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Suelos Y Rocas Susceptibles a los Fenómenos Hidrometeorológicos

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<strong>Sue<strong>los</strong></strong> Y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong>.<br />

Por: Rafel Osiris de León<br />

Coordinador Comisión Ciencias Naturales y Medio Ambiente. Academia de Ciencias R.D.<br />

Presidente Camara Minera Petrolera República Dominicana.<br />

Calle Orión No. 2, Residencial Constelación. Santo Domingo, D.N. República Dominicana.<br />

e-mail: geofitec@verizon.net.do. Julio, 2005.<br />

RESUMEN<br />

Las vaguadas, tormentas tropicales y huracanes, están siempre acompañados de intensas<br />

lluvias que saturan <strong>los</strong> sue<strong>los</strong> arcil<strong>los</strong>os y las rocas meteorizadas o fracturadas, al mismo<br />

tiempo que producen inundaciones capaces de erosionar <strong>los</strong> sue<strong>los</strong> y las rocas débiles, todo<br />

lo cual se traduce en deslizamientos de laderas, colapso de taludes de carreteras, socavación<br />

de pilas y aproches de puentes, erosión y deslizamientos de terraplenes, colapso total o<br />

parcial de importantes puentes, erosión de importantes tramos de carreteras, deslizamientos<br />

de viviendas<br />

construidas en<br />

laderas de suelo o de<br />

roca pobre, en fin,<br />

daños materiales y<br />

humanos que pueden<br />

ser evitados si<br />

previamente existiese<br />

una caracterización y<br />

zonificación de las<br />

condiciones<br />

geológicas de cada<br />

sitio donde se<br />

proyecte construir<br />

cualquier tipo de<br />

obra, indistintamente<br />

de sus dimensiones y<br />

de sus costos.<br />

Una roca sana es capaz de resistir todas las consecuencias generadas por <strong>los</strong> frecuentes<br />

fenómenos hidrometeorológicos, pero un suelo arcil<strong>los</strong>o, un suelo limoso, un suelo arenoso,<br />

un depósito de gravas, una roca meteorizada, una roca alterada, una roca muy fracturada o<br />

una roca sedimentaria pobremente cementada, siempre serán susceptibles a la erosión, a la<br />

saturación y a <strong>los</strong> deslizamientos, ya que la presencia del agua tiende a deteriorar sus<br />

propiedades geomecánicas.


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

Pág. 2<br />

Por ello es importante zonificar horizontal y verticalmente todo el suelo y el subsuelo de las<br />

áreas destinadas a la construcción de obras civiles, especialmente aquellas ubicadas<br />

próximo a ríos, arroyos, lagos, lagunas, humedales, pantanos y zonas costeras, así como<br />

aquellas ubicadas en zonas bajas susceptibles a las inundaciones, zonificación que está<br />

sostenida por una cartografía geológica detallada, perfiles geofísicos desarrollados mediante<br />

geo-resistividad eléctrica, refracción sísmica o imágenes de geo-radar; sondeos mecánicos<br />

con ensayos de penetración estándar (SPT) y muestreo contínuo o a interva<strong>los</strong>, y ensayos<br />

físicos de laboratorio que pueden incluir granulometría, límites de Atterberg, densidad,<br />

humedad, resistencia a la compresión, etc., etc.<br />

Importantes obras de ingeniería como presas, puentes, carreteras, canales de riego,<br />

terraplenes, taludes, edificaciones, etc, requieren de un conocimiento pormenorizado de la<br />

susceptibilidad frente a <strong>los</strong> fenómenos hidrometeorológicos, porque sólo así podrían incluirse<br />

en <strong>los</strong> diseños las medidas de protección que garanticen su durabilidad más allá de <strong>los</strong><br />

frecuentes fenómenos naturales a <strong>los</strong> que estamos expuestos.<br />

PALABRAS CLAVES<br />

Suelo arcil<strong>los</strong>o, suelo limoso, suelo arenoso, gravas y arenas, aluviones, suelo residual, suelo<br />

laterítico, roca meteorizada, roca alterada, roca muy fracturada, roca poco cementada,<br />

porosidad, permeabilidad, saturación, presión de poros, presión hidrostática, deslizamiento<br />

de ladera, deslizamiento de taludes, erosión, socavación, nivel freático, geología,<br />

hidrogeología, geofísica, geotecnia, geo-resistividad eléctrica, refracción sísmica, imágenes<br />

de geo-radar, granulometría, límites de Atterberg, resistencia a la compresión simple.


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

INTRODUCCIÓN<br />

Pág. 3<br />

Los frecuentes fenómenos hidrometeorológicos traen intensos períodos lluviosos que al<br />

saturar <strong>los</strong> sue<strong>los</strong> arcil<strong>los</strong>os y arenosos con frecuencia producen deslizamientos de taludes<br />

que bloquean importantes carreteras, producen deslizamientos de laderas donde están<br />

emplazadas viviendas humildes, producen colapso de edificaciones cimentadas sobre sue<strong>los</strong><br />

susceptibles de saturación o de erosión, pero al mismo tiempo estas lluvias incrementan<br />

excesivamente <strong>los</strong> caudales de <strong>los</strong> ríos y arroyos y producen erosion parcial de la base y la<br />

sub-base de algunas carreteras, lo que a su vez impide el tránsito normal, producen<br />

socavación en las pilas de <strong>los</strong> puentes, lo que muchas veces provoca el colapso del puente;<br />

producen erosión de <strong>los</strong> aproches de <strong>los</strong> puentes lo que también interrumpe el tránsito,<br />

producen erosión y fallas estructurales en muros de presas de tierra, en fin, son múltiples <strong>los</strong><br />

efectos de <strong>los</strong> fenómenos hidrometeorológicos sobre <strong>los</strong> sue<strong>los</strong> y las rocas poco<br />

competentes, razón por la cual se prefiere cimentar sobre roca de buena calidad, o, en su<br />

defecto, tomar las medidas de protección para salvar la construcción.<br />

Puente sobre el arroyo Maleno, en Carrizal, Azua, el cual colapsó por socavación de una de las pilas<br />

luego de las fuertes lluvias provocadas por el huracán Georges en septiembre de 1998.


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

SUELOS Y ROCAS SUSCEPTIBLES ANTE LAS PRECIPITACIONES INTENSAS<br />

Pág. 4<br />

La meteorización es un fenómeno típico de las regiones tropicales, donde la intensa radiación<br />

solar diurna, la humedad y la precipitación pluvial, se combinan para deteriorar las<br />

propiedades físicas de las rocas expuestas superficialmente, las que terminan transformadas<br />

en sue<strong>los</strong> residuales, sue<strong>los</strong> lateríticos, sue<strong>los</strong> transportados, etc, sue<strong>los</strong> que en función del<br />

tamaño de sus partículas pueden ser clasificados como sue<strong>los</strong> arcil<strong>los</strong>os, sue<strong>los</strong> limosos,<br />

sue<strong>los</strong> arenosos, sue<strong>los</strong> granulares gruesos (gravas), y <strong>los</strong> que en función de su<br />

permeabilidad (facilidad para ser atravesados por el agua) pueden ser clasificados en<br />

permeables (gravas y arenas) o impermeables (arcillas).<br />

COEFICIENTE DE PERMEABILIDAD DE LOS DIFERENTES TIPOS DE SUELOS<br />

GRAVAS LIMPIAS<br />

ARENAS LIMPIAS<br />

MEZCLAS DE GRAVAS<br />

ARENAS MUY FINAS<br />

TIPO DE SUELO DRENAJE K (Cm/SEG)<br />

BUENO<br />

BUENO<br />

BUENO<br />

BUENO<br />

10 -2 - 10 2<br />

10 1 - 1.0<br />

10- 2<br />

10- 4<br />

TIPO DE SUELO<br />

LIMOS ORGANICOS E<br />

DRENAJE K (Cm/SEG)<br />

INORGANICOS, MEZCLAS DE<br />

ARENA LIMO Y ARCILLA.<br />

MALO<br />

10- 5<br />

DEPOSITOS DE ARCILLA ESTRATIFICADA.<br />

SUELOS IMPERMEABLES,<br />

COMO ARCILLAS HOMOGENEAS<br />

DEBAJO DE LA ZONA METEORIZADA<br />

MALO<br />

PRACTICAMENTE<br />

IMPERMEABLE<br />

10- 6<br />

10- 7<br />

10- 8<br />

10- 9<br />

CLASIFICACION DE LOS SUELOS SEGUN SU COEFICIENTE DE PERMEABILIDAD<br />

Grado de Permeabilidad Valor de K (cm/seg)<br />

Alto Mayor de 10- 1<br />

Mediano 10- 1 a 10- 3<br />

Bajo 10- 3 a 10- 5<br />

Muy bajo 10- 5 a 10- 7<br />

Prácticamente impermeable Menor de 10 -7<br />

Todos estos sue<strong>los</strong> producidos por la meteorización son susceptibles a la erosión y a <strong>los</strong><br />

deslizamientos bajo las condiciones de saturación que sobrevienen a <strong>los</strong> prolongados<br />

períodos lluviosos.


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

Umbrales de precipitación para desencadenamiento de movimientos de ladera<br />

Tipo de movimiento y país Intensidad Intensidad<br />

horaria (Ih) diaria (Id)<br />

Movimientos de nueva generación<br />

>50 mm<br />

Hong Kong >40 mm >100 mm<br />

Flujos de<br />

barro y tierra<br />

Flujos de<br />

derrubios<br />

Diversos tipos<br />

de movimiento<br />

Pág. 5<br />

Precipitación acumulada<br />

>50 mm (15 días)<br />

Japón >125 mm >182 mm (2 días)<br />

Italia<br />

(Toscana)<br />

Brasil<br />

60 mm<br />

86 mm<br />

>125 mm<br />

260 mm (15 días)<br />

325 mm (30 días)<br />

>0,4 Panual (precipitación anual)<br />

>675 mm (3 días)<br />

Estados Unidos<br />

(California)<br />

>250 mm (3 días)<br />

España 213 mm 52 mm durante el evento<br />

Japón 20 mm 10-150 mm durante el evento<br />

Estados Unidos<br />

(California)<br />

>180 mm durante el evento<br />

Italia<br />

143-153 mm 290-400 mm (15 días)<br />

(Toscana)<br />

360-450 mm (30 días)<br />

Francia >300 mm (60 días)<br />

España 205 mm >500 mm (3 días)<br />

476 mm (2 días)<br />

>60 mm >150 mm<br />

(clima atlántico) (clima atlántico)<br />

>180 mm<br />

(c. mediterráneo)<br />

>300 mm (clima mediterráneo)<br />

Reactivación o aceleración de movimientos<br />

Italia >520 mm (60 días) pequeños desl.<br />

>900 mm (100 días) grandes desl.<br />

Francia 300 mm (90 días)<br />

España >250 mm (90 días)<br />

España 320 mm (15 días)<br />

Modificado de Ferrer y Ayala, 1997; datos de varios autores.


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

Relación entre precipitaciones y desencadenamiento de movimiento de ladera<br />

Tipo de<br />

movimiento<br />

Deslizamientos<br />

Flujos de tierra<br />

Flujos de derrubios<br />

Desprendimientos<br />

Precipitación anual (mm) Precipitación en <strong>los</strong> 3-4 meses previos (mm)<br />

Total en el<br />

año previo<br />

500 a 1.000<br />

500 a 800<br />

≥ 1.300<br />

250 a 700<br />

Media anual<br />

de la serie (*)<br />

500 a 800<br />

600 a 700<br />

1.100 a 1.200<br />

220 a 450<br />

Total en <strong>los</strong><br />

meses previos<br />

300 a 500<br />

300 a 400<br />

350 a 650<br />

100 a 250<br />

(*) Series analizadas entre 30 y 70 años. P = Precipitación (Ferrer y Ayala, 1997).<br />

% P total del<br />

año previo<br />

50-60%<br />

50-80%<br />

30-50%<br />

≤30%<br />

Pág. 6<br />

% P media anual<br />

de la serie<br />

≤30 %<br />

50-60%<br />

50-120%<br />

50-130%<br />

Pero no sólo <strong>los</strong> sue<strong>los</strong> son susceptibles frente a <strong>los</strong> fenómenos hidrometeorológicos, ya que cuando<br />

una roca está muy fracturada por efectos del tectonismo regional o loca, o cuando una roca está<br />

sumamente meteorizada o alterada, entra en la categoría de roca de muy pobre calidad, lo que<br />

incrementa su debilidad frente a <strong>los</strong> agentes erosivos generados por las lluvias y aumenta el riesgo<br />

de deslizamientos de laderas o de taludes, especialmente si el macizo de roca ha sido cortado de<br />

manera inadecuada, o si no hay suficiente drenaje natural o artificial para facilitar la salida del agua<br />

intersticial, o si el talud natural es muy inclinado.<br />

INVESTIGACIÓN EN LAS ZONAS<br />

SUSCEPTIBLES A DESLIZAMIENTOS.<br />

La investigación de las causas que producen<br />

inestabilidad de laderas y taludes implica el<br />

reconocimiento geológico de las zonas<br />

susceptibles a <strong>los</strong> deslizamientos bajo<br />

condiciones de saturación, poniendo especial<br />

énfasis en <strong>los</strong> tipos de sue<strong>los</strong> y rocas<br />

susceptibles a <strong>los</strong> deslizamientos, sus espesores<br />

y la facilidad o dificultad para el drenaje del<br />

agua intersticial, investigaciones que se<br />

desarrollan in situ , con el apoyo de métodos<br />

geofísicos y geotécnicos, y permiten realizar <strong>los</strong><br />

análisis de estabilidad de ladera y recomendar<br />

<strong>los</strong> trabajos para la prevención de <strong>los</strong><br />

deslizamientos, o las medidas estabilizadoras<br />

para mitigar <strong>los</strong> riesgos para la ingeniería civil,<br />

para la minería y para el medio ambiente. El<br />

resultado de las investigaciones se presenta en<br />

forma de mapas geo-referenciados y secciones<br />

transversales que muestran las zonas<br />

inestables.<br />

Vista de un gran derrumbe en la carretera a Río Blanco


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

RECONOCIMIENTOS GENERALES.<br />

Pág. 7<br />

En <strong>los</strong> reconocimientos generales de las laderas con tendencia a <strong>los</strong> deslizamientos es<br />

necesario identificar <strong>los</strong> siguientes aspectos importantes:<br />

Relieve topográfico, geomorfología y pendientes escarpadas.<br />

Tipos, origen y espesor de <strong>los</strong> sue<strong>los</strong> presentes en la superficie.<br />

Litología y secuencia estratigráfica de sue<strong>los</strong> y rocas.<br />

Grado de meteorización o alteración de las rocas.<br />

Estructuras de las rocas, orientación de planos de fallas.<br />

Aspectos hidrogeológicos, nivel freático, manantiales y vías de drenaje.<br />

Vegetación presente en las laderas y grado de inclinación de <strong>los</strong> árboles.<br />

Usos actuales del suelo.<br />

Cantidad de lluvia que usualmente cae sobre la zona.<br />

Procesos erosivos, tectónicos y sísmicos actuantes sobre la zona<br />

Modificaciones del relieve causadas por <strong>los</strong> procesos naturales y antrópicos.<br />

Identificación de <strong>los</strong> deslizamientos actuales o antiguos y sus causas.<br />

Daños visibles en las estructuras, tuberías de conducción, etc.<br />

Los métodos para identificar movimientos de laderas generados por fenómenos hidrometeorológicos<br />

se apoyan en mapas topográficos, geológicos, geomorfológicos, hidrogeológicos, geotécnicos, etc.,<br />

que se encuentren disponibles; en fotografías aéreas de gran escala y en imágenes de satélite y de<br />

radar, a partir de las cuales se puede identificar la morfología, la vegetación, las condiciones del<br />

drenaje superficial, <strong>los</strong> contactos entre diferentes unidades geológicas y <strong>los</strong> lineamientos estructurales<br />

asociados con fallas locales o regionales, todo lo cual sirve de base para la cartografía geotécnica<br />

geo-referenciada, con énfasis en la localización de las zonas inestables y susceptibles a <strong>los</strong><br />

deslizamientos por efectos de las lluvias, así como las áreas potencialmente peligrosas.<br />

Es importante resaltar y cartografiar <strong>los</strong> lugares donde se registren deslizamientos activos o antiguos<br />

y que hayan sido producidos y/o estabilizados por actuaciones antrópicas, como cortes para<br />

carreteras o canales, ya que <strong>los</strong> cambios en las condiciones hidrogeológicas o la remoción de<br />

elementos estabilizadores podrían reactivar <strong>los</strong> movimientos de masas deslizantes.<br />

INVESTIGACIONES DETALLADAS.<br />

Una vez identificadas las zonas susceptibles de deslizamientos se debe proceder a estudiar<br />

detalladamente sus condiciones sub-superficiales, a fin de determinar <strong>los</strong> volúmenes de sue<strong>los</strong> o de<br />

rocas expuestos a deslizamientos, ya que la magnitud del riesgo y de <strong>los</strong> daños dependerá de <strong>los</strong><br />

volúmenes de materiales deslizantes.<br />

La caracterización geomecánica e hidrogeológica se realiza en el campo, mediante las<br />

observaciones de afloramientos, exploración geofísica, sondeos mecánicos con ensayos de<br />

penetración estándar, calicatas para descripción y muestreo y ensayos de laboratorio que<br />

complementan la caracterización de <strong>los</strong> materiales.


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

Pág. 8<br />

En muchos casos <strong>los</strong> reconocimientos geológicos detallados permiten estimar la posición de <strong>los</strong><br />

planos de deslizamiento a partir de criterios geológicos, estratigráficos o estructurales, tales como<br />

contactos entre diferentes unidades litológicas, presencia de estratos blandos, contactos entre sue<strong>los</strong><br />

y roca base o entre rocas alteradas o meteorizadas y material sano, presencia de fallas, etc., lo que<br />

representa un punto de partida importante para las subsiguientes investigaciones detalladas.<br />

La exploración geofísica proporciona información sobre determinadas propiedades físicas y mecánicas<br />

de las rocas y sue<strong>los</strong> subyacentes, así como sus extensiones horizontales y verticales,<br />

recomendándose el uso de la geo-resistividad eléctrica, ya que ha demostrado ser eficiente en la<br />

identificación de <strong>los</strong> materiales arcil<strong>los</strong>os y arenosos presentes en el subsuelo, y la refracción sísmica<br />

que ha probado ser el mejor método no invasivo para conocer, de forma rápida y económica, el<br />

horizonte de contacto entre <strong>los</strong> sue<strong>los</strong> superficiales y la roca base.<br />

Estas investigaciones geofísicas son fundamentales para conocer en detalle el perfil interior de una<br />

ladera expuesta a deslizamientos y para apoyar <strong>los</strong> análisis de estabilidad.<br />

La observación detallada de <strong>los</strong> testigos de sondeos permite detectar niveles arcil<strong>los</strong>os blandos,<br />

zonas alteradas, o meteorizadas, zonas brechadas, zonas milonitizadas, zonas sin recuperación de<br />

muestras por efecto del lavado del material deteriorado, etc.<br />

Si ya hay deslizamientos previos, la profundidad de <strong>los</strong> sondeos y de la investigación geofísica debe<br />

ser suficiente para alcanzar a las zonas estables bajo las masas deslizadas.<br />

ANÁLISIS DE ESTABILIDAD.<br />

Una vez obtenidos <strong>los</strong> datos geológicos, hidrogeológicos, geotécnicos y geométricos de la masa<br />

susceptible de deslizamiento en la ladera, y las propiedades geomecánicas de <strong>los</strong> materiales, pueden<br />

establecerse <strong>los</strong> mode<strong>los</strong> geológicos, hidrogeológicos y geotécnicos para llevar a cabo <strong>los</strong><br />

análisis a posteriori de la estabilidad y del comportamiento de la ladera.<br />

Los análisis a posteriori mediante <strong>los</strong> métodos de equilibrio límite proporcionan:<br />

El coeficiente de seguridad de la ladera, a partir del conocimiento de la superficie de rotura y<br />

de las propiedades de <strong>los</strong> materiales.<br />

Los parámetros resistentes c y Φ, del plano de rotura, fijando en el modelo la superficie de<br />

deslizamiento y el valor del factor de seguridad (para análisis en situaciones inestables o<br />

cercanas al equilibrio se toma FS=1,00), lo que permite comparar <strong>los</strong> resultados con <strong>los</strong> datos<br />

obtenidos en laboratorio, y realizar análisis de sensibilidad para obtener <strong>los</strong> valores de <strong>los</strong><br />

parámetros resistentes más representativos.<br />

Las modelizaciones mediante métodos tensión-deformación permiten:<br />

Determinar las pautas y el modelo de comportamiento tenso-deformacional de toda la ladera,<br />

a partir de las propiedades de <strong>los</strong> materiales, y su comparación con el comportamiento real<br />

observado.<br />

Determinar <strong>los</strong> parámetros existentes y deformacionales de <strong>los</strong> materiales de la ladera,<br />

modelizando o “reproduciendo” <strong>los</strong> rasgos y el comportamiento observado en el campo, y la<br />

comparación de estos parámetros con <strong>los</strong> obtenidos en laboratorio.


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

Pág. 9<br />

Es conveniente comparar <strong>los</strong> resultados de ambos métodos y tener en cuenta que <strong>los</strong> resultados de<br />

<strong>los</strong> ensayos en laboratorio, e incluso <strong>los</strong> realizados in situ, muchas veces no son representativos de<br />

<strong>los</strong> parámetros a escala real, sobre todo en el caso de macizo rocosos, obteniéndose frecuentemente<br />

valores superiores de <strong>los</strong> que resultan de <strong>los</strong> análisis a posteriori.<br />

El empleo de softwares especializados para la modelización detallada y el análisis de la rotura y del<br />

comportamiento de laderas en sue<strong>los</strong> y rocas, como PLAXIS, GALENA, PHASE2, etc., permiten el<br />

análisis de casos complejos y de una gran variedad de condiciones hidrogeológicas, tensionales, etc.,<br />

modelizándose también las medidas de estabilización.<br />

INSTRUMENTACION.<br />

La instrumentación o auscultación de deslizamientos constituye la fase más avanzada de las<br />

investigaciones de detalle, y tiene por finalidad la vigilancia y la predicción del comportamiento de la<br />

ladera, además de la obtención de datos sobre el proceso. La instrumentación debe orientarse<br />

fundamentalmente a la investigación de:<br />

Situación de la superficie o superficies de rotura.<br />

Velocidad del movimiento de desplazamiento en la ladera.<br />

Posición del nivel freático y presiones del agua intersticial.<br />

El tiempo de observación y medida de la instrumentación depende de varios factores, pero al menos<br />

debería ser de un ciclo meteorológico anual, y mayor si se quiere conocer la influencia de condiciones<br />

climáticas a más largo plazo (Sowers and Royster, 1988). Por ejemplo, si <strong>los</strong> estudios se realizan en<br />

un periodo de sequía, las medidas correctoras o estabilizadoras diseñadas, posiblemente no serán<br />

efectivas cuando cambien las condiciones y se den épocas lluviosas.<br />

La medida de <strong>los</strong> desplazamientos y de la velocidad del movimiento puede llevarse a cabo mediante<br />

instrumentación en superficie y en profundidad (inclinómetros). Los valores de la velocidad del<br />

deslizamiento permiten también conocer la evolución de <strong>los</strong> procesos y hasta prever el “desenlace” de<br />

la rotura.<br />

Los piezómetros proporcionan la posición de <strong>los</strong> niveles piezométricos y las presiones del agua<br />

intersticial en <strong>los</strong> niveles en que han sido instalados, recomendándose su instalación en el plano de<br />

deslizamiento o inmediatamente por encima.<br />

MEDIDAS DE CORRECCION.<br />

Las medidas de corrección o estabilización de laderas están encaminadas a prevenir <strong>los</strong> procesos y<br />

mitigar <strong>los</strong> daños. Su aplicación depende principalmente de la topología, magnitud y velocidad de <strong>los</strong><br />

movimientos, y pueden realizarse antes (en casos de laderas potencialmente inestables) o durante el<br />

movimiento, siempre que su velocidad lo permita. Los deslizamientos o flujos de dimensiones<br />

importantes, incluso con velocidades muy bajas, son muy difíciles o imposibles de detener.


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

Las actuaciones, una vez que el movimiento ha comenzado, se deciden en función de:<br />

El volumen de la masa inestable.<br />

Las pautas del movimiento, velocidad del proceso y comportamiento de la masa inestable.<br />

La profundidad de <strong>los</strong> planos de rotura.<br />

La pendiente y altura de la ladera.<br />

El tipo de materiales presentes.<br />

La accesibilidad a la ladera.<br />

Las actuaciones más efectivas, y muchas veces las<br />

menos costosas, son las que intervienen directamente<br />

sobre las causas que desencadenan las inestabilidades.<br />

En el caso de <strong>los</strong> deslizamientos son recomendables,<br />

sobre todo cuando presentan cierta magnitud o<br />

profundidad, las obras de drenaje y la modificación de<br />

la geometría, al actuar sobre dos de <strong>los</strong> factores<br />

principales que condicionan las inestabilidades: las<br />

presiones intersticiales y la distribución de las fuerzas<br />

debidas al peso del terreno.<br />

Pág. 10<br />

El drenaje y las medidas para evitar la entrada de agua son siempre beneficiosas para la estabilidad<br />

de la ladera, pero deben ser diseñadas según las características hidrogeológicas y en base a estudios<br />

de detalle, sobre todo <strong>los</strong> drenajes profundos.<br />

En el caso de deslizamientos y movimientos tipo flujo no muy rápidos y poco profundos, las medidas<br />

más recomendables son las de drenaje superficial mediante excavación de zanjas perimetrales que<br />

eviten la llegada de agua a la masa en movimiento. Los drenajes superficiales sobre masas deslizadas<br />

deben realizarse una vez que éstas se han estabilizado.<br />

Otras medidas, como la instalación de anclajes y bulones, son recomendables en caso de<br />

inestabilidades en macizos rocosos para evitar <strong>los</strong> deslizamientos y desprendimientos de bloques, no<br />

siendo efectivas en deslizamientos en sue<strong>los</strong> (a no ser que se instala sobre muros o vigas que<br />

repartan las fuerzas de forma uniforme); en este último caso, son más efectivos <strong>los</strong> elementos<br />

resistentes como pilotes, muros o pantallas.<br />

ESTABILIZACION Y PROTECCION FRENTE A DESPRENDIMIENTOS ROCOSOS.<br />

Las medidas de protección superficial, aplicables igualmente a laderas naturales y a la estabilización<br />

de las zonas de potenciales desprendimientos de bloques rocosos, consisten en:<br />

Instalaciones de pernos y anclajes para fijación de bloques.<br />

Instalación de sistemas de cables y mallas metálicas fijados o anclados a las laderas para<br />

estabilización de zonas muy fracturadas; consiste en la colocación de una malla metálica, de<br />

doble o triple torsión, sobre la que se superponen una serie de cables formando una retícula,<br />

anclados a la roca en sus extremos y tensionados.<br />

A veces sobre la malla se lanza concreto fino (shotcrete) o se lanza un mortero integrado por<br />

arena, cemento y agua (gunita).


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

Pág. 11<br />

Existe otro tipo de actuaciones, las denominadas medidas pasivas, cuya finalidad es evitar <strong>los</strong> daños<br />

que <strong>los</strong> desprendimientos puedan causar a edificaciones, estructuras y vías de comunicación. Estas<br />

consisten en:<br />

Mallas metálicas para guiado de pequeños bloques desprendidos.<br />

Bermas o zanjas para recogida de <strong>los</strong> bloques caídos.<br />

Muros de tierra o de concreto.<br />

Barreras de árboles para frenado y contención de <strong>los</strong> bloques.<br />

Las mallas de guiado, formadas por alambre de acero, se tienden desde la cabecera de la ladera,<br />

cubriendo toda su superficie hasta el pie. Sirven para guiar a <strong>los</strong> bloques rocosos en su caída,<br />

evitando que reboten y salten hacia fuera, y acumular<strong>los</strong> en la base, donde pueden ser retirados. Son<br />

efectivas para bloques menores de 0.5m 3 aproximadamente. Las mallas más resistentes son<br />

hexagonales de triple torsión de acero galvanizado.<br />

Talud gunitado en un campo de golf de Río San Juan, luego de haberle colocado mallas y<br />

pernos para estabilizarlo después de que colapsara por las fuertes lluvias y <strong>los</strong> fuertes oleajes


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

CASOS TÍPICOS DE DESLIZAMIENTOS POR CAUSAS HIDROMETEOROLÓGICAS.<br />

CASO I<br />

DERRUMBES TALUDES AUTOPISTA DUARTE EN LA LOMA DE MIRANDA<br />

Pág. 12<br />

En el año 1995, mientras se construía la nueva autopista Duarte, se decidió abrir <strong>los</strong> dos nuevos<br />

carriles cortando la loma de Miranda, donde <strong>los</strong> taludes fueron cortados a 45º y con las primeras<br />

lluvias <strong>los</strong> taludes colapsaron, y no obstante volver a cortar nuevos taludes <strong>los</strong> derrumbes se repetían<br />

con cada período lluvioso.<br />

Luego de un año de demoras en la construcción de la vía, y luego de un derrumbe gigantesco que<br />

afecto un área del tamaño de un campo de fútbol, se decidió encargar un estudio geológico y<br />

geofísico que permitiera conocer las causas de <strong>los</strong> constantes y cada vez más grandes derrumbes y<br />

las soluciones más adecuadas al problema.<br />

Vista de un nuevo deslizamiento ocurrido en la loma de Miranda, inmediatamente al sur del<br />

deslizamiento del año 1995, donde las condiciones geológicas e hidrogeológicas son las mismas.<br />

GEOLOGIA GENERAL DE LA ZONA DE DERRUMBES<br />

El basamento de la zona de interés está constituido por un esquisto de excelente calidad, sobre el<br />

cual hay una gran masa de periodotita serpentinizada, foliada, meteorizada y en gran parte<br />

brechada, exhibiendo un color gris verdoso, la cual está parcialmente corrida o cabalgada sobre <strong>los</strong><br />

esquistos.


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

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La periodotita está muy fallada e intruida por bloques de andesita, lo que ha generado un<br />

extraordinario fracturamiento que convierte al macizo en altamente permeable, por lo que a través<br />

de sus estructuras hay un flujo de aguas subterráneas, las que al no poder pasar a través del<br />

esquisto, el cual actúa como barrera hidrogeológica, generan un aumento en la presión de poros, con<br />

lo que aumenta el empuje hacia la cara libre del talud que corre en dirección norte-sur.<br />

En la zona de contacto entre periodotita y esquistos pudimos<br />

apreciar una capa de arcilla color amarillento, de altísima<br />

plasticidad (similar a la masilla) y de unos 15 centímetros de<br />

espesor, lo que justifica porqué la periodotita brechada y la<br />

laterita han resbalado sobre el esquisto que sirve de<br />

basamento o roca base. Esta capa plástica de resbalamiento<br />

se extiende hacia el lado norte, observándose que la masa<br />

caótica colocada sobre este plano se movía continuamente a<br />

razón de 3 a 5 centímetros por día, gracias al peso de la masa<br />

y a la pendiente del terreno.<br />

En sentido general puede establecerse que el plano de<br />

contacto entre la peridotita brechada y el esquisto tiene una<br />

dirección aproximada N40°-50°W, estando definido por un<br />

plano de falla inversa o de bajo ángulo, pudiendo considerarse<br />

esta peridotita brechada y parcialmente foliada, como el<br />

material más permeable de todo el área.<br />

En el extremo suroeste del área de deslizamientos hay una<br />

asociación de peridotita brechada, andesita afanítica color<br />

verdoso, andesita color púrpura y dolerita, que hemos<br />

unificado en un sólo cuerpo y hemos definido como complejo<br />

ígneo.<br />

Parte importante de este complejo aflora en el escarpe de falla<br />

del área, pero se le aprecia mejor en la excavación de la<br />

trinchera perimetral norte, evidenciándose que las rocas son<br />

de buena calidad, aunque hay claros efectos de fracturamiento.<br />

Todo el macizo actualmente expuesto en superficie está in-situ, pues no fue afectado por <strong>los</strong><br />

deslizamientos, ya que el plano de falla estuvo situado por encima del nivel de corte del terreno que<br />

es el nivel actual de la superficie.<br />

Luego de la remoción del material deslizado, el complejo ígneo puede ser apreciado entre la cota 225<br />

y la 234 m.s.n.m., pudiendo comprobarse en <strong>los</strong> cortes verticales de la trinchera que esta área no es<br />

susceptible de deslizamientos debido a la buena calidad de la roca, no obstante la abundante salida<br />

de agua en el plano de contacto entre este complejo y la suprayacente andesita fracturada.<br />

Gran parte del extremo suroeste del área deslizada muestra la presencia de andesita verdosa, de<br />

textura afanítica (granos muy finos), muy fracturada y parcialmente meteorizada, constituyendo,<br />

aparentemente un bloque volcánico posicionado tectónicamente sobre la peridotita brechada allí<br />

existente.


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

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Debido al alto nivel fracturamiento, esta andesita es sumamente permeable, facilitando el paso de<br />

las aguas subterráneas que drenan en sentido oeste-este y que fueron corresponsables de <strong>los</strong><br />

grandes deslizamientos del pasado reciente.<br />

Por debajo de la cota 235 m.s.n.m., la roca luce casi fresca, sin embargo, por encima de esta cota se<br />

acentúa el perfil de meteorización, al extremo de que en el tope del escarpe de falla la roca está<br />

totalmente meteorizada, exhibiendo color pardo y deslizando frecuentemente debido a la<br />

inestabilidad del escarpe.<br />

Toda la franja situada por encima de la cota 236 m.s.n.m. será retaludada con un talud 1.75H : 1V.<br />

Algunas áreas de la zona están cubiertas por una arcilla rojiza, con alto contenido de óxido férrico<br />

(Fe2O3), que se ha formado por un proceso de lateritización, gracias a la alta pluviometría de la zona,<br />

y a la intensidad de la radiación solar, lo que es típico en las zonas tropicales.<br />

Este suelo laterítico también ha sido corresponsable de <strong>los</strong> deslizamientos allí producidos, debido a<br />

que su ángulo de fricción interna es muy bajo, inferior a 30°, lo que provoca fluencia bajo<br />

condiciones de saturación extrema.<br />

Del mismo modo podemos señalar que este suelo laterítico es prácticamente impermeable, lo que en<br />

el pasado reciente impedía el flujo sectorial de las aguas subterráneas, generando con esto un<br />

aumento de la presión de poros, y que en algunos casos haya efectos de artesianismo, lo que en<br />

conjunto contribuyó con <strong>los</strong> deslizamientos ocurridos.


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

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La mayor parte del suelo laterítico que existía dentro de la zona deslizada ha sido removida, aunque<br />

dentro de la franja fallada aún queda una mezcla de laterita y peridotita brechada, la que no implica<br />

mayores riesgos para la estabilidad general del área bajo tratamiento.<br />

CAUSAS DEL DESLIZAMIENTO.<br />

Los estudios geológicos y geofísicos (geo-resistividad eléctrica y refracción sísmica) desarrollados en<br />

el área, así como la observación detallada de <strong>los</strong> principales aspectos hidrogeológicos, nos llevan a<br />

concluir que el deslizamiento fue provocado por la combinación de <strong>los</strong> siguientes factores:<br />

1. Presencia de gran cantidad de suelo laterítico, producto del intemperismo regional típico de<br />

zonas tropicales de alta pluviometría, suelo este que tiene bajos valores de cohesión (c) y<br />

reducido ángulo de fricción interna (Φ)< 30°.<br />

2. Peridotita brechada, meteorizada y parcialmente foliada, con características algo parecidas a<br />

las de un suelo. Esta peridotita es altamente permeable facilitando el flujo de las aguas<br />

subterráneas.<br />

3. Presencia de un horizonte arcil<strong>los</strong>o de altísima plasticidad, posicionado próximo al contacto<br />

entre la peridotita y el esquisto. Este horizonte facilita el deslizamiento de cualquier masa<br />

suprayacente.<br />

4. Altísima pluviometría, cercana a <strong>los</strong> 2,500 mm anuales, lo que facilita la contínua recarga del<br />

acuífero, incrementado el nivel freático y consecuentemente la presión de poros dentro de la<br />

peridotita meteorizada, la que tiene una baja resistencia al esfuerzo cortante.<br />

5. Corte de taludes muy escarpados con inclinación igual a 45° (1:1), cuando el ángulo de<br />

fricción interna (Φ) del material laterítico, de la peridotita y de la peridotita brechada, foliada<br />

y meteorizada es inferior a 30°. Sólo en el esquisto amarillento de la loma de Miranda serían<br />

admisibles taludes de 45° o más.<br />

CORRECTIVOS APLICADOS.<br />

El primer correctivo aplicado fue el de la remoción de prácticamente todo el material deslizado, a<br />

fin de limpiar hasta llegar al esquisto, siempre que fuese posible, ya que el plano de falla del<br />

deslizamiento estaba inmediatamente encima del esquisto.<br />

Una vez removido el material deslizado, construimos una trinchera perimetral a todo lo largo del<br />

borde norte, noroeste y oeste del deslizamiento, así como otra trinchera perimetral a lo largo del<br />

borde sur del deslizamiento. También procedimos a la excavación de cuatro trincheras<br />

intermedias.<br />

Todas las trincheras fueron llenadas con escoria fina, a fin de facilitar un adecuado flujo de todo<br />

el caudal de aguas subterráneas, y con ello eliminar la presión ejercida sobre la masa de<br />

periodotita, poco resistente, existente en el centro del área.


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

Pág. 16<br />

Estos subdrenes han funcionado perfectamente y desde 1996 hasta el presente año 2005 están<br />

cumpliendo cabalmente con el criterio de diseño, pues su función es drenar subterráneamente las<br />

aguas del acuífero, aislándolas de la zona débil.<br />

En la porción central del área de deslizamiento, <strong>los</strong> cortes de la masa deslizada no llegaron hasta<br />

el plano de falla, por lo que allí quedó una masa deslizante, que continuamente estuvo<br />

moviéndose hacia el este y hacia el sureste. Para contrarrestar este movimiento, se diseño una<br />

berma estabilizadora, la cual fue construida en función de las características geológicas del eje<br />

longitudinal de la excavación, eje que es paralelo al eje vial.<br />

Conforme al diseño, dicha berma estaría constituida por escoria gruesa, pero en vista de que el<br />

contratista sólo disponía, in situ, de escoria fina, se procedió a colocar la escoria fina, pero<br />

complementariamente fue eliminada la mayor parte de la masa deslizante situada detrás (al lado<br />

oeste) de la berma, para de esa forma disminuir el empuje provocado por la masa colocada por<br />

encima del horizonte de arcilla plástica que representa el plano de falla subhorizontal. Ese<br />

material removido fue colocado en las trincheras intermedias para cubrir la escoria de cada<br />

subdren, cuidando, al mismo tiempo, de que el relieve final del terreno quedase lo más uniforme<br />

posible.<br />

En <strong>los</strong> extremos norte y sur no fue necesario continuar con la berma estabilizadora, ya que <strong>los</strong><br />

esquistos allí existente, <strong>los</strong> que son de buena calidad, tienen rumbos N20°-30°W y buzamientos<br />

de 60°-80° hacia el suroeste, se comportan como un muro natural que impediría nuevos<br />

deslizamientos, ya que estos tres factores: rumbo, buzamiento y calidad de la roca son muy<br />

favorables para el actual talud próximo a la carretera.


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CASO II<br />

DESLIZAMIENTOS DE TALUDES Y TERRAPLENES EN UNA MINA.<br />

Pág. 17<br />

En el mes de enero de 2005, se detectó una falla de suelo en el tope del terraplen donde está<br />

instalada una gran trituradora de mineral en una de las operaciones mineras más importantes de la<br />

Rep. Dominicana.<br />

En fecha 03 de febrero de 2005 pudimos apreciar una falla de suelo tipo arco, de unos 85 metros de<br />

longitud, con un desplazamiento vertical relativo, variable entre 20 centímetros y un metro, siendo el<br />

extremo occidental el que mayor desplazamiento vertical ha sufrido.<br />

La falla de suelo ha tocado el extremo sureste de la base de la trituradora, lo que ha provocado que<br />

el muro de revestimiento sur haya colapsado, aunque todavía ello no afecta la estabilidad estructural<br />

de la trituradora, pero en realidad produce un efecto visual negativo.<br />

Muro de revestimiento destruido por <strong>los</strong> deslizamientos del talud vecino.


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

Pág. 18<br />

De igual modo, uno de <strong>los</strong> pilotes de acero tipo H, sobre <strong>los</strong> cuales se apoyan las zapatas de la<br />

trituradora, se ha separado unos 25 centímetros verticales de la zapata, facilitando que la mitad sur<br />

de esa zapata se encuentre hoy día en voladizo.<br />

Otro de <strong>los</strong> pilotes de acero está inclinado hacia el lado sur, producto de flexión o producto del<br />

deslizamiento de la masa de suelo donde fue hincado, lo que indica que dos de <strong>los</strong> pilotes del lado<br />

sur no están haciendo su trabajo y deberán ser sustituidos por otros pilotes.<br />

En fecha 09 de febrero de 2005 volvimos a visitar las instalaciones de la Rosario Dominicana para<br />

observar otros deslizamientos encontrados por el personal técnico de la mina en la zona sur y<br />

suroeste de la refinería, a fin de establecer si existían víncu<strong>los</strong> entre <strong>los</strong> deslizamientos de la zona de<br />

la trituradora y <strong>los</strong> deslizamientos al sur de la refinería.<br />

Esto motivó que <strong>los</strong> ejecutivos de la empresa minera decidieran encargar un estudio de refracción<br />

sísmica a lo largo de dos líneas paralelas que se extienden desde el camino principal hasta el tope del<br />

terraplen de la trituradora, a fin de cortar ambos deslizamientos y determinar si corresponden a un<br />

mismo fenómeno o si son fenómenos independientes.


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

Pág. 19<br />

Los deslizamientos observados han sido fruto de las fuertes lluvias caídas recientemente sobre toda<br />

la zona, las que han saturado <strong>los</strong> sue<strong>los</strong> y <strong>los</strong> terraplenes y consecuentemente han aumentado su<br />

peso, han aumentado la presión de poros y han reducido su resistencia al esfuerzo cortante, todo lo<br />

cual se ha traducido en fallas de arco, con desplazamiento vertical relativo orientado hacia la cara<br />

libre del talud.<br />

La ausencia de subdrenes en el interior del terraplén y en el pie del talud, así como la baja<br />

conductividad hidráulica del material mixto utilizado para la construcción del terraplén fueron factores<br />

que contribuyeron al incremento de la presión de poros por saturación del material y a la<br />

subsecuente falla.<br />

Los resultados de la exploración geofísica indicaron que la falla de suelo que afecta todo el muro sur<br />

de la trituradora, está mucho más desarrollada en el extremo oeste del talud, es decir, en el área sur<br />

de la trituradora, que en el lado este, ya que toda una extensa franja de suelo débil, con bajas<br />

velocidades de propagación de las ondas sísmicas de compresión, ha sido registrada al sur de la<br />

trituradora.<br />

El área al sur de la refinería exhibe un importante deslizamiento, el cual es muy antiguo,<br />

apreciándose en las imágenes tomográficas que este deslizamiento no afecta el área de<br />

emplazamiento de dicha refinería, donde el suelo todavía es estable.<br />

De ahí que se pudo establecer que se trata de dos deslizamientos completamente distintos,<br />

separados por franjas estables, lo que facilita el tratamiento de estabilización, ya que ambos<br />

deslizamientos deben ser tratados por separado.<br />

En este caso el método geofísico de Refracción Sísmica permitió caracterizar la extensión longitudinal<br />

y vertical de cada uno de <strong>los</strong> deslizamientos producidos por las fuertes lluvias.


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CASO III<br />

DERRUMBES EN LA CARRETERA LUPERON. RUTA SANTIAGO-PUERTO PLATA<br />

Pág. 20<br />

Las fuertes lluvias caídas sobre gran parte del territorio nacional en <strong>los</strong> meses de diciembre 2004 y<br />

enero 2005 provocaron fuertes derrumbes en la carretera Luperón, la cual es la antigua ruta de<br />

comunicación entre las ciudades de santiago y Puerto Plata.<br />

Los principales derrumbes se concentraron en la comunidad de Palo Quemado, a unos 8 kilómetros al<br />

norte de Santiago, derrumbes que implicaron el colapso de múltiples viviendas humildes que estaban<br />

emplazadas en la ladera derrumbada.<br />

Para resolver la situación, el Ministerio de Obras Públicas anunció la colocación de muros de gaviones<br />

en las zonas derrumbadas, lo cual fue objetado por nosotros, por entender que la colocación de<br />

gaviones no resuelve <strong>los</strong> problemas de inestabilidad de una ladera que desliza por efectos de fuertes<br />

lluvias, sobre todo si todo el subsuelo está constituido por materiales arcil<strong>los</strong>os susceptibles de rápida<br />

erosión por efecto de las escorrentías superficiales.<br />

La prensa nacional destacó nuestras objeciones y la opción de <strong>los</strong> gaviones fue desestimada.<br />

DICE COLOCACION GAVIONES NO IMPEDIRÁ DERRUMBES.<br />

La colocación de “gaviones” para intentar contrarrestar <strong>los</strong> derrumbes en la carretera de Puerto Plata<br />

no resolverá el problema por mucho tiempo, afirmaron hoy <strong>los</strong> ingenieros Rafael Osiris de León y<br />

Rafael Corominas Pepín.<br />

(Gavión es definido como “Cestón relleno de tierra o piedra que se usa en las obras de defensa y en<br />

las construcciones hidráulicas”).


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

Pág. 21<br />

De León, ingeniero geológico y miembro de la Academia de Ciencias de la República Dominicana, y<br />

Corominas Pepín ingeniero civil, coincidieron en que el problema en esa zona es la elevada<br />

pluviometría, el terreno compuesto de rocas y sedimentos arcil<strong>los</strong>os de pobre calida, así como la<br />

ausencia de un drenaje que reduzca la presión de poros en la arcilla.<br />

En una carta al ingeniero Freddy Pérez, secretario de Obras Públicas, copias de la cual suministro a<br />

este diario, De León explicó que estudios geológicos realizados en la zona indican que el área está<br />

constituida por una secuencia sedimentaria calcárea, donde predominan las lomitas calcáreas, las<br />

margas arcil<strong>los</strong>as y algunos interestratos de calizas y conglomerados.<br />

Afirmó que saturados de lluvias, esos materiales provocan el incremento de la presión de poros en el<br />

subsuelo.<br />

“Y como el agua no puede salir con facilidad, producto de la impermeabilidad de <strong>los</strong> horizontes<br />

arcil<strong>los</strong>os, se genera un empuje hidrostático lateral hacia <strong>los</strong> bordes de la carretera y hacia <strong>los</strong><br />

escapers que actúan como caras libres, ocasionando derrumbes, debido a la drástica disminución de<br />

la resistencia al esfuerzo cortante en <strong>los</strong> horizontes arcil<strong>los</strong>os”, explica el geólogo.<br />

Ante tal situación, el geólogo recomienda que no se construyan gaviones sino trincheras tranversales<br />

y rellenarlas de materiales granulares gruesos, para que actúen como drenaje que eviten el<br />

incremento de la presión de poros, “así como retaludar y terraplenar <strong>los</strong> tramos viales afectados,<br />

porque a nuestro entender <strong>los</strong> gaviones no constituyen una solución adecuada para este tipo de<br />

problema, porque las lluvias continúan, <strong>los</strong> derrumbes también continuaran y <strong>los</strong> gaviones también<br />

colapsarán, como usualmente ocurre en la carretera de Constanza”.


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

Pág. 22<br />

Dijo que una solución similar se empleó en 1996 durante la construcción de un tramo de la<br />

autopista Duarte, próximo a la Loma de Miranda, donde <strong>los</strong> derrumbes impedían el trabajo.<br />

Ese problema fue corregido tras un estudio geológico y geofísico, con una simple colocación de<br />

subdrenes granulares, transversales al flujo de agua y jamás de ha producido deslizamiento.<br />

Corominas Pepín<br />

El ingeniero Corominas Pepín, coincidió en una conversación telefónica con De León, en el sentido de<br />

que la zona está compuesta por un material no consolidado, por lo que el corte de la carretera lo que<br />

hizo fue desestabilizar <strong>los</strong> “taludes”, tanto del lado de arriba, como hacia abajo.<br />

Agregó que si a eso se suma algún temblor de tierra, por pequeño que sea, provoca deslizamientos.<br />

Sostuvo que normalmente Obras Públicas lo ha manejado haciendo muros de gaviones, pero dijo que<br />

estos también son apoyados sobre la falda del corte, por lo que también se hacen inestables.<br />

Dijo que ese un problema que se suma a la falta de mantenimiento de la vía y consideró que la<br />

situación fuera menos grave si se mantuviera limpia la cuneta y si las autoridades estuvieran atentas<br />

a cualquier inicio de derrumbe.<br />

Dijo que otro problema es permitir a la gente construir viviendas en esa ladera inestable.<br />

“Toda la ladera, tanto del lado arriba de la carretera, como del lado abajo, está repleta de viviendas<br />

de campesinos, por supuesto están expuestas a ser arrastradas por un alud”, expresó.<br />

“De manera, que lo que está pasando simplemente, a mi juicio, es que sobre una superficie<br />

inestable, con<br />

una<br />

temporada<br />

lluviosa muy<br />

intensa y<br />

alguna que<br />

otra sacudida<br />

de tipo<br />

sísmico en<br />

algún punto<br />

del país, se<br />

producen <strong>los</strong><br />

mecanismos<br />

que hacen<br />

que se dispare<br />

el fenómeno<br />

de <strong>los</strong><br />

deslizamientos<br />

de grandes<br />

masa de<br />

tierra” agregó.


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

CASO IV<br />

EL COLAPSO DE UN CINE EN LA CIUDAD DE SANTIAGO DE LOS CABALLEROS.<br />

Pág. 23<br />

Luego de varios días de lluvias, el viernes 27 de abril del año 2001, un edificio en construcción,<br />

localizado próximo a la esquina formada por las avenidas Juan Pablo Duarte y Salvador Estrella<br />

Sahadalá, de la ciudad de Santiago de <strong>los</strong> Caballeros, colapsó en horas de la noche, provocando la<br />

muerte de seis personas que se encontraban en su interior y la consecuente preocupación de gran<br />

parte de <strong>los</strong> ciudadanos.<br />

El edificio alojaría seis salas de cine y se levantaba en un solar de 90 metros de largo en dirección<br />

norte-sur y 33 metros de ancho en dirección este-oeste, próximo a las coordenadas<br />

0322935mE/2152250mN (UTM).<br />

La porción norte del edificio colapsó<br />

por completo, mientras que una<br />

reducida porción del lado sur quedó<br />

de pie, aunque fue posteriormente<br />

demolida cuando las autoridades<br />

procedieron a remover todos <strong>los</strong><br />

escombros, dejando sólo restos de<br />

algunos muros laterales y restos de<br />

las varillas de las zapatas.<br />

Una inspección técnica del lugar<br />

pone de manifiesto que todo el<br />

suelo del área de construcción está<br />

integrado por arcilla orgánica gris y<br />

arcilla calcárea amarillenta, aunque<br />

se aprecian escombros que pudieran<br />

ser de la construcción, o ser<br />

anteriores a ella, ya que el extremo<br />

noreste del área muestra un corte de aproximadamente 3 metros de altura, donde se observa un<br />

relleno irregular integrado por gravas, arenas, arcillas y restos de materiales de construcción, entre<br />

el<strong>los</strong> pedazos de bloques.<br />

Este relleno ha estado deslizándose desde hace mucho tiempo, lo que se confirma al observar<br />

múltiples sacos de polipropileno rellenos de arena, <strong>los</strong> cuales fueron utilizados para contener <strong>los</strong><br />

deslizamientos.<br />

La porción norte de un restaurante de comida rápida también exhibe deslizamientos de tierra, al<br />

extremo que parte de la <strong>los</strong>a que cubre el piso del patio norte está hoy en voladizo y podría colapsar<br />

debido a que el agua erosiona constantemente la base del suelo, cuya sección está integrada por un<br />

relleno superior de caliche, de aproximadamente un metro de espesor, un horizonte de arcilla<br />

orgánica color negro, de aproximadamente un metro de espesor y unos 50 centímetros de arcilla<br />

calcárea amarillenta.


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

Pág. 24<br />

En el nivel inferior del terreno localizado en la esquina noroeste del restaurante se observa la<br />

salida de abundante cantidad de agua, la cual corre en sentido norte producto de la pendiente del<br />

terreno, aunque una gran parte se acumula<br />

en el extremo noreste. Esta agua luce ser<br />

de origen subterráneo, debido a la cantidad<br />

y continuidad del flujo y debido a que en<br />

<strong>los</strong> extremos norte y noreste hay sendas<br />

rejillas oxidadas que cubren sendos<br />

colectores construidos allí hace mucho<br />

tiempo para drenar estas escorrentías.<br />

El agua subterránea que sale del terreno<br />

por el extremo noroeste del restaurante<br />

mantiene la arcilla completamente saturada<br />

y en estado muy blando, por lo menos en<br />

superficie, al extremo que las pisadas de las<br />

personas dejan una huella de<br />

aproximadamente 10 centímetros de<br />

profundidad y las pisadas de pequeños<br />

animales domésticos dejan huellas de hasta 2 centímetros de profundidad, lo que pudo se verificado<br />

in situ, confirmando que esta arcilla saturada es muy blanda en superficie.<br />

Los restos del hormigón utilizado en la construcción muestran un agregado ígneo básico, de color<br />

gris a negro, sub-redondeado, fresco y sano, de tamaño inferior a una pulgada, lo que indica que el<br />

agregado era de muy buena calidad. Estos restos de hormigón también muestran un alto nivel de<br />

cementación, lo que junto al agregado de muy buena calidad conforman un hormigón muy bueno.<br />

Por lo menos es lo que se aprecia en <strong>los</strong> restos que aún permanecen en el lugar. Del mismo modo <strong>los</strong><br />

restos de las zapatas muestran múltiples varillas de acero de 1 pulgada de diámetro y de buena<br />

calidad.<br />

De ahí que visto el tipo de suelo existente en el área norte del emplazamiento del edificio colapsado,<br />

suelo que está constituido por arcilla orgánica, arcilla calcárea y escombros; vista la continua salida<br />

de aguas subterráneas en el área norte del emplazamiento del edificio, la cual se acumula en <strong>los</strong><br />

extremos norte y noreste; vistas las condiciones de saturación extrema del suelo blando localizado<br />

en el área norte del emplazamiento del edificio; y visto que el colapso del edifico comenzó<br />

justamente en el área norte, que es precisamente el área integrada por suelo blando sobresaturado,<br />

se puede concluir, de manera preliminar, que el colapso del edifico que alojaría un cine, en la ciudad<br />

de Santiago de <strong>los</strong> Caballeros, tuvo su origen en una falla del suelo arcil<strong>los</strong>o sobresaturado, ya que<br />

las arcillas saturadas generalmente se convierten en masas deslizantes, especialmente en períodos<br />

lluviosos.<br />

Esta falla debió ser prevista, ya que la presencia de abundantes cantidades de aguas subterráneas en<br />

este solar es conocida desde hace muchos años, al extremo de que en las áreas norte y noreste del<br />

solar hay dos viejos drenajes que han sido utilizados durante muchos años para drenar estas aguas;<br />

además es ampliamente conocido, en el área de ingeniería de sue<strong>los</strong>, que <strong>los</strong> sue<strong>los</strong> arcil<strong>los</strong>os<br />

saturados requieren de soluciones especiales que eviten que la obra a ejecutarse se vea expuesta a<br />

una falla de suelo.


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

Pág. 25<br />

El colapso de la edificación pudo evitarse colocando subdrenes granulares direccionados que<br />

mantuvieran el agua fuera del contacto con las zapatas de apoyo y al mismo tiempo eliminando la<br />

arcilla orgánica blanda y el relleno suelto para sustituir<strong>los</strong> por material granular sano compactado, o<br />

colocando una <strong>los</strong>a o platea apoyada en pilares profundos o medianamente profundos, cuya<br />

profundidad sería definida en función de <strong>los</strong> necesarios ensayos de penetración estándar, <strong>los</strong> cuales<br />

no fueron ejecutados en el área colapsada, sino solamente en el área frontal de la edificación.<br />

La lección final que todos debemos sacar de esta lamentable tragedia es la de que <strong>los</strong> estudios de<br />

sue<strong>los</strong> no deben ser subestimados por <strong>los</strong> ingenieros, <strong>los</strong> contratistas, ni <strong>los</strong> promotores de<br />

proyectos, ni mucho menos por la Dirección de Edificaciones de la Secretaría de Estado de Obras<br />

Públicas y Comunicaciones, ya que tanto en Santiago como en Santo Domingo se están levantando<br />

múltiples edificaciones, incluyendo torres multipisos, sin <strong>los</strong> debidos estudios de sue<strong>los</strong>, estudios que<br />

deben estar apoyados en métodos geofísicos y sondeos mecánicos, pues la ingeniería de sue<strong>los</strong> de<br />

hoy día es muy diferente a la ingeniería de sue<strong>los</strong> de 25 años atrás, ya que en el concepto moderno,<br />

y así se hace en <strong>los</strong> países desarrollados, primero se zonifica el suelo mediante resistividad eléctrica,<br />

refracción sísmica e imágenes de radar y luego se sondea. De esa forma nos aseguramos que <strong>los</strong><br />

sondeos sean verdaderamente representativos de las reales condiciones del subsuelo. (Artículo<br />

publicado por R. Osiris de León en el periódico Hoy en fecha 27 de mayo de 2001).<br />

Vista del agua subterránea que sale al pie de un talud constituido por escombros y arcilla orgánica.


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

CASO V<br />

FALLAS EN EL MURO DE REVESTIMIENTO LATERAL DE UN PASO A DESNIVEL<br />

Pág. 26<br />

El 12 de noviembre de 1999, fruto de las intensas lluvias caídas durante varios días, el muro norte de<br />

revestimiento del paso a desnivel construido en la intersección de las avenidas 27 de Febrero y<br />

Máximo Gómez, cedió hacia el lado sur, lo que provocó pánico en toda la población y el cierre<br />

inmediato de la vía.<br />

Los desprendimientos de <strong>los</strong>as y el levantamiento del pavimento asfáltico en el paso a desnivel de la<br />

Av. 27 de Febrero con Máximo Gómez fueron el producto de la presión hidrostática generada en el<br />

subsuelo como consecuencia de las fuertes lluvias caídas la pasada semana, ya que la caliza coralina<br />

existente en el área, por su excesiva porosidad y presencia de pequeños fenómenos de disolución<br />

cárstica, actúa como una especie de drenaje vertical de las aguas, y si a esto se suma la presencia de<br />

pozos filtrantes emplazados en el área vecina, entonces el resultado es un incremento transitorio del<br />

nivel freático, lo que a su vez incrementa la presión de poros en el interior de la caliza, lo que se<br />

convierte en un empuje hidrostático hacia la cara libre, la que está revestida con un muro tipo New<br />

Jersey. Entonces es evidente que el muro cedió porque el agua que había penetrado al interior de la<br />

roca buscaba por donde salir, razón por la cual era imperativo aplicar de inmediato <strong>los</strong> correctivos de<br />

lugar, <strong>los</strong> que consistían en colocar subdrenes, inclinados por lo menos cinco grados hacia las dos<br />

caras libres de las excavaciones existentes en el paso a desnivel.<br />

Esos subdrenes consistieron en perforaciones subhorizontales, de por lo menos tres pulgadas de<br />

diámetro, y que alcanzaron varios metros de longitud dentro de la caliza coralina, lo que disminuía<br />

considerablemente la presión de poros en el interior de la roca y consecuentemente eliminaba la<br />

presión hidróstatica que se genera sobre el muro New Jersey.


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

Pág. 27<br />

Este problema revestía mayor peligro en las áreas de la 27 de Febrero constituidas por caliza<br />

fracturada, caliza margosa o suelo laterítico, ya que en esas áreas la presión de poros generaba,<br />

además de la presión hidrostática, un empuje de la masa rocosa hacia la cara libre, razón por la cual<br />

terminaba comportándose como un talud inestable que cede y colapsa. Este es el mismo principio<br />

hidrogeológico que produce deslizamientos en la loma de Miranda de la carretera Duarte, en la<br />

carretera de San José de Ocoa, en la loma Isabel de Torres, en la zona de Cazabito camino a<br />

Constanza y en otras carreteras de país.<br />

En este caso lo ideal hubiese sido que en la etapa inicial de la obra se desarrollaran estudios de<br />

refracción sísmica a fin de calcular <strong>los</strong> módu<strong>los</strong> elásticos en cada tramo a excavar, así como estudios<br />

de resistividad eléctrica para detectar posibles cavernas vecinas, depósitos arcil<strong>los</strong>os vecinos o zonas<br />

periféricas constituidas por roca de pobre calidad, pero en vista de que no se disponía de esa<br />

información, lo procedente era iniciar cuanto antes un programa de perforación de subdrenes a fin de<br />

evitar que <strong>los</strong> demás muros se vieran afectados en períodos de fuertes precipitaciones lluviosas, lo<br />

que además de afectar la obra afectaría el tránsito por la principal arteria vial de la ciudad Capital.<br />

En las áreas excavadas en roca de buena calidad el problema se reducía a un simple empuje<br />

hidrostático, pero donde la roca tiene un bajo módulo elástico el problema se complica<br />

extraordinariamente, requiriéndose además de <strong>los</strong> subdrenes un tratamiento adecuado de la roca<br />

vecina, el cual puede implicar inyecciones de cemento.<br />

Para la corrección del problema inicialmente se estuvieron colocando pernos de anclaje y<br />

apuntalamientos, pero <strong>los</strong> pernos de anclaje sólo son efectivos en las áreas constituidas por roca de<br />

buena calidad, ya que en las áreas donde la caliza es margosa, fracturada o tiene huecos rellenos de<br />

suelo laterítico esto no funciona adecuadamente. Además si no hay <strong>los</strong> subdrenes adecuados y en las<br />

cantidades adecuadas, en cualquier período de varios días de lluvias las paredes caerían con todo y<br />

pernos de anclaje.<br />

Este diagnóstico y sus recomendaciones fueron publicados por toda la prensa nacional el 17 y 18 de<br />

noviembre de 1999.


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

CASO VI<br />

GRANDES DERRUMBES EN LA LOMA ISABEL DE TORRES DE PUERTO PLATA.<br />

Pág. 28<br />

En <strong>los</strong> meses de mayo de 1993 y febrero de 1996 se produjeron grandes derrumbes de la cara norte<br />

de la loma Isabel de Torres, en la ciudad de Puerto Plata, <strong>los</strong> cuales fueron fruto de las fuertes lluvias<br />

caídas en cada caso.<br />

A raiz del primer derrumbe realizamos un estudio geológico de las condiciones de la zona deslizada,<br />

informe que fue reproducido por la prensa nacional (periódico Listín Diario) en fecha 21 de mayo de<br />

1993 y cuyo texto se transcribe a continuación:<br />

DICE LLUVIAS Y ROCAS PROVOCAN DERRUMBES<br />

Los grandes deslizamientos de rocas que desde hace más de una semana afectan una parte del<br />

frente norte de la loma Isabel de Torres, son causados por las fuertes lluvias que han estado cayendo<br />

sobre la zona, las cuales son colectadas por un sistema de canaletas y sumideros que las conducen a<br />

través de cavidades de disolución cárstica (cuevas), llegando hasta el frente norte donde la roca está<br />

sumamente fracturada y escarpada, lo que induce <strong>los</strong> deslizamientos por el aumento de la subpresión<br />

y el aumento de peso de la masa rocosa.


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

Pág. 29<br />

Así lo expresó el Ingeniero Geólogo Rafael Osiris de León, quien la pasada semana visitó el área de<br />

deslizamientos de la loma Isabel de Torres junto al Ingeniero Agroforestal Eleuterio Martínez y al<br />

Doctor Antonio Thomén, Director Ejecutivo de la Comisión Nacional para el Medio Ambiente. Tanto<br />

De León como Martínez, son<br />

miembros de esta Comisión<br />

Ambiental creada por<br />

Decreto Presidencial.<br />

El Ing. Osiris de León, dijo<br />

que inmediatamente al sur<br />

del tope del derrumbe hay<br />

una canaleta colectora de<br />

las aguas de lluvias,<br />

observándose que dicha<br />

canaleta no tiene salidas<br />

laterales para drenaje, sinó<br />

un cuenco en su porción<br />

central, lo que indica que<br />

fue diseñada y construida<br />

para que drenara hacia el<br />

interior de la roca fracturada<br />

en el lado escarpado del<br />

frente de la loma Isabel de<br />

Torres. Estas aguas<br />

aumentan la subpresión en<br />

el débil escarpe calizo y<br />

contribuyen a <strong>los</strong><br />

deslizamientos.<br />

De igual modo, en su<br />

reconocimiento geológico<br />

encontraron que a unos 40<br />

metros al sur del derrumbe<br />

hay una gran caverna de<br />

aproximadamente 10 pies de<br />

profundidad, producto de la<br />

disolución cárstica de la<br />

caliza estratificada del área; observándose que la caverna representa el punto central de una gran<br />

dolina o depresión cárstica de 20 a 30 metros de diámetro, la cual recoge gran parte de las aguas de<br />

lluvia y las conduce de inmediato al interior de la roca.<br />

La zona que ha estado expuesta a <strong>los</strong> derrumbes que allí ocurren desde hace una semana, la cual se<br />

sitúa aproximadamente a unos 150 metros hacia el lado oriental de la estación del teleférico, en el<br />

tope de la Loma Isabel de Torres, está constituida por una asociación de gruesos estratos de caliza<br />

arenosa amarillenta y finos interestratos de marga arcil<strong>los</strong>a amarillenta totalmente suelta. El espesor<br />

de <strong>los</strong> estratos calizos varía entre 15 y 50 centímetros, y su orientación es N 70° W con una<br />

inclinación de 10° a 15° hacia el suroeste, es decir, en sentido contrario a la cara del derrumbe.


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

Pág. 30<br />

En el tope del derrumbe se observa una franja que varía entre 10 y 15 metros de ancho, la cual ha<br />

sido fuertemente fracturada en bloques de tamaño mediano y donde actualmente hay grandes<br />

grietas abiertas en dirección este-oeste, por lo que esta franja ha sido considerada como una zona<br />

de gran inestabilidad y está expuesta a próximos deslizamientos.<br />

De León dijo que el problema no radica en <strong>los</strong> microsismos que ocurren en la zona como<br />

consecuencia de la subducción de la Placa del Atlántico por debajo de la Placa del Caribe, ni tampoco<br />

se debe a la deforestación ni al pastoreo, como han opinado algunos, sino que estamos frente a una<br />

caliza fracturada y cavernosa que define un escarpe casi vertical; y dado el hecho que hay<br />

interestrastos<br />

arcil<strong>los</strong>os, cuando<br />

el agua colectada<br />

por <strong>los</strong> sumideros<br />

del área (dolinas),<br />

que son unos diez<br />

en total y de gran<br />

diámetro, satura<br />

<strong>los</strong> poros de la<br />

arcilla, aumenta el<br />

peso de la masa<br />

rocosa, y como el<br />

escarpe es casi<br />

vertical se rompe<br />

el equilibrio del<br />

bloque y<br />

comienza a<br />

deslizar.<br />

Es evidente que quienes diseñaron <strong>los</strong> paseos y obras de embellecimiento del área tenían pleno<br />

conocimiento de que estas depresiones actuaban como sumideros de las aguas, por lo que las<br />

utilizaron como drenajes, revistiendo algunas con cemento al estilo de fuentes o piscinas y<br />

construyéndole rejillas laterales. Toda el agua colectada en estos sumideros es conducida de<br />

inmediato al interior de la masa rocosa, aumentando así la subpresión y el peso del macizo calcáreo,<br />

especialmente en períodos de fuertes lluvias.<br />

Dijo que el frente principal del derrumbe es casi vertical y de aproximadamente unos 70 metros de<br />

altura, observándose que la mitad inferior luce muy estable gracias a que descansa sobre una terraza<br />

pero que la mitad superior está totalmente inestable y podría deslizar parcialmente debido al gran<br />

fracturamiento, al talud vertical y a la presencia de agua en el interior de la roca, por lo que es<br />

importante buscar rápidas soluciones al problema. De ahí que en el informe de la Comisión Nacional<br />

para el Medio Ambiente se hicieron diez recomendaciones, entre las que se mencionan cortar en<br />

bancos parte de la porción superior del deslizamiento, colocar tendones en el tope y pernos en la<br />

base, drenar adecuadamente la roca, reorientar el sistema de recolección de las aguas que llegan a<br />

<strong>los</strong> sumideros (cavernas) y colocar trazadores isotópicos para definir con exactitud hacia que punto<br />

van las aguas recogidas por cada caverna en días de lluvias.


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

CASO VII<br />

GRANDES DAÑOS EN LOS PUENTES DEL PAIS<br />

Pág. 31<br />

Con cada período de intensas lluvias, sean éstas provocadas por huracanes, tormentas o vaguadas,<br />

muchos de <strong>los</strong> puentes dominicanos sufren daños considerables por socavación de las pilas de apoyo<br />

y por erosión de <strong>los</strong> aproches, lo que nos lleva a la reparación o reconstrucción permanente de<br />

nuestros puentes.<br />

Arriba puente sobre el río Chavón, destruido por las lluvias de la tormenta Jeanne en septiembre<br />

2004. Abajo (Izq.) puente el Palmar sobre el río Yaque del Sur destruido por le huracán Georges en<br />

sept. 1998 y a la derecha puente sobre el río Acapulco en la autopista Duarte erosionado por las<br />

lluvias de mayo de 2005. Decenas de puentes han sido afectados por lluvias en todo el país.


<strong>Sue<strong>los</strong></strong> y <strong>Rocas</strong><br />

<strong>Susceptibles</strong> a <strong>los</strong> <strong>Fenómenos</strong> <strong>Hidrometeorológicos</strong><br />

REFERENCIAS.<br />

Luis I. González de Vallejo; 2004: Ingeniería Geológica. Madrid, España.<br />

Pág. 32<br />

Periódico El Nacional. 17 noviembre, 1999: Ingeniero Explica Causas Muro Cediera. Santo<br />

Domingo, Rep. Dominicana.<br />

Periódico El Nacional. 13 enero, 2005: Dice Colocación de Gaviones no Impedirá Derrumbes.<br />

Santo Domingo, Rep. Dominicana.<br />

Periódico Hoy. 27 de mayo de 2001: El Colapso de un Cine. Artículo publicado por R. Osiris de<br />

León.<br />

Periódico Hoy. 28 de mayo 2005: Osiris de León Examina las Causas de las Tragedias<br />

Naturales. Santo Domingo, Rep. Dominicana.<br />

Periódico Hoy. 06 de junio 2005: Geólogo Osiris de León dice Falta Rigor Construcción<br />

Puentes. Santo Domingo, Rep. Dominicana.<br />

Periódico Listín Diario. 21 de mayo 1993: Osiris de León Dice Lluvias y <strong>Rocas</strong> Producen<br />

Derrumbes. Santo Domingo, Rep. Dominicana.<br />

Rafael Osiris de León. Agosto 1996: Estudio Geológico y Corrección Deslizamientos Taludes<br />

Loma de Miranda. Santo Domingo, Rep. Dominicana.<br />

Rafael Osiris de León. Marzo 2005: Estudio Refracción Sísmica Taludes Deslizados en la Mina<br />

de Oro de la Rosario Dominicana, S.A. Santo Domingo, Rep. Dominicana.

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