Transiciones en el consumo de drogas en Colombia - Mama Coca

1. Aun cuando la mayoría de las personas de este estudio iniciaron su consumo con marihuana
como primera sustancia ilegal, y la mayoría de ellas continuó consumiéndola, la frecuencia y la
cantidad consumida tienden a modificarse en la medida en que la persona empieza a utilizar
otras sustancias.
2. Una proporción importante de las personas entrevistadas consume alcohol sobre todo los fines
de semana; es relativamente infrecuente que los consumos de otras sustancias vayan
acompañados sistemáticamente por alcohol, aun cuando hay un cierto número de excepciones,
en especial entre quienes consumen preferencialmente cocaína.
3. En la población entrevistada el consumo de cocaína es, en general, ocasional y asociado a la
búsqueda de contrarrestar los efectos del alcohol; la razón principal suelen ser los costos.
4. Los consumidores de pegantes y otras sustancias inhalables tienden a hacerlo entre varias
veces a la semana y todos los días.
5. En Colombia el consumo de heroína fumada es mucho más común que el de heroína inyectada;
pero quienes fuman tienden a hacerlo de manera irregular e infrecuente, mientras que quienes
se inyectan tienden a hacerlo diariamente. En las fases iniciales, el consumo de heroína fumada
se hace en grupos y se financia colectivamente, pero poco a poco se convierte en una conducta
más solitaria (se evita compartir).
6. Las sustancias como el ‘popper’, la quetamina y el éxtasis se consumen muy raramente fuera
del ambiente de ‘rumba’ de los fines de semana.
7. Quienes consumen basuco tienden a hacerlo diariamente .
8. Al igual que en el caso de la heroína inyectada, quienes consumen basuco tienden a dejar de
lado las otras sustancias, pero por razones muy diferentes: quienes se inyectan heroína se
preocupan constantemente por evitar el síndrome de abstinencia y consagran sus recursos a
disponer de la droga; los usuarios de basuco dejan de considerar placenteros los efectos de las
otras sustancias, o en todo caso ya no encuentra tales efectos tan atractivos.
9. El consumo de ansiolíticos y tranquilizantes, denominados ‘pepas’ en el argot de los
consumidores, parece ser más frecuente en los fines de semana y asociado a ‘rumbas’ en las
cuales se trata de experimentar diferentes sensaciones: tal consumo de ‘pepas’ suele estar
acompañado de alcohol.
10. El consumo de cacao sabanero, hachís, opio, hongos y ácidos, parece ser bastante marginal:
muchos de los entrevistados los han consumido, pero rara vez se integran en un patrón de
consumo regular.
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Transiciones en el consumo de drogas en Colombia