IN LAK´ECH Saludo Maya

Diario de Alina Reyes 12 de enero: “Así paso horas: de cuatro, de tres
y dos, más tarde palíndromos. Los fáciles, salta Lenín el atlas; amigo, no
gima; los más difíciles y hermosos, átale, demoníaco Caín, o me delata;
Anás usó tu auto, Susana.” 2 . ¿Somos o no somos? Es un palíndromo, su
escritura es una, sin embargo su lectura puede ser doble con idéntico
resultado, como mediada por un espejo, ya sea que se comience por diestra
o por siniestra.
¿Somos o no Somos? Es, además, una pregunta que puede
orientarse a la existencia del ser, o a la pluralidad. Pero sobre todo, nos
interesa formularla por la relación que puede existir entre ambos. Es una
pregunta que se presenta desde el momento que el doble se origina en la
paradoja, una superposición lógica imposible que intentaremos explicar en
esta tesis.
En el subtítulo El Ser y el doble la palabra Ser posee una carga por su
presencia en la historia de la filosofía una enorme carga teórica: El ser y el
tiempo de Heidegger (Sein und Zeit, 1927), y El ser y la nada de Sartre
(L’être et le néant, 1945). Para sortear ese peso no nos vale más que esta
acotación puesto que la otra opción sería renunciar al título perdiendo así la
intención que posee.
Ser es una palabra amplia, su ambigüedad y vaguedad obliga a definir
su multivocidad. Acá consideraremos Ser simplemente como la existencia de
algo. En este caso trataremos la entidad del doble, que equipararemos a su
2 Julio Cortázar, “Lejana” en Bestiario (1951).
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