30.04.2013 Views

'ANDANDO SE HACE EL CAMINO - DataSpace - Princeton University

'ANDANDO SE HACE EL CAMINO - DataSpace - Princeton University

'ANDANDO SE HACE EL CAMINO - DataSpace - Princeton University

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

lo que se da cita en la calle se alza como emisor de lamentaciones y quejas doloridas:<br />

las campanas de los relojes que en las calles solitarias del centro “concentran todos sus<br />

rumores”, adquiriendo “una sonoridad augusta y temible” (10); las lámparas eléctricas<br />

que se balancean produciendo “una queja triste y dolorida”; y el mismo aire que sopla<br />

entre las callejuelas produce un ruido agonioso, “como si pidiese auxilio” (75). La<br />

calle y el espectáculo sórdido y deplorable que se desarrolla en la misma hace sufrir al<br />

transeúnte, hasta el punto que éste decide renunciar “a salir a la calle durante el día”<br />

(6). De esta manera, parece justo afirmar que tras el título de la novela se esconde la<br />

imagen que el narrador quiere transmitir del mundo urbano y de sus calles: alejada de<br />

cualquier imagen paradisíaca o utópica, la ciudad es el locus del conflicto, del dolor y<br />

del lamento, un valor negativo que no es novedoso ni privativo de la novela de estos<br />

años pues como Ramos indica, aunque el referente citadino se haya modernizado, la<br />

ciudad aún conserva el “mundanal ruido” que despertaba el rechazo y el “menosprecio<br />

de corte” en renacentistas y barrocos (“Entre el organillo”145).<br />

Schorske resume tres actitudes de los escritores hacia la ciudad: si en el siglo<br />

XVIII la Ilustración veía la urbe con una actitud positiva, como cuna de la<br />

civilización, la educación y la cultura, en el XIX rechazó dicho entusiasmo y la ciudad<br />

empieza a ser considerada como escenario del vicio, una actitud que se intensifica a<br />

finales del siglo cuando, por la influencia naturalista, la ciudad es percibida como<br />

espacio artificial y como fuerza inductora que fomenta el desarraigo y la pérdida de<br />

sensibilidad (“Idea of the City” 109). Será ésta la visión que predomine en la novela<br />

de Benavides aunque, como se vio en Galdós o en Blasco, seguirá existiendo una<br />

visión contradictoria de la ciudad gestada en el XIX con Baudelaire, entre imagen<br />

fascinante que despierta admiración y una realidad conflictiva que impele al rechazo.<br />

Virtud y vicio, paraíso y conflicto, lo cierto es que a principios del siglo XX –y ésta es<br />

270

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!