18.04.2013 Views

Esclavos del franquismo en el Pirineo - Esclavitud bajo el franquismo

Esclavos del franquismo en el Pirineo - Esclavitud bajo el franquismo

Esclavos del franquismo en el Pirineo - Esclavitud bajo el franquismo

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

tado él, que están haci<strong>en</strong>do la carretera justam<strong>en</strong>te de Roncal a<br />

Vidángoz. En una de esas tardes <strong>en</strong> las que ve g<strong>en</strong>te a la orilla<br />

<strong>d<strong>el</strong></strong> río, algui<strong>en</strong> le reconoce, y le llama por su nombre “¡Áng<strong>el</strong>!”.<br />

Era un prisionero de los que habían coincidido <strong>en</strong> Irurita y le<br />

habían trasladado aquí. Entonces se pon<strong>en</strong> de acuerdo y decid<strong>en</strong><br />

que le van a dar dinero a mi padre y que él se <strong>en</strong>cargue de<br />

llevarle algo de comida. Sobre todo pan, más que nada pan. Mi<br />

padre t<strong>en</strong>ía <strong>en</strong> Garde una familia, que eran los Mainz, de los<br />

cuales eran Julia Begino y Juan Ramón Mainz; él estaba aún <strong>en</strong><br />

Francia, eran también republicanos, y esta mujer t<strong>en</strong>ía una<br />

ti<strong>en</strong>da que le fue confiscada durante la guerra pero ya le había<br />

sido devu<strong>el</strong>ta. Esta mujer de la ti<strong>en</strong>da le sacaba algunas latas<br />

de conserva, a precio de costo, y mi padre hablaba con <strong>el</strong> panadero,<br />

y <strong>el</strong> panadero <strong>bajo</strong> manga, porque también estaban controladas<br />

todo este tipo de cosas, le iba haci<strong>en</strong>do unos panes, y<br />

después de subir de trabajar, a la noche cargaba la comida, bajaba<br />

al cruce de Garde, y junto al cruce, <strong>en</strong> una alcantarilla que<br />

ya habían decidido, les dejaba la comida».<br />

En Vidángoz, por otro lado, la solidaridad de la población<br />

fue fundam<strong>en</strong>tal para la última c<strong>en</strong>a <strong>en</strong> <strong>el</strong> pueblo de un grupo<br />

de 29 prisioneros, todos <strong>el</strong>los <strong>en</strong>fermos o lesionados, que no<br />

partieron con <strong>el</strong> resto <strong>d<strong>el</strong></strong> batallón hacia Igal y Lumbier. Juan<br />

Arantzam<strong>en</strong>di, prisionero con destino <strong>en</strong> la oficina, fue <strong>el</strong> <strong>en</strong>cargado<br />

de organizar la situación y nos lo explica así: «Ta Iruñera<br />

joan z<strong>en</strong> batailoia, ta ofizialak esan zidan: “Juanito, tú<br />

conoces aquí a medio pueblo, te voy a dejar con todos los que<br />

están ahí impedidos y <strong>en</strong>fermos, y mañana te mandaremos un<br />

camión, para que los metas allí y los traigas a Lumbier, para<br />

de ahí ir a Pamplona. No te dejo nada, vamos a llevar todos<br />

los trastos, así que no hay comida, no hay c<strong>en</strong>a, ni nada. Te las<br />

arreglas <strong>en</strong> <strong>el</strong> pueblo”, y fuí de casa <strong>en</strong> casa, “mira, me he quedao<br />

con treinta o cuar<strong>en</strong>ta, y no t<strong>en</strong>emos comida. Si nos da<br />

algo, para que c<strong>en</strong><strong>en</strong> esta noche, que estamos <strong>en</strong> la cuadra<br />

esta”, y pan, leche, chorizo, queso, zatika, zatika, zatika, y<br />

“!Nunca hemos c<strong>en</strong>ao mejor!, ta hurr<strong>en</strong>go goizean, hartu ta<br />

Iruñera! ta hango, casa Zokokoak eta, negarrez».*<br />

*. «El batallón fue hacia Pamplona, y un oficial me dijo: “Juanito, tú conoces aquí a medio<br />

pueblo, te voy a dejar con todos los que están ahí impedidos y <strong>en</strong>fermos, y mañana te mandaremos<br />

un camión, para que los metas allí y los traigas a Lumbier, para de ahí ir a Pamplona. No te<br />

dejo nada, vamos a llevar todos los trastos, así que no hay comida, no hay c<strong>en</strong>a, ni nada. Te las arreglas<br />

<strong>en</strong> <strong>el</strong> pueblo”, y fuí de casa <strong>en</strong> casa, “mira, me he quedao con treinta o cuar<strong>en</strong>ta, y no t<strong>en</strong>emos<br />

comida. Si nos da algo, para que c<strong>en</strong><strong>en</strong> esta noche, que estamos <strong>en</strong> la cuadra esta”, y pan, leche,<br />

chorizo, queso, <strong>en</strong> cada casa un poco, y “!Nunca hemos c<strong>en</strong>ao mejor!, y a la mañana sigui<strong>en</strong>te, nos<br />

cogieron y a Pamplona, y las chicas de casa Zoko, ahí estaban, llorando al despedirnos».<br />

303

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!