13 de Julio 2012 - La Palabra Israelita

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VIERNES 13 DE JULIO DE 2012
En Namibia:
La leyenda de la tumba Kosher l´Pesaj
POR JOANNA WURMANN
Buscando tema para el artículo de esta
semana, me encontré con un escrito que
llamó mi atención por dos cosas. En
primer lugar hablaba de una tumba
«Kosher Le Pesaj». Algo bastante extraño
y fuera de lo común por lo que decidí
investigar un poco. Pero, además,
había otra arista interesante pues la lápida
se encontraba en un cementerio en
Namibia. Y eso despertó mi sed de conocimiento
aun más. ¿Hay judíos en
dicho país africano?
Pues bien, la presencia judía en
Namibia se remonta a mitades del siglo
XIX, cuando Alemania, bajo el gobierno
de Otto von Bismarck, anexó la
región. De esto no hay duda ya que los
cementerios judíos de las ciudades de
Windhoek, Keetmanshoop, Luderitz y
Swapkopmund datan de esa época.
Ubicada en la costa sureña de África,
como dije Namibia fue colonizada
por Alemania en el siglo XIX y bautizada,
en ese entonces, como África del
Sudoeste Alemana. Después de la Primera
Guerra, la Liga de las Naciones
cedió el territorio a Gran Bretaña, gobierno
que a su vez traspasó la administración
a Sudáfrica, que la trató
como una provincia. Una larga lucha
por la liberación culminó con elecciones
supervisadas por la ONU y la in-
Grupo de Amigas
del Bridge
Nicolás, Matías, Danae
y Max Wolff
Rebeca B. de Polansky
Flia. Stekel - Cadoche
Dan Dvorquez y Flia.
Darío Herán y Clara Majlis
Evelyn y Sergio Gloger
Marta y Saúl Gloger
Myriam Mendoza
Daniel Gloger
y Eduardo Torres
Flia. Shats - Stoulman
Inés Fabián de Rotman
David Brodsky
Elfi Weiss
Carol Daly
y Moisés Eisenberg
Isidora y Salka Brodksy
Roberto y Sonia Neuman
Jaime Schapiro y Sra.
Eduardo Weinstein
Gerda Brady
Rubén y Miguel
Morgheinstern
Carolina Weissenberg
y Flia.
Lucy Budnik
Jenny y Mario Mitnik
Adela Bortnik
y Esther Bresler
Marcos Gleiser y Sra.
dependencia de Namibia en 1990.
En un país predominantemente cristiano
y con más de dos millones de habitantes,
una pequeña comunidad judía,
compuesta en su mayoría por descendientes
de inmigrantes de Europa
del Este, se las ha arreglado para existir,
aun cuando su número de miembros
ha ido disminuyendo. De acuerdo
con la Asociación Internacional de
Sociedades de Genealogía Judía, había
cerca de 170 familias judías en Namibia
para 1965, con la mayoría viviendo en
Windhoek. Sin embargo, en la actualidad
son sólo cerca de 20 grupos familiares,
de los cuales cerca de la mitad
son namibios de nacimiento y el resto
americanos o sudafricanos que han llegado
atraídos, principalmente, por la
industria del diamante.
A pesar de contar con una sinagoga,
construida en 1924, la Congregación
Hebrea de Windhoek, como muchas
pequeñas comunidades judías del
mundo, no tiene rabino permanente y
lucha por realizar los servicios semanales
por la falta de minián. Por lo general
para las Altas Fiestas traen rabinos
desde afuera y el Consejo de Delegados
de Judíos de Sudáfrica provee un
jazán para las festividades.
RELACIÓN CON ISRAEL
Namibia e Israel establecieron relaciones
bilaterales en 1994. Pero los cercanos
lazos del país africano con la Organización
del Pueblo de África del Su-
Yedy y Ximena Israel
Simona Gurovich
de Silberman y Flias.
Pablo Wald y Flia.
Abraham Shats y Sra.
Lotty Landman
José Vila Botija y Sra.
Isaac Wurman y Sra.
Salo Wurman y Sra.
Adela y Roberto Brodsky
Guillermina Neiman y Flia.
Grupo Javerim de
los Martes y
sus Coordinadoras
Leopoldo Drexler
Cecilia Kramarosky,
Marcia Gaisinsky e Hijas
Elías Daniels y Sra.
doeste (SWAPO), de tendencia marxista,
con organizaciones palestinas durante
su lucha por la libertad. Ha hecho que
las relaciones tengan altos y bajos.
Como resultado de la empatía de
SWAPO con los palestinos, que al parecer
habría nacido de algún tipo de
entrenamiento conjunto, Israel fue el
único país no invitado a celebrar la independencia
de Namibia en 1990. Pero
como el proceso de paz tuvo cierta
mejoría durante los siguientes años,
tanto dicho país como Zimbabwe y
Mozambique establecieron, finalmente,
relaciones diplomáticas con
Jerusalem en 1994. Sin embargo, y a
pesar de lo anterior, los lazos bilaterales
entre el país judío y el africano son
cordiales.
Las relaciones bilaterales han, de
hecho, crecido a través de los años con
un creciente intercambio en las áreas de
agricultura y desarrollo económico. Especialmente
importante han sido los
avances israelíes en las tecnologías de
irrigación.
Desde que la Embajada israelí en
Zimbabwe fuera cerrada en 2002, la de
Sudáfrica es responsable de las relaciones
bilaterales con Namibia y continúa
manteniendo un fuerte contacto con la
comunidad judía.
TUMBA KOSHER L´PESAJ
Finalmente le contaré sobre la leyenda
de la tumba Kosher le Pesaj. Después
de varios días de investigación y cote-
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jar diferentes relatos para la misma situación,
creo que la historia más verídica
sería la de Walter Galler. Él era un
judío que vivía en el pueblo costero de
Swakopmund y que falleció el 28 de
septiembre de 1939. Su viuda, una
mulata no-judía, decidió que, en su lápida,
debía recordarse el pasado religioso
de su marido con alguna inscripción
en hebreo. Se dice que la señora
Galler se puso a buscar en su casa alguna
cosa que pudiera servirle. Algunos
aseguran que ella encontró una
botella de vino en cuya etiqueta se leía
Kosher Le Pesaj al lado de un Magen
David. Otros señalan que las letras y el
símbolo fueron copiadas de la certificación
de una caja de Matzot. Sea cual
sea el origen, la cosa es que la mujer en
cuestión llevó todo donde quien estaba
haciendo la tumba. Pero como él
tampoco sabía hebreo las escribió patas
para arriba.
La historia podría haber terminado
ahí, pero décadas más tarde el rumor de
la tumba Kosher l´Pesaj circulaba por la
comunidad judía de Windkhoek. A pesar
de que todos estaban de acuerdo que
el actuar de la señora Galler era admirable,
en los años setentas un rabino
sudafricano decidió que la inscripción
debía borrarse, dejándose sólo el Magüen
David. Se dice que las letras fueron finalmente
borradas, pues la tumba se estaba
convirtiendo en un lugar turístico, lo que
para el religioso implicaba una falta de
respeto con el difunto.