07.05.2013 Views

III Certamen Literario de Narrativa Breve - Publicatuslibros.com

III Certamen Literario de Narrativa Breve - Publicatuslibros.com

III Certamen Literario de Narrativa Breve - Publicatuslibros.com

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

<strong>III</strong> <strong>Certamen</strong> <strong>de</strong> <strong>Narrativa</strong> <strong>Breve</strong> “Revista Digital I.E.S. Ventura Morón”<br />

Antonio, que así se llamaba el anciano, se había quedado viudo, hacia ya…,<br />

mucho tiempo. Él se había ocupado <strong>de</strong> su pequeño <strong>de</strong>s<strong>de</strong> los cinco años, edad en la que<br />

quedó huérfano <strong>de</strong> madre. Tuvo que inventarse las mil y una para <strong>com</strong>paginar su duro<br />

trabajo en la cantera y po<strong>de</strong>r aten<strong>de</strong>r a su hijo. Le bañaba, le vestía, le daba <strong>de</strong> <strong>com</strong>er, y<br />

sobre todo, le regalaba con todos los caprichos que el pequeño le exigía.<br />

Antonio se volcó en su hijo, no tenía tiempo para él, nunca tuvo tiempo para él<br />

<strong>de</strong>spués <strong>de</strong> la muerte <strong>de</strong> su mujer, ni siquiera para conocer a otras mujeres, alguien con<br />

quien haber podido <strong>com</strong>partir nuevamente su vida, alguien que llegado el momento, le<br />

cuidara, pero Luis había reclamado toda su atención y ahora…, ahora se encontraba<br />

solo con su hijo, pero Antonio no se lamentaba por ello, estaba feliz con su primogénito.<br />

Ya cuando Luis fue mayor, le había <strong>com</strong>prado el coche y pagado la universidad,<br />

Luis no se había casado, pero Antonio, que <strong>de</strong>seaba <strong>de</strong>jar las cosas claras, había<br />

testado a favor <strong>de</strong> su único here<strong>de</strong>ro, aunque eso ya no tenía valor alguno. Su hijo había<br />

conseguido ven<strong>de</strong>r todo el patrimonio <strong>de</strong>l padre y con el dinero se había <strong>com</strong>prado un<br />

lujoso coche y un chalet, con piscina y cancha <strong>de</strong> tenis, en ese chalet, en la última<br />

planta, se hallaba una pequeña habitación, la habitación <strong>de</strong> apenas quince metros<br />

cuadrados era don<strong>de</strong> vivía Antonio, en soledad.<br />

La habitación tenía una cama, una mesita y un televisor en blanco y negro, única<br />

propiedad <strong>de</strong> Antonio. El televisor siempre estaba encendido, por eso Luis, se quejaba a<br />

su padre <strong>de</strong> que pagaba una fortuna en electricidad, pero Antonio, no podía apagarla.<br />

Era su única distracción, sin ella se sentía <strong>de</strong>samparado, porque la pequeña ventana,<br />

por don<strong>de</strong> entraba todas las mañanas un enorme reguero <strong>de</strong> luz, estaba alta, <strong>de</strong>masiado<br />

alta para que Antonio pudiera contemplar la calle. La pobre pensión que cobraba, <strong>de</strong>cía<br />

su hijo, no alcanzaba para la <strong>com</strong>ida y la energía que malgastaba, por eso su hijo,<br />

pagaba la diferencia, así era su hijo con Antonio, <strong>de</strong>sprendido y magnánimo.<br />

Con enorme esfuerzo, alzó su temblorosa mano y se la llevó a la frente, no había<br />

espejos, pero al tacto <strong>de</strong> las yemas <strong>de</strong> sus <strong>de</strong>dos, Antonio esgrimió una mueca <strong>de</strong> dolor.<br />

Tenía abierta una enorme brecha, y le dolía, le dolía mucho. Le había pedido a su hijo un<br />

calmante, para aliviar el dolor, pero Luis, que era médico, le había dicho que eso eran<br />

tonterías, que el cuerpo <strong>de</strong>bía reaccionar positivamente ante ese pequeño contratiempo,<br />

53

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!