Congreso Internacional SARE 2004 - Emakunde
Congreso Internacional SARE 2004 - Emakunde
Congreso Internacional SARE 2004 - Emakunde
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
tamente. Necesitaríamos más tiempo para analizarlas más detalladamente, pero lo que sí indican<br />
las críticas es que el alejamiento del proceso de construcción europea en el caso de las mujeres es,<br />
si cabe, de mayor amplitud y relevancia mirado en el conjunto de la ciudadanía.<br />
Una observación más sobre la problematicidad de la ciudadanía, y que también fue objeto de crítica<br />
en dicha reunión, se refiere a los Derechos Humanos y a que en el proyecto se diga que “La<br />
Unión procurará adherirse al Convenio Europeo para la protección de los Derechos Humanos y<br />
de las libertades fundamentales”. Cierto es que “procurará adherirse” causa perplejidad, que quizás<br />
se pueda comprender atendiendo a cómo interpretar lo recogido en el mismo artículo en el<br />
punto 3: “los derechos fundamentales que garantiza el Convenio Europeo para la Protección de<br />
los Derechos Humanos y de las Libertades Fundamentales y los que son fruto de las tradiciones<br />
constitucionales comunes a los Estados miembros forman parte del Derecho de la Unión como principios<br />
generales”. ¿Acaso no se adhirieron todos los países al Convenio Europeo y, por tanto, hay<br />
que esperar a que lo hagan? O, si no es así, donde está el problema. Quizás sean principios generales<br />
y “procurará adherirse” solo se comprende en el encaje de una construcción europea tensionada<br />
por avanzar en el ámbito jurídico-político comunitario y las constituciones de los distintos<br />
Estados, y que remiten a problemas con el Tribunal de Justicia Europeo y con el Tribunal Europeo<br />
de Derechos Humanos. No está muy claro, para mí por lo menos, cómo se articulan derechos humanos<br />
y derechos de ciudadanía, más allá de responder a un proceso de juridificación progresiva<br />
de los derechos, y que también se refleja en el tratamiento de los derechos culturales y del derecho<br />
a la cultura como derechos humanos en la Carta de Derechos fundamentales de la UE.<br />
Como digo, la vía que parece seguirse es la que sólo tiene presente la juridificación de las cuestiones<br />
fundamentales.<br />
Por último apenas indicar que tal vez donde mejor se detectan los dilemas y tensiones que impregnan<br />
la construcción de la UE, donde se constata que la cultura es política y que la propia comprensión<br />
de la cultura está cambiando hacia una visión más igualitaria, la encontramos cuando se<br />
considera el déficit simbólico y se examina la política cultural y las directrices que orientaron en los<br />
últimos años la idea de la “Europa de la Cultura”. Muy revelador resulta, en este sentido, el análisis<br />
que lleva a cabo Lourdes Méndez (2003) de los textos, debates y documentos internacionales<br />
e institucionales europeos sobre la cultura y la dificultad, ambigüedad o ausencia de definición de<br />
lo que se entiende por cultura, derecho a la cultura, derechos culturales, democracia cultural, democratización<br />
de la cultura y los problemas para conseguir un consenso. Quizás eso explique por<br />
qué en la Carta de Derechos Fundamentales de la Unión, la cultura no está muy presente. Sólo<br />
aparece en tres ocasiones la palabra cultura: en el Preámbulo, en el art. 22 y en el 25. Como han<br />
indicado algunas personas analistas de la Carta, ni siquiera recoge o menciona la Declaración<br />
Universal de la UNESCO sobre diversidad cultural, ni la Declaración de Ministros del Consejo de<br />
Europa relativa a la diversidad cultural (dic. 2000) lo que lleva a afirmar que “no sólo no existe<br />
una estructura interna armónica en el reconocimiento de los derechos (culturales), de la conexión<br />
entre el Derecho y la Cultura, sino que la mayor parte de los derechos que de ella deberían derivarse<br />
fueron succionados por el nimio artículo 22, quedando trasladados al olvido. Tendrá, conti-<br />
153