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de los arriba mencionados se atrapan atunes, grandes macarelas
y esmedregales o cobias, incluyendo algún jurel o bonito.
Cuando se pesca en alta mar y se utiliza carnada natural
muerta, es aconsejable, dependiendo de la especie marina que
se desee atrapar, procurar que no obstante la carnada esté muer-
ta, sea una carnada fresca, con lo que se conseguirá que no
exista un olor que pueda ser desagradable para la presa. Al pren-
der este tipo de carnada en el anzuelo correspondiente deberá
hacerse con el cuidado y la finalidad de conseguir que al ser
arrastrada mediante el sistema de troleo (del inglés "trolling")
adquiera una movilidad casi natural y poder así engañar a la
especie que deseamos atrapar. En páginas anteriores se ilustraron
ya, las diversas formas en que este tipo de carnada puede ser
ensartada en el anzuelo, a fin de obtener una mayor eficiencia.
CARNADA NATURAL VIVA
Debido a que existe una gran variedad de carnadas vivas,
este punto principia con las que corresponden a la pesca en el
mar. Para conseguir un buen resultado, este tipo de carnadas,
al contrario de las anteriores, deberán estar vivas y conservadas
en un recipiente adecuado para que no pierdan su vitalidad.
Las sardinas y anchovetas constituyen la principal carnada
viva para muchas de las variedades de peces que pueden atra-
parse en altamar, claro está que, en caso de no conseguir este
tipo de carnada, puede sustituirse por el mújol o lisa en el
tamaño adecuado. El largo de este tipo de carnada no deberá
exceder de los 15 cm., y pueden atraparse con el sistema de
atarraya o asparavel en las orillas de las playas. La única difi-
cultad de conservar vivos a estos animalitos es que, al tenerlos
en una cubeta o recipiente adecuado, consumen rápidamente el
oxígeno contenido en el agua, por lo que deberá cambiarse ésta
con bastante frecuencia a fin de mantener la vitalidad y energía
de los peces. También puede lograrse agitando el agua o bien
introduciendo un tubo o popote y soplando a través del mismo
burbujas de aire en su interior. Hay algunos envases que están
diseñados para poder ser sumergidos en el agua sin que la car-
nada pueda escaparse, recibiendo así la renovación de su agua
en el interior.
Cuando se utilizan crustáceos, es decir, cangrejos, camaro-
nes, langostinos, etc.,, si se mantienen secos y fríos pueden per-
manecer vivos por mucho tiempo.
En la pesca de agua dulce, en el renglón de carnada natural
muerta, se hablaba de la utilización de insectos, larvas y lombri-