27.04.2013 Views

Historia de los Patriarcas y Profetas (2008) - Ellen G. White Writings

Historia de los Patriarcas y Profetas (2008) - Ellen G. White Writings

Historia de los Patriarcas y Profetas (2008) - Ellen G. White Writings

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

José y sus hermanos 195<br />

Jacob esperaba ansiosamente el regreso <strong>de</strong> sus hijos, y a su regreso<br />

todo el campamento se reunió anhelante alre<strong>de</strong>dor <strong>de</strong> el<strong>los</strong><br />

mientras relataban a su padre todo lo que había ocurrido. La alarma<br />

y el recelo llenaron el corazón <strong>de</strong> todos. La conducta <strong>de</strong>l gobernador<br />

egipcio sugería que algo no andaba bien, y sus temores se confirmaron,<br />

cuando al abrir <strong>los</strong> sacos cada uno encontró su dinero. En<br />

su angustia el anciano padre exclamó: “Me habéis privado <strong>de</strong> mis<br />

hijos: José no aparece, Simeón tampoco y ahora os llevaréis a Benjamín.<br />

Estas cosas acabarán conmigo. Rubén respondió a su padre:<br />

“Quítales la vida a mis dos hijos, si no te lo <strong>de</strong>vuelvo. Confíamelo a<br />

mí y yo te lo <strong>de</strong>volveré””. Estas palabras temerarias no aliviaron la<br />

preocupación <strong>de</strong> Jacob. Su respuesta fué: “No <strong>de</strong>scen<strong>de</strong>rá mi hijo<br />

con vosotros, pues su hermano ha muerto y él ha quedado solo;<br />

si le acontece algún <strong>de</strong>sastre en el camino por don<strong>de</strong> vais, haréis<br />

<strong>de</strong>scen<strong>de</strong>r mis canas con dolor al seol”.<br />

Pero la sequía continuaba, y al cabo <strong>de</strong> cierto tiempo la provisión<br />

<strong>de</strong> granos que habían traído <strong>de</strong> Egipto estaba casi agotada. Los<br />

hijos <strong>de</strong> Jacob sabían muy bien que sería vano regresar a Egipto sin<br />

Benjamín. Tenían poca esperanza <strong>de</strong> cambiar la resolución <strong>de</strong>l padre,<br />

y esperaban la crisis en silencio. La sombra <strong>de</strong>l hambre se hacía<br />

cada vez más oscura; en <strong>los</strong> rostros ansiosos <strong>de</strong> todo el campamento<br />

el anciano leyó su necesidad; por fin dijo: “Volved, y comprad para<br />

nosotros un poco <strong>de</strong> alimento”.<br />

Judá contestó: “Aquel hombre nos advirtió con ánimo resuelto:<br />

“No veréis mi rostro si no traéis a vuestro hermano con vosotros”.<br />

Si envías a nuestro hermano con nosotros, <strong>de</strong>scen<strong>de</strong>remos y te compraremos<br />

alimento. Pero si no lo envías, no <strong>de</strong>scen<strong>de</strong>remos, porque<br />

aquel hombre nos dijo: “No veréis mi rostro si no traéis a vuestro<br />

hermano con vosotros””. Génesis 43:3-5. Viendo que la resolución<br />

<strong>de</strong> su padre empezaba a vacilar, agregó: “Envía al joven conmigo;<br />

nos levantaremos e iremos enseguida, a fin <strong>de</strong> que vivamos y no<br />

muramos, ni nosotros, ni tú, ni nuestros niños” y se ofreció como<br />

garante <strong>de</strong> su hermano, comprometiéndose a aceptar la culpa para<br />

siempre si no <strong>de</strong>volvía a Benjamín a su padre. [205]<br />

Jacob no pudo negar su consentimiento por más tiempo, y or<strong>de</strong>nó<br />

a sus hijos que se prepararan para el viaje. También les mandó que<br />

llevaran al gobernador un regalo <strong>de</strong> las cosas que podía proporcionar<br />

aquel país <strong>de</strong>vastado por el hambre, “un poco <strong>de</strong> bálsamo, un poco <strong>de</strong>

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!