07.05.2013 Views

III Certamen Literario de Narrativa Breve - Publicatuslibros.com

III Certamen Literario de Narrativa Breve - Publicatuslibros.com

III Certamen Literario de Narrativa Breve - Publicatuslibros.com

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

<strong>III</strong> <strong>Certamen</strong> <strong>de</strong> <strong>Narrativa</strong> <strong>Breve</strong> “Revista Digital I.E.S. Ventura Morón”<br />

nube, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong>l contacto humano, era, para mí, una ensoñación lejana. Sin embargo, allí<br />

estaba ella iluminando, hume<strong>de</strong>ciendo y abrillantando mi hogar. Ni rastro <strong>de</strong> polución por<br />

ningún sitio. Venturosamente mi madre aún no había regresado a casa. En cuanto la nube notó<br />

mi presencia, se llenó <strong>de</strong> luz <strong>de</strong> arco iris, quizá para <strong>de</strong>slumbrarme con su belleza. Reía y<br />

cantaba meciéndose en el aire al dulce ritmo <strong>de</strong> sus ca<strong>de</strong>nciosas melodías. Se movía por la<br />

casa con la misma agilidad que una sirena en la plenitud <strong>de</strong>l mar. Ni un mal gesto, ni un sólo<br />

reproche por mi noche <strong>de</strong> ausencias. Todo era dulzura y encanto. Pensé que estaría tramando<br />

nuevas estrategias para seducirme. Pero, ¿cómo resistirme a aquel caudal <strong>de</strong> amabilidad?<br />

¿cómo oponerme a aquel <strong>de</strong>rroche <strong>de</strong> entusiasmo?<br />

Debió entrever las pesadas huellas <strong>de</strong>l cansancio adheridas a mi cuerpo y escudriñar<br />

en mis ojos el túrbido vestigio <strong>de</strong> alcohol, tabaco y sueño asido a mis pupilas porque, sin<br />

preámbulos ni inoportunas peroratas, me tomó entre sus suaves brazos <strong>de</strong> sosiego y me<br />

<strong>de</strong>positó en el lecho. Entonces <strong>com</strong>encé a escuchar una armoniosa canción tan dulce y<br />

empalagosa <strong>com</strong>o las melodías que escuchara Ulises en boca <strong>de</strong> las sirenas. Me quedé<br />

dormido en el acto. No sé cuánto tiempo permanecí buceando en aquel océano <strong>de</strong> calma. Tan<br />

sólo sé que cuando abrí los ojos me encontraba en un lugar raro e ignoto pero apacible y<br />

hermoso, alumbrado por una misteriosa luminosidad <strong>de</strong> crepúsculo ambarino. No podría <strong>de</strong>cir<br />

si era un jardín celeste, por la opulencia <strong>de</strong> plantas colgantes repletas <strong>de</strong> exótica floración, o un<br />

mar estrellado, por la gran profusión <strong>de</strong> <strong>de</strong>stellos acuíferos y diáfanos que, <strong>com</strong>o perlas,<br />

brillaban en todas direcciones. La nube estaba conmigo. Me llevaba en sus brazos. Grácil y<br />

amorosa me acariciaba tiernamente. Me besaba. Besos <strong>de</strong> luna y cielo <strong>de</strong>positaba sobre mi<br />

cuerpo <strong>de</strong>snudo. Voluptuosa, se insinuaba rozándome con su sedosa piel <strong>de</strong> sensuales<br />

<strong>de</strong>seos. Lo hacía con tanta <strong>de</strong>lica<strong>de</strong>za que lograba hacerme yacer en un continuo<br />

estremecimiento o, tal vez, era el mágico estertor previo a la muerte.<br />

–¿Estás preparado ya? –Susurró quedamente en mi oído.<br />

No supe qué respon<strong>de</strong>r. La miel <strong>de</strong>rramada por todo mi cuerpo me lo impedía. La<br />

<strong>de</strong>testaba y la <strong>de</strong>seaba al mismo tiempo. Tan sólo pu<strong>de</strong> bosquejar un incipiente amago <strong>de</strong><br />

sonrisa que era la grata materialización <strong>de</strong> la electrizante y cálida corriente <strong>de</strong> placer que<br />

166

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!