LA CONJURACION ANTICRISTIANA - AMOR DE LA VERDAD
LA CONJURACION ANTICRISTIANA - AMOR DE LA VERDAD
LA CONJURACION ANTICRISTIANA - AMOR DE LA VERDAD
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
fue fundada antes de la gran Revolución, y uno de sus miembros, Asweld, así define<br />
su carácter: “Un solo odio llena el corazón de sus adeptos, el odio a los Bourbons<br />
y a los jesuitas… Antes de la Revolución de 1789, los nuevos templarios no<br />
tenían otro fin declarado que el aniquilamiento del catolicismo… En la época en<br />
que las hordas extranjeras vinieron a imponer a los Bourbons, los templarios se<br />
limitaban a buscar la expulsión de la raza esclavizada y todos fuimos fieles, hasta<br />
el día 3 de agosto, a ese patriótico deber… El odio se temperaba con el desprecio y<br />
quedó adormecido durante varios años; pero, en el día de la opresión, explotó como<br />
un rayo… La irritación apaciguada dio lugar a la necesidad de trabajar con<br />
perseverancia en vistas al fin que se proponían todas las divisiones del Templo: la<br />
libertad absoluta de la especie humana; el triunfo de los derechos populares sobre la<br />
autoridad legal; la desaparición de todos los privilegios, sin excepción, y una guerra<br />
a muerte contra el despotismo religioso o político de cualquier color que estuviese<br />
revestido. Una inmensa propaganda es organizada ahora para ese objetivo<br />
general”.<br />
El Nuevo Templo, como la Gran Logia que le sucedió, era una de las sociedades<br />
más profundamente misteriosas que el Poder oculto creó según las necesidades<br />
del momento, con elementos escogidos, a los cuales él manifiesta, en la medida<br />
necesaria, el secreto de sus últimas intenciones. Las encontramos expresadas aquí:<br />
“Guerra de muerte a la autoridad civil y a la autoridad religiosa; destrucción de<br />
todos los privilegios, es decir, de las leyes particulares, principalmente de aquellas<br />
que rigen el cuerpo eclesiástico y de aquellas que hacen de la Iglesia Católica una<br />
sociedad distinta, autónoma; derechos a conceder a la multitud ciega, para servirse<br />
de ella como instrumento de guerra contra las dos autoridades y a las dos sociedades;<br />
en fin, objetivo último, liberación absoluta de las especie humana”, incluso y<br />
sobre todo en relación a Dios. Como medio de obtener eso: “Inmensa propaganda”<br />
de las ideas revolucionarias…<br />
Tal fue el objetivo de la revolución de 1830. Ella fue un punto de partida y<br />
sirvió de punto de apoyo para todo el movimiento anti-social y anti-católico que de<br />
París se extendió a toda Europa. La Monarquía de julio lo favoreció en Italia mediante<br />
la ocupación de Ancona, en España y en Portugal a través del establecimiento<br />
de regímenes semejantes, y sobre todo, en los Estados del Papa a través del Memorandum.<br />
Página 151 de 206