Libro fiestas 2008 - Ayuntamiento de Biar

4.- Micrografía de un corte de hoja del plátano vista al microscopio, con abundantes
hifas externas de Microsphaera (flehas) que permiten identificar perfectamente
al hongo.
medad, llamada antracnosis se ve
favorecida por la humedad ambiental
y las bajas temperaturas en los
momentos que siguen a la brotación,
ya que se llevan a cabo descargas
masivas de esporas del hongo
que infectan las partes tiernas.
El daño en la brotación, si es
severo, puede afectar a toda la
copa y la apariencia es muy semejante
a la de una helada y, puesto
que a menudo coincide con bajadas
térmicas en los días previos, puede
confundirse con ésta.
Cuando el hongo en su expansión
llega al peciolo la hoja muere y cae.
Además de las hojas se ven afectadas
ramas finas y gruesas. Puede
dar lugar a una coloración amarilla
o anaranjada en las ramas que
delimita perfectamente el avance
de la infección.
Las hojas muertas que caen
conservan perfectamente el hongo
durante más de un año.
Por si no había bastante con los
dos hongos anteriores, la observación
de los tallos nos permitió
distinguir la presencia de otro agente
infectivo micótico, el Polyporus
hispidus, hongo también responsables
de antracnosis y que afecta a
tallos viejos con una degeneración
interna de los mismos en forma de
cancros de degeneración interna.
Esta infección que, literalmente,
se “come” los tallos por dentro es
posible que se deba a alguna poda
efectuada con anterioridad con
herramientas que podrían llevar
micelio de otros árboles y no fueron
desinfectadas previamente.
Pero además de estas tres infecciones
queremos llamar la atención
5.- Hifas de Apiognomonia veneta en hoja madura afectada (Flechas).
de algo que consideramos interesante,
el estudio miscroscópico de
las hojas nos ha mostrado una clara
evidencia de que éstas han sufrido
una importante degradación debida
al ozono troposférico. En nuestro
laboratorio hace tiempo que nos
dedicamos al estudio de la acción
de este potente contaminante en los
vegetales, de hecho somos el grupo
de Investigación pionero en España
en los estudios microscópicos de la
acción del ozono sobre las hojas de
los vegetales; junto a investigadores
del CEAM (Centro de Estudios
Ambientales del Mediterráneo)
hemos llevado a cabo una serie de
trabajos en este sentido desde el año
2000 que nos han permitido identificar
de manera muy clara los grandes
daños que produce este potente
foto-oxidante de origen antrópico
sobre las células de las hojas.
El ozono, producido por la acción
del sol sobre diversos contaminantes
que provienen de la combustión
de gasolinas y gasóleos, tiene una
presencia considerable en toda la
cuenca mediterránea y asciende,
desde las zonas costeras de mayor
producción, por los valles fluviales,
hacia zonas interiores más altas.
Cuando hablamos del ozono, la
mayoría de las personas piensan en
la capa de ozono de la estratosfera
que nos protege de diferentes radiaciones
solares peligrosas, pero pocos
saben que a niveles más bajos de
la atmósfera se produce un ozono,
llamado troposférico, que es muy
perjudicial para los seres vivos.
En el caso que nos ocupa, los
daños resultaron evidentes en
las hojas del plátano. Como hace
tiempo sospechábamos, la cuenca
del Vinalopó es un valle fluvial
que favorece la entrada de este gas
desde las zonas más bajas y nuestro
árbol, como no podía ser menos,
está afectado. A las tres afecciones
anteriores hay que sumar los procesos
hiperoxidativos del ozono que
colaboran a la degradación de un
ejemplar ya de por sí debilitado.
Sospechamos asimismo, que
las obras llevadas a acabo en las
inmediaciones, bien para la urbanización
y mejora del entorno, bien
para la edificación, han provocado
daños irreversibles sobre las raíces,
y estos daños han colaborado en la
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