Leer - Revista Pensamiento Penal

RÉGIMEN DE SEMILIBERTAD PRESUPUESTOS DE PROCEDENCIA Y PAUTAS PARA SU OPERATIVIDAD
actividad social, laboral o cultural, debidamente establecida. 8
Asimismo correspoden aclarar que descartamos la terminología prisión abierta utilizada
por renombrados autores 9 por considerar sus características no se compadecen
con la de la semilibertad, a la par de estimar que ambos son términos incompatibles
y antagónicos, ya que la “prisión no podrá nunca ser abierta, salvo que perdiera su
propia denominación”. 10 En ese sentido, favorece la confusión la circunstancia de
que las personas incluidas en el régimen de semilibertad suelen ser ubicadas en una
sección especial de la centro penitenciario general, y por lo tanto vinculados ediliciamente,
sin observarse las características propias de la prisión abierta en relación a la
ausencia total de medidas de seguridad, 11 aunque como mandamiento legal corresponde
ubicar al penado ingresado al período de prueba en un establecimiento abierto
o sección independiente de éste basada en el principio de autodisciplina (Art. 15
Inc. a) L.E.P.), pero tal como los mismos están organizados en nuestro país, observamos
que siempre tienen algún dispositivo mínimo de seguridad, 12 lo que impide, a
nuestro juicio, técnicamente catalogarlos dentro de la definición aportada en el
Primer Congreso para la Prevención del Delito y Tratamiento del Delincuente de
Ginebra (1955). 13
En cuanto a su naturaleza jurídica, a más de significar una de las modalidades del
período de prueba del régimen penitenciario progresivo previsto en la ley (Arts. 15 y
22 L.E.P.), existe amplio consenso en la doctrina nacional y extranjera en considerar-
8 GARCÍA BASALO, JUAN CARLOS, Algunas tendencias actuales de la ciencia penitenciaria, Buenos Aires, Abeledo Perrot,
1970, p. 29 citado por CESANO, JOSÉ D., op. cit., p.172. Se incluyen por sus características dentro de los métodos transicionales
al instituto de salidas transitorias (Art. 16 L.E.P.).
9 NEUMAN, ELIAS, Prisión abierta, Buenos Aires, 1962, p.148 en el sentido que prisión equivale a detención y en la prisión
abierta o régimen abierto existe esa misma detención pero a nivel psíquico, y así “sustituir muros...por la propia
conciencia, hacer “presos de su conciencia””. Del mismo, Evolución de la pena privativa de la libertad y regímenes penitenciarios,
Buenos Aires, Pannedille, 1971, p.172. También comparten el término, MARCO DEL PONT, LUIS, Penología y
sistemas carcelarios, Tomo I, Buenos Aires, Depalma, 1982, p. 72 y CUELLO CALON, EUGENIO, La moderna Penología,
Barcelona, 1958, p. 345. Sin embargo, por sus similitudes tenemos en cuenta en esta investigación las obras de
Neuman.
10 MAPELLI CAFFARENA, BORJA, “El régimen penitenciario abierto” en Cuadernos de Política Criminal, Nº 7, 1979, p.
62.
11 De conformidad a la definición aportada en el Primer Congreso para la Prevención del Delito y Tratamiento del
Delincuente de Ginebra (1955): “El establecimiento abierto se caracteriza por la ausencia de precauciones materiales
y físicas contra la evasión (tales como muros, correduras, rejas y guardia armado u otras guardias especiales de seguridad)...”.
12 Lo que debe representar una obligación para el poder político de proveer las condiciones edilicias necesarias para
la ejecución de la pena privativa de libertad según el principio de legalidad y un deber de los operadores penitenciarios
y judiciales de advertir dichas falencias (Art. 208 L.E.P.).
13 Citado en nota 11.
CUADERNOS DE DERECHO PENAL
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