IN LAK´ECH Saludo Maya

juicio, al punto de vernos en la necesidad de dudar de él, y decirnos: -No
existe. ¡Es solo una alucinación que se me aparece como evidente! El
filósofo nunca perimido que existe en nosotros podría dar crédito a
Descartes y entender que ya no los amigos, sino un genio maligno es el que
juega con nuestros sentidos en afán burlón. ¿O simplemente nos creemos
despiertos no siendo más que parte del imperio que el mundo onírico ejerce,
de momento, en nosotros como soñantes? Por último, se nos puede ocurrir
adjudicarlo al ingreso definitivo en el mundo fantástico donde cosas como
éstas son enteramente posibles junto a la existencia de vampiros, fantasmas
y dragones.
Según uno se vea pronunciado por las evidencias y sus
especulaciones hacia unas u otras conjeturas a fin de explicar el suceso, es
que se van a determinar distintas órbitas o áreas tópicas. Lo importante de la
escena paradigmática es que de esa inicial torre de Babel se desprenden los
distintos lenguajes que habremos de desplegar en torno al doble.
La escena paradigmática según se relató como supuesto puede
cobrar múltiples formas. Un ejemplo de ello es el arte que muestra, a través
de la inspiración del artista Dante Gabriel Rossetti, una posible fotografía
pictórica a esta escena paradigmática. En ella dos amantes se encuentran
consigo mismos en el crepúsculo del bosque en el extraño cuadro How they
meet themselves, pintura citada por Borges en un racconto que hizo sobre el
doble en El libro de los seres imaginarios (1998).
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