La secta de los estranguladores : radionovela
La secta de los estranguladores : radionovela
La secta de los estranguladores : radionovela
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
*<br />
<strong>La</strong> <strong>secta</strong> <strong>de</strong> <strong>los</strong> <strong>estranguladores</strong><br />
a una alta posición intelectual y ocupar un puesto <strong>de</strong> alguna prominencia en<br />
la prensa…<br />
Jefe policía: es verdad.<br />
Alí Ben: eso lo ratificaba su historia con el hombre que estuvo presto a dar la<br />
vida por ella: el hombre que amaba, pero cuya pobreza se interponía siempre<br />
como una valla entre <strong>los</strong> dos…<br />
Martín: Lo recuerdo muy bien…Permítame, profesor, que tome un whisky<br />
para acabar <strong>de</strong> pasar el susto. ¿No estará envenenado?<br />
Alí Ben: (ríe discretamente). tal vez no.<br />
Control: copas, botella, líquido que se vierte.<br />
Alí Ben: Pues bien, ante el romántico millonario enamorado <strong>de</strong> ella, pareció<br />
que se le cumplían todos sus sueños…era lo que había ambicionado <strong>de</strong>s<strong>de</strong> sus<br />
largos días <strong>de</strong> miseria, pero…<br />
Jefe policía: siempre hay un pero…<br />
Alí Ben: Naturalmente. Y era que el corazón <strong>de</strong> la joven ya estaba hipotecado:<br />
pertenecía al gallardo capitán colombiano…¿Cómo combinar esas dos gran<strong>de</strong>s<br />
aspiraciones <strong>de</strong> su vida <strong>de</strong> muchacha pobre y miserable?<br />
Martín: ¡Caracoles marinos! Casándose con el millonario, envenenándolo y<br />
luego pasando a ser la esposa <strong>de</strong>l otro, <strong>de</strong>l amado.<br />
Alí Ben: Podría haber sido así, <strong>de</strong> no mediar una pequeña circunstancia que se<br />
le hubiese hecho pública en la investigación <strong>de</strong> las autorida<strong>de</strong>s testamentarias: ¡el<br />
hecho <strong>de</strong> que Ligia Mendoza no podía heredar <strong>de</strong> sus esposo Mario ezcurdia!<br />
Jefe policía: ¿No podría heredar, en caso <strong>de</strong> que se hubiese casado? ¿Por qué?<br />
Alí Ben: ¡Por que no pue<strong>de</strong> heredar una esposa bígama! ¡Y Ligia Mendoza era<br />
la esposa legal <strong>de</strong> enrique Giraldo!<br />
Martín: ¡Caracoles marinos! es inconcebible.<br />
Alí Ben: sí. Al final, ella había cedido a la fuerza <strong>de</strong>l amor y había <strong>de</strong>sposado al<br />
hombre pobre que quería…A<strong>de</strong>más, él había anunciado que vendría pronto…<br />
tenía que obrar rápidamente…<br />
Martín: ¡entiendo! ¡Ni judicialmente, ni ante lo ojos <strong>de</strong> su marido podía aparecer<br />
como esposa <strong>de</strong> Mario ezcurdia! ¡Planeó, entonces, darle muerte a este antes<br />
<strong>de</strong> la boda! ¿Verdad?<br />
*<br />
158