06.05.2013 Views

JLcK5

JLcK5

JLcK5

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

El grito particular de un jugador habilidoso y teatrero puede semejar la re-<br />

sonancia de la explosión de una granada (el fuego sonoro), pero también<br />

desprende un cálculo al margen del dolor, el dramatismo de lo impensado<br />

mientras se lo está pensando. Algo así como el oportunismo en la mente de<br />

un jugador de fútbol.<br />

Sí: el oportunismo en la mente de un jugador de fútbol.<br />

3<br />

4<br />

Quizás sea la mente del director técnico de un equipo la más indicada<br />

para hacer un buen jugo de contradicciones, porque son ellos, justamen-<br />

te, los que viven ese diálogo interno y furibundo entre un pequeño án-<br />

gel y un pequeño demonio. Frente a un disturbio, la mente del director<br />

técnico le ordena a su dueño, por un lado, que invada el campo para<br />

separar a los jugadores más temperamentales que siempre están a pun-<br />

to de poner a alguien; pero al mismo tiempo que el cuerpo intenta sepa-<br />

rar, esa mente ordena alimentar la pelea, insultando al referí y jugando<br />

fuerte con los codos mientras se trata de alejar a los del bando propio.<br />

Es un arte: la cáscara del técnico trabaja para que no le expulsen jugado-<br />

res mientras sus entrañas y su corazón, en comunicación directa con el<br />

óxido de los codos y las puntas de los pies, tratan de lastimar a alguien.<br />

47

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!