El libro de Iván Salas

Quilish Hora Cero
Cajamarca, la lucha de un pueblo que defiende su vida y dignidad
Testimonio de César Vigo Arribasplata (miembro de la Red Juvenil por los
Derechos Humanos):
11a.m. «El discurso municipal sorpresivamente ha cambiado, ya no dicen,
como dijeron en todos los medios de televisión nacional: ‘ sólo son un grupo
de personas azuzando a los campesinos para sacar provechos. No digan que
hay contaminación porque eso espanta al turismo’. Da risa… Ahora dicen: ‘
Siempre hemos estado con ustedes; el cerro Quilish no se vende, el cerro
Quilish se defiende; ¿quién se vende entonces?, sigue diciendo Emilio Horna,
Alcalde de Cajamarca. No sabíamos nada de la autorización para explorar,
pedimos la renuncia del Ministro; fue hecho a nuestras espaldas’. Quien le
cree.»
Emilio Horna (Alcalde de la provincia de Cajamarca), y Felipe Pita (Presidente
del gobierno regional de Cajamarca) están en el estrado. Emilio comienza a
pronunciarse frente a los cajamarquinos que lo reciben con una ensordecedora
pifia.
“¡Alcalde vendido!”, grita el pueblo que empieza a ofuscarse, las pifias son
contundentes; el pueblo no es tonto.
Este testimonio de César refleja la indignación de la ciudadanía frente a la
ESCOPETA DE DOS CAÑONES, al doble discurso de las autoridades. El
Presidente de la Región llegó tarde al estrado, fue igualmente pifiado.
«Los estudiantes universitarios bloquean la carretera a la costa. Los policías
disparan contra los alumnos, los muchachos se repliegan a los costados para
escapar, el helicóptero los persigue. No es mayo del 68 en París ni Vietnam,
es Cajamarca. Una vaca es alcanzada por los gases y sufre un desmayo.
La preocupación se agranda, han encontrado un cuerpo sin vida en la avenida
San Martín, la desesperación aumenta, la fiscal se aproxima al cuerpo y
descubre que era una momia antiquísima, esta había sido huaqueada de
Huacaloma, pasamos un susto.»
(Testimonio de César Vigo Arribasplata. «Crónica del primer día del paro
provincial por la Intangibilidad del cerro Quilish»).
La dirigencia estudiantil universitaria presidida por el estudiante Cliver Bernal
comprendió que los bloqueos no podían ser permanentes, pues estos afectaban a
Iván Salas Rodríguez
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