18.04.2013 Views

Esclavos del franquismo en el Pirineo - Esclavitud bajo el franquismo

Esclavos del franquismo en el Pirineo - Esclavitud bajo el franquismo

Esclavos del franquismo en el Pirineo - Esclavitud bajo el franquismo

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

nio Sebastián; Jose Luis Múgica; Campanejos; y Félix Liñero.<br />

Los niños no los conocía, pero fue <strong>el</strong> apoyo que me sirvió para<br />

pasar las bolsas de comida que se aprecian <strong>en</strong> <strong>el</strong> su<strong>el</strong>o. Ésta<br />

fue la primera m<strong>en</strong>tira para conseguir pasar al campo, dici<strong>en</strong>do<br />

que allí t<strong>en</strong>ían a su papá y querían darle un beso, cosa que<br />

allí no eran ninguno de sus papás. El oficial que figura <strong>en</strong> la<br />

segunda foto me dejó pasar con los niños, y cuando yo estaba<br />

sacando la primera foto lo pasé muy mal, él estaba mirando<br />

cómo hacía yo la foto y <strong>en</strong>tonces le dije, “mi oficial, ¿quiere<br />

usted salir también <strong>en</strong> la foto?”, y <strong>en</strong>tonces accedió, y aquí le<br />

vemos, <strong>en</strong> la segunda foto. Eran todos de Barakaldo, m<strong>en</strong>os <strong>el</strong><br />

oficial».<br />

Marce sorteó así las primeras dificultades para ver a su novio,<br />

y cuando éste fue trasladado al valle <strong>d<strong>el</strong></strong> Roncal empezó a<br />

planear un segundo viaje, <strong>en</strong> <strong>el</strong> que quería ir acompañada de<br />

otras mujeres de Barakaldo: « Yo me propuse ir a verlos, mi viaje<br />

fue un dolor. ¡Yo organicé un revu<strong>el</strong>o! ¡de verdad! me hubiese<br />

gustado no haber ido sola, pero por represalias todos se<br />

negaban». De todos modos, empezó a recoger dinero y comida<br />

para mandarles a los prisioneros: «V<strong>en</strong>ía alguna y decía, ¿ya<br />

me llevarás <strong>el</strong> paquete? Unas te daban 1’50, otras no te daban<br />

nada, las que no t<strong>en</strong>ían tuve que ponerlo yo (...). Las madres<br />

hacían un paquetito con una tortilla, con lo que t<strong>en</strong>ían; esos paquetes<br />

los forraban bi<strong>en</strong> con una t<strong>el</strong>a, los cosían y te los daban<br />

para Fulano de tal, porque ya me ponían <strong>el</strong> nombre. Al llegar<br />

abrieron todo para todos, a muchos les hizo daño la comida,<br />

porque se atragantaron». Era una alegría ir, pero ti<strong>en</strong>e todavía<br />

la tristeza de haber hecho aqu<strong>el</strong> viaje sola: «¡Tuve coraje, pero<br />

tuve un fracaso grande con la g<strong>en</strong>te!, yo p<strong>en</strong>saba haber v<strong>en</strong>ido<br />

<strong>en</strong> compañía de algunas madres, porque para mí era muy importante,<br />

hacíamos fuerza, te quedabas <strong>en</strong> un sitio, te apoyabas<br />

una a la otra, si te pasaba algo con dos sacos de comida... Y<br />

luego verte sola, sin conocer a nadie, con un frío espantoso, no<br />

conoces a nadie, te plantas aquí, <strong>en</strong>tre armas, ¡José cuántas veces<br />

p<strong>en</strong>só que me habían matao! Pero, ¡también él quería verme,<br />

porque no veía a su familia!».<br />

Entre Barakaldo y <strong>el</strong> Roncal hay casi unos tresci<strong>en</strong>tos kilómetros<br />

y eso significaba, con los medios de <strong>en</strong>tonces, un largo<br />

viaje de tres días llevando dos sacos de comida junto con su<br />

apreciada máquina de fotos. El primer día tuvo que hacer noche<br />

<strong>en</strong> Vitoria y <strong>el</strong> segundo <strong>en</strong> Burgui: «<strong>en</strong> Burgui me dijo <strong>el</strong><br />

chofer que t<strong>en</strong>ía que apearme, y p<strong>en</strong>sé: ¿qué hago con dos sacos<br />

de paquetes de bocadillos aquí? De pronto se me acerca<br />

348

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!