doctrina social cristiana - Ordo Socialis
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formas razonables del salario por rendimiento, hay que tener en cuenta los peligros de los<br />
nuevos métodos de pago salarial. Numerosas investigaciones han mostrado que sobre todo la<br />
difícil calculabilidad de los salarios que, a través de la carga más fuerte introducida por el<br />
acuerdo del estudio científico del trabajo y al estímulo de rendimiento que reside en el sistema<br />
“Refa”, conducen tanto a un descontento personal de los trabajadores, sobre todo de las<br />
trabajadoras, como a tensiones <strong>social</strong>es, también entre los trabajadores mismos; por ejemplo,<br />
frente al destajista o entre asalariados.<br />
b) La fijación del salario dentro de la empresa supone ya una decisión acerca de la<br />
distribución macroeconómica entre capital y trabajo. El intento de calcular causalmente las<br />
partes fijas del producto <strong>social</strong> que corresponden a ambos factores en proporción a sus<br />
prestaciones está condenado al fracaso, ya que es imposible dividir con fundamento real, a<br />
partir del producto logrado en común, las partes que corresponden a cada uno de los factores<br />
que colaboran. No es el punto de vista causal, sino el final el que conduce a buen término. A<br />
este respecto hay que tener en cuenta que los salarios significan, para una parte, capacidad<br />
adquisitiva que posibilita el acceso al mercado de los bienes producidos por los empresarios y<br />
que, para la otra parte, los empresarios, representa un gasto. En este sentido, la encíclica<br />
"Quadragesimo anno" acentuó en 1931 que "sería injusto pedir salarios desmedidos que la<br />
empresa, sin grave ruina propia, y consiguientemente de los obreros, no pudiera soportar"<br />
(QA 72). Por otra parte, la encíclica "Mater et Magistra" señala que: "no podemos dejar de<br />
referirnos aquí al hecho de que hoy, en muchas economías, la grande y mediana empresa<br />
realiza no pocas veces rápidos e ingentes aumentos de beneficio y de valor a través de la<br />
autofinanciación. En tales casos creemos poder afirmar que a los obreros se les han de<br />
reconocer títulos de crédito o participación en el capital de las empresas en que trabajan,<br />
especialmente cuando se les da una retribución no superior al salario mínimo" (MM 75). A<br />
pesar de los crecientes costes de los salarios y de las cargas <strong>social</strong>es, y a pesar de los altos<br />
impuestos, a las empresas de la República Federal de Alemania les han quedado, de hecho,<br />
elevadas ganancias desde la revalorización del marco.<br />
Aunque las cuotas de salarios aumentan poco a poco en los países industrialmente<br />
desarrollados, -cosa que se explica por el hecho de que el gigantesco incremento de capital de<br />
los últimos decenios, comparado con el lento incremento de la población, convierte en<br />
relativamente escaso el factor productivo trabajo-, la distribución del producto <strong>social</strong> entre<br />
capital y trabajo no puede considerarse satisfactoria. La participación de los trabajadores no<br />
autónomos sólo podrá aumentar considerablemente, es cierto, cuando los trabajadores estén<br />
dispuestos a ver en sus ingresos no sólo un dinero para su consumo privado, sino también una<br />
fuente de formación de capital en la economía nacional [...].<br />
c) La situación en la economía industrial desarrollada manifiesta cada vez con más claridad<br />
que la cuestión del salario justo no atañe únicamente al capital y al trabajo, sino que crece<br />
también en importancia para los tres sectores de la moderna sociedad económica [...]. El<br />
equilibrio entre el sector primario de la producción original agrícola y minera, el sector<br />
secundario del acabado artesano e industrial, y el sector terciario de las prestaciones de<br />
servicios esta siendo perturbado manifiestamente de forma que las tensiones "entre la<br />
agricultura, la industria y las empresas de servicios" se hacen cada vez más problemáticas en<br />
un "creciente número de Estados" (MM 48), situación que repercute también en la política de<br />
salarios. La agricultura y la minería son tareas de trabajo muy intenso. Característico de la<br />
manufactura y de la industria es el desarrollo de la productividad, muy superior al de los<br />
demás sectores de la economía, que hace posible con más facilidad –especialmente en tiempo<br />
de pleno empleo– aumentar los salarios y los sueldos, cosa que repercute en la agricultura, la<br />
minería y las empresas de servicios. En efecto, la sociedad industrial avanzada ha<br />
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