23.04.2013 Views

Biografías y Evocaciones - Banco de Reservas

Biografías y Evocaciones - Banco de Reservas

Biografías y Evocaciones - Banco de Reservas

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

COLECCIÓN PENSAMIENTO DOMINICANO | Vo l u m e n III | BIOGRAFÍAS Y EVOCACIONES<br />

Recién llegado a mi domicilio, Trujillo envió al Dr. Robiou para invitarme a volver a mis<br />

faenas en la Facultad. Le expuse algún pretexto para excusarme <strong>de</strong> no aceptar esa propuesta.<br />

Dos horas <strong>de</strong>spués volvió Robiou, acompañado <strong>de</strong> mi querido maestro el Dr. Salvador<br />

Gautier, quien me aconsejó aceptar lo que Trujillo me proponía. Al sentir que ambos visitantes<br />

estaban preocupados, acepté volver a la Universidad. El mismo Trujillo me solicitó<br />

para rendirle un servicio <strong>de</strong> mi profesión. Lo complací i durante esa audiencia recordamos<br />

el buen éxito que alcancé cuando asistí a la Sra. x, atacada <strong>de</strong> paludismo pernicioso. Des<strong>de</strong><br />

el día <strong>de</strong> esa reconciliación, volví a ser consultante ocasional <strong>de</strong> sus achaques i <strong>de</strong> los <strong>de</strong><br />

algunos <strong>de</strong> sus familiares.<br />

Mi clientela i mis haberes resucitaron i continuaron aumentando.<br />

Cuando en septiembre <strong>de</strong> 1930 un fuerte ciclón hizo estragos en nuestra capital, prodigué<br />

servicios i dinero a infinidad <strong>de</strong> heridos, <strong>de</strong> infectados por disentería i establecí, a mano<br />

militar, la vacunación antitetánica a todos los acci<strong>de</strong>ntados.<br />

A<strong>de</strong>más, en varias casas <strong>de</strong> concreto <strong>de</strong> mi propiedad, di alojamiento gratuito a más<br />

<strong>de</strong> trescientas personas que arruinadas por el huracán, huyeron <strong>de</strong> sus domicilios. En esos<br />

días mi intensa labor, <strong>de</strong> día i <strong>de</strong> noche, agotaban mis fuerzas, tanto más cuanto que sufría<br />

al ver a mi hija mayor, Carmelita, inmóvil a causa <strong>de</strong> una fractura ocurrida en la noche <strong>de</strong>l<br />

ciclón. Nunca había yo soportado tantas ineludibles calamida<strong>de</strong>s.<br />

Después comencé a gozar, con nuevos progresos en mi capacidad profesional. Mis<br />

cátedras en la Facultad <strong>de</strong> Medicina eran concurridas con el mayor interés <strong>de</strong> los mejores<br />

estudiantes. Me empeñaba en ilustrarlos con proyecciones fotográficas elaboradas por mí.<br />

Les indicaba hacer estadísticas <strong>de</strong> casos <strong>de</strong> paludismo, <strong>de</strong> filariosis i <strong>de</strong> otras enfermeda<strong>de</strong>s<br />

que abundan en nuestro país. Tanto ellos, como yo mismo, disfrutábamos placer en esas<br />

labores i en otras prácticas necesarias para aumentar sus conocimientos.<br />

XVII. Liga Dominicana contra el Cáncer<br />

En el año 1924, mi querido amigo i antiguo condiscípulo, Esteban Buñols, nos trajo<br />

<strong>de</strong> La Habana una magnífica i<strong>de</strong>a: establecer aquí una Liga contra tumores malignos.<br />

De ahí nació nuestra “Liga Dominicana contra el Cáncer, Inc.” Junto con varios médicos,<br />

muchos <strong>de</strong> ellos ex-discípulos míos, se fundó dicha Institución. Des<strong>de</strong> entonces,<br />

gratuitamente, trabajé en ella, asistiendo a cancerosos i leucémicos, pronunciando<br />

conferencias, haciendo viajes al extranjero para ponerme al día en la especialidad que<br />

adopté <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el año 1923, antes <strong>de</strong> presentar mi tesis en París sobre Un caso <strong>de</strong> cáncer<br />

pulmonar. También, durante mis funciones en nuestra Liga, publiqué i continúo publicando<br />

varios artículos al respecto <strong>de</strong> nuestra prensa diaria i en revistas científicas <strong>de</strong>l exterior.<br />

Con el mismo fin personalmente he extendido hasta las provincias mi propaganda verbal<br />

contra esa dolencia. No he <strong>de</strong>jado <strong>de</strong> representar a nuestra Liga en Congresos celebrados<br />

en el extranjero, en los cuales he leído ponencias i he intervenido en discusiones acerca <strong>de</strong><br />

Cancerolojía. Des<strong>de</strong> que se fundó nuestra Liga, contribuyo a su sostenimiento pecuniario.<br />

Ya he invertido <strong>de</strong>cenas <strong>de</strong> miles <strong>de</strong> pesos, a título gratuito, para construir el edificio que<br />

ocupa el actual Instituto <strong>de</strong> Oncolojía i proveerlo <strong>de</strong> diversos instrumentos indispensables<br />

para su funcionamiento. Tal es mi <strong>de</strong>dicación gratuita a ese respecto que, también<br />

con mi propio peculio he construido un apartamiento anexo a ese Instituto para vivir<br />

en él i así po<strong>de</strong>r ejercer, con mayor eficiencia, mis <strong>de</strong>beres como Presi<strong>de</strong>nte <strong>de</strong> la Liga i<br />

90

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!