El libro de Iván Salas

Quilish Hora Cero
Cajamarca, la lucha de un pueblo que defiende su vida y dignidad
Se levanta el bloqueo de la carretera: alegría,
abrazos, lágrimas. Cajamarca era el primer pueblo
en el que hacía retroceder a Newmont, la
compañía de oro más poderosa del mundo, los
cajamarquinos demostramos tener los «cojones»
suficientes.
Reinhard Seifert tuvo razón cuando decía:
«Yanacocha tiene mucha plata, pero le falta cerebro
y corazón.»
Sabíamos que este era una victoria temporal,
Newmont insistiría en regresar más adelante.
No faltaron las posiciones infantiles que nos tildaban de traidores por haber
aceptado el término SIN EFICACIA en lugar de NULIDAD. Lo curioso es que
durante la reunión del viernes por la tarde se juntaron «perro, pericote y gato»:
infiltrados, una dama esposa de un policía del servicio de inteligencia,
radicaloides que decían: «¡Hay que ir hasta las últimas consecuencias!»¿Cuáles
eran las últimas consecuencias para esta posición irracional: muertos, heridos,
para según su lógica «despertar» al pueblo? Esta posición irresponsable fue
rechazada por la población y quedó como debería quedar: totalmente asilada.
El Comité Cívico Unitario emitió un comunicado público explicando la Resolución
427 y alertando a la población que tendría que continuar organizándose y
vigilantes, pues de MY todo se puede esperar.
El comunicado incluía los siguientes acuerdos:
1º Solicitar la inmediata desactivación de la Mesa de Diálogo de la CAO-BANCO
MUNDIAL, por haberse convertido en «vocera» de MY.
2º Exigir a los gobiernos municipal y regional, la instalación de la mesa de
diálogo, en la que deberán participar los genuinos representantes de la
sociedad civil organizada.
3º Exigir al Ministerio de Energía y Minas a través del Tribunal Minero, expida
la resolución definitiva que declare la improcedencia de exploración y
Iván Salas Rodríguez
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