18.04.2013 Views

Esclavos del franquismo en el Pirineo - Esclavitud bajo el franquismo

Esclavos del franquismo en el Pirineo - Esclavitud bajo el franquismo

Esclavos del franquismo en el Pirineo - Esclavitud bajo el franquismo

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

d<strong>en</strong>tro de la compañía, ¿eh?, después de v<strong>en</strong>ir de trabajar se<br />

dedicaban a eso y <strong>en</strong>tre nosotros mismos v<strong>en</strong>dían algo, yo no<br />

porque ¡no t<strong>en</strong>ía perras y no lo hacía! Pero v<strong>en</strong>dían anillos y<br />

cositas así». Anteriorm<strong>en</strong>te, hemos com<strong>en</strong>tado que también<br />

algunos de los <strong>en</strong>cargados de la carpintería <strong>d<strong>el</strong></strong> batallón hicieron<br />

piezas para alguna familia de Vidángoz, como la de Casa<br />

Sanch<strong>en</strong>a. De esta manera, los prisioneros conseguían algo de<br />

dinero o alim<strong>en</strong>tos que contribuían a aliviar su situación. 282<br />

Estamos hablando de robos, intercambios y otros tra<strong>bajo</strong>s,<br />

pero también hubo personas que una y otra vez se esforzaron<br />

por ayudar a estos prisioneros de manera desinteresada, por<br />

motivos de solidaridad ideológica o simplem<strong>en</strong>te por compasión,<br />

comportami<strong>en</strong>tos éstos que son gratam<strong>en</strong>te recordados<br />

por los prisioneros. Domingo Martínez contesta que uno de los<br />

mejores mom<strong>en</strong>tos eran precisam<strong>en</strong>te ésos: «Cuando t<strong>en</strong>íamos<br />

un rato dabas (bajábamos los domingos al paseo un rato)<br />

con personas que eran bu<strong>en</strong>as, y se congogían de que... les daba<br />

lastima de cómo estábamos nosotros y te convidaban, y a lo<br />

mejor te daban algún regalillo de algo pa comer. Pero fuera de<br />

eso, al tra<strong>bajo</strong>, nada más». Francisco Alonso también ti<strong>en</strong>e<br />

bu<strong>en</strong>os recuerdos de la población de Vidángoz, <strong>en</strong> especial<br />

una mujer que se llamaba F<strong>el</strong>ipa: «había una mujer allí, ¡era<br />

más bu<strong>en</strong>a aqu<strong>el</strong>la mujer!, y aqu<strong>el</strong>la mujer nos hacía comer<br />

más cosas <strong>en</strong> casa, con todo <strong>el</strong> cariño <strong>d<strong>el</strong></strong> mundo, ¡más bu<strong>en</strong>a!».<br />

José María Dap<strong>en</strong>a, <strong>en</strong> la misma línea afirma con rotundidad:<br />

«La g<strong>en</strong>te era muy bu<strong>en</strong>a, ¡muy bu<strong>en</strong>a!». Ahora bi<strong>en</strong>,<br />

había ocasiones <strong>en</strong> que <strong>en</strong> las casas se podía ver la petición de<br />

ayuda como abuso, y <strong>en</strong>tonces surgían t<strong>en</strong>siones y agresiones,<br />

como nos r<strong>el</strong>ata Andresa Anin: «éstos se metían <strong>en</strong> las casas, y<br />

hubo uno que se metió <strong>en</strong> nuestra casa con <strong>el</strong> pretexto de los<br />

otros, (otros prisioneros con los que había muy bu<strong>en</strong> trato) y se<br />

nos aprovechó de la cocina, a mí me llevó dos libros que no me<br />

ha devu<strong>el</strong>to, se hizo dueño de un armario para sus cosas, y mi<br />

282. Hernández Holgado (2003) ha comprobado que este tipo de tra<strong>bajo</strong>s eran muy habituales<br />

<strong>en</strong> <strong>el</strong> caso de las mujeres presas, qui<strong>en</strong>es desde un primer mom<strong>en</strong>to int<strong>en</strong>taban conseguir<br />

algo de labor para hacer d<strong>en</strong>tro de la cárc<strong>el</strong> y poder v<strong>en</strong>derla posteriorm<strong>en</strong>te <strong>en</strong> <strong>el</strong> exterior.<br />

En su caso se puede ver que la confección de pr<strong>en</strong>das y otros tra<strong>bajo</strong>s textiles es fundam<strong>en</strong>tal<br />

no sólo para la superviv<strong>en</strong>cia de las presas sino también para la de sus familiares, de manera<br />

que se puede establecer una difer<strong>en</strong>cia clara <strong>en</strong> este aspecto <strong>en</strong>tre hombres y mujeres privadas<br />

de libertad, no sólo porque éstas t<strong>en</strong>ían m<strong>en</strong>os familiares para socorrerlas, ya que a m<strong>en</strong>udo<br />

sus maridos o padres estaban también det<strong>en</strong>idos o muertos, sino también porque ti<strong>en</strong><strong>en</strong><br />

una disposición y una posibilidad de obt<strong>en</strong>er dinero mediante su tra<strong>bajo</strong>, al marg<strong>en</strong> <strong>d<strong>el</strong></strong> sistema<br />

de red<strong>en</strong>ción de p<strong>en</strong>as. Con este tra<strong>bajo</strong>, y con las redes informales de comercialización,<br />

conseguían ciertos ingresos que a veces también se redistribuían d<strong>en</strong>tro de la cárc<strong>el</strong> o se <strong>en</strong>tregaban<br />

a su grupo político.<br />

299

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!