida la voz <strong>de</strong>l Mayor PUGA que dice con pasmosa tranquilidad ¡¡ME<br />

DIERON!!.<br />

El corazón se me paralizó por un momento, pero ya casi estábamos sobre el blanco; entramos a la boca <strong>de</strong> la<br />

Bahía y <strong>de</strong> inmediato nos cruzamos <strong>de</strong> frente y al mismo nivel con dos A-4B que salían <strong>de</strong>l objetivo.<br />

Seguimos al frente, sobre el lado <strong>de</strong>recho <strong>de</strong> la boca <strong>de</strong> la Bahía, una fragata comenzó a tirarnos con su<br />

artillería antiaérea.<br />

A pesar <strong>de</strong> que era pleno día, se veían perfectamente la trayectoria <strong>de</strong> los proyectiles trazantes.<br />

El pequeño puerto ya estaba a la vista, íbamos "barriendo" con nuestros cañones ambas márgenes <strong>de</strong>l<br />

estrecho. Veo tambores <strong>de</strong> combustibles anaranjados y bultos, lanzo mis bombas.<br />

De inmediato salí, con viraje cerrado por izquierda, buscando la costa norte <strong>de</strong> la isla; no veía a ninguno <strong>de</strong><br />

mis compañeros.<br />

Proseguí el viraje, reconocí <strong>de</strong> inmediato ese gran apéndice que es el "Cabo Leal", en el norte <strong>de</strong> la isla. Me<br />

pegué al agua, .ya con rumbo este en escape, para evitar los Harrier que casi siempre orbitaban en la ruta <strong>de</strong><br />

alejamiento; igual que buitres hambrientos.<br />

Cuando pasaba por la <strong>de</strong>sembocadura norte <strong>de</strong>l estrecho, vi a dos fragatas juntas, por lo que puse rumbo a la<br />

isla, para evitar que me ubicaran y per<strong>de</strong>rme entre las elevaciones y <strong>de</strong>saparecer <strong>de</strong> su radar <strong>de</strong> tiro.<br />

Cuando las tenía justo a mi <strong>de</strong>recha, a unos 2.000 metros <strong>de</strong> distancia, vi un fogonazo impresionante y una<br />

bola <strong>de</strong> fuego parecida a un corneta, que salió disparado en un ángulo <strong>de</strong> 60° a 70° hacia arriba ¡UN MISIL!.


Busqué <strong>de</strong>sesperadamente los botones <strong>de</strong> eyección <strong>de</strong> tanques externos y los apreté para alivianar el avión,<br />

el que dio un brinco en el aire.<br />

Di potencia y pleno y post-combustión, mientras hacía lo que durante días y días machacábamos -¡VIRAJE<br />

HACIA EL MISIL!.<br />

Traté <strong>de</strong> cerrar mi viraje pegado al agua, pero la nariz <strong>de</strong>l avión se levantaba, por lo que aflojé y volví a tirar<br />

palanca atrás. Una vez que el misil se perdió a lo lejos, me di cuenta <strong>de</strong> que iba rumbo a la fragata; por lo que,<br />

con todo el dolor <strong>de</strong>l alma, mostrando la "panza" <strong>de</strong> mi avión y aumentando mi superficie reflejada en su radar,<br />

me volví a las islas.<br />

Supongo que tardé algunos segundos en llegar, pero a mi me parecieron años.<br />

Mientras tanto, escuchaba a mi Jefe <strong>de</strong> escuadrilla que me llamaba por mi indicativo - ¡"SORDO" .. ."SORDO"!.<br />

Aparte <strong>de</strong> que el indicativo se adaptaba a la situación, mi lengua estaba como un cartón, no podía articular<br />

palabras y estaba <strong>de</strong>masiado ocupado en salir vivo <strong>de</strong> ese infierno para contestar.<br />

Continué vuelo rasante hasta el límite <strong>de</strong> la isla. El avión me resultaba difícil <strong>de</strong> dominar, por lo que gané un<br />

poco <strong>de</strong> altura.<br />

Recién allí miré mi velocímetro y me di cuenta <strong>de</strong> que había pasado la barrera <strong>de</strong>l sonido, por eso la dificultad.<br />

Nuevamente en las Islas Salvajes, ascendí a altitud <strong>de</strong> crucero, corté la post-combustión y me comuniqué con<br />

mi Jefe <strong>de</strong> Escuadrilla, quien me contestó muy emocionado, ya que me creía <strong>de</strong>rribado.<br />

Volvíamos los tres "LAUCHAS", pero no sabíamos nada <strong>de</strong> los "RATONES", a pesar <strong>de</strong> haberlos llamado por<br />

radio insistentemente.<br />

Aterrizamos sin novedad, revisé mi DAGGER minuciosamente mientras me repetía "no pue<strong>de</strong> ser", "no pue<strong>de</strong><br />

ser". Me costaba creer que con lo que había vivido, el avión no tuviese ni el menor rasguño. 8<br />

8 NOTA: En la Escuadrilla "RATONES", el Teniente D Carlos CASTILLO murió heroicamente en combate al ser<br />

abatido por un avión enemigo El Capitán DÍAZ y el Mayor PUGA, fueron <strong>de</strong>rribados y se eyectaron, cayendo el<br />

primero herido sobre la isla Borbón y el segundo en el mar, logrando sobrevivir luego <strong>de</strong> angustiosas horas <strong>de</strong> nadar<br />

hacia la costa <strong>de</strong> la isla, en las frías aguas <strong>de</strong>l Atlántico Sur. Ambos fueron recuperados y trasladados al continente,<br />

volviendo al servicio activo.


CAPITULO CAPITULO XVI XVI I<br />

I<br />

"RESCATE'<br />

"RESCATE'<br />

Las palas <strong>de</strong> los helicópteros fueron luces <strong>de</strong> esperanza en la noche.<br />

RELATA: RELATA: Primer Teniente PINTO (Piloto <strong>de</strong> Helicóptero BELL 212).<br />

Estábamos <strong>de</strong>scansando ya que aprovechábamos los pocos minutos libres que teníamos entre misión y<br />

misión y ataques al enemigo; cuando se recibió la or<strong>de</strong>n <strong>de</strong> operación <strong>de</strong> rescate <strong>de</strong> pilotos eyectados en la Isla<br />

Gran Malvina. No se conocían bien las coor<strong>de</strong>nadas <strong>de</strong> búsqueda, ni la cantidad exacta <strong>de</strong> pilotos a rescatar. Pero<br />

sí, nos <strong>de</strong>terminaban la zona posible <strong>de</strong> recuperación.<br />

Una vez ubicada en la carta, nos reuníamos, para <strong>de</strong>terminar la ruta <strong>de</strong> ida, el tipo <strong>de</strong> recuperación y el<br />

regreso. Debíamos tener en cuenta muy bien los acci<strong>de</strong>ntes <strong>de</strong>l terreno y el punto más a<strong>de</strong>cuado y seguro para<br />

cruzar el canal San Carlos, ya que continuamente eran patrullados por una o dos PAC <strong>de</strong> aviones enemigos, y una<br />

ruta <strong>de</strong> alternativa por la posible presencia <strong>de</strong> fragatas o helicópteros ingleses.<br />

Junto al resto <strong>de</strong> los pilotos estudiábamos perfectamente la ruta por cualquier inconveniente; el resto <strong>de</strong> la<br />

tripulación, mecánico, artillero y operador <strong>de</strong> carga preparaban la máquina con todo lo necesario.<br />

Ya teníamos todo listo, equipos, ruta, frecuencias, indicativos, cuando el Jefe <strong>de</strong> Escuadrón nos dio la or<strong>de</strong>n<br />

<strong>de</strong> partir y nos <strong>de</strong>seó mucha suerte.<br />

Era un día <strong>de</strong>spejado pero con mucho viento y frío. Despegamos con el indicativo "VERDE" y sabiendo que a lo<br />

mejor nunca nos volveríamos a ver.<br />

Encomendamos nuestras almas al Señor; y salimos con rumbo opuesto, hasta alejarnos unos 10 kilómetros<br />

<strong>de</strong>l pueblo, rasante a menos <strong>de</strong> 1 metro <strong>de</strong>l suelo y a una velocidad <strong>de</strong> 200 kilómetros/hora, por si habían<br />

captado nuestro <strong>de</strong>spegue, ya que varias veces fuimos buscados por las secciones <strong>de</strong> aviones enemigos, durante<br />

el trayecto en el cumplimiento <strong>de</strong> una misión, y que gracias a la maniobrabilidad y capacidad que tienen los<br />

helicópteros habíamos podido seguir a<strong>de</strong>lante sin ser <strong>de</strong>scubiertos.<br />

Una vez alejados lo suficiente, retornábamos a nuestro rumbo, en dirección al estrecho San Carlos, volábamos<br />

en forma individual, ya que en sección tenían mayor posibilidad <strong>de</strong> captarnos; no teníamos trajes antiexposición, y<br />

como <strong>de</strong>fensa contra el enemigo, a los Bell 212 se le habían adaptado cuatro ametralladoras frontales 7,62 mm,<br />

este tipo <strong>de</strong> helicóptero no lo posee; pero éramos un equipo muy unido y con muchos <strong>de</strong>seos <strong>de</strong> cumplimentar<br />

nuestra misión <strong>de</strong> la mejor forma posible<br />

A medida que cumplimentábamos las distintas misiones que nos llegaban <strong>de</strong>l Comando, nuestra experiencia<br />

aumentaba paulatinamente, haciéndonos sentir aún más seguros, estado éste que psicológicamente era<br />

trasmitido entre los integrantes <strong>de</strong> la tripulación.


Después <strong>de</strong> 10 minutos <strong>de</strong> vuelo bien pegado al suelo, ya que sino éramos <strong>de</strong>tectados por los radares<br />

ingleses instalados en San Carlos; llegamos al Estrecho, volamos siguiendo la costa, visualizando la zona por<br />

seguridad hasta comprobar que no había ninguna fragata ni tampoco un PAC, patrullando el estrecho, como era<br />

habitual.<br />

Enfrentamos el canal y comenzaron a transcurrir los minutos más difíciles, volábamos tan bajo que el agua<br />

nos salpicaba los para-brisas y nos disminuía la visibilidad notoriamente.<br />

Una vez llegado a la otra costa, comenzamos a serpentear entre los cañadones, para evitar ser visualizados<br />

por los PAC, y variando en algunos momentos el rumbo, por posible presencia <strong>de</strong>l enemigo en las cercanías; en el<br />

centro <strong>de</strong> la Isla era muy posible la recuperación <strong>de</strong> los pilotos.<br />

Una vez en la zona, comenzamos a volar siguiendo un patrón <strong>de</strong> búsqueda, sin po<strong>de</strong>r elevarnos mucho, para<br />

no ser <strong>de</strong>tectados por los posibles comandos que había en la zona.<br />

Después <strong>de</strong> 00:30 horas, se pudo ver a la izquierda <strong>de</strong>l rumbo que teníamos, una bengala roja, que<br />

indudablemente <strong>de</strong>bía ser un piloto eyectado, como también, podría ser una trampa, pero <strong>de</strong>bíamos comprobar lo<br />

que veíamos, y acercándonos con seguridad y atentos a cualquier emboscada, visualizamos el color naranja <strong>de</strong><br />

una balsa. Indudablemente era un piloto Argentino; nos acercamos a él, estaba muy mal; casi no podía caminar.<br />

De inmediato el personal <strong>de</strong>l helicóptero junto al médico que iba con nosotros, <strong>de</strong>scendieron para ayudarlo, lo<br />

subieron al helicóptero, rescataron todo lo que se pudo <strong>de</strong> su equipo personal, lo sentaron en el asiento <strong>de</strong>l<br />

mecánico, le hicieron colocar las piernas sobre el panel inferior ya que no podía doblarlas, se lo abrigó y le dieron<br />

café caliente; estaba irreconocible, con la cara hinchada y con los ojos negros <strong>de</strong>l impacto <strong>de</strong>l aire en la eyección.<br />

Después <strong>de</strong> verlo bien me di cuenta que era el Mayor PIUMA, eyectado <strong>de</strong> un Mirage V. Nos dimos un apretón <strong>de</strong><br />

manos y en esos momentos, a los dos se nos pasó por la mente el 31 <strong>de</strong> diciembre <strong>de</strong> 1981 en Gallegos, al<br />

brindar por un año 1982 próspero y mejor.<br />

Una vez listo, <strong>de</strong>spegamos nuevamente y en ese mismo momento escuchamos en la frecuencia internacional<br />

<strong>de</strong> emergencia, que nos llamaban, — ¡Bell 212, Bell 212, aquí estoy! —; escuchábamos bien, pero no teníamos<br />

gonio para <strong>de</strong>terminar la dirección <strong>de</strong> la llamada; en ese momento hice un brusco viraje a la <strong>de</strong>recha en busca <strong>de</strong><br />

un cañadón, ya que una sección <strong>de</strong> PAC, <strong>de</strong> aviones enemigos nos estaba buscando; logramos llegar al cañadón y<br />

justo, en ese preciso momento, pasaron por ese mismo lugar que estuvimos aterrizados, rasantes y <strong>de</strong>spacio, ya<br />

que tenían esa posibilidad. Esperamos que se perdieran en el horizonte y regresamos en busca <strong>de</strong> esa llamada,<br />

<strong>de</strong>l otro camarada eyectado que nos necesitaba. Puse rumbo sur y escuchamos cada vez más fuerte la llamada,<br />

— ¡Bell 212, Bell 212, aquí estoy! — escuché su ruido pero no lo veía. No veíamos nada pero algo <strong>de</strong>cía que tenía<br />

que continuar. Después <strong>de</strong> sobrevolar la zona durante 10 minutos, ya con poco combustible, como para volver, el<br />

mecánico me gritó que a la <strong>de</strong>recha <strong>de</strong>l rumbo teníamos a lo lejos una bengala. Inmediatamente puse ese rumbo<br />

hasta llegar al lugar; nos encontramos con el Primer Teniente SENN, que aparentemente estaba muy bien, se le<br />

ayudó a subir al helicóptero, y se lo atendió lo mejor que se pudo; le preguntamos si tenía algún conocimiento <strong>de</strong><br />

otro eyectado, y nos dijo que no, entonces ya con poco combustible, comenzamos nuestro regreso y pasamos por<br />

el puerto Howard, don<strong>de</strong> estaba la gente <strong>de</strong> ejército. Ahí subimos a un piloto inglés eyectado, con toda la cara<br />

hinchada; en el momento <strong>de</strong> subir, todos nos miramos en silencio, inspiramos profundamente, se acomodó y<br />

continuamos el regreso.


Teníamos nuevamente que cruzar el peligroso canal, con poco combustible y mucho peso; gracias a Dios no<br />

hubo ningún problema, pero cerca <strong>de</strong> nuestro <strong>de</strong>stino, y al hacer contacto radial con la Base Cóndor, nos or<strong>de</strong>nan<br />

alejarnos ya que en ese preciso momento eran atacados por los aviones enemigos; cumplimos la or<strong>de</strong>n, pero el<br />

combustible era escaso y estábamos a varios kilómetros. Nuevamente <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> 5 minutos hice contacto, y me<br />

autorizaron la aproximación por el corredor <strong>de</strong> ingreso, para no ser <strong>de</strong>rribado por nuestra propia artillería.<br />

Ya veíamos la Base; las tensiones disminuían y la gente, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el jefe hasta el último soldado, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong><br />

haber pasado juntos tantos ataques que tuvimos, nos recibieron con alegría y agra<strong>de</strong>cimiento por la misión<br />

cumplida, gracias a DIOS.


CAPITULO CAPITULO XVIII<br />

XVIII<br />

"NADANDO "NADANDO ENTRE ENTRE LAS LAS FRAGATAS<br />

FRAGATAS<br />

Dijo el Coronel Fierre CLOSTERMANN, as <strong>de</strong> la segunda guerra mundial como piloto <strong>de</strong> combate, que<br />

era muy difícil relatar las misiones <strong>de</strong> aviación, pues había mucha similitud en todas ellas; pero las<br />

características que reúne la aquí narrada, salen totalmente <strong>de</strong> lo común.<br />

RELATA: RELATA: Teniente LUCERO (Piloto <strong>de</strong> A-4C)<br />

DÍA: DÍA: 25 25 <strong>de</strong> <strong>de</strong> Ma Mayo Ma yo <strong>de</strong> 1982.<br />

Todos nos habíamos preparado muy especialmente para el día <strong>de</strong> la Patria, con el <strong>de</strong>seo <strong>de</strong> que les quedara<br />

grabado para siempre como recuerdo <strong>de</strong> los integrantes <strong>de</strong> nuestra Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong> y creo que lo<br />

logramos; el H.M.S. "COVENTRY", más mo<strong>de</strong>rno aún que el "SHEFFIELD", <strong>de</strong>scansaba en el fondo <strong>de</strong>l mar y varias<br />

fragatas escaparon hacia el este lamiéndose las heridas, como la "BROADSWORD" que recibió impactos <strong>de</strong><br />

bombas pero no se hundió; al mismo tiempo, los pilotos <strong>de</strong> los Super Etendart no se quedaron atrás y hundieron<br />

el porta contenedores "ATLANTIC CONVEYOR".<br />

Para mí' fue también un día inolvidable, pero por muy distintas razones.<br />

La Escuadrilla "Toro", cuyo Jefe <strong>de</strong> Escuadrilla era el Capitán D. Jorge Osvaldo GARCÍA, el numeral dos era yo,<br />

el Jefe <strong>de</strong> Sección era el Teniente PAREDI y el cuatro el Alférez ISAAC, estaba <strong>de</strong> alerta y recibió la or<strong>de</strong>n <strong>de</strong><br />

<strong>de</strong>struir blancos navales situados en la bahía San Carlos.<br />

Todo se sucedió a semejanza <strong>de</strong> lo ya vivido muchas veces en misiones anteriores: Reunión previa, colocación<br />

<strong>de</strong> equipos <strong>de</strong> vuelo, <strong>de</strong>spedidas, miedo, <strong>de</strong>spegue, reabastecimiento, control <strong>de</strong> armamento, <strong>de</strong>scenso, rasante,<br />

más miedo y en el horizonte se comenzaron a dibujar los contornos <strong>de</strong> las islas. Sobre las cimas <strong>de</strong> los cerros<br />

flotaban pequeñas nubecitas, restos <strong>de</strong> la niebla <strong>de</strong> la mañana.<br />

Ya sobre la isla Soledad tuvimos la certeza <strong>de</strong> que no habíamos sido <strong>de</strong>tectados por el enemigo y en el oval<br />

(vidrio a prueba <strong>de</strong> balas que se encuentra en la parte <strong>de</strong>lantera <strong>de</strong> la cabina y protege la cabeza <strong>de</strong>l piloto)<br />

comenzó a agrandarse la cima <strong>de</strong>l monte <strong>de</strong>trás <strong>de</strong>l cual estaba nuestro objetivo.<br />

La última vez que miré la pantalla <strong>de</strong> mi sistema <strong>de</strong> navegación, faltaban sólo cuarenta segundos para entrar<br />

en combate. Ya era imposible que nos interceptaran.<br />

Siguiendo los acci<strong>de</strong>ntes geográficos comenzamos a ascen<strong>de</strong>r por la pendiente para sortear la última<br />

prominencia <strong>de</strong>l terreno, una vez en la cúspi<strong>de</strong> tuvimos <strong>de</strong>lante nuestro y unos doscientos metros más abajo la<br />

bahía San Carlos y <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> ella unas 6 ó 7 naves enemigas.<br />

Dijo el Capitán GARCÍA: - Ahí están, al frente ¡VAMOS! - había que <strong>de</strong>scen<strong>de</strong>r, pegarse al agua, elegir un blanco.<br />

Incliné mi avión hacia la izquierda y me puse lateral al guía, viendo levemente a la <strong>de</strong>recha <strong>de</strong> mi línea <strong>de</strong> vuelo<br />

una fragata con la proa hacia mi, en un ángulo <strong>de</strong> unos treinta grados a la izquierda; comencé a girar suavemente


hacia ellas con los timones (pedales que hacen girar el avión en su eje horizontal), temiendo tocar el agua con un<br />

ala o aumentar mi superficie <strong>de</strong> reflexión en su pantalla <strong>de</strong> radar; actué el disparador <strong>de</strong> cañones que se trabaron<br />

y simultáneamente comenzó su artillería a dispararme. Me elevé un poco para lanzar mis bombas y las lancé;<br />

había que salir <strong>de</strong> allí.<br />

En el momento en que pasé sobre la fragata sentí un fuerte impacto en la trompa en la parte inferior <strong>de</strong> mi A-<br />

4; por los costados <strong>de</strong> mi cabeza pasaron gran<strong>de</strong>s trozos <strong>de</strong> lo que había sido el radome (cubierta protectora <strong>de</strong><br />

los equipos que van en la proa) <strong>de</strong> mi avión, mientras este se sacudía bruscamente.<br />

Los otros miembros <strong>de</strong> mi escuadrilla comenzaron a alejarse pese a que yo tenía mi potencia (acelerador-<br />

aplicada al máximo por lo que intenté en vano avisarle a mi guía que había sido tocado, pero la radio no<br />

funcionaba. Miré el indicador <strong>de</strong> perfomance <strong>de</strong>l avión, estaba perdiendo altura; los comandos estaban blandos<br />

"gomosos" apenas si me respondían, podía mantenerlo con las alas niveladas colocando el "bastón <strong>de</strong> mando"<br />

(palanca) totalmente a la <strong>de</strong>recha y atrás. La cabina empezó a llenarse <strong>de</strong> humo y sentí fuertes vibraciones y<br />

tirones en el motor. Mi máquina ya no volaba más y podía estallar en cualquier momento por lo que <strong>de</strong>cidí<br />

eyectarme; por suerte tuve en cuenta la elevada velocidad y las consecuencias físicas que podía sufrir, cerré los<br />

ojos, endurecí los músculos <strong>de</strong> todo el cuerpo y accioné la manija <strong>de</strong> eyección superior.<br />

Sentí primero la presión <strong>de</strong>l aire que entraba en la cabina, escuché ruidos, el cohete <strong>de</strong>l asiento comenzó a<br />

impulsarme hacia arriba mientras tenía la sensación <strong>de</strong> que giraba hacia atrás sin control. En un primer momento<br />

pensé que la eyección no había funcionado y que los ruidos que escuché al <strong>de</strong>spren<strong>de</strong>rse la cúpula (carlinga) y<br />

encen<strong>de</strong>rse el cartucho eyector, eran los <strong>de</strong> mi avión cayendo al agua y que me estaba muriendo.<br />

En ese momento me pasó algo muy difícil <strong>de</strong> creer, fue como una visión, <strong>de</strong> pronto me encontré observando el<br />

acci<strong>de</strong>nte como si fuese un espectador, como si yo no interviniese o no tomase parte <strong>de</strong> él; vi a mi "Skyhawk", ya<br />

bastante averiado, que impactaba contra el agua y se <strong>de</strong>sintegraba ¡PERO YO ESTABA ADENTRO !, recuerdo como<br />

en un sueño que por un trozo <strong>de</strong> chapa corría un <strong>de</strong>lgado hilo <strong>de</strong> sangre.<br />

A pesar <strong>de</strong> creer y <strong>de</strong> verme <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l avión, yo sentía una gran sensación <strong>de</strong> paz y al no oír ruidos di gracias<br />

a Dios porque no había sufrido dolor y a<strong>de</strong>más pedí para que <strong>de</strong> alguna forma mi querida esposa y mis familiares<br />

me perdonaran por el dolor que les causaría con mi muerte.<br />

Cuando creía que todo había terminado, un fuerte sacudón acompañado <strong>de</strong> una explosión ahogada más el<br />

golpe en el rostro <strong>de</strong> una ráfaga <strong>de</strong> viento helado me hizo abrir los ojos. ESTABA VIVO, colgando <strong>de</strong>l paracaídas<br />

que se acababa <strong>de</strong> abrir a unos 50 ó 100 metros <strong>de</strong>l agua, la que se acercaba vertiginosamente.<br />

Antes <strong>de</strong> seguir, quiero relatar lo que sentí en ese momento, todos pensarán que una gran alegría, pero no fue<br />

así, sólo me alegré por los que amaba, pero yo estaba muy bien en esa inmensa paz, esperando mi encuentro con<br />

Nuestro Señor, y cuando me encontré luchando nuevamente por sobrevivir entre lo piques <strong>de</strong> los cañones <strong>de</strong> las<br />

fragatas, el fuerte viento que me azotaba y las aguas heladas que me esperaban, sentí una tremenda <strong>de</strong>silusión;<br />

sé que no resulta lógico, pero eso fue lo que experimenté.<br />

Escuché gritos a lo lejos, estaba cayendo en medio <strong>de</strong> las naves enemigas y en el corazón <strong>de</strong> la bahía <strong>de</strong> San<br />

Carlos. El contacto con el agua helada me contrajo los pulmones, pero gracias al oxígeno <strong>de</strong> emergencia y la<br />

máscara pu<strong>de</strong> seguir respirando bajo la superficie; me sumergí unos dos metros, miré hacia arriba y vi que el


velamen <strong>de</strong>l paracaídas no estaba arriba mío, traté <strong>de</strong> impulsarme con las piernas hacia arriba para salir a flote,<br />

pero no me respondían; comencé a sentir un agudo dolor en las rodillas, emergí y la máscara se me pegó a la<br />

cara al acabarse la carga <strong>de</strong> oxígeno; me la quité e intenté inflar el bote y el salvavidas, logrando hacer sólo lo<br />

segundo. El fuerte viento me arrastró hacia el velamen y comencé a enredarme en sus cuerdas, mientras trataba<br />

<strong>de</strong> liberarme <strong>de</strong> ellas las manos se me congelaban quedando inútiles. Alcé mi brazo izquierdo y grité pidiendo<br />

auxilio, pero no veía a nadie, seguí tratando <strong>de</strong> inflar el bote, pues si el paracaídas se hundía me arrastraría con él<br />

hacia el fondo <strong>de</strong> la bahía; tenía mucho miedo <strong>de</strong> morir ahogado.<br />

Estaba ocupadíimo en mi tarea cuando algo duro golpeó contra mi casco, me di vuelta y vi junto a mí a un bote<br />

que no había escuchado llegar <strong>de</strong>bido al viento; uno <strong>de</strong> sus ocupantes me apuntaba con un fusil, por lo que alcé<br />

mis manos y recién entonces, sin <strong>de</strong>jar <strong>de</strong> apuntarme me tomaron <strong>de</strong>l arnés <strong>de</strong> torso. Enseguida llegó otro bote,<br />

pero les resultó imposible izarme a bordo, por lo que comenzaron a cortar las cuerdas que me impedían<br />

moverme; las piernas me dolían cada vez más. En un intento por subirme llegué a estar con la mitad <strong>de</strong>l cuerpo<br />

<strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> un bote , pero el oleaje y mi imposibilidad <strong>de</strong> asirme, hicieron que cayera nuevamente al agua. Llegó al<br />

lugar luego una lancha <strong>de</strong> <strong>de</strong>sembarco con la rampa baja, pasó lentamente a mi lado y comencé a sentir que me<br />

tiraba hacia abajo <strong>de</strong> su casco, grité y me aferré a una cuerda que había en su costado, envolviéndola en mi<br />

brazo, mientras gritaban ór<strong>de</strong>nes en inglés. Uno <strong>de</strong> ellos se tendió sobre la planchada y me tomó <strong>de</strong>l barbijo <strong>de</strong>l<br />

casco <strong>de</strong> vuelo, manteniéndome la cabeza fuera <strong>de</strong>l agua; me sacaron <strong>de</strong> abajo <strong>de</strong>l casco e intentaron subirme<br />

por un costado <strong>de</strong> la rampa, pero por el peso <strong>de</strong> mi cuerpo con todo el equipo mojado, en lugar <strong>de</strong> ir hacia arriba<br />

me metía <strong>de</strong>bajo <strong>de</strong> la rampa; estábamos todos <strong>de</strong>sesperados, ellos y yo, todos gritábamos tratando <strong>de</strong> lograr un<br />

poco <strong>de</strong> coordinación y or<strong>de</strong>n. La succión me arrastró <strong>de</strong>bajo <strong>de</strong> la rampa, antes <strong>de</strong> sumergirme respiré hondo y<br />

rogué a Dios que no se enredara ninguna cuerda <strong>de</strong>bajo, antes <strong>de</strong> que mi cuerpo salga al otro lado. Sentía el<br />

ruido sordo <strong>de</strong> mi casco que iba rozando la rampa y girando la cabeza veía que estaba oscuro sobre mí, hasta que<br />

observé claridad <strong>de</strong>l otro lado y mi <strong>de</strong>sesperación por salir más el salvavidas, me sacaron nuevamente a la<br />

superficie. Se acercó uno <strong>de</strong> los botes y me llevó por un extremo hasta la barcaza, no podía mover las piernas,<br />

pero como pu<strong>de</strong> subí hasta quedar fuera <strong>de</strong>l alcance <strong>de</strong> las olas. No tenía fuerzas para nada pero estaba<br />

contento, aún tenía vida.<br />

En la mitad <strong>de</strong> la lancha me sacaron el equipo <strong>de</strong> vuelo, colocándome luego boca abajo, con una bota en la<br />

espalda y la boca <strong>de</strong> un fusil en la cabeza.<br />

De allí fui transferido a una fragata en don<strong>de</strong> recibí la primera atención médica, me colocaron una inyección<br />

<strong>de</strong> morfina mientras yo observaba mis piernas, las que tenían la rótula izquierda totalmente fuera <strong>de</strong> su lugar y un<br />

gran e<strong>de</strong>ma, la <strong>de</strong>recha estaba en condiciones parecidas pero con un dolor parejo en ambas. Me acomodaron<br />

como pudieron y me colocaron una bota inflable para inmovilizar la pierna.<br />

Luego me hicieron un interrogatorio normal, a cargo <strong>de</strong> un colaborador <strong>de</strong>l gobierno inglés, llamado Jordán,<br />

con quien nos veríamos a menudo. Luego fui llevado en helicóptero a un hospital <strong>de</strong> campaña en un antiguo<br />

establecimiento.<br />

Allí' comencé a temer por mi futuro, muchas dudas me daban vueltas por la cabeza, sentía una soledad<br />

tremenda, me preguntaba si volvería a casa, si me torturarían, si me habían salvado sólo para obtener<br />

información.


Esa tar<strong>de</strong> vino un médico llamado Jaime y me explicó lo que tenían mis piernas, ligamentos rotos en la<br />

izquierda y esguince en la <strong>de</strong>recha. Posteriormente vino el señor Jordán a hacerme otro interrogatorio más<br />

intenso <strong>de</strong>l que no sacó nada, luego <strong>de</strong>l cual me preguntó si necesitaba algo; le pregunté por el resto <strong>de</strong> mi<br />

escuadrilla, contestándome que sólo uno <strong>de</strong> ellos se había salvado; le dije que <strong>de</strong>seaba hacerle saber a mi<br />

familia que estaba bien, ante lo cual accedió a que escriba una carta.<br />

A la noche me anestesiaron para hacerme un estudio <strong>de</strong> las lesiones que tenía en las piernas.<br />

Al día siguiente trajeron muchos heridos ingleses <strong>de</strong> los ataques aéreos y terrestres, los que fueron evacuados<br />

a la tar<strong>de</strong>, <strong>de</strong>jándome solo en el hospital, avisándome que al día siguiente sería trasladado al "UGANDA".<br />

La noche <strong>de</strong>l 26 <strong>de</strong> mayo hubo un bombar<strong>de</strong>o <strong>de</strong> los Canberra, en el que tuvieron muchos heridos. Yo temí<br />

que me mataran pues en un interrogatorio les había dicho que la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong> no estaba en<br />

condiciones <strong>de</strong> atacar <strong>de</strong> noche, aparte <strong>de</strong> eso, mientras los gringos estaban en los refugios estuve muy cerca <strong>de</strong><br />

morir bajo las bombas <strong>de</strong> mis compañeros, ya que el edificio está en el medio <strong>de</strong> la bahía.<br />

El 27 por la tar<strong>de</strong> fui evacuado al buque hospital "UGANDA", en helicóptero, mientras íbamos hacia él,<br />

<strong>de</strong>bimos posarnos en una fragata pues habían <strong>de</strong>tectado aviones nuestros que se dirigían hacia San Carlos.<br />

Una vez a bordo volvieron a anestesiarme para hacer una punzación. El 28 <strong>de</strong> mayo comenzaron a llegar<br />

heridos <strong>de</strong> los combates <strong>de</strong> Prado <strong>de</strong>l Ganso y Puerto Darwin.<br />

Así fueron transcurriendo los días hasta el 30, mientras pensaba en mi familia, en mi Escuadrón, en los que<br />

quedaban peleando, en los que se habían eyectado y me preguntaba si DIOS les había dado a ellos la misma<br />

oportunidad que me había dado a mí.<br />

El 1° <strong>de</strong> junio me dijeron que probablemente el buque Argentino "BAHÍA PARAÍSO", iría a hacer un traspaso <strong>de</strong><br />

heridos, lo cual aceleraría mi regreso al continente; pasaron dos días sin novedad, pero el tercero vino el señor<br />

Richards y me dijo que al día siguiente se haría el traspaso. Así ocurrió y allí nuevamente <strong>de</strong>bí contestar a un<br />

extenso interrogatorio. Pregunté qué había sido <strong>de</strong>l resto <strong>de</strong> mi escuadrilla, pero no pudieron <strong>de</strong>círmelo; cuando<br />

me contaron <strong>de</strong>l ataque al "INVINCIBLE" me alegré mucho, pero tuve miedo <strong>de</strong> preguntar cuántos fueron los<br />

<strong>de</strong>rribados y lo más duro para mí, quienes eran.<br />

Navegamos toda la noche alre<strong>de</strong>dor <strong>de</strong> la isla Soledad para entrar en bahía FOX y puerto HOWARD, en don<strong>de</strong><br />

embarcaron heridos y entre ellos, el Primer Teniente VELASCO, quien me contó el <strong>de</strong>stino <strong>de</strong>l resto <strong>de</strong> mi<br />

escuadrilla (VELASCO se había eyectado el 27 <strong>de</strong> mayo, luego <strong>de</strong> un ataque).<br />

Las últimas doce horas <strong>de</strong> navegación fueron interminables; por fin, con los primeros minutos <strong>de</strong> vida <strong>de</strong>l día<br />

7 <strong>de</strong> junio me dijeron que íbamos a iniciar el <strong>de</strong>sembarco. Llegué a Santa Cruz a las 3 <strong>de</strong> la mañana, <strong>de</strong> allí a<br />

Comodoro Rivadavia, en don<strong>de</strong> permanecí hasta la noche.<br />

Mi mayor <strong>de</strong>seo era volver con mi Escuadrón antes <strong>de</strong> regresar a casa. Esa noche salí hacia la Base en la que<br />

seguían combatiendo mis compañeros y entre bromas, anécdotas y emoción, me enteré <strong>de</strong> la suerte corrida por<br />

mis compañeros <strong>de</strong> Escuadrilla y <strong>de</strong> todo lo acontecido en esos eternos días.<br />

Al otro día, reviví la emoción y la angustia <strong>de</strong> la espera, cuando vi las Escuadrillas que partían hacia el este,<br />

internándose en el mar, a buscar el combate, no a morir por un acci<strong>de</strong>nte, sabiendo que la muerte está allí<br />

enfrentándola, muriendo o matando por !o que le quitaron por la fuerza, pero que nunca <strong>de</strong>jó <strong>de</strong> pertenecerles.<br />

Era el día 8 <strong>de</strong> junio <strong>de</strong> 1982, que en el futuro se le conocerá como "EL DÍA MAS NEGRO DE LA FLOTA".


Me hubiera gustado sacar una foto, la noche en que el helicóptero me llevó <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el barco al Continente.<br />

Recuerdo que se fue achicando rápidamente <strong>de</strong>bajo mío, <strong>de</strong>jando una estela tras <strong>de</strong> sí, mientras entraba a<br />

puerto; en el ciclo brillaba una luna grandota y una sensación tremenda <strong>de</strong> alivio me invadió. Nunca creí llegar<br />

vivo al continente. Después <strong>de</strong> la eyección temí muchas veces que ellos me mataran. Cuando me llevaron a un<br />

barco inglés comencé a temer a los pilotos <strong>de</strong> la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong>, que en cualquier momento podían<br />

atacarnos; cuando me trasladaron a un barco nuestro temía los submarinos <strong>de</strong> ellos, los días en el mar no<br />

pasaban nunca por eso mientras el helicóptero se elevaba y mi pesadilla se empequeñecía <strong>de</strong>bajo, iluminada por<br />

la luna; <strong>de</strong>seé tener una cámara para grabar ese preciso instante, en el que me sentí como Lázaro, que volvió<br />

<strong>de</strong>s<strong>de</strong> la misma muerte.<br />

Luego a casa, el reencuentro, las lágrimas, el recibimiento <strong>de</strong> mi querido pueblo que me trató <strong>de</strong> héroe, sin<br />

saber que en nuestra Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong>, las medallas y ese calificativo, están reservados para esos<br />

privilegiados que tuvieron el honor <strong>de</strong> dar la vida por la Patria. 9<br />

9 NOTA DEL AUTOR: Ruego a todo aquel que lea este relato lo haga con el <strong>de</strong>bido respeto, ya que ocurrió exactamente<br />

así y quien lo vivió no <strong>de</strong>seaba hacerlo saber, pero accedió por dos razones, la primera el afecto que siente hacia mí y yo<br />

por él (fui su instructor cuando era ca<strong>de</strong>te <strong>de</strong> segundo año en la <strong>Escuela</strong> <strong>de</strong> <strong>Aviación</strong> <strong>Militar</strong> <strong>de</strong> Córdoba, y allí aprendí<br />

avalorarlo por su humildad, su capacidad y principalmente por sus virtu<strong>de</strong>s morales) la segunda fue que consi<strong>de</strong>ro que<br />

quienes compran un libro en el que habla <strong>de</strong>l sacrificio <strong>de</strong> la propia vida por un i<strong>de</strong>al y siempre está presente Dios,<br />

tienen la suficiente madurez para compren<strong>de</strong>r y apreciar el relato <strong>de</strong> la terrible prueba que <strong>de</strong>bió superar.


CAPITULO CAPITULO XIX<br />

XIX<br />

"SI "SI USTEDES USTEDES LO LO PERMITEN”<br />

PERMITEN”<br />

Por la noche el cañoneo <strong>de</strong> las fragatas, en el día los bombar<strong>de</strong>os <strong>de</strong> los Vulcan, en el suelo la<br />

humedad permanente y en el cielo los Harriers los buscaban; pero los Pucará seguían saliendo, volando<br />

hasta en los días en que "ellos" no podían hacerlo; fiel y leal como un caballo criollo.<br />

RELATA: RELATA: Primer Teniente CRUZADO "GATO" (Piloto <strong>de</strong> PUCARÁ).<br />

El peligro era constante, pero cuando yo realmente me sentía in<strong>de</strong>fenso, era en los momentos previos a poner<br />

mi avión en marcha, mientras me ataba y veía inconscientemente como una película que me retrotraía al 1° <strong>de</strong><br />

mayo; cuando dos buitres oscuros, con sus alas plegadas y bajas, <strong>de</strong>jaron un reguero <strong>de</strong> <strong>de</strong>strucción y muerte<br />

con sus bombas prohibidas. El Teniente DANIEL JUKIC y los Suboficiales que prestaban apoyo a su Pucará,<br />

quedaron para siempre en la pista <strong>de</strong> Ganso Ver<strong>de</strong>.<br />

Despegué como numeral <strong>de</strong>l Primer Teniente MICHELOUD, para brindar apoyo a Darwin, que se resistía a caer.<br />

Nuestro blanco se encontraba al norte <strong>de</strong> la Base.<br />

Entramos por el sur <strong>de</strong>l Estrecho San Carlos, virando luego hacia la <strong>de</strong>recha, <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la Bahía <strong>de</strong> Ruiz <strong>de</strong><br />

Puente, poniendo luego rumbo sur. Esa era la zona.<br />

Algo se movió, y la tierra pareció cobrar vida, misiles, munición trazante, explosiones y todos parecían venir<br />

hacia mi avión.<br />

¡No <strong>de</strong>bía <strong>de</strong>sconcentrarme!, lancé una salva <strong>de</strong> cohetes que dieron en medio <strong>de</strong> ellos; por mis auriculares<br />

(audífonos <strong>de</strong>l casco), escuché al "CÓNDOR" que gritaba: ¡¡¡Buena puntería, ese es el lugar, continúe tirando!!!.<br />

Nuevamente apreté el disparador, viendo una jauría <strong>de</strong> cohetes que se perseguían hacia el blanco; cuando <strong>de</strong><br />

pronto, comencé a sentir como martillazos que sacudían una y otra vez a mi avión.<br />

Una luz, una explosión y en el panel <strong>de</strong> instrumentos que se encontraba a mi <strong>de</strong>recha, <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la cabina,<br />

comenzaron a saltar chispas para todos lados, como fuegos artificiales. Escuché un ruido, como el que producen<br />

las brasas bien prendidas, y vi en mi carlinga (burbuja transparente que cubre la cabina) que se astillaba en mil<br />

pedazos, y entre el humo, penetró el aire helado.<br />

Yo volaba a 10 metros <strong>de</strong>l suelo. De un palancazo (los aviones <strong>de</strong> combate se pilotean con una palanca y no<br />

con un volante) intenté virar hacia la izquierda intentando esquivar esos puntos dorados que me buscaban, pero<br />

mi avión siguió volando en línea recta ¡Estaba sin comandos!<br />

Mis manos volaron hacia la manija <strong>de</strong> eyección (sistema que automáticamente saca al piloto con su asiento<br />

<strong>de</strong> <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l avión y luego abre el paracaídas). Ya nada podía hacer, estaba muy bajo, sin po<strong>de</strong>r dominar a mi<br />

máquina, y sentía a la muerte muy cercana, pero no tenía miedo y estaba tranquilo.


Sentí una aceleración tremenda, no me <strong>de</strong>smayé, y el impacto <strong>de</strong>l aire helado me <strong>de</strong>jó sin respiración. Vi<br />

hundirse entre mis piernas a los restos <strong>de</strong> mi avión, <strong>de</strong>l que quedaba sólo la mitad, al que todavía le seguían<br />

tirando con todo lo que tenían; .... evi<strong>de</strong>ntemente, les había hecho mucho daño.<br />

No recuerdo cuándo se abrió el paracaídas, sólo se que <strong>de</strong> pronto sentí el impacto contra el suelo (dicen los<br />

que me vieron saltar <strong>de</strong>s<strong>de</strong> las líneas propias, que se terminó <strong>de</strong> abrir a sólo 30 metros <strong>de</strong>l suelo).<br />

Sabía que había caído entre ellos, intenté correr, me enredé en el paracaídas y volví a caer, ya estaba<br />

ro<strong>de</strong>ado, vi las bayonetas caladas y pensé: ¡"Gatito" a poner las cuentas en or<strong>de</strong>n con el Señor, porque te llegó el<br />

momento !.<br />

.Un grito, una or<strong>de</strong>n, y me <strong>de</strong>spojaron <strong>de</strong> mi equipo <strong>de</strong> supervivencia, mi revólver, mi cuchillo y a empujones<br />

me llevaron a la retaguardia, yo no tenía ningún apuro, pero ellos evi<strong>de</strong>ntemente estaban apurados y asustados.<br />

Un cañonazo criollo pegó muy cerca y me sentí arrojado al suelo mientras me cubrían la cabeza con un casco.<br />

Al anochecer me llevaron con un grupo <strong>de</strong> prisioneros Argentinos; muchos estaban heridos.<br />

Yo tenía solamente una camiseta, el buzo <strong>de</strong> vuelo y mi campera, más una preciada y corta bufandita, <strong>de</strong> esas<br />

que nos enviaban las mujeres <strong>Argentina</strong>s para aliviar nuestro frío, a la que yo cuidaba como un tesoro.<br />

Estábamos a la intemperie.<br />

Esa fue la noche más larga <strong>de</strong> mi vida, el frío era terrible y tenía miedo que se rompieran mis dientes por la<br />

forma en que castañeteaban.<br />

Los lamentos <strong>de</strong> un herido me penetraban el cerebro y las piernas se me empezaron a congelar.<br />

Le pedí a uno <strong>de</strong> los nuestros que intentaba dormir junto a mí, si podía acostarse sobre ellas y así lo hizo; me<br />

sentí algo mejor.<br />

El viento implacable nos aplastaba contra el piso húmedo, mientras las estrellas, frías y lejanas, brillaban<br />

sobre nosotros.<br />

Al fin, una claridad tirio el horizonte, mientras yo agra<strong>de</strong>cía la luz y a ese camarada que quizás había salvado<br />

mis piernas.<br />

El herido había <strong>de</strong>jado <strong>de</strong> sufrir.<br />

Preguntaron quienes estaban en condiciones <strong>de</strong> caminar, inmediatamente me puse <strong>de</strong> pie, aunque tenía un<br />

golpe muy fuerte y una torcedura en una pierna, pues prefería el dolor al frío, pero me hicieron sentar<br />

nuevamente, mientras trataban <strong>de</strong> hacerme enten<strong>de</strong>r que vendría un helicóptero a buscarme.<br />

Hacía ya más <strong>de</strong> un día que no comía, pero no sentía hambre; el frío, el dolor, la falta <strong>de</strong> sueño, el saber que<br />

mi familia no sabía nada <strong>de</strong> mí, me habían <strong>de</strong>primido bastante.<br />

Cuando llegó el helicóptero me llevaron a empellones y me subieron, <strong>de</strong>mostrando apuro y nerviosismo.<br />

Evi<strong>de</strong>ntemente temían un ataque <strong>de</strong> los Pucará.<br />

Antes <strong>de</strong> subir, uno <strong>de</strong> los soldados me quitó la bufandita y no sé por qué, me sentí <strong>de</strong>sprotegido.<br />

El frío me penetraba hasta los huesos, quedé tirado junto a la puerta abierta mientras un inglés me apuntaba<br />

con su fusil. De pronto, el piloto se dio vuelta y me arrojó un paquete <strong>de</strong> caramelos, mientras me hacía señas <strong>de</strong><br />

que me acerque más a la cabina, hasta don<strong>de</strong> no llegaba el viento helado. Dos o tres minutos <strong>de</strong>spués, dormía<br />

profundamente.


Llegamos a San Carlos, antes <strong>de</strong> <strong>de</strong>scen<strong>de</strong>r me cubrieron con una capucha la cabeza, e inmediatamente me<br />

llevaron a una sala para ser interrogado; un hombre <strong>de</strong> apellido García, servía <strong>de</strong> traductor. Me preguntaron sobre<br />

nuestras <strong>de</strong>fensas y cantidad <strong>de</strong> tropas y aviones, no les dije nada, aunque me di cuenta <strong>de</strong> que no les hacía<br />

falta, estaban muy bien informados. No me forzaron a hablar.<br />

García me preguntó como me llamaba y a partir <strong>de</strong> ese momento comenzó a llamarme por el nombre.<br />

Cuando salíamos <strong>de</strong>l local, sonó la alerta roja y, cuando no podía verlos, escuché las explosiones y el ruido <strong>de</strong><br />

nuestros aviones que atacaban.<br />

García me empujó contra algo que se parecía a un terraplén mientras me cubría la cabeza con un casco.<br />

Pasado el peligro, me llevó a otro lugar y me dijo que se ausentaría por unos días. Cuando él se fue, el trato<br />

cambió, me hicieron colocar sentado con las piernas cruzadas, las manos a la nuca, y un soldado inglés a mi lado<br />

que me obligaba a permanecer con el torso erguido.<br />

La <strong>de</strong>bilidad, el frío, los músculos adormecidos y el dolor <strong>de</strong> mis golpes eran terribles. Así permanecí horas,<br />

con mi verdugo al lado. En un momento dado me caí hacia atrás, golpeándome muy fuerte en la cabeza; lo que<br />

los asustó un poco.<br />

Vino un médico que me tomó el pulso y me sacó <strong>de</strong> esa situación.<br />

Cuando volvió García y me vio tan <strong>de</strong>smejorado, me preguntó:<br />

— Miguel ¿quién te ha hecho esto ? — a lo que yo contesté: — "No sé cómo quiere que sepa con esta capucha<br />

negra".<br />

Aparentemente sentía afecto por mí, pues cuando advertía que mi ánimo estaba algo <strong>de</strong>caído, me<br />

preguntaba: — ¿Cómo estás Miguel? — y me palmeaba la espalda.<br />

Tiempo <strong>de</strong>spués, junto con otros oficiales <strong>de</strong> la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong>, cuya compañía me terminó <strong>de</strong><br />

recuperar, fuimos llevados al "SIRGERAINT", en el que vivimos algo mejor.<br />

Abordo fuimos trasladados al centro <strong>de</strong> la flota para reabastecerse <strong>de</strong> combustible. Realmente era imponente<br />

la cantidad <strong>de</strong> sofisticadísimos buques <strong>de</strong> guerra allí reunidos, e interiormente sentí una profunda satisfacción al<br />

saber que esa po<strong>de</strong>rosa flota temía y respetaba a nuestros aviones.<br />

Luego volvimos hasta San Carlos, en don<strong>de</strong> permanecimos hasta el 11 <strong>de</strong> junio, si mal no recuerdo.<br />

Mi mayor preocupación era que mi familia hacía más <strong>de</strong> 15 días que lo único que sabía <strong>de</strong> mí era que había<br />

<strong>de</strong>saparecido en combate, y yo sentía la tremenda impotencia <strong>de</strong> no po<strong>de</strong>r gritarles ¡Estoy vivo!.<br />

Nos reunieron y un general inglés nos dijo dos hermosas frases "Mañana serán embarcados para ser<br />

<strong>de</strong>vueltos a su Nación en un Puerto neutral " ...eso, si la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong> lo permite —añadió con una<br />

sonrisa. El orgullo me hinchó el pecho.<br />

Comíamos durante la navegación una comida diaria, pero súbitamente el menú cambió, hasta helado nos<br />

dieron. No me explicaba la razón hasta que nos encontramos en la Cruz Roja Internacional y todo se me hizo<br />

claro, querían quedar bien ante el resto <strong>de</strong>l mundo.<br />

Dos días <strong>de</strong>spués <strong>de</strong>sembarcaba en el Uruguay y corría a un teléfono para <strong>de</strong>cirle personalmente a mi querida<br />

esposa que su pesadilla había terminado.


CAPITULO CAPITULO XIX<br />

XIX<br />

"SI "SI USTEDES USTEDES LO LO PER PERMITEN” PER MITEN”<br />

Resumen Resumen Abreviado Abreviado Situación Situación Táctica Táctica en en las las Islas Islas <strong>Malvinas</strong> <strong>Malvinas</strong> al al 28 28-May 28 May May-82 May 82<br />

La Fuerza <strong>de</strong> Ataque enemiga bloqueaba totalmente el acceso por mar, a las islas <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el día 12 <strong>de</strong> Abril 82.<br />

En el espacio aéreo, si bien el enemigo pretendía ejercer el dominio <strong>de</strong>l aire, la Fuerza Aérea mantenía el<br />

puente aéreo entre el continente y el Aeródromo Puerto Argentino, y obtenía la superioridad aérea local en las<br />

áreas <strong>de</strong> su interés, tal como lo <strong>de</strong>mostraba los exitosos ataques que la flota sufría y que le ocasionaban severas<br />

pérdidas (6 buques importantes hundidos y no menos <strong>de</strong> 8 con averías <strong>de</strong> variada importancia).<br />

En las islas ya se había producido el <strong>de</strong>sembarque <strong>de</strong> la fuerza invasora la que iniciaba su aproximación para<br />

la batalla <strong>de</strong> Cerro, que según el dispositivo y los medios terrestres argentinos, sobrevendría<br />

en proximida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> Puerto Argentino. En el camino <strong>de</strong> esa aproximación se encontraban Prado <strong>de</strong>l Ganso y<br />

Darwin, localida<strong>de</strong>s que eran atacadas por los Segundo y Tercero Batallones <strong>de</strong> Paracaidistas Británicos.<br />

Descripción Descripción <strong>de</strong>l <strong>de</strong>l DHC DHC-6 DHC 6 6 TWIN OTTER y Principales Características<br />

El TWIN OTTER es un avión <strong>de</strong> ala alta <strong>de</strong> dos motores turbohélice con tres <strong>de</strong> aterrizaje fijo, con capacidad <strong>de</strong><br />

realizar aterrizajes y <strong>de</strong>spegues en muy cortas distancias y en pista <strong>de</strong> cualquier conformación incluso aquellos<br />

no preparados y con nieve o agua. Desarrolla una velocidad máxima <strong>de</strong> 245 km/hs. con una autonomía <strong>de</strong> vuelo<br />

<strong>de</strong> hasta 04:30 horas transportando 15 pasajeros o 1.200 kgs. <strong>de</strong> Carga; ó 6 camillas para evacuación <strong>de</strong><br />

enfermos y 5 pasajeros; o transporte y lanzamiento <strong>de</strong> 10 paracaidistas con equipo completo.<br />

Opera en la Patagonia, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> fines <strong>de</strong> 1968 haciendo vuelos LADE con asiento en la IX Brigada Aérea y en la<br />

Base Aérea Vicecomodoro Marambio como avión <strong>de</strong> enlace interbases, rompiendo <strong>de</strong>s<strong>de</strong> 1968 el aislamiento en<br />

el continente blanco.<br />

Junto con los <strong>de</strong>más aviones <strong>de</strong> la Fuerza comunica a la Patagonia con el resto <strong>de</strong>l país por intermedio <strong>de</strong><br />

LADE, colaborando para su <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong>s<strong>de</strong> 1.966.<br />

OPERACIÓN OPERACIÓN OPERACIÓN RESCATE<br />

RESCATE<br />

28 28-Mayo 28<br />

Mayo Mayo-13:20 Mayo 13:20 13:20 horas horas<br />

horas<br />

La IX Brigada Aérea recibió la or<strong>de</strong>n <strong>de</strong>l Comandante <strong>de</strong> la Fuerza Aérea Sur, <strong>de</strong> realizar evacuación <strong>de</strong><br />

tripulantes <strong>de</strong> Fuerza Aérea y personal <strong>de</strong> la Armada <strong>de</strong>s<strong>de</strong> Puerto Cal<strong>de</strong>rón —Isla Borbón, al continente utilizando<br />

un avión DHC-6 (Twin Otter).


La pista a ser utilizada tenía previo a las operaciones, 700 mts. <strong>de</strong> longitud, <strong>de</strong> los cuales sólo eran<br />

aprovechables 500 mts. Por zanjas, chorrillos, pozos y tierra blanda en sus cabeceras.<br />

La planificación <strong>de</strong> la operación tuvo en cuenta entre otros <strong>de</strong>talles, los siguientes:<br />

— Situación táctica operacional.<br />

— Distancia <strong>de</strong> esa pista a distintas alternativas en el continente.<br />

— Meteorología.<br />

— Distancia disponible <strong>de</strong> pista y dureza <strong>de</strong>l terreno para el peso <strong>de</strong> operación en arribo y <strong>de</strong>spegue.<br />

No resultó difícil la selección <strong>de</strong> tripulantes, porque todos estaban capacitados y dispuestos a la tarea.<br />

Más complejo resultó el acondicionamiento <strong>de</strong>l avión, <strong>de</strong>bido a la puesta a punto en su interior <strong>de</strong> cuatro<br />

tanques <strong>de</strong> combustible adicionales a fin <strong>de</strong> lograr mayor autonomía que permitiera el viaje <strong>de</strong> ida y regreso en<br />

vuelo rasante.<br />

—<br />

Un avión F-27 <strong>de</strong> la IX Brigada fue preparado y dispuesto para apoyar la misión, con las tareas <strong>de</strong>:<br />

Retransmisión <strong>de</strong> mensajes<br />

— Detección radar <strong>de</strong>l enemigo.<br />

— Cambios en la situación meteorológica<br />

— Búsqueda y salvamento en caso <strong>de</strong> ser <strong>de</strong>rribados<br />

28 28-Mayo 28<br />

Mayo Mayo-l Mayo l l 4.40 horas horas<br />

Una hora y media <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> recibida la or<strong>de</strong>n <strong>de</strong>l Comando <strong>de</strong> la Fuerza Aérea Sur, el Twin Otter, caballito criollo<br />

<strong>de</strong> LADE en nuestra Patagonia, estaba <strong>de</strong>spegando <strong>de</strong>s<strong>de</strong> Comodoro Rivadavia, con el <strong>de</strong>stino fijado.Lo hacía con<br />

1.250 kg. excedido sobre el máximo peso <strong>de</strong> utilización militar. Su objetivo: Rescate <strong>de</strong> tripulantes eyectados en<br />

paracafdas y heridos en combate. Siguiendo su plan <strong>de</strong> vuelo, mantuvo 2.000 mts., <strong>de</strong> altura hasta encontrarse a<br />

300 km. <strong>de</strong> Puerto Deseado, bajando luego a "peinar sus olas" para no ser <strong>de</strong>tectado por los radares <strong>de</strong> fragatas<br />

inglesas o; <strong>de</strong> San Carlos, don<strong>de</strong> tenían controlada y estabilizada su cabecera <strong>de</strong> <strong>de</strong>sembarco (50 km. <strong>de</strong>l <strong>de</strong>stino<br />

fijado). Por supuesto, la sal flotante en la humedad <strong>de</strong>l mar y espuma <strong>de</strong> las olas, se pegaba en los parabrisas<br />

restando casi totalmente la visión. A<strong>de</strong>más, ya a 120 km. <strong>de</strong>l objetivo, se perdió contacto radio-eléctrico con el<br />

avión retransmisor.<br />

28 28-Mayo 28<br />

Mayo Mayo-l Mayo l 7:30 horas<br />

De acuerdo con la lectura <strong>de</strong>l equipo Omega, el T-82 se encontraba sobre el objetivo, pero, por la neblina<br />

reinante, la oscuridad y sal en el parabrisas, fue imposible localizar el pequeño tramo <strong>de</strong> pista disponible.<br />

A<strong>de</strong>más, no pudo establecerse enlace con el control. Más a<strong>de</strong>lante nos enteramos que la situación táctica en<br />

esos momentos era <strong>de</strong> alerta roja. Por lo anterior y limitaciones <strong>de</strong> combustible, se <strong>de</strong>cidió regresar, para efectuar<br />

al día siguiente un nuevo intento.<br />

28-Mayo-21:50 horas


Luego <strong>de</strong> siete horas y veinte minutos <strong>de</strong> vuelo, aterrizó el T-82 en Comodoro Rivadavia. Los momentos vividos<br />

por su tripulación sólo podían <strong>de</strong>spertar orgullo entre sus camaradas por el intento, producto <strong>de</strong> una verda<strong>de</strong>ra<br />

vocación <strong>de</strong> servicio para el cumplimiento <strong>de</strong> la humanitaria misión.<br />

29 29-Mayo 29<br />

Mayo Mayo-Hora Mayo Hora "H"<br />

"H"<br />

Traslado <strong>de</strong>l T-82 a Puerto Deseado para completar combustible y facilitar así mayor autonomía y tiempo <strong>de</strong><br />

vuelo sobre el objetivo. Despegue <strong>de</strong> Puerto Deseado. Tanques llenos para volar 400 km. a 2.000 mts. <strong>de</strong> altura y<br />

luego 500 km. sobre la superficie <strong>de</strong>l mar. Después <strong>de</strong> evaluar los inconvenientes <strong>de</strong> la salida anterior, se fijó la<br />

siguiente misión:<br />

—Llegar <strong>de</strong> día a Puerto Cal<strong>de</strong>rón para lograr el aterrizaje y rescate <strong>de</strong> tripulantes <strong>de</strong> Fuerza Aérea, Armada y<br />

heridos.<br />

29-Mayo-16:25 horas<br />

Sería redundancia el repetir las mismas contingencias <strong>de</strong>l vuelo anterior. La diferencia es que se llegó con luz<br />

diurna. A esa hora se realizó el aterrizaje <strong>de</strong>l T-82 en la Isla Borbón. Los restos <strong>de</strong> pista disponibles estaban<br />

obstruidos por cráteres <strong>de</strong> bombas que media hora antes, aviones ingleses habían <strong>de</strong>jado caer.<br />

Sólo las performances <strong>de</strong> ese avión y la pericia <strong>de</strong> quienes permanentemente operan LADE en nuestro Sur,<br />

pudieron lograr el resto. Pero no estaba todo completado; Alerta Roja y abandono <strong>de</strong>l avión por nueva presencia<br />

aérea Británica. Lo que pasaba, es que esta pista estaba muy próxima a San Carlos, en ese momento <strong>de</strong>finitiva-<br />

mente en manos inglesas y sus radares controlaban todo ese sector. La tripulación no se quedó quieta. Durante<br />

esa alerta recorrió caminando la pista para aprovechar las pocas posibilida<strong>de</strong>s que ofrecía el <strong>de</strong>spegue, ya que<br />

este <strong>de</strong>bía realizarse con exceso absoluto <strong>de</strong> peso. Para este evento fue acompañada por personal <strong>de</strong> la Armada<br />

quienes les indicaban los daños existentes. De esa revista surgió que disponían <strong>de</strong> 300 mts. <strong>de</strong> longitud por 10<br />

mts. aproximadamente <strong>de</strong> ancho; aviones <strong>de</strong>struidos a ambos márgenes <strong>de</strong> pista, y una colina <strong>de</strong> 300 mts. <strong>de</strong><br />

altura en la dirección <strong>de</strong> <strong>de</strong>spegue. Asimismo, restos <strong>de</strong> explosivos y elementos extraños diseminados. Al<br />

Comandante <strong>de</strong> aeronave se le requirió trasladar 12 personas lo que resultaba imposible. Se realizó alije <strong>de</strong><br />

combustible (350 litros aproximadamente), lo que marginaba la autonomía <strong>de</strong> regreso.<br />

124<br />

Con las medidas adoptadas, se pudieron embarcar solamente 6 personas, <strong>de</strong>bido al exceso <strong>de</strong> peso existentes<br />

para el <strong>de</strong>spegue.<br />

29-Mayo-17:55horas<br />

Se realizó el <strong>de</strong>spegue en condiciones nocturnas con fuerte viento cruzado <strong>de</strong> la izquierda, estableciéndose <strong>de</strong><br />

inmediato vuelo rasante sobre el mar. Aproximadamente 80 km más a<strong>de</strong>lante se reestableció el contacto<br />

radioeléctrico con el F-27 retransmisor.<br />

29-Mayo-20:40 horas


Aterrizaje <strong>de</strong>l T-82 en Puerto Deseado, recarga <strong>de</strong> combustible y traslado a Comodoro Rivadavia don<strong>de</strong> se arriba a<br />

las 22:30 horas.El <strong>de</strong>talle <strong>de</strong>l personal rescatado es el siguiente:<br />

- Urna conteniendo los restos <strong>de</strong>l Ten. Volponi (F.A.A.)<br />

- My Puga (F.A.A.) eyectado <strong>de</strong> M-V<br />

- Cap. Dfaz (F.A.A.) eyectado <strong>de</strong> M.V<br />

- Tres oficiales <strong>de</strong> la Armada Nacional<br />

- Un soldado conscripto (ARA)<br />

Conclusiones:<br />

Conclusiones:<br />

Misión Cumplida.<br />

Hombres, máquinas, sistema <strong>de</strong> armas, exigidos al máximo en consecución <strong>de</strong> las misiones impuestas. Si bien es<br />

característico en los hombres <strong>de</strong> armas el lema <strong>de</strong> "Eficiencia en silencio", se distingue ahora en este avión <strong>de</strong><br />

transporte, al esfuerzo <strong>de</strong> todos los que posibilitaron la Operación Rescate.<br />

Los tripulantes afectados a la operación fueron:<br />

- Capitán D. HORACIO MIÑO<br />

- 1 er. Ten. D. CLAUDIO CARESANI<br />

- CP VÍCTOR MARTÍNEZ<br />

29 29-May 29<br />

May May-1982 May 1982 1982 Misión Rescate Dos:<br />

- 1er. Ten. D. MARCELO URIONA<br />

- Teniente D. OMAR POZA<br />

- CP PEDRO BAZAN<br />

28-May-1982 Misión Rescate Uno:<br />

En el Foker F-27, uno <strong>de</strong> sus tripulantes era el My. Barosa en quien representa a su abnegada tripulación.


CAPITULO CAPITULO XXI<br />

XXI<br />

"EL "EL ROCA"<br />

ROCA"<br />

Simplemente otro integrante <strong>de</strong> la R.O.A.<br />

RELATA: RELATA: RELATA: Alférez EGURZA (Integrante <strong>de</strong> la R.O.A).<br />

Durante quince dfas, compartí una ardua tarea con un soldado en un pequeño puesto <strong>de</strong> observación, cuyo<br />

indicativo era "ROCA", ubicado en una saliente sobre la costa cerca <strong>de</strong>l estrecho <strong>de</strong> San Carlos (Punta Cantera).<br />

Zona muy húmeda, al punto que todo nuestro equipo, armas, municiones, vestimenta y hasta la misma carpa se<br />

hume<strong>de</strong>cían. El rocío <strong>de</strong> la noche nos obligaba a resguardarnos en la carpa, cuyas ventanas y puertas <strong>de</strong>bían<br />

permanecer abiertas, para mantener vigilancia. Durante el día, <strong>de</strong>bíamos hacer secar el calzado y la ropa ya que<br />

al permanecer húmedos, el frío se hacía sentir mucho mas. Una vez al día <strong>de</strong>sarmábamos el armamento y lo<br />

limpiábamos cuidadosamente, pues el óxido avanzaba rápidamente. Periódicamente, un Bell nos aprovisionaba<br />

<strong>de</strong> alimentos, y al agua la obteníamos <strong>de</strong> una pequeña vertiente en medio <strong>de</strong> unas rocas. Nuestra misión era la<br />

<strong>de</strong> informar los movimientos enemigos y dar alerta temprana a la base <strong>de</strong>l ataque <strong>de</strong> "bandidos" (Sea Harriers).<br />

Viviendo en tensión permanentemente, con todos los sentidos puestos en los posibles movimientos. Veinte<br />

kilómetros nos separaban <strong>de</strong> la base, aprendiendo a apreciar que nuestras vidas <strong>de</strong>pendían <strong>de</strong> nuestra habilidad<br />

para sortear los ataques, ya que no recibíamos apoyo en dichos casos. Nos-comunicábamos con la central por<br />

medio <strong>de</strong> unos pequeños equipos <strong>de</strong> mano que para economizar cargas, eran prendidos únicamente en el<br />

momento <strong>de</strong> la transmisión. En el transcurso <strong>de</strong> una noche muy frfa, al encen<strong>de</strong>r el equipo para comunicarme<br />

con la Base, escuché que un puesto vecino informaba que un helicóptero acababa <strong>de</strong> pasar muy cerca <strong>de</strong> ellos.<br />

Después <strong>de</strong> dar varias vueltas a su alre<strong>de</strong>dor, <strong>de</strong>scendieron no pudiendo comprobar si había <strong>de</strong>jado alguna<br />

persona. La alerta roja estaba en marcha por lo cual <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> escuchar el informe anteriormente mencionado<br />

quedé muy atento en aquella dirección. Al cabo <strong>de</strong> tres horas, comencé a ver un surtido fuego <strong>de</strong> fusiles sobre el<br />

puesto vecino. Era indudable que habfa sido <strong>de</strong>scubierto; las transmisiones <strong>de</strong> este cesaron y se perdió contacto.<br />

Nuestra preocupación iba en aumento, existía una pregunta, ¿qué suerte habrían corrido?, no teníamos<br />

respuesta. Minutos más tar<strong>de</strong> comenzaron a encen<strong>de</strong>rse bengalas en el cielo, acompañadas <strong>de</strong> un sin fin <strong>de</strong><br />

disparos que se cruzaban. Eran evi<strong>de</strong>ntemente dos Comandos y esta vez se encontraban muy cerca <strong>de</strong> nuestra<br />

posición, por lo cual <strong>de</strong>cidí replegar unos trescientos metros <strong>de</strong>l lugar don<strong>de</strong> nos encontrábamos, el combate se<br />

acercaba lentamente pero en forma constante e inexorable hacia nuestra posición, en esos momentos me<br />

comuniqué con la base y pedí que informen a los nuestros que participaban en combate <strong>de</strong> nuestra presencia,<br />

con el fin <strong>de</strong> evitar ser batidos por propia tropa. De pronto todo cesó, no se veían más disparos entrecruzándose<br />

en el cielo, todo volvía a ser silencio. Decidí que permanezcamos en dicha posición en espera <strong>de</strong> los<br />

acontecimientos. En las dos horas siguientes, no se quebró el silencio, ni pudimos observar movimiento alguno.<br />

Volvíamos lentamente a nuestra posición original pero a mitad <strong>de</strong> camino, una bengala iluminó el terreno, estaba<br />

sobre nuestras cabezas. La reacción fue instintiva, ponernos a cubierto, el problema era dón<strong>de</strong>, ya que no había<br />

ningún lugar apropiado, todo era llano. Los disparos comenzaron, unos nos pasaron cerca. ¡A tierra! fue la or<strong>de</strong>n,


el soldado interpretó al instante, el fuego continuaba y en ese momento comencé a escuchar pasos a unos cinco<br />

o seis metros a mi <strong>de</strong>recha; entonces, esos disparos iban dirigidos a ellos que se encontraban en retirada. Un<br />

comando los seguía <strong>de</strong> cerca, nos quedamos inpróviles, no los veíamos ya que la noche era muy cerrada, pero<br />

sus movimientos se escuchaban claramente. Le indiqué al Soldado que no haga ningún movimiento ni ruido que<br />

nos pudiera <strong>de</strong>latar. Se colocó a mi izquierda para prestarme apoyo. Avancé arrastrándome suavemente hacia<br />

a<strong>de</strong>lante para po<strong>de</strong>r divisarlos, pero fue inútil, la oscuridad era total. Nos comenzaron a ro<strong>de</strong>ar, la suerte estaba<br />

echada y nosotros no estábamos en ventaja pero era inminente, había que atacar. En esos momentos llevábamos<br />

varias horas a la intemperie y mojados por el rocío, el frío nos calaba los huesos y perdíamos sensibilidad. No<br />

podía empuñar bien mi fusil ya que tenía una mano casi congelada. Comencé a disparar, el soldado se<br />

encontraba <strong>de</strong>trás mío en oblicuo, no podía tirar <strong>de</strong>s<strong>de</strong> esa posición y prácticamente no se podía mover, estaba<br />

casi congelado. Sin embargo <strong>de</strong>bíamos resistir lo más que pudiéramos, el Comando que venía en su persecución<br />

nos prestaría apoyo. Voy a resumir en pocas palabras lo ocurrido. Nunca tomamos contacto con el grupo<br />

comando que venía atrás. Al regresar a la Base, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> unos días nos enteramos que ningún grupo había<br />

salido a reprimir el ataque <strong>de</strong> ese comando enemigo. De lo ocurrido se <strong>de</strong>spren<strong>de</strong> que dos comandos<br />

<strong>de</strong>scendieron esa noche, ambos con la misión <strong>de</strong> atacar nuestros puestos. Uno llegó a su objetivo, el puesto<br />

vecino; el otro que nos buscaba a nosotros se perdió en la noche y empezó a dar vueltas hasta que se encontró<br />

con el otro grupo y se trabaron en combate, los dos eran enemigos. En el amanecer <strong>de</strong>l nuevo día habiendo<br />

quedado atrás ese inci<strong>de</strong>nte, a las 8:00 horas, entre una pesada bruma que dificultaba la visibilidad, alcancé a<br />

vislumbrar un objeto en el horizonte. Comunicándolo en el acto me solicitaron nuevos datos, <strong>de</strong>bido a la escasa<br />

visibilidad no los pu<strong>de</strong> ver, media hora más tar<strong>de</strong> habiéndose levantado la bruma, pu<strong>de</strong> distinguir una fragata, a<br />

la cual le sucedieron otras en los minutos siguientes; comuniqué la novedad a la Base, quién procedió a informar<br />

a Puerto Argentino y <strong>de</strong> allí al Continente. Las fragatas avanzaban en perfecta formación, cubriéndose<br />

continuamente entre si, mientras navegaban muy cerca <strong>de</strong> mi posición, dando cobertura a un barco que se<br />

encontraba <strong>de</strong>trás <strong>de</strong> una loma el cual no se podía ver. Sin embargo su presencia era evi<strong>de</strong>nte ya que ésta había<br />

comenzado a disparar sus cañones hacia la base. Lo hacían en series, entre las cuales se <strong>de</strong>jaba un lapso <strong>de</strong><br />

aproximadamente tres minutos.Cada vez que comenzaba la serie, avisaba a la base rápidamente ya que <strong>de</strong>s<strong>de</strong><br />

que se producía el disparo pasaban unos quince segundos hasta que se producía el impacto. Era el tiempo<br />

suficiente para que el personal que se encontraba <strong>de</strong>sconectando un radar (claro objetivo enemigo), se pusiera a<br />

cubierto hasta que el número <strong>de</strong> impactos coincidiera con los informado- por este puesto. Para ello usaban un<br />

vocabulario previamente acordado, <strong>de</strong>bido a que nuestras comunicaciones podrían ser interferidas por el<br />

enemigo. Así, "PEPAS", equivalían a disparos <strong>de</strong> cañones, "PALAS" a helicópteros, "BANDIDOS" a los Harriers,<br />

"TORTUGA" a los infantes, y un sin fin más. El helicóptero había <strong>de</strong>scendido, <strong>de</strong>jando un hombre a unos 2.800<br />

metros<strong>de</strong>los cañones. Todos los movimientos eran 'nformados a la Base y éstos a su vez eran analizados en el<br />

puesto Comando <strong>de</strong>l cual surgían las ór<strong>de</strong>nes para la <strong>de</strong>fensa, nuestros aviones atacaron la flota, una y otra vez,<br />

hasta que a las 14:30 horas la fragata estalló envuelta en llamas. En ese momento, una alegría que <strong>de</strong>sbordaba<br />

todos los límites conocidos, nos invadió. Sólo atine' a <strong>de</strong>cir por la radio: "Una <strong>de</strong> nuestras gloriosas escuadrillas,<br />

acaba <strong>de</strong> darle a una fragata, se hun<strong>de</strong> y el resto <strong>de</strong> la flota se retira a toda máquina". (Eran Mirage V<br />

"Dagger"A4B). Huyen <strong>de</strong>l combate y a continuación nos abrazamos. Creo que jamás experimenté una sensación


igual. Nos unía un objetivo común y a su vez, grandioso: LA DEFENSA DE NUESTRA TIERRA, un sentimiento puro<br />

por el cual todos trabajamos como una gran familia, compartiendo alegrías y tristezas, alimentos o hambre. La<br />

fragata siguió en llamas, no podía controlar su rumbo, así navegaba a la <strong>de</strong>riva a la vez que se alejaba <strong>de</strong> la<br />

costa. Recién al otro día, a las 09:00 hs. se hundió <strong>de</strong> popa y media hora más tar<strong>de</strong> <strong>de</strong>sapareció bajo la<br />

superficie para nunca jamás emerger. Esa misma tar<strong>de</strong> aparecieron los Sea King, lanzando cargas <strong>de</strong><br />

profundidad en el estrecho. La operación se repetía una y otra vez. Empezaron a pasarnos muy cerca. Para evitar<br />

ser vistos, nos <strong>de</strong>splazamos unos 600 metros, cerca <strong>de</strong> una casa abandonada. Des<strong>de</strong> allí seguíamos la<br />

observación. Después <strong>de</strong> sobrevolar la zona en forma <strong>de</strong>tenida se marcharon. Por lo tanto, volvimos a nuestra<br />

posición original. Al llegar a ella, apareció un Sea King sobre nuestra vertical; nos dio tiempo apenas <strong>de</strong> correr<br />

unos metros y arrojarnos cuerpo a tierra con un equipo ligero <strong>de</strong>bajo <strong>de</strong> nuestros cuerpos, i Habíamos sido<br />

<strong>de</strong>scubiertos!, en ese momento nos habíamos quedado sin equipo- transmisor. Ellos no tardarían mucho tiempo<br />

en regresar con grupos comandos.Desplazamos nuestra posición unos 2.000 metros, hacia una ca<strong>de</strong>na<br />

montañosa. Lo previsible sucedió; con nuestros prismáticos podíamos observar a los soldados que habían<br />

<strong>de</strong>scendido y estaban rastrillando la zona; no tardarían mucho en localizarnos, puesto que por las condiciones <strong>de</strong>l<br />

terreno y su vegetación se hacía muy difícil ocultarse. El helicóptero los guiaba <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el aire, se acercaban cada<br />

vez más.sólo quedaba comenzar el repliegue; no teníamos en ese momento provisiones <strong>de</strong> agua y así sostener<br />

una posición era imposible. Comenzamos a caminar rápidamente pues el helicóptero nos se guía los pasos y el<br />

grupo comando nos buscaba en tierra. No poseíamos brújula ni cartas <strong>de</strong>l terreno, que habían quedado en la<br />

carpa, sólo nos podíamos guiar por una huella, a muy pru<strong>de</strong>nte distancia, ya que era muy arriesgado acercarse a<br />

ella. La noche se nos venía encima; a las 18:00 hs. la oscuridad era total, la búsqueda se había prolongado hasta<br />

las 17:30 hs. Seguimos caminando y perdimos la huella, no teníamos referencias, pero había que ganar tiempo;<br />

sabíamos que por la mañana nos volverían a buscar. La noche era cerrada, lo que sumado a las irregularida<strong>de</strong>s<br />

<strong>de</strong>l terreno y la falta <strong>de</strong> orientación nos hacían imposible seguir. Con unas pequeñas matas hicimos un parapeto<br />

que nos protegía contra el viento, el que nos hacía más insoportable el frío. Había alcanzado a escapar con una<br />

camiseta <strong>de</strong> invierno y la campera. Al <strong>de</strong>jar <strong>de</strong> caminar comenzamos a congelarnos, había que permanecer en<br />

movimiento ya que era lo único que nos podía salvar <strong>de</strong>l frío. Decidí continuar, cuando <strong>de</strong> repente vimos reflejos<br />

<strong>de</strong> luces en el horizonte, por las que nos guiamos, pensando que podrían ser vehículos <strong>de</strong> la Base. Caminamos<br />

aproximadamente una hora y media más, mi borceguí' izquierdo estaba totalmente <strong>de</strong>strozado y el soldado se<br />

caía a cada rato. Deberíamos <strong>de</strong>tenernos, no quedaba otra salida. Nos acostamos en un pequeño pajonal que<br />

apenas nos alcanzaba a cubrir, nos pusimos uno junto al otro y nos cubrimos con pasto. El frío no nos <strong>de</strong>jaba<br />

dormir, ni siquiera <strong>de</strong>scansar, parecía que esa eterna noche se hubiese <strong>de</strong>tenido; comenzó a llover y mientras<br />

tanto el frío serta menor, pero al <strong>de</strong>tenerse aumentaría nuevamente y tendríamos pocas posibilida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> llegar<br />

vivos al amanecer, el congelamiento se avecinaba. Por fin llegó el amanecer <strong>de</strong> ese esperado día: casi no nos<br />

podíamos mover; lentamente nos fuimos poniendo en camino, estábamos <strong>de</strong>sorientados; sólo al cabo <strong>de</strong> dos<br />

horas divisamos el radar <strong>de</strong> Darwin y hacia allá nos dirigimos.. Tuvimos que bor<strong>de</strong>ar una entrada <strong>de</strong>lcanal <strong>de</strong><br />

unos tres kilómetros, hasta po<strong>de</strong>r cruzarlo y luego <strong>de</strong> unahora nos encontramos con un grupo propio que estaba<br />

en un tractor colocando minas en la avanzada. Estábamos extenuados y nos faltaban 4 ó 5 kilómetros más, pero<br />

nos quedamos a ayudarlos, pensando en que luego nos iríamos con ellos en el tractor. Llevábamos una hora


minando cuando paso un vehículo <strong>de</strong> los nuestros y nos fuimos con ellos hacia la Base. Poco más a<strong>de</strong>lante<br />

encontré un miembro <strong>de</strong> la R.O.A. y me bajé a saludarlo, fue una alegría muy gran<strong>de</strong> el encontrarnos ya que hacía<br />

20 días que no nos veíamos.. Estaba guiando con su equipo <strong>de</strong> radio el repliegue <strong>de</strong> un puesto <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la montaña.<br />

Mirando los mapas comprendí' que las luces que había visto la noche anterior era la <strong>de</strong> una patrulla inglesa que<br />

había ido a atacarlos.Este capítulo es mi agra<strong>de</strong>cido homenaje a los radioaficionados civiles que compartieron el<br />

peligro, el frío y el hambre con nosotros, como miembro <strong>de</strong> la "Red <strong>de</strong> Observadores <strong>de</strong>l Aire", en ellos represento<br />

a todos los civiles que compartieron la batalla con nosotros, los integrantes <strong>de</strong> la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong>. Sus<br />

nombres eran: S. M. Alfredo OCAMPO (Encargado <strong>de</strong> la R.O.A. en <strong>Malvinas</strong>) y señores Carlos LORI, Abel RAMÍREZ,<br />

Carlos BIASOTTO, Roberto PARETS, Sergio RIDELNID, Jorge NOGUERA, Rafael ESCUTI, Luis MONTI, Enrique<br />

GUEVARA, Erio DÍAZ, Raúl BOTÍN, Terciano SAMPIERI, Ramón MANCILLA, Julio ROTEA, Eduardo MALEH, Roberto<br />

POLLETTI, Luis OLIVIER, Ricardo CINSIGLI y Gustavo LESCANO.


CAPITULO CAPITULO XXII<br />

XXII<br />

" " EL EL HIENA"<br />

HIENA"<br />

A veces en grupo <strong>de</strong> dos o tres, los integrantes <strong>de</strong> la Red <strong>de</strong> Observadores <strong>de</strong>l Aire, supervivieron al aire<br />

libre en ese rigurosísimo clima. Jamás se sabrá la cantidad <strong>de</strong> vidas que salvaron gracias a su oportuno<br />

aviso.<br />

RELATA: RELATA: Alférez BARRETO (Integrante <strong>de</strong> la R.O.A.)<br />

Ya habfan transcurrido tres semanas <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la recuperación <strong>de</strong> las islas <strong>Malvinas</strong> y con el "GRINGO" (Alférez EG U<br />

RZA), sentíamos una impotencia muy gran<strong>de</strong> al no po<strong>de</strong>r ir pero en la tar<strong>de</strong> <strong>de</strong>l domingo 25 <strong>de</strong> abril, llegó ese<br />

bendito mensaje solicitando dos Oficiales para la R.O.A. Nos presentamos <strong>de</strong> voluntarios y allá fuimos. Cuando las<br />

ruedas <strong>de</strong>l Hércules chirriaron contra la pista <strong>de</strong> Puerto Argentino, lo miré a EGURZA y le dije simplemente ¡Lo<br />

logramos ! Mientras el helicóptero CHINOOK avanzaba hacia Darwin, asiento <strong>de</strong> la Base Aérea <strong>Militar</strong> "CÓNDOR",<br />

contemplábamos el hermoso paisaje <strong>de</strong> las Islas. Luego <strong>de</strong> una calurosa bienvenida, nos incorporamos junto con<br />

los Alféreces SASSONE, VÁZQUEZ y DAGHERO a la R.O.A. Nosotros no vetamos la hora <strong>de</strong> estar en nuestros<br />

puestos. Los lugares <strong>de</strong> observación eran cuatro y yo <strong>de</strong>bí quedarme como enlace <strong>de</strong> ellos en el puesto <strong>de</strong><br />

Comando, por ser el más mo<strong>de</strong>rno (el <strong>de</strong> menos antigüedad en el grado), el dfa 28 <strong>de</strong> abril. El 1° <strong>de</strong> Mayo, luego<br />

<strong>de</strong> los ataques, los muertos y los heridos, tomamos conciencia <strong>de</strong> lo que viviríamos en !os días subsiguientes. El 4<br />

<strong>de</strong> Mayo fui a relevar a otro Oficial, la posición quedaba en la montaña; colocamos la carpa junto a unas gran<strong>de</strong>s<br />

piedras, para que nos protegieran <strong>de</strong>l viento helado y <strong>de</strong> miradas indiscretas.junto conmigo había un Soldado,<br />

con el que estábamos alerta dfa y noche. El frío se hacía sentir duramente, agravado por el constante viento. La<br />

lluvia y la nieve por las noches eran realmente insoportables, hasta tal punto que <strong>de</strong>bíamos golpearnos las<br />

piernas con la culata <strong>de</strong>l fusil para sacarnos el hielo. Era imposible hacer fuego, no sólo para no <strong>de</strong>latar nuestra<br />

posición, sino que a raíz <strong>de</strong>l fuerte viento, la carpa se había roto y el agua entraba por todos lados. Cada día que<br />

pasaba hacía compenetrarnos más <strong>de</strong> la importancia <strong>de</strong> nuestra misión, en la cual, pese al rigor <strong>de</strong>l clima,<br />

tuvimos gran<strong>de</strong>s alegrías, ya que todas las entradas <strong>de</strong> los Harriers,eran avisadas con tiempo para cubrirse y<br />

preparar la <strong>de</strong>fensa. De vez en cuando veíamos a lo lejos algunas explosiones; un día explotó una fragata en la<br />

Bahía <strong>de</strong> Ruiz <strong>de</strong> Puente. Por el cielo pasaban los Harriers "estelando". justo cuando nos quedamos sin baterías<br />

para el equipo <strong>de</strong> radio, atacaron los Harriers, y en nuestra <strong>de</strong>sesperación por avisar, abrimos fuego con nuestros<br />

fusiles contra ellos. Vieron las trazantes <strong>de</strong>s<strong>de</strong> Darwin y poco <strong>de</strong>spués nos dijeron: — ¡Bajaron uno !. Habíamos<br />

justificado el que nos enviaran allí. Poco a poco fue naciendo una gran amistad, propia <strong>de</strong> quienes se necesitan<br />

entre el soldado y yo. Tras 21 días volvía a la Base, para soportar allí intensos cañoneos navales y ataques <strong>de</strong><br />

comandos ingleses. El puesto en don<strong>de</strong> yo había estado, fue atacado durante la noche y todos sentimos la


impotencia <strong>de</strong> saber que no podíamos hacer nada por evitar las seguras muertes <strong>de</strong> mis camaradas. Aprendimos<br />

a aprovechar todo lo que nos diera el terreno, que nos proveía <strong>de</strong> agua y alimentos. Estaba junto a la radio<br />

cuando <strong>de</strong> pronto escuché una voz muy débil - "NIDO" - "HIENA" llama - i ¡Estaban vivos!! Al día siguiente fuimos a<br />

buscarlos en helicóptero y yo me quedé en ese lugar. Por primera vez sentí una sensación extraña como si nos<br />

estuviesen observando, con lo cual el Soldado y yo, seríamos hombres muertos. Mi instinto no falló, esa noche<br />

aproximadamente unos 30 Comandos Ingleses intentaron eliminarnos. Descendieron <strong>de</strong> un helicóptero Sea King<br />

en un lugar próximo por lo que nos metimos con el soldado en un pozo <strong>de</strong> agua helada, en el que pasamos toda<br />

la noche, dispuestos a ven<strong>de</strong>r caras nuestras vidas. Por un milagro <strong>de</strong>l Señor, la oscuridad impidió que ubicaran<br />

nuestro refugio y tras prolongadísimos tiroteos en los cuales pue<strong>de</strong>ri haber llegado a tirarse entre ellos, se fueron.<br />

Nos arrastramos en sentido opuesto a la Base, subiendo la pendiente. Tras muchas vicisitu<strong>de</strong>s llegamos a<br />

Darwin, enterándonos que el "GRINGO" había pasado por situación similar. Mi próxima posición se encontraba<br />

ubicada sobre el canal este <strong>de</strong> CH01SEUL SOUND, casi enfrente a WALKER CREAK, allí recibimos el nombre <strong>de</strong><br />

M.7. Eramos dos Oficiales y dos Soldados, lo que nos ayudó psicológicamente, viviendo sobre una planicie en la<br />

que cavamos pozos para vivir. Allí aprendimos a convivir con las ratas que abundaban, pues no habfa otro<br />

remedio. Cayó DARWIN y todos los ROAS, quedamos aislados; ahora <strong>de</strong>bíamos llegar a Puerto Argentino,<br />

caminando en ese clima, sin medios y ro<strong>de</strong>ados <strong>de</strong> enemigos. Nuestra inquietud era qué habfa pasado con la<br />

gente y que había sido <strong>de</strong>l "BIGUÁ" (Alférez DAGHERO) que estaba <strong>de</strong>l otro lado <strong>de</strong>l canal y el único lado por<br />

don<strong>de</strong> podía pasar era DARWIN, que estaba tomado por el enemigo. Cuando lo llamamos por radio nos contestó<br />

con una alegría inmensa, sabiendo que estábamos bien. Le dijimos que replegara, con los dos Soldados que<br />

estaban con él, hasta el puesto "VASCO", para ello <strong>de</strong>berían caminar todo un día y noche sin parar y comunicarse<br />

con nosotros a las 08:00 horas <strong>de</strong>l día siguiente. Nevó toda la noche y a la hora convenida no hubo enlace por lo<br />

que lo creímos muerto por los ingleses o por el frío, pero luego fue rescatado en una misión <strong>de</strong> gran riesgo por la<br />

gente <strong>de</strong> Puerto Argentino. Para nosotros esos fueron días <strong>de</strong> arduo caminar, llevando a cuestas el armamento,<br />

los equipos y la radio a través <strong>de</strong> muchos kilómetros , pasando hambre, frío, viviendo en los arroyos durante el día<br />

y movilizándonos durante la noche por evitar ser <strong>de</strong>tectados por sus helicópteros. Luego <strong>de</strong> haber cruzado<br />

muchos arroyos <strong>de</strong>scalzos y sin pantalón, <strong>de</strong> encontrar la posición <strong>de</strong> otros R.OA. que habían sido atacados el dfa<br />

anterior, nos fuimos dando cuenta que avanzaban rápi do y estaban preparando el asalto final a Puerto Argentino.<br />

Nos <strong>de</strong>shicimos <strong>de</strong> todo lo superfluo y nos quedamos con lo indispensable, armamento, la ropa que teníamos<br />

colocada y la radio; los helicópteros venían pisándonos los talones. Los dolores físicos se acentuaban, el hambre<br />

también, hasta que encontramos una estancia; era para nosotros un paraíso pues pese a que no había comida,<br />

había cerveza y ¡CAMAS!. Llevábamos mucho tiempo sin dormir, y la tentación era tremenda, pero cargamos<br />

algunas latas <strong>de</strong> cerveza, algo <strong>de</strong> leche con<strong>de</strong>nsada y seguimos la marcha. La cerveza nos produjo vómitos, ya<br />

que nuestros cuerpos a esa altura, sólo aceptaba agua; bajé en muy poco tiempo 14 kilos <strong>de</strong> peso. Llegamos a<br />

otra estancia en la que había Kelpers; con todo el dolor <strong>de</strong>l alma, les sacamos un vehículo y les cortamos los<br />

cables para comunicaciones. Teníamos visores <strong>de</strong> luz residual, que utilizábamos constantemente con excelentes<br />

resultados. De noche circulábamos con el vehículo con las luces apagadas, guiados nada más que por visor. Era<br />

obvio que el motor podía ser escuchado por ellos, pero no teníamos otra opción. Por nuestios cálculos, vuelos<br />

observados y dirección que llevaban ellos, <strong>de</strong>bían estar próximos a FITZ ROY. (Se nos habían a<strong>de</strong>lantado con los


helicópteros). Entramos en esa zona y a poco <strong>de</strong> avanzar nos dimos cuenta <strong>de</strong> que efectivamente, estaba en<br />

manos <strong>de</strong> ellos y <strong>de</strong> que estábamos ro<strong>de</strong>ados, no podíamos seguir. Sentimos odio, frustación y la amargura <strong>de</strong><br />

pensar que todos nuestros esfuerzos habían sido en vano, nuestra moral <strong>de</strong>cayó, pero sucedió algo increíble,<br />

pudimos arreglar la antena <strong>de</strong> la radio que hacía bastante que no funcionaba, logrando informar a Puerto<br />

Argentino que "aún estábamos vivos", la cantidad <strong>de</strong> helicópteros que habíamos visto, la estimación <strong>de</strong> las tropas<br />

inglesas que había en la zona, que rumbo llevaban los vuelos, qué máquinas utilizaban, i La R.O.A. estaba en<br />

servicio nuevamente y se sentía ÚTIL ! Nos informaron que estábamos en el centro <strong>de</strong>l grueso <strong>de</strong>l ejército inglés,<br />

que no teníamos posibilidad <strong>de</strong> ser rescatados y nos dimos cuenta <strong>de</strong> que todo había terminado para nosotros.<br />

Nos dijeron por la radio que nada podíamos hacer, nos agra<strong>de</strong>cieron el valor <strong>de</strong> la información que obtuvimos y<br />

que nos entregáramos. Por ese motivo, acusamos no recibir la última or<strong>de</strong>n por falla <strong>de</strong> radio y gritamos - VIVA LA<br />

PATRIA, SON NUESTRAS - antes <strong>de</strong> cortar la comunicación. Estábamos en un mal momento pero el orgullo por lo<br />

pasadaera superior, no había miedo y a la muerte la tomábamos como algo normal ya que nos habfa mero<strong>de</strong>ado<br />

mucho tiempo. Destruímos la radio y el mapa, amaneció y se nos vinieron encima. Era el final, era una profunda<br />

puñalada el per<strong>de</strong>r algo que quisimos, queremos y querremos siempre. Allí habían aprendido lo que era el<br />

verda<strong>de</strong>ro dolor. Estábamos ro<strong>de</strong>ados por fuerzas tremendamente superiores, éramos muertos en vida, pensé en<br />

resistir hasta hacernos matar, pero a los soldados que estaban a mi cargo los esperaban en sus casas y el<br />

sacrificio hubiese sido inútil. Nos interrogaron, nos sacaron los borceguíes y nos hicieron caminar <strong>de</strong>scalzos por la<br />

nieve, seguíamos sin comer. Cuando supieron que éramos <strong>de</strong> la Fuerza Aérea, cambió el trato, un Oficial se me<br />

acercó y me preguntó que había con mis borceguíes y los <strong>de</strong>l soldado, le contesté que me los habían sacado sus<br />

soldados; inmediatamente me entregó sus polainas <strong>de</strong> goma, nos hizo dar alimentos y nos llevó a un lugar con<br />

calor, era el General jeremy MOORE, Jefe <strong>de</strong>l componente terrestre inglés. Luego fuimos enviados a limpiar un<br />

barco pequeño llamado MONSUMEN y nos enviaron posteriormente a DARWIN <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> haber pasado una<br />

gran tormenta, nos sentíamos como sardinas enlatadas golpeando contra las pare<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l barco. Allí nos<br />

interrogaron los ingleses, mientras los Gurkas nos custodiaban. También encontramos el último pelotón <strong>de</strong><br />

prisioneros Argentinos a cargo <strong>de</strong> un Oficial <strong>de</strong>l Ejército que fue un ejemplo constante para sus subalternos, el<br />

Sub-Teniente (actualmente Teniente) GÓMEZ CENTURIÓN. Tras algunos fríos conseguí unos borceguíes <strong>de</strong> un<br />

combatiente Argentino fallecido. Fuimos trasladados a San Carlos don<strong>de</strong> vi el lanzamiento <strong>de</strong>l misil que <strong>de</strong>struyó<br />

el avión <strong>de</strong>l más antiguo <strong>de</strong> nuestros muertos, el Vicecomodoro DE LA COLINA. Posteriormente en el NORLANS<br />

HULL fuimos trasladados a Montevi<strong>de</strong>o, <strong>de</strong> allí por barco a Río Santiago v luego por avión a Ezeiza. Lo que más<br />

me impactó fue vera a la gente que pasaba distraídamente, 'indiferente como si lo que yo había vivido días atrás<br />

fuese cosa <strong>de</strong> otro País. La superficialidad y <strong>de</strong>sinterés por los que peleábamos nos dolió. Evi<strong>de</strong>ntemente había<br />

pasado <strong>de</strong>masiado tiempo en el límite que separa a la vida <strong>de</strong> la muerte, pero estábamos orgullosos <strong>de</strong> ello y<br />

dispuestos a volver inmediatamente, apenas la Patria lo solicite, para luchar por nuestras Islas <strong>Malvinas</strong>.


CAPITULO CAPITULO XXIII<br />

XXIII<br />

" " " ANGÉLICA"<br />

ANGÉLICA"<br />

Este es mi homenaje al personal <strong>de</strong> comunicaciones <strong>de</strong> nuestra Fuerza que mantiene unidos a sus<br />

hombres a través <strong>de</strong>sús imprescindibles equipos y su gran capacidad.<br />

RELATA: RELATA: Un Oficial <strong>de</strong> nuestra Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong>, que no quiso que figure su nombre por humildad.<br />

"Anécdotas <strong>de</strong> una guerra siempre hay muchas; lo difícil es rescatar aquellas que aporten positivamente al<br />

accionar futuro <strong>de</strong> la Institución, <strong>de</strong> la Nación, <strong>de</strong> sus hombres y mujeres".<br />

Tal vez tendría que haber invertido los términos y <strong>de</strong>cir Mujeres y Hombres por cuanto esta anécdota correspon<strong>de</strong><br />

a una mujer. Una mujer civil, argentina, madre, hija y esposa. Cumplió con todos los <strong>de</strong>beres <strong>de</strong> lo que es y<br />

a<strong>de</strong>más, a su modo, tomó parte activa durante todo el tiempo que <strong>de</strong>mandó el conflicto con Inglaterra. Su<br />

nombre <strong>de</strong> Guerra, "ANGÉLICA", así la conocíamos, asi' la escuchábamos, así la sentíamos nosotros, los<br />

integrantes <strong>de</strong>l Escuadrón <strong>de</strong> Helicópteros <strong>de</strong>splegado en las Islas <strong>Malvinas</strong>. Entre las <strong>de</strong>sventajas que<br />

presentaba nuestro material, una <strong>de</strong> ellas fue la dificultad que teníamos para comunicarnos con cualquier<br />

estación <strong>de</strong> las islas; esto se <strong>de</strong>bía a que nuestra táctica nos imponía volar constantemente pegados al terreno,<br />

siguiendo su contorno para evadirnos <strong>de</strong>l acecho <strong>de</strong> las patrullas aéreas <strong>de</strong> combate enemigas. Elegíamos la más<br />

mínima hondonada <strong>de</strong>l terreno para escon<strong>de</strong>rnos <strong>de</strong> la <strong>de</strong>tección visual, radar o armas antiaéreas. Esta forma <strong>de</strong><br />

volar hacía que nuestros equipos <strong>de</strong> radio (VHF) fueran inútiles por cuanto a pocas millas <strong>de</strong>l <strong>de</strong>spegue ya<br />

perdíamos toda posibilidad <strong>de</strong> comunicarnos y con ello <strong>de</strong> conocer la posición <strong>de</strong> los aviones enemigos, ya sea en<br />

nuestra ruta o en nuestros puntos terminales; información ésta que muy eficientemente obtenía el personal <strong>de</strong><br />

nuestros radares, y que nos resultaba vital ya sea para po<strong>de</strong>r cumplir la misión y también tener posibilida<strong>de</strong>s <strong>de</strong><br />

sobrevivir a ella. Sin esta información, volábamos completamente a ciegas y nos <strong>de</strong>bíamos enfrentar aun<br />

enemigo cuya superioridad en armamento nos imponía evadirlo. Es aquí, frente a este problema don<strong>de</strong> ANGÉLICA<br />

apareció en escena, ella a<strong>de</strong>más <strong>de</strong> lo que ya dijimos, es una RADIOAFICIONADA; podríamos dar su característica<br />

pero ella podría ser i<strong>de</strong>ntificada y estamos seguros que no sería <strong>de</strong> su agrado, simplemente una LU. Des<strong>de</strong> el<br />

preciso momento en que comenzó nuestro accionar en el conflicto, ANGÉLICA, día y noche entre sus obligaciones<br />

cotidianas, apoyada en sus quehaceres por otras señoras y a veces sin dormir, compartió <strong>de</strong>s<strong>de</strong> su casa largas y<br />

angustiosas horas con nosotros; estando constante y pacientemente al lado <strong>de</strong> su equipo haciendo escucha. No<br />

sabía muy bien el como, pero si sabía el para que; para ser útil a nuestra causa; para en sus posibilida<strong>de</strong>s<br />

participar y comprometerse.Hasta el día 1° <strong>de</strong> Mayo su tarea, hablando en clave, con lugares cambiados y<br />

cuidando prolijamente <strong>de</strong> no mencionar términos que pudieran <strong>de</strong>latar don<strong>de</strong> estábamos o que éramos; se<br />

encargó <strong>de</strong> llevar tranquilidad a los familiares nuestros y <strong>de</strong> tanta otra gente que se encontraba en el mismo sitio.<br />

También se encargó <strong>de</strong> que en Buenos Aires se enteraran con celeridad <strong>de</strong> lo que nos hacía falta y que<br />

problemas teníamos para cumplir la tarea encomendada. Hasta esa fecha su tarea fue importante, tanto como


cada uno <strong>de</strong> nosotros consi<strong>de</strong>rara importante a sus seres queridos. Lo realmente asombroso era que ella,<br />

ANGÉLICA, siempre estaba allí, esperando al otro lado <strong>de</strong> la línea: Nosotros en una aeronave, ella, en el éter con<br />

su equipo <strong>de</strong> radio. Era suficiente <strong>de</strong>cir "ANGÉLICA", y <strong>de</strong> inmediato se escuchaba "SI" o "AQUÍ ESTOY". Para<br />

aquellos que saben <strong>de</strong> comunicaciones o que están acostumbrados a ella, es algo pocas veces visto y que<br />

<strong>de</strong>mostró que para comunicarse, más importante que la calidad o potencia <strong>de</strong> los equipos es que EXISTAN DOS<br />

DOS<br />

VOLUNTADES DE DE COMUNICARSE. Pero a partir <strong>de</strong>l 1° <strong>de</strong> Mayo, si que fue importante su tarea, ANGÉLICA no sabía<br />

muy bien lo que significaban las palabras que nos transmitía; muchas veces eran cosas incoherentes, otras<br />

parecía que estábamos jugando o haciendo alguna broma; lo cierto era que las retransmitía textualmente y con<br />

ello nos salvaba la vida. Como dijimos antes, nuestras comunicaciones tierra-aire no eran todo lo efectivas que<br />

<strong>de</strong>seábamos (por el vuelo que realizábamos) para que nos ayudaran a evadir la caza enemiga. Por ello es que<br />

recibiendo esa información tierra-tierra y no pudiendo hacer enlace con nuestras aeronaves por razones <strong>de</strong><br />

frecuencias, distancia y propagación, se la transmitíamos a ANGÉLICA en Buenos Aires, para que a su vez alertara<br />

a las aeronaves con las cuales nosotros no nos podíamos comunicar. Aquí es don<strong>de</strong> vamos a aclarar porque ella<br />

cumplía tan importante tarea sin enten<strong>de</strong>r siquiera que significaba lo que nos retransmitía. Las comunicaciones<br />

eran mas o menos así: "ANGÉLICA"..."SI... PREGÚNTALE A GUSTAVO (el primer nombre <strong>de</strong>l piloto al mando <strong>de</strong> la<br />

aeronave) - SI NO SE LLEVO EL CHOCOLATE EN EL BOLSILLO". . . "¿GUSTAVO? PREGUNTA ALBERTO SI TE<br />

LLEVASTE EL CHOCOLATE EN EL BOLSILLO" - ... y allí prácticamente se interrumpía la comunicación por cuanto<br />

todos los ojos, la atención, nervios y adrenalina <strong>de</strong> los tripulantes, se ponía a •pleno en tratar <strong>de</strong> visualizar y<br />

evadir a los aviones enemigos que se encontraban sobre o próximos a ellos. Son muchas las comunicaciones<br />

parecidas a esta, son muchas sus actuaciones ya sea para ayudar a evadir al enemigo como para ayudar a<br />

recuperar a un piloto eyectado, lo cierto es que ANGÉLICA a veces no durmió o durmió poco, pero por su voluntad<br />

estuvo allí con nosotros, con su Patria y sólo supo porque nos preocupaba tanto el chocolate, recién cuando<br />

volvimos a Buenos Aires.. . .Pero no era el "RAYO".


CAPITULO CAPITULO XXIV<br />

XXIV<br />

'DATOS 'DATOS Y Y NÚMEROS'<br />

NÚMEROS'<br />

En este Capitulo trataré <strong>de</strong> dar porcentajes, datos y números, que facilitarán al que no conoce, hacer su propia<br />

evaluación <strong>de</strong> lo acontecido.<br />

RELATA: RELATA: El autor (Piloto <strong>de</strong> A-4B)<br />

La La Fuerza Fuerza Aérea Aérea <strong>Argentina</strong>:<br />

<strong>Argentina</strong>:<br />

Realizó el 93°/o <strong>de</strong> las salidas <strong>de</strong> la <strong>Aviación</strong> <strong>de</strong> Combate, que llegaron al blanco en toda la guerra. El 90%<br />

<strong>de</strong> los pilotos que cayeron durante las acciones <strong>de</strong> combate, eran <strong>de</strong> esta Fuerza.<br />

- Previo .........................: 505 salidas<br />

- Cumplió. .......................: 445 salidas<br />

- Llegadas al blanco .................: 272 salidas<br />

A A MALVINAS MALVINAS (02 Abr al 13 jun 82)<br />

- Toneladas <strong>de</strong> carga transportadas en el puente aéreo ...............: 5.422 Ton.<br />

- Personal transportado. ............: 9.729 Pasajeros<br />

- Horas voladas..................: 2.074 hs.<br />

- Horas voladas por Aerolíneas <strong>Argentina</strong>s: 293:25 hs.<br />

- Horas voladas por Austral......,...: 15:40 hs.<br />

EN LAS LAS BASES BASES DEL CONTINENTE (02 Abr al 28 Jun 82)<br />

- Carga total transportada a las Bases <strong>de</strong> <strong>de</strong>spliegue ..................: 9.872 Ton.<br />

- Personal trasnportado .... .........: 49.165 pasajeros<br />

Total <strong>de</strong> horas voladas por aviones <strong>de</strong> transporte ....................: 7.718:50 hs.<br />

- Total <strong>de</strong> horas voladas aviones civiles y militares .....................: 1.952:50 hs.<br />

— Total <strong>de</strong> horas voladas aviones <strong>de</strong> combate .....................: 2.781:45 hs.<br />

— Total <strong>de</strong> horas voladas por la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong> ...........: 12.453:25 hs.<br />

Se realizaron 31 aterrizajes por nuestros aviones <strong>de</strong> transporte en la pista <strong>de</strong> Puerto Argentino (Islas<br />

<strong>Malvinas</strong>), durante el período comprendido entre el 01 <strong>de</strong> mayo al 14 <strong>de</strong> junio <strong>de</strong> 1982, y 420 aterrizajes en el<br />

puente aéreo durante el mes <strong>de</strong> abril. El 85% <strong>de</strong> los aterrizajes <strong>de</strong> aviones <strong>de</strong> transporte en Puerto Argentino, le<br />

correspondió a la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong>. Menos <strong>de</strong>l 10% <strong>de</strong> nuestros muertos fueron soldados. Más <strong>de</strong>l 90% fue<br />

personal militar <strong>de</strong> carrera, <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l mismo, el 72% <strong>de</strong> los muertos eran Oficiales. La aviación <strong>de</strong> transporte<br />

realizó 439 salidas <strong>de</strong> exploración. Produjo los siguientes daños, en general reconocidos por ambas partes: A<br />

continuación daré el <strong>de</strong>talle <strong>de</strong> aquellas misiones en los que se pudo comprobar resultados posteriores al ataque,


lo que no quiere <strong>de</strong>cir que, a<strong>de</strong>más <strong>de</strong> éstos, no haya habido otros ataques en los que no se pudo establecer si<br />

hubo o no daños. Para que el lector tenga una imagen global incluiré las misiones.<br />

-1° Mayo 82:<br />

Escuadrilla "TORNO" (1) Mirage V "DAGGER" – Capitán DIMEGLIO; Primer Teniente ROMÁN; Teniente AGUÍRRE<br />

FAGET.<br />

RESULTADO: RESULTADO: 1 fragata seriamente averiada (no se pudo establecer el nombre) y la fragata "ARROW" con averías<br />

menores.<br />

- 04 Mayo 82:<br />

Escuadrilla "ARIES" (1) Super Etendart - Capitán BEDACARRATZ - Teniente MAYORA<br />

RESULTADO: RESULTADO: Fragata CL-42 "SHEFFIELD", hundida (<strong>Aviación</strong> Naval).<br />

12 Mayo 82:<br />

Escuadrilla "CUÑA" ( 1) - A4B Skyhawk - Primer Teniente BUSTOS (+) -Teniente IBARLUCEA (+)-Teniente NIVOLI (+) -<br />

Alférez VÁZQUEZ (+).<br />

RESULTADO: RESULTADO: Fragata GLASGOW" alcanzada por una bomba que la perforó <strong>de</strong> lado a lado, explotando en el mar.<br />

Escuadrilla "ORO" (1) - A-4B "SKYHAWK – Capitán ZELAYA - Teniente ARPARAS (+) - Primer Teniente GAVAZZI (t) -<br />

Alférez DELLEPIANE.<br />

RESULTADO: RESULTADO: Fragata "BR1LLIANT averiada.<br />

-21 Mayo 82:<br />

Escuadrilla "MULA" - A-4B SKYHAWK - Capifan CARBALLO - Teniente RINKE - Primer Teniente CACHÓN Alférez<br />

CARMONA.<br />

RESULTADO: RESULTADO: Fragata "ARDENT", hundida y un buque <strong>de</strong> <strong>de</strong>sembarco averiado. (Probablemente el "FEARLES")<br />

Escuadrilla "CUECA" (1) - Mirage V "DAGGER" - Capitán MIR GONZÁLEZ - Teniente BERNHARDT (+) - Primer<br />

Teniente LUNA.<br />

RESULTADO: RESULTADO: Fragata "ARDENT" hundida.<br />

Escuadrilla "LIBRA" - Mirage V "DAGGER" – Capitán CIMATTI -Capitán ROBLES.<br />

RESULTADO:<br />

RESULTADO: RESULTADO: Fragata "ARDENT" hundida.<br />

Escuadrilla "ÑANDÚ" - Mirage V "DAGGER" – Capitán RODHE - Teniente BEAN (+) - Mayor MARTÍNEZ.<br />

RESULTADO: RESULTADO: Fragata "ANTR1M" averiada.<br />

Escuadrilla "PERRO" - Mirage V "DAGGER" – Capitán JANETT-Capitán MORENO-Teniente VOLPONI (T).<br />

RESULTADO: RESULTADO: Fragata "ANTR1M" averiada.<br />

Escuadrilla <strong>de</strong> <strong>Aviación</strong> Naval - Teniente OWEN CRIPPA -AERMACCHI.<br />

RESULTADO: RESULTADO: Fragata "BRILLANT" averiada.<br />

Escuadrilla "LEO" - A-4B "SKYHAWK - Primer Teniente FILIPPINI - Teniente AUTIERO - Alférez VOTTERO.<br />

RESULTADO: RESULTADO: Fragata "ARGONAUT" <strong>de</strong>struida.


Escuadrilla "ORION" - A-4B - Primer Teniente VELASCO - Teniente ROBLEDO - Teniente OSSES.<br />

RESULTADO:<br />

RESULTADO: RESULTADO: Fragata "ARGONAUT" <strong>de</strong>strufda.<br />

ESCUADRILLA "LAUCHA" - Mirage V DAGGER" -Mayor PUGA — Primer Teniente ROMÁN — Teniente CALLEJO.<br />

RESULTADO: RESULTADO: Fragata "ALACRITY" averiada (fue llevada al Puerto <strong>de</strong> Devenport, para ser reparada; noticia dada a<br />

conocer en Ports Mouth, el 18 <strong>de</strong> junio <strong>de</strong> 1982).<br />

Escuadrilla "ZORRO" - A-4Q SKYHAWK – <strong>Aviación</strong> Naval - Capitán PHILIPPI - Teniente ARCA – Teniente MÁRQUEZ<br />

(+).<br />

RESULTADO: RESULTADO: Fragata Clase County averiada.<br />

Escuadrilla "LEÓN" - Mirage V "DAGGER" – Capitán DIMEGLIO - Teniente CASTILLO (t).<br />

RESULTADO: RESULTADO: Fragata "BRDADSWORD" averiada<br />

Escuadrilla "PERRO" Mirage V "DAGGER" – Mayor MARTÍNEZ - Capitán MORENO -Teniente VOLPONI (+).<br />

RESULTADO: RESULTADO: Fragata BROADSWORD" averiada.<br />

23 Mayo 82:<br />

Escuadrilla "NENE" -A-4B SKYHAWK - Capitán CARBALLO - Alfe'rez GÓMEZ -Primer Teniente GUADAGNINl (+)-<br />

Teniente RINKE.<br />

RESULTADO: RESULTADO: Fragata "ANTELOPE" hundida.<br />

Escuadrilla "TÁBANO, A-4Q SKYHAWK - <strong>Aviación</strong> Naval - Capitán CASTRO FOX - Capitán ZUBIZARRETA - Teniente<br />

BENITEZ- Teniente OLÍ VEIRA.<br />

RESULTADO: RESULTADO: Fragata Clase Amazón Tipo 21, averiada.<br />

24 Mayo 82:<br />

Escuadrilla "NENE"- A-4B SKYHAWK – Vicecomodoro MARIEL - Teniente ROCA - Teniente SÁNCHEZ.<br />

RESULTADO: RESULTADO: Transporte <strong>de</strong> tropas "SIR LANCELOT" averiado.<br />

Escuadrilla "CHISPA" - A-4B SKYHAWK – Teniente CERVERA - Alférez MORONI.<br />

RESULTADO: RESULTADO: "SIR GALLAHAD" averiado.<br />

Escuadrilla "JAGUAR"-A-4CSKYHAWK -1er. Teniente VÁZQUEZ (t) - Teniente BONO (t) - Alférez MARTÍNEZ.<br />

RESULTADO: RESULTADO: Una fragata averiada (no i<strong>de</strong>ntificada).<br />

Escuadrilla "AZUL" - Mirage V "DAGGER" – Capitán MIR GONZÁLEZ - Teniente BERNHARDT (T) –Capitán MAFFEIS -<br />

CAPITÁN ROBLES.<br />

RESULTADO: RESULTADO: Un buque transporte averiado ("SIR BEDIVERE).


25 Mayo 82:<br />

Escuadrilla "ZEUS" - A-4C SKYHAWK - Capitán VELASCO - Teniente BARRIONUEVO.<br />

RESULTADO: RESULTADO: Fragata CL 42 "COVENTRY" hundida.<br />

Escuadrilla "VULCANO" - A-4B SKYHAWK – Capitán CARBALLO - Teniente RINKE.<br />

RESULTADO: RESULTADO: Fragata "BROADSWORD" averiada, una bomba perforó su casco, arrastrando un helicóptero al agua<br />

y explotando luego.<br />

Escuadrilla TITO" - Super ETANDART (<strong>Aviación</strong> Naval) - Capitán CURILOVIC - Teniente BARRAZA'.<br />

RESULTADO: RESULTADO: Porta contenedores "ATLANTIC CONVEYOR" hundido.<br />

Escuadrilla "TORO" A-4B SKYHAWK - Capitán GARCÍA (+) - Teniente LUCERO - Teniente PAREDI - Alférez ISAAC.<br />

RESULTADO: RESULTADO: Fragata "AVENGER" averiada.<br />

30 Mayo 82:<br />

Escuadrilla "ZONDA" - A- 4C SKYHAWK - Primer Teniente VÁZQUEZ (t) - Primer Teniente CASTILLO (+) - Primer<br />

Teniente URETA - Alférez ISAAC.<br />

RESULTADO:<br />

RESULTADO: RESULTADO: Portaviones "INVINCIBLE" averiado.<br />

Escuadrilla Super Etendart (<strong>Aviación</strong> Naval) — Capitán FRANCISCA - Teniente COLLAVINO.<br />

RESULTADO: RESULTADO: Portaviones "INVINCIBLE" dañado.<br />

-08Jun82:<br />

Escuadrilla "MASTÍN" - A-4B SKYHAWK – Teniente CACHÓN - Teniente RINKE - Alférez CARMONA.<br />

RESULTADO: RESULTADO: "SIR GALLAHAD" hundido.<br />

Escuadrilla "DOGO" - A-4B SKYHAWK – Teniente GALVEZ - Alférez GÓMEZ.<br />

RESULTADO: RESULTADO: "SIR TRISTAN" <strong>de</strong>struido.<br />

Escuadrilla "PERRO" - Mirage V "DAGGER" – Capitán RODHE - Primer Teniente GABARI - Primer Teniente RATTI.<br />

RESULTADO: RESULTADO: Fragata "PLYMOUTH" severamente averiada (4 bombas impactaron).<br />

Escuadrilla "GATO" - Mirage V "DAGGER" – Capitán CIMATTI - Mayor MARTÍNEZ.<br />

RESULTADO: RESULTADO: Fragata "PLYMOUTH ".severamente averiada, (4 bombas impactaron).<br />

-12jun82:<br />

Destructor "GLAMORGAN" severamente averiado por un misil "EXOCET" lanzado <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la costa.


NOTA: NOTA: Los oficiales figuran con los grados que tenfan y no están registrados los ataques real izados en tierra por<br />

los PUCARÁ, los CANBERRA, los A-4B, los A-4C y los MIRAGE V DAGGER, pues los resultados eran muy difíciles <strong>de</strong><br />

evaluar, aunque por los <strong>de</strong>rribos y la cantidad <strong>de</strong> aviones perforados, era evi<strong>de</strong>nte que se tiraba exactamente<br />

sobre tropa enemiga. Las informaciones que van saliendo a la luz en el mundo, <strong>de</strong>-muestran que la nicivor parte<br />

<strong>de</strong> la flota <strong>de</strong> guerra inglesa, fue alcanzada durante las operaciones; por ejemplo noticias provenientes <strong>de</strong><br />

Estocolmo (Suecia), <strong>de</strong> fecha 30 <strong>de</strong> mayo <strong>de</strong> 1983, señalaron que "39 buques <strong>de</strong> guerra y 11 navios <strong>de</strong><br />

transporte, <strong>de</strong>bieron ser reparados en alta mar durante el conflicto. (Información suministrada por empresas<br />

navales y <strong>de</strong> insumes relacionadas con el material flotante <strong>de</strong> guerra, <strong>de</strong> acuerdo con los datos surgidos <strong>de</strong> las<br />

solicitu<strong>de</strong>s inglesas <strong>de</strong> material naval, efectuadas a través <strong>de</strong> esa playa a diversos proveedores europeos). "Los<br />

daños a esas cincuenta naves, son consecuencia <strong>de</strong> los ataques <strong>de</strong> la <strong>Aviación</strong> <strong>Argentina</strong> durante la guerra<br />

librada por la posesión <strong>de</strong> las Islas <strong>Malvinas</strong>". Las cifras fueron cotejadas con los valores proporcionados por el<br />

mismo gobierno inglés en el "Libro Blanco", sobre la constitución <strong>de</strong> la Fuerza <strong>de</strong> Tareas afectadas al Atlántico<br />

Sur, editada el año pasado". La flota Inglesa movilizó 45 buques <strong>de</strong> guerra, y 67 <strong>de</strong> transporte y <strong>de</strong> flota auxiliar,<br />

lo que hacía un total <strong>de</strong> 112 buques. De acuerdo a esta cifra, el 86,5% <strong>de</strong> los buques <strong>de</strong> guerra fue tocado y el<br />

16,4% <strong>de</strong> los <strong>de</strong> transporte.<br />

1) La Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong>:<br />

a) Antes y <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> la batalla ejerció su responsabilidad integral <strong>de</strong> las operaciones <strong>de</strong>l espacio aéreo.<br />

— Búsqueda y salvamento.<br />

— Exploración y reconocimiento<br />

— Transporte Aéreo<br />

b) Durante el conflicto a<strong>de</strong>más, realizó la guerra mediante ope-<br />

raciones <strong>de</strong>:<br />

— Ataques a objetivos navales.<br />

— Ataques a objetivos terrestres<br />

— Reabastecimiento en vuelo a todos los medios ofensivos<br />

— Guiado y Control <strong>de</strong> todos los medios ofensivos y <strong>de</strong>fensivos.<br />

— Abastecimiento Aéreo<br />

INDUDABLEMENTE INDUDABLEMENTE FUE FUE DECISIVA DECISIVA LA LA ACTUACIÓN ACTUACIÓN DE DE LA LA AVIACIÓN AVIACIÓN AVIACIÓN EN EN ESTA ESTA ESTA GUERRA GUERRA SI SI TENEMOS TENEMOS EN EN CUENTA CUENTA CUENTA QUE:<br />

QUE:<br />

Los A-4B SKYHAWK llegaron al blanco en 85 salidas, los A-4C en 41 salidas, los M-5 DAGGER en 81 salidas, los<br />

MK 62 CANBERRA, en 23 salidas, los PUCARÁ realizaron 3 salidas or<strong>de</strong>nadas por el Comando en el continente y<br />

el resto se cumplieron emanadas directamente por el Componente Aéreo en <strong>Malvinas</strong>, información que no poseo<br />

con exactitud; ya que la documentación pertinente fue <strong>de</strong>struida al caer Darwin en po<strong>de</strong>r <strong>de</strong>l enemigo, pero<br />

estimadas aproximadamente en 21 salidas. Los Mirage III llegaron en 39 oportunida<strong>de</strong>s en misiones <strong>de</strong> cobertura<br />

sobre las islas, los Super Etendart llegaron al blanco en 6 salidas, los A-4Q <strong>de</strong> la <strong>Aviación</strong> Naval en 9 salidas y los


Aermacchi en 3 salidas, lo que hace un total <strong>de</strong> 251 salidas que llegaron al blanco, más 39 salidas <strong>de</strong> cobertura<br />

Je leí I .A.A.<br />

NOTA DEL AUTOR: Pue<strong>de</strong> haber variaciones en cuanto a la fecha o la escuadrilla que averió algún buque (no asi<br />

con las hundidas que existen las pruebas correspondientes); ya que nadie se quedaba luego <strong>de</strong>l ataque a ver<br />

como se llamaba su blanco, y todo surge <strong>de</strong> una labor comparativa y <strong>de</strong> inteligencia, teniendo en cuenta fechas,<br />

horarios y nombres. De lo que no cabe la menor duda es <strong>de</strong> que todos los barcos nombrados fueron alcanzados<br />

<strong>de</strong> mayor o menor gravedad. Es una ardua tarea semejante al armado <strong>de</strong> un rompecabezas, por ejemplo en el<br />

libro "Dios y los <strong>Halcones</strong>", en el Capítulo "Mi primera Fragata" digo:<br />

— "... comencé a gritar <strong>de</strong> alegría y nivelé las alas <strong>de</strong> mi avión, aún sobre las aguas <strong>de</strong>l estrecho, cuando una<br />

<strong>de</strong>sagradable sorpresa me paralizó el corazón: a mi <strong>de</strong>recha, a no más <strong>de</strong> tres kilómetros, había una majestuosa<br />

fragata inglesa <strong>de</strong>tenida. Me pegué al agua, empujé lo más que pu<strong>de</strong> mi acelerador hacia a<strong>de</strong>lante y la miré<br />

esperando el momento en que comenzaría a tirar.<br />

— ¡No tiró! —, nunca me lo voy a po<strong>de</strong>r explicar. Ni un solo tiro, ni un misil, me vio <strong>de</strong>sfilar con toda su artillería y<br />

no tiró. Solo Dios sabe el porque". El dilema ya está resuelto: mirando siluetas, leyendo relatos ingleses, y<br />

escuchando las <strong>de</strong>claraciones <strong>de</strong> los pilotos, llegué a la conclusión <strong>de</strong> que era la Fragata "ANTRIM", que poco<br />

tiempo antes había sido alcanzada por las es-cuadrillas "PERRO" y "ÑANDÚ" con dos bombas que no explotaron.<br />

Toda la tripulación se fue a una punta <strong>de</strong>l buque, mientras un experto las <strong>de</strong>sactivaba; ¡y en ese preciso instante<br />

hice mi <strong>de</strong>sfile aéreo frente a su artillería!.


CAPITULO CAPITULO XXV<br />

XXV<br />

" " EL EL RESCATE RESCATE DEL DEL HIENA HIENA "<br />

"<br />

Este es un Capítulo <strong>de</strong>dicado a nuestras "palas", nuestros queridos helicópteros, que tantas vidas<br />

salvaron, en manos <strong>de</strong> sus valientes pilotos.<br />

RELATA: RELATA: Teniente BREA (Piloto <strong>de</strong> helicóptero BELL 212).<br />

Puerto Darwin y Pra<strong>de</strong>ra <strong>de</strong>l Ganso habían caído en manos <strong>de</strong>l invasor, pero unas horas antes, cuando sus<br />

morteros buscaban nuestros helicópteros en tierra y <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> soportar durante toda la noche el bombar<strong>de</strong>o<br />

naval, se nos or<strong>de</strong>nó el <strong>de</strong>spegue con nuestros BELL 212 hacia Puerto Argentino. Nuestro problema ahora era,<br />

¿"por dón<strong>de</strong> "?,ya que al haber sido tomadas las estribaciones y campos aledaños, carecíamos <strong>de</strong> información.<br />

La "Base Aérea <strong>Militar</strong> Cóndor" tenía en funcionamiento una "Red <strong>de</strong> Observadores <strong>de</strong>l Aire"; formada por<br />

pequeños grupos que, discriminados en las heladas pra<strong>de</strong>ras, se comunicaban con la central <strong>de</strong> comunicaciones<br />

<strong>de</strong> la Base, informaban por radio los movimientos enemigos en las proximida<strong>de</strong>s, especialmente en lo que se<br />

refería a aviones enemigos que se dirigían hacia la misma, o sea que la R.O.A. nos colocaba en "alerta roja".<br />

Una vez arribado, se me or<strong>de</strong>nó que <strong>de</strong>bía cumplir una misión especial relacionada con la R.O.A..Era una misión<br />

<strong>de</strong> rescate, para recuperar a los hombres <strong>de</strong>l puesto cuyo nombre clave era "HIENA", quienes se mantenían<br />

escondidos en un pozo, tres días <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> haber caído "Pra<strong>de</strong>ra <strong>de</strong>l Ganso" en manos <strong>de</strong>l enemigo. No tenían<br />

alimentos, su escondite estaba cubierto <strong>de</strong> nieve, los helicópteros enemigos los buscaban permanentemente,<br />

pero no se rendían. Sólo les quedaba un poco <strong>de</strong> batería para su tiansmisor. Solicitamos que por ese medio<br />

traten <strong>de</strong> avisarles que caminen durante la noche alejándose <strong>de</strong> las tropas enemigas, lo que facilitaría el rescate.<br />

Esto resultó imposible, pues dos <strong>de</strong> los tres hombres presentaban síntomas <strong>de</strong> congelamiento en sus<br />

extremida<strong>de</strong>s inferiores. ¡ Debíamos sacarlos <strong>de</strong> allí !<br />

Cuando analizamos las posibilida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> éxito, todo parecía un mal negocio, arriesgábamos cuatro hombres y un<br />

helicóptero para tratar <strong>de</strong> sacar a tres ro<strong>de</strong>ados por los ingleses; pero nuestros pilotos, adiestrados para el<br />

combate, sabían que no tres, sino un sólo hombre justificaba cualquier riesgo. Salimos en un día horrible,<br />

concuna niebla que no se veían ni las manos, <strong>de</strong> acuerdo a lo solicitado el día anterior a Dios, para evadir-nos <strong>de</strong><br />

los aviones enemigos, ante quienes éramos una in<strong>de</strong>fensa presa.<br />

En algún pozo cubiertos por una manta endurecida como una tabla por el hielo, medio congelados y temblando<br />

<strong>de</strong> frío, tres hombres rezaban y esperaban.<br />

Sabíamos que en las alturas había misiles <strong>de</strong> aviones, y en las sierras misiles tierra-aire (que se tiran <strong>de</strong>s<strong>de</strong><br />

tierra), pero seguíamos.<br />

Esquivamos las elevaciones, con los esquíes <strong>de</strong>l helicóptero "rozando el suelo".<br />

Debíamos recorrer 70 kilómetros para encontrar al R.O.A. No7 <strong>de</strong> Puerto Argentino, en don<strong>de</strong> nos darían más<br />

información sobre el rescate; luego seguíamos a<strong>de</strong>lante.


Desgraciadamente, la niebla se disipó rápidamente y en minutos pudimos disfrutar <strong>de</strong>l vuelo, en una hermosa<br />

mañana, en la que, para nuestra <strong>de</strong>sgracia, había, una niti<strong>de</strong>z que permitía ver a gran distancia. Nuestro "BELL"<br />

comenzó a "arrastrarse", siguiendo las ondulaciones <strong>de</strong>l terreno.<br />

La chapa <strong>de</strong> nuestra máquina nos parecía un inmenso espejo <strong>de</strong> señales, que reflejaba hacia los cuatro puntos<br />

cardinales, <strong>de</strong>latando nuestra posición.<br />

Pensamos en regresar para intentarlo al atar<strong>de</strong>cer, pero quizás ellos para esa hora estarían muertos.<br />

Evitamos las casitas o estancias por posibles "soplones".<br />

Primer infarto, el artillero nos informó que a la <strong>de</strong>recha y a!go atrás, tenía a la vista dos estelas blancas en el<br />

cielo; era una PAC (Patrulla Aérea <strong>de</strong> Combate Inglesa). Buscamos Ja hondonada más profunda y nos<br />

"zambullimos" allí, permaneciendo en vuelo estacionario (en el aire pero sin movimiento <strong>de</strong> traslación). Si las<br />

estelas <strong>de</strong>saparecían, era porque nos había visto e iniciaban el <strong>de</strong>scenso. Siguieron hacia San Carlos.<br />

Continuamos.<br />

Llegamos al R.O.A. 7 (Puesto <strong>de</strong> observación aérea), el que nos costó encontrar por estar muy bien disimulado en<br />

el terreno, y <strong>de</strong>spués que ellos se aseguraron que nuestra "Pala" era amiga. Allí nos informaron que el "HIENA" se<br />

encontraba a unos 20 kilómetros hacia el Oeste. Instantes <strong>de</strong>spués, escuchamos una comunicación <strong>de</strong> los hom-<br />

bres a rescatar, que <strong>de</strong>cfan estar todos vivos. Salimos a buscarlos en enlace <strong>de</strong> radio permanente; sabíamos<br />

que las patrullas <strong>de</strong> Sea King ingleses, armados con misiles, patrullaban la zona. Normalmente, uno evita<br />

mencionar la palabra miedo, se le da otro nombre, se usa otro término que no expresa el real significado.<br />

Nosotros tentamos MIEDO en esos momentos, y con mayúsculas, el que aumentaba a medida que disminuíamos<br />

la distancia al punto. Nuestros hombres y helicópteros, habían volado ya más <strong>de</strong> 400 horas sobre nuestras islas<br />

sin sufrir bajas, pero era darle horas extras al Señor, el que todo siguiere así,más aún cuando nos metimos en la<br />

mismísima boca <strong>de</strong>l lobo. Pese al miedo, <strong>de</strong>bíamos arriesgar nuestras vidas, para salvar vidas, teníamos tres<br />

congelados, motivo que nos hacía vencerlo. Una comunicación nos sobresaltó y nos sacó <strong>de</strong> nuestros<br />

pensamientos - i PALA - HIENA, PALA - HIENA !, no se acerquen ahora que tenemos a dos "SEA KING" volando<br />

sobre nosotros. Estamos muy cerca, agudizamos la vista y los vimos, eran dos puntitos negros a<strong>de</strong>lante.<br />

Estábamos volando sobre el canal que divi<strong>de</strong> a la isla Soledad en dos, casi <strong>de</strong> Sur a Norte; nos estacionamos<br />

sobre su costa, a unos tres kilómetros <strong>de</strong>l puesto, a sólo dos minutos <strong>de</strong> vuelo. Nos comenzó a preocupar el<br />

combustible, ya que no queríamos <strong>de</strong>tener motores, pues el no lograr ponerlos en marcha nuevamente en esas<br />

condiciones, hubiera sido letal; y no sabíamos cuanto tiempo permanecerían allí los SEA KING mero<strong>de</strong>adores. Por<br />

los auriculares escuchábamos al "HIENA" que en un susurro nos relataba lo que pasaba, mientras nosotros<br />

controlábamos el tiempo con el indicador <strong>de</strong> combustible y no con el reloj. Por fin nos llegó una corta<br />

comunicación: i AHORA ! y hacia allí salimos.<br />

No habíamos volado más <strong>de</strong> 30 segundos cuando el HIENA comenzó a gritarnos - i VUELVAN ! - i VUELVAN !.<br />

Mientras cambiábamos <strong>de</strong>sesperadamente el rumbo los volvimos a ver; llevaban suspendidos en sus vientres<br />

unos contenedores especiales que se utilizan para minar gran<strong>de</strong>s zonas <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el helicóptero. Regresamos a la<br />

posición anterior.<br />

— No los vemos pero los escuchamos.<br />

— Ya no los escucho, esperen que miro.


—i SE FUERON !<br />

Hacia ellos saltamos con nuestra "pala".<br />

— Los escucho a uste<strong>de</strong>s.<br />

— Se están pasando .. . vuelvan por izquierda.<br />

Abajo, veíamos sólo nieve.<br />

— Ya casi están.<br />

Avanzamos lentamente y un trozo <strong>de</strong> nieve comenzó a moverse, era una manta helada, luego una mancha oscura<br />

y <strong>de</strong> allí salió un hombre que, ayudado por otro vino hacia nosotros. Nuestro helicóptero, con su pala en<br />

movimiento, levantaba una nube <strong>de</strong> nieve, que podía verse <strong>de</strong>s<strong>de</strong> lejos. Subimos al primero, luego al segundo y<br />

el tercero casi arrastrándo se llegó hasta los esquíes, se colgó <strong>de</strong> uno <strong>de</strong> el los y levantamos mientras un poco <strong>de</strong><br />

la ropa y otro <strong>de</strong>l pelo, tratábamos <strong>de</strong> meterlo a<strong>de</strong>ntro. Pasamos cerca <strong>de</strong>l R.O.A.7 y le dijimos:<br />

— Sin problemas.<br />

En su respuesta noté una gran alegría. Ya lejos <strong>de</strong> la "zona caliente", reparamos en el aspecto <strong>de</strong> esos tres<br />

hombres; -en sus rostros y su vestimenta se leían cada uno <strong>de</strong> los sufrimientos pa<strong>de</strong>cidos, por cumplir con su<br />

misión hasta las últimas consecuencias, aislados, solos, helados, mantenidos sólo por su <strong>de</strong>cición <strong>de</strong> NO<br />

RENDIRSE. Pero a través <strong>de</strong>l frío, el dolor, la suciedad y la nieve, se advertía un gesto <strong>de</strong> orgullo y una profunda<br />

mirada <strong>de</strong> agra<strong>de</strong>cimiento hacia nosotros. Los bombar<strong>de</strong>amos a preguntas, a los gritos por el ruido <strong>de</strong>l motor.<br />

Entre otras cosas les preguntamos porqué susurraban, si los pilotos <strong>de</strong> los Sea King no los podían escuchar,y nos<br />

contaron que la puerta <strong>de</strong>l refugio estaba helada, que no sabían si también los buscaban por tierra. A medida que<br />

nos acercábamos a Puerto Argentino, nos invadía esa hermosa sensación üe satisfacción que nos daba la<br />

seguridad <strong>de</strong>l <strong>de</strong>ber cumplido y <strong>de</strong> (que, los padres <strong>de</strong> ese Alférez y esos dos Soldados, los volverían a besar en el<br />

futuro.<br />

Ya en tierra, y luego <strong>de</strong> un interminable abrazo con los miembros <strong>de</strong>l Escuadrón, obsequiamos a los tres "HIENAS"<br />

nuestro escudo; el que lucieron en el brazo como muestra <strong>de</strong> agra<strong>de</strong>cimiento, hasta su regreso al continente.


CAPITULO CAPITULO XXV XXVI XXV<br />

NUESTRO NUESTRO CAPELLÁN<br />

CAPELLÁN<br />

En homenaje a quienes cuidaron <strong>de</strong> nuestras almas en el combate.<br />

RELATA: RELATA: Capitán PAGANO (Navegador <strong>de</strong> Canberra).<br />

Se que voy a ofen<strong>de</strong>r la humildad <strong>de</strong> un sacerdote alto y gordo, sencillo como un niño y bueno como el pan; pero<br />

también se que estas pobres palabras van a interpretar el sentir <strong>de</strong> muchos. El sentir <strong>de</strong> los Oficiales,<br />

Suboficiales, empleados civiles y soldaditos <strong>de</strong> la II Brigada Aérea que estuvimos <strong>de</strong>splegados en la Base Aérea<br />

<strong>Militar</strong> TRELEW, durante el combate por las "Hermanitas Perdidas". No habían pasado aún treinta horas <strong>de</strong>s<strong>de</strong><br />

que fue dada la or<strong>de</strong>n <strong>de</strong> implementar esa base <strong>de</strong> <strong>de</strong>spliegue, cuando salían, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> horas <strong>de</strong> intenso<br />

trajín, una veintena <strong>de</strong> camiones con el apoyo técnico y sostén logístico, el furgón asignado a la BAM " TRELEW"<br />

<strong>de</strong>l Grupo 1 <strong>de</strong> Comunicaciones <strong>Escuela</strong> (Grupo <strong>de</strong>splegado en todas las bases y cuya labor fue encomiable), una<br />

ambulancia, varias camionetas y los ómnibus con el personal <strong>de</strong> los Escuadrones Base y Técnico y el <strong>de</strong> la Plana<br />

Mayor, Oficiales, Suboficiales, Civiles y Soldados que iban a montar la Base y alistar los medios para el apoyo <strong>de</strong><br />

las operaciones <strong>de</strong>l Escuadrón Canberra. Al lado <strong>de</strong> los conductores, militares o camioneros orgullosos <strong>de</strong><br />

participar <strong>de</strong> algún modo en la tarea, los más antiguos <strong>de</strong> cada vehí- culo saludaban militarmente al pasar frente<br />

a las autorida<strong>de</strong>s y a los que, formados en líneas <strong>de</strong> tres filas, trasnochados y ojerosos por los preparativos,<br />

cantábamos con entusiasmo, sin distinción <strong>de</strong> jerarquías: . . . "Por la Patria a morir o a la Gloria, sus soldados<br />

alados irán" (Parte <strong>de</strong>l estribillo <strong>de</strong> "Alas <strong>Argentina</strong>s"). Un ómnibus mostraba algo distinto, por una <strong>de</strong> sus<br />

ventanillas se agitaba un brazo forrado <strong>de</strong> negro; ¡cuándo no este cura, tan poco formal!, que venta saludando a<br />

la gente <strong>de</strong> la "Base", riéndose como un chico travieso. Y llegaron a TRELEW ... y días <strong>de</strong>spués también nosotros<br />

llegamos a TRELEW; la cosa venía ya en serio. Y empezaron los días <strong>de</strong> la rutina, rota por los vuelos <strong>de</strong> adies-<br />

tramiento sobre las islas y los ejercicios operativos. Y este cura grandote, que no podía disimularse ni queriendo,<br />

a veces vestido <strong>de</strong> ver<strong>de</strong>, a veces <strong>de</strong> negro, siempre dando vueltas por ahí; charlando, aconsejando, escuchando<br />

a todos. Siempre "metiendo" buen humor, siempre comunicando a todos, la alegría <strong>de</strong> la gracia <strong>de</strong> Dios.<br />

Alojado en el Casino <strong>de</strong> Oficiales, se mudó <strong>de</strong>spués a la sacristía, bajo el campanario <strong>de</strong> la Capilla, aunque<br />

chupara frío daba vuel-as por allí, para estar más cerca <strong>de</strong> todos los alojamientos, para aten<strong>de</strong>r a cualquiera, a<br />

cualquier hora <strong>de</strong>l día y también <strong>de</strong> la noche.<br />

Compañero y amigo <strong>de</strong> las horas buenas y <strong>de</strong> las bravas, él estaba ahí en la plataforma frente a los hangares en<br />

ese duro y doloroso, pero hermoso atar<strong>de</strong>cer <strong>de</strong>l Bautismo <strong>de</strong> Fuego <strong>de</strong> la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong>, recibiendo <strong>de</strong><br />

nosotros, los tripulantes, los mecánicos, armeros y soldados el Canberra <strong>de</strong>l "PALITO" y el "NEGRO" que venía con<br />

la punta <strong>de</strong> un ala hecha jirones por un misilazo, y llorando la pérdida <strong>de</strong> nuestros dos primeros caídos: el Primer<br />

Teniente D. Mario "Coquena" GONZÁLEZ y el Teniente D Eduardo "Pituso" DE IBAÑEZ. El se arrimaba, a! día


siguiente <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> la misa dominical, a acercar la comunión a los que, <strong>de</strong> alerta listos para salir, chupando la<br />

espera y rumiando tensiones, no podían participar <strong>de</strong> ella en la Capilla.<br />

Andaba mucho con los tripulantes, los más expuestos al riesgo; pero quitaba su tiempo al sueño para no<br />

<strong>de</strong>saten<strong>de</strong>r a quienes mantenían <strong>de</strong> día y <strong>de</strong> noche nuestros aviones, o a los soldados <strong>de</strong> la cocina o a los que<br />

andaban <strong>de</strong> cuarto vigilante, en algún puesto <strong>de</strong> guardia o dormían al lado <strong>de</strong> los cañones <strong>de</strong> la artillería<br />

antiaérea, cuyo jefe el Teniente CORAZA, casi ni se movía <strong>de</strong> su radarcito. Y si había algún tripulante que, en<br />

capilla para la misión siguiente quería arreglar su negocio con Tata Dios, podía <strong>de</strong>spertarlo a cualquier hora y<br />

hacerse escuchar en confesión, en la Capilla <strong>de</strong> Nuestra Señora Stella Maris o en las calles bajo el estrellado<br />

hielo patagónico.<br />

Especie <strong>de</strong> sucursal en la BAM TRELEW <strong>de</strong>l fondo patriótico alimenticio y espiritual, recibía <strong>de</strong> su parroquia<br />

paranaense (Nuestra Señora <strong>de</strong> Fátima) los generosos envíos <strong>de</strong> esos "panza ver<strong>de</strong>". El los distribuía<br />

personalmente, Rey Mago en los meses <strong>de</strong> abril, mayo y junio, a los soldados aeronáuticos y navales, luego a los<br />

empleados civiles y Sufoficiales y luego a los Oficiales. El distribuía las cartas, hermosas cartas ("oramos por<br />

Uds.", "confiamos en Uds.", "VIVA LA PATRIA", etc.), que la gurisada <strong>de</strong> su parroquia y <strong>de</strong> algunos colegios o<br />

agrupaciones nombraban, a través <strong>de</strong> tan competente cartero, para la gente <strong>de</strong>splegada. Nos pedía que las<br />

contestemos y lo hacíamos con gusto, rompiendo la pereza <strong>de</strong> agarrar papel y lápiz para cartear. (Aún recuerdo<br />

emocionado la <strong>de</strong> una chiquilla <strong>de</strong> ocho años, Stella Maris Mo<strong>de</strong>nasi, que luego <strong>de</strong> varios meses y varias cartas,<br />

conocí en su casa <strong>de</strong> Paraná). El celebraba diariamente esas misas fervorosas, en que, junto al Altar, pedíamos<br />

por nuestras esposas e hijos, por nuestra Patria y su empresa, por nuestros queridos caídos, conocidos o<br />

<strong>de</strong>sconocidos pero entrañablemente nuestros, y también y muy "<strong>de</strong>n<strong>de</strong>veras" sencilla y sinceramente por las<br />

almas <strong>de</strong> nuestros enemigos, muertos a veces por nuestras bombas. El nos recibía a todos los que quisiéramos ir,<br />

<strong>de</strong>spués <strong>de</strong> la misa, en su "alcoba-celda" para charlar con unos mates o unos chocolates calentados en pava y<br />

nos echaba, cómplice <strong>de</strong> la gordura, cuando un tripulante "obesón", alegando necesidad <strong>de</strong> confesarse para que<br />

no lo macaneáramos, iba a agenciarse algún chocolate en barra, para su régimen hiper-calórico. Allí', en ese<br />

cuarto, sonó varios anocheceres la risa franca e incontenida <strong>de</strong>l Capitán "Flaco" CASADO, mi instructor <strong>de</strong> vuelo<br />

<strong>de</strong> cuando hice el curso, y cuya muerte en la última operación aérea sobre las islas (al filo <strong>de</strong> la medianoche entre<br />

el 13 y 14 <strong>de</strong> Junio) le dolió tanto como a nosotros.<br />

El <strong>de</strong>splegó <strong>de</strong> los primeros y regresó <strong>de</strong> los últimos, <strong>de</strong>sor<strong>de</strong>nado y bueno, capellán <strong>de</strong> la Base Aérea <strong>Militar</strong><br />

"TRELEW".<br />

Ese cura, que se jugó la salud y quemó años <strong>de</strong> su vida como misionero en tiempos bravos en el África negra, y<br />

que va a tener que perdonarme esta zancadilla a su humildad y a su pastoral trabajo sin aspamentos, se llama<br />

Padre GUILLERMO R. RAUSCH.<br />

"Dios bendiga a los que vuelan y a todos los que pidan y rezan por ellos".


CAPITULO CAPITULO XXVII<br />

XXVII<br />

"CHANCHAS "CHANCHAS IMPRESCINDIBLES<br />

IMPRESCINDIBLES"<br />

IMPRESCINDIBLES<br />

Se habló <strong>de</strong> la eficacia <strong>de</strong>l Super—Etendart, <strong>de</strong>l valor <strong>de</strong> los pilotos <strong>de</strong> A-4C, lo que no se dijo, es que sin<br />

los HérculesK-C130,esa misión hubiese sido imposible.<br />

RELATA: RELATA: Vicecomodoro LITR.ENTA (Piloto <strong>de</strong> Hércules KC-130 y Comandante <strong>de</strong>l reabastecedor que salvó la vida<br />

al Alférez DELLEPIANE en el Capítulo "LA CHANCHA" <strong>de</strong>l libro "DIOS Y LOS HALCONES").<br />

En todas las misiones <strong>de</strong> reabastecimiento que habíamos realizado, <strong>de</strong>sconocíamos que blanco tenían asignados<br />

esos aguzados estiletes con una escarapela celeste y blanca, que venían veloces sobre el mar a succionar<br />

nuestro vital combustible, simplemente porqué no influía en nuestra tarea. Pero en la madrugada <strong>de</strong> ese 30 <strong>de</strong><br />

Mayo <strong>de</strong> 1982, cuando fui <strong>de</strong>scifrando los renglones <strong>de</strong> mi hoja <strong>de</strong> misión, la emoción me invadió: — Una<br />

escuadrilla <strong>de</strong> A-4C a cuatro aviones <strong>de</strong> la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong>, una sección <strong>de</strong> Super Etendart a dos aviones<br />

<strong>de</strong> la <strong>Aviación</strong> Naval; silencio absoluto <strong>de</strong> radio durante toda la operación; una navegación <strong>de</strong> ida <strong>de</strong> 2000<br />

kilómetros por el sur <strong>de</strong> las <strong>Malvinas</strong>, sobrepasándoles hacia el este 400 km. una navegación <strong>de</strong> vuelta en forma<br />

directa y a máxima velocidad, para reabastecer por tercera vez a posibles aviones que pudieran regresar <strong>de</strong>l<br />

ataque (Según los puntos codificados en latitud y longitud, <strong>de</strong>beríamos pasar a sólo 80 km al sur <strong>de</strong> <strong>Malvinas</strong> y<br />

por la altura necesaria para realizar el último reabastecimiento, quedaríamos expuestos durante más <strong>de</strong> 40<br />

minutos aun ataque <strong>de</strong> los Harrier); máxima carga <strong>de</strong> combustible para entregar todo el que los aviones <strong>de</strong> caza<br />

necesitaran; blanco a batir, el renglón estaba en blanco, pero no me cupo la menor duda que en la hoja <strong>de</strong> misión<br />

<strong>de</strong> los pilotos <strong>de</strong> caza <strong>de</strong>cía "INVINCIBLE". Dije en voz alta — i Pavada <strong>de</strong> blanco tienen los muchachos cazadores !<br />

Llamé al Mayor OREFICE, quien me podría dar una información cierta sobre el tema.<br />

— Me imagino porqué me llama, es exactamente lo que está pensando, todos en el Comando sabemos que es<br />

una misión muy difícil, pero <strong>de</strong>bemos hacerlo; confiamos mucho en uste<strong>de</strong>s. Yo no necesitaba escuchar más, me<br />

<strong>de</strong>spedí con un "hasta la tar<strong>de</strong> OREFICE"— i <strong>de</strong>spués le cuento como me fue ! —Tratando <strong>de</strong> mantener un<br />

optimismo total, ya que es la única forma <strong>de</strong> sobreponerse a todas las tensiones que a uno lo afectan. Pensé en<br />

el joven Oficial con quien había hablado recién, sabía <strong>de</strong> los riesgos <strong>de</strong> la misión, pero sin embargo, como piloto<br />

<strong>de</strong> Hércules que era, me estaría envidiando. Intervenir en esa misión era "un lujo". Me reuní con el Vicecomodoro<br />

NOE, Comandante <strong>de</strong>l segundo Hércules que intervendría en la operación. Comenzó la coordinación: — Yo<br />

<strong>de</strong>spegaré a tal hora y volaré razante con rumbo norte sobre el continente, luego pondré rumbo Este hasta estar<br />

sobre el agua; unos 100 km mar a<strong>de</strong>ntro y bien rasante, pondré rumbo sur hasta pasar la Isla <strong>de</strong> los Estados;<br />

luego, ya en el pasaje <strong>de</strong> Drake, rumbo Este y siempre lamiendo las olas, pues a partir <strong>de</strong> ese punto podríamos<br />

ser <strong>de</strong>tectados por los radares <strong>de</strong> los buques a<strong>de</strong>lantados que están haciendo patrullaje, para dar la alarma al<br />

resto <strong>de</strong> la flota si ven aviones.


Proseguí — Cuando me encuentre lateral Sur <strong>de</strong> <strong>Malvinas</strong>, comenzaré el ascenso hasta el nivel asignado, para<br />

encontrarme con los cazas a la hora exacta y en el punto previsto.<br />

— Muy bien - Me dijo NOE — Yo <strong>de</strong>spegaré cinco minutos más tar<strong>de</strong> y me alejaré rasante hacia el oeste unos<br />

minutos, luego pondré rumbo Sur y pegado a la tierra llegaré al estrecho <strong>de</strong> DRAKE a tal hora, luego por el Sur <strong>de</strong><br />

<strong>Malvinas</strong>, cuando vaya a iniciar el ascenso le haré una señal muy corta por el VHF, para avisarle que todo marcha<br />

<strong>de</strong> acuerdo a lo convenido. Me fui posteriormente al avión e hice a mi tripulación las recomendaciones <strong>de</strong><br />

entrecasa — Vamos a llevar yerba mate, porque me parece que en este vuelo se nos va a secar la lengua, y no<br />

precisamente por tener mucho que hablar. Cuando todos los controles previos a la partida estuvieron hechos,<br />

iniciamos la carrera <strong>de</strong> <strong>de</strong>spegue en un hermoso y tardío amanecer patagónico. La noble "CHANCHA" se<br />

estremecía, impulsada por los cuatro potentes motores a pleno, cargada con combustible "hasta en los bolsillos".<br />

En la cabina el silencio era total, mientras meditábamos sobre elorgullo por lo que uno es, por lo que uno hace.<br />

— Arriba el tren <strong>de</strong> aterrizaje — Dijo el Capitán DESTEFANIS (Mi fiel y leal Copilolo que en ese momento iba a cargo<br />

<strong>de</strong> los comandos). Con una maniobra evasiva, por si algún comando esperaba en la prolongación <strong>de</strong> la pista, nos<br />

concentramos en no chocar contra algunas <strong>de</strong> las gran<strong>de</strong>s aves que pueblan las costas Patagónicas (avutardas,<br />

skua), lo que haría fracasar nuestra misión. El cielo en ese tramo <strong>de</strong> la navegación estaba sin nubes. Volar sobre<br />

las olas en un vagón <strong>de</strong> ferrocarril y a 522 kilómetros por hora es una sensación fantástica pero no muy<br />

aconsejable para cardíacos. En el DRAKE ya comenzaron a acumularse las nubes, portando mucho hielo en<br />

suspensión, el que en parte nos ocultaría <strong>de</strong> los "curiosos". El mayor MENSI, nuestro navegador, me comunicó —<br />

Ya estábamos lateral sur <strong>de</strong> <strong>Malvinas</strong> — con una tranquilidad que me hizo admirarlo. Allí <strong>de</strong>bíamos empezar el<br />

ascenso al nivel coordinado con los cazas, y comenzaba el peligro <strong>de</strong> ser captado por alguna fragata. Realmente<br />

me sentía como si fuese el platillo en el "Tiro al Pichón". En ese preciso instante, escuché en el VHF señal<br />

convenido con NOE, lo que significaba que todo iba bien. Entramos en nubes, lo que me pareció maravilloso, pues<br />

había menor posibilidad <strong>de</strong> <strong>de</strong>tección, afuera había 50° bajo cero. Llegamos al punto, nos encontramos con la<br />

"CHANCHA" <strong>de</strong> NOE. Apenas llevamos tres horas y media <strong>de</strong> vuelo, pero nos parecía un año. Nos saludamos con<br />

la tripulación <strong>de</strong>l otro avión, pero el momento <strong>de</strong> esparcimiento se cortó cuando el Suboficial REYNOSO, me<br />

informa — i Estamos "estelando" ! (Dejando una estela). Or<strong>de</strong>né <strong>de</strong>scen<strong>de</strong>r; <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la otra cabina NOE levanta el<br />

<strong>de</strong>do pulgar en señal <strong>de</strong> asentimiento.Estábamos por encima <strong>de</strong> las nubes. Cinco segundos antes <strong>de</strong> que se<br />

cumpla la hora <strong>de</strong> reunión con los aviones <strong>de</strong> combate, vimos aparecer los seis puntitos en el horizonte, que<br />

rápidamente tomaron forma. Los A-4C vinieron a mi avión y los Super Etendart al otro. Completaron nuevamente<br />

sus <strong>de</strong>pósitos <strong>de</strong> combustible en absoluto silencio, un silencio especial, en la gran inmensidad <strong>de</strong> esos helados<br />

mares australes, 22 personas en un punto <strong>de</strong>l espacio, reunidas con un mismo fin, con precisión y<br />

profesionalismo. Era un silencio respetuoso, <strong>de</strong>nso, en el que se adivinaba la férrea <strong>de</strong>cisión <strong>de</strong> enfrentar el<br />

momento supremo. Continuamos juntos, acoplándose ellos para reabastecerse cada tanto.<br />

En el punto final <strong>de</strong> reabastecimiento, observé como los seis cazas se <strong>de</strong>sprendían para iniciar el ataque final,<br />

con una pronunciada picada hacia el mar. Los vimos alejarse rápidamente con rumbo al blanco, hacerse un<br />

puntíto y <strong>de</strong>sparecer. Una vez que los Super Etendart lancen su letal misil, los A-4C irían a <strong>de</strong>scargar sus bombas<br />

sobre el portaviones. Cambiamos el rumbo hacia el nuevo punto <strong>de</strong> reunión, el tramo más crítico <strong>de</strong> la


navegación, pues luego <strong>de</strong>l ataque nos buscarían por todo el cielo, como un enjambre <strong>de</strong> avispas al que le han<br />

pateado el panal.<br />

— Señor, nos estamos atrasando por viento <strong>de</strong> frente, llegaremosal punto, 4 minutos tar<strong>de</strong>.<br />

— Qué velocidad hace falta?, pregunté.<br />

Era superior a la máxima permitida para el avión.<br />

— Espero que la noble "CHANCHA" aguante una vez más, aun-que sea un sólo avión el que nos necesite, i Dele<br />

pata nomás ! Apenas terminé mis palabras cuando escuchamos en nuestro equipo <strong>de</strong> radio al radarista <strong>de</strong><br />

<strong>Malvinas</strong>, que alertaba a los aviones argentinos diciendo — iAlgo está sucediendo, todas las PAC (Patrullas <strong>de</strong><br />

aviones <strong>de</strong> combate ingleses) acaban <strong>de</strong> ascen<strong>de</strong>r rápidamente a 12.000 metros <strong>de</strong> altura! (esta altura se usa<br />

para permanecer mucho tiempo en vuelo, gastando el mfnimo<strong>de</strong> combustible, por la menor <strong>de</strong>nsidad <strong>de</strong>l aire).<br />

Evi<strong>de</strong>ntemente, SE HABÍAN QUEDADO SIN PISTA, (<strong>de</strong>l portaviones). Eran las 14,30 horas <strong>de</strong>l 30 <strong>de</strong> Mayo <strong>de</strong><br />

1982. La voz <strong>de</strong>l Suboficial GONZÁLEZ me puso en alerta -Señor, dos aviones se acercan por la <strong>de</strong>recha.<br />

Nuevamente la tensión, la boca reseca y la necesidad <strong>de</strong> un mate criollo. ¿Serían nuestros o <strong>de</strong> ellos? Por suerte,<br />

eran los dos Super Ltendart, con un alabeo nos indicaron que no necesitaban "jugo" y se alejaron raudamente. De<br />

nuevo la espera y la boca reseca.<br />

— Señor, dos aviones por la <strong>de</strong>recha, y parecen A—4C. — Efectivamente, en pocos instantes los tuvimos a nuestro<br />

lado, nuestros mecánicos <strong>de</strong> abor<strong>de</strong>, Suboficiales PERÓN y TELLO, extendieron las mangueras y reabastecimos a<br />

los ya gloriosos A—4C. Entretenido en esta operación, había algo que me tenía intranquilo. Mi mente maquinaba:<br />

— Estamos en zona caliente, los Harriers nos buscan, ¿qué hago dando vueltas en círculos con dos "Skyhawk"<br />

colgados?, ¿por qué no doy la or<strong>de</strong>n <strong>de</strong> poner rumbo <strong>de</strong> alejamiento? i Eso! ¡Faltan dos!. Pregunté a mi tripulación<br />

si los veían.<br />

— Negativo.<br />

No me animaba a preguntarles a los pilotos <strong>de</strong> A—4C, pues tenía miedo a la respuesta.<br />

— Díganme muchachos si los dos que faltan pue<strong>de</strong>n llegar aún.<br />

— No señor, no vendrán, los <strong>de</strong>rribaron en la final <strong>de</strong> tiro al portaviones.<br />

En mi chocaron sentimientos encontrados.<br />

— ¡Final <strong>de</strong> tiro al portaviones! y el NO VENDRÁN. Miré a mi copiloto y con voz cansada le dije — Rumbo a casa.<br />

Las ocho horas <strong>de</strong> vuelo, el tiempo malísimo al regreso, el aterrizaje en emergencia <strong>de</strong> combustible, eran<br />

secundarios, sin importancia. Habíamos participado <strong>de</strong> la misión más trascen<strong>de</strong>nte <strong>de</strong> esta batalla y dos <strong>de</strong><br />

nuestros <strong>Halcones</strong> habían sabido morir con honor.<br />

Te fuiste como un héroe Volverás sin embargo<br />

y así te recordamos En las alas <strong>de</strong> un pájaro<br />

Los que bien te quisimos En cada escarapela<br />

y sin tí nos quedamos Volverás para guiarnos<br />

mamá (<strong>de</strong>l 1er. Ten. CASTILLO, muerto en la acción).


NOTA DEL AUTOR: Para todas las madres que tienen el honor <strong>de</strong> haber engendrado hijos héroes y ahora sufren su<br />

pérdida, recuer<strong>de</strong>n que nuestra Santa Madre, la Virgen María, pasó por lo mismo que uste<strong>de</strong>s, para que otros<br />

vivan, para que hoy aquellos que uste<strong>de</strong>s lloran y cayeron con la esperanza <strong>de</strong> la resurrección, estén junto a Dios.


CAPITULO CAPITULO XXVIII<br />

XXVIII<br />

UN UN UN PILOTO PILOTO EN EN ANDADOR<br />

ANDADOR<br />

La gran mayoría <strong>de</strong> los que combatimos en nuestras <strong>Malvinas</strong> éra mos expertos en el avión; pero a<br />

algunos, que la guerra los sorprendió con un pase recién cumplido, no les dio el suficiente tiempo para<br />

adaptarse al avión, aunque si contaban con una vasta experiencia en otras máquinas.<br />

RELATA: RELATA: Capitán DEMIERRE (Piloto <strong>de</strong> Mirage V "DAGGER").<br />

Cuando comenzó la guerra en <strong>Malvinas</strong>, mi situación no era muy cómoda. Contaba en mi haber con más <strong>de</strong><br />

1.100 horas en aviones <strong>de</strong> combate (Sabré y A-^tC), pero recién estaba haciendo el curso <strong>de</strong> adaptación al<br />

Mirage V "Dagger", con el que estábamos empezando conocernos. Al iniciarse las hostilida<strong>de</strong>s, pedí mi traslado a<br />

A—4C, pensando que allí podría rendir más, teniendo en cuenta mi experiencia anterior, lo que normalmente es<br />

un acontecimiento en la vida <strong>de</strong> cualquier piloto, pero esas eran circunstancias muy especiales. El 20 <strong>de</strong> Abril,<br />

salí "solo" por primera vez y comencé un curso acelerado para encontrarme en condiciones óptimas cuando<br />

tuviese que combatir.<br />

El 22 <strong>de</strong> Mayo fui por primera vez al sur, a la Base <strong>de</strong> asiento <strong>de</strong> mis aviones. Llegué en un mal momento, pues<br />

estaban <strong>de</strong>saparecidos 4 <strong>de</strong> mis compañeros (el Mayor Piuma, el Capitán Donadille, el Primer Teniente Senn y el<br />

Primer Teniente Luna). Esa misma noche recibimos la feliz noticia <strong>de</strong> que los cuatro se habían eyectado en<br />

combate y estaban con vida, lo que más a<strong>de</strong>lante nos llamó la atención, ya que los cuatro fueron alcanzados el<br />

día 21 <strong>de</strong> mayo por misiles <strong>de</strong> los Harriers, quedando con vida, mientras que, a partir <strong>de</strong> ese di'a ningún misil <strong>de</strong><br />

ellos falló (aire-aire) y ningún piloto alcanzado sobrevivió, con excepción <strong>de</strong> dos, el día 24 <strong>de</strong> Mayo.<br />

En el edificio en don<strong>de</strong> vivían algunas <strong>de</strong> las esposas <strong>de</strong> los pilotos, la noticia corrió como un reguero y fue una<br />

fiesta. Para nosotros era como encontrar con vida a un hermano al que creíamos muerto. AHÍ nos dimos cuenta<br />

<strong>de</strong>l aprecio que se siente por los que comparten diariamente esa vida en equipo, que es común por el tipo <strong>de</strong><br />

actividad propia <strong>de</strong>l personal <strong>de</strong> la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong>. Todos <strong>de</strong>pendíamos <strong>de</strong> todos. Luego <strong>de</strong> una<br />

adaptación a la Base, a la zona y una misión <strong>de</strong> combate, ya probada, me sentí'con más confianza para lo que<br />

viniera. El 4 <strong>de</strong> junio llegó una or<strong>de</strong>n <strong>de</strong> misión para cuatro Mirage V "Dagger", la que fue complida por el<br />

Vicecomodoro Villar, el.Primer Teniente Román, el Primer Teniente Musso y yo. La misión consistía en un<br />

bombar<strong>de</strong>o en picada <strong>de</strong> 60° sobre tierra, en Monte Kent, a plena luz <strong>de</strong>l día, lugar en el que ya se habían hecho<br />

fuertes tropas inglesas y amenazaban Puerto Argentino.<br />

El <strong>de</strong>spegue fue normal, teniendo en cuenta que cada uno <strong>de</strong> ellos era un riesgo adicional, <strong>de</strong>bido al peso límite<br />

<strong>de</strong> los aviones. Ascendimos hasta el nivel chequeando previamente nivelamos. En esos momentos iniciales, en<br />

que solo podría matarnos una falla en nuestro avión que nos obligase a eyectarnos, repasamos nuestros paneles<br />

<strong>de</strong> armamento para evitar apurones <strong>de</strong> último momento y en circunstancias más críticas.<br />

A medida que nos acercábamos a las Islas las condiciones <strong>de</strong>l tiempo empeoraban cada vez más. Del cielo casi<br />

<strong>de</strong>spejado en nuestra Base ya no quedaba nada y oscuras y <strong>de</strong>nsas nubes se apretaban sobre las Islas, hasta la


altura en que nosotros volábamos. Debido a nuestro excesivo peso, ya que necesitábamos mucho combustible<br />

para llegar al blanco jugadísimos y a la altura <strong>de</strong>l tope (parte superior) <strong>de</strong> nubes, los aviones comenzaron a entrar<br />

en segundo régimen, lo que quiere <strong>de</strong>cir en criolte que se caían, que no continuaban volando y tendían a<br />

<strong>de</strong>scen<strong>de</strong>r, obligándonos a cada tanto a conectar postcombustión (potencia adicional <strong>de</strong> gran empuje), lo que<br />

aumentaba nuestro consumo <strong>de</strong> combustible. Nos comunicamos con el radar <strong>de</strong> <strong>Malvinas</strong> (FAA), informándole <strong>de</strong><br />

nuestra posición y situación. Nos contestó que nos guiaría hasta 4 kilómetros antes <strong>de</strong>l blanco, para que<br />

efectuáramos el ataque. Comenzábamos a <strong>de</strong>jar un "rastro en el cielo", <strong>de</strong>nsas estelas <strong>de</strong> vapor, producto <strong>de</strong> la<br />

elevada temperatura <strong>de</strong> los gases <strong>de</strong> escape en contacto con el aire a menos <strong>de</strong> 50°C, lo que nos intranquilizó.<br />

Asi fue, ya en el punto y con una separación lateral entre aviones, picamos y entramos como una flecha entre las<br />

nubes. Mientras el <strong>de</strong>sgarrado algodón pasaba como una exalación junto a nuestra cabina y el velocímetro<br />

aumentaba su indicación rápidamente, comencé a tener a dos gran<strong>de</strong>s enemigos nuestros; al misil traicionero<br />

que llega sin romanticismo y sin alma; y a la <strong>de</strong>sorientación espacial. Esta última provoca en el piloto una especie<br />

<strong>de</strong> vértigo al carecer, en la noche o entre nubes, <strong>de</strong> puntos <strong>de</strong> referencia, creando situaciones imaginarias que a<br />

uno le hacen dudar <strong>de</strong> sus instrumentos. Por momentos le parece estar <strong>de</strong> cabeza abajo, o muy inclinado, cuando<br />

en realidad el avión sigue un prolijo vuelo con alas niveladas. Uno <strong>de</strong>be creer a muerte en su instrumento,<br />

aferrarse a ellos y <strong>de</strong>jar todas las otras sensaciones. Llegué a la altura <strong>de</strong> lanzamiento, lancé mis bombas y<br />

mientras mi avión suspiraba aliviado, ejercí la presión <strong>de</strong> palanca atrás y busqué altura nuevamente. Salí sobre la<br />

capa como un cohete y puse el rumbo <strong>de</strong> regreso. No veía a mis compañeros pero los escucaba a todos, lo que<br />

me produjo una gran alegría. Ya más relajado, reparé en la imagen <strong>de</strong> la Virgen <strong>de</strong> Loreto, quees el instrumento<br />

más importante con que cuentan nuestros aviones y recordé la carta <strong>de</strong> Graciela ". . . Para que todavía te que<strong>de</strong>s<br />

más tranquilo, estoy dispuesta a cualquier sacrificio. . ." Esto me hizo viajar unos cuantos kilómetros al norte y<br />

pensar en mi familia, en el sacrificio que le exigía mi vocación. El advertidor sonoro <strong>de</strong> falla sonó<br />

estruendosamente, sacándome <strong>de</strong> mis cavilaciones. La luz <strong>de</strong> alarma <strong>de</strong> combustible estaba encendida, lo que<br />

significaba que me quedaba "jugo" para 10 minutos <strong>de</strong> vuelo, cuando estaba en la mitad <strong>de</strong>l "charco" (espacio <strong>de</strong><br />

mar entre <strong>Malvinas</strong> y el Continente) mientras yo necesitaba más '<strong>de</strong>l doble <strong>de</strong> ese tiempo para llegar a la pista.<br />

Por la luz <strong>de</strong>l sol sobre la cabina, no podía ver claramente la aguja <strong>de</strong>l indicador y pensé que algún tanque externo<br />

no había transferido. Todo no pasó <strong>de</strong> un susto, una <strong>de</strong> las agujas cayó al mínimo, <strong>de</strong>bido a que no había<br />

conectado la válvula intercomunicadora <strong>de</strong> tanques y eso provocó la alarma y mi pre-infarto. Abajo nos esperaban<br />

ansiosos los <strong>de</strong>más pilotos, los mecánicos (que siempre sufrían los regresos <strong>de</strong> nosotros), cigarrillos, café. . .y<br />

alguna otra misión. . .


CAPITULO CAPITULO XXIX<br />

XXIX<br />

PORQUE PORQUE PORQUE NO NO EXPLOTARON EXPLOTARON NUESTRAS NUESTRAS BOMBAS BOMBAS<br />

BOMBAS<br />

Quien aclara esto para uste<strong>de</strong>s, es uno <strong>de</strong> los Oficiales que prestigian a nuestra Fuerza Aérea por su<br />

capacidad y profesionalismo.<br />

RELATA: RELATA: Mayor DAVILA (Ingeniero Aeronáutico <strong>de</strong> la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong>)<br />

Los Argentinos (y muchos que no lo son) se preguntan por qué no explotaron muchas <strong>de</strong> las bombas lanzadas por<br />

nuestros aviones sobre la flota inglesa en la guerra <strong>de</strong> las <strong>Malvinas</strong>. El enemigo se encargó, a su vez <strong>de</strong> alimentar<br />

estas mismas dudas alegando "<strong>de</strong>sconocimiento <strong>de</strong> los técnicos argentinos, material fallado, vencido u obsoleto",<br />

etcétera. Esto no es cierto. Incluso adujo que, si todas las que hicieron impacto sobre sus buques hubieran<br />

estallado, muy distinto hubiese sido el resultado <strong>de</strong> la guerra. Y esto si' es cierto. Lo que ocurrió es que éste<br />

material fue empleado por la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong> (FAA) <strong>de</strong> un modo y forma tal que escapaba a todas las<br />

previsiones mo<strong>de</strong>rnas <strong>de</strong> la guerra aeronaval y en base a las cuales habían sido diseñados los medios <strong>de</strong><br />

combate empleados.<br />

El El Problema. Problema. Inicial<br />

Inicial<br />

Ante la gran efectividad <strong>de</strong> las <strong>de</strong>fensas antiaéreas mo<strong>de</strong>rnas se han a<strong>de</strong>cuado las armas a las técnicas <strong>de</strong><br />

ataque, empleándose, en general, las siguientes:<br />

a) Misiles guiados (Tipo AS-30, EXOCET, etc.)<br />

b) Armas <strong>de</strong> dispersión <strong>de</strong> submunicioncs o granadas (Tipc BELUGA)<br />

c) Bombas frenadas por paracaídas.<br />

Respecto <strong>de</strong> los primeros, la mayoría <strong>de</strong> las disponibles en el mercado internacional <strong>de</strong> armas obligan a un<br />

excesivo acercamiento <strong>de</strong>l avión al blanco. Respecto a las otras dos alternativas, los ataques se realizan cada vez<br />

a menor altura y pasando horizontalmente (en vuelo rasante) sobre el blanco. Para evitar el rebote <strong>de</strong> la bomba<br />

(estas hacen "patito") en el suelo o agua y para separarla más <strong>de</strong>l avión, se le adosan en la cola dispositivos <strong>de</strong><br />

frenado (paracaídas) que permiten que el avión esté lo suficientemente lejos en el momento <strong>de</strong> la explosión.<br />

Estos dos últimos sistemas fueron los empleados por los aviones ingleses sobre las <strong>Malvinas</strong> en los primeros días<br />

<strong>de</strong> combate. La bomba con paracaídas fue la que inicialmente lanzaron nuestros aviones sobre la flota. Y ambos<br />

contendientes se encontraron con el mismo problema: la artillería antiaérea <strong>de</strong>struía a los aviones que volaban a<br />

mayor altura y las bombas <strong>de</strong>s<strong>de</strong> menos <strong>de</strong> 50 metros no'tenían tiempo para armar sus espoletas y no<br />

estallaban. (Ver la foto como ejemplo, <strong>de</strong> una bomba inglesa clavada en el suelo sin (".tallar).<br />

La Solución inglesa<br />

Ante esto, los siguientes ataques ingleses a partir <strong>de</strong>l tercer día se realizaron lanzando las bombas <strong>de</strong>s<strong>de</strong> gran<strong>de</strong>s<br />

alturas por encima <strong>de</strong>l alcance <strong>de</strong> la artillería (a varios miles <strong>de</strong> metros) o directamente <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el mar en un<br />

procedimiento <strong>de</strong> tiro similar al empleado para lanzar bombas atómicas.


Resultado: lanzaron <strong>de</strong>s<strong>de</strong> lejos y sin puntería cientos <strong>de</strong> bombas que convirtieron a la zona <strong>de</strong> costas y la<br />

península adon<strong>de</strong> está el aeropuerto en un campo lunar; pero la pista <strong>de</strong> aterrizaje siguió operable y los C—130<br />

continuaron llegando con sus cargas vitales casi todas las noches hasta el último día. Las pérdidas <strong>de</strong> vidas<br />

argentinas, en esa área; en esa área se encontraban unos 1.200 hombres, increíblemente para los ingleses<br />

consi<strong>de</strong>rando la gran cantidad <strong>de</strong> bombas (600 <strong>de</strong> 250 y 500 kgs.) y misiles <strong>de</strong> aviación <strong>de</strong> todo tipo lanzados<br />

cada día y pese a los constantes bombar<strong>de</strong>os navales nocturnos, (1.300 proyectiles), fueron mínimas (cuatro<br />

hombres <strong>de</strong> la FAA, uno <strong>de</strong> ARA y ninguno <strong>de</strong>l Ejército). Los ingleses (ni los <strong>de</strong> la Royal Navy al comienzo, ni los <strong>de</strong><br />

la RAF <strong>de</strong>spués) no encontraron solución al problema <strong>de</strong> sus bombas. Por lo menos en su empleo contra las<br />

posiciones <strong>de</strong> Puerto Argentino.<br />

La Solución <strong>Argentina</strong><br />

Por el lado argentino la solución se encaró <strong>de</strong> forma diametralmente opuesta; mientras los ingleses buscaban la<br />

altura para proteger a sus aviones a riesgo <strong>de</strong> no dar en el blanco (pese a que éste —el aeropuerto— cubría una<br />

gran superficie <strong>de</strong> terreno y estaba inmóvil en una zona perfectamente ubicado), los argentinos volaron cada vez<br />

más bajo, buscando asegurarse el impacto sobre un blanco pequeño, móvil y en medio <strong>de</strong>l mar, —los buques-).<br />

El mundo contempló azorado cómo, pese a las sucesivas barreras impuestas por los más mo<strong>de</strong>rnos radares,<br />

aviones, misiles y cañones, luego <strong>de</strong> un largo vuelo rasante sobre el mar y con los parabrisas cubiertos <strong>de</strong> sal, los<br />

ya no tan mo<strong>de</strong>rnos aviones argentinos llegaban hasta los buques y pasaban rozando sus mástiles. Solo el coraje<br />

los impulsaba, ya que estallaron muy pocas <strong>de</strong> las bombas con paracaídas empleadas en los dos primeros días,<br />

<strong>de</strong>bido a que la escasa altura <strong>de</strong> lanzamiento no dio tiempo para que se armaran sus espoletas. Pero los aviones<br />

llegaban, y ese dato era fundamental. De inmediato, los técnicos <strong>de</strong> la FAA se abocaron a la tarea <strong>de</strong> modificar las<br />

bombas existentes y disponibles en sus arsenales para proveer un arma eficaz, apta para completar lo que el<br />

puro valor <strong>de</strong> sus hombres conseguía. A nadie antes se le habfa ocurrido hacerlo y por ello no había ninguna<br />

bomba en ningún arsenal <strong>de</strong>l mundo que permitiera ser lanzada a tanta velocidad <strong>de</strong>s<strong>de</strong> tan baja altura,<br />

impactando sobre un buque instantes <strong>de</strong>spués. Nadie previo, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> la Segunda Guerra Mundial, que los<br />

veloces aviones a reacción podrían atacar con bombas convencionales (tan antiguas casi como la aviación) a las<br />

tan mo<strong>de</strong>rnas y sofisticadas fragatas misil ísticas. Pero tampoco se disponía en nuestro país cantidad suficiente<br />

<strong>de</strong> misiles a<strong>de</strong>cuados para ser lanzados <strong>de</strong>s<strong>de</strong> distancias seguras y escapar, salvo unos pocos EXOCET (5). El<br />

embargo europeo y americano nos impedía obtener más. Ante esto, se analizaron las experiencias <strong>de</strong> los<br />

primeros días <strong>de</strong> combate, se estudiaron las técnicas empleadas en la Segunda Guerra Mundial, las<br />

características constructivas <strong>de</strong> los buques ingleses y sus medios <strong>de</strong>fensivos. Se necesitaba que las espoletas se<br />

armaran apenas lanzadas las bombas y que no estallaran hasta cierto tiempo <strong>de</strong>spués <strong>de</strong>l impacto, para permitir<br />

el escape <strong>de</strong>l avión lanzador sin ser alcanzado por la explosión. La única espoleta disponible en nuestros<br />

arsenales que, convenientemente modificada, permitiría su empleo en estas condiciones, era la correspondiente<br />

a una bomba precisamente inglesa, <strong>de</strong> 500 Kgs.; idéntica a la lanzada por los Harriers, pero que esta vez irfa sin<br />

el paracafdas <strong>de</strong> frenado. Sin embargo, la energía <strong>de</strong> esta bomba lanzada a 1.000 Km/h sería tan tremenda que<br />

atravesaría <strong>de</strong> lado a lado cualquier buque <strong>de</strong>l tamaño <strong>de</strong> las fragatas y <strong>de</strong>structores, estallando varios segundos<br />

<strong>de</strong>spués <strong>de</strong> haberlo atravesado (o sea en la profundidad <strong>de</strong>l mar y lejos <strong>de</strong>l buque). Pero se consi<strong>de</strong>ró que la<br />

posibilidad <strong>de</strong> hacer impacto en alguna zona pesada, tal como el motor o <strong>de</strong>pósito <strong>de</strong> municiones, podía retener a


alguna bomba en su interior (la cual al estallar tenía potencia suficiente para hacer <strong>de</strong>saparecer al buque) o, por<br />

lo menos, en su pasaje provocaría una serie <strong>de</strong> daños y las consiguiente servidumbre a la flota (puesta fuera <strong>de</strong><br />

combate, remolque, reparaciones, etc.. Aunque no era mucho más que volver a las antiguas balas <strong>de</strong> cañón,<br />

lanzando un gran trozo <strong>de</strong> acero con tremenda fuerza, allá fueron pilotos Argentinos, con su coraje sin igual y una<br />

sola gran bomba (apodada "la bombóla") en el vientre <strong>de</strong> sus máquinas, encomendándose a Dios, para atacar<br />

nada menos que al más mo<strong>de</strong>rno y peligroso <strong>de</strong> los objetivos <strong>de</strong> superficie. Sólo una cosa sabían: su pericia les<br />

aseguraría que casi todas las bombas que lanzaran harían blanco en un buque enemigo. Así se hundieron por lo<br />

menos a las fragatas Ar<strong>de</strong>nt y Antelope y se hicieron impactos en otras 14 fragatas y buques <strong>de</strong> <strong>de</strong>sembarco (sólo<br />

se mencionan los nombres y daños <strong>de</strong> aquellos reconocidos por Inglaterra ya que, al producirse la explosión<br />

varios segundos <strong>de</strong>spués <strong>de</strong>l pasaje <strong>de</strong>l avión, los pilotos no siempre vieron sus efectos, aun- que sí se viese<br />

algunas veces el impacto inicial <strong>de</strong> la bomba en el casco. De cualquier modo resulta improbable que, por lo<br />

menos por cierto tiempo, conozcamos cuales fueron las restantes, dado el obstinado interés <strong>de</strong>mostrado por el<br />

gobierno inglés para ocultar las verda<strong>de</strong>ras pérdidas y daños sufridos). De algo si estamos seguros: si esas<br />

bombas hubiesen quedado <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> los buques y estallado, todos ellos estarían reducidos a astillas, y<br />

difícilmente podrían haberse mantenido ocultos. Otro podría haber sido el fin <strong>de</strong> la guerra. Mientras tanto,<br />

apremiados por el tiempo y conscientes <strong>de</strong> la limitación <strong>de</strong> esas bombas, los técnicos <strong>de</strong> la Fuerza Aérea<br />

<strong>Argentina</strong> continuaron los estudios para reemplazar modificando a otras bombas y espoletas, <strong>de</strong>sarrollando,<br />

ensayando y fabricando con la Industria <strong>Argentina</strong>, nuevos retardos, <strong>de</strong>tonadores y piezas mecánicas a ritmo<br />

febril. Al cabo <strong>de</strong> 15 dfas, las nuevas bombas estaban provistas a las Unida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> combate y se emplearon por<br />

primera vez el dfa 25 <strong>de</strong> mayo, en el ataque al. <strong>de</strong>structor Coventry (gemelo <strong>de</strong>l famoso SHEFFIELD) el cual<br />

<strong>de</strong>sapareció instantáneamente <strong>de</strong> la superficie ante el impacto <strong>de</strong> tres bombas (recor<strong>de</strong>mos que el <strong>de</strong>sembarco<br />

inglés en San Carlos fue el 21 <strong>de</strong> mayo). Su empleo se repitió en el ataque <strong>de</strong> Bahía Agradable, a los buques<br />

transporte <strong>de</strong> <strong>de</strong>sembarco "SIR GALLAHAD" (alcanzado con toda la tropa en su interior). "SIR TRISTAN"y a la<br />

Fragata "PLYMOUTH", el portaviones "INVINCIBLE" y a otras dos fragatas y buques menores <strong>de</strong> <strong>de</strong>sembarco (no<br />

reconocidos). Ahora sf la totalidad <strong>de</strong> los impactos implicaba la <strong>de</strong>strucción o el fuera <strong>de</strong> combate <strong>de</strong>l blanco.<br />

Hoy, cuanto todos asisten asombrados a la tremenda capacidad ofensiva que los sofisticados misiles <strong>de</strong> gran<br />

alcance tipo EXOCET confieren a los aviones en su lucha contra los buques, los argentinos, con aviones<br />

relativamente antiguos, llegaron sobre la tercera flota más mo<strong>de</strong>rna y po<strong>de</strong>rosa <strong>de</strong>l mundo e impactaron sobre<br />

más <strong>de</strong> 25 <strong>de</strong> sus buques <strong>de</strong> guerra con las antiguas, sencillas y baratas bombas convencionales y, en poco más<br />

<strong>de</strong> dos semanas, encontraron la forma <strong>de</strong> emplearlas con éxito <strong>de</strong> un modo como a nadie se le había ocurrido<br />

antes. Y lo hicieron con entusiasmo, con imaginación, con conocimien- tos y capacidad, pero sobre todo con<br />

verda<strong>de</strong>ro amor J la Patria, con increíble coraje. .. y fe. Como se <strong>de</strong>be construir una Gran Nación. Aparte <strong>de</strong> si las<br />

bombas explotaron o no, nadie se ha sorprendido al comprobar el altísimo porcentaje <strong>de</strong> ellas que dieron en el<br />

blanco, <strong>de</strong> acuerdo a lo que las estadísticas <strong>de</strong> guerras anteriores indicaban. Evi<strong>de</strong>ntemente una causa muy justa<br />

y unos i<strong>de</strong>ales muy elevados los empujaban.


CAPITULO CAPITULO XXXI<br />

XXXI<br />

"BOMBARDEANDO "BOMBARDEANDO DURO"<br />

DURO"<br />

Este es el relato <strong>de</strong> un Oficial <strong>de</strong> la Ciudad <strong>de</strong> Güemes, norteño y navegador, a quien le <strong>de</strong>bo disculpas por<br />

no incluir la totalidad <strong>de</strong> su relato, pues falta libro para tantas vivencias.<br />

RELATA: RELATA: RELATA: Capitán PAGANO (Navegador <strong>de</strong> Canberra).<br />

Día 4 <strong>de</strong> junio <strong>de</strong> 1982.<br />

iYa hace casi un año y medio ! tan lejos y tan cerca <strong>de</strong> aquellos días que no po<strong>de</strong>mos olvidar, aunque algunos<br />

tratan <strong>de</strong> "<strong>de</strong>smalvinizarnos". La mañana <strong>de</strong> la base estaba fría y <strong>de</strong>spués <strong>de</strong>l <strong>de</strong>sayuno, costaba salir <strong>de</strong>l<br />

alojamiento para ir al hangar en don<strong>de</strong> estaba la salita <strong>de</strong> tripulantes, pasando <strong>de</strong>l café con leche o el mate<br />

cocido, a través <strong>de</strong>l fresquete y la llovizna, al mate cebado por el Supervisor SEPPEY ("Garlitos") o el Soldadito<br />

CORONA y a los cigarrillos hilvanados uno tras otro en humeante sucesión. La salida era más bien "chicona",<br />

ro<strong>de</strong>ada <strong>de</strong> mapas "amurados", fotos <strong>de</strong> los barcos piratones, caricaturas <strong>de</strong> los tripulantes <strong>de</strong>l Primer Teniente<br />

Médico "Tucu" GONZÁLEZ y las cartas <strong>de</strong>l tiempo <strong>de</strong>l Teniente Meteorológico "Marchi". Andábamos, pilotos y<br />

navegadores "apretados como piojo en costura, chocando "el monumento al cardo", el "Boxer" o la pancita <strong>de</strong>l<br />

"Corcho" (apodóse indicativos puestos respetuosamente a algunos miembros <strong>de</strong>l Escuadrón)". Allí pasábamos las<br />

interminables horas <strong>de</strong> alerta, con el <strong>de</strong>seo por un lado <strong>de</strong> que no nos tocara salir (<strong>de</strong>bido a los ruegos <strong>de</strong>l pellejo<br />

o porque la carne es flaca) y por otra las ganas, tantas veces <strong>de</strong>clamadas a la ligera y ahora puesta a prueba, <strong>de</strong><br />

materializar el juramento hecho a la ban<strong>de</strong>ra, <strong>de</strong> ir a dar una mano, <strong>de</strong> día o <strong>de</strong> noche, a esos criollos que en la<br />

Isla a veces no podían tomar ni un "yerbeao" caliente y <strong>de</strong> hacer realidad el lema <strong>de</strong> nuestra escuela <strong>de</strong>l Grupo 2<br />

<strong>de</strong> Bombar<strong>de</strong>o: "Pulsat audaciter die noctuque" (Que golpee con audacia <strong>de</strong> dfa y <strong>de</strong> noche). Con nosotros<br />

convivían los "gauchos salvajes" <strong>de</strong>l Vicecomodoro (R) CIMADEVILLA, Alféreces <strong>de</strong> la Reserva CUPELIN y FÓRMICA,<br />

con el serio mecánico WIDDER, y siempre pasaba algún amigo a compartir nuestra vida <strong>de</strong> <strong>de</strong>splegados, como el<br />

Vicecomodoro DEMARCÓLO el Mayor MACKLAY, que tenían la "lucrativa" tarea <strong>de</strong> romper el bloqueo con su<br />

"Chancha", a pesar <strong>de</strong> los Harriers, las fragatas y la mar en coche. Ese dfa estaba "fiera" la cosa, algunos con la<br />

cara un poco larga, escuchaban los informes que llegaban a la Base. Ya habían caído muchos Argentinos, entre<br />

ellos algunos <strong>de</strong>l Escuadrón, como el Primer Teniente GONZÁLEZ y el Teniente DEIBAÑEZ <strong>de</strong> mi promoción 38, el<br />

Primer Teniente BUSTOS en su A-4B y el Primer Teniente CASTAGNARI en tierra. Habían empezado su guardia<br />

permanente por nuestra Soberanía, hipotecando con sus vidas y las <strong>de</strong> todos los caídos el "Volveremos". La<br />

rutina, como "polilla angurrienta" nos iba comiendo, cuando el <strong>de</strong>tonante <strong>de</strong> una or<strong>de</strong>n fragmentaria (or<strong>de</strong>n <strong>de</strong><br />

cumplimiento <strong>de</strong> una misión <strong>de</strong> combate) nos pateó el hormiguero. Nosotros estábamos tomando unos amargos<br />

con los <strong>de</strong>l técnico, quienes se salían <strong>de</strong> la vaina por participar <strong>de</strong> una misión y que también trabajaban <strong>de</strong> día y<br />

<strong>de</strong> noche, con tremendas heladas, bajo el agua-nieve, o el viento que latigueaba cara y manos, para alistar<br />

nuestras montas, esos Canberra "ma<strong>de</strong> in England", que tantos dolores <strong>de</strong> cabeza les dio a sus constructores y<br />

que a esa altura ya habían bautizado a San Carlos como la "Avenida <strong>de</strong> las bombas" (Brigadier —<strong>de</strong> ellos—


Thompson). Un grito <strong>de</strong> "Chajá" quebró la rutina, cinco aviones a una base <strong>de</strong> re<strong>de</strong>spliegue con el apoyo <strong>de</strong> una<br />

"Chancha" para lo indispensable. Me tuve que separar <strong>de</strong> mi escuadrilla, el Capitán MARTÍNEZ VILLADA, los<br />

Primeros Tenientes "Cambá" RIVOLIER, "Flecha Veloz" ANNINO, el otro "Coya" ROCCO y el Teniente D Juan Carlos<br />

COOKE (flor <strong>de</strong> changuito, a quien recuerdo junto con el Teniente D. Hugo TEJADA, todas las noches en mis<br />

oraciones, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> que murieron el 13 <strong>de</strong> Julio <strong>de</strong> 1982). Ese día volaba con el Capitán FREIJO, hombre <strong>de</strong> peso y<br />

no por los kilos, sino por su experiencia y las horas voladas juntos. Llegamos a la nueva base e ingresamos a u.i<br />

comedor repleto <strong>de</strong> amigos, un "rejunte" <strong>de</strong> pilotos <strong>de</strong> A-4B,C-130, Artilleros, Radaristas. . . algunos llegaron al<br />

postre, otros al segundo plato; yo, vaya a saber si por lerdo, o por estirar la charla con alguien, o por mal ubicado,<br />

alcancé a tomar un vaso <strong>de</strong> agua y comer tres cucharadas <strong>de</strong> sopa fría, paseada y traída por un mozo requerido<br />

<strong>de</strong>s<strong>de</strong> todos los puntos cardinales, cuando alguien llamó a los <strong>de</strong> Canberra — i Ya !, i urgente! - a la sala <strong>de</strong> pilotos<br />

<strong>de</strong> MIRAGE, para recibir la or<strong>de</strong>n <strong>de</strong> misión. Había que <strong>de</strong>spegar enseguida, por una ruta así o asá que yo,<br />

navegador guía, copié a los apurones enredado entre un café <strong>de</strong> último momento y el traje antiexposición que<br />

parecía achicarse con el apuro. El objetivo material era el monte Kent (cuyo nombre yo cambiaría por el <strong>de</strong> algún<br />

cigarrillo argentino). Debíamos atacar <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> los Mirage V "DAGGER", aunque se nos <strong>de</strong>moró un poco por<br />

meteorología dudosa, sintiendo cada uno <strong>de</strong> nosotros esa mezcla <strong>de</strong> alivio y frustración, mientras se <strong>de</strong>shace el<br />

"moñito" en la garganta, porque uno sabía porqué peleaba, pero <strong>de</strong> suicida ¡Ni un pelo!, a pesar <strong>de</strong> todas las<br />

locuras aeronáuticas. Mientras duraba ese "relax", tenso pues la misión había sido suspendida y no congelada,<br />

nos llenamos hasta el tope <strong>de</strong> combustible ver<strong>de</strong> (mate), con algunos pilotos <strong>de</strong> A-4B que se arrimaron, entre los<br />

que faltaba el Capitán VELASCO, eyectado días antes, que compartía sus alimentos con los ratones en un refugio<br />

kelper <strong>de</strong> la Gran Malvina. Estaba linda la tar<strong>de</strong> para matear en compañía, alguien había arrimado unas galletitas<br />

y para mi solo faltaba la música "progresiva" <strong>de</strong> los Chalchaleros. Mientras le pasaba unos mates al "Diño"<br />

HRUBIK y al Vicecomodoro SERVATICO <strong>de</strong> C-130, nos levantaron la suspensión para que le agarremos la vuelta.<br />

Mientras leía la hoja pensé: ¡Estamos todos locos! Debíamos ir como a 12.000 metros <strong>de</strong> altura hasta la isla San<br />

José (WEDELL para la cartografía gringa), <strong>de</strong> allí a 30 millas al norte <strong>de</strong>l estrecho San Carlos, o sea unos 110<br />

kilómetros <strong>de</strong> "YAPA". Compartían conmigo esa misión los Capitanes "Odín" FREIJO, "Palito"NOGUEIRA y el Mayor<br />

RODFYRO, entre otros. Fuimos a las maquinas los diez tripulantes <strong>de</strong> esa misión, más los comedidos que venían a<br />

ayudar en la inspección exterior, o a recibir la billetera, la cédula o el carnet <strong>de</strong> conductor (por las dudas.. .vio?).<br />

Nos atamos la correa <strong>de</strong>l arnés <strong>de</strong>l paracaídas, los <strong>de</strong>l asiento eyectable, las retractoras <strong>de</strong> piernas, las anti "G"<br />

negativa (16 en total), nos pusimos el casco, conectamos el cable <strong>de</strong>l micrófono, las mangueras <strong>de</strong> oxígeno,<br />

"pelamos" elementos <strong>de</strong> navegación.<br />

— Hola, Hola.<br />

— Fuerte y claro.<br />

— Navegador: Corriente continua.<br />

— Piloto: 28 voltios.<br />

— N: Luces advertencia <strong>de</strong> generador.<br />

— P: Encendidas, pantalla levantada.<br />

— N: Luces internas, atrás controladas.<br />

— P: A<strong>de</strong>lante, controladas.


i Al fín los controles rutinarios! y aflojaba la tensión, la letanía que se repetía en cada salida. Un último saludo y<br />

cerramos las puertas, a confiar cada uno en el otro, piloto en navegador y viceversa, y los dos en las manos <strong>de</strong> la<br />

"Provi<strong>de</strong>ncia", porque aunque hubiese misiles y Harriers, la parca no llega "ni un minuto antes, ni un minuto<br />

<strong>de</strong>spués", <strong>de</strong> los que El dis-pone. Rodamos a cabecera los "Puma", <strong>de</strong>trás <strong>de</strong> los "Lince", íbamos en silencio,<br />

profundísimo silencio, <strong>de</strong> pronto dijimos casi al unísono<br />

— ¿ Nos encomendamos a la Virgen ? — y así bajo ese cielo <strong>de</strong> nubes color plomo, empezamos a rezar: Dios te<br />

salve María. . . , <strong>de</strong>jando por su santo intermedio, nuestras vidas en manos <strong>de</strong>l Señor. El chorro <strong>de</strong> los seis<br />

motores <strong>de</strong> los que estaban a<strong>de</strong>lante hicieron bellaquear nuestros aviones, que no se querían quedar quietos.<br />

En segundos el "Palito" se pier<strong>de</strong> entre las nubes, seguido por los Canberras <strong>de</strong> los Tenientes BAEZA, CARDO,<br />

SPROVIERO y MORENO; fuimos tras ellos.<br />

Arriba <strong>de</strong> las nubes había una luna grandota y un cielo azul oscuro; nivelamos. Yo seguía la navegación minuto a<br />

minuto, con algunos "viajes" hacia mi mujer y los chicos.<br />

— N: Oxígeno.<br />

— P y N: Suficiente, dos conexiones fluyendo normal.<br />

— N: Eléctricos.<br />

— P: 28 voltios, en negro, luces <strong>de</strong> generador apagadas.<br />

— N: Motores.<br />

— P: R.P.M., presiones y temperaturas normales.<br />

En medio <strong>de</strong>l silencio posterior a los controles, el radar <strong>de</strong> Puerto Argentino, operado por el Mayor SILVA,<br />

llamándonos. El sería nuestro guía hacia el blanco y el alerta si oramos interceptados.<br />

— No hay moscardones (cazas enemigos).<br />

Una preocupación menos, sólo nos amenzaban los Sea Dart <strong>de</strong> las fragatas. Quizás el que no hubiese<br />

"moscardones" se <strong>de</strong>bía a la acción <strong>de</strong> <strong>de</strong>sgaste que provocaba el querido Escuadrón "FÉNIX". Navegábamos<br />

sobre el colchón <strong>de</strong> nubes muy abajo nuestro. Entramos en la isla por la Península Fe<strong>de</strong>ral.<br />

— Abrir puertas <strong>de</strong> bombas.<br />

— PUMA - RADAR, confirme rumbo corrida final, parece que se abren un poco.<br />

— Afirmativo, corrida final con rumbo 140°.<br />

— LINCES - RADAR atentos, ... 1 y 2 distancia <strong>de</strong> tiro i YA ! el 3 corrija 5° por <strong>de</strong>recha, al pelo ... atento ... ¡YA!<br />

80 segundos <strong>de</strong> vuelo y salieron las dieciocho bombas <strong>de</strong> las "LINCE", <strong>de</strong>trás cayeron las <strong>de</strong> los "PUMA".<br />

Debajo nuestro el gran colchón <strong>de</strong> nubes se iluminó con el resplandor <strong>de</strong> las bombas.<br />

— LINCES y PUMAS - RADAR - i BUEN IMPACTO !, tranquilos no hay moscardones y gracias.<br />

—Gracias a uste<strong>de</strong>s por el apoyo. (Una voz coya) — ¡Gracias le <strong>de</strong>mos a Tata Dios!<br />

Empezaba a encomendar al Señor las bajas enemigas producidas y a sus familiares, porque realmente tirábamos<br />

sin odio, cuando la voz tranquila y fogueada <strong>de</strong>l radarista nos advirtió.<br />

— Atentos "LINCES" y "PUMAS", moscardones a la cola <strong>de</strong> los "PUMAS", a 25 millas ... 23 ... <strong>de</strong>nle "chaucha a<br />

pleno" y traten <strong>de</strong> trepar, si pue<strong>de</strong>n.<br />

—Los "PUMAS" a pleno.


— A 20 millas ... a 19 ... tranquilos, creo que se van a volver ... a. 18 millas ... ya no <strong>de</strong>scuentan distancia, "se van<br />

a volver ... ahí se vuelven. Diez resoplidos aliviados <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> las máscaras <strong>de</strong> oxígeno; <strong>de</strong>s<strong>de</strong> su bautismo <strong>de</strong><br />

fuego nuestros nobles pajarracos habían limpiado su "Pecado Original" <strong>de</strong> haber nacido en tierra <strong>de</strong> usurpadores.<br />

i Otra vez la voz <strong>de</strong> alarma !<br />

— Atento el LINCE que vuelve solo, tiene un eco al frente a 15 millas, vire ya por <strong>de</strong>recha para 290 grados.<br />

Todos viramos apurados y yo calculando errónea y nerviosamente arrojé el "chaff" (rudimentaria contramedida<br />

electrónica) y una bengala la que al estallar, le produjo al piloto lar<strong>de</strong>a <strong>de</strong> que era un misil, lo que me valió una<br />

serie <strong>de</strong> felicitaciones por no avisar. Nuevamente el radar en esos momentos <strong>de</strong> nervios.<br />

- Ahí' <strong>de</strong>sapareció, <strong>de</strong>be haber sido un misil — seguimos volando, ahora más tranquilos.<br />

- LINCE "UNO" al "DOS" llama, se me plantó (se <strong>de</strong>tuvo un motor. Debido a su pérdida <strong>de</strong> potencia lo fuimos<br />

pasando todos y quedó como "furgón <strong>de</strong> cola", pero todavía volaba. Aterrizamos; los Canberra habían cumplido<br />

una misión más; me estreché en un abrazo con el Suboficial Auxiliar LUIS SÁNCHEZ, viejo armero, mientras la<br />

noche se poblaba <strong>de</strong> gritos y gorras que volaban por el aire. Antes <strong>de</strong> dormir con el rosario entre los <strong>de</strong>dos, pensé<br />

en los que luchaban, en los que donaban lo que no tenían, en el orgullo <strong>de</strong> las familias <strong>de</strong> los que peleaban con<br />

honor, en la casa <strong>de</strong> unos amigos cuyos hijos rezaban todas las noches por nuestros muertos y los muertos <strong>de</strong><br />

ellos y que pedían a Dios "para que los Ingleses no nos roben <strong>de</strong> nuevo las <strong>Malvinas</strong>". Pensaba en nuestros<br />

hermanos hispanoamericanos; en Perú, Venezuela, Bolivia y entre tantos pensamientos, recordé una coplita<br />

salteña <strong>de</strong> mi tierra gaucha:<br />

"No hay que temerle a la muerte<br />

aunque se encuentre <strong>de</strong> frente<br />

Sin la voluntad <strong>de</strong> Dios<br />

La muerte no mata gente"


CAPITULO CAPITULO XXXII XXXII<br />

XXXII<br />

" " ESCUADRÓN ESCUADRÓN FÉNIX FÉNIX "<br />

"<br />

En medio <strong>de</strong> la guerra, un grupo <strong>de</strong> pilotos civiles y militares, realizó arriesgad fsimas misiones <strong>de</strong><br />

diversión (que no tienen nada que ver con lo que uno imagina) "pinchando" el radar <strong>de</strong>l invasor y obligando<br />

a <strong>de</strong>spegar una y otra vez, inútilmente a los interceptores enemigos sin contar con armamento a bordo. Su<br />

jefe, como es costumbre en la Fuerza Aérea, en la que el más antiguo va al frente <strong>de</strong> la Escuadrilla; cayó<br />

en combate, como testigo <strong>de</strong> que el Jefe <strong>de</strong>be dar lo mismo o más aún <strong>de</strong> lo que exige. Era el<br />

Vicecomodoro D Rodolfo Manuel DE LA COLINA.<br />

RELATA RELATA: RELATA Capitán BIANCO ( Jefe <strong>de</strong> Escuadrilla LEAR-JET y miembro <strong>de</strong>l Escuadrón Fénix).<br />

Durante la batalla <strong>de</strong> las <strong>Malvinas</strong>, fui integrante <strong>de</strong>l Escuadrón Fénix, formado por civiles y militares, contando<br />

con un nutrido y variado material aéreo. Cumplíamos todo tipo <strong>de</strong> misión, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> traslados entre Bases, misiones<br />

<strong>de</strong> diversión (simulábamos que éramos escuadrillas <strong>de</strong> aviones <strong>de</strong> combate para obligar a <strong>de</strong>spegar a la caza<br />

inglesa, retornando antes <strong>de</strong> estar en distancia <strong>de</strong> tiro, para obligarlos a <strong>de</strong>sgastarse), exploración y<br />

reconocimiento, guiado por aviones Mirage V al blanco, cuando la cosa estaba muy fea, fotografía aérea y otras.<br />

(Relevamiento significa sacar fotografías <strong>de</strong> un lugar en especial). A<strong>de</strong>más <strong>de</strong> Puerto Argentino, se realizaron<br />

relevamientos <strong>de</strong> otras pistas en nuestras <strong>Malvinas</strong>, tanto en la Soledad como en la Gran Malvina, que<br />

permitieron instalar Bases como Darwin y <strong>de</strong>terminar si podían ser utilizadas como alternativa para nuestros<br />

aviones. El sistema utilizado fue muy ingenioso, se enviaba un LEAR-JET, previa coordinación con la isla, para<br />

aterrizar en <strong>Malvinas</strong>; mientras se aproximaba iba sacando fotografías, cuando estaba próximo al aterrizaje<br />

regresaba al Continente, simulando una falla, se lo reemplazaba por otro igual, y volvía a la isla, pasando la<br />

inspección más rigurosa por parte <strong>de</strong> los ingleses. Realizamos 129 misiones y volamos un total <strong>de</strong> 324 horas, con<br />

el saldo <strong>de</strong> un avión <strong>de</strong>rribado y cinco tripulantes fallecidos. Recuerdo como si hubiera ocurrido hoy, el día en que<br />

partió para no volver nuestro Jefe y los que le acompañaban en su última misión.<br />

El dJa 6 <strong>de</strong> junio a las 21:00 horas, el Oficial <strong>de</strong> turno <strong>de</strong>l Escuadrón Fénix recibió la or<strong>de</strong>n fragmentaria<br />

proveniente <strong>de</strong>l Jefe <strong>de</strong> la Fuerza Aérea Sur, que <strong>de</strong>bía ser realizado al día siguiente por dos aviones LEAR-JET.<br />

Todos los pilotos estábamos cenando en el Casino <strong>de</strong> Oficiales, pues por ese día se habían terminado las<br />

misiones nocturnas <strong>de</strong> diversión. El Jefe <strong>de</strong>l Escuadrón, Vicecomodoro DE LA COLINA, <strong>de</strong>signó las tripulaciones;<br />

en el primer avión iría él y el Mayor FALCONIER, en el segundo iríamos el Teniente CASADO y yo. En realidad, ésta<br />

se preveía como una misión más <strong>de</strong> diversión; se estipuló que la reunión previa sería a las 07:00 horas <strong>de</strong>l día<br />

siguiente, por lo que nos fuimos todos a dormir. El día 7 <strong>de</strong> junio, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> <strong>de</strong>sayunar, nos reunimos <strong>de</strong><br />

acuerdo a lo convenido. El Vicecomodoro nos explicó que la or<strong>de</strong>n era ir hasta un punto <strong>de</strong> coor<strong>de</strong>nadas<br />

geográficas situadas en la zona noreste <strong>de</strong> la isla Soledad, con los dos aviones formados, simulando una sección<br />

<strong>de</strong> aviones <strong>de</strong> combate. Debíamos encontrarnos con dicho punto a las 09:00 horas, pues íbamos a operar en


coordinación con otras sección <strong>de</strong>l Escuadrón Fénix que operaba <strong>de</strong>s<strong>de</strong> otra Base. Cuando llegáramos al lugar<br />

exacto, <strong>de</strong>beríamos hacer contacto con el RADAR MALVINAS y colocarnos BAJO LAS ORDENES DEL MISMO.<br />

Lo que se buscaba con la operación, era hacer <strong>de</strong>spegar aviones Harriers enemigos, los que se suponía ya<br />

operaban <strong>de</strong>s<strong>de</strong> tierra y <strong>de</strong>tectar las posibles zonas en las que tenían sus plataformas <strong>de</strong> lanzamiento, <strong>de</strong><br />

acuerdo a los ecos que aparecieron en la pantalla <strong>de</strong>l radar propio. Escuchábamos la información meteorológica,<br />

la que se presentaba inusualmente buena, en la zona <strong>de</strong> operación. El Vicecomodoro tomó un avión <strong>de</strong> la FUERZA<br />

y nosotros subimos a uno civil, <strong>de</strong> los que pusieron patrióticamente a nuestra disposición.<br />

En el primer avión iría como fotógrafo observador el Capitán D Marcelo LOT UFO.. En mi avión subió como<br />

observador, voluntariamente, el Primer Teniente BONAZ. Como tarea complementaria, al regreso probaríamos un<br />

nuevo sistema <strong>de</strong> comunicaciones, el que servía para que el enemigo no nos <strong>de</strong>tectara cuando hablamos por<br />

radio. El Suboficial Ayudante LUNA <strong>de</strong>l Grupo I <strong>de</strong> Comunicaciones, radiooperador, se ofreció como voluntario<br />

para la misión y completaban la tripulación el Suboficial Auxiliar MARIZZA, y el Cabo Principal BORNICEN, este<br />

último en nuestro avión. Todavía <strong>de</strong> noche, nos dirigimos a las máquinas que ya habían sido preparadas por el<br />

Grupo Técnico. A las 08:00 horas <strong>de</strong>spegamos con un intervalo <strong>de</strong> 5 segundos entre ambos. A los veinte minutos<br />

<strong>de</strong> vuelo alcanzamos el nivel asignado, nos comunicamos con la sección que <strong>de</strong>spegaba <strong>de</strong>s<strong>de</strong> otra Base y luego<br />

hicimos silencio <strong>de</strong> radio. Ya estaba amaneciendo. Colocamos frecuencia <strong>de</strong>l RADAR MALVINAS, y permanecimos<br />

en escucha. El guía me or<strong>de</strong>nó abrir un poco la formación, que hasta ese momento manteníamos cerrada.<br />

Como raras veces sucedía, era un día claro e ¡limitado y <strong>de</strong>bido a nuestra altura <strong>de</strong> vuelo (13.000 metros),<br />

comenzamos a ver las primeras islas <strong>de</strong>l archipiélago. Escuchamos que la otra sección llega al punto y al no<br />

establecer contacto <strong>de</strong> radio con <strong>Malvinas</strong>, regresa a su Base <strong>de</strong> asiento. Siendo las 08:35 horas, escuchamos en<br />

la frecuencia una comunicación en inglés. A las 09:00 horas, llegamos al punto asignado. El guía llamó tres veces<br />

al RADAR y éste le respondió por última vez. Solicitamos que nos actualicen las PAC (Patrullas Aéreas <strong>de</strong> Combate<br />

inglesas), que había sobre las islas, nos respon<strong>de</strong>n que hay dos, una al norte a 200 kilómetros <strong>de</strong> nuestra<br />

posición y otra al sur a 250 kilómetros. Comenté Con mi copiloto que estaban muy lejos y por ahora no<br />

representaban ningún peligro para nosotros. Mientras hacíamos esto, nos pasamos unos 35 kilómetros <strong>de</strong>l<br />

punto, ya sobre las islas. El Teniente CASADO me informó que tenía a la vista la Bahía San Carlos y casi al mismo<br />

tiempo el guía comenzó a virar para volver porque nos habíamos a<strong>de</strong>n rado <strong>de</strong>masiado en zona caliente. ¡Nos<br />

lanzaron dos misileí! —dice mi copiloto <strong>de</strong> pronto— i Estoy viendo sus estelas!.. . ya no las veo más.<br />

Inmediatamente le comunico al jefe <strong>de</strong> Sección en la frecuencia interna y el me contestó que los había visto, e<br />

inicia un brusco viraje hacia la izquierda or<strong>de</strong>nándome que hiciera lo mismo. A continuación le dijo al RADAR que<br />

nos volvíamos, pero éste le dijo que no era necesario pues las PAC que venían a nuestro encuentro se estaban<br />

volviendo; más no hubo respuesta <strong>de</strong> nuestro J efe <strong>de</strong> Sección. Yo estaba separado lateralmente unos 50 metros<br />

y 100 metros más arriba, cuando un misil SEA DART impactó en su avión, el que comenzó a caer, mientras el<br />

Vicecomodoro DE LA COLINA, con una tranquilidad propia <strong>de</strong> los elegidos por el Señor, quienes saben que la<br />

muerte no existe para sus hijos, simplemente dijo: NOS DIERON, NO HAY NADA QUE HACERLE. Di potencia a pleno<br />

y busqué altura mientras veía los restos <strong>de</strong> su avión cayendo hasta per<strong>de</strong>rse <strong>de</strong> vista. La otra sección, que había<br />

escuchado todo, comenzó a llamarnos, pero apagué mi equipo <strong>de</strong> radio, pues estaba muy alterado.


Fueron minutos terribles, pues esperábamos que en cualquier momento hiciera impacto el otro misil en el<br />

fuselaje <strong>de</strong> nuestro LEAR-JET, y acabamos <strong>de</strong> ver morir a un puñado <strong>de</strong> valientes con quienes habíamos<br />

compartido muchas vivencias. Las islas no pasaban nunca, el tiempo tampoco, pero la tripulación mantuvo la<br />

calma, nadie dijo nada, nadie fue capaz <strong>de</strong> una actitud temerosa, ante el tremendo ejemplo <strong>de</strong> valor y heroísmo,<br />

hasta el último momento <strong>de</strong> su vida, <strong>de</strong> nuestro jefe y su tripulación. Recién <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> varios minutos<br />

comenzamos a respirar normalmente, lo único que <strong>de</strong>seábamos en ese momento era aterrizar lo más pronto<br />

posible. Nos costaba creer lo que habíamos visto,peroen nuestro interior sabíamos que atrás <strong>de</strong>jábamos a cinco<br />

héroes que habían caído cumpliendo con su <strong>de</strong>ber hasta las últimas consecuencias. Aterrizamos en un silencio<br />

respetuoso y agra<strong>de</strong>ciendo interiormente el estar con vida.


CAPITULO XXXIII<br />

"RELATO "RELATO DE DE UNA UNA MISIÓN MISIÓN DE DE GUIADO" GUIADO"<br />

GUIADO"<br />

En principio este tipo <strong>de</strong> operaciones se mantuvo en secreto, pero habiendo salido ya en numerosas<br />

publicaciones nacionales y extranjeras, incluso con fotografías; doy a conocer una <strong>de</strong> estas misiones, en<br />

las que se aprovechaba el mejor instrumental <strong>de</strong> navegación para asegurar la llegada al blanco.<br />

RELATA: RELATA: RELATA: Teniente FELICE (Piloto <strong>de</strong> LEAR-JET)<br />

8 8 8 <strong>de</strong> <strong>de</strong> junio junio <strong>de</strong> <strong>de</strong> <strong>de</strong> 1982<br />

1982<br />

Era una mañana fría como tantas otras. Se <strong>de</strong>bía caminar con precaución por las calles <strong>de</strong> la Base Aérea, pues<br />

una capa <strong>de</strong> hielo las cubría haciéndolas extremadamente resbaladizas, habiéndose solidificado hasta el barro.<br />

Todavía no había salido el sol cuando los tripulantes <strong>de</strong> los aviones LEAR-J ET 35—A, integrantes <strong>de</strong>l Grupo 1<br />

Aerofbtográfico se dirigían hacia la sala <strong>de</strong> Operaciones para recibir los últimos informes sobre la situación <strong>de</strong> las<br />

fuerzas propias y enemigas en nuestras Islas <strong>Malvinas</strong>. La reunión fue breve; las tropas <strong>de</strong> laTask-Force cada día<br />

dominaban más territorio acercándose a Puerto Argentino y multiplicando sus sistemas <strong>de</strong> alerta temprana con<br />

"piquetes <strong>de</strong> radar" en puntos claves <strong>de</strong>l archipiélago, dando aviso y hasta pudiendo neutralizar con helicópteros<br />

artillados con misiles, a los aviones propios que se dirigían hacia los objetivos materiales previamente<br />

<strong>de</strong>terminados. El día anterior habíamos perdido a nuestro jefe <strong>de</strong> Escuadrón en una misión sobre la Isla Soledad,<br />

¡unto con otros cuatro camaradas más. La operación se hacía cada vez más difícil, pero ahora terifamos un doble<br />

compromiso; para con la patria y para con los tres Oficiales y dos Suboficiales que tripulaban el avión caído el 7<br />

<strong>de</strong> junio. Eran las nueve <strong>de</strong> la mañana aproximadamente y finalizada la reunión me dirigí con el Primer Teniente<br />

Herrera, el Capitán Pane y los mecánicos, a sacar la capa <strong>de</strong> hielo que durante la noche se había formado en<br />

nuestros aviones. El Capitán Arques y yo, junto con el Cabo Principal Lagger, éramos la tripulación prevista para la<br />

primera misión <strong>de</strong> guiado que saliese, y el Capitán Velasco con el Capitán Pane eran los <strong>de</strong> alternativa por si<br />

llegase a fallar nuestro avión. Al mismo tiempo calentábamos nuestro "equipo <strong>de</strong> navegación" dado que, por las<br />

bajas temperaturas, necesitaba un tiempo adicional para su correcto funcionamiento. Ya se habían efectuado<br />

varias misiones conjuntas entre los LEAR-jET <strong>de</strong>l Grupo I Aerofotográfico y los caza-bombar<strong>de</strong>ros Dagger <strong>de</strong>l Grupo<br />

6, don<strong>de</strong> los Lear, con su especial equipamiento <strong>de</strong> abordo, guiaban a los bombar<strong>de</strong>ros hasta unos pocos<br />

minutos antes <strong>de</strong>l blanco, <strong>de</strong>jando a la escuadrilla orientada en el rumbo correcto hacia el objetivo. Ese día, 8 <strong>de</strong><br />

junio, se realizaría la <strong>de</strong>cimotercera misión <strong>de</strong> guiado, pero pasarían aún varios minutos <strong>de</strong> tensa espera. A las<br />

10:30 horas nos encontrábamos reunidos con el resto <strong>de</strong> los pilotos tratando <strong>de</strong> lograr cualquier información<br />

sobre <strong>Malvinas</strong>. Pero fue recién <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> las 12:00 horas cuando, en la Sala <strong>de</strong> Operaciones entró<br />

rápidamente el Mayor Martínez, y todos nos dimos cuenta <strong>de</strong> lo que suce<strong>de</strong>ría.<br />

Los sentidos atentos captaron la totalidad <strong>de</strong> la información sobre la misión que acababan <strong>de</strong> or<strong>de</strong>nar <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el<br />

Comando <strong>de</strong> la Fuerza Aérea Sur.


En las mesas habían <strong>de</strong>saparecido los libros y las cartas <strong>de</strong> los familiares, siendo reemplazadas ahora por las<br />

cartas aeronáuticas en las que comenzaba a marcar una nueva ruta hacia una bahía cercana a Puerto Argentino,<br />

se llamaba Bahía Agradable. Los pilotos <strong>de</strong> los 6 Dagger, terminaban <strong>de</strong> confeccionar los datos <strong>de</strong> la navegación,<br />

mientras el Comandante <strong>de</strong>l Lear Jet, Capitán Arques, efectuaba las últimas coordinaciones con el Jefe <strong>de</strong> la<br />

Primera Escuadrilla. En ese momento, y con los datos suficientes, me dirigí al Lear al igual que el Capitán Pane<br />

que fue hacia el avión <strong>de</strong> alternativa para efectuar la preparación final <strong>de</strong>l avión, lo que <strong>de</strong>moraría unos 20<br />

minutos. Ya todo estaba en marcha, el Cabo Principal Lagger, mecánico <strong>de</strong>l avión, completaba los últimos<br />

<strong>de</strong>talles. Los pilotos <strong>de</strong> los caza-bombar<strong>de</strong>ros se subían a sus aviones ya cargados <strong>de</strong> combustible y con sus<br />

bombas. Eran 2 escuadrillas "PERRO" y "GATO", integradas por el Capitán RODHE, Primer Teniente RATTI, Primer<br />

Teniente GABARI la primera; y por el Capitán CIMATTI, Mayor MARTÍNEZ y Primer Teniente ANTÓN I ETTI la<br />

segunda. Mientras tanto el Capitán Arques se acercó y subió al avión dándome los <strong>de</strong>talles finales <strong>de</strong> la<br />

operación, e insertando en el equipo <strong>de</strong> •navegación las coor<strong>de</strong>nadas que habían <strong>de</strong>terminado como último<br />

punto don<strong>de</strong> nos separaríamos, al sur <strong>de</strong>l estrecho <strong>de</strong> San Carlos. Los guías <strong>de</strong> ambas escuadrillas <strong>de</strong> Dagger,<br />

nos manifestaron que estaban listos para rodar, por lo que pusimos en marcha las turbinas y con todo nuestro<br />

equipamiento en condiciones, iniciamos el rodaje hacia la cabecera <strong>de</strong> pista, seguidos por el avión <strong>de</strong> alternativa<br />

que esperó luego <strong>de</strong> nuestro ingreso a la pista, próximo a la misma, atento ante cualquier falla que tuviésemos. A<br />

lo largo <strong>de</strong>l rodaje, nos fueron <strong>de</strong>spidiendo con los brazos en alto primero, nuestros camaradas <strong>de</strong> Lear Jet y<br />

luego los mecánicos <strong>de</strong> Dagger ubicados en los costados <strong>de</strong> las plataformas. Ya no existía más esa sensación <strong>de</strong><br />

temor, que sentíamos cuando fuimos informados <strong>de</strong> la misión. Des<strong>de</strong> que subimos al avión y comenzamos con<br />

los chequeos todo eso <strong>de</strong>sapareció abocando todos nuestros esfuerzos a cumplimentar la misión, siendo<br />

<strong>de</strong>salojada por un profundo orgullo por lo que estábamos haciendo, orgullo por ser un hombre más entre tantos<br />

otros <strong>de</strong> mi querida Fuerza Aérea que día a día se cubría <strong>de</strong> gloria. Rápidamente llegamos a la cabecera don<strong>de</strong><br />

nos esperaban los seis Dagger giramos y <strong>de</strong>spegamos; eran las 13:00 horas, haciendo lo propio el resto <strong>de</strong> los<br />

aviones. Pero el último, luego <strong>de</strong>l mismo, sufrió la fisura <strong>de</strong>l parabrisas por lo que se vióobligadoaaterrizar.siendo<br />

entonces cinco los aviones que fueron a formarnos, guiados por certera mano <strong>de</strong>l operador <strong>de</strong>l Radar, hasta que<br />

nos visualizamos. Seguimos en ascenso a plena potencia ayudados por el fuerte viento <strong>de</strong> cola. La reunión <strong>de</strong> los<br />

aviones finalizó <strong>de</strong> acuerdo a lo previsto, más al iniciar el <strong>de</strong>scenso, la presencia <strong>de</strong> unas formaciones nubosas<br />

<strong>de</strong> "cúmulos potentes", nos obligó a <strong>de</strong>sviarnos hacia el sur, <strong>de</strong>biendo perforar parte <strong>de</strong> ellas bajo una fuerte<br />

lluvia, para lo cual los Dagger cerraron más la formación ( 1 ), retomando luego la ruta prevista, llegando en vuelo<br />

rasante al sur <strong>de</strong> la Gran Malvina, a dos minutos <strong>de</strong>l punto previsto <strong>de</strong> separación. (1) Cerrar formación, significa<br />

que cada avión <strong>de</strong>be formar más cerca uno <strong>de</strong>l otro. Comenzaron a verse las costas <strong>de</strong>l archipiélago mientras<br />

volabamos a unos 15/30 metros sobre el mar <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> unos 40 minutos <strong>de</strong> vuelo. Llegando al lugar fijado le<br />

hice una seña al "PERRO" y éste al resto, quienes dando progresivamente potencia comenzaron a sobrepasarnos<br />

por encima <strong>de</strong> nuestro avión. Cuando lo hicieron, el Capitán Arques comenzó un viraje por <strong>de</strong>recha poniendo proa<br />

a nuestra base. Habían pasado pocos minutos cuando escuché por la frecuencia <strong>de</strong>l Radar <strong>de</strong> <strong>Malvinas</strong>, la<br />

presencia <strong>de</strong> dos PAC en la que recorrerían los "PERROS" y los "GATOS", por lo que le consulté al comandante<br />

sobre violar el silencio <strong>de</strong> radio para que ellos estuvieran prevenidos, contestándome en forma afirmativa, y así lo<br />

hice, comprobando luego que no recibieron nuestra advertencia, posiblemente por la baja altura que volábamos.


Habiendo recorrido unas setenta millas, comenzamos a ascen<strong>de</strong>r hasta,unos trece mil pies, atentos en la<br />

frecuencia interna <strong>de</strong> comunicación al regreso <strong>de</strong> los cinco aviones. Decidimos no regresar hasta no tener<br />

noticias <strong>de</strong> ellos, por lo que nos mantuvimos a unas ciento setenta millas <strong>de</strong> nuestro <strong>de</strong>stino. La espera no duró<br />

mucho, poco a poco, primero uno y luego otro, fuimos escuchando a cada uno <strong>de</strong> ellos, sintiendo una gran alegría<br />

por el retorno <strong>de</strong> todos los integrantes <strong>de</strong> la misión, habiendo lo- grado el hundimiento <strong>de</strong> una fragata, que luego<br />

se <strong>de</strong>terminó que era la PLYMOUTH. Nos fuimos acercando al aeropuerto y esperamos que todos los Dagger<br />

aterrizasen, haciéndolo luego nosotros. El cielo estaba casi límpido, habiendo quedado atrás la tormenta,<br />

brillando el sol nuevamente para todos nosotros. Este fue uno <strong>de</strong> los momentos más felices <strong>de</strong> mi vida, cuando<br />

luego <strong>de</strong> haber cumplido una difícil misión, éramos recibidos con efusivos saludos por los mecánicos <strong>de</strong>l Grupo 6<br />

primero, y los <strong>de</strong> los Lear Jet <strong>de</strong>spués, estrechándonos entre abrazos con los últimos y felicitándonos por el éxito<br />

<strong>de</strong> la misión, tan sólo un día <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> haber perdido cinco camaradas y un avión.


CAPITULO CAPITULO XXXIV<br />

XXXIV<br />

"FECHA "FECHA CLAVE, CLAVE, MIREMOS MIREMOS MIREMOS LA LA LA GLORIA"<br />

GLORIA"<br />

El padre <strong>de</strong> mi amigo, el Teniente <strong>de</strong> la Fuerza Aérea <strong>de</strong> Venezuela, LON BANCO, me dijo esta frase que<br />

leyó en algún lado y me quedaron grabadas.<br />

"A veces te harás cargo que mirando a la tierra, haya muchos hombres que se sientan ateos, . . pero es<br />

inconcebible que <strong>de</strong> Dios renieguen, todos aquel/os que vuelan por los cielos".<br />

RELA RELATA: RELA TA: Fray JESÚS PRIETO S'\NTAM \RTA(Capellán <strong>de</strong> la V Brigada Aérea)<br />

La La fecha fue el 2 <strong>de</strong> abril <strong>de</strong> 1982 Lo que era nuestro, nadie se imaginó que iba a ser poseído. Nos pusimos <strong>de</strong><br />

pie. Mi emoción era la <strong>de</strong> todos, alegrías compartidas responsabilida<strong>de</strong>s a asumir y vivir con la mayor entrega, la<br />

cuota <strong>de</strong> sacrificio que la Patria nos pedía, éramos <strong>de</strong> ella. Fue <strong>de</strong>masiada suerte para mi vivir esta etapa <strong>de</strong> la<br />

Patria, fue <strong>de</strong>masiada suerte haber conocido hombres que llenaron <strong>de</strong> gloria la historia Aeronáutica porque<br />

supieron Amar. No me imaginaba que este precio <strong>de</strong>l amor total se iba a pagar tan caro. Pero nunca dudé. Los<br />

pilotos Argentinos están revestidos <strong>de</strong> obediencia y subordinación absoluta. Los he conocido en el trato diario. La<br />

hora les había llegado. Lo que hasta hoy era práctica, ahora iba a ser or<strong>de</strong>n y cometido. Su juramento <strong>de</strong><br />

<strong>de</strong>fen<strong>de</strong>rla hasta morir con honor y gran<strong>de</strong>za iba a ser cumplido. Así les vimos partir. Con la misma emoción que<br />

en tiempos <strong>de</strong> paz vi surcar a los A—4B los cielos <strong>de</strong> la Patria, así marcharon, serenos pero conscientes,<br />

responsables <strong>de</strong> su <strong>de</strong>ber entregados a su vocación. La Patria, reclamaba subordinación y valor, y para<br />

<strong>de</strong>fen<strong>de</strong>rla emprendían esta misión. Me sentí'conmovido. Como sacerdote había <strong>de</strong>jado mi patria y mi familia<br />

para consagrarme a Dios en el servicio <strong>de</strong> los hombres. Nunca Dios me pidió un acto <strong>de</strong> consagración tan heroico,<br />

aunque todos los días me ofrezco. Nuestros Oficiales, Suboficiales y Soldados sabían que el amor lleva a<br />

olvidarse <strong>de</strong> uno mismo en donación total. Dios y la Patria así lo expresaban. Era la forma mas sublime <strong>de</strong><br />

realizarla como militares. Era la forma más hermosa <strong>de</strong> vencer. Pagar con la vida, ser grano <strong>de</strong> trigo que se<br />

entierra, haciendo brotar en el corazón <strong>de</strong> todos los compatriotas la permanente esperanza <strong>de</strong> que ese jirón <strong>de</strong> la<br />

Patria (Islas <strong>Malvinas</strong> y.. .) pronto serán <strong>Argentina</strong>s. Algunos quedaron, otros volvieron. Todos nos <strong>de</strong>jaron el<br />

testimonio, <strong>de</strong> que la vocación hay que abrazarla con amor y con pasión. Generosa una, intensa la otra, ambas en<br />

pos <strong>de</strong> los sublimes valores <strong>de</strong> Patria y Dios. El <strong>Militar</strong> cristiano, no solo es Soldado <strong>de</strong> la Patria, sino también <strong>de</strong><br />

Cristo, <strong>de</strong>fensor <strong>de</strong>l reino temporal, no pier<strong>de</strong> <strong>de</strong> vista el reino eterno <strong>de</strong> Dios. No recuperaron el pedazo <strong>de</strong> Patria


terrena; pero no cabe duda que los que murieron poseyeron la Patria eterna <strong>de</strong>l Cielo. Que hermoso obsequio<br />

ofrecido a Dios y a sus compatriotas en abnegación <strong>de</strong> si mismo y en generosidad a su Nación. Pero aquí, entre<br />

nosotros y lejos <strong>de</strong> ellos, en un mundo <strong>de</strong> silencio y <strong>de</strong> espera continua, quedaron los padres, las esposas y los<br />

hijos. Era otro aporte fecundo a la Patria. En mis visitas diarias vi los hondos quilates <strong>de</strong> fortaleza y valor que en el<br />

calvario <strong>de</strong> la guerra en el Atlántico Sur ellas aportaban. En sus rostros una esperanza <strong>de</strong> paz y <strong>de</strong> arreglo pero en<br />

sus almas la clara convicción que sus hijos, esposos y padres eran <strong>de</strong> la Patria. Así escuchamos muchas veces.<br />

Madres entregadas a la vocación <strong>de</strong> sus hijos. Años atrás gozando la alegría cuando les vieran con el uniforme <strong>de</strong><br />

ca<strong>de</strong>te. Hoy sufren y aceptan con entereza <strong>de</strong> espíritu que para la Patria no hay límites <strong>de</strong> servicio y amor cuando<br />

la hora la reclama. Así piensan las madres <strong>de</strong> nuestros Oficiales, Suboficiales y Soldados <strong>de</strong> la Fuerza Aérea. Así<br />

piensan las madres <strong>de</strong>l Soldado Argentino. Estáticas como María al pie <strong>de</strong> la Cruz, se pasaban las horas rezando,<br />

mirando al Santo Crucifijo y quizá algunas escucharon una voz interior que les dijo "hoy estarán conmigo en el<br />

Paraíso". Muchos hijos no volvieron. La noche sufre, la esposa espera. Espera el llamado para abrir su corazón.<br />

Espera la carta para saberse amada. Pero ¿es que la esposa <strong>de</strong> un militar el día <strong>de</strong> su matrimonio no le dijo un sí<br />

también a la Patria?. Sólo así se compren<strong>de</strong> la entereza, con que muchas recibieron la noticia <strong>de</strong> que sus esposos<br />

murieron en combate. Sólo así pudo una esposa <strong>de</strong>cir "<strong>de</strong>s<strong>de</strong> el día que le conocí estoy preparándome para una<br />

circunstancia como esta". Visitamos los hogares <strong>de</strong> los Oficiales que estaban en el Sur y los <strong>de</strong> los Suboficiales<br />

que se encontraban en las <strong>Malvinas</strong>. Hogares cristianos cimentados en la fe, fe en la <strong>Argentina</strong> y su gran<strong>de</strong>za. Fe<br />

en el sacrificio que sus esposos e hijos, en estas horas difíciles ofrecen por la Patria. Muchas esposas quedaron<br />

solas, solas en su corazón. Pensando el orgullo que supone comunicar a sus hijos que su padre amó tanto a la<br />

Patria que dio su vida por ella. Ahí están sus nombres entre los Gran<strong>de</strong>s <strong>de</strong> la Patria, ahí les pue<strong>de</strong>n reconocer.<br />

Cualquiera sea el dolor que se ha sufrido es mucha la gloria que nos espera. Dios ha querido que la Patria viviese<br />

días <strong>de</strong> gozo y sus' noches <strong>de</strong> dolor, pero en el corazón <strong>de</strong> todos nosotros ha brotado una esperanza; pronto muy<br />

pronto, las Islas <strong>Malvinas</strong> formarán un todo con la Patria. Allí estarán entonces los que lucharon y volvieron. Allí<br />

estarán los sufrimientos <strong>de</strong> las madres, la ansiada espera y soledad <strong>de</strong> las esposas y las lágrimas <strong>de</strong> los hijos.<br />

Sólo el amor nos hará vencer.


CAPITULO CAPITULO XXXV<br />

XXXV<br />

"SABER "SABER MORIR"<br />

MORIR"<br />

Esto no es una inspiración literaria, pues quien escribe no es un literato, es tan sólo lo estractado <strong>de</strong><br />

algunos libros y publicaciones, que sirvieron al autor <strong>de</strong>l capítulo para expresar lo que llevaba en el<br />

corazón.<br />

RELATA: RELATA: Mayor FERNANDEZ (Piloto <strong>de</strong> A-4B)<br />

Las olas <strong>de</strong>l mar bañan mi avión; las recibo como si fuera agua bautismal, re<strong>de</strong>ntora, purifica<strong>de</strong>ra. . . Por primera<br />

vez vivo mi propio presente, soy yo mismo, pero paradójicamente para <strong>de</strong>saparecer <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> un instante. Siento<br />

el fuego <strong>de</strong> los misiles y los cañones sobre miavióny mi pecho. Pido a Dios que la sangre que <strong>de</strong>rramamos no sea<br />

en vano. Perdono a todos, pero no entiendo ni respeto a los pérfidos sin DIOS ni Patria que gritan histéricamente<br />

por la paz, cuando esta no pue<strong>de</strong> existir si no hay honor, en este momento en que yo muero, precisamente por<br />

DIOS y por la Patria. A los que se arrepienten <strong>de</strong> la hazaña porque estamos perdiendo, como si el criterio <strong>de</strong> la<br />

verdad fuera el éxito, como si <strong>de</strong> nada valiera el testimonio <strong>de</strong> nuestra ban<strong>de</strong>ra y el ejemplo <strong>de</strong> nuestra fortaleza.<br />

No entiendo a los pusilánimes que se apresuraron a guardar sus estandartes y a disimular su ocasional<br />

nacionalismo. Perdono a todos, pero me cuesta hacerlo. Debo haber balbuceado. Veo los fogonazos y siento<br />

como si muchas lanzas me atravesaran con puntas <strong>de</strong> fuego. Creo caer, quiero eyectarme pero cae antes mi<br />

cabeza, luego un estruendo en mi cuerpo.<br />

iSf, peor es la humillación que la muerte!. ¡Gracias, gracias DIOS mío por esta muerte!.<br />

Yo no te pedí mi existencia, tu me la diste. Sólo te pedí fuerzas para saber morir, en el último instante, en que por<br />

mi humana flaqueza, no estaba exento <strong>de</strong> comportarme como tantos miserables y tú Señor me diste las fuerzas.<br />

Mi rostro ya <strong>de</strong>scansa sobre la húmeda turba en la que pu<strong>de</strong> enterrar mi rosario, tras darle un último beso y la<br />

promesa <strong>de</strong> una victoria final.<br />

El frío fue invadiendo mi cuerpo, que se confundió con esa tierra que había soñado y asumido en mis actitu<strong>de</strong>s.<br />

El cuerpo era carne y la carne es polvo, tierra, turba, Patria y a la Patria vuelvo.<br />

Fui quedando a oscuras, sólo escuchaba el rumor <strong>de</strong>l mar en su constante insistir sobre estas playas irre<strong>de</strong>ntas,<br />

las olas <strong>de</strong> este mar que simboliza los sucesos <strong>de</strong> mi Nación.<br />

Mi alma se fue <strong>de</strong>sprendiendo <strong>de</strong>l cuerpo en un proceso lento, calmo, sereno, para retornar a su punto <strong>de</strong><br />

partida. . . que es DIOS-<br />

Sobre el horizonte, en un triste atar<strong>de</strong>cer <strong>de</strong>l otoño austral, moría agonizante el sol, entre negros nubarrones <strong>de</strong><br />

tormenta.<br />

Solo te pido DIOS, que mi lucha y mi muerte, en esta cruz que forma mi avión con sus alas, sirva para que vuelva<br />

a renacer ese sol <strong>de</strong> mayo que un día nos dio luz y gloria.


Se que así será, porque tu eres justo.


CAPITULO CAPITULO XXXVI<br />

XXXVI<br />

" " " DIGNAS DIGNAS DE DE ELLOS ELLOS " "<br />

"<br />

Este es un Capítulo muy especial, ya que quien escribe, fue golpeada muy duramante en esta primera<br />

batalla por nuestras <strong>Malvinas</strong>; es la viuda <strong>de</strong>l Vicecomodoro DE LA COLINA, una <strong>de</strong> las que viven i como él<br />

hubiera querido !<br />

RELATA: RELATA: Sra. LETICIA <strong>de</strong> DE LA COLINA (Esposa <strong>de</strong> un héroe).<br />

Soy la esposa <strong>de</strong> un Aviador <strong>Militar</strong> muerto heroicamente en combate el día 7 <strong>de</strong> Junio <strong>de</strong> 1982. También soy la<br />

madre <strong>de</strong> dos hermosos hijos, que hoy más que nunca se sienten orgullosos <strong>de</strong> su padre, "capaz <strong>de</strong> entregar su<br />

vida en cumplimiento <strong>de</strong> la palabra empeñada, cuando juró <strong>de</strong>fen<strong>de</strong>r la Ban<strong>de</strong>ra <strong>de</strong> la Patria hasta per<strong>de</strong>r la<br />

vida". Esa herencia que pocos pue<strong>de</strong>n legar a sus hijos, es hoy nuestro más preciado patrimonio que<br />

compartimos junto a las otras cincuenta y cuatro familias <strong>de</strong> la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong>. Ese es el motivo <strong>de</strong> este<br />

escrito; si bien es cierto que como esposa su ausencia me afecta profundamente, como madre siento que fue un<br />

elegido por Dios; siempre estará en el recuerdo <strong>de</strong> todos o al menos habrá fechas en las cuales se lo recordará, y<br />

sus hijos sentirán el orgullo que ya sienten y tendrán su ejemplo permanentemente. Voy a transcribir la única<br />

carta que me envió, pues hablábamos por teléfono; pero el dfa 2 <strong>de</strong> junio me envió lo que yo ahora consi<strong>de</strong>ro su<br />

<strong>de</strong>spedida; en ella podrán apreciar toda su hombría <strong>de</strong> bien:<br />

"Mi amor:<br />

Recibí la cajita y me puse muy contento, al rato no más la abrí ante el requerimiento <strong>de</strong> to'da la "barra". Los<br />

bombones estaban riquísimos, a la noche hicieron un truco con whisky y bombones, así que lo único que<br />

quedó fue la caja que lo contenía. En general lo estamos pasando bien y se ha formado un grupo lindo <strong>de</strong><br />

gente; también <strong>de</strong> vez en cuando volamos un poco para matizar la cosa y para ver si es cierto cierto cierto que que vuela<br />

algún algún Harrier Harrier por por ahí. ahí. Ya se que están Uds. todos bien, con respecto a tu posible venida, en todo caso lo<br />

hablamos por teléfono cuando te llame.<br />

Bueno mi amor, aquí se va el avión, besos muchos besos, los quiero mucho a todos.<br />

Te adoro. . .<br />

RODOLFO RODOLFO<br />

RODOLFO<br />

Saludos a Lucrecia.<br />

A los cinco días <strong>de</strong> esta carta, su avión fue <strong>de</strong>rribado. Cuando me dieron la noticia sentí que Dios me ponía ante la<br />

prueba más difícil <strong>de</strong> mi vida. El siempre me <strong>de</strong>cía que hay problemas que tienen, solución y problemas que no,<br />

los que tienen solución, buscársela y los que no tienen apren<strong>de</strong>r con el problema. Yo tenía que apren<strong>de</strong>r a vivir<br />

con el problema por lo menos por ahora, hasta el momento <strong>de</strong>l reencuentro en verda<strong>de</strong>ra paz. Sentía el orgullo <strong>de</strong><br />

que había cumplido con su <strong>de</strong>ber, no había <strong>de</strong>fraudado a nadie, pero a veces me costaba creer que fuera real.<br />

Siempre uno pregunta, ¿porqué a mf?l Lo resucité no se cuántas veces, mis <strong>de</strong>fensas así lo pedían. Hasta que va<br />

transcurriendo el tiempo y uno va asumiendo día a día la realidad y <strong>de</strong>jo correr mi existencia como "él hubiera


querido", con valor, con "dignidad, orgullo y respeto", pero también con dolor; se que apoyándome en Dios día a<br />

día, minuto a minuto, conseguiré mitigar el dolor.<br />

El orgullo estará presente siempre.<br />

Permanentemente recibo cartas hablando <strong>de</strong> él. Voy a transcribir algunos párrafos, imposible hacerlo con todas;<br />

esta pertenece a un aviador Colombiano retirado <strong>de</strong> la Fuerza Aérea <strong>de</strong> su Nación:<br />

"Siempre lo había contado entre mis mejores amigos, no solo <strong>de</strong> profesión aeronáutica, sino en el<br />

verda<strong>de</strong>ro sentido y expresión <strong>de</strong> la amistad. La muerte ronda todos los días y se lleva lo mejor que<br />

tenemos a nuestro alre<strong>de</strong>dor". Era Rodolfo solo bondad, alegría y felicidad; produce <strong>de</strong>solación la falta<br />

diaria <strong>de</strong> su ejemplo; da nostalgia al ver irse a alguien que nos servía <strong>de</strong> faro y queda tañendo en el<br />

silencio el recuerdo <strong>de</strong>l apellido DE LA COLINA, que cayó como los héroes <strong>de</strong> la Grecia antigua, hijos <strong>de</strong><br />

Dios y <strong>de</strong> hombres, seres cuyas vidas terminaban <strong>de</strong>masiado pronto, <strong>de</strong>jando su bello recorrido<br />

inconcluso en la vera <strong>de</strong>l camino.<br />

Esta carta que transcribo es <strong>de</strong> un héroe viviente <strong>de</strong> los tantos que tiene la Fuerza Aérea.<br />

"El Comodoro D WILSON ROSIER JOSÉ PEDROZO, tiene el honor <strong>de</strong> saludar muy cordialmente a la Sra. LETICIA<br />

TASELLI <strong>de</strong> De La COLINA y hacerle llegar sus más sinceras felicitaciones, con motivo <strong>de</strong> recibir la con<strong>de</strong>coración<br />

con la cual la Nación <strong>Argentina</strong> y todo su pueblo, reconocen a sus hijos caídos en el cumplimiento <strong>de</strong>l <strong>de</strong>ber. Hago<br />

votos para que el ejemplo <strong>de</strong> su esposo ilumine a quienes quedamos al servicio <strong>de</strong> la Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong> y<br />

todos aquellos que vendrán. Que Dios le dé el consuelo y la resignación que merece".<br />

Yo soy solo una <strong>de</strong> ellas, una <strong>de</strong> esas viudas que quieren lo que querían sus esposos.<br />

DIOS LOS TIENE EN LA GLORIA.


CAPITULO CAPITULO XXXVII XXXVII<br />

XXXVII<br />

•EN •EN POLVO POLVO TE TE CONVERTIRÁS"<br />

CONVERTIRÁS"<br />

De la tierra creó el Señor al hombre y <strong>de</strong> nuevo lo hizo volver a ella, días contados le dio y tiempo fijo (Eclo,<br />

1 7, 1-2). "Yo soy la verdad y la vida, quien cree en mi, aunque muera, vivirá para siempre".<br />

RELATA: RELATA: Capitán SAVOIA (Artillero <strong>de</strong> la F.A.A.)<br />

Llegamos con el escuadrón Antiaéreo, unos 70 hombres, el 3 <strong>de</strong> Abril <strong>de</strong> 1982. El Jefe era el Mayor MAIORANO, y<br />

como Jefes <strong>de</strong> Baterías, el Capitán DALVES, el 1er Ten SPATH y yo.<br />

Abril fue "Coser y Cantar", construyendo refugios, gracias a los cuales volvimos todos vivos, aunque en esos días<br />

muchos nos miraban trabajar como con lástima.<br />

Terminamos dos refugios, gran<strong>de</strong>s como una habitación, que estaban en la prolongación imaginaria <strong>de</strong> la pista <strong>de</strong><br />

Puerto Argentino. Cuando el 7 u 8 <strong>de</strong> Mayo llegaron refuerzos se nos hizo algo escaso el espacio, pero ganamos<br />

en temperatura. Es muy difícil que alguien que no haya estado allí comprenda el frío terrible que hacía y que se<br />

iba acumulando en nuestros huesos. Uno <strong>de</strong> los tantos días en que teníamos el conocido concierto <strong>de</strong> las<br />

fragatas (Cañones) comentábamos lo mal que estaban tirando, pues no pegaban ni cerca <strong>de</strong> la pista. A medida<br />

que las explosiones se fueron acercando comprendimos el porque ¡Nosotros éramos el blanco!. Evi<strong>de</strong>ntemente<br />

tenían algún sistema, quizás <strong>de</strong> rayos infrarrojos, que les indicaban el lugar en que había acumulación <strong>de</strong> calor<br />

humano, pero nuestro refugio aprobó el examen. Hasta fines <strong>de</strong> abril habíamos realizado varios ejercicios con<br />

aviones <strong>de</strong> nuestra F.A.A. y todo lo que solicitábamos nos llegaba en los leales C—130 Hércules. El 27 <strong>de</strong> abril<br />

tuvimos la primera novedad, el radar <strong>de</strong>tectó algo, fue captado por la pieza <strong>de</strong> 35 mm y abrimos fuego. Algo se<br />

incendió sobre el mar, lo vieron todos, posiblemente era un helicóptero. Esa misma noche tuvimos otra alarma.<br />

Dormir se hacía difícil, pensando en la posibilidad <strong>de</strong>l ataque nocturno <strong>de</strong> los "GURKAS", combinado con el frío. El<br />

My MAIORANO que había permanecido en la ciudad por razones operativas, vino el 30 <strong>de</strong> abril, a relevarme para<br />

que fuera a darme un baño y dormir en una cama <strong>de</strong> la ciudad. Eso se llama sentido <strong>de</strong> la oportunidad, a la noche<br />

iniciaron su primer ataque. Escuché bombas, tembló el pueblo, alguien dijo: "Bueno... co-<br />

menzó. ..." La gente corría, sus miradas <strong>de</strong>mostraban <strong>de</strong>sorientación, era el bautismo <strong>de</strong> fuego. Pasados los<br />

"VULCAN" a las 04:40, a las 08:30 atacaron 10 aviones Harrier, 5 por el Norte y 5 por el Sur, mientras otros 2 los<br />

cubrían <strong>de</strong>s<strong>de</strong> lo alto. Nos tiraron con cohetes y bombas "beluga" (se dividían en muchísimas pequeñas granadas<br />

cuyo único fin era tronchar vidas). Lo vieron <strong>de</strong>masiado fácil, hicieron un reempleo (nuevo ataque) y fueron<br />

"papita para el loro". El "Fierro" 3 <strong>de</strong> ALMADA <strong>de</strong>rribó uno, el "FIERRO" 6 <strong>de</strong> RUIZ otro que, mientras le tiraba,<br />

estaba tan cerca que le ocupaba toda la mira; otro fue <strong>de</strong> la Artillería Antiaérea <strong>de</strong> Ejército, otro <strong>de</strong> la Marina, 2 se<br />

alejaron humeando. El Mayor MAIORANO, que andaba entre los cañones, al ver a un HARRIER que entraba<br />

"escupiendo" fuego, se tiró cuerpo a tierra; las ráfagas "caminaban hacia él y se cortaron a un metro. A las 13:30<br />

llegaron las fragatas, nos tiraron, comenzó un <strong>de</strong>sembarco en helicópteros; vinieron a tomar las islas en un día.


Me preocupé, pero los "DAGGER" nos <strong>de</strong>volvieron la calma y las fragatas buscaron el ESTE averiadas. A la noche<br />

volvieron, buscando al radar con sus cañones. Alai <strong>de</strong> la madrugada por fin.... i i i ¡Silencio !!!! El Aeropuerto era un<br />

<strong>de</strong>sastre, pero mis hombres; estaban todos vivos. El panorama, algunos muertos, el shock <strong>de</strong>l tomar conciencia<br />

me hicieron llorar, reaccioné, ya estaba dispuesto a lo que viniera. Después, la rutina terrible <strong>de</strong> la guerra;<br />

bombas, muertos, <strong>de</strong>cisión. Sabíamos <strong>de</strong> nuestra inferioridad, pero también <strong>de</strong>l coraje <strong>de</strong> nuestros hombres y la<br />

justicia <strong>de</strong> nuestra causa, son nuestras Islas y por ellas daremos la vida con gusto. Nuestros refugios eran<br />

buenos,pero en caso <strong>de</strong> impacto directo "tendríamos novia". Una noche, el 1er Ten CASTAGNARI que iba al frente<br />

<strong>de</strong> sus hombre-» fue alcanzado por un misil y murió dando el ejemplo. Estábamos viviendo en la ciudad los que no<br />

estábamos <strong>de</strong> alerta, lo que nos permitió cuidar vidas, sólo quedaba la dotación necesaria para accionar los<br />

"Fierros". El 24 <strong>de</strong> mayo bombar<strong>de</strong>aron los Harriers en altura para distraernos, entraron 4 rasantes al ataque (los<br />

<strong>de</strong> arriba eran <strong>de</strong> la Royal Navy —ver<strong>de</strong> oscuro— y los <strong>de</strong> abajo <strong>de</strong> la RAF —gris oscuro—). Llovieron bombas con<br />

paracaídas, una hizo impacto al bor<strong>de</strong> <strong>de</strong> la pista y las <strong>de</strong>más no explotaron. Uno <strong>de</strong> ellos fue alcanzado por las<br />

exquirlas <strong>de</strong> la explosión <strong>de</strong>l avión que lo precedía y se alejó averiado. En los primeros días <strong>de</strong> junio estaba<br />

preparando café para el <strong>de</strong>sayuno en la ciudad, cuando vi por el ventanal, estallar un misil a una cuadra, era un<br />

helicóptero "WESSEX", equipado con misiles AS-2. El 11 <strong>de</strong> junio llegó mi relevo y volví al continente, faltaban<br />

tres días para la rendición. Allí quedaron miles <strong>de</strong> historias como las <strong>de</strong> S.P. FORNI, que llegó a <strong>Malvinas</strong> el 3 <strong>de</strong><br />

abril como experto en radar. El 24 volvió al continente a buscar un repuesto para el mismo. Se bañó y bajó a<br />

almorzar, encontrándose con el Ten VALAZZA, al que le faltaba un empujoncito para enojarse con todo el mundo<br />

para po<strong>de</strong>r ir. Cuando le contó <strong>de</strong> las ovejas en las pra<strong>de</strong>ras, el aire limpio y puro, las olas ver<strong>de</strong> esmeralda y la<br />

hermosa sensación <strong>de</strong> estar pisando la tierra <strong>de</strong> las queridas <strong>Malvinas</strong>, no dudó más y fue directamente a ver a<br />

su Jefe para pedirle que lo autorice a ir. Esa noche durmieron en el avión y al otro día, para el ESTE. Ayudados por<br />

el Suboficial DOMINA, gracias al repuesto repararon el radar y luego festejaron la llegada <strong>de</strong>l Ten VALAZZA con un<br />

almuerzo regado por una botella <strong>de</strong> buen vino, traído <strong>de</strong>l continente.<br />

El 1° <strong>de</strong> mayo, cuando atacaron los Harriers en Darwin, un cohete <strong>de</strong>l Pucará <strong>de</strong>struido <strong>de</strong>l Ten JUKIC, quedó a<br />

unos metros <strong>de</strong> ellos sin explotar. El 4 estaba <strong>de</strong> turno, cuando vio en su radar a las 13:25 hs.varios ecos<br />

(blancos) móviles,dio la alarma Era una escuadrilla <strong>de</strong> Harrier, <strong>de</strong> los cuales uno fue <strong>de</strong>rribado y otro averiado.<br />

Bengalas en la noche, sustos dados a veces por los ingleses, otras por las ovejas; cañoneo <strong>de</strong> fragatas, ataques<br />

<strong>de</strong> los Harriers, más bengalas y el hombre que comienza a endurecerse, a ser veterano, a respetar menos el<br />

cañonazo. Se enteraron <strong>de</strong> que al día siguiente atacarían DARWIN; eran ellos menos <strong>de</strong> 200 <strong>de</strong> Fuerza Aérea y<br />

con el resto apenas pasaban <strong>de</strong> 800, ellos serían aproximadamente 3.000. El Vcom VERA MANTARAS le dijo: "Hoy<br />

<strong>de</strong>rribamos 3 Harrier, que tenga suerte mañana". Escucharon disparos en la noche: ¿"qué hacemos"? —Preguntó<br />

el S Aux PEREYRA, -Esperar, le constestó FORNI. Bengalas, tiros, concierto. Con el amanecer <strong>de</strong> un lluvioso día<br />

llegaron los Pucará, atacaron un refugio "gringo" y mataron al Jefe <strong>de</strong> los paracaidistas. A las 11:00 se fue FORNI<br />

a verlo al Ten VALAZZA, le contó que ese día era el cumpleaños <strong>de</strong> su hijo y al siguiente era el <strong>de</strong> él, se <strong>de</strong>sahogó.<br />

VALAZZA le or<strong>de</strong>nó ir al pueblo. A las 13:00 un nuevo ataque, morterazos, cañones, ametralladoras y el Teniente<br />

CALDERÓN, piloto <strong>de</strong> Pucará, junto con un cabo, les tiraron con el "tractor misilístíco", (tractor al que le ataron una<br />

cohetera <strong>de</strong> Pucará y al que utilizaban en forma similar a como se operan los tanques <strong>de</strong> guerra). Les quedaba<br />

esperar la noche. Cada dos horas relevaban a los soldados helados y les daban chocolate caliente.


Llevaban dos días <strong>de</strong> fuego continuo.<br />

A la mañana les avisaron que había una ban<strong>de</strong>ra <strong>de</strong> rendición. No le creyeron mucho. Durmió 3 horas que le<br />

parecieron un siglo. Era verdad, los hombres se reunieron frente a un esquilador <strong>de</strong> ovejas, cantaron el himno.<br />

Luego la prisión, los fardos que servían <strong>de</strong> colchón al frío. Comieron con el Suboficial una latita <strong>de</strong> "Pate Foie", el<br />

ánimo se les vino un poco abajo. De intérprete, servía un hombre al que apodaban "maestro cubano"<br />

Los separaron, vinieron los interrogatorios. Un oficial <strong>de</strong> inteligencia le dijo que su ficha se había perdido. Primer<br />

pregunta (<strong>de</strong>FORNI al Inglés)-¿Por qué habla castellano?<br />

— Porque mi señora es nacida en Iquique (Chile).<br />

— Choque la mano, tenemos por lo menos una cosa en común, mi señora es <strong>de</strong> Antofagasta.<br />

— Pregunta <strong>de</strong> FORNI, — Inglés, ¿cuándo nos vamos?<br />

— Ahora mismo.<br />

Retiró su equipo, lo sacaron <strong>de</strong>l corral y lo metieron en una habitación, en don<strong>de</strong> colgaba <strong>de</strong>l techo una<br />

bomba <strong>de</strong> A—4B sin explotar.<br />

— ¡Me jorobó!. Pensó FORNI con resignación. A las 07:20 hs. se iba el barco hacia el continente. Pidió hablar<br />

un rato más tar<strong>de</strong> con el inglés.<br />

— Subí, chau, que te vaya bien.<br />

En el barco durmió 24 hs. seguidas. Al segundo día fueron a comer a' la bo<strong>de</strong>ga, se lavaron las manos y sentados<br />

en el suelo comieron "buseca", la que combinada con el movimiento <strong>de</strong>l barco les trajo muy malos resultados.<br />

Temían ser llevados a Ascención. Un día tuvieron menú especial, riquísimo, y <strong>de</strong> postre, helado <strong>de</strong> chocolate; poco<br />

<strong>de</strong>spués subieron los <strong>de</strong> la Cruz Roja Internacional.<br />

Llegaron, los llevaron a EZEIZA, formaron ; un Boeing pasó sobre sus cabezas en procedimiento <strong>de</strong> aterrizaje final,<br />

todos instintivamente se movieron buscando protección. Luego se acordó <strong>de</strong> VALAZZA y temió que hubiese<br />

muerto, pero estaba entre los que regresaron. Ahora sí, todo había pasado. Su jefe, el Vicecomodoro PEDROZO,<br />

los saludó <strong>de</strong> combatiente a combatientes.<br />

FORNI partió en auto <strong>de</strong>s<strong>de</strong> BS. As. hasta su domicilio en Tandil. Mientras los kilómetros volaban bajo las<br />

ruedas, los números que no querían irse, rondaban en su cabeza: "—Días <strong>de</strong> ataques ingleses:<br />

(en Darwin) 1 °, 4, 12, 14, 17, 21, 23, 24, 25, 26, 27, 28 <strong>de</strong> mayo. . .<br />

Prisionero <strong>de</strong>l 29 al 12 <strong>de</strong> junio...<br />

Harriers <strong>de</strong>rribados: KZ 450-FR S1 <strong>de</strong>l Ten. john Nicholas TAYLOR (Inglés), por el subteniente BRAGGHINI <strong>de</strong>l<br />

Ejército Argentino; el XZ 352 <strong>de</strong>l Ten CURTISS (Inglés), por Heredia; el KZ 452 <strong>de</strong>l Ten EYTON (Inglés), por DI<br />

GIUSTI; el KZ 988 <strong>de</strong> Bob IVENSSON (Inglés), por GALANTE, y tantos otros que los gringos, especialistas en ocultar<br />

información, escondieron. .. VALAZZA fue alcanzado por una explosión y dijo por radio: "Destruyeron mi refugio y<br />

estoy herido". —"Estamos bajo fuego, que DIOS lo ayu<strong>de</strong>. . . ya vamos para allá". Los soldados ÁTICO y<br />

CASTELLANO lo buscaron. El Suboficial HUGO RUBÉN GÓMEZ esa noche se acostó sin borcegufes, escuchó el<br />

silbido, intuyó que caería junto a él, se hizo un ovillo, explotó. . . La carpa se le cayó encima, una piedra lo golpeó<br />

en el costado, la tierra levantada lo enterró, un caño le cortó la cabeza y la sangre comenzó a correrle por la cara,<br />

se impresionó. Al respirar notó que algo se había roto <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> él. Hizo fuerza para salir y no lo logró, estaba<br />

enterrado vivo. Rezó mucho, escuchó voces y gritó: " ¡Sáquenme!". DIOS escuchó; el cabo OLIVA <strong>de</strong> Gallegos (al


que se le había or<strong>de</strong>nado volver al continente por haber terminado su misión, regresó a las isias porque pensó<br />

que era muy triste el no compartir el <strong>de</strong>stino común con sus camaradas <strong>de</strong> años), lo sacó a él y a otro Suboficial.<br />

Estaba muy oscuro, sacó piedras hasta que en las tinieblas encontró su mano y lo comenzó a tirar, estaba tan<br />

apretado que <strong>de</strong>jó a<strong>de</strong>ntro hasta las medias. Se sintió salvado cuando con la cabeza rompió la tela <strong>de</strong> la carpa y<br />

vio el cielo, mientras el maravilloso viento helado le cortaba la cara. Lo que ayer existía ya no estaba más y<br />

aparecían nuevas elevaciones. Comenzó a caminar <strong>de</strong>scalzo sobre la turba helada, buscando a tientas hasta que<br />

llegó a la bahía, se orientó y llegó hasta su gente. Le envolvieron los pies con mantas, le dieron un trago <strong>de</strong><br />

ginebra y el Mayor MAIORANO le ayudó a llegar a la ambulancia. A los 500 metros, alarma roja, todos al suelo,<br />

nuevo bombar<strong>de</strong>o. Hospital <strong>de</strong> campaña, 2 costillas fracturadas, una buena faja, al gunos días <strong>de</strong> <strong>de</strong>scanso.<br />

— "Yo era experto en reparar cañones, me necesitaban allí, no quise volver al continente".<br />

— "De día la actividad no me daba tiempo para acordarme <strong>de</strong>l dolor, lo difícil era dormir a la noche, pero sentado<br />

me dolía menos". Veía el continente como algo muy distante, lejano. . .<br />

— "Volví el 13 <strong>de</strong> junio en el último Hércules que rompió el bloqueo la noche antes <strong>de</strong> la rendición".<br />

— "Esa noche murió el Cap. CASADO en el último ataque <strong>de</strong> la FUERZA AEREA".<br />

— "Después <strong>de</strong>l frío, la carpa, los bombar<strong>de</strong>os, los muertos, el dolor, la civilización me golpeó fuerte...".<br />

— "Allá, en las islas, murió junto a mí un Infante <strong>de</strong> Marina, su hermano al enterarse se ofreció a ocupar su lugar<br />

en el frente <strong>de</strong> combate. Desgraciadamente no recuerdo su nombre, sólo su cara, siempre con una sonrisa.. ."<br />

"Las trazantes, el combate y los ingleses que caían como en las películas, pero no morían porque venían con<br />

chalecos antibalas; solo sus piernas quedaban cubiertas <strong>de</strong> esquirlas." "CORRADI agotó hasta su última<br />

munición.. ." "La imagen <strong>de</strong> los gurkas rapiñando entre los cadáveres..." "Me mandaron los ingleses a juntar y<br />

apilar nuestros muertos.." El auto llegó por fin a la casa <strong>de</strong> FORNI, se bajó miró su casa, abrazó a los suyos.<br />

Por un tiempo lo mirarían como a un bicho raro y alguno le preguntaría —"Che, ¿Por qué se rindieron?. . . ¿Es<br />

cierto que las bombas <strong>de</strong> uste<strong>de</strong>s no explotaban. ..?


CAPITULO CAPITULO XXXVIII<br />

XXXVIII<br />

SOLDADOS AERONÁUTICOS<br />

Este capítulo es un homenaje a nuestros soldados, que, repitiendo la hazaña <strong>de</strong>l Tambor <strong>de</strong> Tacuarí, bajo<br />

la protección <strong>de</strong> la Virgen, la sombra <strong>de</strong> la ban<strong>de</strong>ra con los colores <strong>de</strong> su manto, y con su valor, protegieron<br />

nuestros aeropuertos <strong>de</strong> campaña en <strong>Malvinas</strong>, quedando cinco <strong>de</strong> ellos con honor y sin miedo, pues sólo<br />

el ateo teme a la muerte, ya que lo único que posee, es, esta vida material y terrenal.<br />

RELATA: Capitán SI FON.<br />

Nuestros soldados, los que me acompañaron a <strong>Malvinas</strong> supieron luchar con honor, volver con la frente alta y a<br />

su regreso, en la <strong>Escuela</strong> <strong>de</strong> <strong>Aviación</strong> <strong>Militar</strong>, antes <strong>de</strong> irse <strong>de</strong> baja, <strong>de</strong>jaron un documento firmado por todos ellos,<br />

en el que solicitaban ser enrolados nuevamente si la Nación los requiriese otra vez en <strong>de</strong>fensa <strong>de</strong> su soberanía.<br />

Allí quedó, para ejemplo <strong>de</strong> los débiles y prueba <strong>de</strong> los <strong>de</strong>screídos.<br />

Era Semana Santa, llegó la or<strong>de</strong>n, partimos. No sabíamos porque nos mandaban, pero sí porque lucharíamos. En<br />

Comodoro Rivadavia nos esperaba el Comodoro PEDROZO, PEDROZO, PEDROZO, quien nos informó que protegeríamos una base <strong>de</strong><br />

aviones Pucará. El 13 <strong>de</strong> abril, a las 02:00 <strong>de</strong> la mañana, salimos hacia <strong>Malvinas</strong> en dosC-130 Hércules. A<br />

medida que nos acercábamos se fueron acallando las voces, para renacer próximos al aterrizaje. En Puerto<br />

Argentino nos esperaba el Brigadier CASTELLANO, hombre sano, recto y muy querido por nosotros. De allí, a la<br />

Base Aérea <strong>Militar</strong> "Cóndor", en Darwin, transportados por helicópteros Chinook. Llegamos, nos alojamos en una<br />

escuela que tenfa varias aulas (30x35). Los Tenientes BUSTILLO, ROSAS, SERRA y yo , éramos los jefes <strong>de</strong><br />

Secciones. Hacer posiciones, preparar la <strong>de</strong>fensa; los picos se doblaban por la dureza <strong>de</strong>l suelo. Cada uno<br />

preparó su propia posición, incluso los Oficiales. El estado <strong>de</strong> ánimo era óptimo. Llegaron los Pucará, la munición,<br />

el combustible; la atmósfera cambió, ya no era un campamento <strong>de</strong> vacaciones. Los nervios comenzaron a<br />

tensarse, una vaca y algunos gansos conocieron la puntería <strong>de</strong> nuestros soldados durante la noche. (Hay muchos<br />

<strong>de</strong> ellos y por eso el lugar se llama "Pra<strong>de</strong>ra <strong>de</strong>l Ganso"), En el primer ataque, 3 <strong>de</strong> mis hombres fueron heridos y<br />

luego trasladados al continente. Con el Soldado "Negro" BAEZ salimos a buscar heridos. En su <strong>de</strong>sesperación los<br />

cargaba él sólo. Recuerdo entre mis hombres al Soldado Juan Carlos DÍAZ, el cuál pese a tener un hermano<br />

gravemente enfermo, fue voluntario a pelear. Luego <strong>de</strong> que nos rendimos fue enviado por los ingleses a buscar<br />

cadáveres y me dijo que muchos <strong>de</strong> los ingleses muertos eran negros. El 28 <strong>de</strong> mayo ellos venían a cuerpo<br />

<strong>de</strong>scubierto, caminando, gritando, parecían drogados. Su artillería, las fragatas y las ametralladoras tiraban por<br />

todos lados. Sentí a alguien junto a mí, era BAEZ. Me dijo — Mi fusil no tira más. Lo tomé; un impacto inglés había<br />

<strong>de</strong>strozado su mecanismo. Mientras tiraba, él me llenaba los cargadores vacíos <strong>de</strong> la ametralladora. Cuando<br />

volvimos <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> que terminó todo, nadie lo esperaba; se puso a llorar y me dijo:<br />

— Señor, ¿y ahora a dón<strong>de</strong> me voy?<br />

— A mi casa.<br />

— No, voy a tratar <strong>de</strong> ir a ver a mis padres. Todos ellos eran leales, humil<strong>de</strong>s, valientes. Cierto día el Teniente<br />

BUSTILLO estaba acorralado por un Falcon mira telescópica que lo tenía centrado.<br />

— Salte que nosotros lo cubrimos.


Un cañonazo pegó en el refugio <strong>de</strong> los soldados LUNA y SEVILLA, matándolos con su onda expansiva, pues no<br />

presentaban ningún daño físico aparente. Después atacaron los Harriers y el soldado AGUIRRE, que muchas<br />

veces había <strong>de</strong>mostrado su extraordinario valor, comenzó a tirarles con su ametralladora, levantándose ebrio <strong>de</strong><br />

coraje, agujereando la chapa <strong>de</strong>l avión pirata, aunque una bala pagó con una heroica muerte su valor. El 4 <strong>de</strong><br />

mayo, durante la noche, cambiamos <strong>de</strong> posición los cañones, que durante el día había captado el satélite<br />

"yanqui"; por lo que entraron muy confiados. El 1 er. Harrier salió humeando y el segundo fue alcanzado por la<br />

artillería y la ametralladora <strong>de</strong>l soldado VIANO, que en el mismo campo <strong>de</strong> batalla fue ascendidoa Dragoneante<br />

por el Comodoro PEDROZO. Los restos encendidos <strong>de</strong>l avión, en su carrera <strong>de</strong> muerte, hirieron y quemaron a tres<br />

soldados, uno <strong>de</strong> elios <strong>de</strong> apellido MIRANDA, que se quemó las manos y las piernas. El "Negro" BAEZ, para variar<br />

en primera línea, tuvo quemaduras en las manos. (Tenía una extensa colección <strong>de</strong> cuentos con los que nos<br />

divertía a todos). Las guardias nocturnas eran durísimas para ellos, pero nunca se quejaban. Algunos pasaban la<br />

noche bajo las alas <strong>de</strong> los aviones, previniendo <strong>de</strong> algún ataque como el <strong>de</strong> la Isla BORBON, <strong>de</strong> la Marina. La<br />

disciplina era mantenida por ellos mismos que en<strong>de</strong>rezaban al que quería torcerse. El 28 <strong>de</strong> mayo me llamó el<br />

Teniente BUSTILLO y me dijo que un comando inglés estaba próximo a un Pucará tirando con una "MAG" y le dije<br />

que les tiraran una granada STRIM antitanque. Allí, bajo el ala criolla, quedaron para siempre. En las noches<br />

oscuras, nos atábamos un hilo a un <strong>de</strong>do para comunicarnos sin hablar. El Soldado LUNA podría no haber ido<br />

perfectamente por ser casado, pero fue sin dudar. Cierto día el Cabo 1° AGÜERO, que llevaba la comida en un<br />

LAND ROVER (Jeep) a la primera línea, fue atacado por un Harrier que atravesó el techo y el vidrio <strong>de</strong>l vehículo sin<br />

herirlo. Durante el ataque final, el soldado <strong>de</strong>l Ejército, ABAL, me preguntó:<br />

— Señor, ¿qué hacemos ahora?<br />

— Rezar, tirar y si es necesario morir.<br />

- - Gracias Señor, ya estoy listo para lo que venga.<br />

Con nosotros combatieron GÓMEZ CENTURIÓN, REYES, ESTEBAN, ESTEVEZ, etc.. . Señores Oficiales <strong>de</strong>l Ejército<br />

Argentino, que fueron dignos <strong>de</strong>l General San Martín. Entre los nuestros, el Mayor ZAPORTA movió a una sección<br />

bajo el fuego enemigo mientras la fragata giraba para tirar con los cañones <strong>de</strong>l otro lado, salvándoles<br />

seguramente la vida. El Soldado CORONEL me pidió ir a la retaguardia, pues no <strong>de</strong>seaba combatir. Lo mandé a la<br />

cocina. El 4 <strong>de</strong> mayo, cuando ascendieron a su camarada, vino y me rogó: -- Señor, le pido por favor ir a la primera<br />

línea <strong>de</strong> combate. ¡Qué pasta, qué ma<strong>de</strong>ra, qué sangre la <strong>de</strong> estos Soldados criollos! Y así volvieron llenos <strong>de</strong><br />

gloria, con el <strong>de</strong>seo <strong>de</strong> servir nuevamente a la ban<strong>de</strong>ra. Allí', en nuestra querida <strong>Escuela</strong> <strong>de</strong> <strong>Aviación</strong> <strong>Militar</strong> quedó<br />

ese documento con sus firmas, aunque muchos hagan aparecer ante el mundo y el consumo interno, como niños<br />

a nuestros criollos. Junto a ellos, los bravos Soldados <strong>de</strong> la Compañía C <strong>de</strong>l Regimiento 25 <strong>de</strong>l Ejército Argentino.<br />

Más allá, en las alturas, los Soldados <strong>de</strong> la Infantería <strong>de</strong> Marina, <strong>de</strong>l BIM 5. Con San Martín, con Guemes, con<br />

Belgrano, con Necochea, pelearon con coraje, casi niños y hasta mujeres. Nuestros soldados en <strong>Malvinas</strong> NO<br />

PODÍAN SER MENOS... .


CAPITULO CAPITULO XXXIX<br />

XXXIX<br />

REFLEXIONES REFLEXIONES Y Y AN ANÉCDOTAS<br />

AN CDOTAS<br />

Entre el nerviosismo, la tensión el miedo y el patriotismo <strong>de</strong> cada día, fueron sucediendo diversos hechos<br />

que por ser graciosos o tener un fondo emotivo, quise citar para que este libro no sea sólo el simple relato<br />

<strong>de</strong> misiones <strong>de</strong> combate.<br />

Relata: Relata: Revista "Enfoques Mercedinos"<br />

HOMENAJE<br />

HOMENAJE<br />

En la <strong>de</strong>solada pista <strong>de</strong> una Base patagónica, un joven Suboficial mecánico, ha quedado esperando vanamente el<br />

regreso <strong>de</strong> "su "avión, que algo más que un par <strong>de</strong> horas antes, había inspeccionado para salir en misión <strong>de</strong><br />

combate y el tiempo fue pasando y aumentando su angustia. Esa máquina y ese piloto que el <strong>de</strong>spidió con los<br />

pulgares hacia arriba, no regresarían. Su espera, su soledad y su silencio, fueron en ese momento su íntimo y<br />

propio homenaje.<br />

Relata: Relata: Capitán D. VÁRELA (Piloto <strong>de</strong> A4B).<br />

DONDE DONDE ESTA ESTA EL EL NORTE<br />

NORTE<br />

Una vez realizado el ataque que relato en el Capítulo " A DOS MINUTOS DEL BLANCO", or<strong>de</strong>né - i Escapemos<br />

en forma individual por el norte que es el único lugar don<strong>de</strong> no hay Harriers !. Me sorprendió escuchar la voz <strong>de</strong>l<br />

Teniente GELARDI (Piloto veterano) que a gritos preguntaba ¿Y PARA DONDE QUEDA EL NORTE?, y al Teniente<br />

MAYOR que le contestaba - i PARA LA DERECHA HIJO.. . PARA LA DERECHA !.<br />

Relata: Relata: El autor.<br />

SENSIBLE<br />

SENSIBLE<br />

Cierto di'a mi esposa MIRTA, que había ido a visitarme por cuatro días en la Base <strong>de</strong>s<strong>de</strong> don<strong>de</strong> yo operaba<br />

durante la guerra <strong>de</strong> las <strong>Malvinas</strong> me dijo - i MIRA ESE POBRE PERRO HA SIDO ATROPELLADO POR UN AUTO,<br />

ALGUIEN TENDRÍA QUE MATARLO PARA QUE NO SUFRA !. (Mientras la trasladaba a su alojamiento).<br />

Inmediatamente salté en el asiento <strong>de</strong>l vehículo y prácticamente le grité - i i i NO HAY QUE MATARLO, HAY QUE<br />

CURARLO !!!<br />

Relata: Relata: El autor.<br />

MAS MAS QUE QUE AVIONES<br />

AVIONES


El Teniente AUTIERO era un oficial <strong>de</strong> total confianza. Un día, en privado para no <strong>de</strong>smoralizar al resto, le dije que<br />

no creía que <strong>de</strong> nosotros quedara vivo ninguno. — Si Señor, van a quedar varios vivos. — ¿ Porqué lo afirma con<br />

tanta seguridad ? — Porque hay más pilotos que aviones.<br />

Relata: Relata: Ten. LUCERO (Piloto <strong>de</strong> A-4C SKYHAWK)<br />

EL EL PERUANO<br />

PERUANO<br />

Durante el ataque a una Fragata, fui alcanzado por un misil, <strong>de</strong>biendo eyectarme siendo tomado prisionero por<br />

los ingleses. Debido a mi estado físico, lo que en un principio no me permitió hablar y a que tengo rasgos incaicos,<br />

los ingleses dijeron que yo era un piloto peruano, versión que hicieron circular e incluso se hicieron eco algunos<br />

medios periodísticos.<br />

Relata: elata: El autor (Piloto <strong>de</strong> A-4B)<br />

LA LA ULTIMA ULTIMA MISA MISA<br />

MISA<br />

Fue el domingo 6 <strong>de</strong> junio <strong>de</strong> 1982, por la mañana; estábamos todos los pilotos escuchando la palabra <strong>de</strong> DIOS.<br />

Junto a mí se encontraba el Ten. "Turquito" ARPARAS, quien dos días <strong>de</strong>spués daria la vida por la Patria. En el<br />

librillo que me dieron para seguir la misa, que aún conservo, leía — "Amputación, . . . Pue<strong>de</strong> ser que no<br />

comprendas el por que <strong>de</strong> lo que te sucedió. Pero en los planes <strong>de</strong> DIOS el sacrificio <strong>de</strong> uno <strong>de</strong> tus miembros,<br />

unido al sacrificio <strong>de</strong> Cristo, pue<strong>de</strong> reservarte una gran recompensa en la eternidad, si es que aceptas esto con<br />

espíritu <strong>de</strong> Fe". Como s¡ Dios lo hubiese pensado para las familias que sufrirían la pérdida <strong>de</strong> uno <strong>de</strong> sus<br />

miembros. Dijo Pió XII: "Todo sufrimiento es una fuente <strong>de</strong> apostolado". 2da. lectura: ....." y si somos hijos, somos<br />

también here<strong>de</strong>ros: Here<strong>de</strong>ros <strong>de</strong> Dios y los here<strong>de</strong>ros <strong>de</strong> Cristo, porque sufrimos con El, para ser glorificados con<br />

El".<br />

Relata: Relata: Vcom. MARIEL (Piloto <strong>de</strong> A-4B SKYHAWK).<br />

LOS LOS OLVIDADOS<br />

OLVIDADOS<br />

"El que pue<strong>de</strong> per<strong>de</strong>r todo en cualquier momento, <strong>de</strong>be dar todo en todo momento". Esta frase me fue repetida<br />

muchas veces mientras ejecutaba maniobras militares en mi vida <strong>de</strong> ca<strong>de</strong>te. Frases como esa y principalmente la<br />

formación espiritual vinieron <strong>de</strong> allí. Mientras "entraba" a mi barco, pensé en la valentía <strong>de</strong> mis numerales, pero<br />

súbitamente, en esos segundos en que se piensa lo que no se pensó en años, se presentó en mi mente algo que<br />

por obvio pasa <strong>de</strong>sapercibido. Esa valentía y esos principios no son innatos sino adquiridos, son el fruto que<br />

<strong>de</strong>jaron todos aquellos que instruyeron antes y ahora, los formadores <strong>de</strong> hombres, oficiales que están, pasaron,<br />

que no fueron partícipes <strong>de</strong> la batalla, pero que la forjaron con su ejemplo y su enseñanza, son los que formaron<br />

los cuadros <strong>de</strong> nuestra Fuerza Aérea <strong>Argentina</strong> <strong>de</strong>s<strong>de</strong> su creación hasta hoy".<br />

Relata: Relata: El autor (Piloto <strong>de</strong> A-4B).<br />

LAVIRGENCITA<br />

LAVIRGENCITA


Entre todas las cosas que nos enviaron para compartir <strong>de</strong> alguna forma nuestra lucha, recibimos una Virgencita<br />

con agua bendita <strong>de</strong> la Gruta <strong>de</strong> Lour<strong>de</strong>s. Con ella marcábamos la señal <strong>de</strong> la Cruz en la frente <strong>de</strong> aquellos que<br />

salían en misión <strong>de</strong> combate. Cuando volvimos la traje conmigo y luego se la regalé a la señora "Poly" <strong>de</strong><br />

GUADAGNINI, pues sé que estará en las mejores manos.<br />

Relata: Cabo Principal José AHUMADA (V Brigada Aérea).<br />

LA LA BANDERA<br />

BANDERA<br />

De pronto, una mañana, surgió espontáneamente la i<strong>de</strong>a <strong>de</strong> que <strong>de</strong>oiamos concretar nuestros sentimientos<br />

patrióticos en algo materia; qJe ios representara y sirviera a los pilotos que misión tras misión se fueron ganando<br />

nuestro respeto, como respaldo moral. Es así que adquirimos una ban<strong>de</strong>ra <strong>Argentina</strong> y la colocamos<br />

¡nmediatamente en un mástil, acompañándonos a partir <strong>de</strong> allí en alegrías y tristezas. Cuando se or<strong>de</strong>naba una<br />

misión y comenzaba el acelerado <strong>de</strong>spliegue <strong>de</strong>l personal <strong>de</strong> mecánicos y especialistas para cumplimentar en el<br />

mínimo tiempo la puesta en marcha <strong>de</strong> los aviones, siempre había un compañero que traía la ban<strong>de</strong>ra, a la que<br />

todos queríamos sostener, puesto que con ella saludábamos el paso <strong>de</strong> los aviones hacia el objetivo final.<br />

Sabíamos que con ella los pilotos elevaban su Espíritu, su moral y veían en sus colores la justa causa <strong>de</strong> aquella<br />

heroica gesta. Cuando los aviones comenzaban a per<strong>de</strong>rse en el horizonte y nuestra ban<strong>de</strong>ra con su flamear los<br />

<strong>de</strong>spedía, sentíamos muy <strong>de</strong>ntro que una parte <strong>de</strong> nosotros también se iba y comenzaba la angustia por el<br />

regreso. Muchos volvían y otros quedaron, por el precio sabido <strong>de</strong> la guerra, pero estoy seguro que los pilotos que<br />

dieron sus vidas, tuvieron como última visión los hermosos colores celeste y blanco <strong>de</strong> aquella Ban<strong>de</strong>ra que puso<br />

calor en los corazones <strong>de</strong> quienes la vimos flamear.<br />

Relata: Teniente MAYOR (Piloto <strong>de</strong> A-4B).<br />

UN UN ALTO ALTO ALTO HONOR<br />

HONOR<br />

Iniciábamos una más <strong>de</strong> las misiones <strong>de</strong> combate que realizamos y mientras rodábamos hacia cabecera, vimos<br />

un avión comercial cuya tripulación, pilotos, comisario y azafatas se habían alineado frente al mismo y<br />

marcialmente nos <strong>de</strong>spedían con el saludo militar. Me sentí muy honrado con su gesto.<br />

Relata: Relata: El autor (Piloto <strong>de</strong> A-4B).<br />

EL EL POLACO<br />

POLACO<br />

Yo era segundo en antigüedad (en la sucesión <strong>de</strong>l mando) <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> m-i Escuadrón, hasta que cayó con gloria el<br />

Capitán D Hugo PALAVER y me <strong>de</strong>jó la dificilísima tarea <strong>de</strong> reemplazarlo, <strong>de</strong> tratar <strong>de</strong> imitar lo que él hacía tan<br />

bien: dar confianza y tranquilidad, <strong>de</strong>mostrar idoneidad, no tener jamás un momento <strong>de</strong> abatimiento, arrastrar a<br />

los <strong>de</strong>más al combate con el ejemplo; esto me costó muchísimo, más aún cuando perdía a alguien muy querido;<br />

pero en esos momentos a escondidas, en los que me permitía la <strong>de</strong>bilidad <strong>de</strong>suna lágrima, tuve a mi lado a<br />

alguien a quien siempre tuve en mucha estima, pero nunca había conocido en su dimensión humana. Realmente<br />

su amistad me confortó y apuntaló para empren<strong>de</strong>r esa difícil tarea <strong>de</strong> proseguir la misión <strong>de</strong>l "TURCO" gran<strong>de</strong>;<br />

ese compañero era el Capitán CZERWINSKY "POLACO", piloto <strong>de</strong> Mirage III.


Relata: Relata: El autor (Piloto <strong>de</strong> A-4B).<br />

UN UN HIJO<br />

HIJO<br />

Cuando yo era instructor <strong>de</strong>l Cuerpo <strong>de</strong> Ca<strong>de</strong>tes, tuve el orgullo <strong>de</strong> contar en mi curso con el Teniente DJuan<br />

ARPARAS "TURQUITO", luego fui su instructor <strong>de</strong> vuelo en el curso <strong>de</strong> Aviadores <strong>Militar</strong>es, posteriormente fuimos<br />

<strong>de</strong>stinados ambos a la V Brigada Aérea, asiento <strong>de</strong> los aviones A-4B "SKYHAWK". Poco a poco, a medida que<br />

fueron pasando los años y llegué a conocerlo bien, comencé a sentir un afecto por él que era más el <strong>de</strong> un padre<br />

a su hijo, que el <strong>de</strong> un superior hacia su subalterno. Cierto día alguien me preguntó que opinaba <strong>de</strong> él y contesté<br />

con solo tres palabras, "Es un santo". El dfa 8 <strong>de</strong> Junio salía yo con mi Escuadrilla a cumplir la misión que relato<br />

en el Capítulo "Llévelos a la Gloria"; cuando él vino a <strong>de</strong>spedirme, me dio un abrazo y me dijo: "Señor, cuí<strong>de</strong>se<br />

mucho que tiene mujer e hijos que lo esperan y que Dios lo acompañe". Cuando aterricé me informaron que él<br />

había salido <strong>de</strong>spués que nosotros a batir el mismo blanco. No volvería nunca más. Recuerdo que el libro<br />

"Camino", <strong>de</strong> Monseñor ESCRIVA DE BALAGUER, dice en una <strong>de</strong> sus partes "QUE TU VIDA NO SEA UNA VIDA<br />

ESTÉRIL, DEJA HUELLA", y pienso que es la mejor <strong>de</strong>scripción <strong>de</strong>l "Turquito". Por eso digo que en esta guerra perdí<br />

un hijo y no me lamento, por no contra<strong>de</strong>cirme, ya que muchas veces dije que empleamos tanto tiempo en llorar<br />

lo que per<strong>de</strong>mos, que nos olvidamos <strong>de</strong> agra<strong>de</strong>cer lo que tuvimos.<br />

Relata: elata: El autor (Piloto <strong>de</strong> A-4B).<br />

CAUSAS CAUSAS PARA PARA VOLVERSE<br />

VOLVERSE<br />

Mientras cruzaba el mar hacia mi objetivo, cuando no tenía reabastecimiento en vuelo o luego <strong>de</strong> éste, <strong>de</strong>jaba<br />

vagar mis pensamientos hasta que llegábamos a las "primeras piedras", como les <strong>de</strong>cíamos a los islotes que<br />

están al Oeste <strong>de</strong> la Gran Malvina. Pensaba por ejemplo en todas las posibilida<strong>de</strong>s que tenía para volverme o no<br />

cumplir la misión; por ejemplo si me quebraba una pierna, o me enfermaba, o se rompía el avión, o se ponía mala<br />

la meteorología o el Comandante anulaba la or<strong>de</strong>n; pero cuatro causas impedían que todo esto se concrete, la<br />

primera que pese a mi rutinaria gripe anual en el Sur tenía una salud <strong>de</strong> hierro; la segunda porque se ve que los<br />

mecánicos me tenían cariño, pues me daban unos aviones impecables que no fallaban nunca; la tercera que el<br />

comando no me tenía en cuentapara las misiones anuladas y la cuarta que mi conciencia no me hubiese<br />

permitido vivir en paz nunca más. Pensaba también en mis Instructores, el Mayor DIGIER,el My. PONCE, el My.<br />

MACLAY, el My. ABALOS ALIAGA y el My. ASLA cuando fui ca<strong>de</strong>te; el Mayor MAGNANO y el My. ACOSTA como<br />

instructores <strong>de</strong> vuelo en el mini CAM y Curso <strong>de</strong> Aviadores <strong>Militar</strong>es respectivamente; el Mayor "PICHO"<br />

FERNANDEZ, mi jefe <strong>de</strong> Escuadrilla en mi primer año <strong>de</strong> A-4B y por último el Capitán D HUGO PALAVER que fue mi<br />

último Jefe, antes <strong>de</strong> que yo alcanzara ese cargo. Sinceramente a veces no sabía si agra<strong>de</strong>cerles o insultarlos;<br />

pero cuando volvía hacia el Continente, fuera ya <strong>de</strong>l alcance <strong>de</strong> los interceptores y veía a lo lejos nuestro suelo<br />

con la excitación <strong>de</strong> la batalla recién vivida, el convencimiento <strong>de</strong> la justicia <strong>de</strong> nuestra causa y la satisfacción <strong>de</strong>l<br />

<strong>de</strong>ber cumplido, me era chico el pecho para encerrar un corazón lleno <strong>de</strong> satisfacción.<br />

Rela Relata: Rela Relata:<br />

ta: Teniente D. Vicente AUTIERO (Piloto <strong>de</strong> A-4B).<br />

UNA UNA CAUSA CAUSA MAS<br />

MAS


La vida es una sucesión <strong>de</strong> recuerdos <strong>de</strong> cosas vividcis y una preparación para llegar a DIOS, pero hay algunas<br />

que quedan profundamente grabados, quizás por las circunstancias que las ro<strong>de</strong>an. El 11 <strong>de</strong> Mayo <strong>de</strong> 1982,<br />

compartí con el Grupo <strong>de</strong> Pilotos y mecánicos <strong>de</strong> nuestro Sistema <strong>de</strong> Armas, la alegría <strong>de</strong>l nacimiento <strong>de</strong> mi<br />

segunda hijita, la que recibió el nombre <strong>de</strong> Paula Beatriz. En ese momento, pese a tenerlas muy lejos, sentía mis<br />

tres muleres muy cerca <strong>de</strong> mí, pues conocía <strong>de</strong>l valor <strong>de</strong> las que quedaron al Norte; que con fortaleza y silencio<br />

nos infundieron confianza y valor. Solo la almohada supo <strong>de</strong> sus lágrimas. Entre los que me felicitaban, escuché<br />

al Teniente ROBLEDO que me <strong>de</strong>cía - i i QUE SEA ESTA UNA CAUSA MAS POR QUE LUCHAR !!.<br />

Relata: Relata: El autor (Piloto <strong>de</strong> A-4B SKYHAWK).<br />

LAGRIMAS LAGRIMAS DE DE VALIENTES<br />

VALIENTES<br />

Un día, aproximadamente d las 21:00 horas, me encontré con mi compañero <strong>de</strong> Promoción Capitán BREDESTON,<br />

piloto <strong>de</strong> Canberra, que se estaba preparando para salir en misión nocturna. Era increíble el entusiasmo que<br />

<strong>de</strong>mostraba y sus <strong>de</strong>seos <strong>de</strong> combatir. Próximo al <strong>de</strong>spegue, recibió la or<strong>de</strong>n <strong>de</strong> cancelar su vuelo por<br />

meteorología adversa en el blanco; para mi sorpresa, vi que las lágrimas comenzaban a rodar por su rostro, le<br />

pregunté que le pasaba y me dijo que el hecho <strong>de</strong> que no saliera, podía disminuir el prestigio <strong>de</strong> su Escuadrón.<br />

Unos días <strong>de</strong>spués, con el Capitán PERROTO (Piloto <strong>de</strong> C-130), nos enteramos que salía en una nueva misión<br />

, por lo que pusimos el <strong>de</strong>spertador a las 04:30 hs. en que estimábamos, estaría durmiendo y con la misión<br />

cumplida.<br />

Fuimos a la Sala <strong>de</strong> Operaciones, hablamos con el Comodoro MIR, quien nos dijo que habían logrado un<br />

excelente resultado, por lo que nos dirigimos a su habitación. Estaba durmiendo con la tranquilidad <strong>de</strong>l <strong>de</strong>ber<br />

cumplido reflejada en su rostro, por lo que tomamos una bota <strong>de</strong> vuelo cada uno, y suavemente lo felicitamos,<br />

como es la costumbre y sin lástima.<br />

SORPRESA<br />

SORPRESA<br />

Relata: Relata: Relata: 1er. Teniente D. Francisco NAVARRO (Piloto <strong>de</strong> PUCARÁ).<br />

PUERTO PUERTO ARGENTINO<br />

ARGENTINO<br />

ARGENTINO<br />

Durante muchos días nos atacaron los ingleses tirando una bomba-"sobre el hombro" como <strong>de</strong>cíamos nosotros ya<br />

que tiraban lejos <strong>de</strong>l alcance <strong>de</strong> nuestra artillería y en el momento en que iniciaban un ascenso. Esta mañana<br />

estaba yo muy ocupado, limpiando la cabina <strong>de</strong> mi PUCARÁ cuando me sorprendió ver, próximo a la cabecera <strong>de</strong><br />

la pis'ta 26; florecer dos inmensos hongos negros, con fuego interno. Sabiendo que estaba en el medio <strong>de</strong>l<br />

objetivo, que eran los aviones, corrí para alejarme <strong>de</strong> ellos. En ese momento, vi tres Harrier que aparecían<br />

rasantes <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la ciudad hacia el Aeropuerto, disparando sus cañones. Cuando estaban junto a mí y un poco al<br />

costado, lanzaron sus bombas. Un pozo me encontró a mí, pues resbalé en el barro y caí <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> él, en el<br />

instante en que comenzaban a explotar. Cuando pasaba la onda expansiva <strong>de</strong> la bomba, sentí que mi cuerpo por<br />

un instante se separaba <strong>de</strong>l suelo. Mi birrete cayó <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> un charco y mientras escuchaba silbar las esquirlas<br />

sobre mi cabeza, lo único que pensaba era: -- i se me está empapando el birrete !. Evasión mental le dicen, pues<br />

no había tenido en cuenta que todo mi uniforme <strong>de</strong> vuelo, incluyéndome a mí, estaba empapado.


MU MUJERES MU<br />

ERES EJEMPLARES<br />

Un oficial escribió a la señora <strong>de</strong>l Vicecomodoro DE LA COLINA, tratando <strong>de</strong> confortarla por la pérdida <strong>de</strong> su<br />

esposo en combate, ella le contestó con serenidad y firmeza, orgullosa porque él había sabido dar lo máximo que<br />

tiene un hombre en esta tierra, la vida, <strong>de</strong>fendiendo a su Patria. La señora <strong>de</strong>l 1er. Teniente D Luciano<br />

GUADAGNINI, muerto en acción, a dos meses <strong>de</strong> haberlo perdido dirigía el coro <strong>de</strong> los niños <strong>de</strong> la V Brigada Aérea,<br />

con la aceptación <strong>de</strong> la voluntad dé Dios que distingue a las personas que realmente dan amor.<br />

Relata: Relata: Teniente LUDUEÑA (Piloto <strong>de</strong> Helicóptero).<br />

CRISTIANAMENTE<br />

CRISTIANAMENTE<br />

El 4 <strong>de</strong> Mayo, próximo al aterrizaje, cuando volábamos sobre un cementerio, nos dieron la alerta roja. Mientras<br />

intentábamos aterrizar <strong>de</strong>sesperadamente, los vimos aparecer ante nosotros, eran tres pajarracos negros,<br />

Harriers. Tocó el helicóptero en el suelo y salimos corriendo para buscar una protección. A continuación<br />

escuchamos una ensor<strong>de</strong>cedora explosión, luego el ruido <strong>de</strong> turbinas que se alejaban. Retornamos al helicóptero<br />

que había permanecido en marcha y <strong>de</strong>spegamos pensando lo peor, ya que veíamos una <strong>de</strong>nsa cortina <strong>de</strong> humo<br />

<strong>de</strong>l lado <strong>de</strong> nuestra Base, pero el saldo negativo era para ellos, pues el humo salía <strong>de</strong> uno <strong>de</strong> sus aviones que<br />

había sido <strong>de</strong>rribado. Rescatamos el cuerpo <strong>de</strong>l piloto que se encontraba intacto a unos 70 metros, enterrándolo<br />

como un ser humano que era, con un pequeño responso a cargo <strong>de</strong>l sacerdote y honores militares <strong>de</strong> tropa<br />

formada ante su tumba.<br />

Relata: Relata: El autor (Piloto <strong>de</strong> A-4B SKYHAWK).<br />

PENSANDO PENSANDO PENSANDO EN EN SUMO<br />

SUMO<br />

Cuando era instructor <strong>de</strong>l Cuerpo <strong>de</strong> Ca<strong>de</strong>tes, estaba un día enseñando instrucción militar y les conté que los<br />

luchadores <strong>de</strong> una lid oriental llamada SUMO, basan su fuerza en el <strong>de</strong>do gordo <strong>de</strong>l pie, sobre el que <strong>de</strong>ben<br />

apoyar sus inmensos cuerpos, tratando <strong>de</strong> <strong>de</strong>splazar al contrincante fuera <strong>de</strong> un círculo, tomándolo <strong>de</strong>l cinturón.<br />

Los gran<strong>de</strong>s campeones tratan <strong>de</strong> mantenerse continuamente apoyados sobre ellos y quienes logran una mayor<br />

concentración llegan a hacer un agujero en sus sandalias. Les dije que un ca<strong>de</strong>te <strong>de</strong> la FUERZA AEREA <strong>de</strong>bía<br />

tratar <strong>de</strong>, en su profesión, lograr un estado <strong>de</strong> concentración semejante, llegando a estar permanentemente<br />

pensando en ser mejores y brindarse a los <strong>de</strong>más. El ca<strong>de</strong>te <strong>de</strong> II año Carlos Julio CASTILLO, era un ca<strong>de</strong>te que no<br />

se <strong>de</strong>stacaba, pero poco a poco noté que comenzaba a sobresalir, hasta que un dfa se me acercó y me dijo:<br />

— "Señor, he logrado vivir pensando en SUMO" — y creo que lo logró, pues a partir <strong>de</strong> allí su vida fue un ejemplo,<br />

siendo testigo hasta en la muerte <strong>de</strong> la sangre que llevan los verda<strong>de</strong>ros Argentinos en las venas; heredada <strong>de</strong><br />

los Grana<strong>de</strong>ros <strong>de</strong> San Martín, <strong>de</strong> los soldados <strong>de</strong> Belgrano, <strong>de</strong> los Cazadores <strong>de</strong> Necochea.<br />

Relata: Relata: El autor (Piloto <strong>de</strong> A-4B SKYHAWK).<br />

EL EL PEOR PEOR DDÍA<br />

D A DE DE MI MI VIDA<br />

VIDA<br />

Al día siguiente <strong>de</strong> que ataqué por un error con mi escuadrilla al "Formosa", nos hizo formar el Brigadier CAMBLOR<br />

y nos dijo el resultado <strong>de</strong>l ataque, en el que habíamos averiado un buque propio. Inmediatamente sentí como si


me hubieran pegado un golpe con un martillo en la nuca y me <strong>de</strong>smayé. Mientras estaba <strong>de</strong>svanecido veía pasar<br />

como una película en cámara lenta <strong>de</strong> mi ataque, en el que los proyectiles trazantes <strong>de</strong> mis cañones se<br />

introducían en los compartimentos rebotando hacia todos lados y creando una imagen impresionante. Cuando<br />

reaccioné, estaba junto a miel Capitán Médico Fernando ROMERO, mi amigo, que estaba auxiliándome. Mientras<br />

yo le <strong>de</strong>cía que si no lograba limpiar ese tremendo error con mi posterior actuación, pediría la separación <strong>de</strong><br />

vuelo; él me <strong>de</strong>cía que sólo no se equivoca quien nunca hacía nada. Tiempo <strong>de</strong>spués me volvía a encontrar con el<br />

Brigadier CAMBLOR, quien afectuosamente me puso una mano en el hombro y me dijo que me felicitaba por mi<br />

actuación.<br />

Le contesté — "Señor Brigadier, es que tenía que levantar un aplazo".<br />

NOTA: En el ataque mencionado no hubo víctimas, sólo por un milagro <strong>de</strong> Dios.<br />

EJEMPLO EMPLO<br />

El My. VECHI <strong>de</strong> la F.A.A. se encontraba en el Perú realizando un curso, pero se las ingenió para llegar hasta<br />

nuestra Base <strong>de</strong> Operaciones por dos días. Cuando llegó estaba por salir una misión y faltaba un tripulante que<br />

había ido a buscar su cartera <strong>de</strong> navegación. Sin dudarlo, y pese a estar <strong>de</strong>shabilitado en el avión, comenzó a<br />

cambiarse para ocupar el lugar <strong>de</strong>l ausente. El J.efe <strong>de</strong> Escuadrón impidió que salga porque estaba<br />

<strong>de</strong>sentrenado, pero sirvió para que su ejemplo nos llevase a luchar con más ganas que nunca.<br />

Relata: Relata: Relata: El autor (Piloto <strong>de</strong> A-4B).<br />

TOCANDO TOCANDO LA LA GUITARRA<br />

GUITARRA<br />

El di'a 8 <strong>de</strong> Junio por la noche me encontraba en un rincón <strong>de</strong> la "Casita <strong>de</strong> Bariloche" tocando la guitarra cuando<br />

se me acercó el Alférez DELLEPIANE y me dijo — Hoy hemos perdido a tres <strong>de</strong> nuestros mejores camaradas y<br />

usted está lo más tranquilo tocando la guitarra, pensé que significaban algo para usted. Evi<strong>de</strong>ntemente el no<br />

podía leer en mi interior, pues a<strong>de</strong>más <strong>de</strong> apreciarlos muchísimo, entre ellos estaba el Teniente JUAN JOSÉ<br />

ARRAPAS, a quien quería como a un hijo.<br />

— "Piano", yo <strong>de</strong>bo actuar así — le contesté y le expliqué que siendo el más antiguo no <strong>de</strong>bía <strong>de</strong>mostrar<br />

abatimiento aunque fuese el último hombre, pues nuestro <strong>de</strong>ber y la causa que <strong>de</strong>fendíamos eran más<br />

importantes que nuestras propias vidas. Creo que me entendió.<br />

Relata: Relata: El autor (Piloto <strong>de</strong> A-4B).<br />

MOUSE MOUSE DE DE DE CHOCOLATE<br />

CHOCOLATE<br />

En Bariloche, mi ciudad <strong>de</strong> origen, viven Esteban y Barco, el primero es mi cuñado y el segundo un gran amigo.<br />

Ambos se presentaron inmediatamente, junto con mi padre y mi hermano menor, <strong>de</strong> voluntarios y mientras<br />

molestaban a medio mundo para que los llevaran al frente <strong>de</strong> combate, preparaban inmensas encomiendas para<br />

mantenerme el espíritu alto, ya que ellos esperaban <strong>de</strong> rhf por lo menos el doble <strong>de</strong> lo que podía dar. En una <strong>de</strong><br />

esas compartidas encomiendas me llegó un mouse <strong>de</strong> chocolate hecho con mucho cariño por Ana, la novia <strong>de</strong>


Barco; venía <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> un recipiente <strong>de</strong> plástico. Convidé chocolates <strong>de</strong> Bariloche, convidé alfajores, convidé<br />

turrones, pero al mouse me fui con una cuchara a un rincón a comérmelo egoístamente solo. Cuando no hubo<br />

quedado nada, observé que el recipiente que lo contenía podía serme <strong>de</strong> utilidad, pero luego pensé — Yo vivo<br />

guardando como las ardillas cosas que nunca uso, mejor lo tiro a este plastiquito. En la próxima encomienda me<br />

llegó una carta <strong>de</strong> Ana que me <strong>de</strong>cía: ". . . Por favor <strong>de</strong>volveme el recipiente hermético que contenía al mouse,<br />

pues permite mantener los alimentos en buen estado y tiene propieda<strong>de</strong>s térmicas.<br />

Relata: Relata: El autor (Piloto <strong>de</strong> A-4B).<br />

RESPUESTA<br />

RESPUESTA<br />

En la "Casita <strong>de</strong> Bariloche" (lugar en don<strong>de</strong> habitaban los pilotos <strong>de</strong> A-4B) tratábamos <strong>de</strong> pasar con buen ánimo<br />

los momentos <strong>de</strong> <strong>de</strong>scanso, tocando la guitarra o jugando a algún <strong>de</strong>porte violento como el truco o ajedrez,<br />

espíritu que costaba cada vez más mantener a medida que aumentaban las bajas. Como muchas veces, el libro<br />

"Los cinco minutos <strong>de</strong> Dios" me dio fortaleza.<br />

. . . "En el tiempo <strong>de</strong> la poda, pareciera como si el árbol <strong>de</strong>rramara lágrimas; el insensible podador corta las ramas<br />

sin compasión <strong>de</strong>speja al árbol <strong>de</strong> sus brazos y ralea su ramaje sin piedad. Por cada una <strong>de</strong> las heridas el árbol<br />

<strong>de</strong>stila la sangre <strong>de</strong> su queja o <strong>de</strong> su protesta, el alma <strong>de</strong>l árbol, como si levantara el grito contra semejante<br />

atropello. Sin embargo, ello sirvió para que esa alma se contrajera, se replegara durante largos días <strong>de</strong> invierno y<br />

así no fuera alcanzada allá en la interioridad <strong>de</strong> su savia, por el frío que mata. Luego vino la primavera y los brotes<br />

anunciaron que el árbol no sólo no estaba muerto, sino que había recuperado nueva vida, nueva pujanza, nueva<br />

fecundidad en flores y frutas. En tu vida el dolor <strong>de</strong>sempeña el papel <strong>de</strong>l podador, tú podrás tal vez quejarte con<br />

pesimismo; pero si tenes Fe, si unes tu dolor al dolor re<strong>de</strong>ntor <strong>de</strong> Cristo, te podrá servir <strong>de</strong> nueva fuerza en tu<br />

vida"<br />

Relata: Relata: El autor (Piloto <strong>de</strong> A-4B).<br />

LICENCIA<br />

LICENCIA<br />

Durante la guerra nos dieron tres días a cada uno para ir a ver a nuestras familias. Por ser el más antiguo <strong>de</strong> los<br />

pilotos que combatían en mi Escuadrón, <strong>de</strong>cidí irme en último lugar. Me correspondió el 14 <strong>de</strong> junio <strong>de</strong> 1982, día<br />

<strong>de</strong> la rendición. Despegué y <strong>de</strong> pronto, por los auriculares <strong>de</strong> mi casco escuché las voces <strong>de</strong> los pilotos que<br />

quedaban en nuestra Base <strong>de</strong> asiento que me <strong>de</strong>spedían con una vieja canción con ruido a turbina que dice entre<br />

otras cosas : "AVIACIÓN ARGENTINA, plantel <strong>de</strong> juventud, a la Patria entregada con cálido fervor, elevemos las<br />

alas en el inmenso azul, cual un cóndor sereno, en todo su esplendor. El rugir <strong>de</strong>l motor, cual canción <strong>de</strong> nuestra<br />

Fe, acelere el latido <strong>de</strong> nuestro corazón, recordándonos siempre que es nuestro <strong>de</strong>ber, por la Patria morir, con<br />

altura y valor..."<br />

En seguida comenzó la escuadrilla <strong>de</strong>l 1er. Teniente FILIPPINI y el Teniente AUTIER.O a preparar una misión, la<br />

que se suspendió por la noticia <strong>de</strong> la rendición.<br />

HALC HALCÓN<br />

HALC


Esta <strong>de</strong>nominación viene <strong>de</strong>l avión A-4, que fue bautizado por sus constructores como SKY-HAWK (Halcón <strong>de</strong>l<br />

Cielo), <strong>de</strong>l que sus tripulantes heredaron ese apelativo, el que en la Guerra se extendió a los pilotos <strong>de</strong> toda la<br />

FUERZA AEREA ARGENTINA.


Relata: Relata: El autor, con la colaboración <strong>de</strong>l Mayor DAVILA.<br />

CAPITULO CAPITULO XL<br />

"CONCLUSI "CONCLUSIÓN<br />

"CONCLUSI N "<br />

Por esta tierra se pasa una sola vez y uno elije la forma <strong>de</strong> vivir. No es importante cuando morimos, sino porqué<br />

morimos, y sobre todo, cómo hemos vivido. Dice el libro "Los cinco minutos <strong>de</strong> Dios" — Si tienes la razón ¿ porqué<br />

gritas?, ¿La razón necesita <strong>de</strong> los gritos para ser reconocida y aceptada?. Entonces la razón que tienes es muy<br />

débil; no necesitaría <strong>de</strong> aillos, ni <strong>de</strong> otra cosa, s! fuera suficientemente fuerte. Deje mos la falsa euforia,<br />

<strong>de</strong>tengámonos y meditemos. Estamos <strong>de</strong>masiado acostumbrados a creer sólo en lo que más nos llena los ojos y<br />

oídos, pero eso no es lo profundo. No fueron fanáticos suicidas quienes cayeron en combate en nuestras Islas<br />

<strong>Malvinas</strong>, levantando bien alto nuestra Ban<strong>de</strong>ra <strong>Argentina</strong> y el prestigio <strong>de</strong> nuestra Fuerza Aérea. Ellos murieron<br />

en una actitud razonada, conscientes <strong>de</strong> que las causas por las que luchaban eran más importantes que su<br />

propia vida, y que el <strong>de</strong>jar solos a sus familiares se justificaba, pues morían por las familias <strong>de</strong> todos los<br />

Argentinos. Sus nombres son hoy una ban<strong>de</strong>ra que nos impulsa a ser mejores y a merecer su sacrificio. Los<br />

santos fueron hombres como nosotros; San Martín, Beigrano, Necochea, eran hombres, ¿por qué no po<strong>de</strong>mos<br />

nosotros llevar una vida santa y <strong>de</strong>dicada al bien <strong>de</strong> la Patria?. Muchas veces cuando veo la ambición <strong>de</strong> po<strong>de</strong>r<br />

que consume a algunos, el afán <strong>de</strong> enriquecer, el vicio, la corrupción y la falta <strong>de</strong> amor por Dios y por la Patria, me<br />

pregunto: ¿para qué les servirá cuando se mueran?.<br />

La Patria nos necesita ahora, y no en palabras, en hechos. No importa como hayamos actuado hasta hoy, sino<br />

como actuaremos a partir <strong>de</strong> mañana; con espíritu <strong>de</strong> servicio. DAR, esa palabra que nos ennoblece y construye.<br />

Dios es quien nos guiará hacia una vida digna y a nuestra propia dignidad. Recordamos en este libro a quienes<br />

cayeron, pero sin lágrimas, con orgullo, con la íntima alegría <strong>de</strong> saber que nuestros héroes fueron dignos <strong>de</strong> lo<br />

que nosotros, su Nación, sus mujeres y sus hijos esperábamos <strong>de</strong> ellos.<br />

Ese espíritu se vé en la carta que el mayor FALCO.NIER <strong>de</strong>jó para ser entregada a sus hijos en caso <strong>de</strong> ser<br />

<strong>de</strong>rribado,- <strong>de</strong> fecha 30 <strong>de</strong> mayo <strong>de</strong> 1982:<br />

"A Ñoqui \ Mononi: Su padre no los abandona, simpiemente dio su vida por los <strong>de</strong>más, por uste<strong>de</strong>s y vuestros<br />

hijos . . . \ ios que here<strong>de</strong>n mi Pátria.Les va a faltar mi compañía y mis consejos, pero les <strong>de</strong>jo la mejor compañía<br />

y el más sabio consejero: A Dios; afórrense a El, sientan que lo aman, hasta que les estalle el pecho <strong>de</strong> alegría, y<br />

amen limpiamente, es la única forma <strong>de</strong> vivir la "buenavida" y cada vez que luchen para no <strong>de</strong>jarse tentar para no<br />

alejarse <strong>de</strong> El, para no aflojar, yo estaré junto a uste<strong>de</strong>s, codo a codo aferrando el amor. Sean una "Familia"<br />

respetando y amando a mamá, aunque le vean errores, sean siempre "uno", y siempre unidos. Les <strong>de</strong>jo un<br />

apellido, FALCONIER, para que lo lleven con orgullo y dignifiquen, no con dinero, ni con bienes materiales, sino<br />

con cultura, con amor, con la belleza <strong>de</strong> las almas limpias, siendo cada vez más hombres y menos animal, y por<br />

sobre todo, enfrentando la vida con la verdad, asumiendo responsabilida<strong>de</strong>s aunque les cueste sufrir sinsabores,<br />

o la vida misma. Les <strong>de</strong>jo:


Muy poco en el or<strong>de</strong>n material.<br />

Un apellido, "FALCONIER"<br />

A DIOS (ante quien todo lo <strong>de</strong>más no importa)<br />

Papá.<br />

P.D.: P.D.: Para que mis hijos lo lean <strong>de</strong>s<strong>de</strong> jóvenes y hasta que sean viejos, porque, a medida que pasan los años,<br />

adquieren experiencia o tengan hijos, le irán encontrando nuevo y más significado a estas palabras que escribí<br />

con amor <strong>de</strong> padre".<br />

El era uno <strong>de</strong> los muertos <strong>de</strong> nuestra Fuerza Aérea, ¿<strong>de</strong>bemos llorarlo o envidiarlo?.<br />

Aquellos que quedaron en nuestras <strong>Malvinas</strong>, por Dios y por la Patria fueron:<br />

1 - Vicecomodoro D Rodolfo Manuel DE LA COLINA<br />

2 — Vicecomodoro D Hugo César MEISNER<br />

3 -Mayor D Juan José Ramón FALCONIER<br />

4 - Capitán D Hugo Ángel <strong>de</strong>l Valle PALAVER<br />

5 -Capitán D Jorge Osvaldo GARCÍA<br />

6 -Capitán D Fernando Juan CASADO<br />

7 - Capitán D Rubén Héctor MARTEL<br />

8 - Capitán D Gustavo Argentino GARCÍA CUERVA<br />

9 -Capitán D Carlos Eduardo KRAUSE<br />

10 -Capitán D Marcelo Pedro LOTUFO<br />

11 -Capitán D Mario GONZÁLEZ<br />

12 - Primer Teniente D Oscar Manuel BUSTOS<br />

13 - Primer Teniente D Jorge Daniel VÁZQUEZ<br />

14 — Primer Teniente D Daniel Fernando MANZOTTI<br />

15 - Primer Teniente D Luciano GUADAGNININI<br />

16 - Primer Teniente D Fausto GAVAZZI<br />

17 - Primer Teniente D Omar Jesús CASTILLO<br />

18 - Primer Teniente D José Leónidas ARDILES<br />

19 - Primer Teniente D Danilo Rubén BOLZAN<br />

20 — Primer Teniente D Luis María José CASTAG NARI<br />

21 - Teniente D Juan Domingo BERNHARDT<br />

22 - Teniente D Pedro Ignacio BEAN<br />

23 -Teniente D Héctor Ricardo VOLPON I<br />

24 -Teniente D Daniel Antonio JUKIC<br />

25 -Teniente D Mario Víctor NI VOLI<br />

26 -Teniente D Miguel Ángel GIMÉNEZ<br />

27 — Teniente D Jorge Eduardo CASCO


28 -Teniente D Jorge Rubén IBARLUCEA<br />

29 - Teniente D Eduardo Jorge Raúl DE IBAÑEZ<br />

30 -Teniente D Jorge Alberto BONO<br />

31 -Teniente D Juan José ARRAPAS<br />

32 - Teniente D Néstor Edgardo LÓPEZ<br />

33 - Teniente D Carlos Julio CASTILLO<br />

34 -Teniente D Jorge Ricardo PARIAS<br />

35 -Alférez D Jorge Alberto VÁZQUEZ<br />

36 - Alférez D Mario Luis VALKO (quien cayó en el Continente durante un vuelo <strong>de</strong> reconocimiento<br />

en su PUCARÁ).<br />

37 - Suboficial Principal D Julio Jesús LASTRA<br />

38 - Suboficial Ayudante D Manuel Alberto ALBELOS<br />

39 — Suboficial Ayudante D Inocencio Tomás LUNA<br />

40 — Suboficial Auxiliar D Diego Antonio MARIZZA<br />

41 - Cabo Principal D Miguel Ángel CARDONE<br />

42 - Cabo Principal D Domingo Carlos CANTEZANO<br />

43 - Cabo Principal D Mario DUARTE<br />

44 - Cabo Principal D Juan Antonio RODRÍGUEZ<br />

45 - Cabo Primero D Miguel Ángel CARRIZO<br />

46 - Cabo Primero D José Alberto MALDONADO<br />

47 - Cabo Primero D Agustín Hugo MONTANO<br />

48 - Cabo Primero D José Luis PERALTA<br />

49 - Cabo Primero D Andrés Luis BRASHICH<br />

50 - Cabo D Héctor Hugo VARA<br />

51 - Soldado Clase 1963 D Guillermo GARCÍA<br />

52 - Soldado Clase 1963 D Héctor BORDÓN<br />

53 - Sol dado Clase 1963 D Mario LUNA<br />

54 - Soldado Clase 1963 D Luis SEVILLA<br />

55 - Soldado Clase 1963 D Héctor Walter AGUÍRRE<br />

Ellos murieron en combate.. . porque eligieron su muerte, honrando a la Fuerza Aérea y a la Patria, pese a que<br />

existen hombres que preten<strong>de</strong>n ensuciar su memoria y quitarles lo que obtuvieron a costa <strong>de</strong> su propia vida.<br />

Quiero terminar este libro, con partes <strong>de</strong> dos cartas enviadas por el Primer Teniente D Jorge Daniel VÁZQUEZ,<br />

quien murió en el ataque al "INVENCIBLE", <strong>de</strong> fecha 7 y 19 <strong>de</strong> mayo <strong>de</strong> 1982, la última 11 días antes <strong>de</strong> su<br />

muerte.<br />

"Al Primer Teniente GABARI; Gordo (7 <strong>de</strong> Mayo). No te preocupes si te toca vivir esto <strong>de</strong> otra manera, lo<br />

importante es saber que esta guerra, es realmente justa y verda<strong>de</strong>ra y que <strong>de</strong>trás <strong>de</strong> una <strong>de</strong>cisión está todo el<br />

País, los que tiran y los que no tiran, a<strong>de</strong>más, cada piloto muerto, herido o <strong>de</strong>rribado, es parte realmente nuestra.


No le aflojes, esto recién empieza y creo que faltan días difíciles. . . y solamente estamos con la mente en dar en<br />

el blanco como siempre quisimos.. ."<br />

"Estimado amigo (19 <strong>de</strong> mayo) ... Te cuento que hace hoy 51 días que estoy aquí sin ver a mi familia, realmente<br />

se está haciendo duro, aunque mantenemos el ánimo alto, la única preocupación es la familia, pero que le vamos<br />

a hacer, no po<strong>de</strong>mos menos que agra<strong>de</strong>cer a Dios este momento que nos toca vivir tan trascen<strong>de</strong>nte para la<br />

Patria. A veces me pongo a pensar y me parece mentira que hayamos tenido el valor suficiente para tomar esta<br />

<strong>de</strong>cisión". Es indudable que ya no cabía otra, pero es indudable también que hasta ahora solamente habíamos<br />

dado muestras <strong>de</strong> tibieza. Es duro, hemos vivido días difíciles al per<strong>de</strong>r camaradas y hemos llorado contra la<br />

almohada, pero al otro día, listos para otra misión. Realmente lo <strong>de</strong> Casco y Farías fue un golpe bajo para<br />

nosotros y eso les ocurrió por ir más allá <strong>de</strong>l cumplimiento <strong>de</strong>l <strong>de</strong>ber. . . Continuaron con la misión más allá <strong>de</strong><br />

todo límite <strong>de</strong> la meteorología, estaban volando a 50 pies (15 metros) a menos, ese era el techo <strong>de</strong> nubes, 50<br />

pies, NADA, es lo mismo que nada. Ese día CAFARATTI y yo también estábamos volando, pero <strong>de</strong>cidimos volver,<br />

era prácticamente imposible continuar; perdimos dos excelentes Oficiales y nos duele el corazón, pero no<br />

po<strong>de</strong>mos <strong>de</strong>jar <strong>de</strong> sentir un gran orgullo <strong>de</strong> haber conocido tipos como ellos que se jugaron más allá <strong>de</strong>l <strong>de</strong>ber,<br />

una muerte para mí, llena <strong>de</strong> gloria ...<br />

. . . Prácticamente hablamos todos los días, para que las mujeres estén un poco más tranquilas y ya se nos han<br />

acostumbrado mal, pero que le vamos a hacer, a veces pienso que ellas lo están sufriendo más que nosotros y te<br />

aseguro que es lo único que más me preocupa, la familia. Pero nos da ánimo saber que nuestros hijos, podrán<br />

tener un ejemplo vivo y trascen<strong>de</strong>nte y que por una vez estamos haciendo lo que <strong>de</strong>seamos. Esto nos <strong>de</strong>be servir<br />

"Gordo", <strong>de</strong> una manera que no la <strong>de</strong>bemos olvidar, para que <strong>de</strong>jemos el bolu<strong>de</strong>o <strong>de</strong> lado, y pongamos las cosas<br />

en su lugar, sobre todo los hombres en su lugar, los que sirven y los que no ... que se vayan.<br />

Ruego a Dios realmente para que todo esto no caiga en el olvido y sirva para que cada muerte nos haga<br />

recapacitar.. . Sin dudas que estoy motivado para <strong>de</strong>cir esto y lo digo yo y todos los que estamos aquí, realmente<br />

sufriría mucho si esto no llegase a servir <strong>de</strong> nada.. . Siempre nos acordamos <strong>de</strong> todos los que están en<br />

situaciones difíciles, como SPOTH o GUSHA en la Isla, en fin, BASILIO que también está por allí, recemos por ellos<br />

y por toda la promoción. . ."<br />

(De la carta <strong>de</strong>l 7 May 82) . . . Chau mi querido amigo, hasta pronto y porque no " i UN VIVA LA PATRIA !" y un " i<br />

GRACIAS A DIOS !" por pertenecer a la Fuerza Aérea... ."<br />

DEL DEL DEL AUTOR: AUTOR: AUTOR: Argentinos, a vuestras conciencias les habló un piloto <strong>de</strong> A-4C SKYHAWK, que murió heroicamente en<br />

combate y les pi<strong>de</strong> que su muerte no haya sido en vano.

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