30.04.2013 Views

'ANDANDO SE HACE EL CAMINO - DataSpace - Princeton University

'ANDANDO SE HACE EL CAMINO - DataSpace - Princeton University

'ANDANDO SE HACE EL CAMINO - DataSpace - Princeton University

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

“conserva” a Isidro, pero en cuanto sufre la burla de los amigos y su carrera política<br />

sufre peligro, el rico decide “prescindir del trato” y pone fin a las relaciones de<br />

patronazgo, y con ellas, a los sueños y aspiraciones burguesas del pobre (294). El<br />

libro, así como las notas a pie de página del mismo las cuales contienen el intelecto<br />

del autor, no serán leídas por nadie, como nos dirá más adelante el narrador, pues la<br />

erudición no sirve para nada: “Los nutridos de griego y latín están muertos de<br />

hambre” (231). Estableciendo una conexión entre experiencia callejera y actividad<br />

artística, las ideas y la sabiduría del personaje no le proporcionarán una visibilidad en<br />

las calles de Madrid donde casi morirá de hambre ante la indiferencia de los<br />

transeúntes. Aún con su cultura, “todos los caminos estaban cerrados para él” (297).<br />

El caminar del sujeto (en el libro y en la vida) sólo conduce a una ilusoria apariencia<br />

social y a una momentánea situación privilegiada de la que pronto será despojado para<br />

ser retornado a las afueras, al anexo de la urbe. El libro que había de concederle un<br />

espacio de representación y reconocimiento social entre la clase poderosa, que le<br />

proporcionaría sustento material y le facilitaría el aburguesamiento no será firmado<br />

por él y además no será leído por nadie. Una vez escrito y expuesto en los escaparates<br />

de las librerías, la gente se limita a “pasear la mirada por el índice” (200) sin<br />

comprarlo, igual que por las calles de Madrid el mundo contemplaba su marcha<br />

penosa sin un impulso de misericordia” (298).<br />

Mientras duran estas relaciones, el personaje adopta una conciencia<br />

plenamente burguesa cuyo proceso quedará manifestado en el recorrido por las calles<br />

abigarradas de El Rastro. Cuando el marqués le paga tres mil pesetas a cambio del<br />

libro, Maltrana se siente rico y le propone a Feli, hija de trapero, abandonar el barrio<br />

de las Carolinas y asentarse en el centro urbano para disfrutar de una existencia<br />

burguesa. La identidad social comienza por la conquista y posesión del espacio<br />

235

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!