JESUS y EL ESPIRITU

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Conclusión
Una mirada a través de la segunda generación
cristiana y observaciones finales
57. La perspectiva que se extingue.
La última correspondencia paulina
57.1. La tarea que nos propusimos en este estudio fue la de
investigar la experiencia religiosa de los primeros treinta años de
cristianismo, las experiencia religiosas que caracterizaron a la
primera generación de uno de los movimientos más importantes
de la historia del mundo. Extender nuestras investigaciones más
allá de esos años, adentrándonos en la segunda generación, sería
una empresa fascinante y no carente de importancia. Pero un
volumen ya extenso adquiriría proporciones que superarían con
mucho la paciencia de la mayoría de los lectores, y habría que
palear mucha paja para sacar un grano mucho más escaso. El
problema consiste en que si hemos de llegar a aceptar la experiencia
religiosa, tenemos que considerarla lo más plenamente posible
en el contexto de la situación viviente que le dio origen.
Sólo gracias al conocimiento que tenemos de la situación corintia
es como podemos adquirir un concepto bien definido de lo que
para Pablo era una comunidad carismática. Y el hecho es que con
respecto a la mayoría de los documentos del Nuevo Testamento
no tenemos precisamente este conocimiento en forma alguna concreta.
Así que el extender nuestro estudio a la segunda generación
cristiana e incluso más allá, nos exigiría un examen enormemente
cuidadoso de los evangelios sinópticos y de la correspondencia
no paulina. y aun después de examinar mucho las pruebas,