Etnias y árboles - Escuela de Historia
Etnias y árboles - Escuela de Historia
Etnias y árboles - Escuela de Historia
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
<strong>de</strong> conocimiento se integraba a un patrimonio <strong>de</strong> cultura inservible. Ningún resultado se publicitaba en órganos <strong>de</strong> gran difusión. No<br />
se abría causa alguna.<br />
La década <strong>de</strong> 1930 empieza a ser pródiga también en autorizaciones a los FF.CC. <strong>de</strong>l Estado para la extracción <strong>de</strong><br />
productos forestales <strong>de</strong>l Chaco; abrir picadas y utilizar libre <strong>de</strong> <strong>de</strong>rechos las ma<strong>de</strong>ras cortadas, etc. 660 La licencia al Ministerio <strong>de</strong><br />
Guerra para la extracción permanente <strong>de</strong> ma<strong>de</strong>ras fiscales en el Chaco fue más temprana. Para cualquier obra militar, cualquier<br />
necesidad particular <strong>de</strong> los oficiales, el Territorio <strong>de</strong>l Chaco se abría libremente. La mano <strong>de</strong> obra <strong>de</strong> los soldados por lo <strong>de</strong>más,<br />
resultaba gratuita. 661 Se puso a disposición <strong>de</strong>l ejército a un gran lote en Formosa. 662 A él se agregó en la década <strong>de</strong> 1930 unos cinco<br />
lotes más, o 50.000 has para el mismo fin. Los consi<strong>de</strong>randos afirmaban que las unida<strong>de</strong>s militares <strong>de</strong> zapadores pontoneros requerían<br />
simplemente ma<strong>de</strong>ras. 663<br />
La ley <strong>de</strong> tierras, con todas sus <strong>de</strong>bilida<strong>de</strong>s y por lo mismo incoherencias, trató <strong>de</strong> ir por <strong>de</strong>lante <strong>de</strong> la conciencia <strong>de</strong> las<br />
élites, don<strong>de</strong> el ambientalismo gozaba <strong>de</strong> la nulidad imaginativa que los intereses capitalistas absolutos le habían configurado.<br />
Después, todo el tumulto <strong>de</strong> <strong>de</strong>cretos y reglamentos forestales no hizo más que convertir a la ley en un plasma in<strong>de</strong>finible. La<br />
privatización <strong>de</strong>l bosque sin privatizar la tierra condujo a la sobreexplotación <strong>de</strong> los recursos forestales, al empobrecimiento y<br />
<strong>de</strong>gradación <strong>de</strong> los restos <strong>de</strong> las culturas aborígenes. Se parecía todo <strong>de</strong>masiado a la encomienda colonial. Entrega <strong>de</strong> indios (<strong>árboles</strong>)<br />
a los encomen<strong>de</strong>ros (patrones <strong>de</strong> obrajes) para su explotación, quedando la propiedad en cabeza <strong>de</strong>l Rey (Estado). Ten<strong>de</strong>ncia natural<br />
pues, a la explotación <strong>de</strong> la riqueza en el mínimo tiempo, con los menores costes, y la máxima imprevisión sobre el uso y futuro <strong>de</strong><br />
esas vidas (suelo). Reconversión <strong>de</strong> todo el ambiente en obraje, pero en la coyuntura <strong>de</strong>l retorno <strong>de</strong> la clase latifundista al escenario <strong>de</strong><br />
las <strong>de</strong>cisiones políticas, a su fusión económica e i<strong>de</strong>ológica con los imperios <strong>de</strong>l capitalismo industrial, y a una atmósfera moral <strong>de</strong>l<br />
bloque <strong>de</strong> po<strong>de</strong>r caracterizada en esos mismos años 30 como "infame". 664 El obraje fue la retraducción eco-organizacional <strong>de</strong> la<br />
encomienda. Su fantasma.<br />
35. LA FIESTA DEL MONTE SACRIFICADO<br />
En todo fenómeno <strong>de</strong> religiosidad popular es necesario <strong>de</strong>scubrir la autonomía <strong>de</strong>l pensamiento religioso. La función<br />
principal <strong>de</strong>l sacerdote no es la <strong>de</strong> enseñar sino la <strong>de</strong> ofrecer sacrificios. El sacrificio es el vínculo <strong>de</strong> contacto vital entre el pueblo y<br />
sus dioses. 665 Con el <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong> las superestructuras religiosas la expiación llegó a transformarse en un rito solemne y misterioso.<br />
Ello <strong>de</strong>semboca en la teoría <strong>de</strong>l sacrificio que llega a ser tanto o más importante que la teología misma. 666<br />
En <strong>de</strong>terminado momento, con el paso <strong>de</strong> las religiones primitivas a las formuladas teóricamente, se corrió el centro <strong>de</strong><br />
gravedad espiritual <strong>de</strong> las figuras antropomórficas al sagrado misterio <strong>de</strong> la inmolación, la renuncia y la ofrenda. El po<strong>de</strong>r <strong>de</strong>l<br />
sacrificio llegó a reemplazar a su objeto. El propio sacrificio se transformó en un objeto en sí, en realidad divina. 667 La expiación<br />
festiva <strong>de</strong> los promesantes <strong>de</strong> Mailín pasó a verda<strong>de</strong>ro objeto ritual. No sólo medio para alcanzar al Señor, sino que éste ni siquiera<br />
tiene existencia fuera <strong>de</strong> la fiesta. El Señor ro<strong>de</strong>a en cierta forma al sacrificio festivo. Ello logró <strong>de</strong>splazar a la estructura <strong>de</strong> la<br />
ritualidad oficial, lo que a su vez volvió más libre a los sujetos. Crearon en Mailín o en otros cultos santiaguinos, su propio ecotexto,<br />
con su campo peculiar <strong>de</strong> sacrificio. Pero si la libertad fuese total, per<strong>de</strong>rían sentido las instituciones. Por ello la Iglesia, para no<br />
abdicar <strong>de</strong> sus controles, se vuelve el factor legalizador <strong>de</strong>l sacrificio. La Iglesia hace constar que el sacrificio existió, se interpone<br />
entre la conciencia religiosa y el Señor y asume la libertad <strong>de</strong>l sujeto.<br />
Para las élites civiles todo este escenario es sacha religiosidad. Culto apócrifo y montuno.<br />
Muchos sacerdotes <strong>de</strong> los siglos XVII y XVIII que entraban al Chaco, reeditaban el sacrificio <strong>de</strong>l ermitaño, <strong>de</strong> los<br />
ascetas renunciantes al mundo y a la vida <strong>de</strong> sociedad para lograr la iluminación y la liberación <strong>de</strong> los ciegos. Ello pudo causar una<br />
profunda impresión en los clanes. Por lo general los misioneros no tocaban a sus mujeres. El sacrificio empezaba a ser objeto cultural.<br />
660 Boletín Oficial n° 12.126, 14/11/1934.<br />
661 "Decreto <strong>de</strong>l Presi<strong>de</strong>n-te <strong>de</strong> la Nación". Boletín Oficial n° 6.426 <strong>de</strong>l 18/6/1915.<br />
662 "Decreto <strong>de</strong>l Presi<strong>de</strong>n-te <strong>de</strong> la Nación". Boletín Oficial n° 8.911 <strong>de</strong>l 28/11/1923.<br />
663 "Decreto <strong>de</strong>l Presi<strong>de</strong>n-te <strong>de</strong> la Nación". 17/2/1938. Madueño, op. cit, 257-258.<br />
664 José Luis Torres: La Década Infame. Buenos Aires, Editorial Freeland, 1973.<br />
665 Christoper Dawson: Religión y Cultura. Buenos Aires, Editorial Sudamericana, 1953, 108.<br />
666 Í<strong>de</strong>m, 109.<br />
667 Í<strong>de</strong>m, 114.