25.04.2013 Views

la historia de patriarcas y profetas

la historia de patriarcas y profetas

la historia de patriarcas y profetas

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

604 PATRIARCAS Y PROFETAS<br />

expresamente albergar <strong>la</strong> codicia como se le prohibió a<br />

Acán que tomara <strong>de</strong>spojos en Jericó. Dios <strong>de</strong>c<strong>la</strong>ra que <strong>la</strong><br />

codicia o avaricia es ido<strong>la</strong>tría. Se nos amonesta: No<br />

podéis servir a Dios y a Mamón." "Mirad, y guardaos <strong>de</strong><br />

toda avaricia." "Ni aun se nombre entre vosotros." (Col. 3:<br />

5; Mat. 6: 24; Luc. 12: 15; Efes. 5: 3.) Tenemos ante<br />

nosotros <strong>la</strong> terrible suerte que corrieron Acán, Judas,<br />

Ananías y Safira. Y aun antes <strong>de</strong> estos casos tenemos el<br />

<strong>de</strong> Lucifer, aquel "hijo <strong>de</strong> <strong>la</strong> mañana" que, codiciando una<br />

posición más elevada, perdió para siempre el resp<strong>la</strong>ndor y<br />

<strong>la</strong> felicidad <strong>de</strong>l cielo. Y no obstante, a pesar <strong>de</strong> todas estas<br />

advertencias, <strong>la</strong> codicia reina por todas partes. [531]<br />

Por doquiera se ve su viscosa huel<strong>la</strong>. Crea <strong>de</strong>scontento<br />

y disensión en <strong>la</strong>s familias; <strong>de</strong>spierta en los pobres envidia<br />

y odio contra los ricos; e induce a éstos a tratar cruelmente<br />

a los pobres. Es un mal que existe no sólo en <strong>la</strong>s esferas<br />

seg<strong>la</strong>res <strong>de</strong>l mundo, sino también en <strong>la</strong> iglesia. ¡Cuán<br />

común es encontrar entre sus miembros egoísmo, avaricia,<br />

ambición, <strong>de</strong>scuido <strong>de</strong> <strong>la</strong> caridad y retención <strong>de</strong> los<br />

"diezmos <strong>la</strong>s primicias"! Entre los miembros <strong>de</strong> <strong>la</strong> iglesia<br />

que gozan <strong>de</strong>l respeto y <strong>la</strong> consi<strong>de</strong>ración <strong>de</strong> los <strong>de</strong>más<br />

hay, <strong>de</strong>sgraciadamente, muchos Acanes. Más <strong>de</strong> un<br />

hombre asiste ostentosamente al culto y se sienta a <strong>la</strong><br />

mesa <strong>de</strong>l Señor mientras que entre sus bienes se ocultan<br />

ganancias ilícitas, cosas que Dios maldijo. A cambio <strong>de</strong> un<br />

buen manto babilónico, muchos sacrifican <strong>la</strong> aprobación <strong>de</strong><br />

<strong>la</strong> conciencia y su esperanza <strong>de</strong>l cielo. Muchos truecan su<br />

integridad y su capacidad para ser útiles, por un saco <strong>de</strong><br />

monedas <strong>de</strong> p<strong>la</strong>ta. Los c<strong>la</strong>mores <strong>de</strong> los pobres que sufren<br />

son <strong>de</strong>soídos; se le ponen obstáculos a <strong>la</strong> luz <strong>de</strong>l<br />

Evangelio; existen prácticas que provocan el <strong>de</strong>sprecio <strong>de</strong><br />

los mundanos y <strong>de</strong>smienten <strong>la</strong> profesión cristiana; y sin<br />

embargo, el codicioso continúa amontonando tesoros.<br />

"¿Robará el hombre a Dios? Pues vosotros me habéis

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!