La secta de los estranguladores : radionovela
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<strong>La</strong> <strong>secta</strong> <strong>de</strong> <strong>los</strong> <strong>estranguladores</strong><br />
muchacho. sin advertirnos, sin <strong>de</strong>cirnos nada…¡Caracoles marinos, es lo que<br />
se llama imprevisión!<br />
Jefe policía: (un tanto amostazado). Pero dígame, amigo Cantalapiedra, ¿ya<br />
no cree usted en la culpabilidad <strong>de</strong> ed-Jam? ¡Usted parecía seguro!<br />
Martín: ¿Culpabilidad? Pues, caracoles marinos, yo no he dicho que no es<br />
culpable…es que…¿no lo ve? Lo mejor es <strong>de</strong>jar todo en manos <strong>de</strong> mi maestro,<br />
él sí sabe por don<strong>de</strong> van las cosas…<br />
Jefe policía: No sé…no sé…no sé…<br />
Control: cortina musical.<br />
Martín: ¡esta casa es la colección <strong>de</strong> huellas dactilares más completa que he<br />
conocido! Apuesto doble a sencillo, profesor, a que pronto aparecerá otra cosa…<br />
Alí Ben: ¿Otra cosa, hijo mío? ¿Qué otra cosa?<br />
Martín: ¡<strong>La</strong> cuerda <strong>de</strong> seda con que asesinaron a ezcurdia!<br />
Alí Ben: ¿Qué dices?<br />
Martín: (exaltado). sí…¿Y sabe las huellas dactilares <strong>de</strong> quién aparecerán en<br />
la cuerda?<br />
Alí Ben: ¿De quién?<br />
Martín: (exaltado). ¡<strong>La</strong>s suyas, profesor Alí Ben! ¡sus propias huellas<br />
dactilares…a menos que aparezcan las mías...!<br />
Alí Ben: ¿Pero <strong>de</strong> qué hablas, hijo mío?<br />
Martín: (exaltado). ¡Pues <strong>de</strong> qué va a ser! ¡De todas estas huellas dactilares! ¡De<br />
todos estos enredos! ¡De esta pluralidad <strong>de</strong> asesinos que nos acosan por todas<br />
partes: ya no se pue<strong>de</strong> abrir una puerta, no se pue<strong>de</strong> mirar hacia un cuarto, no<br />
se pue<strong>de</strong> estudiar una estatua, una llave, nada…porque ahí hay un asesino! ¡Un<br />
gran asesino muy orondo y lirondo!<br />
Alí Ben: ¡Cálmate, Martín!<br />
Martín: (exaltado). ¡Que voy a calmarme! Voy a confesarle una cosa, para que<br />
salgamos <strong>de</strong> una vez por todas <strong>de</strong> dudas…<br />
Alí Ben: ¿Vas a confesarme?<br />
Martín: ¡sí, voy a confesarle <strong>de</strong> una vez por todas quien es el asesino!<br />
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