06.05.2013 Views

Algunos Diestros que Lidiaron Miuras - Fiestabrava

Algunos Diestros que Lidiaron Miuras - Fiestabrava

Algunos Diestros que Lidiaron Miuras - Fiestabrava

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

se libró de una cogida, yendo embrocado, por<br />

su oportunidad en tirarse al suelo.<br />

D) Juan Belmonte en sus últimos años.<br />

En los últimos años de su vida -a<br />

modo de colofón sobre este famoso torero y<br />

antes de pasar al apartado E): Cronología<br />

Belmontiana- Juan Belmonte frecuentaba una<br />

especie de tertulia muy heterogénea <strong>que</strong> se<br />

daban cita entre la 13:00 y 15:00 horas todos<br />

los días de la semana, excepto algunos<br />

sábados y domingos, en el célebre bar «Los<br />

Corales», de Sevilla, propiedad del santanderino<br />

Perlacia. A esta tertulia solía ir también<br />

Rafael (el Gallo), Diego Puerta y Paco Camino,<br />

entre otros muchos. Entre los más contertulios<br />

había de todas las profesiones, y algún<br />

<strong>que</strong> otro ex torero, como José Zarco. En esas<br />

reuniones informales acompañadas de frías<br />

«cañitas» de Cruz Campo... y ricas gambas<br />

rebosadas, casi nadie hablaba de toros y de<br />

toreros.<br />

«Sólo cuando alguien extraño llegaba<br />

con una noticia importante sobre algún<br />

suceso acaecido recientemente, o con la<br />

nueva de un fenómeno aparecido en la<br />

inagotable cantera <strong>que</strong> es la imaginación de<br />

los taurinos andaluces...», si no <strong>que</strong> se lo<br />

pregunten a los amigos del célebre Pepe<br />

Lerdo, taurino hasta donde usted quiera, al<br />

<strong>que</strong> conocimos en El Puerto de Santa María...<br />

y ya llevamos más de 50 años de ser amigos.<br />

Ahí nos vimos muchas veces también<br />

con ese otro extraordinario amigo don Antonio<br />

Morales... y al inolvidable don Carlos Melgarejo<br />

Osborne, al <strong>que</strong> toda Sevilla le debe un<br />

merecido homenaje y <strong>que</strong> un día me presentó<br />

allí al matador Diego Puerta, donde<br />

concretamos el día de ir a tranquilizar a distancia<br />

a su semental de Santa Coloma, al su<br />

cortijo llamado Escobero, <strong>que</strong> le bautizó así<br />

en honor al <strong>que</strong> tenía el Miura <strong>que</strong> lo catapultó<br />

a la gloria.<br />

«Juan, no dice don Enri<strong>que</strong> Vila, me<br />

recibía siempre con grande y delicada<br />

deferencia. Por razones <strong>que</strong> no son del caso,<br />

MIURA - 2002<br />

yo había estado muy distanciado de cuanto<br />

se llamara Juan Belmonte algunos años de<br />

mi vida. El tiempo y don Andrés Gago borraron<br />

todas las diferencias y volví al círculo de<br />

amigos de Juan. Una tarde coincidimos en el<br />

graderío de la plaza en el palco de los ganaderos.<br />

Fue la tarde en <strong>que</strong> Chamaco debutó<br />

en la Real Maestranza de Sevilla.<br />

Yo había hecho de Chamaco una<br />

campaña feroz e intransigente, como el anti<br />

frascuelismo de Peña y Goñi. La gente nos<br />

esperaba a los dos, y ante el temor de <strong>que</strong> se<br />

diera nuevamente el caso del Litri, cuando una<br />

tarde mala de Miguel Báez el público arremetió<br />

conmigo como si yo fuese el <strong>que</strong> toreaba, me<br />

refugié en el palco aquél, sobre el <strong>que</strong> caía un<br />

solazo terrible.<br />

Juan se sentó junto a mi. Vengo -me<br />

dijo- a ver a este torero. Sé <strong>que</strong> usted lo tiene<br />

muy visto... ¿Cómo es...? Luego<br />

permanecimos toda la corrida en silencio. El<br />

Chamaco cortó una oreja, pero Juan se<br />

despidió de mi sin decirme cómo lo había<br />

encontrado. Un día le preguntaron en la tertulia<br />

cómo toreaba un torero de su tiempo <strong>que</strong><br />

había alternado mucho con él, y contestó secamente:<br />

No me acuerdo.<br />

Juan hablaba de toros y de toreros<br />

cuando el tema y el contertulio le agradaban.<br />

Fuera de estos casos eludía la conversación<br />

como podía. Con Luis Bollaín, el notario de la<br />

tertulia, hablaba Juan muy a gusto de cosas<br />

de la Fiesta...<br />

Cierta mañana se presentó en su finca<br />

sevillana de Gómez Cardeña, un taurino muy<br />

calificado para pedir <strong>que</strong> le permitieran arreglar<br />

una corrida <strong>que</strong> traía de otros campos y <strong>que</strong><br />

su dueño no había permitido en manera<br />

alguna llevar a cabo semejante manipulación.<br />

Juan Belmonte estaba allí y el criado le llevó<br />

la razón del visitante. Cuando se enfrentó con<br />

éste, le dijo: Ahora mismo le vamos a cortar<br />

los pitones a todos esos toros. Con eso veo<br />

una cosa <strong>que</strong> no había visto nunca. Y ya no<br />

habló más <strong>que</strong> para el saludo de la despedida,<br />

acabada la operación.<br />

137

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!