Transiciones en el consumo de drogas en Colombia - Mama Coca

Los resultados también sugieren que entre los consumidores de cocaína el uso de otras drogas
está mucho más extendido que en la población general de la misma edad (Barrio y cols, 1997); las
drogas de diseño, anfetaminas y alucinógenos están también mucho más extendidas que en la
población general.
Ameijden y Countinho (2001) realizan un estudio longitudinal, con seguimiento cada cuatro
meses, en la ciudad de Ámsterdam (ciudad que adoptó la reducción del daño como su política de
drogas), y encontraron una disminución importante y exponencial en el comportamiento de inyección
de su cohorte. Afirman que “…esto es principalmente el resultado de las tendencias en el
comportamiento individual, que es un aumento en la cesación de la inyección y una disminución
lineal en la reincidencia en la inyección)…”. La prevalencia de inyección en la muestra se redujo
casi a la mitad (66% al 36%). Estos resultados fueron similares a la disminución en el número de
agujas intercambiadas entre 1990 y 1997, situación que según los autores “…no puede ser explicada
por un incremento en la compra de agujas…”.
En este estudio se identifican las normas del grupo y las actitudes como las razones para dejar
de inyectarse, por ejemplo al percibir a los inyectores como consumidores “perdedores” que no
están sanos. Los autores sugieren que en el caso de Amsterdam, el mercado de drogas probablemente
haya cambiado: la disponibilidad de la cocaína en forma de crack aumentó a diferencia de
la disponibilidad del consumo de heroína que disminuyó.
De otra parte autores como Crum, Lillie y Anthony (1992) retoman el concepto de la “oportunidad
de exposición” (Anthony y Helzer, 2005) considerándola como la etapa más temprana en el
consumo de drogas, sugiriendo que esta separación –oportunidad de exposición contra uso actual
de la droga- ha aparecido previamente en la literatura de la dependencia a las drogas y es consistente
con un modelo conceptual general que descompone las transiciones y progresiones y permite
reconocer elementos específicos de la dependencia, especificando los determinantes específicos
de cada una de las posibles transiciones y las progresiones en ellas. De hecho algunos autores
consideran que los determinantes del uso inicial de drogas son diferentes de aquellos relacionados
con el consumo “serio” a las drogas (Anthony y Helzer, 1995; Clayton, 1992)
Crum y cols (1992) realizaron un estudio en el que evidenciaron la relación entre vivir en un
“vecindario desventajoso” (definido no solamente como vivir en un barrio pobre, sino también
definido en términos de seguridad baja o nula, negligencia, signos de discriminación, prejuicios,
entre otros) y el consumo de drogas en especial el consumo de cocaína, entendiendo las condiciones
contextuales como determinantes de oportunidades de exposición a drogas. Los autores sugieren
que los resultados pueden explicarse en razón de encontrar en tales contextos un mayor
nivel de disponibilidad de las drogas, a menor presencia de la policía y en general a otras manifestaciones
de negligencia social y gubernamental. Para el caso del alcohol y cigarrillo, la relación
encontrada fue más débil, sugiriendo menor relación entre el consumo de éstas y el contexto específico
en el que habitan las personas.
Transiciones a consumo de drogas ilegales
Otra temática de estudio específico en el campo de las transiciones en el uso de drogas, es el
paso del consumo de una droga ilegal a otra. Lynskey, Heath, Bucholz, Slutske, Madde, Nelson,
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Transiciones en el consumo de drogas en Colombia