Discurso de recibimiento a Nara Araújo como académica de número

Rogelio Rodríguez Coronel
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DISCURSO DE RECIBIMIENTO A LA ACADÉMICA
NARA ARAÚJO
Me honra recibir a la Dra. Nara Araújo Carruana en la Academia Cubana de la Lengua,
y a la vez siento una enorme alegría porque nuestra institución acoja entre sus miembros a
una investigadora, ensayista y profesora de su estatura intelectual y ética.
Doctora en Ciencias Filológicas, Profesora Titular y Principal de Teoría y Crítica
Literarias de la Facultad de Artes y Letras de la Universidad de La Habana, la nueva
académica numeraria definió su orientación investigativa desde fecha temprana. En sus dos
primeros libros: la compilación Viajeras al Caribe (Casa de las Américas, 1983), ejemplar
en su registro, y en el estudio crítico Visión romántica del otro (1993), quedaron fijados sus
intereses indagatorios y sus hallazgos en el campo literario: el desentrañamiento de la
alteridad, que se nutre con los estudios sobre la voz de la mujer, como en El alfiler y la
mariposa. Género, voz y escritura en Cuba y el Caribe (1997) —volumen que reúne textos
ineludibles sobre la escritura femenina en nuestro ámbito—, y como en sus numerosos
artículos sobre la obra de Dulce María Loynaz, Gertrudis Gómez de Avellaneda, Maryse
Condé y Marie Chauvet, acerca de las “novísimas” narradoras cubanas, entre otros.
El alfiler y la mariposa, por su óptica y por su escritura, resulta uno de los libros más
sobresalientes de la crítica de género en Cuba. En el ensayo que le da nombre al volumen,
la mirada se detiene en el escrutinio de las oposiciones binarias que conforman Bestiarium,
Versos y Jardín de Dulce María Loynaz para denotar la subversión que realiza la autora del
pensamiento falocéntrico contemporáneo. Dice Araújo:
La imagen de la mariposa, robada por “el deseo de un hombre feo”, y clavada
su cintura por un alfiler, apresa quizás, como ninguna otra, la sujeción (masculina)
del conocimiento al anhelo (femenino) de alas, de liberación.
Raza, género, la mirada distinta y complementaria, los trasvasamientos literarios han
centrado su atención durante más de treinta años para dejarnos textos novedosos, como los
recogidos en su Diálogos en el umbral, del año 2003, o enriquecedores de tendencias ya
existentes en los estudios literarios cubanos. A propósito de esta última afirmación, deseo
subrayar que Visión romántica del otro, por sus maneras de hacer y por su decir, resulta un
paradigma de la comparatística cubana. El diálogo entre el romanticismo francés y el
hispanoamericano a través de la presencia del negro en Bug-Jargal, de Hugo, y en Sab, de
la Avellaneda; del indio en Atala, de Chateaubriand, y en Cumandá o un drama entre
salvajes, de Juan de León Mera, se inscribe en las coordenadas más avanzadas de esta

disciplina al tomar como sustento teórico las propuestas más avanzadas en América Latina,
sin olvidar los aportes realizados en otras latitudes.
La aparición de este volumen seguramente fue el incentivo mayor para que el gobierno
francés le otorgara las “Palmas Académicas” en 1993, además de los cursos y conferencias
brindados en universidades de aquel país, particularmente en la de París VIII.
El estudio desentraña el diálogo activo que se produce a partir de la recepción selectiva
y fructífera de los modelos franceses por parte de autores de nuestro continente, manera de
anular el tradicional análisis de las influencias en los nexos literarios por su connotación
pasiva y escasamente productiva. Dice la autora: “En definitiva lo fundamental no es tanto
la semejanza entre los fenómenos como el carácter de su relación, a partir de causalidades,
en espacio y tiempo distintos”.
Por otro lado, Visión romántica del otro, se avecina a los llamados “estudios culturales”
por la indagación sobre sujetos y realidades marginales y por la índole de sus principios
metodológicos en la reflexión de las correlaciones entre los textos y su ámbito genésico y
de recepción, lo cual permite a la autora concluir que
Los europeos iban al encuentro de aquel otro buscando espejos que reflejaran
imágenes opuestas a sí mismos, pero que iluminaran, por contraste, sus ansias de
renovación estética, sus debates políticos. Para los hispanoamericanos, la
alternativa era fundirse o no con el otro, con su imagen especular, aceptar sus
reflejos y fusionarse con él, o sostenerlo a distancia, vacilantes, y mientras tanto,
alimentar con esas visiones sus quimeras.
La reedición en México de este libro, inauguró en 1998 las publicaciones del Posgrado
en Teoría Literaria de la Universidad Autónoma Metropolitana.
También instituciones de Rusia, México, Venezuela, Jamaica, Brasil, Inglaterra y los
Estados Unidos han acogido las disertaciones de la Dra. Araújo o le han otorgado la
condición de Profesora Invitada, pero deseo enfatizar, por su relevancia, las Conferencias
Magistrales ofrecidas en la Universidad del Norte de Londres, Inglaterra, 1996 (“¿Vine
desde Cuba para poder hablar así?”), la Universidad de Humboldt, Arcata, California,
2001 (“Verdad, poder y saber. Literatura de viaje femenina”), la Universidad de Río
Grande del Sur, Brasil, 2003 (“Desterritorialización, posdisciplinariedad y posliteratura”) y
en la Universidad de Nottingham, Inglaterra, 2006 (“La patria en la lejanía. Género, política
y nación en el discurso de José María Heredia, María de las Mercedes Santa Cruz y
Montalvo y Gertrudis Gómez de Avellaneda”).
Los temas de estas conferencias resumen sus áreas de atención, tanto en la enseñanza
como en la búsqueda investigativa: la teoría literaria, con especial curiosidad por la
literatura comparada, la literatura caribeña, y dentro de ella la literatura cubana, la literatura
de viajes, y la escritura femenina. Pero subyace en todos ellos el propósito de escudriñar en
nuestra identidad desde lo diverso o heterogéneo marginado, manera de reconstruir la
unidad desde una perspectiva más inclusiva y democrática.
Por sus aciertos docentes y los resultados de sus indagaciones entre 1995 y 1996 fue
beneficiada con una Beca de la Fundación Ford dentro del Programa Interdisciplinario de

Estudios de la Mujer del Colegio de México, y en el verano de 1998 se desempeñó como
Becaria de la Fundación Rockefeller en la Universidad Internacional de la Florida.
Investigadora de valía, sus logros no han estado ajenos a las necesidades de la docencia,
y por ello su compilación Textos de Teorías y Críticas Literarias (del formalismo a los
estudios poscoloniales), que contó con la colaboración de la Dra. Teresa Delgado, fue
reconocida en 2004 como el Mejor Resultado de Mayor Aporte a la Educación Superior por
la Universidad de La Habana, antes premiado por la Universidad Autónoma Metropolitana
de Ciudad de México. Esta antología, cuyo estudio introductorio fue realizado por la Dra.
Araújo, no sólo ha beneficiado a los estudiantes y profesores de Cuba y México, sino
también a los universitarios de otros países de América, incluyendo a los Estados Unidos.
Mucho tiene que haberle valido su dominio del inglés, del francés y del ruso para la
selección de los distintos materiales. En la actualidad, auxiliada por el joven profesor Ariel
Camejo, tiene en proyecto una recopilación de textos teóricos sobre la cultura caribeña,
volumen que tendrá la misma fortuna y semejante beneficio que los anteriores.
Hace ya quince años la Dra. Araújo se desempeña como Profesora Titular de la
Facultad de Artes y Letras de la Universidad de La Habana, grado académico que también
alcanzó en la Universidad Autónoma Metropolitana de la Ciudad de México, cuando se
radicó temporalmente en aquel país. En 2005 fue distinguida como Miembro del Sistema
Nacional de Investigadores, Nivel II, del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología
(CONACYT), por sus aportes docentes e investigativos.
Pero creo —y doy fe de ello— que su mayor reconocimiento lo recibe cuando varias
promociones de graduados de Letras tienen como un aval sobresaliente haber sido sus
alumnos.
¡Bienvenida, Nara! La Academia Cubana de la Lengua se regocija con tu presencia.