IN LAK´ECH Saludo Maya
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Desarrollaremos la inversión de cada uno de los principios de la lógica clásica: identidad, no contradicción y tercero excluido utilizando la formulación proposicional de Parménides: Lo que es, es; lo que no es, no es; y no se puede ser y no ser. El cuadro que sigue lo denominamos De inversión lógica porque cumple con la función de arribar a la lógica del doble a partir de los principios de la lógica clásica. Media entre ellos un giro, piedra de toque, que justifica la existencia del doble, de la que nos es menester dar cuenta en las explicaciones que le siguen. Los colores cumplen una función didáctica y se eligieron al azar para facilitar el seguimiento del silogismo, ya que guarda coherencia con el 74
cuadro derivado de éste que se verá más adelante en la tópica y como conclusión. IV.3.3.1. Resultados del Cuadro IV.3.3.1.1. Espacio (I y II). Otro lugar. Aquí la ley conmutativa no puede emplearse, ya que cada término está referido a distintas dimensiones. Eso permite que las dos primeras proposiciones que resultan del cuadro, se sostengan con sus contradicciones en el campo de la paradoja. La lógica clásica versaba únicamente sobre los entes, de ahí que también se la llamase objetiva. Para hacer posible el giro hacia lo que en apariencia es incoherente debemos dar participación a esa otra realidad a la que apeló Freud, la realidad psíquica. Los segundos términos de los dos primeros resultados (1 es 2 y 2 es 1) pertenecen a esta provincia, los dos primeros al de la realidad material. Por lo tanto, estas dos realidades distintas hacen posible que las mencionadas proposiciones no queden invalidadas por la ley conmutativa, es decir, que en este caso el orden de los factores altera el producto, es decir: 1 es 2 ≠ 2 es 1. Intentar igualar esta fórmula equivaldría a mezclar dos naturalezas distintas. Si no fuese así, de nada justificaría el tratamiento de cada columna por separado. Que la ley conmutativa sea inoperante hace visible justamente 75
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cuadro derivado de éste que se verá más adelante en la tópica y como<br />
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IV.3.3.1. Resultados del Cuadro<br />
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Aquí la ley conmutativa no puede emplearse, ya que cada término<br />
está referido a distintas dimensiones. Eso permite que las dos primeras<br />
proposiciones que resultan del cuadro, se sostengan con sus<br />
contradicciones en el campo de la paradoja. La lógica clásica versaba<br />
únicamente sobre los entes, de ahí que también se la llamase objetiva. Para<br />
hacer posible el giro hacia lo que en apariencia es incoherente debemos dar<br />
participación a esa otra realidad a la que apeló Freud, la realidad psíquica.<br />
Los segundos términos de los dos primeros resultados (1 es 2 y 2 es 1)<br />
pertenecen a esta provincia, los dos primeros al de la realidad material. Por<br />
lo tanto, estas dos realidades distintas hacen posible que las mencionadas<br />
proposiciones no queden invalidadas por la ley conmutativa, es decir, que en<br />
este caso el orden de los factores altera el producto, es decir: 1 es 2 ≠ 2 es<br />
1. Intentar igualar esta fórmula equivaldría a mezclar dos naturalezas<br />
distintas. Si no fuese así, de nada justificaría el tratamiento de cada columna<br />
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