RAQUEL MARZÀ ESTEVE

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RAQUEL MARZÀ ESTEVE

Bloque temático I
Problematizar lo que (nos) pasa en
educación.
La problematización de nuestra experiencia educativa como
punto de partida. ¿Qué nos pasa en educación? ¿Qué contar de lo
que pasa en educación?
La educación a la luz de las nuevas condiciones del
presente: las condiciones antipedagógicas de nuestros actuales
modos de ida y los retos educativos que se derivan.
Hacia otro modo de pensar y hacer educación. Praxis,
alteridad, natalidad, narratividad y problematización.
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20/2/08
Hasta hace poco nunca me había parado a pensar en el hecho de que la
educación que había recibido podía haber influenciado en mi manera de ser.
En él como soy y en el cómo pienso ahora en estos mismos momentos.
Supongo que era una cosa que de lógica estaba ahí, pero que no merecía ser
investigada. No sé, supongo que a veces es más fácil vivir sin pensar, sin
esforzarnos, vivir estables, sin cambios.
De la escuela?, tengo buenos momentos. Uff!! Por una parte me
encanta! Siempre he sido muy revolucionaria, en contra de todo y de todos
los normales, bueno en contra en contra no, pero siempre a la mía. Cada vez
que lo recuerdo me rio, nosotros los más grandes (no en edad, sino en
estado emocional), los más fuertes, aquellos jovencitos que se las
inventaban de la manera más escabrosa para sentir a su alrededor un
círculo, una especie de aura con energía extraña, una energía que nos hacía
sentirnos colosales y felices.
Sí, también hay otras imágenes de situaciones de verdadero apuro,
de sentirse muy pequeñína, de peleas, de discriminaciones, de… , Sí, si me
pongo a recordarlas me pueden venir algunas a la memoria, pero ni punto de
comparación tienen con los buenos momentos, con aquellas mil y una
anécdotas divertidas que simplemente recordándolas arrancan una sonrisa.
Pero bueno, recapitulemos. Si no he entendido mal, el propósito de
este diario es algo así como intentar plasmar en un escrito los contenidos de
la materia, y como han podido afectarme hasta la fecha.
No sé si será cierto o no, pero para mí la palabra diario tiene dos
connotaciones. Por un lado puede estar la relacionada con hechos históricos,
rutina, noticias, sucesos, no sé como aquel panfleto supuestamente objetivo
que la gente compra o regala todos los días para mantenernos informados de
lo que alrededor y en el mundo pasa.
Por otro lado, estaría aquel escrito intimista que hacemos las
personas como autoayuda con el fin de comprender mejor las cosas que a
nuestro alrededor pasan. Sin duda, no soy periodista ni editora, por lo
tanto, a pesar de la incertidumbre que esto me pueda suponer, probaré con
la segunda opción!.

Pues bien, según el típico diccionario vox de toda la vida, el vocablo
didáctica hace referencia al arte de enseñar.
Uhhmm!!!!, quizás pueda ser muy importante!!, De hecho, como posible
educadora, no estaría mal tantear las opciones que se me planteen, con el fin
de aprender a discernir que quiero y que no quiero que aparezca en mi
quehacer cotidiano.
Por lo tanto, educar, instruir, ilustrar etc. Pero, ¿de qué modo?,
¿haciendo jerarquías donde la ciencia y la razón ocupen una cumbre
inalcanzable?, u ¿optando por discursos que desesclavicen, inventen y
puedan ayudarme a encontrar nuevas maneras de ver el devenir de la
educación y la vida?
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21/2/08
* “Una lengua para la conversación”. “Algunas notas sobre las
experiencias y sus lenguajes”. Jorge Larrosa.
Por todas partes se fomenta la comunicación. Todos los días se nos invita a hablar y
a escuchar, a leer y a escribir, a participar activamente en esa gigantesca maquinaria de
fabricación y de circulación de informes, proyectos, textos etc. Pero ¿en qué lengua?
El lenguaje no es sólo algo que tenemos, sino caso todo lo que somos. Determina la
sustancia y la forma del mundo y de nosotros mismos. De nuestro pensamiento y de nuestra
experiencia. Pensamos con nuestras palabras y vivimos según la lengua que nos hace y
estamos hechos. Y ahí el problema no es sólo lo que decimos, y qué es lo que podemos decir,
sino también, y sobre todo, cómo lo decimos: el modo como distintas maneras de decir nos
ponen en distintas relaciones con el mundo, con nosotros mismos y con los otros.
Algunas formas de hablar y escuchar, leer y escribir, extienden la sumisión, el
conformismo, la estupidez, la arrogancia.
Al preguntar si esa lengua puede ser la nuestra no estoy hablando ni de mi lengua ni
de la tuya, ni tampoco de alguna lengua que podría ser común para ti y para mí. En lo que
respecta a la mía, lo único que sé, es que la estoy buscando cada vez que hablo o que escribo
o que escucho o que leo y que, en todo caso nunca seré yo quién la encuentre. Además he

aprendido a desconfiar de cualquier “nosotros” enunciado con la pretensión de incluirme en
cualquier identidad posicional de tipo nosotros los profesores, nosotras las mujeres…
nosotros los que tenemos algo en común. Cuando oigo alguno de esos “nosotros” me dan
ganas de levantar la mano y decir que yo no tengo nada que ver con eso.
Lo que quiero decir es que cuando leo que circula por esas redes de comunicación u
oigo lo que se dice en esos encuentros de especialistas, la mayoría de veces tengo la
impresión de que ahí funciona una especie de lengua de nadie, una lengua neutra y
neutralizada, de la que se ha borrado cualquier marca subjetiva. Entonces lo que me pasa es
que me dan ganas de levantar la mano y de preguntar ¿Hay alguien ahí? Además siento que
también esa lengua no se dirige a nadie, que construye un lector u oyente totalmente
abstracto e impersonal. Una lengua sin sujeto sólo puede ser la lengua de unos sujetos sin
lengua… esa lengua no tiene que ver con nadie, es una lengua que nadie habla y que nadie
escucha, es una lengua sin nadie dentro.
Todos los días, en nuestro quehacer cotidiano, utilizamos la
comunicación plasmada en un lenguaje articulado, inarticulado o gestual.
De hecho, si lo pensamos un poco, por mucho que queramos y que lo
intentemos, no podemos construir ningún pensamiento sin un lenguaje.
Dicho de otro modo, todo pensamiento va unido al lenguaje que vamos
aprendiendo en el transcurso del camino, de igual manera, el desarrollo del
lenguaje va unido al pensamiento. Por ello, como dice el autor, el lenguaje
determina la sustancia, la forma del mundo y de nosotros mismos. Con lo
cual, sólo podremos saber que somos y como somos a través de un proceso
lingüístico.
Ahora bien, la controversia aparece cuando observamos la lengua que
estamos manejando: si utilizamos aquellas formas que nos perpetúan a la
sumisión de lo normado, al conformismo, a lo acabado, sistematizado etc. o,
por si de lo contario creemos en una lengua inacabada, en continua
construcción. Una lengua que se busca junto con el encuentro de nuestra
propia identidad. Una lengua incompleta e imperfecta según el tiempo y el
contexto que nos describa, que nos ayude a saber qué decir de nosotros
mismos y como decirlo.
Sí, en la medida que uno piensa que tiene un lenguaje propio, deja de
buscarlo. Deja de inquietarle, de intrigarle la búsqueda porque piensa que
ya lo tiene todo. Ya nada más merece la pena ser escuchado ni encontrado
porque ya se ha encontrado la perfección, la plena satisfacción.
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Pero! ¿Realmente se puede vivir de acuerdo a esta postura?
¿Podemos vivir tercos a esta posición?.
Sí, podemos vivir sin que nos preocupe la plurabilidad del lenguaje,
como hacen muchos de los que nos rodean. Pero…, una vez abierto los ojos,
¡qué pena! ¿No?, seguir viviendo coartados.
Sabemos que de cada viaje, de cada libro, de cada contacto
aprendemos. Inconscientemente esa información percibida es almacenada
para influenciar nuestras futuras compresiones, impresiones, conocimiento,
lenguaje.
Nuestro modo de ver las cosas y el mundo están reguladas por el
lenguaje que utilizamos.
Las experiencias conforman nuestro mundo, las palabras crean
nuestra realidad.
palabras.
Nuestro mundo se empequeñece a medida que se nos reducen las
El ser humano es un ser inconcluso por naturaleza, un ser plural que
siempre está en continuo cambio. Por ello resulta muy difícil encontrar una
lengua que delimite e identifique a cada uno de nosotros, porque desde el
momento en que esta lengua estaría delimitada aparecería una nueva
interacción que cambiaría pretextos.
I.” hay un intento en marcha para librar al lenguaje de su incómodo espesor, un
intento de borrar de las palabras todo sabor y toda resonancia, el intento de imponer por la
violencia un lenguaje liso, sin manchas, sin sombras, sin arrugas, sin cuerpo, la lengua de los
deslenguados, una lengua sin otro en la que nadie se escuche a sí mismo cuando habla, una
lengua despoblada”. “ la Intimidad, J.L Pardo”.
¿Existe el lenguaje connotativo y denotativo dependiendo de las
informaciones?.
El lenguaje denotativo es aquel que intenta eliminar toda la parte
connotativa de la comunicación;”la lengua que hablan los deslenguados”. Hace
referencia a aquella parte más clara, más objetiva, a aquel lenguaje
puramente informativo que es compartido por todos los hablantes.
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El lenguaje connotativo encarna la parte subjetiva de la palabra, la
parte sensible del lenguaje. Reproduce por tanto, la parte más oscura, más
abierta, más sucia de la comunicación.
Cada individuo, percibe un significado, una idea, un sentimiento…
dependiendo de su realidad en esos mismos momentos.
Creo que sí, que si que puede existir un lenguaje connotativo y otro
denotativo dependiendo de las informaciones que recibamos. ¿Por qué?
Porque sólo hay que ver el carácter del lenguaje puramente informativo, las
señales etc. Ahora bien, si la pregunta está encaminada a que lenguaje
debería predominar en educación, diremos que es justamente lo que ensucia
lo que nos parece interesante. No lo que meramente nos da información, sino
lo que acompasa esa información con efectos.
Es decir, lo importante en educación es aquella parte del lenguaje
connotativa que va pareja a lo que tenemos que aprender, porque eso es lo
que provoca los efectos, eso es lo que por un lado nos puede involucrar en
una asignatura o tema, o lo que por el otro, nos puede hacer pasar de ella.
No hay políticas de la verdad que no sean al mismo tiempo políticas de la lengua.
Iniciarse en un área del saber es aprender sus reglas lingüísticas: aprender a
hablar, a escuchar, a leer y a escribir como está mandado.
Pertenecer a una comunidad de especialistas supone haber interiorizados sus
vocabularios y sus gramáticas, manejar correctamente sus reglas de construcción y de
interpretación de enunciados, saber usar los lenguajes de la tribu. Pero de este modo, si
una lengua es un dispositivo de acogida y de pertenencia, también es un dispositivo de
rechazo y de exclusión de aquellos que no la dominan, que no la aceptan, que no se sienten a
gusto con ella, que no la usan, que no se someten a sus reglas, que no obedecen a sus
imperativos.
......llegados a ese nivel, todo el mundo ya supiera leer y escribir, y que si no se sabe,
lo único que hay que hacer es mejorar las competencias instrumentales de expresión y
comprensión. Como si leer no fuera otra cosa que poner sobre el papel lo que uno ya sabe.
Sin embargo él que la lectura y la escritura no se problematicen explícitamente no
significa que no sean el lugar de potentísimos mecanismos de control. Si no fuera por esos
mecanismos sería imposible la imposición generalizada y la posterior naturalización de esa
lengua de nadie.
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La lengua es un mecanismo de control social, que puede servir para
distinguir posiciones sociales. Los médicos, los políticos, los técnicos de aire
acondicionado y cada grupo social utilizamos un determinado lenguaje. Un
determinado código que nos permite mantener un estatus privilegiado entre
los que se sienten componentes de ese mismo grupo. De manera, que no
todos nos encontremos en el mismo estatus. Ahora bien, el problema viene a
la hora de pensar de qué manera utilizamos ese lenguaje y esa forma de
comunicarnos. Porque dependiendo del uso que le demos, lo podemos
convertir en una herramienta de comunicación social o en una barrera.
Además podemos decir que el lenguaje es un problema de políticas
también, por qué las políticas de la verdad van íntimimamente unidas a las
políticas de la lengua. Ya que como hemos comentado arriba, cada sector de
nuestra sociedad y cada ámbito cultural tiene adscrito un lenguaje y cada
verdad relativa a ese sector, es entendida a medida que entiendes ese
lenguaje. Contendiendo de este modo, una batalla entre las distintas formas
de ver y producir la verdad, ya que cada ideología política, cada docente,
cada religión etc busca su propia verdad y adoptando el lenguaje como arma
de doble filo según su conveniencia.
Ahora bien, si dejamos que en lo que a educación se refiere se
imponga un lenguaje igualitario, estándar y homogéneo donde no tengan
cabida los conocimientos y pensamientos de cada sujeto, estaremos llevando
nuestro verdadero yo al borde del precipicio. ¿ por qué? Pues, porque como
hemos nombrado reiteradamente existen maneras de construir unas
determinadas verdades que concluyen en unas determinadas políticas o
ciencias u otras. De hecho, la ciencia y la ideología van unidas, y al mismo
tiempo la ideología va a la par con la política, con lo cual la ciencia es un
campo de batalla donde se juegan intereses de unos u otros políticos.
Entonces, ¿qué hay que hacer para que los procesos por los cuales
accedemos al saber de la educación, a la política, a la medicina etc nos
incluyan?, ¿cómo hacer para que la ciencia y la verdad dejen el modo
normado y se erijan de modo democrático para modificar lo vertical y lo
distanciado volviéndolo horizontal y cercano al individuo?.
Sinceramente es un camino muy difícil, no imposible, pero tal y como
están las cosas muy complicado. Y más complicado seguirá siendo en la
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medida que nos veamos insertos en una sociedad tecnocrática donde dentro
del quehacer cotidiano cada vez más, es más valorado el discurso científico
riguroso que el crítico.
No sé, supongo que desde aquí mi labor, mi postura, mi decisión es
enseñar lo que me he encontrado en el camino a todos aquellos a los que vea
dispuestos a escucharlo. Es decir, informarles para que ellos también
puedan decidir sin ser dirigidos, o que al menos siendo conscientes de que
estamos siendo adiestrados por un sistema nos excluye.
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22/2/08.
II. Se han configurado dos lenguajes dominantes en el campo educativo: el lenguaje
de la técnica y el lenguaje de la crítica.
El primero es el de los científicos, él de los que usan ese vocabulario de la eficacia,
de la evaluación, de los que se sitúan en posiciones de poder a través de posiciones de
saber.
El segundo es el de los críticos, que usan el vocabulario de la reflexión sobre la
práctica o en la práctica. Consideran la educación como una praxis política encaminada a la
realización de ciertos ideales como la libertad, la igualdad o la ciudadanía y de los que
critican la educación tanto que destruye vínculos sociales.
El lenguaje de los que se sitúan en posiciones de poder a través de convertirse en
portavoces de esos ideales constantemente desmentidos, una y otra vez desengañados. De
este modo, nos encontramos con la lengua que anuncia lo que debería haber.
El lenguaje de los que hablan en nombre de la realidad y de los que hablan en
nombre del futuro.
La educación debe transformar lo que hay a través de su propia transformación, el
campo pedagógico fabrica proyectos para una cierta práctica.
Ahora bien, si hablamos alguna variante de ese lenguaje que elabora
constantemente proyectos para la acción trazando puentes entre hechos ( verdaderos)
sobre lo que es y ( buenas) intenciones sobre lo que debería ser, tendremos un lugar y
asegurado en el campo. Pero ese lenguaje nos parece vacío y se nos está haciendo
incomprensible. Porque se limita a gestionar lo que ya se sabe, lo que ya se piensa.
Tanto los técnicos como los críticos ya han dicho todo lo que tenían que decir y ya
han pensado lo que tenían que pensar.
Y aunque aún sigan siendo capaces de enunciados distintos e ideas novedosas, su
gramática ya está constituida, cualquier cosa que se produzca en su interior da la sensación

de “ ya dicho”, “ ya pensado”, una sensación de que podemos seguir hablando o pensando en
su interior sin esfuerzo, sin sobresaltos casi sin darnos cuenta.
Ese lenguaje se hace impronunciable por su carácter totalitario que convierte en
obligatorias tanto una forma de la realidad como una forma de la acción humana.
transformarlo.
Siempre se habla desde arriba y el sujeto pretende definir el mundo y
esa sensación de un lenguaje de aspirantes a intelectual, portavoz autorizado…
Hasta el momento, si es verdad que sólo conocía dos modelos
dominantes de pensar, hablar escribir. Dos lenguajes; el lenguaje de la
ciencia o de la técnica en el que ya está todo descubierto y en él que hay
que aprender los contenidos de memoria, y el lenguaje crítico que idealiza lo
que la educación y lo que los contenidos deberían ser. Ahora bien, ambos
lenguajes están cerrados, vacios porque ya han dicho todo lo que tenían que
decir y todas las experiencias que nos podrían proporcionar estarían ya
dadas.
Básicamente mi experiencia escolar se ha basado en repetir y
aprender lo que otros ya habían hecho, dicho o promulgado. Con ello no
puedo negar que no he aprendido nada, pero sí que puedo afirmar que el rol
que he mantenido era él de redundar lo adquirido. De hecho, ¿cuántas veces
nos hemos copiado idénticos ejercicios que otros resolvieron otros años y el
profesor no se ha dado ni cuenta?. Ahora bien, tras asistir a clase y después
de leer los textos me he dado cuenta que no tiene por qué estar todo
establecido, que yo también puedo buscar o construir conocimientos que no
presupongan respuestas. Ya no es todo tan claro ni tan cerrado, yo también
puedo participar activamente en mi aprendizaje. ¿Cómo? Pues construyendo
mis propias preguntas, cuestionándome paradigmas, teorías o cosas sobre
cada información o texto que se me presente.
Si, se me acaba de presentar un estilo pedagógico que desconocía,
que me incita a crear preguntas y a mostrárselo a quienes me rodean para
que me digan su opinión. Pero, no negaré que me causa una gran
incertidumbre, porque no tengo ni idea si lo estaré haciendo bien o mal. Me
gusta, poder hacerlo de esta forma, de hecho estoy relacionando y
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aprendiendo muchas cosas que las puedo aplicar en mi crecimiento interior
del día a día.
A decir verdad, me siento libre. Con autonomía de poder escribir en
este diario lo que me plazca, pero como ya he dicho me lo puedo esperar
todo, desde un niña se te va la pinza, hasta un veo que has trabajado los
contenidos, muy bien. Sea lo que sea, de seguro que no temo a ningún
examen final, porque verdaderamente, a pesar de que a regañadientes
tengo que pensar y darle vueltas a lo que ya tenía más que asumido que era
de una determinada forma cerrada, ahora se me presenta de una forma
abierta y divertida que me permite ser tal y como soy ahora mismo.
III. “Sólo puedo amar a aquellos que poseen un lenguaje inseguro; y quiero hacer
inseguro el lenguaje de los que me agradan” Peter Handke.
La experiencia es siempre confusa, situada, concreta y singular.
Lo que necesitamos no es una lengua que nos permita objetivizar al mundo o una
lengua que nos dé la verdad de lo que son las cosas, alomejor lo que necesitamos es una
lengua que nos permita vivir en el mundo, hacer la experiencia del mundo, y elaborar con
otros el sentido( o el sin sentido) de lo que nos pasa.
A, lo mejor lo que nos pasa es que necesitamos una lengua que no enuncie nuestros
poderes o nuestras impotencias, o en la medida dar forma a nuestra voluntad o en la que
tranquilizar nuestra buena conciencia. Sino una lengua que nos permita compartir con otros
la incómoda perplejidad que nos causa la pregunta ¿qué hacer? O las infinitas dudas y
cautelas con las que hacemos lo que hacemos.
Nuestra lengua es más insegura, más balbuceante. No leemos lo que todo el mundo
lee, o lo que todo el mundo simula que ha leído. No queremos escribir como todo el mundo
escribe.
No queremos que se nos entienda de inmediato. Y sólo somos capaces de escuchar
aquellos a los que no entendemos, aquellos de los que no sabemos inmediatamente qué es lo
que piensan y que es lo que quieren decir.
No queremos que se nos comprenda, sino que se nos escuche, y somos capaces de
ofrecer a cambio nuestra capacidad para escuchar lo que quizás no comprendemos.
No queremos hablar para todos, porque sabemos que ese todo es, en realidad nadie.
No nos fiamos de esa lengua que hablan los que no tienen lengua.
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Hablar y escribir, escuchar y leer sólo son posibles por uno mismo. Sólo a cada uno
concierne con quiere hablar y con quien puede pensar.
Un lenguaje que trate de decir la experiencia de la realidad, la tuya y la mía, la de
cada uno, la de cualquiera, esa experiencia que es siempre singular y por tanto confusa,
paradójica, inidentificable.
Y lo mismo podríamos decir de la experiencia de la acción, la de cada uno, la de
cualquiera, que no puede hacerse sino apasionadamente y en medio de la perplejidad. Y de la
experiencia del saber de cada uno o de cualquiera, la que no quiere tener otra autoridad
que la experimentación y la incertidumbre, la que siempre conserva preguntas que no
presuponen respuestas, la que está apasionada por las preguntas.
El lenguaje de las posiciones del saber lleva consigo el lenguaje del
aprender lo que uno ya sabe. Entonces un lenguaje que meramente informa
es un lenguaje que nos siente ese alguien. De ahí que, posiblemente, gran
parte de las interacciones que tenemos, hemos tenido y tendremos día a día
no sienten ese alguien. Como se dijo metafóricamente en clase: - como una
máquina de tabaco en el espacio.
Con sinceridad ,¿no te sientes más armonioso, lleno, plácido cuando te
das cuenta que el lenguaje vale la pena apreciarlo, escucharlo, sentirlo?.
La cuestión, está, en que no siempre estamos dispuestos a escuchar,
a apreciar ni a sentir ese lenguaje, ni tampoco todo el mundo está dispuesto
a entablar una conversación recíproca cuando se interactúa desde una
posición de poder.
En fin!, conseguir hablar sin miedos, sin la tensión de cualquier tipo de
autoridad, lleva consigo la flexibilidad, la elasticidad, la libertad de la
palabra. La libertad de decidir si uno quiere seguir enseñando y aprendiendo
desde la duda, comenzando desde el límite de lo que uno es capaz de
enseñar y desde en el límite de lo que uno es capaz de aprender.
Es decir, partiendo desde lo que uno todavía no sabe mediante un
lenguaje balbuceante, sucio, oscuro, sin ninguna teoría instituida. Un
lenguaje que siendo oscuro nos deslumbre para alcanzar la luz como aquel
prisionero de la caverna. Un lenguaje más humano pero complicado a la vez.
Un lenguaje que no se ciñe a nadie pero a todos a la vez.
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¿Cómo desde lo que ya se, puedo llegar a ser lo que no se?.
Pues balbuceando, tanteando.. si lo que buscamos es la aventura
del conocer agradeceremos lo balbuceante, lo que todavía no conocemos. Si
por el contrario buscamos aquello inequívoco, nos encontraremos con lo que
ya sabemos y autoritario: - esto es lo que hay que aprender, -apréndelo!! .
(Esta pregunta la tome en clase así literalmente, al releer los apuntes me ha
parecido graciosa por la gran perplejidad por una parte y por la polémica
por otra que puede llegar a crear, por ello he decidido incluirla así tal cual)
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23/2/08
IV. “La experiencia es el lugar donde tocamos los límites de nuestro lenguaje”.
Giorgio Agambem.
Necesitamos un lenguaje para la experiencia, para poder elaborar (con otros) el
sentido o el sin sentido de nuestra experiencia.
La experiencia es lo que nos pasa, no lo que pasa sino lo que nos pasa.
La experiencia no se hace sino se padece, no es intencional, no está del lado de la
acción sino de la pasión. Por ello es la atención, escuchas, disponibilidad, sensibilidad,
exposición.
El lenguaje de la experiencia elabora la reflexión de cada uno sobre sí mismo desde
el punto de vista de la pasión.
Lo que necesitamos entonces, es un lenguaje en el que elaborar ( con otros) el
sentido o el sinsentido de lo que nos pasa y el sentido o sinsentido las respuestas que eso
que nos pasa exige de nosotros.
La experiencia lo es siempre de lo singular, no de lo individual o de la particular sino
de lo singular. Y lo singular es aquello que no puede haber ciencia pero sí pasión.
La pasión es siempre de lo singular, porque ella misma no es otra cosa que la
afección por lo singular. En la experiencia lo real se nos presenta en su singularidad. Por eso
lo real se nos da en la experiencia como inidentificable, como irrepresentable, como
incomprensible, como incomparable, irrepetible, extraordinario, único, insólito,
sorprendente.

Además si la experiencia nos da lo singular, entonces la experiencia nos singulariza.
En la experiencia nosotros somos también singulares, únicos, inidentificables e
incomprensibles.
La experiencia no puede ser anticipada, no tiene que ver con el tiempo lineal de la
planificación, de la previsión, de la predicción… de ese tiempo en él que nada nos pasa. Sino
con el acontecimiento de lo que no se puede pre-ver, ni pre-decir, ni pre-escribir.
En la experiencia siempre hay algo de ” no sé lo que me pasa”
La experiencia tiene que ver con el no poder, con el límite del poder. En ella siempre
hay algo de “ no sé que puedo hacer”.
La experiencia exige otro lenguaje, un lenguaje atravesado de pasión, capaz de
enunciar singularmente lo singular, de incorporar la incertidumbre.
…invitarte a abandonar los lenguajes dominantes de la pedagogía: - la técnica –
saber-poder, -la crítica- voluntad-acción. Para poder hablar contigo, no sé en que lengua,
porque tendremos que buscar una lengua que este entre nosotros, una lengua que lo único
que sé es que no pude ser ni la tuya ni la mía, nunca podrá ser la propia de ninguno de
nosotros, pero en la cual, quizás tratemos de hablarnos tú y yo en nombre propio (primera
persona, con las mismas palabras con las propias ideas).
Porque ello significa colocarnos desde dentro, sentir que las palabras que usamos
tienen que ver con nosotros, que las podemos sentir como propias cuando las decimos, que
son palabras que de alguna manera nos dicen aunque no sean de nosotros de quien hablan.
Hablar (o escribir) en primera persona no significa hablar de uno mismo, sino que
más bien significa hablar (o escribir) desde sí mismo, ponerse a sí mismo en juego en lo que
uno dice y en lo que uno piensa.
Hablar (escribir) en nombre propio significa abandonar la seguridad de cualquier
posición enunciativa para exponerse en la incertidumbre de los propios pensamientos.
Además se trata de hablar en dirección a alguien: oyente, lector, destinatario
desconocido de nuestras palabras y nuestros pensamientos… en nombre propio significa
también hacerlo con alguien y para alguien.
No existe el lenguaje de la experiencia, lo que existe es una
búsqueda del lenguaje de la experiencia.
Necesitamos un lenguaje para poder elaborar el sentido o el
sinsentido de nuestra experiencia. Ahora bien, ese lenguaje no se puede
elaborar desde la disponibilidad, desde lo que ya hemos recibido ni desde lo
que ya sabemos decir, porque en la experiencia siempre hay algo de “no sé lo
que me pasa”. La experiencia es algo impredecible que nos sabemos cómo va
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ha ser. Algo de lo no- panificable, algo nuevo que se sale de la norma, de lo
que ya sabemos para formar parte de lo difícilmente identificable. Porque la
lógica de todo lo identificable es la lógica de uno mismo - yo Raquel Marzà
que estudio ed. Social…, la lógica de una identidad cerrada.
Por lo tanto, experiencia no es igual a lenguaje, es la búsqueda del
lenguaje lo que es igual a la experiencia. De ahí, que no se pueda construir
un método pedagógico adecuado, cerrado y normado. Al igual que tampoco se
puede construir el perfil correcto de una lengua ni la descripción exacta de
una persona. Porque, lo que realmente existe es el intento tras intento,
búsqueda tras búsqueda, conversación tras conversación donde se puedan
intercambiar e entrelazar experiencias.
Experiencias no planificadas, no vividas, que manejen un lenguaje
horizontal de tú a tú, un lenguaje libre de imposiciones.
Experiencias que nos permitan ser de otro modo y a su vez nos
consientan equivocarnos y aprender de los errores. Porque si de lo contrario
hacemos del lenguaje una experiencia dictaminada, cerrada y vertical,
estaremos destinados a utilizar un lenguaje mecánico, rutinario y aburrido.
Un lenguaje carente de experiencia, previsto, organizado, puro, que no nos
permita ser tal y como somos.
¿Que tiene que ver lo singular con la experiencia educativa?
Lo singular, es algo particular de la persona, de la universidad, de una
asignatura etc, y lo individual es el conjunto, la persona, la universidad o la
asignatura en su totalidad.
En la experiencia lo real se nos presenta en su singularidad. Primero
hay una conexión con lo singular y de ahí surge una exposición hacia lo
individual que no depende de nuestro saber ni de nuestro poder ni de
nuestra voluntad.
De este modo, aquello singular tiene que ver mucho con la experiencia
educativa porque cuando hay algo de singular que nos gusta como un párrafo,
una teoría… nos acaba enganchando a lo individual, a ese todo; asignatura,
carrera etc.
Gracias a lo singular te enganchas al todo.
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¿Cabe la posibilidad de que yo sea otro? ¿Existe la posibilidad de otro
bajo una misma persona?.
Como hemos visto el ser humano es un ser eternamente inconcluso,
pero además posee la capacidad de ensimismamiento, con lo cual es capaz de
sumergirse en su sí mismo subjetivo para orientarse, maniobrar sus acciones
o para imaginar e inventar ideas nuevas y proyectos.
Entonces, ¿no tenemos cada uno de nosotros una parte que nos
permite conversar con uno mismo partiendo igualmente de lo que todavía no
somos? ¿ no tenemos una parte que todavía no tiene palabras? ¿ una parte
que convive y crece con las opiniones de los demás y con la búsqueda de uno
mismo?.
Sí, hay una parte ya cerrada de nosotros, una parte que nos dice de
manera inmutable lo que ya sabemos de nosotros mismos.
Pero, si cuando conversamos con nosotros mismos pensamos, es
porque el lenguaje del sí mismo se ha puesto en acción, porque hay varias
posiciones frente a una situación. Si solo hubiera una posición frente a todo,
la persona sería como una especie de bloque a la que no le haría falta
pensar porque todo estaría claro y siempre rumiaría lo mismo.
V. Necesitamos un lenguaje para la conversación. Para ver hasta qué punto somos
aún capaces de hablarnos, de poner en común lo que pensamos o lo que nos hacen pensar, de
elaborar con otros el sentido o el sinsentido de lo que nos pasa, de tratar de decir lo que
aún no sabemos decir y tratar de escuchar lo que aún no comprendemos.
Una lengua como un modo de resistirnos al allanamiento del lenguaje producido por
esa lengua neutra en la que se articulan los discursos científico- técnicos, por esa lengua
moralizante en la que se articulan los discursos críticos, y, sobre todo, por esa lengua sin
nadie dentro y sin nada dentro que pretende no ser otra cosa que un instrumento de pura
comunicación.
Sólo tiene sentido hablar y escuchar, leer y escribir, en una lengua que podemos
llamar nuestra, es decir, en una lengua que no sea independiente de quién la diga, que a ti y
a mí nos diga algo, que este entre nosotros.
“ Conversación”: sugiere horizontalidad, oralidad y experiencia.
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Necesitamos buscar una lengua que no rebaje, que no disminuya, que no construya
posiciones del alta y del bajo, de superior e inferior, de grande y pequeño. Una lengua que
nos permita una relación horizontal, en la que tú y yo podemos sentirnos del mismo tamaño
de la misma altura.
…la oralidad a la que me refiero no se opone a la escritura, sino que atraviesa todo
el lenguaje, como si la escritura tuviera su propia oralidad, como si pudieran trazarse
diferencias entre tipos de escritura según sus distintas formas de oralidad.
La voz es la marca de la experiencia del lenguaje, también en la experiencia de la
lectura y la escritura.
escribe.
conversación.
En la voz, lo que está en juego es el sujeto que habla y que escucha, que lee y
Una lengua con voz: tono, ritmo, cuerpo, subjetividad, una lengua para la
Una lengua sin voz: afónica, átona, monótona, arrítmica, objetiva. De los que no
tienen lengua, una lengua de nadie y para nadie.
Necesitamos una lengua en la que hablar y escuchar, leer y escribir, sea una
experiencia. Singular y singularizadora, plural y pluralizadora, activa pero también pasional,
en la que algo nos pase, incierta, que no esté normada por nuestro saber, ni por nuestro
poder, ni por nuestra voluntad, que nunca sepamos de antemano a donde nos lleva. Me
gustaría conversar contigo.
Quizás la búsqueda de un lenguaje horizontal, singular y pasional, de
un lenguaje construido bajo la conversación, pueda generar una experiencia.
Pero, ¿cómo se consigue un lenguaje para la conversación?.
No hay un lenguaje determinado para la conversación, ni para ninguna
experiencia en concreto, sino que hay que buscarlo.
No existe, hay que conseguirlo. Entonces, no hay nada seguro de
antemano y en todo caso lo que se pudiere elaborar son las consecuencias
de cómo se construye ese lenguaje.
El lenguaje, el mensaje, se construye a través de esa práctica
lingüística a la que hemos llamado conversación, siendo la conversación algo
plural que llevamos a cabo entre nosotros. Algo que trasciende lo individual
para dar paso a un emisor y a un receptor que se unen en unos procesos
17

interactivos de credenciales recíprocos. Hablamos con alguien y para
alguien.
Ahora bien, la conversación no es igual a modificar el contenido de lo
que queremos decir para lograr ser comprendidos. Ya que de este modo los
papeles no serían recíprocos porque estaríamos modificando lo que
queremos decir. Adaptar no. El autor propone buscar otro lenguaje para
que emisor y receptor se entiendan.
Ejemplo: El mecanismo típico del maestro explicador es: voy a
explicar el temario de tal modo que mis alumnos lo entiendan. Es decir,
intentar explicar los contenidos de otro modo para que sean comprendidos
por los estudiantes, pero esto no es conversación. Sería asimilación. Es
decir, ajustar los mecanismos del lenguaje para que los otros pudieran
comprendernos.
Como hemos visto, es difícil conversar, pero es necesario para que los
otros te entiendan y para que tú mismo te entiendas. Y digo esto porque el
lenguaje de la experiencia es la búsqueda de una expresión que intenta
narrar lo que nos pasa interpelando a uno mismo y a los demás. En la medida
en que está búsqueda se dan los elementos de interpelación entre uno mismo
y los demás se está hallando el lenguaje de la experiencia: hay conversación.
De hecho, la conversación es un proceso continuo de interpelación a:
Lo que nos pasa sí mismo al receptor
Experiencia (lo que ocurre)------de sí mismo--------y del otro
18

algo más?
¿El lenguaje de la experiencia es sólo un lenguaje individual? O, ¿hay
El ser humano es un ser social por naturaleza, nace inserto en una
sociedad. Con lo cual en una determinada realidad social que le ayuda a
desarrollar sus capacidades y su propia identidad. De hecho, ¿cuántas veces
has sentido la necesidad tremenda de compartir algo, de recibir ayuda en
algún problema que no sabes cómo solucionar, o simplemente de contar o
estar acompañado en alguna experiencia?.
Ahora bien, el medio de comunicación, el medio de interacción con esa
realidad social, con ese entorno, es el lenguaje, ya sea oral, escrito o todo
aquel no verbal.
Pero, la cuestión está en la manera que cultivamos ese lenguaje. Si
concebimos un lenguaje ya construido, individual, neutro, llano, y puramente
informativo, o si creemos en un lenguaje que cuente con la predisposición de
ser compartido, de ser encontrado por un emisor y un receptor.
Un lenguaje construido entre dos personas, una o más en el propio
acto de la comunicación. Un lenguaje que traspase los límites de lo previsto
desde arriba, de modo que consista en relatar y construir algo entre todos.
Un lenguaje donde todos se adaptan a todos, donde emisor y receptor sean
al tiempo igual de importantes.
En fin !, visto lo visto, ¿no es cierto que te gustaría más vivir en una
sociedad que te permita encontrar tú propio lenguaje?.
Sin duda que hay algo más, que no existe un lenguaje correcto o no,
de cómo contar las experiencias en un determinado momento, porque lo
importante es intentar contarlas como uno sepa y como uno pueda en dicho
momento. Sólo ese lenguaje es capaz de ponerle palabras a nuestro sentido,
de provocar efectos a nuestro ser.
Hay que ver cómo funciona la sociedad desde ese lenguaje imposición
individual y desde un lenguaje de la experiencia plural.
19

20
24/2/08
A modo de breve síntesis (que es lo que se pedía en uno de los
ejercicios), diremos que nuestro lenguaje es inestable, es una búsqueda
continua.
Vivimos según la lengua que nos hace, estamos hechos por el lenguaje.
No es sólo que estamos construidos por un solo lenguaje, ni que estamos en
el mundo en función de un lenguaje. Sino que además la herramienta con la
que nos comunicamos y trabajamos es lingüística; la palabra. La palabra
codificable en signos que nos permite la transmisión de conocimientos y a su
vez la percibimos expresada en sus varias facetas: pictórica, escrita,
musical, verbal, no verbal etc.
Pero dentro de la perversión señalamos que la lengua no es solo un
medio de comunicación, sino que hay lenguajes y modos de hablar, leer,
escribir que producen imposición y estandarización: lenguaje vacío. De
hecho, la verdad es un campo de batalla donde intervienen diversas lenguas.
Por un lado nos encontramos aquellos dispositivos lingüísticos que
hacen de la lengua una verdad absoluta y universal, donde los mecanismos
científicos adquieren prestigio y autoridad. Y donde un “nosotros” elimina
toda marca de pluralidad.
Así, dentro de este mismo lado localizamos dos modelos dominantes
de pensar, hablar, escribir lenguajes: la ciencia/ técnica y el crítico. Pero,
ambos modelos están vacios porque nos impiden vernos reflejados a
nosotros mismos. Por ello, Larrosa propone otro lenguaje que pluralice los
discursos pedagógicos y todo aquello que nosotros buscamos, decimos y
narramos.
De hecho, nos invita a que busquemos un lenguaje de la experiencia
que nos permita hablar de lo que nos ocurre a nosotros mismos, a cada uno
de nosotros. Un lenguaje que se forme a raíz de una conversación donde
todos seamos emisor y receptor. Un lenguaje que se cree mediante un
proceso interactivo donde todos los papeles sean recíprocos. Un lenguaje
que intime con aquella experiencia de lo que nos pasa, con el mismo sí mismo
y con él otro, el receptor.

De este modo, lograremos e intentaremos ponerle palabras a lo que
nos ocurre tratando de decir algo desde el sí mismo al tiempo que otros
invitados también lo hagan. Porque se habla con alguien y para alguien. Y, es
en medio de esa conversación, de esa inseguridad, como se construye el
propio lenguaje.
Resumiendo, el lenguaje es un proceso construido entre todos que
concluye en la búsqueda de su misma experiencia.
La lengua para la educación debería ser una lengua para la
conversación, donde determinados individuos la van construyendo sin que
haya situaciones de superioridad, ni situaciones que de la sensación de que
ya están vividas. Así de este modo se podría pensar la educación desde otro
punto de vista, desde una experiencia donde la interacción entre profesores
y alumnos fuese reciproca.
Sinceramente, es preciso pensar la educación de otra manera
indagando nuevos espacios de verdad a partir de otras gramáticas que
permitan establecer otros efectos de sentido. Ahora bien, es un viaje
difícil y lleno de obstáculos. Y, sino, (a pesar de que está pensada desde
arriba), que le pregunten a la propia constitucionalidad de la educación
actual por cuantos impedimentos y discriminaciones ha tenido que pasar.
"En relación a ese movimiento (de pluralización), los aparatos de
producción y de transmisión del conocimiento (los aparatos pedagógicos) han
intentado casi siempre forzar una tendencia correctiva. Su apuesta ha sido
por la homogeneidad y la estabilidad. Y las nociones de universalidad, de
consenso o de verdad han sido los instrumentos de esa homogeneización y
estabilización del sentido. Los aparatos pedagógicos han estado casi
siempre comprometidos con el control del sentido, es decir, con la
construcción y la vigilancia de los límites entre lo decible y lo indecible,
entre la razón y el delirio, entre la realidad y la apariencia, entre la verdad
y el error. Y en este momento en que la principal amenaza es la
homogeneización, quizá sea tiempo de dejar de insistir en la verdad de las
cosas y comenzar a crear las condiciones para la pluralidad del sentido. El
papel del profesor, me parece, es hacer que la pluralidad sea posible. Y eso
es dar un sentido a la contingencia, de la relatividad y, en definitiva, de la
libertad". (Larrosa 1998).
21

22
25/02/08
*Condiciones socioculturales del presente: consecuencias en
educación.
“Existen formas de vivir o de ver la vida que son intrínsecamente
antipedagógicas”. Van Manen.
“ Los aparatos educativos también funcionan cada vez más en el sentido de
hacer imposible que alguna cosa nos pase”. Larrosa.
Los siguientes parámetros socioculturales del presente impiden que
se dé una educación basada en la búsqueda de la experiencia, con lo cual
contribuyen a que nuestra educación se convierta en un espacio carente de
experiencia formativa.
ESCOLARISMO.
Desde bien pequeñitos nos educan bajo unos parámetros
establecidos. Bajo un modelo pedagógico basado en preguntas que
presuponen respuestas, donde todo problema planteado tiene una solución
previamente conocida.
Sí, estamos hablando de aquello que lleva a la anulación de toda
curiosidad, de la actitud que encuentra extraño lo familiar, lo pasional y
conlleva a hablar una lengua neutra que esta fuera de nosotros mismos. De
modo que se elimina la incertidumbre, aniquilando toda capacidad de generar
y construir problemas, preguntas inéditas o simplemente de privarnos de
elegir libremente.
Sí, podemos ir en contra del sistema, aprender por nuestro propio pie
o con otras metodologías , pero a la hora de aplicarlas, de encontrar un
trabajo, ¿ qué validez tiene ?
De hecho es tal la perversión, que desde que salimos del colegio nos
dicen que tenemos que estudiar para llegar a ser alguien el día de mañana.
Pero ¿acaso no soy yo alguien desde el momento en que nací?. No sé,
indiscutiblemente sí soy alguien, y quizás sí desde un principio hubiera

seguido aquello que me imponían ahora estaría trabajando de recepcionista
en un macro hotel o de administradora de fincas.
No sería la misma, quizás sería feliz, no lo sé, pero seguramente no
estaría aquí ahora, ni sentiría igual como siento ahora. Hubiera tenido una
vida muy fácil, lo sé, pero no miraría maravillada una mariposa blanca como
lo hago ahora.
Quizás, puedas pensar que esto nada tiene que ver con la
escolarización, pero para mí sí la tiene. Porque en su día, en su momento,
decidí romper con todo y con todos los que me impedían hablar, con los que
no me escuchaban. Tal fue la consecuencia que toque el límite de no oírme a
mí misma.
Quizás, sí hubiese tenido otra experiencia escolar, si en mi entorno
escolar me hubiesen enseñado a comprender que mi opinión era válida no se
hubiera provocado ese sentimiento de rechazo hacia toda norma. Sí pienso
en lo que a mi experiencia escolar se refiere tengo muy buenos recuerdos
de mis compañeros y de las trastadas que hacíamos, pero no tengo
demasiados recuerdos de toparme con algún profesor apasionado.
Aprendí cosas, pero todo lo que aprendí que me gustaba me lo
reenseñaron aquellos que fuera de mi ambiente académico eran personas
que les apasionaba la pedagogía, me encandilaba escuchándolas. Además me
hacían sentir muy grande porque muchas veces me pedían opinión sobre sus
temas, sus trabajos, sus clases, consejos a mí !.
De hecho a ellas les debo el estar aquí ahora mismo porque ambas me
han ayudado a salir de un atolladero sin regreso. Al tiempo, apoyado y
confiado en mí cuando muchos me miraban incrédulos o decían que nada
conseguiría. Desde aquí y aunque no venga al caso, gracias a ambas, ellas
fueron las que unos pocos años más tarde me animaron y ayudaron a obtener
el título de bachillerato a distancia, para empezar algo que no savia que iba a
ser ni donde iba a terminar. Bueno! He aquí ese toque sentimental que
escasea en el tributo escolarista.
Quizás, ahora que lo pienso, lo que hacía que le prestará esa especial
atención a ellas y no a mis profesores al explicarme Platón, la probabilidad,
la historia y sus movimientos etc, fuese el amor, la pasión, con que de ambas
23

( actuales docentes de la educación) me contaban, mostraban y transmitían
lo que ellas sabían.
Bueno ahora sí, voy a dejar ya los sentimentalismos para volverme a
centrar en el tema. En cuanto a los puntos del Escolarismo mencionaré un
par de cosas que me llamaron la atención durante las exposiciones.
Una, es el debate que se entablo en clase referente a la asignatura de
la educación a la ciudadanía. Por una parte me hace mucha gracia pensar que
hemos llegado hasta el punto que se tengan que impartir unos contenidos de
educación para la ciudadanía. Por un lado está bien, porque pueden mostrar
al alumno otros puntos de vista diferentes a los de esa socialización
primaria de la familia. Pero ahora bien, no nos equivoquemos, ¿en manos de
quien vamos a dejar la transmisión de esos contenidos?. Porque
sinceramente sí me preguntan en manos de que profesor de los que he
tenido la dejaría, seguro que respondo, tranquilos señores, yo la impartiré.
No sé, me parece extraño que ya organicen hasta una asignatura
llamada educación para la ciudadanía, como si todavía no fuésemos lo
suficientemente dóciles. Por otro lado, me imagino los contenidos que se
podrían tratar y pienso que según en manos de que profesor se deje podría
estar bien.
La otra cosa de las exposiciones que creo que merece la pena ser
mencionada, es una diapositiva que puso un grupo donde se mostraban las
características de la escuela española bajo la autoridad del franquismo y las
de hoy en día. En ella decía algo así. Franquismo: Abolición de la propia
imaginación e ideas de los alumnos. Sólo existe una figura importante: el
profesor. Clase de forma en la que el profesor se sienta superior y los
alumnos físicamente están situados por debajo el profesor y este de forma
superior a ellos. Sólo se podría cumplir las exigencias del profesor los
alumnos escasamente participaban y en muchos casos si llegaban a hacerlo
se les ignoraba. Se imponían castigos de forma innnecesaria.
Ahora mira a tú alrededor ¿cómo está la disposición u organización
del aula?, ¿hacia dónde está focalizada la atención?, ¿cuántos profesores te
dejan interactuar en clase?, y si lo hacen ¿con cuántos estas dispuesto a que
no te intimide la ruborización del error?.
24

Desde luego ahora mismo no hay implantado ningún régimen político-
social-económico autoritario, pero ¿crees que han cambiado mucho las
cosas?
Sin duda, luchar contra el Escolarismo no significa abolirlo, ni
terminar con la función social de la escuela. Pero, sí quizás sea necesario
buscar otra alternativa donde la figura más importante del aula no sea el
profesor, donde la realidad no esté construida para ser inmovible. Otra
alternativa que modifique los discursos a raíz de los propios discursos, otra
alternativa que respalde la innovación con la experiencia de una interacción
entre la sociedad, las instituciones y los propios alumnos.
FALTA DE VIDA COLECTIVA, PÚBLICA Y DEMOCRÁTICA:
AUSENCIA DE CIUDAD.
La ciudad está prácticamente ausente en nuestras vidas. La ciudad es
una invención pedagógica. Una comunidad plural donde los humanos libres
(iguales y rivales en el uso de la palabra), hacen del acto de hablar/narrar
una forma cívica y pública de articular la memoria de lo que somos mediante
un lenguaje técnico y el futuro que ansiamos mediante una voz crítica.
Existe en esa ciudad la nostalgia de una escuela pública y
democrática, una educación donde al interrogar al otro, posibilitando su
expresión y reconocimiento, nos interroguemos a nosotros mismos. De
hecho, nunca se ha investigado tanto lo que los demás piensan y, sin embargo
nunca se ha estado más lejos de la compañía de los otros, de su palabra y
sus anhelos.
Estamos sobrecargados, hay un exceso de lenguaje vacio, ausencia de
comunicación entre las personas. Vivimos en una sociedad materialista, que
poco basa sus principios en los propios valores de individuos. De hecho, hoy
en día nos influye todo ( radio, t.v; publicidad…) menos los propios valores
que nos puedan llegar a transmitir nuestros coetáneos.
Hay poca solidaridad entre nosotros, y a pesar de convivir con mucha
gente y a pesar de que el auge de la tecnocracia nos dificulta la
incomunicación ¿no crees que vivimos en medio de muchos pero en medio de
nadie?
25

TODO ES PRESENTE.
Hay una falta de conexión entre un pasado memorable y un futuro
imaginable. Fractura, quiebra de los enlaces intergeneracionales, nos
empatronan según la edad. Los tiempos del presente aíslan al anciano.
Se ofertan multitud de experiencias de aprendizaje pero no se hace
de la enseñanza una experiencia vitalmente relevante. Donde lo relevante es
aquello que nos permite dejar de ser lo que somos.
Se ha pasado de la búsqueda de la necesidad de decir algo a no decir
nada, de luchar por la palabra a quitarse las ganas de decir nada cuando
ahora si podemos. ¿Cuantos han sido los que han corrido delante los
cuidadores del régimen por el simple hecho de pensar diferente al orden
establecido? O, ¿los que han alzado barricadas promulgando la igualdad y la
libertad de expresión?, y ahora que tenemos el poder como pueblo
democrático que somos, ahora delegamos ese poder con el voto y
simplemente dejamos hacer nihilistamente .
El concepto y el modo de vivir el futuro son diferentes ahora y antes.
Y, sí, posiblemente la posición de nuestros padres era más segura y nuestra
conexión con el futuro (hoy en día) sea incierta, frágil y vulnerable, porque
anhelamos un pasado deseable e imaginamos un futuro lleno de
incertidumbre y quizás sometido a condiciones. Entonces, ¿qué hay que
hacer para cambiar este modo de vivir que no nos deja mostrarnos como
realmente somos ni nos permite ser vulnerables? sí, un lenguaje balbuceante
que nos permitiera aceptarnos tal y como somos nos ayudaría, pero…
FORMACIÓN DE UN HOMBRE MÁS PRODUCTIVO PARA UNA
SOCIEDAD DISCIPLINADA.
Existe una obsesión por la norma, por el nivel y por el estatus que
tiende a la homogeneización y estandarización como inmutable tradición. De
tal manera la pluralidad innata del hombre, la diversidad, se ve como un
problema.
Vivimos conformados bajo una sociedad que fabrica cuerpos dóciles y
útiles. Que regula todos los ámbitos de nuestras vidas (natalidad, movilidad,
26

salud, alimentación…) bajo un modelo funcional que se reverencia ante las
exigencias del mundo productivo y globalizado.
EL ESPECTÁCULO COMO LA NUEVA BARBARIE CIVILIZADA QUE
NOS RODEA.
Nuestra cultura se ha convertido en una mercantilización de
masas.Todo es devorado por una especie de nada deslenguada que no deja
de emitir palabras sin pensamiento y sin sentido(s). Entretenimiento que
genera ignorancia autosatisfecha. La educación bajo la lógica del centro
comercial y del parte temático: marketing escolar, competividad,
consumidores y entretenimiento.
Predominio del saber abstracto (todo aquello que está alejado de
nosotros, de nuestros porqués y de lo concreto) y separado de la vida.
la cultura.
Nueva pobreza en el corazón de la abundancia.
FALSA GLOBALIZACIÓN NEOLIBERAL.
La mercantilización de los procesos escolares, del conocimiento y de
Vivimos en una era sonde la pedagogía está marcada por la angustia
del mérito y del demérito, de la pérdida y de la ganancia: la competividad y
la moral de los negocios. La pedagogía se encuentra absorta en un
intercambio abstracto y cuantitativo equiparable al dinero y a la mercancía.
La educación como inversión.
Privatización del espacio escolar: transformación del conocimiento
escolar en mercancía – información y vaciamiento- abandono de la condición
pública de la escolarización, de una educación para todas y todos, de todas y
todos.
LOCALISMOS IDENTITARIOS Y FUNDAMENTALISMOS
ÉTNICOS/CULTURALES.
Primacía del hombre y eugenésico (aplicación de las leyes biológicas d
la herencia para el perfeccionamiento de la especie humana).
Intolerancia a la alteridad.
27

Ovillamiento cultural: lo otro como amenaza, etnocentrismo,
relativismo cultural, ghettos, ...
Identidades asesinas: pureza de sangre y luchas identitarias
exclusivistas y basadas en esencialismos casi míticos, la autosuficiencia y el
hermetismo (impenetrable, cerrado).
El racismo distinción entre personas cuando unos están relegados a
otros en posiciones de inferioridad, ya sea de su misma identidad cultural o
no.
Es muy difícil cambiar esta postura y aceptar que vivimos en una
sociedad pluralista que debería de permitir el dialogo entre culturas y
estatus que evolucionan gracias al contacto mutuo entre ellos mismos. De
hecho si hacemos una ojeada a la primera institución donde recaía el papel
de la enseñanza, encontraremos que promulga la igualdad y la tolerancia.
Pero vistas sus acciones a lo largo de los siglos y siglos, ¿que nos hacen
pensar?
CRECIENTE PRECARIZACIÓN Y VULNERABILIDAD SOCIAL
En las sociedades postindustriales las personas somos cada vez más
vulnerables a la posibilidad de quedarnos “descolgados” de los mecanismos
de protección general o de participación en una tradición o de contar con la
capacidad de construir un proyecto personal y colectivo. Individuos sin
fuerzas ni capacidades para ocuparse de sí mismos y de los que le rodean.
Individuos sin proyección y desarraigados. Individuos sujetos a privación.
La incertidumbre endémica que- a nivel laboral y existencial- tiende a
rodearnos corroe y dificulta la posibilidad de proyectos sociales y culturales
creados y sostenidos colectivamente.
28

En cuanto a la exposición en grupo mencionaré que en cuanto al
Escolarismo se refiere pusimos una foto de un domador como metáfora de
que estamos insertos en una sociedad que nos enseña a como ser una buena
mascota (cuerpos dóciles y útiles). Las pedagogías de Montessori o Freinet
donde el niño es el protagonista y el educador es el encargado de mostrar
el camino que permita su desarrollo, y en donde se cree en la capacidad de
cada alumno como primer paso para potenciar su crecimiento.
En el punto de todo es presente, los cursos de la Nau Gran que
representan una rotura ante esa falta de enlaces intergeneracionales.
Toros: llamar cultura la sadismo organizado, como representación del
punto 5: espectáculo como la nueva barbarie civilizada que nos rodea .
Y en el punto 6 el marketing escolar con los enlaces a las campañas de
marketing de varios colegios.
Recuerdo que al principio eso de la exposición se me hizo un poco
cuesta arriba, pensaba que no se me ocurriría nada, pero esa misma noche
fui a mirar que libros tenía en la estantería, y plas! Mis ojos se plasmaron de
inmediato en “Jóvenes pero alcanzables. Técnicas de marketing para
acercar la cultura a los jóvenes”. Franky Devos 2006. Éste libro lo adquirí
en un seminario que organizo el SGAE junto con el SARC “ Construint Públics
per a les Arts”, del cual aprendí muchísimo, me lo pase en grande y me
marco bastante.
El libro, no serviría como un ejemplo, pero sí como un contraejemplo a
todas las condiciones socioculturales del presente. Además, no hace
referencia explícita a la educación. Pero, todos sabemos que educación y
cultura van inseparablemente parejas de la mano.
Es un modelo que rompe barreras, su lectura produce un efecto que
te involucra en el deseo de contagiar a los jóvenes ( y al público en general)
la pasión por la literatura, el teatro, la danza, la música y la escultura. No
sé, da la sensación de ser un libro escrito bajo un lenguaje inseguro, más
humano y menos rígido que la mayoría de libros que hablan de gestión
cultural. De hecho, desde mi parecer casi todo el libro es una especie de
dialogo abierto entre el escritor y el lector. Da la sensación que es algo así
como ¿qué nos pasa hoy en día que la gente joven no se involucra en la
cultura? Pues vamos a construir una conversación entre tú y yo a ver si
entre los dos conseguimos que se involucren.
29

Casi todos los fragmentos del libro se pueden relacionar en mayor o
menor medida con un punto u otro. Entonces lo que hice es escoger unos
pocos:
“Los jóvenes tienen hoy en día tanto que experimentar, en el arte, la
cultura y todos los terrenos, que su vida es un reto continuo, estimulante y
sobre todo divertido. Los escenarios también reciben mucha información
por parte de los jóvenes. Los jóvenes son el público del futuro. Pero ¿cuáles
son las posibilidades? ¿Cómo dirigirse a ellos? ¿Cómo mantener el diálogo
abierto?”.
“la palabra clave es complicidad. Involucra a los jóvenes tan pronto
como sea posible en el mayor nº de aspectos de tu trabajo, y el rendimiento
será mayor respecto a los esfuerzos realizados. Confía el volante a los
jóvenes y quédate tú en el asiento copiloto como supervisor. Deja que ellos
se encarguen de la programación, que aporten contenidos a un apartado de
tú web, que hagan entrevistas, monten escenarios, reciban a los artistas,
trabajen en la barra o en la taquilla. Con ello no ahuyentas a los adultos. Al
contrario, también ellos se encontrarán a gusto en un ambiente donde se
refleja la dinámica juvenil.”
“rechazan cada vez más los productos listos para utilizar, y quieren
diseñar su propia realidad. Los jóvenes ya no quieren ser sólo consumidores
sino también prosumidores (productores y consumidores).”
“el atractivo del arte está en la autenticidad del original, no en la
falsedad de una copia edulcorada.”
“desarrollar junto a ellos una política de participación cultural
personalizada será más efectivo que lanzar una campaña de marketing para
intentar venderle la oferta cultural existente”
Cuando en noviembre del 06 acudí al seminario, estaba realizando las
prácticas del TASOC, y mi tutor me dejo acudir con la condición de que le
hiciera un informe detallado del mismo. A continuación he añadido una copia
de la conclusión, porque simplemente me apetecía compartirla. Sé que ahora
mismo cambiaría algunas cosas pero es una cosa que escribí en su día que me
recuerda a una época, y sí lo hiciera ya no significaría lo mismo.
30

En Espanya, la cultura és com un animal en perill d’extinció tancada en una
gàbia i rodejada de casadors furtius: televisors, polítics, gestors culturals
asseguts en despatxos on no és notori l‘amor ni el interès per aquesta...
Ara bé, s’acusa als joves d’estar despreocupats amb assumptes polítics,
religiosos, de sortir, de fer botelló, de no tenir encara desenvolupat el
pensament abstracte etc. Sí , pot ser, des d’uns anys enrere les coses han
canviat. Él que abans eren valors, hui en dia han passat ha formar par de
l’oblit. I com diuen, pot ser que él que ara per ara engloba la llista de
prioritats entre els joves, és insuls e innecessari.
Ens jutgen d‘incrèduls, d’apolítics, d’egoistes e insolidaris i d’haver
escollit el camí desencantat cap al nihilisme. Si més no, sols hi ha que fer
una ullada a l’informe de la Fundació St. Maria; una radiografia gens
meravellosa de la joventut espanyola, basada en opinions i enquestes
realitzades a 4.000 persones.
Però! ¿ A que són degudes aquestes actituds? Pot ser, cada cop els joves
coneixen amb més claredat la realitat que els envolta i s’intenten adaptar
amb lucidesa i despreocupació?.
Francament, pot ser sí, espais i temps d’oci configuren el principal marc en
él que els joves construeixen i defineixen la seua identitat. Ja que d’altres
àmbits, abans rellevants, hui en dia han perdut la importància que tenien.
Sens dubte, la cultura forma part de la vida del esser humà i aquesta pèrdua
d‘ importància a la llarga pot suposar per a molts una degradació social de
valors que pot arribar a convertir-la amb una simple arqueologia social.
L’art, no deu ni pot aturar-se. No podem mostrar-nos complaents, hem de
mantenir-lo viu, enriquir-lo, renovar-lo i ampliar-lo. I, per a que aquesta
tasca siga possible, hi ha que lluita contra l’oci que comporta mera
distracció. I , pot ser una manera de fer-ho és escoltant al públic, conèixer
que els preocupa, fent-los participes dels nostres projectes i sorprendre’ls.
De bon cor, que així es podrà superar eixa monotonia que empobreix,
avorreix i aniquila els instints creatius dels més joves.
“ la cultura va lligada a la llibertat”
31
RAQUEL MARZA ESTEVE

*Hacia otro modo de pensar y hacer educación. Praxis,
alteridad, natalidad y problematización.
existe.
Cinco elementos destinados a construir un mundo distinto al que ya
ACCIÓN.
No es fabricación.
Praxis y deliberación.
Hay que entender la acción, en términos pedagógicos, como
herramienta fundamental de la praxis que se retroalimenta de la
incertidumbre, ya que, no se sabe hasta dónde va a llegar en todo lo que
concierna a la educación. Gracias a ella, se está en constante aprendizaje.
Sólo a través de la acción se puede andar por el camino de la transformación
y la pluralización de la práctica educativa (sujeto que aprende, sujeto que
enseña, la enseñanza y la institución).
Praxis vs poiesis:
Praxis Poiesis
Centrada en la definición pluralista y
recíproca de la educación.
Práctica educativa: búsqueda del
lenguaje de la experiencia,
conversación. Nuevas modalidades
discursivas
Educación al límite de lo que se
puede aprender y al límite de lo que
se puede enseñar. Sorpresa.
Educación como no planificación.
Aprendizaje más allá contenidos
explícitos. Inventar, construir un
tipo de discurso narrativo distinto
que sea capaz de narrar lo que nos
32
Centrada en la definición detallista
de los productos de la enseñanza.
La práctica educativa: juego de
relaciones lógicas establecido por un
proceso causal entre objetos,
métodos y evaluación
Máximo rendimiento: que el
resultado ( el aprendizaje) se ajuste
lo más posible a lo previsto
Educación como instrucción : medio
técnico planificado para el logro del
rendimiento previsto

pasa en educación.
Perplejidad,incertidumbre,
experimentación.
*Relación acción con las 13 frases:
33
Obsesión por la eficiencia y la
optimización
5. La acción nos atraviesa sobre nosotros mismos cuando absorbemos
el saber y queda un resto en nosotros. Has formado parte de ese saber y
cuando te vas, queda algo de lo que has formado parte.
8. Conservar el pasado, para educar en el presente, para transformar
el futuro. La práctica propia encaminada hacia el ser humano es la acción,
que, mediante el transcurso del tiempo se transforma; lo que está
ocurriendo ahora no es igual a lo de ayer.
11. No tienes que establecer la educación ante un tiempo
predeterminado, porque no tiene finalidad. La educación es un continuo
aprendizaje.
TIEMPOS MODERNOS.
La cruzada de la búsqueda de la felicidad como lo individual. El hombre
establece un nuevo modo de entender educación relacionado con el orden

Un obrero de la industria del acero, en los E.E. U.U posteriores al
crak’29, se vuelve loco a causa del trabajo monótono y sin incentivos que
realiza.
Nuestra fe está mediada por una técnica capitalista e instrumental
que no acepta la diversidad.
En el film, se diferencia los responsables del trabajo, aquellos que
planifican, los que tienen una visión global y lineal del proceso, con los
ejecutan las tareas mecánicas, repetitivas, y específicas mientras los
directivos hacen un puzzle, leen el periódico… el puzzle podría simbolizar
que todo debe encajar.
Se puede ver una obsesión, preocupación y gestión del tiempo que se
ve ridiculizada en una escena donde se presenta un robot máquina de comer
para que los obreros no paren el proceso, y al tiempo aumentar la
productividad con los mínimos gastos posibles. Pero el invento es todo un
fracaso. En él podemos ver un afán por marcar hasta el último detalle de lo
que la gente debe hacer.
Otras cosas que hemos podido observar es que los encargados no
entienden que los subordinados están desmotivados, ya que para entender a
alguien te debes poner en su piel, empatizar, escena Chaplin ya al baño.
Las relaciones de poder nos influyen, de hecho los parámetros en los
que construimos nuestra realidad hacen que nosotros nos habituemos a unas
determinadas prácticas u a otras , y en este caso dichas relaciones de poder
anulan todo aquello que supone una disrupción en el proceso o todo aquello
que pueda interferir en lo previamente planificado
Ahora bien del mismo modo que el obrero se amolda a su trabajo, al
mundo de la producción. Nosotros también hemos sido amoldados a la
producción de cuerpos útiles.
34

Educación bajo la lógica de la producción: alcanzar los medios que me
permitan alcanzar la mayor parte de conocimientos posibles con la mayor
eficacia posible.
Proceso preactivo Programar Objetivos conductuales
35
a conseguir
Proceso interactivo Enseñar Actividades
Poceso-post-activo Evaluar Comprobar
NATALIDAD.
conducentes a
conseguir los objetivos.
consecueción objetivos
planificados.
Voluntad de cuidar/ producir los nuevos en el mundo viejo.
Producir lo nuevo en el mundo de lo viejo teniendo en cuenta la
tradición cultural. Sin reprimir el desarrollo e integración de la novedad en
el mundo viejo.
El educador es el que transmite sus conocimientos (es decir, el
pasado) al recién nacido, es decir, a lo nuevo. Aquí está la importancia del
educador ya que mediante la educación le enseñara cosas desconocidas.
* Creemos que la afirmación 8 y 11 congenian con la natalidad ya que la
8 hace referencia a que tenemos que conservar la parte histórica sin olvidar
lo nuevo. Y la 11 es fundamental que conozcamos la historia para comprender
el presente, es decir, retrocedamos en el tiempo para entender el presente.
En otras palabras, es hacer una mezcla de lo que trae el recién nacido en el
mundo del anciano.

ALTERIDAD.
Alter: aquello que no encaja en los parámetros de lo que ya existente,
con los cánones de lo establecido, eso otro diferente a nuestro mundo.
No hay pedagogía sin encuentro con lo otro de uno y su crecimiento.
Él otro también habita de algún modo en uno mismo. En la medida que no
creemos en el hecho que en cada uno de nosotros habita emerge otro yo,
estaremos homogenizando.
*Relación alteridad con las afirmaciones 6, 9 y 10:
La alteridad es el reconocimiento de que dentro de la educación nadie
está acabado, nadie alcanza una identidad definitiva, porque educación
supone buscar el encuentro con lo otro de uno y encajarlo. Para lograr esto
necesitamos ir más allá de nosotros mismos para experimentar que a la vez
somos otros, aceptarnos como tales y seguir creciendo gracias a ello.
*Relación alteridad con las afirmaciones 8 y 11:
A lo largo de nuestra historia nunca nos encontraremos, porque la
educación nos cambia al tiempo que nos ayuda a buscarnos. ¿Tiene este ciclo
un fin en el que nos conoceremos (un algo dentro de nosotros por encontrar)
o siempre nos estaremos buscando (un algo por construir que siempre está
cambiando)?
NARRATIVIDAD.
Es oficio público de palabras no es sin cultura ni lenguaje.
La narratividad es la unión entre lo que somos y la narración que le
pone palabras a lo que somos, lo que le da sentido a lo que somos.
La narratividad es la transmisión de cultura mediante la palabra, la
cual es la principal vía de la educación y debe ser promovida por la
espontaneidad llegando a una reciprocidad de lo transmitido que con ello nos
conduce a nuestra formación.
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La educación pues sin narración no se puede entender. La educación
nos proporciona el sentido de construir un espacio de la experiencia donde
cada uno de nosotros puede orientarse, modificar o elegir el sentido de lo
que es.
*Afirmación 8 y 11 mediante la narratividad podemos dejar de ser lo
que somos, lo que tenemos impuesto y cambiarlo hacia donde queremos
llegar. Ya no se nos impone un destino prescrito de lo que tenemos que ser
, sino que en un determinado lugar, en un determinado tiempo en una
determinada cultura nosotros elegimos lo que queremos ser.
PROBLEMATIZACIÓN FORMAS PEDAGÓGICAS DEL PRESENTE.
Requiere cuestionar como se ha construido históricamente lo que
somos y avanzar en las posibles nuevas formas de ser de otro modo (lo
inédito pero posible). Sólo cuestionando las formas eduacativas del presente
podremos problematizar lo que nos pasa hoy en educación, y traspasar esa
problematización a otros ámbitos políticos, sociales etc. y en eso consiste
nuestra labor como trabajadores sociales, en trabajar e informar a la
población que existe otro modelo inédito de educación, de enseñanza, que
juntos podremos encontrar.
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Cuando llegue a la universidad hacia dos semanas que habían
empezado las clases. Recuerdo el primer día, estaba requetecansada,
totalmente descolocada, no tenia horarios , ni sabia donde tenía que ir, ni las
asignaturas … ese día tocaba didáctica general. Vaya tostón pensé, ¿pero
que está diciendo este?, se me hizo interminable porque no entendía nada,
parecía que todo el rato decían lo mismo y yo la única loca a la que se le
hacía imposible escuchar. Los días siguientes no fueron mucho mejores,
nada más hacia que oír elogios de la asignatura y yo la odiaba. Perpleja me
decía: tú tranquila Raquel, te abras estancado por el tremendo currele que
te has pegado.
Así, así fueron pasando los días, y un buen día de repente oí algo que
me hizo afinar el oído. Se trataba de la pasión, de lo incomprensible, de lo
inteligible. Últimamente había estado teniendo problemas porque no savia
como descifrar una pasión, no sabía cómo descifrar una mirada. Y ahí
estaban esas palabras: - esa conexión puesta en contacto ha sido posible a
que se haya roto la identidad cerrada de ambas partes. Ha saltado la chispa.
Esto es algo que desborda a la lógica que dice que las cosas siempre son de
algo o de alguien. Hay experiencia de lo singular porque es cuando nosotros
empezamos a sentir algo por una particularidad de una persona nos fijamos
en lo individual.
A raíz de entonces empecé a preocuparme por lo que decían en clase,
me leí el texto de Larrosa “Un lenguaje para la conversación”, y lo que había
supuesto un peso con multitud de letras pequeñísimas, se convirtió en algo
divertido, en algo que me gustaba porque me sentía identificada.
Y sin darme cuenta como un papagayo ahí estaba yo, fuera de un
concierto, un día lluvioso, dándole ánimos a mi amigo Giles, al tiempo que
aplicaba los contenidos, ¿qué fuerte le decía yo?, ¡Giles que me lo sé!. ¡No
estoy tonta !.
el presente.
Bueno, esas fueron mis dos primeras conexiones de la asignatura con
No puedo poner ninguna canción concreta, ni ninguna poesía, ni relato
concreto porque aparte de no haber pensado nada y dentro de pocas horas
tener que entregarlo, casi todas las cosas que me pasan o que me han
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pasado supongo que tienen que ver con el temario. Hasta esto mismo que lo
estoy haciendo ahora es una conexión de los contenidos con el presente.
¿No?. ¿Aunque sea desde la plurabilidad del ser humano, no?
También decir que aunque las fechas son de estos pocos días atrás, sí
tenía un poco trabajado el texto, sobretodo porque para hacer la práctica
de la experiencia escolar me los había tenido que mirar bien, porque no sabía
hacerla, no sabía por dónde pillarlo, hasta que un día empecé diciendo no sé
que decir… y he ahí la problemática, no tengo voz, pero sí la tengo. Porque
después de hacer la redacción me encanto, pero…. ¿Qué pasa entonces?
Mira! otra conexión del presente: por casualidades de la vida una
compañera mía de años atrás a los que menciono cuando hablo de ese
sentimiento de aniquilación de toda duda, sé ha venido a vivir a Valencia, y
casualmente, los días en que surgió la chispa entre la asignatura y yo, le
estuve contando lo que aprendía. Estos días ha estado conmigo y la pobre ha
tenido que aguantar todo lo que esto supone, pero estoy segura que ella
ahora también observa de modo diferente ciertos acontecimientos.
Bueno lo que quiero decir es que las conexiones que tengo con el
presente son las de informar aquello que he aprendido que me agrada y las
conexiones de aplicarlo a cada nueva construcción. Ahora esos contenidos ya
forman parte de ese sí mismo que hace que vea las cosas de un modo u de
otro.
“Es una barbarie lo que hace el hombre contra el propio hombre”
“Nunca dejes de soñar porque el sueño es libre ”.
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“ Seguiremos trabajando juntos allá donde cada uno éste. Ese es el trazo
del verdadero magisterio. Seguiremos, pues, Angélica, charlando bajo esos
jararandás prestos a cobijar el sentimiento de hombre nuevo; seguiremos
compartiendo caracolas con pasas mientras tratamos contra cualquier forma
de opresión; seguiremos paseando del brazo, multitudes, por amplias
avenidas. ( Francisco Beltrán Llavador, otoño’ 98) .
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