NEVUS AZUL PROSTÁTICO. UNIFICACIÓN TERMINOLÓGICA DE ...

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ACTAS UROLÓGICAS ESPAÑOLAS MARZO 2001
NEVUS AZUL PROSTÁTICO. UNIFICACIÓN
TERMINOLÓGICA DE LAS LESIONES
PIGMENTARIAS PROSTÁTICAS
C. CUERVO PINNA, E. GODOY RUBIO, J.L. PARRA ESCOBAR,
E. SÁNCHEZ BLASCO, J. VALVERDE VALVERDE, *J. MORENO CASADO
Servicio de Urología. *Servicio de Anatomía Patológica. Hospital de Mérida. Mérida. Badajoz.
PALABRAS CLAVE:
Nevus azul. Melanosis. Pigmento. Próstata.
KEY WORDS:
Blue nevus. Melanosis. Pigment. Prostate.
Actas Urol Esp. 25 (3): 245-247, 2001
RESUMEN
Exponemos un nuevo caso de nevus azul prostático. Se comenta la confusión existente en la terminología
de las lesiones pigmentarias prostáticas en la literatura revisada y concluimos, en función
de la opinión de la mayoría de autores, con una posible unificación de criterios sobre las mismas.
ABSTRACT
We expose a new case of prostatic blue nevus. The existing confusion in the terminology of the prostate
pigmentarias injuries in reviewed literature is commented and we conluded, based on the opinion
of most of authors, with a possible unification of creteries the same ones.
El nevus azul prostático es una lesión pigmentada
de carácter benigno, en la cual el pigmento
melánico se localiza a nivel de las células del
estroma, pudiendo depositarse la melanina también
en el epitelio prostático, si bien este depósito
tiene lugar con absorción pasiva desde el estroma.
La localización extracutánea del nevus es infrecuente,
habiéndose descrito en 2 localizaciones
urológicas: el cordón espermático y la próstata1 .
Tanto su patogénesis como su incidencia se desconocen2
. Su hallazgo siempre es casual tras el
estudio histopatológico de material prostático.
Su presencia no implica sintomatología clínica
específica y carece de repercusión pronóstica desfavorable
al ser una lesión benigna de la que no
se han descrito, hasta ahora, casos de degeneración
a melanoma maligno.
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CASO CLÍNICO
Varón de 71 años, sin antecedentes personales
de interés, remitido a nuestras consultas tras episodio
de retención aguda de orina. El paciente refería
síndrome prostático previo de varios años de evolución,
y era portador de sonda uretral tras varios
intentos infructuosos para su retirada. La
exploración física fue normal y al tacto rectal se
objetivó una próstata aumentada de tamaño, móvil,
lisa, bien delimitada, elástica, volumen III/IV.
En la analítica practicada se observaron como
hallazgos más significativos cifras de PSA total de
18,44 ng/ml, y crecimiento de E. Coli en el urocultivo.
Tras antibioticoterapia las cifras de PSA
sanguíneo se normalizaron.
Se completó el estudio urológico mediante UIV:
morfofuncionalismo renoureteral bilateral normal,

gran impronta prostática en suelo vesical y
mediante ECOTR: próstata con estructura homogénea,
con buena diferenciación entre la zona de
transición y la zona periférica. No se aprecian
nódulos. Volumen prostático de 98,6 cc. Vesículas
seminales simétricas.
Se practicó adenomectomía prostática, siendo
el informe anatomopatológico: Macroscopio: pieza
de adenomectomía que pesa 85 g y mide 6 x 6 x 3
cm, observándose tanto en la superficie como al
corte una configuración micronodular con áreas
microquísticas, así como 2 zonas de color negruzco-azulado
de menos de 1 cm (Fig. 1).
Microscopio: existe una proliferación del estroma
fibromuscular y numerosas glándulas dilatadas
de aspecto quístico típicas de la hiperplasia
nodular. En las zonas negruzcas se aprecian
abundantes células alargadas u ovales, sin atipias,
que adoptan formas de tipo dendrítico (Fig.
2); estas células muestran un pigmento de color
marrón oscuro en su citoplasma, de aspecto melánico,
que se tiñe con el Masson Fontana. La tinción
de Perls para el hierro fue negativa. Tras la
decoloración con permanganato potásico se realizaron
técnicas de inmunotinción para la proteína
S-100, que resultó positiva (Fig. 3), siendo negativas
las realizadas para el antígeno de melanoma
(HMB45) y macrofágico (CD68). Tanto la morfología
como su positividad para melanina, demuestran
su naturaleza melanocítica. Estas células
mostraban una estrecha relación, aunque de
manera focal, con el epitelio glandular hiperplásico
adyacente.
FIGURA 1. Pieza de adenomectomía en la que se aprecia
la configuración micronodular con áreas microquisticas
así como las zonas de color negruzco-azuladas que corresponden
al nevus.
C. CUERVO PINNA, E. GODOY RUBIO, J.L. PARRA ESCOBAR, Y COLS.
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FIGURA 2. Células alargadas u ovales, sin atipias, que
adoptan formas de tipo dendrítico, con pigmento de color
marrón oscuro en su citoplasma, de aspecto melánico, que
se tiñe con el Masson Fontana.
FIGURA 3. Tras decoloración con permanganato potásico, inmunotinción
para la proteína S-100 que resulta positiva.
DISCUSIÓN
Existe actualmente controversia y cierta confusión
en la terminología empleada por los distintos
autores, en relación con las lesiones pigmentarias
que afectan a la próstata. La definición más
ampliamente aceptada para referirse al nevus azul
es aquella en la que el pigmento melánico se localiza
en las células del estroma prostático, mientras
que el término melanosis se reserva para los casos
en los que dicho pigmento se localizaría únicamente
a nivel epitelial. Muchos autores, no discriminan
entre ambos tipos de lesiones pigmentarias,
mencionándolas indistintamente sobre todo
en el caso en el que se afecta tanto el estroma como
el epitelio 3 .
Hoy en día la mayoría de los autores están de
acuerdo en admitir que sólo tienen capacidad
para la melanogénesis las células del estroma

NEVUS AZUL PROSTÁTICO. UNIFICACIÓN TERMINOLÓGICA DE LAS LESIONES PIGMENTARIAS PROSTÁTICAS
prostático, no habiéndose podido demostrar dicha
capacidad por parte del epitelio 4,5 . Aunque determinados
autores hayan tratado de admitir la producción
de pigmento de tipo melánico por las células
epiteliales, se comprueba de forma reiterada
que cuando este pigmento se localiza en el epitelio
prostático siempre aparece igualmente depositado
a nivel estromal, y las técnicas de inmunotinción
del epitelio con proteína S-100 resultan
negativas; por todo ello la mayoría de los autores
afirman que la melanina pasa del estroma al epitelio
de forma pasiva 2,4 .
Existen múltiples hipótesis que tratan de explicar
la presencia de estas células cuyo origen deriva
de la cresta neural, pero tanto su incidencia
como patogénesis resultan totalmente desconocidas
1 . En el citoplasma de las células secretoras
existentes en la próstata, pueden aparecer gránulos
parduscos o hematoxilínicos, que se identifican
como lipofuscina. Este complejo lipídico oxidado
proviene de la autofagocitosis de las células
parenquimatosas, por lo que sus depósitos se
incrementan de forma considerable con el envejecimiento
celular y las agresiones (por infecciones
sistémicas, locales o la toma de fármacos) 6,7 .
Este pigmento se deposita en múltiples órganos,
entre ellos la próstata, tanto a nivel del epitelio
normal, hiperplásico o neoplásico como del
estroma y probablemente sea el responsable de
muchas de las denominadas “melanosis prostáticas”
halladas en la literatura, no encontrándose
bien documentadas y que deberían englobarse
bajo el término de pseudomelanosis o lipofuscinosis
prostáticas.
Por último, es necesario diferenciar las pigmentaciones
prostáticas que se originan como
consecuencia del depósito de hierro, ya sean
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secundarias a hemorragias, infartos o abscesos en
dicha glándula, o bien debidas a hemocromatosis
primaria o secundaria y trataremos de realizar el
diagnóstico diferencial con las lesiones malignas,
el melanoma, bien primario o metastásico, si bien
son excepcionales en esta localización.
En cuanto a la conducta a seguir tras el diagnóstico
de nevus azul prostático, dada la inexistencia
de casos descritos en la literatura de degeneración
maligna, no parecen imprescindibles las
revisiones-controles periódicos.
REFERENCIAS
1. GONZÁLEZ CAMPORA R, GALERA DAVIDSON H,
VÁZQUEZ RAMÍREZ FJ y cols.: Blue nevus: classical
types and new related entities. A differential diagnostic
review. Pathol Res Pract 1994; 190: 627.
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Lippincott Co. Philadelphia 1992: 581.
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DO C: Nevus azul de próstata. Diagnóstico diferencial
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Urol 1998; 51 (3): 286-289.
4. VESGA MOLINA F, ACHA PÉREZ M, LLARENA IBAR-
GUREN R, PERTUSA PEÑA C: El nevus azul intraprostático.
Arch Esp de Urol 1995; 48 (10): 985-986.
5. LEUNG CS, SRIGLEY JR: Distribution of lipochrome
pigment in the prostate gland: biological and diagnostic
implications. Hum Pathol 1995; 26: 1.302.
6. EPSTEIN JI: Prostate biopsy interpretation. 2 nd .,
Lippincott-Rayen, Philadelphia 1992: 28.
7. BRENNICK JB, O’ OCONNELL JX, DICKERSIN GR et
al.: Lipofuscin pigmentation (so-called “melanosis”) of
the prostate. Am J Surg Pathol 1994; 18: 446.
Dr. C. Cuervo Pinna
C/ José Mª Alcaraz y Alenda, 10
Esc. 4 - 1ª C
06011 Badajoz
(Trabajo recibido el 3 Noviembre de 2000)