08.05.2013 Views

Untitled - José María Álvarez

Untitled - José María Álvarez

Untitled - José María Álvarez

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

AL OTRO LADO DEL ESPEJO<br />

no puedes concebirlo de otra manera; y luego esa Pescheria que<br />

adoro, y el Fontego dei Tedeschi, ya «ectoplasmas» los frescos<br />

del Giorgone. Cuando uno llega ante la fachada de San Geremia,<br />

hermosísima –recuerdo el cuadro de Guardi que está en la Alte<br />

Pinakothek de Munich– y de San Simeon Piccolo, ya ha sido<br />

devorado por la Belleza, y algunos –y conozco a tres o cuatro–<br />

para siempre.<br />

Hay más de noventa palacios, según leí una vez (nunca los<br />

he contado), y es raro el que no fascina por una y otra cosa.<br />

Teniendo en cuenta los 4 kilómetros de Canal, sale a veinticinco<br />

maravillas por km. Ya dejo K.O. a Commines, y había menos.<br />

He tomado muchas notas y reflexiones en mi aparatito japonés.<br />

Este viaje es lo único que podía hacer para que la cabeza<br />

descansara, después del salto sin red de anoche, con el Canto I<br />

de LA LAGRIMA. Sigo en estado de Gracia. Ardiendo.<br />

Después de comer hemos estado en San Lazaro degli Armeni.<br />

No hay más que un vaporetto al día. Es un monasterio que me<br />

gusta mucho. A Byron lo fascinaba, y estuvo muchas veces allí.<br />

Es comprensible. La paz bendice su belleza. La biblioteca es<br />

asombrosa, una de las mejores del mundo en manuscritos. El<br />

padre Arturo –que ha sido un buen arqueólogo– nos ha acompañado<br />

en la visita, enseñándonos algunos códices magníficos, y<br />

nos ha explicado muchas cosas. Ah, los magnolios del claustro...<br />

También estuvo aquí el viejo Proust. Y los monjes siguen<br />

teniendo eso color que decía Byron: «color de barba de meteoro».<br />

Al volver hemos paseado un poco, hemos comprado pan en<br />

«Mascari», y después hemos ido a cenar en un sitio agradable<br />

cerca de Campo San Luca. La verdad es que no tengo ganas de<br />

volver a España. Me gustaría quedarme aquí todo lo posible.<br />

Es misterioso este hechizo que Venezia inocula. Logra auténticos<br />

«enfermos» de Venezia. Pienso en Byron, en<br />

Chateaubriand –aunque al principio no «entraba»–, en la Sand,<br />

en Musset, Mickiewicz, Gautier, Léopold Robert, Taine... ¿Y<br />

335

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!