La secta de los estranguladores : radionovela
La secta de los estranguladores : radionovela
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<strong>La</strong> <strong>secta</strong> <strong>de</strong> <strong>los</strong> <strong>estranguladores</strong><br />
Martín: Pues bien, nuestro hombre, repito, halló la ocasión propicia y se robó<br />
las llaves, aprovechando cualquier pequeño <strong>de</strong>scuido <strong>de</strong>l señor Gonzalo…<br />
Alí Ben: sin embargo, este nos ha asegurado que ni por un segundo se separó<br />
<strong>de</strong> sus llaves…<br />
Martín: sí. eso dice él, y pue<strong>de</strong> que lo crea <strong>de</strong> buena fe. Pero el hecho, profesor<br />
ilustre, es que cualquiera <strong>de</strong> <strong>los</strong> habitantes <strong>de</strong> esta casa ha tenido o tiene no<br />
una sino mil oportunida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> acercarse a esas llaves, que tan ce<strong>los</strong>amente dice<br />
guardar el señor Gonzalo.<br />
Alí Ben: en eso sí que tienes razón, hijo mío…<br />
Martín: ¡Cómo no! el hombre más meticu<strong>los</strong>o tendrá sus momentos <strong>de</strong><br />
<strong>de</strong>scuido en que, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> abrir una puerta o un escaparate, <strong>de</strong>ja las llaves<br />
olvidadas…A<strong>de</strong>más hay qué tener en cuenta otro asunto…<br />
Alí Ben: ¿Qué cosa?<br />
Martín: Pues sencillamente que el señor Gonzalo vive aquí…<br />
Alí Ben: ¿Qué insinúas?<br />
Martín: ¡Caracoles marinos! estoy resultando mejor <strong>de</strong>tective que usted; pues<br />
jefe, que cualquiera pudiera sustraerle las llaves durante el sueño.<br />
Alí Ben: es verdad, hijo mío…<br />
Martín: ¡Claro que es verdad! ¿Una casa en don<strong>de</strong> penetran cualquier<br />
habitación, para cometer asesinato, no será accesible para entrar a sustraer una<br />
llave?<br />
Alí Ben: es cierto.<br />
Martín: A propósito <strong>de</strong> esto, profesor, dígame: ¿Cómo entraron al cuarto <strong>de</strong><br />
la señorita Ligia?<br />
Alí Ben: ella no había cerrado por <strong>de</strong>ntro. Quien hubiese entrado puso el<br />
seguro al picaporte, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> hacerlo, por lo que la puerta no fue accesible<br />
entonces, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el exterior…<br />
Martín: entiendo…<br />
Alí Ben: Pero continúa, hijo mío, estoy interesado en saber la opinión general<br />
al respecto…<br />
Martín: Pues bien, tenemos a <strong>los</strong> dos culpables iniciales: ed-Jam, como asesino<br />
y sidarta como el ladrón <strong>de</strong>l shiva…<br />
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