11.04.2013 Views

JESUS y EL ESPIRITU

JESUS y EL ESPIRITU

JESUS y EL ESPIRITU

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

174 Jesús y el Espíritu<br />

blo a ser «un testigo de la resurrección de Jesús» se justifica el<br />

mote «aborto», precisamente porque su conversión y vocación<br />

fue un nacimiento prematuro, no un nacimiento tardío. En vez<br />

de llegar a ser un cristiano por desarrollo normal, después del<br />

debido período de gestación, su llegada a la fe en Jesús fue<br />

inesperadamente prematura, cuando apenas estaba preparado para<br />

ella 25. La clave de la metáfora para nosotros y el motivo por<br />

el que Pablo la acepta fue porque sin su nacimiento prematuro<br />

su llegada a la fe habría sido demasiado tardía, incluso para las<br />

últimas manifestaciones de la resurrección 26. Si estamos en lo<br />

cierto, la implicación es evidente: las manifestaciones de la resurrección<br />

tuvieron lugar en un período limitado, cesando después<br />

de cierto tiempo, y sólo aquéllos que probaron una manifestación<br />

pueden justificar su derecho al apostolado. Pablo acepta<br />

esto y 10 afirma de sí mismo. El fue privilegiado con una manifestación<br />

de la resurrección y así puede ser considerado como un<br />

apóstol, sólo porque su nacimiento a la fe en Cristo fue forzosamente<br />

acelerado antes de que estuviera dispuesto. «Todos los<br />

apóstoles» habían visto ya a Jesús y habían sido enviados por<br />

él (l Ca 15, 7); sólo gracias a un nacimiento prematuro fue capaz<br />

Pablo de unirse al grupo apostólico antes de que definitivamente<br />

fuera imposible 27.<br />

Por supuesto, es completamente posible que Pablo esté usando<br />

la palabra casualmente y sin precisión, en cuyo caso no se<br />

entendería en ninguno de los sentidos 2), 3), anteriormente señalados.<br />

Pero si usó éktroma en su sentido propio, entonces se refuerza<br />

el punto de vista de que Pablo consideró su experiencia<br />

de Damasco como algo único y distintivo en medio del resto de<br />

S'iS experiencias. Debía de ser lo único, según él, que justificaba<br />

JU derecho a ser un apóstol de Jesús resucitado.<br />

25. Cf. H. LIETZMANN en H. LIETZMANN - W. G. KÜMM<strong>EL</strong>, Kor 78:<br />

« .. .la inmadurez del nacido en comparación con los otros hijos». Por<br />

eso, probablemente, la necesidad del tiempo pasado en «Arabia» (Ga 1,<br />

17): un período de puesta a punto (?), cosa sin paralelos entre los discípulos<br />

y apóstoles de primera hora, en cuanto nosotros sabemos.<br />

26. cr. C. K. BARRETT, 1 Cor 344.<br />

27. Así se interpretaba el encuentro con el resucitado y el discípulado<br />

por cuando Pablo escribió 1 Co. Es improbable que se pensara que<br />

las apariciones del resucitado habían terminado o que estuviera cerrado<br />

el círculo de los apóstoles cuando tuvo lugar la conversión de Pablo;<br />

de no ser así, jamás se hubiera aceptado su afirmación respecto de su<br />

persona. Contra U. WILCKENS, Ilrsprung 64 s. Véase, además, aquí p. 182<br />

Y cap. 5, notas 35. 36.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!