27.04.2013 Views

Historia de los Patriarcas y Profetas (2008) - Ellen G. White Writings

Historia de los Patriarcas y Profetas (2008) - Ellen G. White Writings

Historia de los Patriarcas y Profetas (2008) - Ellen G. White Writings

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

616 <strong>Historia</strong> <strong>de</strong> <strong>los</strong> <strong>Patriarcas</strong> y <strong>Profetas</strong><br />

aparecieran a la mesa <strong>de</strong>l rey; pero David temía presentarse, y quedó<br />

arreglado que visitara a sus hermanos en Belén. A su regreso se<br />

escon<strong>de</strong>ría en un campo no muy distante <strong>de</strong>l salón <strong>de</strong> banquetes, y<br />

durante tres días se mantendría ausente <strong>de</strong> la presencia <strong>de</strong>l rey; y<br />

Jonatán observaría <strong>los</strong> efectos en Saúl. En caso <strong>de</strong> que preguntara<br />

por el para<strong>de</strong>ro <strong>de</strong>l hijo <strong>de</strong> Isaí, Jonatán diría que se había ido para<br />

asistir al sacrificio ofrecido por la casa <strong>de</strong> su padre. Si el rey no<br />

expresaba ira, sino que contestaba: “Bien está”, entonces no sería<br />

peligroso para David volver a la corte. Pero si el rey se enfurecía por<br />

la ausencia, ello <strong>de</strong>cidiría que David <strong>de</strong>bía huir.<br />

El primer día <strong>de</strong>l banquete el rey no inquirió acerca <strong>de</strong> la ausencia<br />

<strong>de</strong> David, pero cuando su sitio estuvo vacante el segundo día,<br />

preguntó: “¿Por qué no ha venido a comer hoy ni ayer el hijo <strong>de</strong><br />

Isaí? Jonatán respondió a Saúl: “David me pidió encarecidamente<br />

que lo <strong>de</strong>jara ir a Belén. Me dijo: ‘Te ruego que me <strong>de</strong>jes ir, porque<br />

nuestra familia celebra sacrificio en la ciudad y mi hermano me lo ha<br />

<strong>de</strong>mandado; por lo tanto, si he hallado gracia a tus ojos, permíteme<br />

ir ahora para visitar a mis hermanos’. Por esto no ha venido a la<br />

mesa <strong>de</strong>l rey””.<br />

Cuando Saúl oyó estas palabras, su ira se <strong>de</strong>senfrenó. Declaró<br />

que mientras viviera David, Jonatán no podría subir al trono <strong>de</strong><br />

Israel, y exigió que se buscara en seguida por David, para ejecutarlo.<br />

Jonatán nuevamente intercedió por su amigo, suplicando: “¿Por qué<br />

morirá? ¿Qué ha hecho?” Esta súplica dirigida al rey sirvió solo para<br />

hacerlo más satánico en su furia, y arrojó a su propio hijo la lanza<br />

que había <strong>de</strong>stinado para David.<br />

El príncipe se acongojó y se indignó, y saliendo <strong>de</strong> la presencia<br />

real, no asistió más al banquete. El dolor agobiaba su alma cuando<br />

fue, en el momento señalado, al sitio don<strong>de</strong> <strong>de</strong>bía comunicar a David<br />

las intenciones <strong>de</strong>l rey hacia él. Ambos se abrazaron y lloraron<br />

amargamente. El odio sombrío <strong>de</strong>l rey oscurecía la vida <strong>de</strong> <strong>los</strong><br />

jóvenes, y el dolor <strong>de</strong> el<strong>los</strong> era <strong>de</strong>masiado intenso para que pudieran<br />

expresarlo con palabras. Las últimas palabras <strong>de</strong> Jonatán cuando se<br />

separaron para seguir cada uno su respectivo camino cayeron en el<br />

oído <strong>de</strong> David. Fueron: “Vete en paz, porque ambos hemos jurado en<br />

nombre <strong>de</strong> Jehová, diciendo: “Que Jehová esté entre tú y yo, entre<br />

tu <strong>de</strong>scen<strong>de</strong>ncia y mi <strong>de</strong>scen<strong>de</strong>ncia, para siempre””.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!